Jimi na Kensei (NL)

Volumen 7

Capitulo 2: El Reino De Los Fuertes

Parte 1: El Vencedor

Y así comenzó nuestro viaje. Por lo general, uno pensaría que en este punto habría algún material de aventura emocionante y al borde de su asiento, como ser atacado por bandidos o atravesar un territorio peligroso. Sin embargo, quiero que lo piense más detenidamente por un momento. Estamos en una caravana que consta de hileras de grandes carruajes y carros tirados por caballos. Además, la caravana está protegida por soldados totalmente armados y acorazados. Ninguna banda de bandidos podría esperar derrotar eso.

También está el hecho de que el tamaño de los vagones limita el tipo de carreteras que podemos tomar, por lo que la caravana se adhiere a carreteras seguras y relativamente planas, incluso si eso significa que tenemos un viaje un poco más largo. Finalmente, estamos comenzando nuestro viaje en el Reino de Arcana. Dado el tamaño y el poder de ese país, sus vecinos hacen todo lo posible para asegurarse de que la caravana no tenga problemas.

Dicho de otra manera, eso significa que no hay mucho para entretener a Lady Douve, y solo hubo un incidente notable en el camino que fue de algún interés para ella.

“Es un placer conocerte. Soy Magyan Tahlan”. “¡Whooo!”

No podemos simplemente pasar por los países a lo largo del camino y dejar un aviso brusco de nuestro paso. El Reino de Arcana ha establecido relaciones diplomáticas con los países vecinos, por lo que tenemos que detenernos para presentar nuestros respetos a los diversos miembros de la realeza y poderosos nobles en el camino. No tengo que hacer mucho en ese sentido, pero el propio Tahlan causa un gran revuelo en un baile celebrado en nuestro honor.

“A-Ah, príncipe Tahlan, ¿de dónde eres?” “Un reino llamado Magyan, al sur de aquí”.

“¡Mi! ¡Un reino del sur! ¡Eso suena tan encantador!”

Tahlan es un caballero tan perfecto que ni siquiera otros hombres pueden criticarlo. Es bien educado, fuerte, valiente, elegante, inteligente, educado y respetuoso con las mujeres. Además de todas esas virtudes internas, también es guapo, alto y de miembros largos. Su tono de piel es un poco diferente en comparación con la persona típica de estas partes y sus rasgos son un poco diferentes, pero eso solo agrega un toque exótico y lo hace parecer mucho más como un príncipe extranjero.

Por supuesto, Saiga y yo también somos extranjeros aquí, pero nadie se molesta en hablar con nosotros o encuentra algo particularmente extraño en nuestra extranjería.

“Por favor venga a visitarnos. El Reino de Magyan es mi amada patria”. “E-Entonces quizás pueda acompañarte…”

“Me temo que no puedo satisfacer tu pedido, ya que mi prometida se enojaría mucho conmigo si eso sucediera… Por favor, perdóname por negarme”.

“¡Oh no…!”

Por supuesto, todo el mundo sabe que un noble del Reino de Arcana se va a casar con un príncipe extranjero. A pesar de eso, la visión real de Tahlan hace que estas nobles mujeres olviden el hecho de que está comprometido. Tampoco son solo las mujeres jóvenes. Incluso las mujeres mayores que parecen tener hijos mayores se desmayan y lloran cuando escuchan de Tahlan que está comprometido para casarse.

“…Maldita sea.”

Las mujeres están reunidas alrededor de Tahlan y todas están llorando. Saiga deja escapar un suspiro de admiración, pero no cree que haya nada extraño en la vista. Después de todo, incluso los hombres como nosotros miramos a Tahlan y pensamos en él como el epítome de un hombre, el tipo de hombre que sabemos que siempre atraerá a las mujeres hacia él. Quiero decir, es por eso que un cierto número de mis estudiantes decidió servir a sus órdenes, incluso si eso significaba trabajar como guardaespaldas de Lady Douve.

“Hehehe…”

Y, por supuesto, Lady Douve, la vencedora, no pudo evitar sonreír ante la vista. Ella se está regocijando mucho en el hecho de que es capaz de mirar con desprecio a las mujeres que lloran, a salvo y seguro en los brazos de Tahlan. No hay palabras floridas para describir la estación actual de Lady Douve. Ella es simplemente una de las ganadoras de la vida.

“¡Hrrrrrmph! ¡¿Qué tiene esa mujer que yo no tenga, príncipe Tahlan?!”

Incluso hay personas que olvidan que Lady Douve es hija de la Casa Sepaeda y, como consecuencia, expresan sus quejas en voz alta. No hay ninguna razón para que Lady Douve responda; todo lo que tiene que hacer es recibir en silencio el amor que Tahlan dirige en su camino y los que la rodean terminan autodestruyéndose. Maldita sea, eso es impresionante. Supongo que eso es lo que realmente significa ser un ganador.

“A-Ahm… Príncipe Tahlan, ¿qué te atrae tanto de Lady Douve? Es ella… Bueno, ¿sabe algún secreto escandaloso sobre ti…?”

“Sí, el secreto escandaloso es que estoy enamorado de ella”.

Tahlan es un hombre de hombres, logrando una respuesta discreta incluso en respuesta a comentarios extremadamente sarcásticos. El solo hecho de que responda con una sonrisa hace temblar a las mujeres que lo rodean.

“E-Entonces, ¿qué pasa con esa mujer que te atrae hacia ella?”

“En respuesta a preguntas como esa, me gusta responder ‘todo sobre ella’. Pero, por desgracia, eso a menudo la enfurece y me reprende que no me estoy esforzando lo suficiente. No es una mujer particularmente indulgente cuando la molesto, pero ese es solo uno de sus encantos”.

