Mondaiji-tachi Ga Isekai Kara Kuru Sou Desu Yo (NL)

Volumen 1: ¡Si!, ¡Kuro Usagi Los Llamo!

Prologo: La Llave

Era el comienzo del verano.

Sakamaki Izayoi estaba disfrutando de la dulce fragancia de principios de verano en la orilla del río. Admirando el sol, murmuró hacia sí mismo “ah, encontré una mancha solar. Tal vez el sol realmente está entrando en un periodo glacial.”

Su lema era: “Los cielos no crearon al hombre por encima de mí” y él parecía preferir el calentamiento global a un enfriamiento global.

No tenía ganas de ir a la escuela, así que en vez de eso, trató de pensar en maneras de jugar en torno a la orilla del río, mientras que todavía llevaba el uniforme, pero pensó que si alguien lo veía sería demasiado vergonzoso. Y si tuviera que ser visto por alguien a quien conociera, después acabarían apuntándolo por la espalda.

“Tiene que estar pasando algo divertido.”

Se quitó los auriculares, y oyó las voces de un grupo de delincuentes de pie alrededor con abrigos largos con ‘Fighting Spirit’ escrito en ellos. En el medio, había un chico siendo golpeado por ellos, y obligado a arrodillarse y pedir perdón.

“Oigan, esto es estupendo, este tipo en verdad está llorando. Qué asco, vamos a tirarlo al río para que esté limpio.”

“Entonces vamos hacer que salte con el trasero desnudo, con sus dos manos y piernas atadas.”

“¡Jiii…!”

El chico estaba temblando en una posición en cuclillas. Sakamaki Izayoi lentamente se sentó y comenzó a hablar con el grupo que seguía pateando y golpeando al chico a algunas decenas de metros de distancia.

“Aah, estoy aburrido. En verdad aburrido. Si pudiera vender mi aburrimiento, estoy seguro de que me volvería rico. Oi, los tontos de ahí, ¡que tal si me proporcionan un poco de entretenimiento y yo los recompensaré con unas buenas vacaciones a largo plazo en el hospital!”

“¡Vamos, quítate la ropa y salta al rio ya!”

“Vamos a atar sus manos. Mientras estén sus piernas libres, no morirá.”

“Ayúdenme… Ayúdenme… Ayúdenme.”

No hubo reacción a las palabras de Sakamaki Izayoi. Era de esperarse.

No les gritó, solo habló como si alguien estuviera a su lado. No había forma de que sus palabras llegaran a ellos; en lugar de eso simplemente se dejaron llevar por el viento. A causa de la paliza que había recibido, la rostro del chico se veía bastante mal.

“……….”

Sakamaki Izayoi se puso de pie sin decir una palabra.

Tomó unas cuantas piedras de la tierra a la palma de su mano, y luego empezó a lanzarlas mientras gritaba “¡déjenme divertirme con ustedes también!”

El impacto de la piedra bombardeó la orilla del río. Esa no fue una manera de hablar. No había una necesidad de corregir.

Exactamente como se describía, la piedra voló con una velocidad estúpidamente alta de ‘Tercera Velocidad Cósmica ’, y con un rugido atronador y una enorme nube de polvo, impactó a los delincuentes, y al chico, sobre la orilla del río por igual.

“¡Arghh!”

“¡E-Es Sakamaki Izayoi! ¡Todo el mundo, huyan!”

“A-Ayuda…”

“¡Voy a seguir lanzando una tras otra!”

Las piedras siguieron volando, acompañadas por su risa resonante, y dejando cráteres con el impacto, al igual que lo haría un bombardeo. Tanto los delincuentes y el chico intimidado huyeron aterrorizados.

Y solo para ser claros, Sakamaki Izayoi no arrojaba piedras para salvar al chico.

“Triturar a los fuertes, aplastar a los débiles”, era también uno de sus lemas.

“¡Jaja! ¡Patético, patético!”

Sakamaki Izayoi sostenía su estómago y reía mientras los veía huir. Siguió rodando de risa  y golpeando el suelo con sus pies.

El único sonido que quedaba era el sonido de su risa. No había nadie más alrededor, y así, cuando Izayoi dejó de reír el lugar cayó en silencio.

No había ninguna señal de nadie más cerca a la orilla del río. Los chicos y las chicas de su edad probablemente se encontraban almorzando a esta hora en la escuela.

Sakamaki Izayoi se puso de pie en silencio.

“…Aburrido.”

