Tantei wa mou, Shindeiru (NL)

Volumen 5

Capitulo 1: La Aventura Que Comenzó De Nuevo Después De Un Año

Parte 5

La Detective Famosa Jura Una Vez Más

“Sen… pai…”

Mia Whitlock miró atónita a la detective famosa de cabello blanco.

Por supuesto, Mia ya sabía que Siesta había revivido, o la posibilidad de que ocurriera. Sin embargo, estaba segura de que esto era solo una información que entendía en su mente.

Había pasado un año, y esta reunión no debería haber ocurrido, así que Mia se congeló en el acto, todavía derramando lágrimas.

“Parece que la parte del llanto no ha cambiado”. A mi lado, Siesta sonrió.

“Aunque no recuerdo haber llorado tanto frente a ti… Senpai.” Por otro lado, Mia volvió la cabeza con tristeza.

Una vez que Siesta vio la reacción de Mia, me miró y suspiró.  “Creo que deberías arreglar ese hábito de hacer llorar a las chicas”.

“¿Como si hubiera alguien por ahí que quisiera meterse en un caos así?”

“Bueno, puedo decir que estoy aliviado de que sigas siendo el mismo”.

“Esa es una forma desagradable de sentirse aliviado”.

Sin embargo, no podía negar que le había causado problemas todo este tiempo debido a esta misma vieja naturaleza mía.

“Además, aquí es donde siempre aparezco”. Y con eso, Siesta dio un paso hacia Mia. “¡…!”

Pero la expresión de Mia estaba contorsionada.

Seguramente sintió que no merecía estar cara a cara con Siesta.

“He negado el futuro que querías proteger, Senpai. En esta nueva ruta que encontré, se tomó otra vida. Sabía muy bien que nadie sería feliz”.

Sí, Mia no pensó que este final fuera el correcto. No podía ignorar el celo de Natsunagi, y no podía salvar a la persona que una vez le había salvado la vida. Tuvo la oportunidad de redimirse… pero el precio fue que otro detective sería sacrificado.

Hace una semana en Londres, Mia dio un nuevo paso. Pero sus dedos de los pies no siempre apuntaban hacia el futuro al que aspiraba.

“Lo siento.”

Los ojos de Mia se enrojecieron y bajó la cabeza con palabras sencillas.

“No pude evitar que la [detective famosa] volviera a apostar. Sabía que podría ser un error, pero no podía hacer nada al respecto. Estaba, estaba…”.

“Eso no es cierto.”

Como para interrumpir las palabras de Mia, Siesta la abrazó suavemente. “En primer lugar, soy yo quien te debe una disculpa. Lo siento, Mia”.

Siesta luego se disculpó con Mia. “… ¿Por qué, Senpai?”

Los ojos redondos de glicina de Mia parpadearon, como si no entendiera las intenciones de Siesta.

“Te causé problemas en el pasado debido a mi egoísmo. Me gustaría disculparme de nuevo por eso”.

Fue hace un año y medio cuando Siesta planeó que el enemigo robara la [Biblia], con la posibilidad de que finalmente se sacrificara. Siesta había solicitado la ayuda de Mia para realizar su plan.

“… Solo estabas tratando de cumplir tu misión como [Tuner], Senpai. No tenía la determinación.”

Mia lloró en el pecho de Siesta y dejó que sus lágrimas fluyeran. “Y ahora, una vez más, yo…”

“Eso también es diferente”.

Pero Siesta agarró a Mia por ambos hombros e insistió con firmeza. “Después de todo, aún no hemos llegado al final de esta ruta”.

Los ojos de Mia se agrandaron.

“Es cierto que el sacrificio de Nagisa me revivió. ¿Pero quién dice que este es el final?”

Y como Mia, mi cuerpo tembló ante la declaración de Siesta.

Así como había prometido que esta historia no terminaría hasta que le devolviera la vida a Siesta.

Siesta tampoco se había rendido con Nagisa Natsunagi, incluso en esta situación desesperada.

“Okay, ¿Mia?”

Y así lo declaró Siesta en este observatorio, en el corazón de Japón. “Voy a salvar a Nagisa Natsunagi”.

Al igual que ella nunca se rindió conmigo.

Eso es lo que Siesta nos prometió a Mia y a mí, o a ella misma. “… ¿En serio?”

Mia le preguntó a Siesta con una voz algo infantil. Siesta secó las lágrimas de Mia y dijo con una sonrisa.

“Sí. Después de todo, me gustan las historias con final feliz”.