Kaifuku Jutsushi no Yarinaoshi ~ Sokushi Mahou to Skill Copy no Choetsu Heal (NL)

Volumen 1

Prólogo: ¡La Historia del Sanador Empieza una Vez Más!

Aquel que tenía la profesión de ‘Sanador’ concluyó que no tenía más opciones que sanar.

Admitió que no sería capaz de hacer nada solo.

No podía luchar sin tener que depender de alguien. Fue utilizado porque ese era el fin de su existencia.

Fue usado continuamente y llegó a este punto de su vida.

Ya era tarde para cuando se dio cuenta de su error. Su vida ya se había terminado.

Así que decidió empezar desde cero.

Lo soportaría, no permitiría que otros supieran que su cordura había regresado. Pretendería ser un estúpido para ganar todo en el último minuto.

***

‘Los Confines del Mundo’

Un mundo de color negro azabache.

Una tierra abandonada y desolada.

Allí nos enfrentamos al Rey Demonio.

El enemigo de la humanidad, el ser más poderoso y cruel.

Tenía la apariencia de una chica. Sus ojos eran de color carmesí como la sangre y su cabello era de color plateado.

Envolvió su esbelto cuerpo en un sensual vestido negro y volaba con sus alas negras como si se tratara de un ángel caído.

“¡Humanos! ¡¿Están tratando de arrebatarme estas tierras yermas, la última región de descanso que me queda?!”

A ella se le dificultaba respirar. Innumerables heridas y cicatrices permanecían talladas en su piel blanca, sangrando sin signos de detenerse.

Aquellos a quienes les hablaba eran la esperanza de la humanidad. El mejor grupo de aventureros donde se habían reunido los héroes de todo el mundo.

Blade, el [Héroe de la Espada]. Era un hombre guapo vestido con una armadura ligera y masculina de cuerpo entero con un grabado con el símbolo de ‘cáncer’, tenía los ojos azules y era rubio. En sus manos llevaba una espada a dos manos reconocida como la ‘Espada de Dios Ragnarok’. 

Bullet, el [Héroe del Cañón]. Un hombre grande con la cabeza rapada. Llevaba consigo un gran cañón de plata blanca que disparaba balas creadas con poder mágico, el cañón era un arma de artillería conocida como el ‘Arma de Dios, Tathlum’. 

Flare, la [Héroe de la Magia]. Era una hermosa chica con ojos de color verde y un largo cabello de color rosa. Ella no solo era una heroína, sino también una princesa. Llevaba consigo un báculo divino elaborado a partir de la corteza del árbol del mundo, el ‘Báculo de Dios, Vanargand’. 

Y por último estaba yo. Keyaru, el [Héroe Sanador].

Yo me encontraba con las manos desnudas. Era el único héroe que no tenía un [Armamento Divino].

“Bullet, continúa bombardeándola. Crea una oportunidad para que yo pueda lanzar un poderoso hechizo”.

“¡Entendido! Déjamelo a mí”.

Bullet, el [Héroe del Cañón], disparaba balas mágicas constantemente desde su cañón divino, Tathlum.

El poder de bombardeo del héroe del cañón era comparable a los hechizos de quinto orden, el nivel más alto de magia y podía continuar disparando continuamente. Al mismo tiempo, sus disparos eran capaces de recorrer trayectorias diferentes.

El Rey Demonio chasqueó con su lengua, agitó sus alas y trató de evadir los disparos, pero las balas intentaron bloquear sus rutas de escape y luego lograron impactarla directamente.

Mientras tanto, Flare, la [Héroe de la Magia] estaba cantando un hechizo y su poder mágico estaba aumentando sin pausa.

“Discúlpame por tenerte esperando, hechizo del séptimo orden, [Mjolnir]”.

Flare, la [Héroe de la Magia], lanzó un hechizo mortal.

Un círculo mágico de gran poder y con un radio de varios metros se desplegó en cinco capas sobre sí mismo.

Este era el hechizo de séptimo rango, [Mjolnir].

Un hechizo divino que solo podía ser utilizado por la [Héroe de la Magia], un hechizo que superaba el quinto rango que se decía era el límite de la humanidad.

Un gigantesco rayo descendió con fuerza desde el cielo. El rayo se convirtió en plasma debido a su alto voltaje y se vertió hacia abajo como si fuera un pilar de luz.

