Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 4

Capitulo 1: ¿Con Quién Debo Pasar El Domingo?

Parte 1

Al día siguiente, todavía no tenía idea de lo que iba a hacer sobre el domingo, pero mi clase estaba haciendo un escándalo por algo completamente diferente.

“¿Un estudiante transferido?”

“Sí, parece que tampoco son japoneses”.

“Oh wow…”

¿Un estudiante extranjero transferido? Ese fue un evento raro. Quiero decir, Iris también era una estudiante transferida, pero era del espacio, no del extranjero.

No pasó mucho tiempo antes de que sonara la campana y la maestra trajera al estudiante transferido. Tenía el pelo largo y rubio recogido en dos colas gemelas, y parecía… Bueno, parecía muchas cosas.

“¡Mi nombre es Rosalind C. Bathory!” ella declaró en voz alta y resonante.

Tenía la cara de una niña pequeña, pero hablaba como una mujer adulta. Llevaba un uniforme de la escuela secundaria, pero era tan alta como una estudiante de primaria. Y sin embargo, de alguna manera, cuando miró a la clase desde el otro lado del podio, tuve la clara sensación de que nos estaba mirando. Pero sus ojos rojos se destacaron más, delgados y entrecerrados mientras miraban a la clase. Había visto ojos azules, ojos morados e incluso ojos brillantes antes, pero el rojo fue el primero. Eran bonitas, como los rubíes.

“…”

Debo haber estado mirando, porque mi mirada se encontró con la de ella por un momento. Rápidamente aparté la vista… y luego eché otro vistazo.

“…?”

Ella todavía me estaba mirando. ¿Estaba enojada, tal vez? Ella realmente no lo parecía. Era otra cosa… ¿Pero qué era?

“¡Rekka!”

“¿Huh? ¡Oww!” Grité cuando alguien a mi lado me tiró de la oreja.

“¡Estás mirando a esa chica demasiado! ¡No dejaré que me engañes! ”

No tenía idea de qué estaba hablando Iris, pero ella seguía tirando más fuerte mientras hablaba. Pensé que me iba a arrancar la oreja.

“¡N-No sé qué está pasando, pero lo siento! Lo siento, ¿vale? ¡Así que deja de tirar de mi oreja!”

“Bueno. Te disculpaste, así que te perdono. Así que, de todos modos, sobre este domingo… quiero subirme a la montaña rusa contigo. ¿Tal vez diez veces, estoy pensando?”

“¡¿Q-Qué?!”

No me importaba subirme a una montaña rusa, pero diez veces estaba exagerando.

“¡Será divertido!”

“Claro, será divertido… las primeras dos veces. Diez veces es suficiente para enfermarte, ¿sabes?”

“Estaré bien.”

Bueno, tal vez Iris lo estaría.

“Hey, no vayas a decidir cosas así sin hablar conmigo primero. Estoy planeando nuestro día ahora mismo”, interrumpió Satsuki.

“Yo debería ser quien decida lo que monto”, dijo Iris.

“Si no toma en cuenta los tiempos de espera, no podrá manejar todas las cosas que desea”, argumentó Satsuki.

Iris de espíritu libre y cuidadoso y meticuloso Satsuki estaban discutiendo sobre cómo pasar el día en el parque de diversiones. Comprendí de dónde venían ambos, pero deseé que dejaran de fruncir el ceño el uno al otro mientras yo estaba entre ellos.

“¡Namidare, Otomo, Iris! ¡Silencio!” gritó la maestra.

Toda la clase estaba alborotada por el estudiante transferido, pero evidentemente los tres habíamos sido demasiado ruidosos.

Reflexivamente miré hacia adelante y me callé después de ser regañado, pero los dos siguieron frunciendo el ceño.

Sería un día largo… ¿Y qué iba a hacer el domingo, de todos modos? Mientras intentaba por enésima vez elaborar un plan, mi mirada se encontró con la del estudiante transferido nuevamente.

“…?”

¿Me había estado mirando todo el tiempo?

“Rosalind, puedes tomar ese asiento abierto allí. Además, Namidare, cuando termine la clase, quiero que le enseñes la escuela.”

“¿Huh? ¿Yo?”

“No se preocupe por llegar tarde al primer período. Eso será todo, todos”, anunció la maestra y rápidamente salió de la sala, cerrando el aula.

Espera, ¿qué pasó con los anuncios de la clase como quién tenía la tarea de limpiar hoy y cosas así? ¿Y por qué tuve que mostrarle a la nueva chica durante la clase en lugar de almorzar? Mientras estaba sentada en estado de shock, Rosalind vino caminando hacia mí. No pensé que podría decirle que no.

