Jaku-chara Tomozaki-kun

Volumen 6.5

Capitulo 7: Lo Suficientemente Rápido como para Dejarlo Todo Atrás

Parte 3

Pero, ¿de qué me sentí tan aliviada? Si Tomozaki tenía alguien así, sería algo bueno. No era mi lugar para decir lo contrario. Creo que simplemente no he cambiado en absoluto, mientras el sombrío Tomozaki estaba cambiando justo delante de mis ojos. Yo me estaba poniendo incómoda… o sola … o algo así. Sí, eso es probablemente lo que estaba pasando.

¡Maldita sea! Acababa de aclarar mi mente con una buena carrera nocturna, y aquí estaba todo confundida de nuevo.

***

Después de todo eso, llegué a la tienda de conveniencia, pedí direcciones y regresé a casa a salvo. Mientras caminaba jugando con mi teléfono, me di cuenta de que podría haber usado la aplicación de mapas, pero tengo una tendencia a mirar el mapa y caminar en la dirección opuesta. Solo diré que quería la calidez del contacto humano.

¡Bien! Es hora de un buen baño para enjuagar todo ese sudor. Como soy una joven tan capaz, programé el baño antes de irme para que sea agradable y cálido cuando regrese.

Me detuve en mi habitación para coger mi ropa de descanso blanca y luego me dirigí directamente al baño. Al pasar por la sala de estar, mi mamá me llamó.

—Mi-chan, ¿te vas a bañar?

Me di la vuelta. Ella estaba tumbada en el sofá con un aspecto cansado por su día de trabajo. Su perfume de adulto flotaba hacia mí. Ella vende maquillaje en una tienda por

departamentos, por lo que su maquillaje y su peinado son muy maduros y elegantes. Su traje siempre luce perfecto también.

Ella nunca ha podido asistir a muchos días de observación de padres en la escuela porque está muy ocupada, pero estoy muy orgullosa de mi madre. Ojalá pudiera mostrársela a mis amigos.

—Sí, ¿quieres tomarte un baño tu primero?

Agitó la mano sin darse la vuelta, y la gran piedra negra en el anillo de su dedo índice brilló elegantemente.

—No, adelante. Primero quiero descansar un poco.

—Okey. No te vuelvas a dormir en el sofá.

Ella volteó su cabeza hacia mí y sonrió somnolienta. —… Voy a intentarlo.

—Ah ja ja. Tengo que vigilarte de cerca.

—Ja ja.

Cuando mi mamá sonríe, se parece un poco a un hombre guapo y elegante. Ella trabaja muy duro todos los días. Sintiéndome cálida y confusa, me dirigí al baño.

Dejando caer mi camiseta sudada y mi ropa interior en el cesto de la ropa sucia, me acerqué al baño y noté que la alfombra estaba un poco sucia.

También lo tiré a la ropa sucia y dejé uno nuevo. La alfombra nueva y esponjosa se sentía tan bien bajo mis pies. Me quité la cinta para el cabello y me la puse en la muñeca antes de entrar en la ducha.

Abrí el caño antes de desvestirme y probé la temperatura con las yemas de los

dedos. Perfecto. Dejé escapar un suspiro feliz mientras el agua se derramaba sobre mi cabeza. La pesada fatiga que se aferraba a mi cuerpo se desvaneció y volví a estar limpia y fresca. Me encantan las duchas después de correr satisfactoriamente.

Eché un poco de agua de la bañera en el espejo empañado y de repente se aclaró lo suficiente como para verme a mí misma.

—… Mmm.

Me volteé hacia un lado y me di una mirada dura de arriba a abajo, luego me di la vuelta y miré por encima del hombro.

El bronceado que había tenido hasta hace poco se había ido, y las curvas de mi cuerpo pálido y ligeramente musculoso eran más claras. Me froté el brazo izquierdo con la mano derecha, esparciendo gotas de agua por el suelo del baño.

—No está mal si me preguntas …; Murmuré.

¿Pero qué es exactamente?

Cuando me quito todo el maquillaje “natural”, los sostenes que dan forma a mi figura y el arma secreta de un uniforme escolar— Cuando estoy completamente desnuda, cuando todo lo que tengo enfrente soy yo—a veces un pensamiento me golpea.

