Outbreak Company: Moeru Shinryakusha (NL)

Volumen 4

Capítulo 2: Chica Mágica

Parte 3

¡Aquí había una chica que sabía de lo que estaba hablando……! No no no.

Pero bueno… había una idea aquí.

Me estremecí al darme cuenta de las profundidades no conectadas del otaku-dom de Minori-san. Con ella alrededor, yo (como gerente general) podría apegarme a la administración general y no tener que meterme en la maleza. ¿Correcto?

Pero dejemos eso a un lado por un segundo. “Minori-san, ¿estás…?”

“¿Si?”

“… ¿una capa?”

“UH Huh.”

Ella asintió asiduamente. Capa. Es decir, un cosplayer.

El término se refiere a personas a las que les gusta hacer y usar ropa que se parezca a la que usan los personajes del anime y el manga. Ahora recordaba haber visto un blog en algún lugar de la red que mencionaba cómo a algunas capas les gusta imaginar vestir a otras personas o disfrutar coordinando atuendos que otros usan.

“Shinichi-kun, ¿significa esto que no haces cosplay?”

“No puedo decir que alguna vez lo haya hecho”.

Pensándolo: ¿Cuál sería el objetivo de un guardia de seguridad del hogar como yo haciendo cosplay? Sea lo que sea, el cosplay normalmente implica ser visto por otras personas.

“Aw, es divertido”, dijo Minori-san. “Puedes convertirte en otra persona”. Ella lo hizo sonar un poco agradable.

“Alguien más…” murmuré.

Alguien más. Alguien más que quien eres ahora. Un escape temporal de la realidad.

Una imagen de Petralka pasó por mi mente.

“El cosplay también es una buena manera de refrescarte, ¿no?”, Pregunté. “Para ahuyentar la tristeza, se podría decir”.

“Claro,” dijo Minori-san. Luego, una leve sonrisa de dolor cruzó su rostro. “De hecho, eso fue principalmente por lo que lo hice”.

Convertirse en otra persona… sentir de manera diferente.

¿Qué pasaría si sugiero que Petralka pruebe el cosplay? Parecía que estaba pasando un mal momento con el trabajo de ser emperatriz, como si la posición amenazara con abrumarla. Si pudiera darle la oportunidad de olvidarse de sus deberes reales, incluso por un momento, ¿no sería algo bueno? Por otra parte, podría ser demasiado pedirle a Minori-san que haga los trajes para la película y un atuendo de cosplay para Petralka.

Espere. Y qué si Petralka estuviera en el— “¡Eso es!”

“¿Qué es eso?”

“Er, nada”, le dije. No tenía la intención de decir nada al respecto en voz alta. “Hablando de convertirte en otra persona, Minori-san, ¿qué tipo de cosplay haces?”

Su respuesta me sorprendió: “Solo hago hombres y hombres”.

¿Solo hombres? ¿Se refería a personajes masculinos? ¿Con ese pecho?

¿Y esa cara?

“¡¿Cómo podrías desperdiciar una oportunidad tan dorada?!”

Al menos podría haber sido una criada. Pero había que considerar las orejas de gato. ¡Loli gótico! ¡Incluso un traje de doncella del santuario! O la perenne “armadura de bikini”…

“Estoy seguro de que cualquiera de esas cosas se vería…”

“Oh, oye, quería mencionar”, dijo Minori-san, interrumpiéndome. “Los uniformes escolares de las chicas en la película, creo que la tela escocesa roja para la falda es definitivamente el camino a seguir”. Apretó el puño para enfatizar su punto.

Me imaginé a Myusel con una falda a cuadros rojos y apreté el puño casi por reflejo exactamente de la misma manera.

Pero espera solo un minuto…

¿Eh? ¿Ella acaba de cambiar el tema sobre mí? Y… ¿no había sucedido esto antes?

¿Estaba en peligro de pisar una mina terrestre?

