Kono Yuusha (NL)

Volumen 7

Capitulo 31: Dentro De La Oscuridad

 

 

El primer día de entrenamiento.

Seiya y Natosus están uno frente al otro mientras hablan en el oscuro sótano del Santuario de los Seis Reinos. Me froto los ojos privados de sueño mientras los miro. No pude dormir mucho anoche porque estuve dando vueltas en la cama toda la noche. Cerceus se inclina para verme mejor.


“No dejes que esto te desanime, Rista. Todos se tiran pedos. Saco alrededor de cincuenta al día”.

Cerceus puede estar tratando de hacerme sentir mejor, pero solo quería darme prisa y olvidarme… ¡Espera! ¿Cincuenta veces al día? ¡¿Qué tipo de máquina de pedos es este tipo?!

“De todos modos, me alegro de que Seiya pueda aprender el movimiento por sí mismo. Habría sido demasiado para nosotros”.

“Puedes decir eso de nuevo”.

Unas cuantas manos espeluznantes crecen del suelo de piedra un poco lejos de nosotros y se retuercen. El vigilante Natosus mueve su mandíbula huesuda y explica:

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“Estas son Manos Fantasmas”.

“Hmm… podría usarlos para sellar el movimiento del enemigo”.

“El simple hecho de tocar una deidad o un ángel con estas manos los dañará”.

Las manos que se retuercen me recuerdan a Celemonic de Ixphoria. Ella usó un movimiento similar, ahora que lo pienso. Hmm… Esto no es realmente un movimiento heroico si me preguntas. Contrario a mi escepticismo, los ojos de Rosalie brillan de vida.

Kono Yuusha Volumen 7 Capitulo 31 Novela Ligera

 

“¡Increíble! ¡Deberíamos poder atravesar la defensa del Señor Dragón y la Gran Madre con este movimiento!”

… Natosus termina otorgando solo a Rosalie y Seiya un aura oscura. Después de todo, Seiya solo nos trajo a Cerceus y a mí como seguro en caso de que no pudiera aprender el movimiento, así que en sus palabras: “Ustedes dos son absolutamente inútiles para mí ahora”. ¡Sin embargo, hay formas más amables en las que podría haberlo dicho! Después de cantar y deshacerse de las manos de la oscuridad, Natosus se coloca en su ominosa silla hecha de hueso.

“Sin embargo, tengo un movimiento aún más aterrador que este. ¿Quieres que te enseñe?”

“Definitivamente. Sin embargo, no tiene ningún efecto dañino dependiendo de cómo lo use, ¿verdad?”

“Te lo dije. Mi aura oscura te protegerá”.

Empiezo a sentirme un poco preocupada, así que interrumpo su conversación.

“H-Hey, Seiya. Independientemente de lo seguro que sea, tal vez no debería usar habilidades oscuras. ¿No te parece? Quiero decir, tú eres el héroe, después de todo…”


Intento acercarme a Seiya mientras hablo cuándo, de repente, una mano negra como boca de lobo aparece en la oscuridad entre nosotros.

“¡¿Ack?! ¡Natosus, vamos! ¡Me asustaste!”

“No fui yo”.

“¿Eh?”

No puedo creerlo, pero cuando miro en dirección a Seiya, su dedo índice está erguido. Cada vez que lo mueve, la mano debajo de mí se mueve al unísono. Natosus da una palmada seca con sus manos huesudas.

“¡Wow! ¿Lo dominaste con solo verme hacerlo?”

“No llamaría a esto dominarlo. Necesito entrenar hasta que pueda crear miles de estas manos de color negro azabache como la hierba que crece en un campo”.

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“¡¿Q-Qué vas a hacer con mil manos extra?!”

“¿Puedes callarte ya?”

Seiya vuelve una mirada distante hacia Cerceus y hacia mí.

“Solo Rosalie y yo necesitamos entrenar. Vuelve a la casa de Uno”.

“¡Okay! ¡Hasta luego!”

“¡¿Cerceus?! ¡¿Por qué estás actuando como si esto no tuviera nada que ver contigo?!”

“Creo que sería mejor para nosotros volver, ya que Seiya nos dijo que lo hiciéramos”.

“No. ¡Solo quieres hornear!”

Cerceus y yo hablamos de la decisión de Seiya hasta que dos manos sombrías brotan del suelo a nuestro alrededor.

“¡¿Eek?!”

“Si no vas a regresar, entonces voy a probar cuánto daño hacen estas manos cuando tocan una deidad”.