Dijo, expresando sus sentimientos más profundos. Él solo enfrentó la escena de los delincuentes y del chico huyendo con ironía; no había nada que disfrutara verdaderamente. Él rio en voz alta, pero solo era por el espectáculo. Sakamaki Izayoi dejó que sus sentimientos se expresen con un profundo suspiro, y dando la espalda al rio.

“¿… Hm?”

Woosh. Al mismo tiempo al comenzar a moverse, un fuerte viento sopló a su lado. Una carta sellada estaba bailando en el viento—Después de seguir una trayectoria muy poco natural—Cayó dentro de la mochila de Izayoi, como pasando un hilo por el ojo de una aguja.

“¿… Qué demonios fue eso?”

Sacó la misteriosa carta.

El nombre del destinatario fue escrito cuidadosamente en el sobre: “Para Sakamaki Izayoi-dono”

***

El jardín estaba ruidoso debido al canto estridente de las cigarras.

“Basta de esto. Silencio” Kudou Asuka gritó hacia el jardín.

Y repentinamente todo cayó en silencio.

La multitud de cigarras detuvo su chirrido, todo al mismo tiempo, como si  lo hubieran ensayado. Parece que las palabras de la Kudou Ojou-sama eran más importantes para ellos que sus habilidades de cortejo.

Sin ni siquiera encontrar esto extraño, ella continuó presumiendo por los pasillos de la mansión, bien mantenida, a un ritmo acelerado. Se preguntó por qué, a pesar de que ese lugar pertenecía a uno de los cinco conglomerados más grandes de Japón, no tenían aire acondicionado en los pasillos.

Ella irrumpió en su habitación, secándose el sudor brillando fuera de su cabello. Se aseguró de cerrar la puerta y luego se arrojó sobre la cama, lo que provocó que se sacuda del impulso. Pero parece que no estaba satisfecha con eso, y se levantó una vez más.

“¿Así que mis parientes están teniendo una reunión sobre el desmantelamiento del conglomerado? No esperaba que me llamaran a la esquina más alejada de Japón por tal motivo.”

Para poner fin a una reunión que estado ocurriendo desde hace meses ya, fue arrastrada ante el jefe de la familia. El jefe de la familia estaba postrado en la cama, pero su voz autoritaria era aun ampliamente temida y respetada.

Ella se quedó sin habla cuando sus familiares llegaron con sus súplicas, “¡por favor, haga algo con él!” le  pidió una chica, con apenas de 15 años de edad, para resolver la situación.

La todavía atónita Kudou Asuka viajó a la mansión del jefe de la familia y le dijo solo una frase corta.

“¡Deja de quejarte y coopera con el desmantelamiento del conglomerado!”

“Entendido.”

Él estuvo de acuerdo sin ni siquiera una queja. Ni siquiera se tomó 10 segundos. No podía ser llamada a una reunión más, en ese punto.

Sin esperar a ver si realmente llegó a una conclusión real, inmediatamente se dio la vuelta y salió de la mansión. Incluso los familiares que esperaban este resultado no podían dejar de dudar de sus ojos y oídos.

A medida que a los familiares se les decía, todo lo que la Ojou-sama de la familia Kudou decía ocurría sin falta. No es como si hubiera una ley o norma al respecto—Todo lo que dice va a suceder, simplemente, así como así. Afirman que es una sugestión de gran alcance, el hipnotismo, o el lavado de cerebro, pero ella no estaba de acuerdo con ninguno de ellos. Ella solo decía lo que pensaba en voz alta.

Nadie puede ir contra la corriente de la sociedad actual, así que no había más remedio que desmontar el conglomerado. Ella trató de tranquilizarse a sí misma con estos pensamientos.

“… Ridículo, incluso en contra de Oji-sama, es todo lo que hice. Es ridículo, realmente.”

Tomó la sábana, cayendo boca abajo. Eso fue lo que realmente le molestaba. Relaciones en donde la única respuesta que oye es “sí” son sencillas y sin fondo. En pocas palabras, solo podía construir relaciones sin sentido, y Kudou Asuka estaba cansada de esas relaciones sin sentido.

“… Hace calor. ¿Qué sucede con esta humedad?”

Este vestido es el problema más grande de todos, ¿debo dejar la cinta para el cabello y cambiar el resto?

Los ojos de Asuka deambulaban alrededor de la habitación, de repente se fijó en un sobre sospechoso que fue dejado sobre la mesa.

Lo siguiente fue escrito en el sobre: “Para Kudou Asuka-dono.”

“¿……?”

Asuka inclinó la cabeza.