Sonríe feliz y explica suavemente sus razones. Está claro para todos los que escuchan que no solo está hablando espontáneamente, sino que está describiendo lo que siente sinceramente en su corazón.

“Si debo nombrar algo en particular, es que ella me entiende”.

Todas las mujeres que lo rodean parecen estar mareadas. Están delirantemente felices por el hecho de haber conocido al hombre de sus sueños, al mismo tiempo que se desesperan porque ya le ha prometido la mano a otro. Teniendo en cuenta que un hombre como este está realmente enamorado de ella, no puedo evitar creer que Lady Douve ocupa el centro absoluto del universo, con todo lo demás simplemente girando a su alrededor.

“A este paso, alguien podría intentar asesinar a Douve…”

Happine, una de las pocas mujeres aquí que no se desmaya por Tahlan, hace una predicción mientras observa a las mujeres alrededor de Tahlan. Es una observación seca, y definitivamente no es algo que nazca de una preocupación por Lady Douve.

“Ella es increíble… no sería capaz de soportar eso…”

Mientras tanto, Zuger se acobarda ante las miradas llenas de odio y envidia que las mujeres dirigen hacia Lady Douve, a pesar de que ella misma no es la receptora. Me recuerda las miradas envidiosas que Chette dirigió hacia mí. Recuerdo estar realmente asustado en ese momento, pero eso fue solo por una mujer. Lady Douve está siendo fulminada por al menos una docena de mujeres. ¿Cómo es capaz de soportar todo eso?

“Solo para advertirles, esto empeorará cuanto más nos acerquemos a mi tierra natal. Bien podría terminar como un baño de sangre literal”.

Sunae, como Lady Douve, mira con orgullo a la multitud de mujeres que rodean a su hermano. Si bien está claramente complacida con lo popular que es su hermano, el resto de nosotros no podemos evitar experimentar un escalofrío de pavor ante su observación.

De todos modos, como se señaló, Tahlan y Lady Douve causaron revuelo en todos los lugares en los que nos detuvimos en el camino. Es comprensible, por supuesto. La gente escucha los rumores de que un apuesto príncipe extranjero se va a casar con una noble y, movidos por la curiosidad, vienen a verlo.

Luego se encuentran cara a cara con la realidad que es Magyan Tahlan. Solo verlo causa un gran revuelo. A nadie parecía importarle un ápice el compromiso de Sunae y Saiga. No es que a Saiga y Sunae les falte de alguna manera; Tahlan es así de extraordinario.

Muy pronto, dejamos las áreas que tienen alguna interacción con el Reino de Arcana y nos estamos acercando a las áreas que tienen relaciones con el Reino de Magyan. Después de varios meses de viaje en carruaje, los paisajes urbanos y el clima han cambiado notablemente y estamos empezando a ver gente vestida como Sunae y Tahlan.

Habiendo pasado por muchos países, finalmente estamos en un país que comparte una frontera con el Reino Magyan y donde los lugareños conocen a Tahlan personalmente.

“Ah… El Reino de Donzila. Nuestra patria está cerca”. “Sí. Encantado de estar aquí de nuevo, hermano”.

El príncipe de la vecina Magyan ahora ha regresado a esta región, llevando consigo una gran cantidad de tesoros. Como Tahlan pasa por Donzila, el rey envía un mensajero pidiendo al príncipe de Magyan que lo visite. Como no tenemos ninguna razón viable para rechazar esa solicitud, ahora nos dirigimos a la capital de Donzilan.

Solo el rumor de que Tahlan está en algún lugar de la fila de carruajes que se dirigen a la capital reúne a una multitud que recuerda un desfile de la victoria. Que sea tan malo en un país vecino significa que ni siquiera quiero imaginar lo popular que es Tahlan en Magyan.

“Vaya, escucha esos vítores… Y casi todos provienen de mujeres. Es como si fuera una estrella del pop o algo así”, dice Saiga, completamente desconcertado.

Más bien, Saiga simplemente se siente abrumada por la pura intensidad de las miradas dirigidas de esta manera. Casi todos los actores principales se encuentran actualmente en el carruaje más grande, y muchos del grupo se sienten intimidados por la pura intensidad de la recepción. Definitivamente, Zuger está temblando de miedo. Bueno, sí, esto probablemente sea particularmente difícil de soportar para ella.

“Hehehe… Sansui, todos estos vítores están llamando a Tahlan, ¿no?” “Sí. Todas las voces están llenas de admiración por el príncipe Tahlan”. “Ya veo… Así que puedo tener un hombre tan increíble para mí solo…”

Lo único que siente Lady Douve en este momento es una sensación de superioridad hacia las mujeres que la rodean. Realmente debe tener nervios de acero. Quizás necesites ser así de implacable cuando te cases con un miembro de la realeza.

“Hehehe, no importa cuánto grite la gente común, este hombre es mío…”

En este punto solo puedo admirar su personalidad. Ella es prácticamente el epítome de una mujer noble altiva.

“Um, hermano… ¿Estás seguro de que ella es la correcta?”

“Por supuesto. Me gusta que ella sea así. Además, cuando estoy en el Reino de Arcana, la gente me veía con envidia como el extranjero que había sido recibido en la Casa Sepaeda. Nunca lo dije en voz alta, pero sentí una presumida satisfacción por eso. Significa que somos pájaros del mismo plumaje”. Tahlan no da señales de estar decepcionado por el comportamiento de Lady Douve mientras tranquiliza a su hermana menor.