“¡R-Rista, vámonos! ¡No deberíamos interponernos en su entrenamiento!”

Después de que Cerceus sube corriendo las escaleras como si estuviera huyendo, la mano sombría me ahuyenta también. ¡E-El realmente sabe cómo hacerme enojar!

“¡Será mejor que vuelvas a casa de Uno con buenas noticias!”

A regañadientes, giro sobre mis talones, dejándolo con ese patético disparo de despedida.

***

 

 

El segundo día de entrenamiento. Mediodía.

Cuando me dirijo a la sala, Rosalie ya está sentada en el sofá. Tiene la cabeza gacha y es obvio que no se siente bien.

“Um… ¿Rosalie? ¿Qué pasó con el entrenamiento?”


“… Me dijo que ya no necesitaba venir”.

“¿Qué? ¿En serio?”


“Mientras Natosus me estaba enseñando cómo crear las Manos Fantasmas ayer, el Héroe parecía estar practicando un movimiento diferente en la distancia. Sin embargo, después de un tiempo, se acercó y me dijo que podía irme”.

Rosalie deja escapar un profundo suspiro lleno de dolor.

“Debe haberse cansado de esperarme, ya que soy un aprendiz lento. A decir verdad, al final ni siquiera pude manifestar una sola mano de oscuridad”.

“Hmm… no creo que debas dejar que eso te moleste. Sabes como es. Es impredecible, incluso impulsivo”.

Justo cuando finalmente superé la crisis de los pedos, ahora me entero de que Rosalie está deprimida. No mucho después de eso, Cerceus entra con un poco de café para nosotros. Decido pasar algo de tiempo en la sala de estar mientras trato de animar a Rosalie, pero no importa cuánto tiempo pase, Seiya no regresa al lugar de Uno.

Le dije que sería mejor que regresara con buenas noticias, pero todo lo que hizo fue enviar a Rosalie a casa. ¿Qué diablos está haciendo Seiya?

Después de hacer algunos sándwiches, me dirijo al Santuario de los Seis Reinos solo para ver cómo está Seiya. Saludo al guardia, luego me dirijo hacia la escalera que conduce al Corredor Infinito cuando…

“¡¿Guh?!” Instintivamente grito… ¡porque innumerables manos negras crecen de las escaleras! ¡Los cien o más manos me ahuyentan!

¡¿Seriamente?! ¡Cómo se atreve a burlarse de mí de esta manera!

Pero en cierto modo, las manos que crecen como hierba son una prueba de que el entrenamiento de Seiya va bien. Si bien es extremadamente frustrante, supongo que esta es la forma en que Seiya me dice que está mejorando.

“O-Oye, um… te traje unos sándwiches…”

Después de que tímidamente le entrego la canasta envuelta a una de las manos, inmediatamente se la pasa a otra, luego a otra hasta que llega al final de la escalera. ¡Es como una brigada de baldes! Después de ver la escena surrealista, decido regresar a casa decepcionado.

***

 

 

El tercer día de entrenamiento.

Seiya no ha vuelto al lugar de Uno desde que comenzó a entrenar. He estado tratando de no pensar en él últimamente mientras entrena para poder concentrarme, pero este movimiento oscuro que está aprendiendo tiene demasiadas incógnitas. No puedo evitar preocuparme. Aunque espero que las manos vuelvan a ahuyentarme, decido hacerle algunas bolas de arroz y regresar a la escalera del sótano. Sin embargo, cuando llego allí, no hay ni una sola mano sombría esperándome en la escalera.

Estamos hablando de Seiya, así que me pregunto si no hay otras trampas…

Bajo silenciosamente las escaleras sin hacer ruido, pero no hay nada fuera de lo común. Parece que pensé demasiado en la situación. Sin embargo, puedo escuchar a Seiya y Natosus hablando en la distancia.

“Lo dominaste. Todo lo que necesita hacer ahora es ser creativo y aplicarlo a sus necesidades”.

“Sí.”

“¿Pero estás seguro de que te enseño que esta fue la decisión correcta?

¿De verdad crees que alguna vez necesitarás usar una habilidad prohibida como esta?”

¡¿Una habilidad prohibida?! ¡¿Que…?!

Me escondo en las sombras mientras trato de escuchar a escondidas cuando…

“Espera, Natosus. Alguien está aquí… Rista, eres tú, ¿no?”

¡¿… ?! ¡¿Cómo lo supo?!

