Heavy Object (NL)

Volumen 8

Capitulo 1: Un Recurso que no Puede Volverse Abundante >> Aterrizando en él Ame-no-Darin de la Nación Isla

Parte 2

Los dos idiotas llamados Quenser Barbotage y Heivia Winchell se quejan en la bodega de la unidad de aterrizaje en el nivel inferior del crucero camuflado llamado Scarlet Princess.

El exterior fue fabricado para parecer un crucero de lujo, pero el interior es completamente diferente. De su longitud de 380 metros, más de la mitad de la parte inferior es un solo espacio amplio. Y ese espacio está repleto de aerodeslizadores militares. Quenser y los demás se encuentran amontonados como sardinas en esos aerodeslizadores.

Los aerodeslizadores son considerados “pequeños pero capaces de llevar un tanque☆”, pero están lejos de ser cómodos para que los use la gente. Apestan a aceite de máquina.

“¡¡Esto es una tiranía!! ¡Solamente estamos viajando con ellos! ¿En verdad pueden lanzarnos frente a las armas de los piratas? ¡Este ni siquiera es trabajo del 37mo Batallón de Mantenimiento Móvil! ¿¡Quién nos pagará!?”

“Probablemente esto sea como pagar por nuestro boleto para subir al barco. Aunque yo tampoco estoy de humor para trabajar.”

“¿Y cómo es esto un ‘crucero camuflado’? ¡Mide casi 400 metros! Ni siquiera los buques de guerra eran tan grandes cuando eran relevantes. ¡Esto es 100 metros más grande que Yamato de la Nación Isla! ¿¡Están locos!?”

“La categoría de buques de guerra ha desaparecido, ¿así que qué puedes hacer? Y es un barco camuflado, ¿recuerdas? Tener barcos que lo escolten por protección acabaría con eso, así que tiene que ocuparse de todo como un lobo solitario. Y tiene que estar fuertemente blindado para atraer a los piratas. Tiene que ser lo suficientemente resistente para soportar algunos cohetes y torpedos sin problemas.”

La historia comprobó que los aviones superarían a los buques de guerra en cuanto a utilidad, pero los buques pueden ser útiles otra vez ahora que no pueden ser desplegados los aviones. Son perfectos para atraer y masacrar piratas.

“… ¿Por qué estás respirando de forma tan pesada?”

“¿Eh? ¿Acaso no te emociona ver armas gigantes? Es la naturaleza humana.”

Heivia empuja al pervertido a un costado con ambas manos mientras una alarma que lastima los oídos resuena y las luces se tornan rojas.

Alguien a quien no pueden ver da un grito motivado.

“¡Nuestras valientes ‘camareras’, es hora de que arriesguen sus vidas pescando tiburones!

¡Hagamos de esta una batalla lo suficientemente emocionante como para que hagan una película!

¡¡Rock & roll!!”

“¡Cállate! ¡¡Ya estamos listos!! ¡Y si tienes tantas ganas de ser un protagonista, hazlo por tu cuenta! ¡Sé un arma humana! ¡¡No nos incluyas en esto!!”

Heivia demuestra su gracia como noble levantando elegantemente su dedo medio mientras grita contra el hombre, pero eso no cambia nada.

Con un fuerte retumbo, el muro frente a ellos se abre a ambos lados. La proa del crucero camuflado se abre como las puertas de un castillo. Uno tras otro, los aerodeslizadores anfibios salen deslizándose hacia el campo de batalla dominado por tiroteos en el Estrecho de Malaca.

Y…

Ya sea por coincidencia o algo planeado, un cohete entra a la bodega repentinamente.

Mientras Heivia jala hacia abajo la cabeza de Quenser con fuerza y él mismo se agacha, una tremenda onda de impacto se expande dentro del espacio cerrado.

Un dolor seco explota más en su pecho que en sus tímpanos.

“¿¡Gbh!? ¡¡Cof!! ¿¡Cómo diablos puede considerarse una  simple misión segura de limpieza!?”

“Siempre que le llamen a la misión ‘simple’ debes sospechar.”

“Espera… ¡¡Espera un segundo!! ¿Acaso este aerodeslizador comenzó a moverse? ¡¡Espera!! ¡Ya hay un montón de soldados heridos! ¡¡No pueden simplemente lanzarnos a las líneas frontaleeesssssssss!!”