No creo que me guste mucho.

No es una enfermedad o masoquismo o algo así. A veces tengo una sensación nebulosa. Me esfuerzo en los deportes y lo hago bien en los exámenes, y delante de todos los demás, actúo como siempre como si la estuviera pasando bien. Todo el mundo dice que es genial. Me sale más elogios que la mayoría de la gente, creo.

Pero siempre existe esta sensación subyacente de que no soy nada. Nunca desaparece, así que he dejado de luchar.

Soy como una figura de alambre hueco cubierta con adornos para obtener alguna aprobación. Y la gente está alabando las decoraciones, no a mi verdadera yo.

Pero los cumplidos todavía me hacen feliz, así que, ignorantemente, sigo agregando más. Y ahora de repente me siento superficial por poner tanto esfuerzo en mi fachada.

Hace diez años, gustarme a mí misma fue algo muy natural para mí. Es raro, es como si hubiera agotado todas mis reservas de amor propio, y ahora en mi segundo año de preparatoria, no me queda

nada. Sigo decorando por costumbre.

Miré mi cuerpo desnudo en el espejo.

Mis pechos eran bastante grandes para mi edad. Los agarré por debajo, pero ¿y qué? Puse las manos de nuevo. No es que me falta confianza acerca de mi apariencia. Probablemente tengo más confianza que la mayoría de las chicas, en realidad.

Pero si todo lo que me hace digna de cualquier cosa son la piel y músculos firmes agradables, entonces ese valor irá bajando, bajando, bajando durante los próximos diez o veinte años. Sentí que me estaba sofocando. ¿Cómo iba a llenar ese hueco? No lo sabía. Pero podría fácilmente imaginar pasar el resto de mi vida con adornos sin sentido para tapar ese miedo a pudrirme.

La gente fuerte no necesitaba nada de eso para tener confianza. ¿Cómo pude volverme así? Los rostros de Tama y Tomozaki aparecieron en mi mente.

Mi pecho se tensó y un escalofrío me recorrió.

Er, espera un segundo.

—¡Eee!

Eso no fue una metáfora. Algo literalmente frío caía sobre mi cabeza. El agua caliente de la ducha se había acabado de repente y me sacó de mi aturdimiento.

Esto había estado sucediendo mucho últimamente. Por eso me aseguré de comprobar la temperatura al principio.

Era como si el agua fría me estuviera regañando para salir de esa espiral

negativa. Maleducado. No estaba segura de si debería estar enojada o agradecida.

A pesar de los complejos sentimientos hacia mi ducha, todavía estaba en un estado mental más simple mientras me lavaba la cara, el cabello y el cuerpo. Aun refunfuñando un poco, me metí en la bañera y me empapé bien como una persona normal.

***

Como predije, cuando salí del baño, mi mamá se había desmayado en el sofá. Oh, cielos. ¿Era genial o no? Ergh.

—¡Hey, despierta!

—… Mmm.

Mi mamá se frotó los ojos somnolientos. Uh-oh, se estaba manchando el rimel por todas partes. Cuando mi madre estaba así, realmente dejaba que todo quedara suelto. Fue genial— pero tampoco un buen hábito.

—¡Hey, puedes darte un baño ahora!

—Mmm… está bien; Ella me miró solemnemente con su cara de panda, luego inclinó la cabeza hacia un lado. —Mi-chan, ¿pasó algo?

—¿Eh? ¿Qué quieres decir?

—¿Me lo estoy imaginando o te ves un poco triste?

Sobresalté un poco. Mi mamá no suele decir cosas así. Pero su sincronización fue perfecta, ya que había estado pensando en todo. Mi mamá es asombrosa.

—Uhm… algo así.

—Hmm, hmm.

Ella me miró fijamente. No me interrogó, solo esperó pacientemente. Pensé en quejarme con ella, pero decidí que aguantaría un poco más por mi cuenta.

—Pero, eh, voy a intentarlo de nuevo.

—… Ah, okey.