Siento como si mi corazón palpitante fuera a saltar fuera de mi garganta, pero de repente recuerdo por qué vine. Tengo bolas de arroz para Seiya, así que me acerco a él como si no pasara nada y le ofrezco la bolsa del almuerzo con una nota alegre en mi voz.

“¡Oye, Seiya! ¿Cómo va el entrenamiento?”

“Ya dominaba la habilidad oscura que quería aprender, así que mi entrenamiento aquí está terminado por ahora”.

… Y, sin embargo, todavía no dice su frase distintiva, lo que me hace pensar que todavía hay algo que quiere hacer. Seiya comienza a subir las escaleras sin siquiera mirar a Natosus.

“¡S-Seiya, espera! … ¡Gracias, Natosus!”

“Sí. Nos vemos.”

Le digo adiós a Natosus en nombre de Seiya, luego me apresuro a subir las escaleras detrás de él.

***

 

 

Después de regresar a la casa de Uno y preparar una muda de ropa junto con algunos otros artículos, Seiya nos reúne a todos en la sala de estar. Luego me mira en el momento en que tomo asiento en el sofá alrededor de la mesa.

“Rista, quiero ver el pasado de Mash una vez más antes de regresar a Gaeabrande”.

“¡¿Qué?! ¡¿De nuevo?!”

… Me veo obligada a pararme frente a la pared como la última vez antes de que me golpeen en la cabeza una y otra vez. Sin embargo, no obtenemos ninguna información valiosa sin importar cuántas visiones tenga. Veo a Mash bañándose como un niño, a Mash durmiendo como un bebé, e incluso una repetición de cuando su abuela estaba haciendo su pañuelo.

“¡¿Quién pidió cuidar esta basura?!” se queja Cerceus. Inmediatamente me cubro la cabeza y grito:

“¡He tenido suficiente! ¡Mi cabeza va a explotar si hacemos esto más!”

“Solo una vez más, y podemos dar por terminado el día”.

Pero la última visión que tengo es la de un Mash adulto destruyendo una ciudad humana. Sostiene a Igzasion cubierta de sangre mientras una mujer suplica por su vida mientras sostiene a un bebé.

“¡Por favor! ¡No me importa lo que me pase! ¡Solo perdona a mi hijo!”

“Hmm… Déjame pensar en eso”.

Mash inmediatamente clava su espada en el pecho de la mujer. Ella cae al suelo mientras su bebé llora. Mash frunce el ceño como si el ruido lo estuviera molestando, luego balancea su espada sin siquiera un momento de vacilación. Se ríe como si acabara de darse cuenta de algo.

“Sí, debería haber matado al bebé primero. La mujer habría sufrido mucho más. Soy un idiota. Me equivoqué en el orden”.

Mash continúa masacrando a los humanos mientras se ríe como lo hizo en la Aldea Nakashi. Incluso aquellos que suplican por sus vidas son cortados en pedazos sin descanso.

¡Qué cruel!

“Rista, no detengas la visión pase lo que pase”.

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Quiero taparme los ojos, pero no tengo más remedio que proyectar esta visión en la pared hasta que Mash abandone la aldea.

“Hff…”

Mi corazón se hunde ante las imágenes bárbaras, y Cerceus habla con disgusto:

“Eso no es Mash. Eso es un monstruo. Lamento haberle hecho un pastel”.

“Exactamente, Cerceus. El Señor Dragón es una ilusión de un mundo deformado que ni siquiera merece existir. Deshacerse de él no es un problema”.

“¡Derrotemos juntos la raíz de todos los males!” dice Rosalie.

Los tres comparten el mismo sentimiento después de ver las acciones violentas de Mash. De repente, recuerdo algo y tímidamente le digo a Seiya:

“O-Oh, oye. Olvidé decírtelo, pero el otro día tuve un sueño sobre Mash y Elulu”.

“No me interesan tus sueños”.

“¡Vamos, no digas eso! ¡Sólo escucha! Porque… ¡creo que el Mash de este mundo también podría estar sufriendo!”

La mandíbula de Cerceus cae mientras Rosalie frunce el ceño.

“¿Eh? ¿No viste lo que acaba de hacer? No parecía que estuviera sufriendo en absoluto. En todo caso, parecía que estaba disfrutando de la matanza”.

“Eres realmente una diosa amable, pero no necesitas sentir ninguna empatía hacia el Señor Dragón”.