Al ver el descenso del poderoso hechizo, el Rey Demonio renunció a cualquier tipo de evasión y decidió enfrentarse al rayo desplegando una enorme y poderosa barrera.

“Acábala, por favor, Blade”.

“¡Déjenme el resto a mí, con la luz de la Espada de Dios Ragnarok, ¡Este devoto creyente la detendrá!”

El Héroe de la Espada], Blade, aceleró al escuchar la voz de la [Héroe de la Magia], Flare.

La espada de Dios Ragnarok absorbió el poder mágico que residía en su amo y emitió un brillo puro de color blanco.

El Rey Demonio que se encontraba enfocado en rechazar el hechizo [Mjolnir], iba a ser cortado en dos sin ninguna posibilidad de evitarlo. Los héroes estaban completamente convencidos de eso.

Sin embargo…

El Rey Demonio mostró una expresión de desprecio y dijo.

“¡¡No se atrevan a menospreciarme!!”

Los pensamientos de los héroes habían sido demasiado ingenuos.

Las plumas comenzaron a dispersarse desde las alas del Rey Demonio.

Cada pluma se convirtió en un demonio del tipo ‘Ángel Caído’.

Después de aparecer, los ángeles caídos demoníacos se apresuraron a atacar al héroe de la espada.

Bullet, el [Héroe del Cañón], comenzó a disparar continuamente para cubrir a Blade, pero como era de esperar, los demonios creados por el Rey Demonio poseían suficiente inteligencia como para esquivar las balas e incluso si los golpeaban, no caerían con un solo impacto.

El héroe de la espada desesperadamente se quitó de encima a los ángeles caídos demoníacos empuñando su espada, pero cada vez que realizaba un corte, el brillo de la Espada de Dios, Ragnarok se desvanecía y no pudo evitar que cinco ángeles caídos lo rodearan.

En el siguiente momento, el héroe de la espada logró cortar a los ángeles caídos demoníacos que lo rodeaban y retrocedió rápidamente, derramando su propia sangre en todas direcciones.

Pero la situación no acabó allí. Una luz negra comenzó a mezclarse con [Mjolnir] que no había detenido su descenso sobre el Rey Demonio.

“¡Humano! ¡Este es el verdadero poder del Rey Demonio!”

El rayo de [Mjolnir] se cubrió completamente de negro. Luego volvió a ascender y a descender hacia su nuevo objetivo.

El destino del rayo eran la [Héroe de la Magia] y el [Héroe del Cañón].

El Rey Demonio no necesitó emplear su propio poder mágico, sino que tomó el poder del hechizo y lo redirigió.

Había sido capaz de robar el hechizo de los dioses. Mostró una habilidad que iba más allá del conocimiento humano.

“¡¡Gyaaaaaaaaa!!”

“¡¡Aaaaaahhhhh!!”

Flare, a pesar de ser la [Héroe de la Magia] y poseer una alta resistencia mágica, terminó gravemente herida. Bullet, el [Héroe del Cañón], terminó carbonizado y murió.

El grupo de héroes había estado a un solo paso de vencer al Rey Demonio. Pero el giro abrupto de la situación devastó a los héroes.

Solamente yo, el [Héroe Sanador], quedé ileso.

“Oye, no seas un maldito vago, sánanos rápidamente. Los elixires se han agotado. Solo tú puedes sanarnos ahora, ¡¡Así que hazlo rápido!!”

El héroe de la espada me gritaba con rabia.

Pero lo ignoré.

La expresión del héroe de la espada se cubrió de absoluta ira y volvió a gritar.

“¡¡No me ignores escoria, recuerda que sólo sirves para eso!!”

A pesar de que yo también era uno de sus compañeros, el héroe de la espada me miró de una manera abrumadoramente cruel.

Bueno, eso era inevitable.

En primer lugar, el héroe de la espada era demasiado fuerte. Que recurriera a mi sanación no era necesario, ya que muy rara vez terminaba herido.

Sumado a eso, también existía un artículo que podía sanar todo tipo de heridas excepto sus propios efectos secundarios, era el ‘Elixir’.

Los países de todo el mundo reunieron grandes cantidades de este artículo y se lo donaron a los héroes, incluso cuando el elixir era considerado un artículo muy valioso.

El héroe sanador sólo podía utilizar el hechizo  [Sanación Recuperadora].

