Heavy Object (NL)

Volumen 7

Capitulo 1: Un Mortífero Tiroteo entre Dos Idiotas >> Batalla de Prueba en Oceanía

Parte 1

“Aquí estamos otra vez, soldados del lado de Oceanía. ¿Cuántas veces son con esta?”

El soldado Heivia Winchell susurra esas palabras mientras esparce color negro y arena sobre sus mejillas. Obviamente, se trata de un tipo de camuflaje para el desierto.

“Realmente no parece febrero. En cierta nación isla, los chicos sexys reciben chocolate el día de San Valentín, ¿¡cierto!? ¡Ese tipo de lindo evento hubiera sido perfecto para mí! ¿¡Qué sucedió!? Claro, recibir una tonelada de chocolate en este horrendo calor podría interpretarse como acoso.”

En una era de sensores y otros medios electrónicos incluso en las armas más pequeñas, han sido desarrollados tipos de camuflaje diseñados especialmente para dicha era. Lo que Heivia esparce en su rostro tiene componentes químicos que evitan que los sensores detecten su piel expuesta.

Se recarga contra la malla que rodea la zona base de mantenimiento continúa aplicando su “maquillaje”. Hay diez o más soldados a su alrededor que también están preparándose.

Una soldado de baja estatura llamada Myonri sostiene su estuche de pinturas con ambas manos y habla titubeante.

“¿U-um, qué se supone que debo hacer con esto?”

“Estás haciendo todo mal, chica virgen. ¡No puedes dejar el color alrededor de tus ojos tan oscuro! Eso resalta el blanco de tus ojos, así que tienes que dejar la zona a su alrededor de color claro para que puedan camuflarse. Oscureces más el color entre más te alejas. No puede haber ningún cambio repentino en el tono de color.”

“¿No crees que nos llenaremos de arena si nos ponemos el camuflaje aquí?”

“Estamos por empezar una batalla, así que estaría más preocupado acerca de quedar cubierto de lodo y vómito con sangre,” dice Heivia con fastidio.

Mientras tanto, toma una banda con un enorme diseño e luna creciente.

Mientras cada uno termina de colocarse su “maquillaje”, se atan los pañuelos de tal forma que cubran la parte inferior de su rostro como asaltantes de banco del oeste. La luna creciente está ubicada en el punto justo para que parezca una enorme sonrisa.

“Qué mal gusto.”

“Lo que importa es que se distingue bien.”

Mientras escucha a Myonri, Heivia toma su rifle de asalto y saca el cartucho. Revisa las balas de rifle que están aseguradas en su lugar con un broche.

“Munición lista.”

“Munición lista.”

“Munición…lista.”

Sintiendo fastidio por el titubeo de su camarada, Heivia introduce nuevamente el cartucho al arma y jala hacia atrás la palanca para amartillar para cargar la primera bala. Entonces se acerca el radio a la boca.

“Equipo A listo. ¿Qué´ hay de los demás?”

“Ustedes son los últimos, perezosos. Los equipos B al D están listos. Podemos empezar a su señal.”

“Entendido, entendido.”

Heivia desvía la mirada hacia Myonri.

En vez de un arma pesada como una pistola semiautomática ligera o un rifle de asalto, lleva un arma de defensa personal como lo haría un piloto en caso de un aterrizaje de emergencia. Es comúnmente conocida como un “arma totalmente automática en un bolso de compras”.

Pero la chica no lleva esa arma ligera porque sea mujer.

Es porque el resto de su equipamiento es realmente pesado. “¿Cómo está el perforador de tijera?”

“Lo probé tres veces. En verdad me asusta llevarlo por ahí.”

“No perder el tiempo por culpa de una puerta puede hacer una gran diferencia. Eres nuestra salvavidas, así que sopórtalo.”

“Esta herramienta inserta un gigantesco par de tijeras en el espacio de una puerta usando explosivos y después usa un motor para destruir el seguro con fuerza. ¿Te has preguntado qué podría pasar si se activara por accidente mientras lo llevo en la espalda?”

“Sería tu maldita culpa. Si no hubieras ganado todos esos honores extraños, no estarías en esta situación con el equipo extraño.”

Mientras habla, Heivia mira en dirección a su objetivo.

No está viendo hacia el exterior de la zona base de mantenimiento. Está viendo hacia el interior.

Apunta su rifle de asalto hacia las personas a las que normalmente llamaría aliados.