Ella se puso de pie y sacó su camisón de la cómoda. Luego se tambaleó hacia el baño. A medio camino allí, se detuvo, se rascó la cabeza, y se volteó hacia mí.

—¿Eh?

—Ser fuerte y simplemente lidiar con las cosas es realmente difícil a veces; Parecía un poco avergonzada, pero mantuvo sus ojos en mí. —… Pero a veces, aguantar cosas que no te gustan ayuda a que todo salga mejor, ¿verdad?

—Uhm… eso creo.

Como cuando el estado de ánimo está a punto de volverse incómodo, así que te comprometes un poco y haces el papel de animador. Cuando estás cansado, pero te sacrificas para evitar que suceda algo malo.

Creo que hago eso más que la mayoría de la gente.

—Lo que quiero decir es…; Ella hizo una pausa, como si estuviera luchando por encontrar las palabras adecuadas para eso. —Lo haces porque las cosas no van bien.

Eso encajaba con mi propia experiencia, así que tenía sentido.

—Ese es mi consejo como gerente de ventas; Ella me guiñó un ojo en broma, como lo haría yo. Me alegro de tenerla a mi lado.

—Eres tan increíble, mamá; Le dije con franqueza. Ella sonrió con orgullo. —¡Por supuesto!

—¡Eres demasiado modesta!; Le sonreí, pero no pude evitar sentirme feliz. —Todo lo que tenías que hacer era mirarme a la cara y lo sabrías todo.

Por primera vez, ella apartó la mirada. —Oh, ¿e-eso?

¿Eh? ¿Por qué está actuando raro?

—… ¿Estás escondiendo algo?; Pregunté.

Su expresión cambió, como si la hubieran sorprendido con las manos en la masa. Para un adulto, ella sí que es fácil de leer.

—… ¿Qué?

—Uhm, bueno …

—¿Sí?

—Bueno, sabía que algo estaba pasando porque estabas hablando contigo misma en la bañera.

—Oh, ¿podías oírme?

—Por eso pensé que sucedía algo. Pero, ya sabes, obtengo más Puntos de Mama Genial si supongo que te pasa algo por tu cara.

¿Cómo podía disgustarme ella cuando decía cosas así? —Me retracto…

—¿De qué estás hablando? ¡El fanfarronear también es crucial en las ventas!

—Ahora no puedo decir si estás hablando en serio o no…

Aun así, no podía quejarme, ya que ella me había hecho sentir mejor.

Ella se rio como una niña. —De todos modos, si te preocupas por algo, ¡deja de pensar y haz algo que te guste por un rato! Me iré a bañar, ¿de acuerdo? Dios, estoy a punto de desmayarme.

Ella se metió al baño. Unos minutos después, la escuché tararear muy fuerte. Estas paredes son como papel.

Hacer algo que me guste… Creo que eso debe ser—

***

Después de eso, salí a correr todos los días cuando llegaba a casa de la escuela. Eso es lo que amo, al menos por ahora.

Encontré una meta, como sugirió Hinami. Quería romper mi propio récord en el Chase-Off.

Como mi evento era salto de altura, no me importaba la velocidad y nunca corrí más de lo necesario. Si ahora me concentro en carreras de corta distancia, debería poder batir mi récord anterior.

Después de todo, aunque era más un campo que una pista de carrera, era una de las chicas más rápidas del equipo. No tan rápida como Aoi, por supuesto.

Además, había descubierto algo.

Cuando salí a correr solo el otro día, sentí que me empujaban hacia adelante. Fue maravilloso. Cuando pensé en eso, me di cuenta de que estaba manteniendo un buen

ritmo. Mi cerebro estaba concentrado en correr, todos mis sentidos estaban agudizados y mi forma probablemente era casi perfecta y me llevaba hacia adelante más rápido de lo habitual. Fue como un trance. La mejora podría haber sido mínima, pero si pudiera hacer a cada rato, pensé que podría batir mi récord en el Chase-Off.

—… ¡Aquí vamos!

También corrí duro hoy.

Solía estar celosa de Aoi, e incluso pensé en dejar el equipo.