“Sansui, te ves un poco pálido. ¿Sentiste algo?” “Bueno…”

Una aguda observación de una alegre Lady Douve. Sí, me siento fatal ahora mismo. Siento una agresiva hostilidad desde el palacio al que nos acercamos. El despecho de una mujer despreciada, tal vez.

“Hay un aura de corazones rotos proveniente del palacio real de Donzila… Creo que hay bastantes mujeres allí que se han deprimido al enterarse del compromiso de Tahlan…”

Lady Douve está complacida con ese informe, tal como temía, aunque también se dio cuenta de la magnitud del odio absoluto dirigido hacia ella, que con mucho tacto no mencioné en voz alta.

“Había muchas princesas en los reinos vecinos que tenían sus ojos puestos en mi hermano. Por supuesto, algunas de ellas solo estaban jugando y no estaban seriamente enamoradas de él… Pero algunas de las princesas de Donzila estaban sinceramente enamoradas de mi hermano”.

“El destino tenía otras ideas. Eso es todo al respecto. Además, incluso en este país, aquellos sin la presencia real no pueden casarse con miembros de la familia real. De cualquier manera, es un amor que estaba destinado a no ser correspondido. Así como fui bendecido por el destino, estoy seguro de que ellos, a su vez, conocerán a sus verdaderos amores”, dice Tahlan con una aceptación de su propio destino, una sensación palpable de que simplemente no hay nada que él pudiera haber hecho. El hecho de que sea capaz de rechazar adecuadamente a las mujeres que se le acercan con tanta calma es otra razón por la que es un modelo de caballero.

El Reino de Donzila es un país que es como un cruce entre la India y el Medio Oriente, y el palacio está construido con el mismo estilo. Por supuesto, ni Saiga ni yo sabemos mucho sobre la India o el Medio Oriente, y en mi caso, lo que recuerdo es realmente vago, solo en un rincón de mi mente.

Después de todo, es un conocimiento que poseía hace quinientos años, por lo que los detalles se han desvanecido hace mucho tiempo. Es solo una vaga sensación de que así eran esos lugares. Incluso si recordara esas cosas claramente, ya que en realidad no tienen nada que ver con el Real Reino de Donzila, no tendrían ningún significado.

Dado que es mi primera vez en este país, es mejor que no pretenda que sé algo sobre países similares y actúo como el patán boquiabierto que soy en realidad.

“Gracias por pasar por nuestro reino, príncipe Tahlan”.

“Ofrezco mi agradecimiento por permitirnos pasar por tu reino, oh gran rey de Donzila”.

“No seas tan formal. Nuestros dos reinos han estado cerca durante mucho tiempo, y usted mismo lo visitaba con frecuencia cuando era niño. Nuestra amistad no ha cambiado en todos esos años”.

El palacio real de Donzilan, quizás diseñado teniendo en cuenta la Invocación Espiritual, es extremadamente grande con techos realmente altos. Al mismo tiempo, es solo un edificio de un piso, por lo que, si bien es elaborado, una parte de mí no puede evitar sentir que también es un poco simple en su construcción. El trono no es una silla, sino más bien un conjunto de cojines dispuestos sobre un estrado construido con gruesos tablones.

El rey está sentado con las piernas cruzadas sobre la pila de cojines. Es un poco corpulento debido a su edad, pero tiene un cuerpo bien musculoso debajo de esas capas de grasa. Aunque obviamente ha pasado su mejor momento, probablemente todavía sea lo suficientemente fuerte como para derrotar fácilmente a alguien como Sunae.

“Y a la delegación del reino lejano llamada Arcana, bienvenida. Nuestro reino no es tan salvaje como para olvidar nuestros modales cuando nos enfrentamos a personas de un país del que nunca hemos oído hablar”.

“Le agradezco sus amables palabras, Su Majestad. Cuando regresemos a nuestra patria, hablaremos de su hospitalidad y generosidad”.

Como representante de la delegación, Su Paternidad es quien presenta sus respetos al rey, y el rey de Donzila parece complacido con el guerrero mayor. Puede que su paternidad no sea el más fuerte, pero es un soldado que ha visto su parte de batallas. Parece que el rey lo ha percibido fácilmente por la forma en que se comporta. Los hombres fuertes tratan a otros hombres fuertes con respeto; ese parece ser el entendimiento común en esta región.

En cuanto a mí y Saiga, nadie realmente nos está prestando mucha atención. Supongo que eso es inevitable, ya que ninguno de los dos parece tan fuerte.

“Ahora, príncipe Tahlan, ¿son ciertos los rumores de que te vas a casar con una mujer noble de una tierra extranjera y que vas a regresar a tu tierra natal para presentar tus respetos?”

“Si su Majestad. Me prometieron casarme con esta hermosa rosa, la honorable Lady Douve Sepaeda. Dejé a un lado mi vergüenza y regresé para poder tener permiso para casarme con ella”.

“Ya veo… Entonces, una vez que se apruebe su matrimonio, ¿volverá a sus deberes como príncipe en su tierra natal?”

“No, Su Majestad. Si se me permite, tengo la intención de vivir mis días en el Reino de Arcana”.

El rey de Donzila parece extremadamente preocupado por esta revelación. No se nota en su expresión, pero tiene problemas para encontrar las palabras para continuar.

Puedo escuchar el sonido de mujeres sollozando desde varias habitaciones del palacio. Tampoco es algo que esté escuchando con mis sentidos como Inmortal; el llanto es lo suficientemente fuerte como para que lo escuche incluso un mortal. Lady Douve está haciendo todo lo posible por contener la risa, incluso si no es capaz de ocultar su presunción. Dudo que haga algo sin tacto, pero su sonrisa tiene un regocijo malicioso detrás.

