Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 8

Capitulo 47: La Joven del Mundo de los Sueños

Parte 5

No fue en respuesta a la voz de Sisty, pero en el momento siguiente, el círculo mágico sobre Elise brilló especialmente. Se alcanzó el límite de tiempo.

Elise se mordió el labio con fiereza. Con una avalancha de emociones inundándola, se dio cuenta de que era demasiado tarde para hacer algo. ¡¿Huir?! ¡¿Yo?!

Con la identidad del hechizo compuesto aún desconocida, podría decir que el enfrentamiento aún no se había decidido. Tenía absoluta confianza en su Tártaro. Es por eso que obligó a su cuerpo, que estaba tratando instintivamente a escapar, a quedarse por pura fuerza de voluntad.

“Un hechizo compuesto de todos los atributos. Jeje, interesante, ¡¡entonces lo tomaré de frente!!” Elise vertió casi todo su maná en sus cuatro colas. El líquido negro que los compuso se volvió de un negro azabache sólido sin manchas de color rojo oscuro.

Ella miró al techo con odio, e intentó dar un paso para cambiar su postura… ¡pero! Como respondiendo a su espíritu de lucha, el círculo mágico había comenzado a retumbar. Y Elise notó que su cuerpo no se movía.

Incluso sus cuatro colas tenían sus movimientos restringidos, como si les ataran pesos. ¿Cuánta fuerza hizo falta para que unas colas tan poderosas dejaran de moverse? No, no fue solo la fuerza …

“… ¡¡Hijo de puta!!” Elise gritó, dándose cuenta de la causa del cambio.

“¡¡Arreglaste completamente todas las coordenadas debajo del círculo mágico!!” Volvió su mirada hacia Alus.

“Como dije, no tengo ninguna intención de seguirte el juego.” Dijo Alus sin rodeos, con un rostro inexpresivo. Había pasado el tiempo de observarla. Él había tomado las medidas necesarias para hacerle comprender la diferencia de habilidades y hacer que se retirara por su propia voluntad.

El mejor resultado habría sido si Despair Execute hiciera que se rindiera. Pero también había decidido que era el último intento. Alus había estado de acuerdo con Elise al principio, haciendo que pareciera que estaban en el mismo campo de juego. Pero solo al principio.

Era Alus a quien le habían mostrado su lugar cuando convocó a Leviatán. Y comprendió entonces que tendría que atacarla con la intención de matar. Si no lo hacía, entonces su desventaja solo empeoraría cuanto más durara la pelea y, en el peor de los casos, él podría no ser la única víctima.

Por eso usó el hechizo compuesto de todos los atributos. Sin importar las circunstancias, el hechizo ciertamente destruiría las cuatro colas.

Para prepararse, paralizó los movimientos de Elise. Él arregló las coordenadas de todo dentro del área de influencia del círculo mágico y no permitió que se moviera ni un guijarro. Fue jaque mate. Incluso si Elise quería llevar a la audiencia al caos, ahora era imposible. Para deshacerlo, sería necesario modificar toda la información del espacio circundante. Podría hacer algo y recuperar cierto grado de libertad, pero no podría liberarse por completo antes de que fuera demasiado tarde.

Por supuesto, no importa cuánto maná tenga de sobra, también le costó un gran mordisco a Alus. Aunque podía manejar todos los atributos, el propio Alus no tenía atributos. Eso significaba que no tenía afinidades y que usar hechizos requería mucho más maná de esa manera, e incluso hacer ajustes a los hechizos avanzados se volvió más difícil.

Además, arreglar el espacio en sí mismo fue prácticamente un movimiento decisivo por sí solo. Aunque la situación podría haber sido mucho peor si Sisty no hubiera llegado hasta aquí. Nunca esperó que se viera obligado a usar un hechizo de último nivel. Por eso le rendiría el mayor respeto.

Alus levantó Bruma Nocturna y rápidamente apuntó su punta hacia Elise. “¿Has dicho tus oraciones? Minalis Folce Quartz… tú eres el que va a morir. ¡‹‹Temple Fall››!”

