Slayers (NL)

Volumen 9

Capítulo 2: La Sombra De Los Demonios Acecha En Bezerd…

Parte 3

Corriendo en la oscuridad del callejón a toda velocidad, Sherra y yo estábamos siendo perseguidas por los hombres de negro mientras nos lanzaban hechizos débiles. Mientras, nosotras los esquivábamos o nos escondíamos en alguna parte.

¡Entonces terminé mi hechizo!

-¡Fire Ball!

Lancé una bola de fuego hacia la visible luna en el espacio entre un tejado y otro.

Por supuesto no iba a golpear así a los hombres de negro. ¡Pero…!

-¡Break! – Chasqueé los dedos y en ese momento…

¡BUUUM!

¡La bola de fuego que había lanzado explotó en el cielo nocturno con un sonido ensordecedor!

-¡¿Quéee?!

-¡¿Qué ha sido eso?!

Se podían oír muchas voces sorprendidas por la luz y el sonido, viniendo de muchas de las casas.

“¡Toma ya! ¡Como yo quería! Teniendo varias cosas en cuenta, los hombres de negro deben actuar básicamente en secreto. Así que no debe sentarles muy bien ser observados. Si algunos habitantes salían, no tendrían otra opción que retirarse.”

Pero…

-¡Fire Ball!

“¡¿Qué…?!”

Antes de que mi mente pudiera entender lo que había pasado, salté hacia delante enseguida.

¡BUUM!

Una bocanada de aire caliente surgió y las paredes de las casas fueron iluminadas por rojas llamas. Uno de los hombres de negro había lanzado un Fire Ball súbitamente.

“Por supuesto no creo que tenga que explicar que pasaría si un Fire Ball fuese lanzado en un lugar así: Las llamas se esparcirían a las casas cercanas en un momento.”

-¡¿Pero es que estáis locos?! – grité a esos dos, que debían haber estado corriendo por los tejados mientras yo lo hacía en el callejón con Sherra. En realidad no esperaba una respuesta, pero…

-Nuestra salud mental está bien, gracias. Has sido tú quien ha incendiado la ciudad, Lina Inverse.

-¡¿Qué?! – grité sin darme cuenta.

“Ya veo. Planean vencerme y luego decir que fue Lina Inverse quién incendió la ciudad. ¡Pero no os vais a salir con la vuestra!”

Empecé a recitar el siguiente hechizo en voz baja, pero antes de poder completarlo, ¡un hombre de negro apareció delante del callejón bloqueando nuestro camino!

“¡¿Cuándo ha bajado?!”

¡El hombre de negro que estaba plantado delante de nosotras movió su mano rápidamente!

“¡Mierda!”

Me di media vuelta, cogí el pico de mi capa con mi mano y la hice volar tratando de detenerlo.

¡PO! ¡POM!

Sentí como algo sólido y pesado golpeaba mi capa.

Quizás era un pequeño cuchillo o algo que me lanzó, y lo había detenido con mi capa.

¡Entonces terminé mi hechizo!

– ¡Freeze Arrow! – ¡Las frías flechas que creé salieron disparadas hacia el

hombre de negro que bloqueaba la salida!

– ¡Argh! – No pudo esquivar las más de diez flechas de hielo que había lanzado; una de ellas le alcanzó en el pie, dejándole pegado al suelo.

“¡Muy bien! ¡Acabaré con ese primero!”

Mientras recitaba un hechizo, una presencia amenazadora apareció detrás de mí.

“¡¿Hay otro de ellos a mi espalda?!”

-¡Freeze Arrow!

Di un gran salto hacia un lado, empujé a Sherra hacia abajo, y ambas caímos al suelo.

-¡Oye!

“¡Que te calles! ¡Ya habrá tiempo para que te quejes después! La verdad es que

Sherra puede ser muy molesta, pero por otro lado, también lo es para los hombres de negro. Como su objetivo es capturar a Sherra, y está aquí a mi lado, no pueden usar hechizos que puedan matarla. Los cuchillos y las flechas mágicas de hace unos minutos aclararon todas esas dudas y acertijos.”

