Haken no Kouki Altina (NL)

Volumen 7.5

Capitulo 3: Auguste, la Princesa Plateada II

Parte 4

Damian preparó su espada.

“Si tienes una habilidad tan notable, ¿por qué te callas cuando los demás se burlan de ti? Los humanos vivirán un centenar de años como máximo, y su población seguirá aumentando si se los deja solos, al igual que los ganados”.

“Hay personas que matarán a otros por el bien de la supervivencia. Pero no soy ese tipo de persona. No tengo la necesidad y no haré algo que odio”.

“Escogerás esa forma de vida si naces como un noble eh…”

“Puedo empatizar con los pobres convirtiéndose en unos mercenarios. Pero no permitiré que mates a la gente buena sin miramientos”.

“¿Soy pobre? Tienes una vista tan estrecha Duque, no me convertí en un mercenario porque soy pobre”.

Eddie nunca había conocido a alguien como este. Él no conocía ningún mercenario en primer lugar. Damián continuó:

“Nací en una Casa de Conse y viví sin libertad. Todos los días eran aburridos, como si estuviera encerrado en una prisión. Un día, maté a un sirviente, y finalmente sentí que realmente estaba viviendo en este mundo”.

“Tal cosa… Ya no eres normal”.

“Lo entenderás si matas a alguien. Con solo quitarle la vida, descubrirás que todos tus problemas se han ido”.

“Qué estúpido, estarás atrapado en un infierno de arrepentimiento si sigues pensando en los demás”.

“Estoy acostumbrado a no ser entendido”.

“Qué casualidad, yo también… Pero esa es la razón por la que quiero proteger a las personas que me entienden, y no voy a dejar que se salgan con la suya”.

“Amor eh, también tengo a alguien que amo”.

“Tienes a alguien a quien amas, eh… Entonces debes comprender cuán preciosa es la vida”.

“Ahh, mi primer amor era una joven sirvienta… que fue la primera persona que maté”.

“¿¡Ughh!?”

Está loco, Eddie no pudo decir nada. Él ya no era un humano.

“Ya es suficiente con el cuchicheo, volviendo al tema principal. Tomaré sus vidas… ”

“¡Nunca!”

“¡Tú, un duque que solo conoce un campo de batalla suave! ¿Me puedes matar?” Damian levantó su espada.

“¡Hahhhh!”

“¡Hee!”

Eddie intentó bloquear la espada.

Al bloquear y girar, podría romper la espada de su oponente. Unos pocos centímetros antes de que las espadas colisionaran — Damian retiró su espada.

Él alteró el camino y renovó su hoja. Pero Eddie esperaba este engaño.

Cambió su postura para detener la espada de su oponente. Asumiendo que la espada continuaría en este mismo camino, Eddie estaba seguro de poder bloquearla.

“¿Defender es todo lo que puedes hacer?”

“¡Ese es mi trabajo!”

“¡¡Hah!!”

Otro corte vino desde arriba.

Eddie también lo bloqueó esta vez, pero su cuerpo estaba presionado.

El sonido agudo de metal moliéndose sonó.

Después de bloquear la espada de Damian, el borde irregular de la espada tesoro se aferró con firmeza.

“¡Lo tengo!”

“¡Demasiado ingenuo, Duque!”

Damian soltó su espada antes de que se rompiera.

Y sacó una daga desde la parte posterior de su cintura.

Eddie ya había perdido el equilibrio cuando trató de defenderse de la espada de su oponente.

Y no pudo contrarrestar rápidamente. Damian empujó con su daga. “¡¡Muere–!!”

“¿¡!?”

Felicia y Lilim estaban en la cama detrás de Eddie, así que no podía correr. Eddie agarró la espada que Damian abandonó.

La daga se acercó sobre su corazón. No había forma de esquivarla.

Eddie golpeó con ambas espadas a Damian. Entonces, vino el sonido de la carne siendo cortada.

Las dos espadas se hundieron profundamente en los hombros de Damian.

La daga de Damian luego pasó por el pecho de Eddie y por el costado de sus costillas.

La sangre se escapó. Damian gimió de odio.

“Movimientos decisivos… ¿Viste a través de mi ataque…?”

“Muchas generaciones de mis predecesores trabajaron para perfeccionar esta técnica y ganar fama increíble. No vi a través de tus movimientos, ni se me ocurrió esta técnica”.

“… Mátame.”

“Me niego. Dime quién ordenó el asesinato del Príncipe”.

“Moriré por el veneno de todos modos”.

“E-Erm…”

“¡Y tú también!”

La daga de Damian que erró el blanco debido a la defensa de Eddie giró en su mano, y apuñaló hacia Eddie.

No hay tiempo para dudar. Eddie —

Soltó ambas espadas.

Y evadió la daga como si estuviera cayendo.

Luego pateó el abdomen de su adversario desde una posición extremadamente baja.

“¿¡Ah!?”

Damian fue enviado volando.

Las espadas cayeron al suelo.

Eddie recogió la espada tesoro y se levantó de inmediato. Damián se levantó lentamente y rió siniestramente. “Fufu… Perdí… Perdí…”

Él estaba sangrando mal desde sus hombros, y la daga todavía estaba en su mano. Eddie tomó una postura a pesar de que era innecesario.

“Si admites tu derrota, arroja tu daga. Luego deberías encontrar un abogado para defenderte ante el tribunal”.

“Ya lo sabías, ¿cierto?”

“¿¡!?”