Un sonido extraño resonó en todo el campo de entrenamiento, como si toda la materia dentro del alcance estuviera gritando. El timbre afectó los cinco sentidos, agitando la sensación de miedo de Elise y sacudiendo el núcleo de su alma.

Era un hechizo que nunca había visto ni oído hablar… algo contra lo que debería haber estado en gran guardia. Pero lo que estaba sucediendo a su alrededor en este momento estaba más allá de la imaginación. Ningún Maestro Mágico en la historia había podido no solo usar todos los atributos, sino también lanzar un hechizo compuesto por todos ellos. Por eso ni siquiera podía adivinar qué haría.

Sin embargo, no había forma de escapar de la situación. Había sobrescrito las coordenadas fijándola en su lugar, pero no había nada más que pudiera hacer. Una pared de luz llenó su entorno, tan brillante que era imposible ver más allá.

Elise ya se había rendido a sí misma. Podía abandonar cualquier apego a la vida. Pero el hecho de que se negara a ceder a esto era una prueba, tal vez, de que todavía podía ser humana.

… ¡Si puedo destruir ese círculo mágico, todavía tengo una oportunidad! “¡¡‹‹Tártaro››!!” Elise gritó. Había liberado tanto su cuerpo como sus cuatro colas. Y la envolvieron mientras se juntaban como uno solo y disparaban hacia el techo.

La luz se hizo más fuerte cuando las colas formaron una lanza negra y se elevaron. Fueron abrumadoramente rápidos y fuertes. De hecho, ni un solo hechizo podría arañar el Tártaro… o debería haber podido.

Pero al momento siguiente, Elise gimió por el primer dolor que había sentido desde el comienzo de la batalla. Fue un dolor agudo, como si se hubiera desgarrado un nervio. Sus colas eran el escudo y la lanza más fuerte todo en uno, pero estaban conectadas a su sistema nervioso, y ahora podía sentir cómo las cortaban una por una, comenzando por sus extremos.

Gritos de dolor escaparon de su boca. “¡¿Aaaahhhh?!” Fue entonces cuando comprendió la verdadera habilidad del hechizo compuesto. No fue un equilibrio de todos los atributos. En cambio, fue testigo de una oscuridad. Y antes de que se diera cuenta, su pie desapareció en unas grandes fauces negras.

Era como si se perdiera el concepto de tiempo. Todo desapareció en él, excepto Elise. Así que descompone toda la materia, orgánica o inorgánica… volvió todo a sus orígenes. Fue un fenómeno que sucedió en la unión de todos los atributos. Todo fue literalmente devuelto a la nada.

Este era un hechizo que solo Alus podía usar. O más exactamente, ni siquiera él podía usarlo, salvo por el maná que tenía ahora.

“…” Elise sin decir palabra tiró su cola hacia atrás. Las colas parcialmente rotas cortan la luz donde la envuelven. Se envolvió en un capullo negro azabache, esperando que todo pasara.

Tenía algunos remordimientos persistentes… Creía que habría ganado si la Bruja no hubiera aparecido. Pero no, incluso eso era parte de su poder. Puede que no fuera algo tan especial como un vínculo, pero tenía aliados. Algo que ella no tenía. Eso era todo lo que había al respecto.

Oh, ya veo… es todo diferente. Elise, encerrada dentro de su capullo, estaba profundamente conmovida por sentimientos de resignación y reminiscencias.

Todo fue diferente. Todo había sido decidido desde el nacimiento. Ella no tenía nada mejor que hacer. No había nada que pudiera haber cambiado con sus propios esfuerzos o con la ayuda de otros. Por eso el camino que tomó no estuvo mal. Era el único que tenía…

Elise entrecerró los ojos cuando la luz atravesó su capullo que se estaba rompiendo.

¡Crash! Se escuchó un sonido de colapso.

La luz se desvaneció y se dio cuenta de que aún respiraba, pero cerró los ojos. Todo había sido determinado desde el principio. Todo estaba predeterminado, incluso su caída y el camino del pecado por el que había viajado.

Así que incluso el esfuerzo fue en vano. Al final, fue imposible resistir la fría lógica de la vida y la muerte. Resistir era inútil. Pero solo saber eso hizo que la pelea valiera la pena.