Al final, los humanos tienen la costumbre de buscar enemigos dentro cuando no hay enemigos fuera.

“Muy bien, hagamos de esto algo llamativo. Nuestro objetivo es la princesa. ¡¡Asesinémosla antes de que pueda abordar el Object!!”

***

“Bien, bien. Todo va de acuerdo a lo planeado. Podemos escuchar todo lo que están diciendo.”

Dentro de la zona base de mantenimiento conformada por más de cien enormes vehículos, el Estudiante del Campo de Batalla Quenser Barbotage sonríe. Sostiene un radio militar con la que puede escuchar al “enemigo” tan claramente como el día.

“Malditos traidores. Mataremos a todos y cada uno de ustedes.”

“¿Hey, en verdad puedes hacer eso?”

Una chica a su lado deja escapar un suspiro cansino. Se especializa en el deber de prevención, lo que significa que es una de los Uniformes Negros que se encarga de los criminales dentro del ejército. Ya se había presentado, pero él ha olvidado su nombre.

Quenser mueve ligeramente el radio militar.

“Es su culpa por olvidar que son traidores y que por esa razón están usando el mismo equipo. Incluso si los idiotas cambiaran la codificación, sigue siendo el mismo formato, así que aun existiría el riesgo de poder interceptarlo.”

Se encuentran cerca del centro de la zona base de mantenimiento conformada por un enorme convoy. Quenser está oculto y recargado detrás de un neumático más grande que la puerta de una bóveda de seguridad. Está usando un cuchillo militar negro para dibujar un mapa simple en la arena.

“Heivia y su grupo están cerca de la entrada sur. Ya se han infiltrado a los terrenos de la base pretendiendo ser inocentes. Por otro lado, la princesa está un poco al sur del centro. Está recibiendo mantenimiento corporal en las instalaciones especiales para los pilotos de Élite. Ellos definitivamente atacarán ahí.”

“Una vez que la Señorita Milinda Brantini entra al Baby Magnum es casi invencible. Después de todo, ese Object fue creado para soportar una explosión nuclear. Así que…”

“Bloquearán el camino de las instalaciones especiales al hangar del Object.” Quenser dibuja unas marcas en forma de X en la arena junto con algunas rutas. La chica rubia y de grandes pechos de los Uniformes Negros frunce el ceño.

“Pero los traidores no pueden moverse por ahí como gusten. Los vigilantes los descubrirán desde fuera. Si simplemente persiguieran a la Élite, serían asesinados por las pistolas automáticas.”

“¡Entonces eliminarán a los vigilantes!”

Sonidos parecidos a corchos de champaña siendo retirados resuenan por la planicie de Oceanía. Quenser alza la mirada y ve unos cuantos paracaídas de treinta centímetros abriéndose en el cielo. Parecen fuegos artificiales para niños, pero no lo son. En vez de tener un peso, tienen una pequeña cámara atada.

“¡¡Aquí vienen!!” grita la chica de los Uniformes Negros.

“¡Ah, maldición! ¡¡Derríbenlos antes de que designen las coordenadas!!”

Justo cuando Quenser intenta gritar a través de su radio militar, la Uniforme Negro lo toma del cuello del uniforme y lo derriba al piso. La hermosa mujer se coloca sobre él, así que dos suaves objetos se presionan contra su espalda. Nada podría hacerlo más feliz.

Pero semejantes alegrías tan efímeras pueden ser destruidas rápidamente.

Quenser escucha un estruendo y ve el verdadero ataque impactando contra una torre de vigilancia cercana. Las cámaras aéreas especificaron las coordenadas y después los proyectiles fueron lanzados. Es un uso estereotípico de los morteros que encuentras en un libro de texto.

Sin embargo, lo que sucede después no está en los libros.

Por alguna razón, la parte superior de la torre de vigilancia queda cubierta con un líquido blanco y pegajoso.

Quenser y la Uniforme Negro comienzan a temblar. Finalmente comprenden lo que han hecho los rebeldes.

“¡¡E-ese bastardo!! ¿¡Acaso quitó las balas de pintura rojas y las reemplazó con blancas!? ¡¡Y las convirtió en algo espeluznantemente pegajoso!!”

“¡¡Eee!! ¡Huele extraño y no puedo quitarlo de mi cabello!”