El mundo es realmente un lugar extraño. Quiero decir, el hecho de que haya un hombre al que le guste esto en una mujer es extraño, pero lo que es aún más extraño es que el hombre en cuestión es tan perfecto como un hombre tiene derecho a ser.

“Ya veo. Una lástima, echaremos de menos tu presencia”.

“Sí, por eso tengo la intención de hacer lo correcto por mis padres mientras estoy aquí. Después de todo, mi padre me ha permitido hacer lo que quisiera. Quiero asegurarme de que todo esté arreglado entre nosotros antes de que me vaya de nuevo…”

Aunque Tahlan es consciente de los sollozos, a diferencia de, digamos, un protagonista particularmente inconsciente que podría no serlo, ignora los sollozos para impulsar la conversación. Realmente no hay nada que pueda decir sobre la situación que no le cause más dolores de cabeza, y sería una falta de respeto preocuparse por las mujeres que ni siquiera están en la habitación mientras él habla con el rey.

“Sí… Entonces, aunque es una pena, te sugiero que te apresures a regresar a tu tierra natal”.

“¿Hay algo en marcha en mi tierra natal?”

“Esto es simplemente un rumor y no una noticia oficial… pero se dice que el rey de Magyan se ha enfermado y está confinado en su cama”.

“¡¿Verdaderamente?!”

“Incluso el hombre más fuerte no puede vencer la edad o la enfermedad. Deberías tomarte el día para descansar aquí, pero te insto a que regreses a casa lo antes posible”.

Estoy seguro de que esta noticia es cierta. Dado que no es un Inmortal, el rey ciertamente es vulnerable a las enfermedades. Si lo ha estado sufriendo por un tiempo, debe ser una enfermedad grave. Afortunadamente, tenemos Melocotones Enrollados y Ginseng Divino como parte de la dote. Comerlos puede curar la mayoría de las enfermedades. Quiero decir, prefiero no recomendar una fruta que pueda matar a la gente si se consume en exceso, así que prefiero mantenerla como último recurso, pero aun así, es bueno tener la opción.

“Padre está enfermo…” “Todavía parecía tan joven…”

“A la enfermedad no le importa la edad. Hay poco que hacer al respecto”.

Pasaremos la noche en una habitación de invitados en el palacio real de Donzilan. Sunae y Tahlan están ocupados preocupados después de escuchar los rumores de que su padre está enfermo. Dependiendo de qué tan grave sea la enfermedad, podría muy bien significar que se está muriendo, así que entiendo por qué están tan preocupados.

“Tahlan, ¿Sansui o yo deberíamos apurarnos y llevarle un enrollado de melocotón?”

“Hermano, incluso si mi padre está enfermo, no aceptaría algo que le ofreció un completo extraño”, responde Tahlan, respondiendo de buena fe a la pregunta de Saiga.

Pensando en ello de manera racional, no hay forma de que alguien se comiera una fruta que se proclama como una panacea si se la ofrece un hombre que acaba de aparecer de repente ante ellos. Podría ser diferente si fuera alguien que no pudiera ver a un médico, pero no hay forma de que el rey lo acepte.

“Entonces tal vez solo Sunae o Tahlan podrían regresar primero…”

“Eso tiene sus propios problemas. Como saben, regresamos a nuestra patria con un gran séquito a cuestas. Dudo que Magyan deje entrar a la delegación sin que Sunae y yo estemos presentes. Además, sin importar si soy Sunae o yo, si un miembro de la realeza que había dejado el reino regresara repentinamente al palacio, esto generará preguntas entre la gente”.

Si fuera posible, a Tahlan no le gustaría nada más que salir ahora. Sin embargo, sea lo que sea que esté sintiendo, ha rechazado esa opción después de un análisis cuidadoso de la situación. Sunae respalda sin decir palabra el juicio de su hermano. Por el momento, es solo un rumor que han escuchado de un rey vecino. No pueden permitirse el lujo de lanzar su propio reino al caos basándose en meros chismes.

“Puede sonar cruel, pero si Sunae o yo nos movemos imprudentemente, causaremos confusión en el reino. Si eso sucede, muchas personas morirán. Tanto Sunae como yo nos preocupamos profundamente por nuestro padre. Dicho esto, si nuestra presencia causa malestar, muchos hombres y mujeres resultarán heridos o muertos. Debido a que todavía estamos fuera de nuestra patria, no podemos permitirnos hacer nada que cause más malestar”.

“Así es, hijo de Batterabbe. En primer lugar, esto sigue siendo solo un rumor. Por supuesto, si se tratara de una invasión pendiente, sería una emergencia, pero sería peligroso agitar un país simplemente porque un solo hombre, incluso uno tan poderoso como el rey, está enfermo”.

Su paternidad es tan implacablemente pragmático como de costumbre. Aun así, Tahlan asiente en silencio de acuerdo con su declaración. Las palabras de su padre son despiadadas, pero también transmiten la verdad. No hay garantía de que la información sea precisa, e incluso si los rumores son ciertos, no es razón suficiente para tomar medidas drásticas.

“Incluso si mi padre falleciera porque no nos mudamos ahora, no sería culpa tuya. Si hay algo al que echar la culpa, es al hecho de que la medicina de nuestra patria no está a la altura”.

Si bien es fácil para nosotros olvidar, las artes místicas utilizadas para la magia curativa son un arte raro con un pequeño número de practicantes. La razón por la que el arte es tan común en el Reino de Arcana es porque tienen una línea de sangre que puede producir místicos en la Casa Caputo. Por eso, el Reino de Arcana tiene uno de los más altos estándares de atención médica en este mundo.

Es cierto que los Melocotones Enrollados y el Ginseng Divino de mí maestro hacen que sea fácil dar por sentado el misticismo, pero el Reino de Arcana todavía está muy por delante de sus pares en lo que respecta a la atención médica.