Pero todavía me gustaba estar en la pista de carrera—todavía me gustaba correr. Corría y corría hasta superar mis pensamientos confusos. Los dejaría en el polvo. Y luego saldría corriendo hacia la puesta de sol.

***

Pasaron unos días y llegó el día del Chase-Off.

—¡Ve, ve, ve!

—¡Nishimura sí que se volvió más rápido!

Grupos de dos de segundo y dos de primer año corrían los cien metros. Ya se habían ido un montón de grupos, con algunas victorias y algunas derrotas para nosotros los de segundo año.

—¡Buen trabajo!

—Ah ja ja, estuvo cerca.

—Sabía que ganarías…

Las carreras terminaron una tras otra en grupos de cuatro. Cuando los de segundo año llegaron al final de la pista de carreras, dejaron su título de “miembro del equipo” allí y regresaron como estudiantes de preparatoria enfocados en los exámenes de ingreso a la universidad. Una vez que corriste allí, no pudiste volver como miembro del equipo de carrera.

—¡Está bien, que entre el último grupo!

Me di cuenta de algo. Había veintiséis chicas en el equipo.

Si corriéramos en grupos de cuatro, eso dejaría a dos personas al final.

¿Qué pareja elegirían el entrenador y los estudiantes más jóvenes?

Nuestra entrenadora, la señorita Yasuoka, llamó el nombre de los dos últimos corredores.

—¡Hinami y Nanami!

—¡Voy!

—¡Oh, esto va a estar cerrado!; Bromeé, pero por dentro mi nerviosismo estaba creciendo. Me enfrentaba directamente a Aoi.

Nuestros registros han sido comparados en el pasado, y hemos tenido resultados diferentes antes de conocernos. En ese sentido, hemos competido indirectamente un montón de

veces. Pero ahora que hemos empezado a hacer pruebas diferentes, hacía mucho tiempo que no competíamos codo a codo en la misma pista de carrera.

Esta sería nuestra última carrera entre nosotras.

—¡De ninguna manera voy a perder!; Bromeé para animarme a mí misma. Aoi apretó el puño. —¡Alégrame el día!

Ella sonrió de manera competitiva y chocó los puños conmigo. Normalmente, Aoi es agradable, pero cuando se trata de competencias, sé que no es del tipo que deja que la otra persona  gane.

Me sentí más nerviosa que emocionada, pero esta era una oportunidad.

El resto del equipo estaba rebosante de emoción. El as indiscutible del equipo de atletismo estaba a punto de enfrentarse a mí, que probablemente tenía el mejor récord aparte de ella. Tal vez no debería decir esto, pero no puedo imaginar una mejor oportunidad para terminar mis días de correr.

—¡Mimimi! ¡Gana por las elecciones!; Alguien llamó de buen humor.

Esas palabras se apoderaron de mi corazón. Había perdido ante Aoi en tantas cosas. Académicos, deportes, incluso relaciones con ciertas personas—me sentí un poco inferior en muchos sentidos.

Y eso es exactamente por lo que estaba en llamas.

Aoi y yo caminamos hacia la línea de salida.

—¡En sus marcas!

Después de todo…

—¡Listo!

… Odio perder.

—¡Fuera!

Saltamos hacia adelante, ninguno de las dos se retuvo.

Estábamos parejos al principio, o tal vez yo fui un poquito más rápida. Confío en mi fuerza muscular y reflejos, así que sabía que no podía bajar la guardia solo porque lo estaba haciendo bien al principio. Después de todo, estaba compitiendo con Aoi.

La sentí justo detrás de mí. Sus pies golpeaban el suelo con fuerza a un ritmo uniforme, y sonaban como si estuvieran buscando una oportunidad para alcanzarme.

Aunque estaba obsesionado con su presencia, traté de concentrarme en mi propia carrera y encontrar la zona. El mundo donde podía sentir que me empujaban poderosamente hacia adelante.

Yo todavía no estaba allí. Empecé a entrar en pánico.

Mi ritmo se iba a romper, y Aoi pasaría volando a mi lado tan pronto como lo hiciera.

Si no podía entrar en mi zona, esa sensación de fracaso arañando mi espalda me arrastraría hacia abajo hasta perder el paso.