Alus miró hacia el círculo mágico en el techo y suspiró. Todavía era un hechizo incompleto. Pero considerando su composición demasiado específica, tal vez su incompletitud fuera su verdadero estado. El punto era que había un límite en cuanto a cuánto tiempo podía permanecer manifestado en el mundo.

Mientras tanto, el capullo de Elise hecho con sus cuatro colas se estaba desmoronando gradualmente. Su forma ya no era reconocible. La superficie se desvaneció, como si estuviera hecha de ceniza, con grietas que la atravesaban aquí y allá. Una ráfaga de viento bastaría para que todo se derrumbara.

Alus vislumbró lo que sucedió adentro.

“¡¡…!!”

Se quedó asombrado por un momento, antes de comprender todo. Había pensado que no quedaría nada de ella después del ataque… pero parecía que había sobrevivido. O quizás era más exacto decir que haber vuelto a la vida.

El capullo hecho con las cuatro colas era como un útero. En el capullo agrietado pudo ver la pared interior colapsada transformarse en un agua curativa que llenaba el interior, regenerando la mitad del cuerpo de Elise que había sido destruido.

Finalmente, cuando su cuerpo se había regenerado por completo, las cuatro colas se desintegraron, habiendo agotado su poder, revelando una Elise acurrucada. Había un gran agujero en forma de rosquilla en el suelo, y la habían dejado en el centro.

“… Ya veo. No me extraña que pensara que era anormal.” Murmuró Alus, mirando a Elise, que parecía haber perdido el conocimiento. “Supongo que este fue el mejor resultado posible.”

Esto había comenzado según lo planeado, pero hubo algunos factores inesperados en las etapas finales. Y la vista que tenía ante él era una de esas cosas. No matar en público sonaba genial y todo eso, pero no pudo evitar fruncir el ceño ante lo inexplicable que era su propia existencia.

Ella tenía un lado intelectual que él no esperaba de un ejecutivo de una organización criminal, y también parecía que tenía algún apego persistente al mundo mundano. Si realmente estuviera detrás de la vida de Alus, no habría pasado por una farsa como esta. Hubo muchas otras oportunidades, e incluso si tuviera sus razones para hacerlo durante el festival del campus, aún podría haber matado a todos en el Instituto. De esa forma, Sisty no habría venido corriendo.

Teniendo en cuenta la habilidad de Elise, no sería difícil de hacer y habría sido la forma más efectiva de asegurar la victoria. No había forma de que ella no se diera cuenta de eso.

Mientras Alus reflexionaba sobre esto, Elise se despertó lentamente. Miró al techo y volvió a cerrar los ojos.

A Alus todavía le sobraba maná y podía luchar. Sin embargo, a Elise no le quedaba suficiente maná. A pesar de eso, se mantuvo alerta, mirándola sin bajar la guardia.

Fue entonces cuando habló. “Alus Reigin, fuiste bendecido por esta era.”

“¡…!” Un pequeño escalofrío recorrió la espalda de Alus. Entrecerró los ojos.

Poco a poco había ido abriendo los ojos. Una fórmula desconocida estaba grabada en uno de ellos.

“Un ojo mágico.” Y es el Ojo Único.

 “Espeluznante, ¿no? Pero supongo que ya ha adivinado cómo funciona. Tus habilidades, teorías, nada de eso existía en mi tiempo. Si tan solo hubiera sido demasiado fuerte… una vez aplasté este ojo, deseando no haberlo conseguido nunca.”

Los ojos de Elise estaban ligeramente abiertos. Cerró su ojo normal para enfatizar su ojo mágico. “Pero fue inútil. Fue reconstruido de inmediato. Esta es una maldición. Esos putos cerdos buscaban este poder y me trataron como un puto juguete… pero una vez que las cosas empezaron a filtrarse al público, me desecharon sin dudarlo. Ja, ja. Hablando de jugar conmigo.” Su tono se burlaba de sí misma, y una sonrisa torcida apareció en su rostro solitario. Fue una expresión hueca. Sin embargo, en contraste con eso, sus ojos eran hermosos. “Nací en la era equivocada.”