“Además… ¿no son venenosos los Melocotones Enrollados y el Ginseng Divino cuando se consumen en exceso? Eckesachs, me gustaría saber más sobre ese punto. Incluso si nuestro padre está enfermo, ¿sabes cuál deberíamos darle?”

“Depende del tipo de enfermedad, pero la forma más fácil es darle esas cosas en pequeñas dosis. Si corta el melocotón en espiral en pedazos y le da uno a la vez, es fácil tomar medidas adicionales independientemente de si su condición mejora o empeora. Si empeora al consumir el Melocotón Enrollado, entonces puedes darle pequeñas dosis del Ginseng Divino. Eso resolvería ese problema”.

Suena a propuesta de un aficionado, pero es del todo comprensible, dado que somos, en efecto, aficionados en su uso. Pensando en ello, probablemente debería haberle preguntado a mi maestro sobre la forma correcta de administrar estas cosas.

“Mm.”

En medio de nuestra discusión, siento que las auras se acumulan fuera de la habitación. Siento un tono intenso de agresión, auras de gente dispuesta a matar. Sin embargo, por otro lado, no parecía que estuvieran aquí para irrumpir y comenzar una pelea.

“Perdónanos”.

Después de un golpe, una mujer con varias otras mujeres en su séquito entra en la habitación. No hace falta decir que tiene el mismo tono de piel que Sunae y Tahlan, y es hermosa, pero extremadamente bien tonificada. Ella y las mujeres que la acompañan tienen la Presencia Real. No hay duda de que ella es una princesa de este reino y sus compañeras son sus seguidores más cercanos.

“Ha pasado mucho tiempo, príncipe Tahlan”.

“Ahh, Princesa Gayaou. De hecho, ha pasado mucho tiempo”.

Como era de esperar, parece que ella y Tahlan se conocen, a juzgar por la forma en que Tahlan la saluda. Somos invitados en este castillo, así que, por supuesto, seremos respetuosos con nuestros anfitriones.

“Tahlan, podrías presentarme a esta hermosa y poderosa mujer”, interviene Su Paternidad, eligiendo cuidadosamente su cumplido. En esta región, la fuerza también es una virtud para las mujeres. Si la describiera como linda o alguna otra palabra que connota debilidad, sin duda la ofendería.

“Si padre. Esta es Donzila Gayaou, una princesa de este reino. Princesa Gayaou, este es el hombre que se convertirá en mi suegro”.

La mujer, a su vez, le da a Su Paternidad una mirada evaluadora. Si bien ha disminuido un poco con la edad, todavía es fácil ver, incluso a través de su atuendo, que es un hombre que se entrenó mucho en su tiempo.

“Un placer conocerte, noble caballero de una tierra lejana. Sin duda, su largo viaje fue agotador. Por favor, tómate un tiempo para descansar aquí en Donzila”.

“Me honras. Desafortunadamente, me estoy volviendo demasiado viejo para un viaje de esta longitud”, dice su padre con modestia, pero no es del todo para mostrar. Estoy seguro de que está cansado por el largo viaje. “Miro con cariño hacia atrás en mis días en el campo de batalla. Me temo que llega el momento para todos nosotros, y ahora me veo reducido a viajar con largos descansos entre el viaje de cada día”.

“Oh, cómo bromeas. Puedo ver que todavía eres lo suficientemente ágil como para blandir una espada”.

Parece que esta mujer, Gayaou, respeta a Su Paternidad lo suficiente como para intercambiar bromas con él. En agudo contraste, claramente ve a Lady Douve con abierta hostilidad.

“Tahlan, ¿te importaría presentarme a la mujer que será tu esposa?”

Sus palabras son sorprendentemente agresivas. Esencialmente, ella está haciendo el “¡Huh! ¡¿Eres la prometida de Tahlan?! Lo siento, no me di cuenta de su “rutina”. Siento un dolor sordo en la boca del estómago cuando comienza el combate verbal.

“Vaya, vaya, Tahlan… No te vas a casar con mi padre, así que deberías haberme presentado primero”.

Lady Douve está dando tan bien como recibe. El trasfondo claro de su declaración es: “Mira, me voy a casar con Tahlan. ¿No tienes envidia?” Gayaou, por supuesto, puede leer entre líneas y frunce el ceño. No podemos evitar tensar nuestras expresiones también. Quiero decir, Zuger está al borde de las lágrimas.

“Disculpas, Douve. No es que te esté dando por sentado”.

Mientras Tahlan está atrapado entre Lady Douve y Gayaou, todavía mantiene la calma. Su completa indiferencia lo hace parecer casi un santo.

“Princesa Gayaou, esta es Lady Douve Sepaeda, mi alma gemela”. “Es un placer conocerla, princesa Gayaou”.

Las chispas vuelan mientras intercambian golpes verbales. De repente, la habitación se siente como un campo de batalla y todos podemos sentir la tensión en el aire.

“Dime, Tahlan, ¿puedes contarme tu relación con Su Alteza?”

“Ah, ¿estás preguntando si alguna vez tuvimos una relación cercana?” “Para nada. Solo quiero aprender más sobre tu pasado”.

Lady Douve está insinuando que la otra mujer ni siquiera se compara con ella, y Gayaou no puede ocultar su irritación por el comentario de Lady Douve.

“Donzila y Magyan tienen una relación de larga data. Así que a menudo visitábamos los reinos de los demás como miembros de varias misiones diplomáticas”.

“Ah, ya veo. Realmente nunca pensé en eso cuando estábamos en Arcana, pero supongo que hubo un momento en el que tenías que cumplir con tus deberes como príncipe, ¿mm?”