Solo le estaba dando a Minori-san mi mirada más perpleja cuando… “¡Shinichi-sensei!”

Eduardo se apresuró a entrar en la biblioteca y me llamó con entusiasmo. A veces los japoneses dicen “Iré a lavarme la cara” solo como una forma de hablar, pero aparentemente lo había dicho en serio, porque volvió corriendo con el agua todavía goteando de su cabello. Como si hubiera tenido tanta prisa, ni siquiera había tenido tiempo de secarse.

¿Qué podría tenerlo tan emocionado?

“¿Qué pasa si la parte del contrato y la cosa que crea la puerta interdimensional son los malos?”

“¿Eh…? Oh… Oh, lo entiendo.” Me tomó un segundo, pero rápidamente comprendí a lo que se refería Eduardo. Estaba hablando de nuestra discusión sobre chicas mágicas. Debe haber tenido un destello de inspiración mientras estaba ocupado lavando.

“Me gusta eso”, dije. “Cuando se trata de trazar, lo simple es lo mejor. Y luego todo termina bien al final. ¡Buen material!”

“¡Sí, señor!” Eduardo asintió felizmente. Se sentó frente a mí otra vez, tomó su pluma y comenzó a garabatear algo a una velocidad vertiginosa. Era como si apenas pudiera esperar a que su mano formara cada personaje individual.

“Entonces… y luego…” murmuró, el bolígrafo silbando. Pude ver dónde alguien podría pensar que se veía un poco raro. Pero pude ver su boca abrirse; Parecía que realmente se estaba divirtiendo.

Sí. Esto es genial, pensé. Estaba todo sobre ayudar a esta película a tener éxito.

Por supuesto, debido a que todo el asunto de la “película” era solo una artimaña, nunca íbamos a filmar el guion completo. Ya me había asegurado de que Eduardo lo supiera. Esto fue solo una base para que pudiéramos hacer una película parcial, como una vista previa o un avance. Pero aun así, estaba completamente atrapado en la pasión de crear una historia.

Y estaba especialmente ansioso por hacer de esto algo de lo que él estaría orgulloso de ser parte, incluso si no hubiera mucho de eso.

***

No hay tiempo como el presente: ese día en la biblioteca, Eduardo y yo elaboramos los contornos amplios de la historia y la trama, sin mencionar el escenario y los personajes principales. Luego le dije a Eduardo que, aunque sabía que era mucho pedir, quería que escogiera sus escenas favoritas y las convirtiera en un guion en los próximos días.

Esto se debió en parte a que no teníamos mucho tiempo para comenzar, pero también fue porque Eduardo apenas pudo contener su afán de seguir adelante con el proyecto. Mi papá me dijo que cuando realmente sientes lo que escribes, todo es fácil y estás desesperado por tener tu borrador en papel.

Él dice que es genial. Supuse que era más o menos cómo se sentía Eduardo en ese momento. Bueno, lejos de mí llover en su desfile. Pensé que lo dejaría golpear tanto como pudiera.

De todos modos, dejé a Eduardo en la biblioteca para que haga el guion, mientras Minori-san y yo nos dirigíamos al Castillo de Eldant. La gente en el castillo habría tenido el derecho de echarnos por presentarnos ante una solicitud tan repentina para una audiencia, pero tal vez la emperatriz tenía algo de tiempo extra en sus manos, porque nos llevaron a una sala de audiencia familiar.

Había varias salas de diferentes tamaños en el castillo, pero nos llevaron a la más pequeña, el lugar utilizado con frecuencia para reuniones personales. Por supuesto, “el más pequeño” es relativo: todavía tenía casi veinte esteras de tamaño.

“Siento mucho haber venido sin avisar, Su Majestad”, le dije, inclinándome humildemente ante Petralka, que ya estaba sentado en el trono.

“Seguimos diciéndote que no actúes tan distante con nosotros”, dijo Petralka, luciendo menos que emocionado.  “Y también debemos disculparnos, por lo de antes”.