***

Como sentía que no tenía otra opción, saqué a Rosalind del aula y la llevé al pasillo. ¿Qué se suponía que debía mostrarle, de todos modos? ¿Las aulas especiales? Este edificio de la escuela solo tenía aulas regulares, así que no había realmente nada que ver aquí.

“Hmm, supongo que comenzaremos yendo al edificio de aulas especiales. Es por aquí.”

“Ve más despacio.”

“¿Huh?”

“Estás caminando demasiado rápido”.

Ups. Olvidé que el paso de Rosalind era mucho más corto que el mío. Comencé a caminar a su lado para que coincidiera con su ritmo.

“¿Eso está mejor?”

“En efecto.” Rosalind asintió, satisfecha, y envolvió su brazo alrededor del mío.

“… Espera, ¿por qué estás sosteniendo mi brazo?”

“Idiota, ¿no sabes cómo escoltar a una dama?”

Parecía un poco faltante en ciertos departamentos para ser llamada dama, pero…

“Solo estabas pensando en algo que no deberías haber sido, ¿no?”

“No en realidad no…”

Me estaba mirando con una intensidad terrible, y rápidamente aparté la vista.

“Bueno. Ahora llévame a nuestro destino”.

“Claro…”

Los estudiantes con los que pasamos se sorprendieron al vernos caminando del brazo, pero los pasillos se despejaron cuando sonó la campana del primer período. Caminamos por el corredor ahora tranquilo hacia nuestra primera parada, el tercer piso del edificio de aulas especiales.

“Um, esta es la sala de música”, le dije, señalando el letrero sobre la puerta. “En efecto.”

“H-Hey, están teniendo clase justo a-”

Antes de que pudiera terminar mi oración, Rosalind se puso de puntillas para mirar dentro del aula a través de la ventana en la puerta. Varios de los estudiantes nos vieron. Pude ver el ‘¿qué están haciendo?’ mira en sus caras. Hombre, esto fue realmente vergonzoso…

“La música y el arte son electivos. ¿Creo que la clase de música está practicando el himno de la escuela? Tomo arte, así que realmente no lo sé. En la clase de arte, estamos estudiando la historia del arte y otras cosas en nuestros libros de texto en este momento”. Aceleré la explicación. Solo quería alejarme de aquí.

“Las escuelas japonesas están mucho más ordenadas de lo que alguna vez estuvieron”, dijo Rosalind mientras bajaba de la ventana. “Ahora llévame al siguiente lugar”.

Ella me miró expectante, con sus colas gemelas moviéndose mientras movía la cabeza. Hmm… Era un poco mandona.

Después de eso, le mostré los laboratorios de ciencias, las salas de estudio y algunos otros lugares. Hice mi mejor intento de explicar las diferentes habitaciones, pero todo lo que Rosalind dijo fue: “De hecho”. Ella no parecía muy interesada. En lo que a mí respecta, solo quería volver a clase antes de que terminara el primer período. Pero como tenía que caminar a su ritmo, íbamos muy despacio. Eso, y seguro que le gustaba hablar.

“¿Cuántos años tienes?”

“¿Cuál es tu color favorito?”

“¿Por qué los japoneses hacen que sus hijos usen la misma ropa?”

“¿Estás enamorado de alguien?”

Peor aún, dejaba de caminar cada vez que hacía una pregunta, lo que hacía que las cosas tomaran aún más tiempo. ¿Y quién pregunta cuántos años tienen sus compañeros de clase? ¿No sueles pedir su cumpleaños?

Justo cuando pensaba que el primer período era una causa perdida, se detuvo nuevamente.

“Por cierto, Namidare…”

“¿Si?”

“Parece que estás en buenos términos con las dos chicas que se sientan a tu lado”.

“Yeah. Yo supongo.”

“… Entonces lo admites, entonces.”

“¿Seguro? Quiero decir…”

Uno de ellos era un amigo de la infancia, e Iris y yo nos habíamos ayudado mutuamente a salir de algunos problemas bastante grandes, por lo que había mucha confianza y gratitud entre nosotros. No tenía ninguna razón para negar que estábamos en buenos términos.

“Hmph”. Rosalind se frotó la barbilla y suspiró. “¿Qué pasa?”

“No es nada”, dijo.

Supongo que no fue un gran problema.

Seguí paseando a Rosalind por la escuela. Todavía estaba sosteniendo mi brazo, pero ahora, por alguna razón, parecía estar perdida en sus pensamientos. Apenas salimos del edificio de aulas especiales antes de que fuera el momento de cambiar de clase.