Inmediatamente miró a todas las posibles entradas, la puerta, la ventana, y la ruta secreta de escape de emergencia, pero todas estaban bloqueadas y ninguna de ellas mostró ningún signo de haber sido abiertas. En ese momento, alguien llamó a la puerta, y la voz de una maid se oyó.

“Asuka Ojou-sama, he traído algunos refrigerios.”

“Oye tú, ¿alguien entró a mi habitación mientras no estaba?”

“Solo usted tiene la llave de esta habitación, por lo tanto, nadie pudo haber entrado.”

“Bien… Eso es cierto. Está bien. Puedes irte ahora.”

La maid se inclinó cortésmente y salió de la habitación. Kudou Asuka revisó de nuevo todas las posibles entradas, pero ninguna de ellas pudo haber sido utilizada. Lo que significa que debería haber sido imposible meter este sobre en esta habitación.

“… Fufufu. No sé quién eres pero una ‘carta en la habitación sellada’ en lugar de un ‘homicidio en la habitación sellada’…  Me gusta tu estilo.”

Ella incluso se olvidó del calor abrasador, y por primera vez en mucho tiempo, una sonrisa apareció en su rostro. Alegremente rompió el sello del sobre.

***

Las lluvias de otoño habían cesado y las hojas delos árboles habían empezado a caer. Kasukabe Yō estaba haciendo los preparativos en su habitación para hacer turismo antes de que las hojas que caen pierdan el color.

“¡Al-Algo muy extraño sucedió Yō-ojou-chan! ¡Una carta dirigida a usted cayó del cielo!”

“¿… Desde el cielo?”

Para su información, el gato era un gato normal. Lo especial no era de alguna manera el gato, sino Kasukabe Yō. El gato calicó empujó la carta a sus manos al tratar de subir a sus hombros.

“¡No me malentienda Ojou no estoy mintiendo en lo absoluto! ¡Esta carta realmente cayó del cielo!”

El gato calicó sonaba como si estuviera dando excusas, por lo que ella palmeó suavemente su cabeza y lo levantó mientras mostraba una ligera sonrisa.

“Te creo. Dices la verdad.” Dijo sonriendo suavemente.

Su tono era algo tranquilo y relajante. El gato se calmó por un momento, se interesó en el contenido del sobre, por lo que comenzó a suplicarle.

“Ojou, ábrala ahora, voy a perder toda mi piel por la curiosidad.”

“Después de que regrese.”

Kasukabe Yō a continuación, puso al gato y la carta sobre la mesa y continúo poniéndose su kimono. Pero el gato curioso no podía dejar las cosas así. Una vez más trató de subir sobre la ropa con sus garras abiertas, diciendo: “¡Ojou~! ¡Leámosla ahora~! ¡No se moleste con ese kimono, después de todo-!”

*¡Ripp!* El sonido desagradable del rasgado de la tela podía ser oído. Ella bajó la mirada con temor a lo que pudiera ver, y de hecho en un lado del kimono había un gran desgarro.

“……………”

“¡O-Ojou…..!”

“Está bien, no te preocupes por eso. No se puede hacer nada al respecto ahora.” Dejando escapar un suspiro y sonrió un tanto amargamente hacia el gato calicó.

Kasukabe Yō luego se cambió de nuevo a su ropa normal, una chaqueta sin mangas y pantalones cortos. Luego se quitó la horquilla, y rompió el sello de la carta presentada por el gato calicó. “¿Qué es esto?”

“………”

Después de romper el sello en el sobre que cayó del cielo, se quedó mirando la carta por un largo tiempo. El gato curioso subió a sus hombros y comenzó a leer el contenido.

***

“¡Chicos y chicas con talentos maravillosos y mucha angustia, me dirijo a ustedes! Si usted que se esfuerza en poner a prueba sus ‘gifts’, entonces, deje de lado a sus amigos, sus posesiones, su mundo, y venga a nuestro Little Garden.”

***

“¿Qu-?”

“Kyaa.”

El paisaje ante sus ojos cambió sin transición. De repente, se encontraron a 4.000 metros de altura en el aire. Incluso mientras sufrían de la presión de la caída, todos ellos tenían pensamientos similares acerca de la situación y dijeron en su mayoría las mismas palabras.

“¿Dónde demonios es esto?”

Un paisaje totalmente extranjero se desplegó ante sus ojos. En el horizonte, un acantilado podía ser visto presentando un abrupto final del mundo. Bajo ellos había una totalmente desconocida ciudad cubierta, tan grande que confundía su sentido del tamaño.

El mundo ante sus ojos era un mundo completamente diferente.