Pero sus protestas llegan demasiado tarde.

El aerodeslizador avanza por la pendiente y sale disparado desde la proa de la “Princesa Bañada en sangre”. Son obligados a pelear repentinamente con los pequeños botes de pesca (que fueron modificados como botes de alta velocidad) esperando frente a ellos.

Se encuentran a unos sesenta centímetros del bote más cercano.

Están lo suficientemente cerca como para saltar de un bote a otro.

La mirada de Heivia se encuentra con la de un hombre bronceado.

“¡¡Bastardos!!”

El hombre intenta levantar el rifle que soporta con la cinta colgando en su hombro, pero es demasiado lento. Heivia saca su pistola de la funda y dispara repetidas veces.

Quenser finalmente regresa a sus cinco sentidos mientras ve cómo aparecen tres agujeros de color rojo oscuro en el pecho del hombre.

“¡Espera, Heivia! ¡¡No puedes matarlos!!”

“¿Ah? ¿¡Qué!?” ¡¡No puedo escucharte con todo este ruido!!”

“¡¡No los mates!!”

Las armas gatling de 20 mm instaladas al costado de la cubierta del crucero camuflado comienzan a disparar y derriban un misil anti-barco hecho en casa volando hacia la cabeza de Quenser. A cambio, barios misiles de lanzamiento vertical son disparados contra los botes de pesca de los piratas. El molesto sonido de las hélices resuena desde el helipuerto y un helicóptero militar de combate comienza a despegar.

Los piratas formaron un semi-círculo para cubrir el paso del Scarlet Princess, pero esa resulta ser una formación suicida debido a la falta de conocimiento del poder destructivo del barco. Supuestamente había unos quince botes de pesca piratas, pero la mitad de ellos ya han sido hundidos.

Todo está en movimiento y simplemente verlo hace que los ojos y la cabeza de uno comiencen a doler.

Y además de todo eso, el ambiente es tan precario que uno quedaría sordo si simplemente se quedara ahí sin hacer nada más.

Después de que el aerodeslizador del grupo de Quenser se aleja, un ataque desde el aire hace explotar al barco pirata anterior como una lata vacía.

Con sus oídos aún resonando, Quenser grita hacia Heivia que se encuentra justo a su lado.

“¡Si sólo tuviéramos que matarlos, el armamento del barco podría encargarse de ello! ¡¡Fuimos enviados por una razón!! ¿¡Acaso no estabas escuchando durante la junta previa a la misión!?”

“¿Oh? ¡Oh, oh! ¿¡Mencionaron algo acerca de eso!?”

“¡Están usando botes de pesca en vez de botes de patrullaje para que puedan lanzar sus armas al océano y actuar como inocentes pescadores si tienen que hacerlo! Si simplemente los matáramos a todos, seríamos sospechosos de matar civiles. Es por eso que necesitamos capturar a algunos con vida y hacer que admitan que son piratas. ¡¡Eso fue lo que se nos ordenó!!”

“¿¡En otras palabras, han tirado un panal de avispas con una piedra y ahora nosotros tenemos que recogerlo con las manos desnudas!? ¡¡Maldición, este es un trabajo terrible!! Al menos nos pagarán extra por esto, ¿¡cierto!?”

Nada que los piratas hagan puede revertir esta situación.

Sonidos de disparos y explosiones continúan sin cesar.

Los cañones de disparo rápido del barco y los cohetes del helicóptero de ataque están destruyendo los botes piratas sin resistencia.

“¡Dos más! Nuestro bando acaba de eliminar otros dos. Mierda. ¡¡Si no capturamos un pirata pronto, todos terminarán muertos!!”

“¡¡Cállate!! ¡¡Si te preocupa tanto, salta hacia ese bote pesquero y captura a uno tú mismo!!”

Sólo quedan unos pocos de los botes piratas de 10 metros de alta velocidad. El Scarlet Princess está totalmente equipado con lo mejor de la marina del Reino de la Legitimidad, así que es una masa de 400 metros de gigantescas armas. Es imposible que sea hundido ahora.

Pero existe la posibilidad de que los piratas contraataquen de alguna forma.