“Está bien”, le dije, “volvamos a clase ahora”.

En este punto, solo quería sacarla de mi brazo. El primer período había terminado y la gente comenzaba a salir a los pasillos, lo que significaba que comenzaba a atraer miradas nuevamente. Pero cuando fui a desvincular mi brazo del suyo, Rosalind tiró de mí con fuerza.

“¿De qué estás hablando? Todavía no hemos pasado por el edificio principal de la escuela”.

“Pero eso es solo un montón de aulas regulares. Realmente no hay nada allí para ver… ”

“Voy a ser el juez de eso. Eres solo la guía. Ahora llévame allí.”

“Pero…”

A este ritmo, llegaríamos tarde al segundo período. “¿O hay algún tipo de problema?” Rosalind exigió.

Tiró de mi brazo con más fuerza, llevándome hacia ella. Con nuestros rostros tan cerca, un dulce aroma estimulaba mis fosas nasales.

“¿No te gusta estar conmigo, Namidare? ¿Es ese el problema, tal vez?”

“No eso no es…”

“Entonces quieres estar conmigo”, insistió. “Espera, ¿eh?”

No estaba seguro de cómo, pero ella había ganado la discusión. “¡Vamos, deja de ser tan lento!”

“… Bien”, accedí.

Realmente deseaba ser una de esas personas japonesas que sabían cómo poner los pies en el suelo.

***

Finalmente volví a clase cerca del final del segundo período. Como tenía una buena razón, no me metí en problemas por llegar tarde. Y para cuando comenzó el tercer período, mi día parecía que estaba de vuelta en el horario.

El cuarto período fue la clase de gimnasia, y luego llegó la hora del almuerzo. Saqué mi lonchera y esperé a que Iris y Satsuki regresaran del vestuario. No pasó mucho tiempo antes de que entraran… con Rosalind.

Psst, psst, psst…

Las tres se susurraban el uno al otro. ¿Se habían conocido durante la clase de gimnasia?

“Bienvenido de nuevo, Satsuki, Iris”.

“¡Hola!”

“¡Hola!”

“Los acabo de ver hablando con Rosalind. ¿Ustedes jugaron baloncesto juntas?”

Si recordaba bien, eso es lo que las chicas debían hacer hoy durante la clase de gimnasia. A Satsuki siempre le gustó ayudar a la gente, así que pensé que tal vez había invitado a Rosalind a su equipo desde que era la chica nueva.

“¿Hmm? No en realidad no.” Pero Satsuki sacudió la cabeza. “Hmm…”

¿Entonces empezaron a chatear cuando volvían a clase? “Namidare”.

Mientras trataba de resolverlo, la chica en cuestión se acercó a mí. “¿Qué pasa?”

¿Cuántas veces había dicho Rosalind mi nombre hoy? Me había tomado algún tipo de gusto extraño.

“Me han dicho que es hora de comer ahora. Llévame a esta supuesta ‘cafetería’ tuya”.

“Ya te mostré dónde estaba. Puedes hacerlo tú misma, ¿verdad?”

“No entiendo cómo funciona la moneda japonesa”, dijo.

Supongo que no tuve otra opción.

“Muy bien. Solo necesitas que yo haga los cálculos y maneje el efectivo por ti, ¿verdad?”

“En efecto.” Rosalind sonrió, satisfecha con mi respuesta. “Y después de eso, ¿por qué no almuerzas conmigo también?”

“¿Huh? No, no puedo… ”

Miré a Satsuki e Iris, las chicas con las que originalmente planeaba comer. Pero entonces…

“Lo siento, Rekka. De hecho, tengo algo que tengo que hacer”, dijo Satsuki. “¿Huh?”

“¡Yo también!” dijo Iris “¿Qué?”

Esto era raro, sin mencionar extraño.

“Oh querido. Parece que este es el momento perfecto para ti, ¿eh, Rekka?”

Incluso R, cuya expresión predeterminada era robótica, parecía un poco sorprendido.

“Así que sí, almuerza con Rosalind”, insistió Satsuki. “Bueno…”

“¡Adiós!” Iris llamó mientras se alejaba.

Las dos salieron de la habitación, dejándonos a los otros dos atrás. “Ahora vámonos”, dijo Rosalind.

“No me importa ir contigo, pero…”

Deseé que dejara de agarrarme del brazo.

Para Rosalind, esta fue probablemente un típico ‘escolta’, pero no pensé que tuviera sentido tratarme como un caballero británico.