Lord Baudouin — Eddie recordó las órdenes de reasignación.

“Pero no tengo intención de ir a la corte o dejar alguna evidencia”. Damian sacó algo de su mochila y lo puso en una vela.

Eddie abrió los ojos. “¿¡Eso es…!?”

¿Petróleo? ¿Él quiere quemar el Anexo? Es cierto que no habría ninguna evidencia si se quema…

“Es pólvora, Duke”.

“¿¡!?”

Eddie cargó contra la cama para proteger a Felicia y Lilim. Una explosión ocurrió de inmediato.

El cuerpo de Damian no se encontraba por ningún lado.

Fue lo mismo para los asesinos heridos a su alrededor. El vidrio en las ventanas también se hizo añicos.

El toldo en la cama fue volado, la cama y el techo estaban hechos jirones. Un incendio estalló en el Anexo conocido como Panier.

***

Unos días más tarde —

Eddie visitó una habitación en el Palacio a la hora señalada. “Perdóname.”

“… Sí”.

La puerta se abrió, y Felicia estaba vestida como Auguste. Una sonrisa apareció en su rostro serio.

“… ¿Todavía duele?”

“Ahh, está bien”.

Todos en la sala ya sabían el secreto, por lo que no había necesidad de formalidades.

Además de Eddie y Felicia, Lilim también estaba presente.

Se recuperó de manera segura y continuó trabajando como sirvienta y estratega de la sombra de Auguste.

“Príncipe Auguste, lo esperaré afuera”.

“… Bien.”

“Le veré más tarde entonces”.

Después de despedirse, Lilim salió de la habitación en dirección opuesta a la que había venido Eddie y esperó en el pasillo.

Sus heridas todavía dolían un poco, pero su desintoxicación progresaba sin problemas.

Qué afortunado.

“… Es genial que tanto Eddie como Lilim recibieran tratamiento médico a tiempo”.

“Así es, el veneno se habría propagado si hubiera sido un poco más tarde”.

No tenía intención de agradecerle a Damian, pero no tuvieron que perder el tiempo para llamar a los médicos debido a su explosión.

Cuando recuperó la conciencia, el fuego ya estaba apagado. Fue llevado fuera de los escombros del Anexo, y tratado por los doctores.

Felicia se le acercó lentamente vestida como un hombre. “… Eddie me protegió”.

“Ese es mi trabajo.”

Para todos a su alrededor, Felicia ahora era Auguste.

Fue lo mismo esa noche también – Debido al valiente esfuerzo de Eddie, ella no fue herida y evitó el riesgo de ser expuesta.

“… Mira esto.”

Se sentó en la silla y usó las botas que estaban preparadas para ella. “¿Qué?”

“Después de contarle esto a madre, ella hizo esto para mí”. Parecía que las botas normales eran un poco largas.

Después de que ella se puso de pie, Eddie encontró a Felicia más alta. “… ¿Cómo está?”

“¿Ah? Ya veo, así que las suelas te hicieron más alta, no podría decir nada”.

“¿Cierto?”

Ella tenía una sonrisa que era la misma que la que ganó en los juegos de mesa. Eddie la miró cuidadosamente de los pies a cabeza.

“Increíble, sería difícil imaginar que seas una mujer de tu altura”.

“… Siempre he tenido miedo de mostrarme en público. Pero ya no puedo hacer eso”.

“Tienes razón.”

“… Mientras Eddie esté a mi lado, ya no tendré miedo”. Felicia miró directamente a Eddie.

La cara de Felicia que se hizo más alta estaba más cerca que antes, y sin su maquillaje para fingir enfermedad, se veía hermosa.

Eddie desvió la mirada tímidamente.

“Bueno, la duración de la asignación de guardaespaldas no se ha decidido”.

“… ¿Te despedirán si llegan las órdenes?”

“Si eso sucede, abandonaré el ejército. Entonces estaré sin trabajo, pero me alegraré si puedo encontrar un trabajo con grandes beneficios”.

Felicia inhaló y se cubrió la comisura de la boca. “… Solo mantente a mi lado”.

“¿Cómo tu guardaespaldas?”

“… Si Eddie quiere, estaré bien, no importa de qué manera sea”.

“Y-ya veo”.

Una espada colgaba desde la cintura de Felicia. No era solo una espada para decorar.

Eddie la ayudó a adaptarse. “Aquí… Eso es mejor”.

“… Gracias.”

“¿Vas a asistir a la fiesta? Probablemente te encuentres con muchos problemas”.

“… Estará bien.”

“¿De verdad?”

“… Porque Eddie estará a mi lado”. Esa era una gran responsabilidad. “No tengo confianza en bailar”.

“… Yo tampoco, nunca he bailado la parte femenina antes”.

“Es verdad.”

“… Necesito mostrarles a todos que el Primer Príncipe Auguste aún está vivo. No dejaré que Latreille haga lo que quiera con el Imperio Belgaria”.

Después de asegurar la espada, Eddie estaba parado junto a ella.

“Lo sé, te protegeré”.

Eddie desenvolvió la tela que cubría la espada tesoro una vez más. Él no matará.

Pero él no odiaba blandir la espada para proteger a los demás. Sonó un golpeteo.

La voz de Lilim vino desde afuera.

“… Príncipe Auguste… La fiesta está comenzando”.

“Sí.”

Felicia caminó hacia la puerta.

“… Carlos Liam Auguste de Belgaria… Liam el decimosexto. Sir Eddie, sígame”.

“Si, mi señor.”