Es una postura extremadamente agresiva para que la adopte Lady Douve. Básicamente está diciendo: “Oh, ¿entonces no tenías una relación personal, solo hablabas en fiestas?”

“¡Tahlan! ¿Puedo pedirte prestado por un minuto? ¡Me gustaría hablar contigo a solas!”

Es en este punto que la Princesa Gayaou da un agresivo paso verbal hacia adelante. Bueno, más que agresivo; está al borde de lo peligroso. Su tono de voz áspero y la reacción de sus damas de honor sugieren que está muy cerca de perder la compostura.

“Una solicitud complicada. Por favor, ¿puedo tener un momento? “Yo…”

Ella ha acortado la distancia con Tahlan y le está causando cierta angustia. Es bastante imprudente de su parte, pero parece que no tiene intención de retirarse.

“Si no quieres estar a solas conmigo, puedes traer a tu hermana también. Es importante, así que por favor”.

Tahlan vacila y mira a Lady Douve.

“Vaya, vaya, Tahlan, ¿podría ser que tengas miedo de mi reacción?” Dice Lady Douve, sonriendo maliciosamente. “Está bien, Tahlan. Lleva contigo a la señorita Sunae y charla contigo. No me molesta en absoluto”.

Su expresión muestra que su victoria final ni siquiera está en duda.

“Me temo que no puedo ir con usted, alteza. Me está poniendo a prueba”, responde Tahlan, rechazando de plano la invitación de Gayaou. “Si tuviera que acompañarlo, sin duda ella me molestará con ese hecho en el futuro. Incluso dentro de diez años, ella señalará que fui a hablar en privado con otra mujer cuando fuimos a informar sobre nuestro matrimonio a mi familia. Me gustaría evitar eso a toda costa. Eres bienvenido a burlarte de mí como un hombre débil”.

De esta manera discreta, Tahlan le está transmitiendo a la princesa Gayaou que tiene la intención de estar constantemente al lado de Lady Douve a partir de ahora.

“Como el que se casa con un miembro de su familia, no puedo comportarme como un príncipe con ella”.

Afirma claramente que ya no es un príncipe de Magyan, sino simplemente el yerno de la casa noble de una tierra lejana. Es una muestra de resignación impresionantemente varonil.

“Entonces te lo diré aquí. De cualquier manera, no puedes quedarte sin participar”.

Me pregunto qué hará ahora. ¿Dirigirá su envidia y odio a Lady Douve por asegurar al hombre perfecto, como las mujeres nobles con las que nos encontramos en el camino hacia aquí? ¿Se desesperará por el hecho de que un hombre del que había estado enamorada durante mucho tiempo haya quedado atrapado en la red de una tentadora malvada? Eso es lo que estaba pensando, pero parece que no es eso lo que tiene en mente en este momento.

“Estoy seguro de que incluso la gente del lejano Reino de Arcana saben que la realeza sin la Presencia Real no tiene derecho al trono en los países de esta región, ¿no?”

“Sí, he escuchado eso de los hermanos”, responde Su Paternidad como nuestro representante. Es cierto que todos los presentes ya lo saben.

“Como tiene la Presencia de la Sombra, el Príncipe Tahlan, a pesar de ser el hijo mayor del rey actual, no tiene derecho al trono”.

Sí, solo está confirmando lo que sabemos. ¿Por qué se molesta en repasar todo esto de nuevo?

“Como personas que juran lealtad a un rey que no tiene la Presencia Real, ¿Qué piensan de esta práctica?”

Su paternidad no puede evitar alzar las cejas. Ha leído el contexto que acecha debajo de su declaración y se sorprende al darse cuenta. Por supuesto, incluso Saiga entendería lo que se pregunta en este momento. Ella está hablando de cambiar las tradiciones de la realeza en esta región.

“Mm… todavía tengo que conocer al rey de Magyan, así que no puedo hablar directamente sobre su reino, pero tú reino tiene la misma costumbre y parece ser extremadamente próspero. Si Magyan se parece en algo a este reino, no veo ningún problema con la práctica”.

Impresionantemente, Su Paternidad responde con una declaración que es difícil de discutir para Gayaou. Después de todo, él esencialmente está diciendo “Tienes un lindo reino, y estoy seguro de que Magyan, que tiene el mismo sistema de gobierno, también es un buen lugar”. Gayaou estaría rechazando el gobierno de su propio reino si ella cuestionara su declaración.

Por supuesto, la Princesa Gayaou no es de las que se echan atrás con una sola respuesta. Aunque respeta la observación de su padre, vuelve a la ofensiva.

“La razón por la que nuestro país prospera se debe a la sabiduría de mi padre. Me honra con su observación. Sin embargo… no todos los que tienen la Presencia Real están preparados para gobernar”.

Esto es algo que es difícil de discutir. No es que el poder innato con el que uno nace tenga alguna influencia en la personalidad de uno. Casi la única excepción, la que confirma la regla, es Ran, cuya agresión proviene de haber nacido con una inmensa cantidad de sangre contaminada. Ninguno de nosotros puede decir con certeza que un individuo poderoso con la Presencia Real necesariamente tenga el temperamento para ser rey.

“Lo contrario también es cierto, ¿no? ¿No hay reyes como Su Majestad el Rey de Arcana que gobierna bien a pesar de no tener la Presencia Real?” Gayaou responde, aplicando la misma lógica a Su Paternidad.

No sería bueno que Su Paternidad dijera que el rey de Arcana es un mal rey porque no tiene la Presencia Real. Toda esta conversación se siente como si estuviéramos pisando un terreno peligroso. ¿Cómo responderá Su Paternidad?