“¿Eres estúpida…?”

“¡¡…!!”

“Esto es lo que obtienes por estar tan apegada a esta nación. Podrías haberlo dejado todo e ir a otra nación. No necesitabas un rango.”

“Eso es solo sofisma. Todavía estás sentado en tu rango, todavía no has abandonando tu propio rango, ¿verdad?”

Alus tenía algún conocimiento del pasado de Minalis. Por ejemplo, cómo había sido una Maestra de Mágica y cómo sus sentimientos en ese entonces probablemente eran puros. La información que tenía no contaba toda la historia, pero al iluminar su pasado, su presente y ese ojo, había una verdad que podía intuir. Y habló con eso en mente.

Luchar contra Alus porque era el No. 1 del ranking. Elegir no involucrar a la audiencia. Estas fueron las acciones de alguien que valoró el significado y el orgullo del rango por encima de todo. Sin embargo…

“Hmph. Lo devolvería todo en un santiamén si esta nación dejara ir las riendas.” Pero eso también fue solo un punto superficial. Las palabras huecas no convencerían a la otra parte y tampoco transmitían adecuadamente su propio significado.

“Por eso odio a los mocosos… hay cosas que no puedes cambiar con solo esfuerzo. Hay cosas que no se pueden volver a corregir. Vuelve cuando hayas vivido otros veinte años.”

“Simplemente no lo hiciste bien. Eso es todo.”

“No tendrías ni idea. Tu rango tiene sentido con tu poder. Pero hay una diferencia fundamental entre tú y yo. Ese ideal era demasiado brillante para mí. Y me recobré de ese sueño el día que me arrancaron las alas.”

Elise expresó lo que había sentido durante tanto tiempo, como si desahogara sus frustraciones reprimidas. Sabía que era una tontería, pero no podía detenerse. Un torrente de emociones la inundó, y en el fondo había una envidia infantil, deseando estar en su posición. Se emocionó cuando un dolor que había olvidado apretó su pecho.

Estaba sorprendida de lo mucho que deseaba estar en su lugar. Sin embargo, ponerlo en palabras la convenció. Cuando estaba frente a él, sentía todo tipo de emociones. La envidia, los celos y otros sentimientos complicados que no podía describir, se arremolinaron en su interior.

¿Por qué tuvo que sufrir esa maldición? No había límite para su rencor… su odio era como un lodo negro que brotaba de su interior.

Elise se abrazó a sí misma con los brazos, tratando de evitar que su cuerpo temblara. “Es demasiado complicado… me rindo. Es demasiado tarde para mí, demasiado tarde para pensar o preocuparme.” Con una expresión sin vida, se cubrió el ojo mágico de la izquierda con su pequeña mano, luego abrió lentamente su ojo derecho normal y miró a Alus. Pero su ojo estaba vacío y desenfocado.

“Un reflejo de un profundo mar negro, oscuro, sombrío, nublado y sin fondo… ‹‹Abyss››”

Se quitó la mano de la cara y abrió su ojo mágico. En el fondo de su ojo grabado con una fórmula mágica había una oscuridad indefinible, con innumerables burbujas negras flotando alrededor. La ilusión efímera que veía su ojo mágico estaba vinculada con la realidad que veía su ojo normal. Nadie sabía cuánto tiempo llevaban allí las burbujas. Para cuando alguien se dio cuenta, ya estaban allí.

Sin embargo, Alus no se movió. No importa qué tipo de hechizo usaría, él no entraría en pánico mientras fuera mágico.

Parecía que su hechizo se manifestaba en los huecos de su conciencia, mientras las burbujas aparecían a su alrededor. Miró las burbujas que flotaban alrededor del área… y en ese momento una oscuridad llenó todo el campo de entrenamiento.

“Nos vemos, mocoso.” Abyss era un hechizo que proyectaba la presión del agua de las profundidades del mar en realidad, un hechizo hecho posible por su ojo mágico maldito. Cualquier criatura que respirara encontraría su cuerpo aplastado por la presión del agua tan pronto como se manifestara el hechizo. Los pulmones y los órganos se arrugaron, los huesos se hicieron añicos. No había criaturas en la tierra que pudieran resistirlo.