“Tienen razón, Rista. Bajar la guardia podría costarle la vida”.

“¡No voy a bajar la guardia! ¡En mi sueño, Mash me dijo que lo salvara!

¡Elulu también dijo que no podrás salvar al mundo si continúas por este camino!”

“¿No seré capaz de salvar al mundo?”

Después de que la ceja de Seiya se moviera, me lanzó una mirada escalofriante.

“¿Estás segura de que no es simplemente así como te sientes?”

“¡N-No…! ¡No lo creo…!”

No puedo decir con certeza que esto no esté todo en mi cabeza. Honestamente, no tengo idea de qué fue eso. Seiya me mira fijamente mientras me quedo sin palabras y deja escapar un “hmph”.

“N-No tienes que mirarme así”.

“Ya he visto suficiente. Si bien esto terminó siendo una pérdida de tiempo nuevamente, aún pude aprender una habilidad oscura después de conocer la debilidad de Mash por casualidad la última vez. Derrotar a la Gran Madre no debería ser un problema después de un día de descanso para reponer mi maná”.

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“¡¿En serio?! ¡¿Eso significa que finalmente estás preparado para ir?!”

Miro fijamente a Seiya, esperando a que diga la línea con gran anticipación, pero él gira la cabeza lejos de mí y murmura suavemente:

“Estoy PP.”

¿Acaba de abreviar su eslogan por despecho? ¡¿Cuál es su problema?!

¡¿Más importante, “PP”?!

A la mañana siguiente, abro una puerta a Iglu, y seguimos a Seiya mientras nos dirigimos al final de la ciudad.

“Ahora que lo pienso, esta será la primera vez que veamos la barrera alrededor de Iglu”.

Sin embargo, Seiya ni siquiera mira hacia atrás cuando hablo con él. Está más callado que de costumbre, como si estuviera enojado. Continuamos dirigiéndonos hacia las afueras de la ciudad mientras un incómodo silencio se cierne sobre el aire. Siempre estuvimos en el corazón de la ciudad cuando llegamos por primera vez, pero cuanto más nos acercamos a las afueras, más clara se vuelve la barrera. Es como si toda la ciudad estuviera rodeada de placas de vidrio pulidas. Miro a Rosalie, que camina a mi lado.

“Así que esta es la barrera de Iglu, ¿eh? Es un poco confuso, así que no puedo decir qué está pasando al otro lado”.

“Eso fue hecho por diseño. Esto hace que sea imposible ver lo que sucede dentro de la ciudad desde el exterior. La barrera de Iglu solo permite que los materiales naturales y la luz solar pasen por el bien de nuestra supervivencia, pero bloquea la entrada de todas las formas de vida”.

“Maldita sea. Deben haber pensado mucho en hacerlo”, dice Cerceus con admiración en su voz. Rosalie coloca una mano en la pared de la barrera y asiente.

“Aunque estamos a punto de salir, no quitaré la barrera en sí. Simplemente usaré un hechizo sobre nosotros que nos permitirá atravesarlo”.

Supongo que eso significa que la barrera no se ha bajado ni una vez, entonces. Hmm… Es un sistema de seguridad realmente estricto. No es de extrañar que hayan podido mantener alejados a los dragonewts todos estos años.

Rosalie extiende su mano y canta. Realmente no me siento diferente, pero aparentemente ahora puedo atravesar la barrera. De repente, Seiya finalmente habla.

“Rosalie, ¿hay alguien más que pueda operar la barrera?”

“Sí, el viejo jefe de la aldea de Edona, Graham, también puede”.

“Ya veo.”

Mi curiosidad se apodera de mí.

“Oye, Seiya. ¿Puedo preguntar por qué querías saberlo?”

“No tiene nada que ver contigo”, responde Seiya sin siquiera mirarme. Parece que realmente ha estado de mal humor desde ayer. Probablemente esté pensando en lo idiota que soy por preocuparme por las ilusiones en un mundo deformado, sin importar cuántas veces me diga que no lo haga.

Pero todavía puedo escuchar la voz de Elulu desde ese sueño en mi cabeza. Sin embargo, eso no significa que sepa lo que debo hacer. Después de todo, tenemos que matar, no salvar, a Mash para restaurar Gaeabrande a su estado original. Esa es la dura verdad del asunto.

Mientras me preocupo por mí mismo, Seiya comienza a darnos órdenes de una manera práctica.

“Todos deben volverse invisibles con la excepción de Rosalie, quien tomará la iniciativa”.

