Kono Yuusha (NL)

Volumen 4

Capitulo 30: Una Extraña Máquina

“¡Seiya! ¡Esa Máquina de Matar es diferente del resto! ¡Su estado dice que su personalidad es bondadosa!”

“Mmmm…”

Seiya, que estaba tomando notas en silencio mientras observaba lo que quedaba de las Máquinas de Matar que explotaron, dirige su mirada hacia la Máquina de Matar en la esquina sin decir una palabra.

“Parece que es el único con personalidad de todas las Máquinas de Matar”.

“¿Por qué crees que es?”

“Cuando se producen en masa las mismas máquinas en una fábrica, hay una pequeña posibilidad de que un desastre se mezcle. Probablemente sea un fracaso”.

Seiya vuelve su atención a la pila de Máquinas de matar destruidas, luego continúa tomando notas.

          _ ¿Qué demonios…? ¡¿Eso es?!

Sentí que Seiya no estaba actuando como él por un momento, pero cuando realmente lo pienso, creo que probablemente solo estaba recopilando más información que podría ayudarlo en la batalla. Claramente no está interesado en un “fracaso”.

Seiya finalmente deja su pluma.

“Muy bien, eso debería hacerlo por ahora”.

“¡¿Finalmente terminaste?!”

Jonde lleva una expresión de pura alegría. “Si. Todo lo que queda es limpiar el resto”.

Cuando Seiya da la señal, innumerables rocas caen en la caverna con las Máquinas de Matar. Las máquinas se lanzan a un ataque, causando explosiones en toda la espaciosa cueva. Pero incluso entonces, no puedo quitar los ojos de la máquina de matar temblorosa en la esquina.

“Seiya… esa Máquina de Matar está temblando…”

“… ¿Y?”

“Y, como… me siento mal por él, ¿sabes?”

“¿Te sientes mal por un arma creada con el único propósito de asesinato?”

“…Si.”

Tanto Seiya como Jonde me miran como si estuvieran a punto de poner los ojos en blanco. De todos modos, la Máquina de Matar que tiembla en la esquina de la cueva me recuerda a un niño pequeño traumatizado por los horrores de la guerra. Seiya considera la máquina de matar única con un interés fugaz, pero…

“Un arma con personalidad… Podría ser una muestra valiosa. Lo mantendré separado de los demás por si acaso”.

Se abre un agujero en el suelo donde está la máquina de matar temblorosa, y en el momento siguiente, se ha ido. No mucho después, la Máquina de Matar es expulsada a una pequeña caverna cercana, mientras que las rocas de la bomba explotan simultáneamente, destruyendo a los enemigos restantes. Sin duda fue salvado por la piel de sus dientes.

En la estrecha caverna separada, la Máquina de Matar mira a su alrededor confundida, pero en poco tiempo, una roca bomba cae desde arriba con un ruido sordo. La máquina vuelve a caer al suelo como si le hubieran cedido las rodillas, lo que me da un respingo.

“¡¿Una roca bomba?! ¡¿Por qué?! ¡Pensé que habías dicho que era una muestra valiosa!”

“Lo estoy probando. Si tiene un alto nivel de inteligencia, entonces no debería atacar”.

Miro fijamente a los dos monstruos, pero la Máquina de Matar no ataca, como se esperaba. En todo caso, está aterrorizado.

“Seiya, él no va a atacar. Es ‘bondadoso’, después de todo”.

“Ya lo veremos.”

Seiya chasquea los dedos y, de la nada, la roca bomba adopta una sonrisa amplia y condescendiente.

“¡Oye, débil! ¡Vamos, atácame!”

Estoy sorprendido por la voz profunda del monstruo. “¡Habló! ¡La roca bomba acaba de hablar!”

“Le di la capacidad de obligar a los enemigos no agresivos a atacar”.

Sé lo que Seiya quiere decir de inmediato. La roca bomba sonríe con aire de suficiencia mientras continúa:

“¡Golpéame, pedazo de basura! ¡No te quedes ahí, perdedor! ¡Muéstrame lo que tienes! ¡Quiero decir, un debilucho como tú ni siquiera va a dejar un rasguño! ¡Hehe!”

Jonde aprieta su puño a mi lado. “¡Q-Qué roca tan agravante!”

“¡Sí, qué molesto! Quiero decir, ¡es realmente molesto! ¡Solo quiero golpearlo en su estúpida cara!”

La roca de la bomba continúa burlándose de la Máquina de Matar mientras rueda de una manera similar al baile, lo que lo hace aún más molesto. Jonde y yo estamos apretando los dientes con rabia cuando…

“… para golpearte…”

Escucho una voz, pero no es el barítono profundo de la roca bomba. “¡No te voy a pegar!”

¡Un chillido agudo, similar al de una niña pequeña, resuena por toda la caverna!