El hechizo fue designado como un tabú, y era algo que Elise había obtenido como resultado de aceptar la maldición… era un reflejo de su ira, matando instantáneamente a cualquier persona a la que apuntaba, aplastando su forma. Se sentía como si fuera un poder que había obtenido para matar gente, como para afirmar la misma maldición que había recibido.

Esto es lo mejor… cómo debería ser. Elise tenía una sonrisa torcida, mientras veía a Alus ser tragado por el oscuro abismo. No fue de alegría, ni de alivio por haber ganado. Simplemente mantuvo la sonrisa para intentar decirse a sí misma que había tomado la decisión correcta. Cuando se lanzara el hechizo, solo quedaría un cadáver aplastado que ni siquiera parecía humano, por lo que puso una mano sobre su capucha, preparándose para salir de aquí rápido antes de que comenzara la conmoción.

“Sólo hay una diferencia entre nosotros…”

“¡¡…!!”

Fue entonces cuando una voz llegó a sus oídos. Balanceando su mano hacia un lado como si abriera una cortina, apareció Alus, desvaneciendo la oscuridad. Caminó casualmente como si nada hubiera pasado.

Elise dio un paso atrás ante la increíble vista, antes de recordar que su espalda estaba contra la pared. No había ningún lugar al que dar un paso atrás. Se le enredaron las piernas mientras miraba lo inexplicable, y terminó pisando el dobladillo de su bata, arruinando su equilibrio. “¡¡Imposible!! Lo que hice…”

Aprovechando la apertura, Alus liberó un maná muy siniestro. Fue solo por un instante, y probablemente solo Elise se dio cuenta. Para la audiencia, parecía que la oscuridad se estaba disipando a medida que el color comenzaba a regresar a los alrededores. La audiencia parecía pensar que ella misma había lanzado el hechizo.

Abyss fue devorado… Se sintió similar a cuando el ataque final de Hazan en el enfrentamiento de largo alcance fuera de Balmes había desaparecido. Elise se quedó sin habla por la sorpresa y se detuvo para recuperar el aliento.

“La diferencia entre nosotros es simple. ¡Simplemente no lo hiciste bien…!” Alus la miró fijamente, como si mirara dentro de su alma.

El corazón de Elise dio un brinco. Ahora comprendió el significado de sus palabras. De hecho… como ella, tenía una habilidad especial que haría que otros lo evitaran.

Cuando se dio cuenta de eso, su corazón finalmente dejó de resistirse. Probablemente hubo una pequeña diferencia en sus circunstancias, pero no fue suficiente. Había comenzado en las mismas circunstancias que ella, pero se había hecho un nombre. Si es así…

Eso es lo que quiso decir Alus. Y fue lo que finalmente reconoció Elise. Ella era quien había elegido el presente. Ella había sido la que no se había movido para evitar que sucediera.

Era cierto que no le había pedido ayuda a nadie, ni había usado todo lo que estaba en su poder para ayudarse a sí misma. En algún lugar en el fondo de su interior se había rendido, dejándose revolcarse en la angustia… se había encerrado sin tratar de salir.

“Jeje, ja, ja, ja, ja… Aahh, que tontería. ¿Qué estaba haciendo…? Ya veo, así que me equivoqué todo el tiempo…”

Ella debió haber encontrado algo gracioso, mientras extendía su mano derecha y cubría ambos ojos con la izquierda, mientras se reía. Ella se rió de todo, y Alus sintió algo de lástima cuando la miró.

Cuando adivinó el nombre de Minalis, comprendió que no quedaba nada de su pasado. Y cuando intercambió palabras con ella durante la pelea, también sintió algo. Probablemente había amado demasiado algo. Quizás fue la nación de Alpha. O tal vez había sido el breve momento en el que caminó en la luz como una joven Maestra Mágica llena de ideales.

Con una risa seca, décadas de arrepentimiento se condensaron en gotas tan claras como el agua fresca que brotaba del ojo normal de Elise. Eran claramente diferentes a las lágrimas de ira u odio.