Los botes de pesca están equipados con misiles anti-barco caseros. Podrían ser capaces de destruir al menos a uno de los aerodeslizadores que usan el poder del aire para flotar.

“¡¡Esto es demasiado espeluznante!! ¡¡Un misil acaba de volar sobre nosotros!! ¿¡Qué pasa con el sistema de apoyo del armamento!?”

“¿Acaso son del tipo que reacciona con magnetismo para detonar? El casco de esta cosa está hecho de plástico en capas y el su globo está hecho de fibra sintética, así que tal vez pasen sin hacernos daño.”

“Maldición. Y ahora las armas gatling al costado de la cubierta esperan hasta ahora para apuntar hacia acá. …¿Hm? ¿¡Hacia acá!?”

“¡¡A-agáchate!! ¡Y voltea el aerodeslizador hacia un costado! ¡¡Nuestro propio bombardeo nos llenará de agujeros!!”

Los disparos resuenan como un timbre descompuesto mientras la línea de armas CIWS apuntan contra un misil anti-barco volando a unos cuantos metros sobre la superficie del océano y esparcen gigantescas bala en un promedio de 5000 por minuto. Son balas de 20 mm que son masas metálicas del tamaño de un pulgar. Son mucho más grandes que las normales usadas con rifles anti-material e incluso una rozándote podría hacer volar una de tus extremidades.

“Tienen que hacer todo esto sólo para derribar un simple misil. Los rayos láser de un Object son una historia totalmente diferente, pero esto deja en claro el balance entre ataque y defensa.”

“¿¡Por qué estás empezando a respirar de esa forma espeluznante otra vez!? ¡¡No dejes que tu sangre obsesionada por el diseño aflore como si fuera un instinto para preservar tus genes en una situación riesgosa!!”

“¿Eh? No mezclo mi amor por las máquinas con la lujuria. Crear chicas antropomorfizadas de armas es algo perturbador si lo piensas.”

“¡¡Simplemente piensa en ello como una adición de elementos!! ¡¡No lo pienses como si cortaran y pegaran cosas con una cirugía!!”

El aerodeslizador ocupado por los dos idiotas y otros 28 tiene tres motores que parecen ventiladores de dos metros en la parte posterior. Uno de ellos está emitiendo un desconcertante humo negro (debido al bombardeo por parte del sistema de armamentos de su bando).

“¿Qué tal si decimos que los piratas hicieron eso y lo agregamos a nuestro seguro de daños? Creo que merecemos un bono.”

“Si hiciéramos eso, significaría que fuimos heridos por un grupo de amateurs. Eso sería deshonroso.”

Mientras tanto, la batalla está por terminar.

El helicóptero de ataque que fue desplegado a media batalla está haciendo un excelente trabajo. Está lanzando una lluvia de cohetes que envuelven a los pequeños botes pesqueros y al océano colindante en fuego.

“¿Acaso esto no es malo?” murmura Quenser mientras mira descuidadamente hacia el cielo azul. “Todos los botes piratas serán hundidos pronto.”

“¿¡Qué sucedió con capturar a alguno vivo!? ¡¡Si no capturamos a uno que confiese ser pirata, seremos acusados de masacrar civiles!!”

Los dos idiotas miran alrededor, pero no ven nada más que un espeluznante humo negro y restos comenzando a hundirse. Ya no se siente como si estuvieran peleando. Es más como una cacería del tesoro.

“¡¡Ahí!! Hay otro bote de pesca detrás de ese humo. ¡¡Si lo dejamos ir, tendremos que abandonar la idea de capturar a alguien con vida!! ¡¡Seremos acusados despiadadamente por un comité internacional sonriente!!”

El helicóptero de ataque vuela sobre sus cabezas. Claramente se mueve hacia el mismo objetivo.

Heivia se lleva una mano a la frente.

“¿¡Acaso ese piloto es un cobarde!? No creo que pueda relajarse hasta eliminar a cualquier amenaza que vea. ¡¡Y no es que esos piratas puedan derribar a un helicóptero volando a toda velocidad!!”

“¿Qué hacemos? Si no tomamos a alguien con vida, tendremos que poner a prueba nuestra necromancia durante la corte marcial.”