“Padre, por favor, esto es suficiente”, dice Tahlan, cortando a su paternidad con una clara expresión de disgusto. “Su Alteza, ¿por qué le hace esas preguntas al noble caballero de una tierra lejana? ¿Cuándo te convertiste en uno para probar a otro con lengua plateada?”

Su enfado es perfectamente comprensible. Es más que de mala educación hacer preguntas tan peligrosas a alguien a quien has invitado como invitado. Dado que los invitados no pueden simplemente huir de la princesa, arrinconarlos con tales preguntas es deshonroso.

“Es cierto… Entonces déjame ser franco. Creo que Tahlan debería ser el próximo rey de Magyan”.

Como se esperaba. Es la única conclusión que podría haber sacado basándome en la conversación hasta este momento. Tahlan nunca ha tenido ningún derecho al trono debido a las prácticas de sucesión de Magyan, pero parece que tiene una objeción a la práctica en sí.

“¡S-Su Alteza! Esto está interfiriendo en nuestros asuntos internos… ¡Una propuesta que equivale a una invasión! ¡Por favor, retire su declaración!” Sunae interviene apresuradamente. Es cierto que quejarse de cómo otro país elige a su rey y decirles que lo cambien equivale a una invasión.

“Princesa Sunae… ¿Entonces crees que Tahlan no es apto para el trono?”

“Por supuesto que sí”, responde Sunae con seriedad, incluso cuando entiende que su declaración puede ser tomada como un insulto al honor de Tahlan. “Mi hermano no es digno del trono”.

“¡Tú, que compartes madre con Tahlan, dirías tal cosa!”

Hay varias capas en la ira de la princesa Gayaou. Primero, hace la pregunta porque esperaba un acuerdo. Es comprensible que esté molesta al escuchar una respuesta que no quería. En segundo lugar, también está enojada por el hecho de que el hombre al que ama, Tahlan, sea descartado como indigno del trono.

No, no es solo ella. Varios de sus criados también están enfurecidos.

“Hay algunas cosas que solo los hermanos que comparten la misma madre pueden decir. No es apropiado que te enojes simplemente porque no estoy de acuerdo contigo. Sabes muy bien que es un asunto serio que dos que tienen la Presencia Real muestren sus colmillos uno contra el otro”, dice Tahlan con calma, incluso frente a la rabia que late a fuego lento en las mujeres que lo rodean.

Realmente tiene un aire digno. Irónicamente, es ese mismo comportamiento, la presencia de ánimo lo que le facilita rechazar su propio reclamo al trono, lo que lo hace parecer digno del trono.

Al ver cómo actúa, las mujeres reprimen su ira, incluso cuando su comportamiento fortalece su convicción de que Sunae está equivocado.

“Príncipe Tahlan. Escuché que tu madre estaba profundamente entristecida porque naciste sin la Presencia Real. Y mientras la gente te veía crecer, muchas personas se identificaron con su tristeza. Eso es cierto no solo para el Reino de Magyan, sino también para los países circundantes”.

No pude evitar sentir lo mismo. Sin duda, si Tahlan tuviera la Presencia Real, habría sido un gran rey. Incluso mirando cómo está actuando ahora, no hay nada en él que me haga repensar ese punto de vista.

“Pero no tengo la Presencia Real. Ese debería ser el final”.

“Incluso si no puede obtener la Presencia Real, las leyes pueden cambiarse”.

“¿Deberíamos considerar esa visión oficial del Reino de Donzila?” “No, es la opinión de tu madre”.

Deja caer a una persona inesperada en la conversación. No, quizás la persona más natural que surja en esta conversación. También es la persona que realmente no quería que saliera en esta conversación.

“Tu madre desea hacerte rey. Simplemente estamos de acuerdo con ella”. “Así que mamá te propuso esto”.

“Ella no me ha incitado a nada. Es algo que he sentido durante mucho tiempo, y no soy solo yo. Hay muchas personas en los reinos vecinos que sienten lo mismo. Y, por supuesto, hay otros miembros de la familia real Magyan que están de acuerdo con tu madre”.

¿Qué tan sorprendido está Tahlan por esta revelación? Su expresión está congelada en estado de shock. Probablemente nunca hubiera imaginado que su propia madre intentaría torcer las leyes, haciendo causa común con las princesas de los reinos vecinos, todo para hacerlo rey.

“Esto es una locura. No importa cómo lo justifique, al final se reduce a múltiples reinos vecinos que intentan cambiar las leyes de sucesión de Magyan”.

“Simplemente somos partidarios de la idea. Si la gente de Magyan lo quiere, las leyes pueden cambiar”.

La triste ironía es que si Tahlan fuera un hombre que alguna vez mostraría sus verdaderos colores aquí por pura ambición, muy bien podrían desilusionarse de él y descartar el plan. Pero incluso aquí, Tahlan se aferra firmemente a lo que cree que es correcto.

“Incluso si me convirtiera en rey sin poder usar la Invocación espiritual, el resultado final será simplemente que un Invocador espiritual que no esté de acuerdo con mi coronación me matará. No importa cómo se modifiquen las leyes, al final, es la fuerza bruta la que puede mantener a raya a los disidentes”.

“¡En cuanto a la fuerza…!” Gayaou declara con confianza. “¡En cuanto a la fuerza, nos tienes! ¡Seremos tu fuerza!”

“Un hombre que depende de la fuerza de las princesas vecinas sólo provocaría risas burlonas”.

Tahlan se ve realmente desconsolado. Incluso si él es el epítome del príncipe ideal para estas mujeres, tiene su propia idea de lo que debería ser la realeza. El propio Tahlan es consciente de que está lejos de ese ideal.