Después de reír, Elise respiró hondo. Su diminuto cuerpo se estremeció y sintió el aire más fresco que cualquier cosa que hubiera experimentado antes. Con una exhalación satisfecha, se bajó la capucha hasta los ojos.

***

La audiencia estaba pegada a la escena que tenían delante. Lo que se desarrolló ante ellos fue completamente sin precedentes, y muchos incluso se olvidaron de parpadear. No hacía mucho tiempo que el lugar se había llenado de vítores aplastantes. Pero ahora estaba tan silencioso que se podía oír caer un alfiler. Incluso mantuvieron su respiración tranquila por reflejo. Se les habían mostrado las infinitas posibilidades de la magia.

Solo las personas en el tercer piso de los asientos de la audiencia podían ver el fondo del agujero en el campo de entrenamiento, e incluso entonces tenían que inclinarse.

El enfrentamiento les había dado la esperanza de levantar la bandera del contraataque de la humanidad. Había pasado un siglo desde que aparecieron los Fiends… y había pasado la misma cantidad de tiempo desde que la humanidad tuvo que vivir con el pensamiento de su propia desaparición constantemente en el fondo de sus mentes.

Esa amenaza seguía siendo igual de real. El recuerdo de la humanidad reducida a siete naciones y apiñada en una jaula de pájaros todavía estaba fresco en sus recuerdos.

Pero tenían el presentimiento de que los que estaban en el campo de entrenamiento en este momento eran los salvadores que cumplirían el deseo más querido de la humanidad. Esta batalla los convenció de que la humanidad no se quedaría atrás, sin importar el Fiend.

Ellos pagarían a los Fiends por los cien años de amargura reprimida… La emoción llenó gradualmente los corazones de la audiencia, y sus hombros y labios comenzaron a temblar. Ya ni una sola persona lo consideraba un simulacro de batalla de estudiantes. Fue una demostración de lo mejor que Alpha tenía para ofrecer.

Todos se quedaron sin palabras, sin saber cómo elogiarlos. Es por eso que el silencio dominó el campo de entrenamiento durante unos momentos. Probablemente estaban esperando la señal de que la batalla había terminado. Por la señal que los devolvería a la realidad.

Mientras todos miraban, Elise volvió a cubrirse el ojo mágico con la mano. Pero no para atacar. Cuando bajó la mano, su ojo volvió a su color ámbar habitual. Probablemente había sido camuflado por una película de agua, pero Alus ni siquiera se molestó en acomodar su postura.

Elise saltó de la isla en medio del gran agujero y aterrizó con gracia en el otro lado. “¿Me perseguirás, Alus?” Preguntó con un tono burlón.

Pero Alus simplemente se encogió de hombros. Luego, como para indicar que estaba cansado, puso un brazo sobre el hombro opuesto y comenzó a frotarlo. “No, todavía me queda trabajo por hacer para el festival del campus. Además, esto fue solo una batalla simulada, ¿no?”

“¡¡…!! Jeje, ya veo… entonces tengo mis deberes como perdedor que cumplir.” Hablando de jugar. Elise estaba exasperada. Pero ella no estaba demasiado disgustada. En todo caso, estaba de buen humor y sintió brotar una diversión insoportable. Rezo para que tu suavidad no vuelva a morderte. ¿O quizás ya sabes lo que haré?

Alus la miró como si se preguntara si todavía quería pelear, pero simplemente lo ignoró. Como perdedora, obedecería al vencedor. Agarró el borde de su capucha y la bajó más. Luego levantó lentamente una de sus manos. “Me rindo.” Dijo con voz clara.

En ese instante, el público se puso de pie antes de que el resultado se confirmara incluso en las pantallas gigantes. “¡¡OOOOOHHHH!!” Estallaron en vítores y aplausos tan fuertes que ahogaron el timbre. Incluso si sus palabras eran imposibles de distinguir, todavía gritaban sus elogios. Y continuaron incluso después de que sus voces estuvieran roncas.