Pensé en cómo me sentía cuando corría en mi vecindario. No estaba pensando en victorias y derrotas. Me encantaba lo bien que se sentía correr. Me esforzaba por batir mi propio récord.

Si tan solo pudiera encontrar ese sentimiento ahora…

Cambié de canal mental.

Tu objetivo en este momento no es escapar de Aoi.

Es para disfrutar el momento y correr lo más rápido que puedas. No escuches los pasos de Aoi.

Concéntrese en tu propia cuenta.

Mi orientación emocional cambió. Gradualmente, mis sensaciones se volvieron más claras y nítidas.

Estaba empezando a sentir ese tirón hacia adelante.

Recordé lo que Tomozaki me había dicho cuando yo estaba molesta por la situación con Aoi.

¿No es suficiente olvidarse de ser el número uno y luchar porque quieres crecer?

¿No es suficiente ganar contra uno mismo, en lugar de preocuparse por otras personas?

Creo que en ese momento dije que no era suficiente, pero… hmm. Ahora estaba empezando a entender su punto.

¡Definitivamente podría correr más rápido de esta manera!

La línea de meta estaba a solo una docena de metros de distancia. Nadie estaba delante de mí.

Mi cuerpo se volvió más ligero. Mis pies rebotaban sobre el suelo.

Corrí tan rápido que podía sentir el viento contra mi piel y los vítores a mi alrededor.

Adelante, adelante—dejando atrás mis preocupaciones. Mis problemas no tenían ninguna posibilidad.

Me deleitaba con la carrera en sí, en este mundo hecho para mí y solo para mí.

Antes de darme cuenta, mi propio cuerpo estaba rompiendo la cinta.

Vencería a Aoi.

Corrí un par de zancadas más allá de la línea de meta y luego me di la vuelta. Aoi estaba inclinada con las manos en las rodillas, luciendo frustrada y sorprendida.

Esperé un minuto, pero ella seguía sin decir nada, así que decidí romper el silencio.

—Huff… puff… Jee jee, ¡gané …!

Aoi hizo un puchero, todavía respirando con dificultad. Entonces ella habló en un tono tiernamente celoso—

—¡Quiero la revancha!

Me eché a reír. Ella frunció el ceño y me miró con lástima.

Huh. ¡Este es una Aoi diferente pero aún linda!

—¡Mimimi, fuiste tan rápida! ¡Estoy celosa! ¡Vamos otra vez! Parecía más dócil que de costumbre, pero no me rendí.

—¡De ninguna manera! La próxima vez perderé de seguro, ¡así que renuncio mientras estoy por delante!

—N-No es justo.

Saludé victoriosamente a la multitud y caminé hacia la línea de salida. El resto del equipo estaba entusiasmado con el resultado sorpresa y yo me convertí en una celebridad instantánea.

Miré hacia atrás y sentí una ola de afecto por la frustrada Aoi, así que seguí mis instintos.

—¡Eeek!

Ella estaba completamente desprotegida en ese momento, así que esta vez, mi intento de envolver mis brazos alrededor de ella tuvo éxito. Era tan suave y olía tan bien, estaba en el cielo.

—¡Oye! ¡¿Qué estás haciendo?!

—¡Esta es mi recompensa por ganar!

—Hmph. Acabo de perder una carrera. Si contamos el primer año, el récord sigue siendo cuatro a uno a mi favor. ¡Muy mal por ti!

—¡Eso no importa!; Protesté como un idiota. Y definitivamente soy una.

Quiero decir, esto fue todo lo que necesité para sentirme tan alegre y orgullosa.

El cielo era de un azul brillante. Los rayos de sol que brillaban a través del aire frío del invierno se sentían increíbles.

Estoy segura de que lo que dejé en la línea de meta no fue solo mi título de “miembro del equipo de atletismo”, sino todas las preocupaciones y la incertidumbre que hervían a fuego lento en mi corazón durante tanto tiempo.

Sí. Me encanta correr.

El viento sopló y miré hacia la línea de meta.

Los restos arrugados de la cinta rota revoloteaban en el suelo.