D-De ninguna manera… ¡Pero tiene que ser! ¡Esa era la voz de la Máquina de Matar!

“Interesante. Así que hay tipos que pueden hablar”.

Cuando Seiya chasquea los dedos, la molesta roca de la bomba se hunde en el suelo y desaparece, dejando solo la Máquina de Matar en la estrecha cavidad. Seiya luego trae una serpiente de tierra a su boca como un micrófono.

“Eh, tú.”

La Máquina de Matar mira a su alrededor, indicando que puede escuchar la transmisión de Seiya, luego dice:

“H-Hola…”

La Máquina de Matar tiene la voz de una niña. “¿Por qué no atacaste la roca bomba?”

“P-Porque si lo hubiera hecho, habría explotado… Además, ni siquiera puedo imaginar atacar a alguien…”

La Máquina de Matar voluntariamente comienza a abrirse.

“Hoy me dieron órdenes de matar a los humanos… como siempre… pero nunca podría hacer algo tan horrible como matar a una criatura viviente…”

¡E-Ella realmente es de buen corazón! ¡Qué robot tan extraño!

Ella no se ve diferente de las otras Máquina de Matar, pero su voz inocente la hace parecer tan adorable. Seiya, por otro lado, está completamente impasible. Él solo le pregunta qué quiere saber.

“¿Cuántos otros como tú pueden hablar?”

“P-Probablemente no haya otros además de padre…”

“¿’Padre’?”

“¡Oh! Estoy hablando del emperador máquina Oxerio. Creo que él es el único que puede hablar… entonces, ¿por qué yo puedo?”

“Diablos si lo sé”.

“…Lo siento.”

Su cabeza cae, pero en poco tiempo, ella levanta su barbilla de nuevo con un resorte en su voz.

“¡Pero estoy tan feliz de tener a alguien con quien hablar ahora! ¡Las otras Máquinas de Matar solo zumban y zumban cada vez que trato de hablar con ellas! ¡Así que muchas gracias por hablar conmigo!”

“Cállate. Solo quiero saber sobre Oxerio”.

“E-Está bien. Lo siento. Por favor. Discúlpame…”

¡¿Q-Qué cruel puedes ser?! ¡Me está costando mucho descubrir cuál es la máquina!”

“Bueno, um… Papá tiene cuatro brazos y cuatro piernas. Y, um…”

Seiya continúa preguntando muchas cosas después de eso, pero no parece obtener ninguna información útil de ella. En un tono indiferente, dice:

“Está bien, eso es suficiente. Ya hemos terminado”.

“… lo siento, no pude ser de ninguna ayuda”.

Seiya se aleja del micrófono. Miro la máquina de matar que queda sola en la estrecha caverna hasta que un gusano de la muerte asoma repentinamente por el suelo.

“¡Eek!”

Ella grita. Su pánico es tan adorable que mis labios naturalmente se curvan en una sonrisa. Seiya, sin embargo, le dispara una mirada bajo cero.

“No confío en eso. Probablemente sea un asesino enviado por Oxerio”.

“¿Un asesino? ¿Ella?”

“Sí, ‘ella’. Probablemente esté actuando como una tonta a propósito, para que bajemos la guardia”.

“¿Pero no habría sido asesinada por los cantos rodados de la bomba si no la hubiera notado al azar?”

“Hmm…”

Seiya piensa por un momento, pero…

“De cualquier manera, es mejor deshacerse de él ahora en lugar de preocuparse más tarde. ¿Vas a destruirlo?”

“¡¿Qué?! ¡Jonde, no!”

Sacudo a Jonde por los hombros. “¡¿Qué crees que estás diciendo?!”

“No tengo objeciones a la idea. Después de todo, esa Máquina de Matar es un monstruo creado por el Señor Demonio”, dice Seiya.

“¡Pero eso no la hace malvada! ¡Probablemente también existan buenos monstruos!”

“No estaría tan seguro de eso. Encontré incontables bestias en Termine durante su reinado, pero no hubo un solo monstruo decente”.

“¡¿Jonde?! ¡¿Que pasa contigo?! ¡No eres un monstruo malvado!”

“¡Ni siquiera soy un monstruo!”

Señalo a Jonde mientras grito:

“¡Seiya! No necesitas romperla, ¿de acuerdo? Si estás preocupado, ¡solo envuelve algunas serpientes terrestres a su alrededor como lo hiciste con Jonde!”

“¡No me uses como ejemplo!”

“Ni siquiera sabemos cuándo Jonde va a perder la cordura, así que si vamos a comparar, ¡diría que esa chica es mucho más segura de estar que él! ¡Es decir, míralo! ¡Ya se está volviendo loco!”

“No, no lo estoy, ¡maldita sea! Tch. ¡Esta diosa realmente me está cabreando ahora mismo!”

En medio de nuestras amargas disputas… “Ya basta. Solo cállate.”

Seiya suspira profundamente.