Los vítores atronadores atravesaron la barrera y Elise se quedó atónita. Ella miró alrededor de la audiencia masiva. Ahhh, cuánto tiempo ha pasado… Los aplausos que estremecen la tierra celebrando la gloria y el orgullo de un Maestro Mágico. Recordó su pasado cuando había pulido sus habilidades por el bien de la humanidad, un pasado del que estaba orgullosa. Incluso su apego por ese rango, que pensaba que nunca alcanzaría, se estaba desvaneciendo después de la batalla.

Se recobró, Elise levantó la barbilla y escondió los ojos debajo de la capucha. Tenía la boca cerrada con fuerza. Un momento después, pudo ver a Alus moverse en el lado opuesto del agujero.

Alus actuó a propósito, saludando a la audiencia. No había ninguna razón para que él hiciera todo lo posible solo para hacer creer a la audiencia que la batalla era solo un enfrentamiento.

Pero en este momento, no se sentía particularmente tímido por eso. Era trivial en comparación con los muchos años de angustia de Elise.

Enderezando su postura, se puso una mano sobre el pecho y se inclinó elegantemente ante la audiencia. La audiencia respondió con vítores aún más fuertes.

Entonces… rápidamente movió su brazo para señalar a Elise.

¡¿Eh?! El gesto fue completamente inesperado y la confundió. Sin embargo, una ola de aplausos la inundó, independientemente de cómo se sintiera. Solo por ese momento, el atronador aplauso se sintió bien.

En respuesta, levantó lentamente su delgado brazo. Reprimiendo una expresión amarga, Elise saludó a la audiencia y forzó una sonrisa.

Ella entendió las intenciones de Alus y que debería seguirlas. Sin embargo… estaba desconcertada por su sentimiento de vergüenza, y miró fijamente al joven que la había puesto en esta situación. Pero Alus seguía inclinándose, sin mirarla, por lo que su queja sin palabras no dio en el blanco.

Cuando una aparentemente interminable tormenta de aplausos se apoderó de ellos, Alus y Elise caminaron hacia la salida. Elise estaba un poco por delante de él, y mientras miraba su pequeña espalda, no pudo evitar dejar que una sonrisa irónica se mostrara ante su comportamiento inusual.

De repente, la chica vestida de rojo se dio la vuelta justo antes de la salida. “Para que no haya confusiones, ahora mismo mi nombre es Elise, no Minalis. Y como agradecimiento…”

Ella continuó hablando. En unos segundos dijo algunas palabras que parecían significativas, solo entre los dos.

“…” Cuando Alus escuchó lo que tenía que decir, se puso un poco rígido. Sin embargo, su expresión se mantuvo sin cambios. Entrecerró los ojos mientras reflexionaba sobre cómo tomar la información de Elise.

Después de un breve suspiro, agitó la mano como si ahuyentara a un gato o un perro. Normalmente, sería disciplinado por dejar ir a Elise. Pero aun opto por hacerlo.

O quizás era su forma de devolverle el favor por lo que le acababa de decir. También agregó algunas palabras adicionales como bonificación. “… El ejército enviará perseguidores tras de Imagino que serán un par de Dobles. Así que simplemente piérdelos y no vuelvas a dar un paso en falso.”

Si Sisty hacía los arreglos necesarios, la persecución comenzaría en el momento en que Elise saliera. Pero ahora que Alus conocía sus habilidades, cualquier persecución al azar no tendría sentido. Sería sencillo para ella dejarlos atrás. En todo caso, quería evitar bajas en el lado militar.

Por eso… “Yo me ocuparé del resto… así que ya no mates a nadie en vano.” Elise puso una sonrisa torcida y asintió levemente.

Alus se encogió de hombros, sacudiendo la cabeza hacia Sisty que estaba tratando de atraerlo sobre algo con sus ojos. Le estaba indicando que perseguir a Elise era inútil, y que el Instituto mantuviera sus manos fuera de eso.

Sisty pareció entenderlo, pero le lanzó una mirada sospechosa. También mantuvo la guardia alta mientras miraba a la peligrosa niña que se iba. Pero Alus le restó importancia, reafirmando que no deberían hacer nada más.