Por lo que mientras se tuviera algún elixir, el héroe sanador resultaba innecesario. Solo serviría como un respaldo para cuando los elixires se agotaran. Ese era mi papel.

“¡Oye! Me estás escuchando, imbécil, ¡¿Acaso se te pudrió la cabeza debido a las drogas?!”

Al escuchar la palabra ‘drogas’ una sonrisa de auto desprecio apareció en mi rostro inadvertidamente. 

Sí, yo sufría de un caso grave de drogadicción.

El hechizo [Sanación Recuperadora] tenía un defecto fatal.

[Sanación Recuperadora] era un hechizo capaz de sanar a sus objetivos hasta un estado normal previamente conocido.

En otras palabras, si quien lo utilizaba no sabía todo sobre el objetivo a sanar, no podría utilizarlo. El estado calificado como ‘normal’ dependía realmente del objetivo a sanar, el efecto del hechizo no sería perfecto a menos que quien lanzaba el hechizo no experimentara en su propio cuerpo el sufrimiento de las heridas que iba a sanar.

Para ese propósito, este hechizo hace que el sanador conozca a su ‘paciente’ experimentando en un instante y con su propio cuerpo, todas las heridas que [Sanación Recuperadora] sanará.

El dolor que se experimenta es inimaginable y que las experiencias de esas heridas se introduzcan en tu propio cuerpo causa un gran terror.

No pude soportarlo con mi mediocre fuerza de voluntad.

De hecho, debido a esas experiencias hui del grupo una vez. No quería utilizar ese poder. 

Sin embargo, después de ese intento de escape, fui capturado y drogado constantemente hasta que perdí mi miedo y ya no pude sentir dolor. Fui drogado con drogas extremadamente dañinas y fui condicionado para utilizar [Sanación Recuperadora] voluntariamente con el fin de obtener más drogas. Mi voluntad se había roto y me había convertido en una especie de animal doméstico.

Como una regla general, los sanadores no podían curarse a sí mismos. Ellos me acostumbraron a ser erosionado por las drogas, destruyeron lo que yo era y me convirtieron en un ser estúpido y sin voluntad que ya había olvidado quien había sido alguna vez.

“¿Quién te querría sanar? Solo muéranse, pedazos de mierda”.

Les desee la muerte a los que me habían destruido. El héroe de la espada parecía un ‘guapo joven’ en cuanto a su aspecto físico, pero en realidad era una mujer, una homosexual que detestaba a los hombres. Con tal de seducir a otras mujeres, ella fingía ser como los hombres que tanto odiaba.

“¡Estás consciente!”.

El héroe de la espada habló con un tono de sorpresa.

No era para menos. Se suponía que yo ya había sido su ‘compañero’ por más de tres años, pero para cuando nos conocimos, yo ya estaba roto. Durante esa época ya me había convertido en una marioneta que solo era capaz de escuchar órdenes como una máquina.

Hace un año logré adquirir la habilidad [Resistencia a las Toxinas] y recuperé mi cordura, también me di cuenta de que mi habilidad [Sanación Recuperadora] había mejorado y me podía curar a mí mismo.

Lo soporté todo, solo esperando a que llegara este día.

Corrí. Mi propósito era alcanzar al Rey Demonio.

Tenía que derrotar al Rey Demonio y conseguir lo que estaba buscando.

“¡Idiota! ¡¿Quieres morir?! ¡No posees poder de combate! ¡Regresa y sáname!”

Escuchaba los regaños de Blade, el [Héroe de la Espada], pero seguí corriendo hacia el Rey Demonio en línea recta.

Al verme, innumerables ángeles caídos se dirigieron hacia mí.

Pero… yo no sentí ningún miedo.

“Que lentos”.

Continué corriendo mientras evitaba los ataques de los ángeles caídos como si fuera una hoja bailando con la brisa.

Fueron solamente las artes corporales las que me permitieron hacer eso posible.

Era capaz de realizar los movimientos físicos más eficientes dentro de los límites del cuerpo humano.

Había logrado adquirir la experiencia de innumerables personas que empleaban habilidades de movimiento utilizando [Sanación Recuperadora].

Eso me permitió revivir las innumerables experiencias que adquirieron las personas al utilizar sus habilidades y lastimarse con ellas. Entre esas personas también habían muchos maestros de artes marciales.