Justo cuando iba a ponerme de pie para lanzar un contraataque…

-¡Freeze Arrow!

Escuché una voz desde el tejado.

“¡¿Ahora qué?! ¿Desde delante, desde atrás y ahora incluso desde encima del tejado? ¡¿Entonces hay más de tres hombres de negro?!”

Como estaba temporalmente desconcertada y sorprendida, mis movimientos se ralentizaron un poco. De todos modos, pude empujar a Sherra fuera del alcance del hechizo y usé esa reacción para esquivar el ataque.

-¡Icicle Lance! – Grité mientras lanzaba el hechizo al hombre de delante que aún no se podía mover. No pudo esquivarlo y mi hechizo lo congeló.

“¡Uno menos!”

Empecé a correr para poder cambiar a un mejor lugar donde pelear mientras recitaba mi siguiente hechizo. Pero en ese momento…

¡PLAF!

De repente tiraron de mí desde atrás y me caí al suelo en un instante.

“¡¿Qué ha sido eso?!”

No había ninguna señal de ningún atacante en particular. Miré hacia atrás sobre mi hombro rápidamente y vi el final de mi capa pegada firmemente al suelo.

“¡¿Seré idiota?! Pensaba que había esquivado todas las flechas que lanzaron desde arriba pero, ¡¿pudo esquivarlas mi capa?!”

Justo cuando la impaciencia y la perplejidad aparecieron, sin perder la oportunidad, el hombre de negro a mi espalda sacó de su bolsillo un cuchillo o algo así, apuntó hacia mí, lo cogió fuerte y…

¡PLAM!

Se calló al suelo totalmente inmóvil. Y detrás de él estaba…

-¡Gourry!

-Hola. Escuché un ruido y salí a ver qué era. Dijo haciéndome un guiño, con su espada en la mano.

¡CLIN! ¡CLIN!

Al mismo tiempo, el sonido de dos espadas chocando se podía escuchar encima del tejado. Luego, en poco tiempo, dos hombres de negro bajaron en el callejón de delante de nosotros.

-¡Hola qué tal! Hemos venido a echar una mano – dijo una voz despreocupada desde arriba.

El sonido del viento soplando pasó cerca de mis orejas. Los que descendieron a mi lado eran, por si no estaba claro, Luke y Millina. Gourry también se acercó, ¡así que ahora nuestro equipo estaba completo!

De todos modos, aún no sabíamos cuántos hombres de negro había.

“Siempre igual, no nos podemos relajar.”

Creé un pequeño fuego con mi magia y despegué mi capa.

-Sería mejor que os rindieseis esta vez, ¿no creéis?

-¡No hay por qué rendirse! – dijo uno de los hombres de negro.

“Por el sonido de su voz, debía ser ese tal Gal-loquesea. La última vez supo exactamente cuándo retirarse, así que si ahora dice eso, puede que aún tenga un as en la manga…”

-¡Eso es interesante! ¡Entonces acabemos de una vez aquí! – Luke preparó su espada y en ese momento…

¡BUM!

¡Una pared de una de las casas que estaban entre el hombre de negro y yo se derrumbó con una explosión!

Por acto reflejo, saltamos hacia atrás.

-¡¿Pero qué…?!

GRR… GRRR…

Como si respondiera a la voz de Luke, se escuchó un gruñido gutural desde el interior de la nube de polvo producida por el derrumbe.

No. No venía sólo del interior de la nube, también venía de detrás y desde la oscuridad del largo callejón.

Se empezaron a escuchar muchos gruñidos.

“¡¿No será que…?!”

Recité rápidamente un hechizo:

-¡Lighting! – La luz que lancé hizo desaparecer la oscuridad.

La nube de polvo se asentó y la oscuridad se debilitó; sus siluetas se podían ver en el interior, las siluetas de más de diez demonios.