Quenser ni siquiera necesita la radio para escuchar los gritos de la soldado a cargo del deber de prevención que sostiene una pistola automática ligera en la torre de vigilancia.

Los rebeles parecen estar siguiendo la teoría estándar de provocar la mayor confusión al inicio del ataque. Los sonidos de disparos de rifles de asalto resuenan desde múltiples direcciones.

“C-creo que todas sus balas de pintura serán así, ¿pero tú qué opinas?”

“Concuerdo un 100%,” dice Quenser.

“¡¡En ese caso, creo que deberías idear una ruta de escape para proteger mi dignidad como mujer!! Los camarógrafos del campo de batalla de este pacífico mundo están apuntando cámaras como bazucas hacia nosotros, ¿recuerdas? ¡¡No quiero estar en la portada de las noticias con mi cara cubierta con esa cosa pegajosa!!”

“¡A los chicos tampoco nos gusta ser manchados con algo blanco y pegajoso! ¡¡De cierta forma, es incluso peor para nosotros que para las chicas!!”

Pero gritarse entre sí no acabará con la batalla.

Quenser guarda su cuchillo militar que tiene una hoja de hule negra y comienza a moverse con la chica de los Uniformes Negros.

***

Froleytia Capistrano es una soldado de alto rango de cabello plateado y pechos gigantescos. Mientras fuma de su kiseru en el cuarto de control de operaciones, responde a una pregunta de uno de sus subordinados.

“Bueno, si en verdad no quisieras evitar ser golpeado, nadie pelearía seriamente.”

***

Número de simulación 101 (b).

“¡Hee hee hee hee hee! ¡Si eliminamos a la princesa, seremos liberados de esas raciones insípidas por una semana! ¡¡Podremos comer tanta carne asada y camarones con ajo como queramos!!”

Heivia y los demás avanzan por debajo de los vehículos. Es una ruta diferente para recorrer la zona base de mantenimiento que está conformada por más de cien vehículos. Éstos dejan un espacio de más de dos metros sobre el suelo, así que los soldados pueden permanecer de pie mientras corren y pueden ocultarse detrás de los gigantescos neumáticos.

Myonri apunta su arma de defensa personal aquí y allá mientras avanza cuidadosamente y tose ocasionalmente.

“Ugh. ¡Cof! Este gas es terrible. ¿No terminaremos envenenados por monóxido de carbono, cierto? ¡No quiero morir en una misión de entrenamiento!”

“¡El cuerpo humano es muy resistente! ¡No te preocupes!” responde Heivia.

Entonces el chico envía una señal a los otros dos soldados con ellos; una chica con pecas y un hombre musculoso.

“¡Girly, Basic! Atráiganlos desde la izquierda. ¡¡Una vez que salgan de detrás del neumático, les dispararé!!”

Siguiendo las instrucciones de Heivia, una granada es lanzada detrás del neumático.

Una vez que una chica de edad de preparatoria corre apresuradamente para escapar de la explosión (blanca y pegajosa), él chico dispara balas de pintura sin misericordia.

“¡Detente! ¡¡En la cara no!!”

¡Fwa ha ha ha ha! ¿¡Entonces debería disparar entre tus enormes tetas!?”

Viajando por debajo de los vehículos les permite ignorar casi por completo cualquier bombardeo que vuele formando un arco en forma de parábola cayendo desde el cielo.

Pero hay una mayor razón por la cual eligieron esa ruta. “¡Myonri! ¡¡Prepara la herramienta en tu espalda!!”

El chico señala hacia arriba.

“Estamos directamente debajo de las instalaciones especiales para Élites. ¡Entremos desde abajo como planeamos!”

“Oof… Esas instalaciones son creadas conectando varios vehículos diferentes, ¿cierto?”

Y si introducimos la herramienta para abrir puertas en la unión entre vehículos y la abrimos por la fuerza, podremos entrar. ¡¡Si ellos aún la mantienen aquí como parte de la Fase 1, este será jaque mate!!”

Heivia carga a Myonri sobre sus hombros y la chica presiona la herramienta especial contra la parte inferior del vehículo que parece un grueso techo metálico. Como un arma anti búnker, la parte del “pico” usa explosivos para insertarse y después un motor abre “el pico” y separa con fuerza los paneles metálicos que están alineados perfectamente.

“Ahh, ahh. ¡Esto está destruyendo el metal! ¿¡En verdad deberíamos hacer esto en una batalla de prueba!?”