Los efectos secundarios de [Sanación Recuperadora] también me habían otorgado una gran fuerza, no solo sufrimiento.

Mis habilidades de movimiento incluso superaban las del héroe de la espada.

Esta habilidad se llamaba…

“[Sanación Imitadora]”.

Me sorprendí mucho cuando recuperé la cordura.

Porque cuando la recuperé, habían muchas habilidades y conocimientos dentro de mi mente.

Los conocimientos de muchos maestros, de muchos ilustres expertos y de grandes gurúes de diversos campos se preservaban en mi interior.

Mirándome avanzar demasiado rápido como para ser alcanzado por sus ataques, los ángeles caídos se reunieron en una luz negra, [Técnica de Fortalecimiento de Acoplamiento Grupal].

Después de agruparse, la velocidad de los ángeles caídos se incrementó sustancialmente. Realizaron ataques simultáneos desde todas direcciones mientras se encontraban en ese estado fortalecido.

Al ver lo que hacían chasqueé con la lengua.

Incluso si yo ejecutaba los mejores movimientos posibles, era imposible que evitara por completo su asalto. Era físicamente imposible que los esquivara solo moviendo mi cuerpo. Me encontraba completamente bloqueado.

Entonces, no me quedó más opción que aumentar mi poder también.

“[Sanación Transformadora]”

Utilicé mi habilidad [Sanación Transformadora].

Originalmente, el hechizo [Sanación Recuperadora] solo me permitía regresar a un objetivo a una condición ‘normal’.

Pero si podía cambiar esta condición ‘normal’, entonces podría cambiar la condición de mi objetivo a la condición que yo deseara.

Por eso ahora, yo podía ‘reescribir’ la condición de mi cuerpo para que fuera uno adecuado para el combate con [Sanación Transformadora].

Eso aumentaría drásticamente mis habilidades físicas y me haría posible evitar los ataques que no podía esquivar. Además, me ayudaría a reducir la distancia que había entre el Rey Demonio y yo.

“Como era de esperar, los familiares del Rey Demonio son muy persistentes”.

Incluso cuando los volví a superar, los ángeles caídos no parecían darse por vencidos.

Los ángeles caídos comenzaron a reagruparse y formarse.

Se convirtieron en un monstruo enorme, pero su tamaño no aumentó demasiado. La presencia que emitían era abrumadora.

El enorme ángel caído levantó su puño y se abalanzó sobre mí.

Era imposible de esquivar. Sin embargo, podía lidiar con él. Agarré su brazo que estaba a punto de golpearme y…

“[Sanación Corrompedora]”.

Activé ese hechizo.

Si bien era fácil sanar a un objetivo, también lo era destruirlo si cambiaba su estado al que yo deseara.

El cuerpo de un ser vivo era terriblemente frágil. Con solo cortar la conexión entre la médula espinal y el cerebro, o con romper el flujo de vasos sanguíneos que nunca deberían alterarse. Destruir un sistema orgánico era un asunto trivial.

Por lo tanto, con [Sanación Corrompedora] podía romper el sistema orgánico de un ser vivo con facilidad.

Lo más terrible del hechizo [Sanación Recuperadora] era que podía ignorar todas las defensas.

Por lo que todas las criaturas aceptarían instintivamente el hechizo [Sanación Recuperadora].

En otras palabras, era un ataque mortal para el que no existían defensas.

El ángel caído que me atacó colapsó sobre sí mismo.

El Rey Demonio me quedó viendo, sus ojos estaban muy abiertos mostrando el miedo que existía dentro de ellos y me gritó.

“¡¿Quién eres tú?!”

“Soy Keyaru, el [Héroe Sanador], un simple sanador”.

El hechizo [Sanación Recuperadora] no solo implicaba sanar.

En el momento en que me percaté de eso, el mundo ante mí se amplió de inmediato.

[Sanación Imitadora] me permitía utilizar las habilidades de todos los que había sanado.

[Sanación Transformadora] me permitía mejorar mi cuerpo a la condición que yo deseara.

[Sanación Corrompedora] era un hechizo de muerte instantánea que poseía un poder desproporcionado.

Si ese poder me hubiera pertenecido hace cuatro años, mi vida habría sido diferente.

Mi propósito era crear una oportunidad para aprovechar este engaño.

El Rey Demonio me disparó innumerables balas de color negro azabache.