“Si gobiernas bien y traes prosperidad a tu pueblo, la historia juzgará que tu decisión fue justificada. ¡No es necesario que escuches a los que no tienen imaginación para pensar más allá de las tradiciones!”

Ella todavía está tratando de persuadir a Tahlan. Incluso mientras lo hace, dirige su hostilidad hacia nosotros. No hace ningún esfuerzo por ocultar su enojo, incluso cuando se mantiene dentro de los límites del comportamiento adecuado.

“Gente de Arcana. Realmente estoy agradecido de que hayas traído tales tesoros para presentar tus respetos al Reino de Magyan. También apreciamos el hecho de que hayas traído al príncipe Tahlan a salvo a Magyan”.

Las mujeres detrás de Gayaou también han dirigido su hostilidad hacia nosotros. En marcado contraste con sus palabras, la actitud de Gayaou esencialmente nos dice que dejemos a Tahlan con ellos y nos vayamos.

“Pero si realmente deseas la felicidad del Príncipe Tahlan… entonces debes pensar detenidamente sobre lo que debes hacer”.

Esta es más o menos una declaración de guerra absoluta. No me sorprendería en absoluto que nos atacaran aquí y ahora.

“Hehehe…”

Incluso en estas circunstancias, Lady Douve se ríe para sí misma.

“Tahlan, realmente tienes amigos entretenidos. Después de todo, parecen pensar que es natural que se les den cosas de valor. Piensan más como usurpadores engreídos que como verdaderos miembros de la realeza”.

Felizmente arroja más leña al fuego. Lady Douve está lanzando toda su malicia reprimida hacia las mujeres enojadas. Solo verla atacar es estresante.

“Parece que te quieren tanto que no pueden soportar mirarte directamente. Eres un rompecorazones”, dice con arrogancia, sin siquiera molestarse en endulzar sus púas.

“¡Maldita seas!”

“¿Oh? ¿Me va a desahogar, alteza? Has estado hablando interminablemente sobre países y leyes, pero vas a dirigir tu enojo hacia mí, ¿quién no tiene nada que ver con ninguna de esas cosas?”

Lady Douve es alguien que puede llegar al meollo de cualquier asunto. Es cierto que, a pesar de todas las justificaciones que ofreció, al final lo que la princesa Gayaou realmente quiere es casarse con Tahlan. Todo lo demás es solo una excusa.

“Me dices que piense en la felicidad de Tahlan, pero no importa cómo lo pienses, está bastante claro qué es lo mejor para él, ¿no?” Lady Douve dice, cubriéndose contra Tahlan, sin dejar de mostrar su felicidad como mujer.

Por alguna razón, Tahlan reacciona a sus acciones con visible alivio. Realmente no entiendo lo que está pasando por su cabeza, pero parece que está aliviado de que Lady Douve esté actuando como una villana. No soy solo yo. La princesa Gayaou, sus criados, Sunae, incluso Saiga… todos lo miran en estado de shock.

“Douve…”

“Tsk, realmente eres… un rompecorazones”.

Parece que Tahlan está completamente bajo el dominio de Lady Douve y lo disfruta. Supongo que esto es algo que pasa entre adultos, algo que yo, un simple Inmortal, no puedo entender. Todo lo que sé es que Tahlan parece realmente feliz en este momento. Si uno realmente se preocupa por la felicidad de Tahlan, entonces está claro que debe permanecer al lado de Lady Douve. Lady Douve no ve la necesidad de decir nada más, dejando que sus reacciones cuenten toda la historia.

“Grr… ¡Ejem!”

Su padre se aclara la garganta para recordarle a la habitación que todavía está aquí, con una expresión de disgusto en su rostro. No puede ofrecer comentarios negativos sobre el matrimonio de Tahlan y Lady Douve, dado que está aquí para presentar sus respetos e informar sobre su compromiso. Entonces, en cambio, redirige su mirada dura hacia la princesa Gayaou.

“Parece que hay varios intereses en juego aquí. Permítame ofrecer un comentario”.

Mira a Gayaou con una expresión cercana al desprecio.

“Es completamente falto de dignidad o clase discutir abiertamente asuntos de sucesión con un príncipe que acaba de enterarse de que el rey actual no se encuentra bien. Quizás sea mejor que evite decir cualquier cosa que implique que está satisfecho con esa enfermedad”.

Él usa la razón para destrozar su pasión fuera de lugar. Es cierto que, hasta hace unos momentos, Tahlan luchaba por hacer frente a la noticia de la enfermedad de su padre. Sin duda le dolió oír hablar de sucesión en esas circunstancias.

“Mis disculpas.”

Lo máximo que la princesa Gayaou puede hacer es pronunciar esas palabras y retroceder. Habiéndose dado cuenta de su error, rápidamente abandona la habitación con sus criados a cuestas. No puedo decirlo en voz alta, pero básicamente está huyendo con el rabo entre las piernas.

“Realmente es un hombre que enloquece a las mujeres, ¿no?” Happine dice con asombro, lo que incitó a Zuger a asentir con la cabeza.

Un príncipe que puede hacer que una princesa extranjera se obsesione tanto con él es verdaderamente un hombre que puede volver loca incluso a la mujer más cuerda. También me queda claro que Tahlan no quiere ser ese hombre.

“Hermano… parece…” “Sí, lo sé.”

Llegamos en este viaje para Tahlan y Sunae para informar sobre su compromiso a sus padres. Sin duda, pensaron que causaría algún tipo de revuelo. Sin embargo, dudo que pensaran que terminaría siendo algo tan serio.

“¡Detendré a mamá… como su hijo y como príncipe…!”