“Por ahora, voy a envolver algunas serpientes de tierra alrededor y mantenerlo aquí”.

Justo cuando dejó escapar un profundo suspiro de alivio, Seiya me mira severamente.

“Sin embargo, solo lo estoy almacenando como una muestra rara. Si hace algo aunque sea un poco sospechoso, lo voy a desmantelar”.

“E-Está bien”.

Numerosas serpientes de tierra aparecen en la caverna con la Máquina de Matar a la señal de Seiya. Sin embargo, en el momento en que los mira…

“¡Eeeeeek!”

…ella grita. Sin preocuparse, las serpientes de la tierra se envuelven alrededor de su cuello, brazos y piernas.

“¡S-Serpientes…! ¡A-A-Ayuda!”

Se lamenta lastimosamente en el suelo, pero Seiya les da más órdenes a las serpientes.

“Debería meter serpientes de tierra en su cañón Evil Laser por si acaso también”.

La máquina de  matar llora y gime cuando las serpientes incluso  se envuelven alrededor de su rostro.

“¡L-La pobre…!”

Incapaz de mirar por más tiempo, deslizo el micrófono serpiente de las manos de Seiya.

“¡Oye, ¿puedes oírme?! ¡Tú vas a estar bien! ¡Esas serpientes no te harán daño mientras mantengas la calma!”

“¿E-E-Enserio…? ¿P-Puedo confiar en ti…?” Seiya me mira fríamente.

“Rista, tenemos que irnos. No tenemos tiempo que perder aquí. Ahora que hemos derrotado a su primera ola de tropas, el enemigo sabe que los humanos han recuperado el control de Termine. Van a venir a nosotros con todo lo que tienen, así que debemos asegurarnos de que estamos completamente preparados”.

“¿’No tengo tiempo que perder’? ¡Qué gracioso escuchar eso de alguien que pasó horas y horas analizando al enemigo!”

“Analizar al enemigo es absolutamente necesario desde una perspectiva estratégica. Todo lo que estás haciendo es perder el tiempo”.

“Esto es serio. Ella-”

Jonde interrumpe repentinamente la conversación.

“Entonces, ¿qué quieres decir con ‘completamente preparado’? ¿Qué es exactamente lo que planeas hacer?”

“Me voy a centrar en preparar una defensa contra los ataques aéreos”.

… Seiya todavía parece preocuparse por las Máquinas de Matar de tipo volador, pero tengo que preguntarme si existen. Le pregunto a la máquina de matar:

“Oye, ¿hay alguna máquina de matar que pueda volar?”

“Nunca he visto uno antes, pero…”

“Rista, estás perdiendo el tiempo. Esa máquina no sabe nada. Además, no debes confiar ciegamente en lo que dice”.

“Seiya, ¿no eras tú quien la interrogaba hace unos minutos?”

“Sí, y tomé lo que decía con un grano de sal. En cualquier caso, debemos prepararnos para un ataque aéreo. Al hacerlo, se eliminará el punto ciego restante del Muro de Hierro de cinco capas”.

“D-Disculpa…”

De repente, la Máquina de Matar habla. Expresando un toque de interés, Seiya toma el micrófono y pregunta:

“¿Qué pasa? ¿Recuerdas algo?”

“No, no es eso… ¡Sniffle! Es solo que… estas serpientes dan mucho miedo… ¡Sniffle!”

Seiya tensa fuertemente su frente.

“Déjame darte un último consejo: cállate. Eso es todo.”

“¡Mn…! ¡Sniffle… Sniffle… Sniffle…!”

“¡¿No crees que estás siendo demasiado duro?!” Hablo por el micrófono de serpiente y digo:

“¡No te preocupes! Todo va a estar bien, ¡así que no llores!”

En medio de intentar animarla, noto abruptamente que Seiya ya está caminando por una escalera de tierra que se dirige hacia la superficie.

“No hay razón para que estemos aquí por más tiempo”.

Jonde sigue a Seiya. Intento ir tras ellos, pero me detengo cuando escucho el sollozo de la Máquina de Matar.

“Seiya, um… ¿crees que podría quedarme aquí un poco más? Quiero hablar con ella hasta que pueda calmarse”.

“Puedes perder todo el tiempo que quieras”, dice Seiya mientras se aleja. Sin embargo, mira hacia atrás por última vez con una expresión severa.

“Sera mejor que no crees una puerta para que puedas entrar a la caverna con ella. ¿Entendido?”

“¡No lo haré! ¡No voy a hacer nada así nunca más! ¡No estoy bromeando! ¡Aprendí mi lección con Grandleon!”

“No importa lo que pase la próxima vez, te lo prometo, no te ayudaré aunque tu vida dependa de ello”.

“¡No te puedo creer!”

Jonde y Seiya se van después de eso, dejándonos solas a la bondadosa Máquina de Matar y a mí en la cueva.