“¡¿Qué?! ¿Estás de acuerdo con eso, Rosalie?”

Me preocupo por ella, ya que va a ser la única visible, pero me sonríe gentilmente.

“Tiene que haber alguien que tome la iniciativa, o todos nos separaremos”.

“S-Sí, pero…”

Puedo sentir los ojos de Seiya haciendo un agujero en mi espalda, así que decido dejar de hacer preguntas y guardar silencio.

Cerceus y yo nos volvemos invisibles después de Seiya, luego comenzamos a seguir el ejemplo de Rosalie. Cuando atravesamos la barrera, hace un sonido sordo como si estuviéramos atravesando un portal. Pero el mundo exterior es aterrador. Dondequiera que mire, veo innumerables cuerpos sin vida de demonios y dragonewts… fuegos humeantes… el olor a sangre. Solo había una barrera que separaba a Iglu del infierno.

¡Ack! ¡No tenía idea de que el mundo exterior está en un estado tan miserable!

Me quedo en mudo asombro. Cerceus también parece no tener palabras, pero después de unos momentos, Seiya comenta con calma:

“Rosalie, hay demonios y dragonewts peleando aproximadamente a trescientos metros al noreste de aquí. Empiece a dirigirse en esa dirección. Despacio.”

“¡Sí señor!”

Puede que me sorprenda ver tanta muerte, pero estoy seguro de que Seiya ya ha enviado Automatic Phoenixes y salamandras de fuego para explorar el área. Rosalie comienza a caminar lentamente hacia adelante, tal como se lo ordenó Seiya.

Aquí hay muchos más cadáveres de demonios que dragonewts. Parece que los dragonewts están cerca de exterminarlos, como dijo Mash. Debe haber habido una batalla feroz aquí. Ni siquiera parece haber un solo sobreviviente. Solo hay cuerpos. Me aseguro de no pisar ninguno de ellos mientras camino.

“¿Hofff?”

Salté, sorprendida por el repentino y ridículo grito de Cerceus, pero Seiya lo reprendió antes de que yo pudiera.

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“Cerceus, baja la voz. Gritar derrota todo el sentido de ser invisible”.

“¡L-Lo siento! ¡Pero Seiya, mira!”

Estoy seguro de que Cerceus está apuntando a algo, olvidándose de que no podemos verlo… Independientemente, Rosalie inspecciona el área hasta que parece notar ese algo también.

“¡Este cuerpo…!”

El cadáver de un demonio yace en el suelo más adelante. Es uno que conocemos muy bien. Es la mitad superior cortada del demonio de seis brazos, el General Eraser Kaiser.

“Incluso un demonio del nivel de Eraser era… La Gran Madre debe haberle hecho esto”.

“Voy a examinar el cuerpo. No te muevas hasta que yo te lo diga”.

Seiya comienza a examinar el cuerpo de Eraser mientras aún es invisible. Debe estar tocando el cuerpo de Eraser porque sus brazos de repente comienzan a moverse y a flotar en el aire. Es una vista espeluznante. Pasados unos momentos, Cerceus pregunta:

“Seiya, ¿averiguaste algo?”

“Sí. Siempre está muerto cuando lo encuentro, como cuando luchó contra el emperador”.

“¿Eso es en serio todo lo que descubriste después de examinar su cuerpo?” Eso es lo que quiero decir, pero decido callarme, ya que Seiya ya está de mal humor. Quizás él mismo se dio cuenta por los momentos de incómodo silencio, y agrega:

“Por supuesto, eso no es lo único que descubrí. Sus heridas están extremadamente hinchadas. Estos son diferentes de las quemaduras causadas por la magia de fuego. Parece que fue golpeado por una habilidad sagrada. Necesitamos ser aún más cuidadosos de ahora en adelante. No bajes la guardia solo porque eres invisible”.

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Rosalie comienza a caminar una vez más bajo las órdenes de Seiya. No pasa mucho tiempo antes de que podamos escuchar los sonidos de la batalla y ver un grupo de dragonewts junto con la luz parpadeante de la magia.

“Detente aquí. Rosalie, tú también te vuelves invisible”.

“Pero, cómo voy a liderar si—”

“Tu trabajo está hecho. Encontré el objetivo”.

Cuando forzó la vista al grupo de dragonewts, noto a dos individuos en el medio: Chaos Machina con una expresión inquieta y la Gran Madre vistiendo atuendos de sacerdotisa.

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