Pero su resistencia era inútil.

El conocimiento que adquirí de un ilustre guerrero me permitió leer los patrones de su ataque, podía ver el poder, la velocidad y la trayectoria de cada bala y, por ende, predecir el resultado. Podía emplear mis hechizos combinándolos con las habilidades de movimiento de los mejores luchadores apoyándolas con mi capacidad física mejorada.

Moviéndome a través de la lluvia de balas negras, alcancé al Rey Demonio. Si la tocaba, sería mi victoria.

“Te alcancé”.

Todo lo que me quedaba por hacer, era utilizar mi hechizo.

“Vaya, este parece ser mi final. Por más que quise, no pude proteger nada”.

El Rey Demonio dejó salir esas palabras mientras mostraba una expresión de llanto. Por alguna razón, me sentí muy culpable cuando observé su rostro.

No obstante, no me detuve. Tenía mi propio objetivo.

“[Sanación Corrompedora]”

Incluso el Rey Demonio quedó impotente frente a mi hechizo [Sanación Corrompedora].

Su cuerpo se rompió y desmoronó después de ser tocado por mí.

“No te preocupes, todo volverá a empezar una vez más”.

Murmuré eso mientras extraía el corazón del Rey Demonio.

Una gran joya roja. Ese era mi objetivo.

“Bien hecho, Keyaru, el [Héroe Sanador]. Mi real padre, no, el Rey también se sentirá muy complacido con este logro. Ya sabes, esa joya es un elemento extremadamente peligroso. Posee una maldición terrible. Yo, la [Héroe de la Magia], me encargaré de custodiarla”.

Utilizando un elixir que había escondido, la heroína mágica se recuperó por completo del ataque del rayo negro lanzado por el Rey Demonio y comenzó a sonreírme.

Sentía náuseas con sólo verla.

Nunca me había sonreído hasta ahora, que me había negado a utilizar [Sanación Recuperadora].

Siempre me había mirado como si estuviera observando un sucio perro callejero.

Ella fue quien me sacó de mi aldea cuando desperté el poder de un héroe, también fue quien me capturó cuando escapé por miedo a los efectos secundarios de [Sanación Recuperadora] y también fue ella quien me drogó constantemente para condicionarme a sanar a cambio de más drogas.

“La Piedra Filosofal”.

Sí, en el momento en que dije eso, la expresión sonriente en el rostro de la heroína mágica se distorsionó.

“¿No era por esto que querías asesinar al Rey Demonio? Fue por eso que decidieron aniquilar toda la raza de los demonios y al Rey Demonio, ¿No? La mejor herramienta mágica capaz de mejorar explosivamente el poder de todos los hechizos mágicos sin importar el tipo o su atributo. Con esto, incluso puedes ser capaz de usar una maldición prohibida”.

Tenía muchos conocimientos, incluidos secretos, gracias a [Sanación Recuperadora].

Por lo tanto, lo sabía todo sobre ella.

Originalmente, en este mundo existían dos tipos de demonios.

Los que eran dominados por su naturaleza demoníaca, eran conocidos como demonios salvajes y los que no eran dominados por sus instintos eran gobernados por los Reyes Demoníacos. Los primeros aparecían de forma espontánea, eran demonios que arrasaban todo lo que los rodeaba por puro instinto. Los demonios gobernados por los Reyes Demoníacos convivían bien con los humanos mientras mantuvieran la distancia los unos con los otros.

No obstante, un gran evento ocurrió hace diez años, un feroz y cruel demonio dirigió un ataque repentinamente contra un reino. 

Debido a eso, el Reino Jioral comenzó a hacer un gran escándalo sobre la protección de su nación, argumentaron que el Rey Demonio y todos los demás demonios debían ser erradicados.

Pero en realidad, ese evento nunca ocurrió. Se habían creado pruebas falsas y la sucia mano de los humanos manipulaba todo el escenario desde las sombras, provocando así un contraataque. El Reino Jioral utilizó varios movimientos sucios para poder asesinar al Rey Demonio y obtener su corazón demoníaco.

Con ese motivo, comenzaron a reunir grandes cantidades de dinero y poder militar y se inventaron una razón por la cual ir a la guerra.

La guerra que duró diez años fue una guerra completamente innecesaria.

“Oh, parece que tienes algunos conocimientos, al menos sabes que el corazón del Rey Demonio también tenía ese nombre”.