“¡¡Ya tuve suficiente de esto!!” grita Heivia en desesperación mientras da órdenes al joven soldado a cargo de manejar el aerodeslizador. “¡Dirígete a toda velocidad hacia el bote de pesca! …¡¡No puedo creer que tenga que arriesgar mi vida para proteger a mi enemigo!!”

“¿¡Pero qué haremos exactamente!?”

“Sólo tenemos una opción.”

Por alguna razón, Heivia retira el seguro de su lanzamisiles portátil colgando de su hombro junto con su rifle. Apoya un extremo sobre su hombro y apunta con el otro extremo. Tanques en tierra, pequeños botes de guardia en el mar, y naves anti-terrestres en el aire. Excepto por su ridículo precio, ese misil es conocido como una obra maestra.

“Dispararemos contra nuestro helicóptero.” El chico no vacila.

Captura al objetivo tanto con los sensores infrarrojos como con los ultravioleta y jala el gatillo.

El largo y angosto misil sale disparado como una lanza y pasa junto al helicóptero.

No hace ningún daño.

Excepto por Quenser que es lanzado hacia atrás por la explosión.

Vuela dos o tres metros como un personaje anónimo en una película de kung fu.

“¡¡Quema!! ¿¡Quema!? ¿Q-qué sucedió? ¿¡Estamos siendo atacados!?”

“Si estás tan animado, no me preocuparé demasiado.”

Los demás soldados en el aerodeslizador se concentran en Heivia. Sus miradas están preguntando por qué disparó contra un aliado.

“¡Si realmente hubiera apuntado, esa cosa ya no estaría en el aire! Fallé a propósito. ¡¡Pero el cobarde del piloto no se percató de eso!! ¡¡Si no quieren morir, prepárense!!”

El helicóptero de ataque toma acciones evasivas tardías y después se da la vuelta. Claramente está alzando su guardia. Si el piloto perdiera la tranquilidad, existe la probabilidad de que simplemente ataque. Es similar a un soldado extremadamente adormecido atrapado en un remolino o tiroteo confundiendo quiénes son sus aliados.

Heivia grita en desesperación.

“¡Nos conseguí algo de tiempo, pero sólo serán unos cuantos segundos! ¡¡Avanza directamente hacia el bote pesquero!! ¡¡Sólo tenemos que capturar aunque sea a uno vivo!!”

El aerodeslizador se mueve en línea recta hacia el único bote de pesca que queda. Mientras tanto, Heivia apunta su rifle de asalto hacia el aire y dispara una lluvia de balas hacia su helicóptero de ataque. Unas chispas anaranjadas cubren el costado de éste.

“Con el equipo adecuado, puede rechazar balas de rifle.” Mientras dispara un montón de balas sin razón, Heivia forma una delgada sonrisa. “Pero ese cobarde no debe saber eso. Su deseo por sobrevivir lo hizo perder el control y olvidarse del plan. En verdad intentará esquivar esta cerbatana.”

El aerodeslizador se acerca al bote pesquero modificado desde el costado.

O más precisamente, choca contra él.

Los aerodeslizadores flotan sobre el océano con el poder del aire. La parte del borde que contiene el aire es un gran globo hecho de fibra sintética a prueba de balas y cuchillos.

En vez de ser una colisión directa, el aerodeslizador sube al bote.

Y el pirata de pie en la cubierta del bote es lanzado al océano.

El hecho de que la parte del borde sea un suave globo resulta ser un poco de buena suerte para ambos bandos. Mientras el hombre agita sus brazos, es lanzado varios metros de forma horizontal como una pequeña piedra.

Al mismo tiempo, un cohete cae del cielo y golpea el punto de intersección entre el bote pesquero y el aerodeslizador.

La explosión lanza a los soldados del Reino de la Legitimidad hacia el aire.

Pero no acaba con su voluntad para pelear. O más bien, no pueden dejar este océano de fuego y humo a menos que completen esto. Varios soldados usan extraños movimientos de lucha para saltar sobre el pirata que cayó al océano.

Resuenan varios ruidos secos.

El pirata forcejea y su cabeza es obligada a sumergirse debajo del agua salada.

Quenser y Heivia sujetan al pirata del cuello de su ropa y regresan su cabeza sobre la superficie.

Y entonces gritan molestos hacia sus oídos.