“No recuerdo que me dijeran que no destruyera el equipo. De hecho, esa comandante de enormes pechos fue la que nos dijo que hiciéramos esto tan real como fuera posible.”

Abren un espacio lo suficientemente grande como para que entre una persona. La pequeña figura de Myonri es empujada hacia arriba primero y ella después estira una mano para ayudar a Heivia a entrar.

Girly es cargada por Basic, pero Basic es demasiado grande como para caber por el espacio.

Después de enviar a Basic a encontrarse con otro equipo, Heivia y las dos chicas comienzan a revisar las instalaciones para Élites.

“Éste es un método brillante. …Aunque sería como un boleto sin regreso para cualquiera intentándolo de verdad.”

El interior está repleto de muebles de clase alta que se ven fuera de lugar en unas instalaciones militares.

El diseño se parece al de una aldea erigida únicamente con caoba. Cuando Heivia visitó el lugar con Quenser dos semanas antes, era un lugar estéril repleto de blanco y el panorama era completamente diferente. Tal vez lo hicieron para que concordara con la condición mental de la princesa para evitar un ataque, pero fue creado para ser totalmente modificado en un corto periodo de tiempo.

“¿Si esto puede ser reacomodado, significa que podemos destruirlo con la herramienta para derribar puertas?”

“Esto no servirá para nuestro entrenamiento. Las balas de pintura no pueden atravesar muros.” Heivia y las chicas terminan su búsqueda en el primer piso rápidamente.

Cuentan el número de salidas, colocan trampas en cada una y se dirigen a las escaleras. Antes de avanzar, Heivia toma un animal de peluche y lo lanza hacia adelante. Como esperaba, provoca varios disparos.

Aun cubriéndose, dispara varias veces hacia las escaleras. “¡Myonri! ¡¡Lanza una granada a mi señal!!”

Heivia deja de disparar para evitar fuego aliado, Myonri se asoma en su lugar, y lanza una granada hacia el piso superior.

Una explosión acuosa y varios gritos resuenan. “Oh.”

“¡¡Idiota!!”

Cuando Girly se asoma por las escaleras, Heivia y Myonri la jalan hacia atrás. Varios disparos resuenan desde el piso superior.

“¡¡No bajes la guardia hasta estar segura que han muerto, idiota!!”

“¿¡Era necesario llamarme idiota dos veces!?”

“¡¡Esto es importante!! ¡Y si hubieras sido un chico, no te hubiera salvado, así que deberías agradecerme! ¡¡Idiota, idiota!!”

“¡¡Si lo dices así, suenas como un tsundere!!”

“¡¡Di eso otra vez y te dispararé a la espalda!!” Grita Heivia mientras señala hacia arriba. “Myonri, usa la herramienta en el techo.”

“¿Eh? Pero no hay divisiones ahí, así que no puedo separarlo.”

“Las personas allá arriba no saben eso. ¡Tú intimídalos y yo los eliminaré mientras se preparan para correr!”

Myonri hace lo que le dicen e inserta bruscamente el “pico” en el techo.

Un ruido seco resuena y los soldados guardaespaldas comienzan a dirigirse a un lugar más seguro, pro Heivia los saca de combate con precisión desde la parte baja de las escaleras.

“¡Despejado, despejado! Continuemos.”

“¿¡Por qué diablos eres un analista de radares!? ¿No te sentirías más cómodo en un escuadrón de asesinato VIP?”

“¿Puedes estar sentado todo el día en una habitación con aire acondicionado en un escuadrón así? Si no, entonces paso.”

Suben las escaleras y se encuentran con tres guardaespaldas cubiertos con una pegajosa pintura blanca. Éstos alzan las manos con expresión decepcionada.

“¿En dónde está, maldición? La princesa debe estar ocultándose en algún lugar por aquí. ¡¡Encuéntrenla!!”

La misión consiste en proteger a la Élite, pero no queda claro si ella lleva un arma o no. Existe una gran probabilidad de ser atacados desde un closet o un refrigerador.

Después de llegar tan lejos, sería una pena perder el bono por dispararle a la chica, así que Heivia y los demás revisan cada habitación con cuidado.

“¡Despejado!”

“¡Despejado!”

“¡También aquí está despejado! ¡Mierda! ¿¡Por qué todo está despejado!? ¿¡En dónde está ocultándose la princesa!?”