“Sí, sé algunas cosas, sé que quieres utilizar la piedra filosofal para realizar una maldición y hacer realidad tu ridícula ilusión de conquistar el mundo”.

El rostro de Flare reveló una expresión de odio por un instante.

Sin embargo, al instante siguiente volvió a mostrar la gentil sonrisa de una princesa.

“Vaya, ahora no sé de qué estás hablando”.

“Hmm, está bien, entonces déjame enseñarte cómo planeo utilizar esto”.

Había estado fingiendo que era una persona con una mentalidad rota después de haber recobrado la cordura, todo para este momento.

En este momento, iba a finalizar con todo esto.

“¡¿Qué demonios estás haciendo?!”

“Esta piedra filosofal es capaz de aumentar exponencialmente el poder de un mago. Incluso brinda la posibilidad de crear y utilizar hechizos absurdos. Utilizaré [Sanación Recuperadora] con el poder que esto concede. Hay algo que realmente quiero sanar”.

Sí, algo se encontraba roto.

Era algo que era imposible recuperar con el sentido común.

Era un deseo guardado en lo más profundo de mi alma.

“¡¡Tú!! ¡¡De ninguna manera!!”

“Yo recuperaré el ‘estado normal’ de este podrido mundo con [Sanación Recuperadora] y comenzaré nuevamente mi vida cuatro años antes de conocerte”.

Normalmente, el área que podía cubrir con [Sanación Recuperadora] no era muy grande sin importar cuánto la expandiera.

Pero con la piedra filosofal en mis manos, ya no existían límites.

“Jah, eso es inútil, nunca podrás hacerlo. Incluso si pudieras, todos tus recuerdos desaparecerán y terminarías repitiendo el mismo error”.

“Quizás”.

Flare, que escuchó mi respuesta, mostró una expresión de alivio.

“Entonces… ríndete, es un desperdicio. Si me entregas la piedra, una vida feliz te estará esperando cuando regresemos. La familia real la garantizará”.

Flare extendió la mano mientras yo me reía de ella.

Sus ojos me ordenaban que le entregara la piedra filosofal.

(Idiota. Nunca aceptaría eso.)

“Ciertamente podría olvidarme de todo y repetir la misma historia si fuera un caso normal. Pero eso no sucederá. Incluso si todo lo que obtuve desaparece, nunca olvidaré este dolor”.

La desesperación, el sufrimiento y el resentimiento que nació dentro de mí después de recuperar mi cordura, crearon a alguien que ya no volvería a ser mi antiguo yo.

Todos esos sentimientos se grabaron profundamente en mi alma.

Incluso si el tiempo se rebobinara y perdiera mi memoria, esos sentimientos no desaparecerían.

Estaba seguro de eso. Definitivamente, podría recordarlo todo gracias a las posibilidades que me brindaba [Sanación Recuperadora] y comenzaría mi vida de nuevo.

“¡Tú! ¡De verdad planeas hacer eso!”

“Entonces, princesa. Si esto resulta y consigo una segunda oportunidad, me aseguraré de arrebatártelo todo”.

“¡Asqueroso infeliz!”

Flare se dio cuenta de la seriedad con la que yo hablaba y me apuntó con su bastón.

Pero ya era demasiado tarde.

Ya había aumentado mi poder mágico hasta el límite. Todo lo que me quedaba era utilizar el poder de la piedra filosofal.

Una intensa luz roja emanó desde la joya cuando fue activada.

“[Sanación Recuperadora]”.

Sanaría este podrido mundo.

Lo regresaría al estado ‘normal’ que yo deseaba.

Sería como si estos cuatro años nunca hubiesen transcurrido y volvería a ese día.

Lo haría bien en esta nueva oportunidad. Estaba seguro de que podría hacerlo. 

Incluso si todos mis recuerdos desaparecían, el dolor arraigado en mi alma me haría recordarlo todo.

NOVA: Esto es lo que dice la ilustración de izquierda a derecha.

LOS 3 DE LA IZQUIERDA: El Héroe de Cañon: Bullet, la Héroe de la Espada: Blade y la Santa de la Espada: Kureha Clyret.

LAS 3 DE LA DERECHA: La Héroe de la Magia: Flare, el Héroe Sanador: Keyaru y la Guerrera Lobo de Hielo: Setsuna.