Supuse que antes se refería al momento en que había desaparecido, dejándome incapaz de hacer mi informe matutino. Tal vez el hecho de que ella nos hubiera dado tiempo hoy con tan poca antelación fue su forma de disculparse.

“En cualquier caso, Shinichi. ¿De qué querías hablar?”

“Sobre eso, Su Majestad…”

Petralka me interrumpió. “Nuevamente, te pedimos que uses nuestro nombre, Shinichi. Tampoco necesitas hablar tan formalmente. ¿No actuarás con nosotros como lo haces habitualmente?” Ella frunció los labios como una niña haciendo pucheros.

Supuse que no había nadie a quien ofender al hablar casualmente con la emperatriz. ¿Dónde estaba el daño en relajarse un poco?

“En ese caso… Petralka”. Tosí un poco y luego dije: “¡Haz un contrato conmigo y conviértete en una chica mágica!”

“… ¿Qué?”

“¡Para!”

Golpear. Minori-san me dio un corte de karate en la parte posterior de mi cabeza.

“Awww…”

“Alégrate de haber usado mi mano y no mi Beretta”.

“Lo siento…”

A veces, lo mejor que puedes hacer es disculparte.

Le hice una reverencia a Petralka, que estaba parpadeando desconcertada. Ahora que lo pienso, ella todavía no había visto a Rental ☆ Madoka, ¿verdad? “, Y le dije:” Um, dejando a un lado la broma, quiero filmar un drama de acción en vivo. . ”

“¿” Drama de acción en vivo “?” Petralka frunció el ceño, pero sonaba intrigada.

“UH Huh. Quiero decir, bueno, es una historia o lo que sea. Maquillado, básicamente. Pero no está animado. Es real: has visto películas de acción en vivo, ¿verdad, Petralka? ”

“¿Te refieres a tokusatsu, acaso?”, Preguntó la emperatriz, ladeando la cabeza e invocando la palabra japonesa para programas de televisión y películas cargados de efectos especiales.

“Sí, más o menos”.

“Implican transformar y luchar contra el mal”.

“Bueno, también hay muchas otras cosas”.

Por supuesto, los superhéroes transformadores constituyen la mayor parte de los shows de tokusatsu. Solo entonces caí en la cuenta de que, aunque habíamos traído videos de Kamen R ** er, sentai superheroes y Ult ** man, todavía no habíamos importado nada que no implicara transformación. K- tai In *** tigator 7 o la versión de acción en vivo de Sengoku BAS * RA, ese tipo de cosas. Fue más fácil importar la serie con las carreras más largas… Pero eso no importa.

“¿Y de qué es esta” película “de la que hablas?”

“Oh. Uhh… ”

Nuestros anillos de intérpretes mágicos podrían comenzar a parecer todopoderosos, pero cuando usaste una palabra para la cual la otra persona simplemente no tenía concepto, se comunicó tal cual, sin interpretación, y a veces sucedió este tipo de cosas.

“Significa que quiero que nosotros, o realmente, la gente del Imperio Eldant, lo logremos. “Filmar” es lo que llamas hacer un show tokusatsu”.

“¡¿En serio?!” Petralka se inclinó hacia adelante en su trono. “¡¿Deseas que hagamos un tokusatsu?!”

“Bueno, estrictamente hablando, no es tanto un tokusatsu como una película de acción en vivo”.

“Ho. Muy interesante, eso. Petralka ladeó la cabeza. “¿Pero está bien?”

“¿Huh? ¿Qué está bien?”

No sabía lo que estaba preguntando, pero el primer ministro Zahar, que estaba junto a ella, explicó.

“Tales cosas son la exportación especial de tu Ja-pan, ¿no es así, Shinichi- dono? ¿Estás seguro de que es seguro revelarnos los secretos de su creación? ”

“………… Ah”.

Finalmente entendí. Los productos Otaku como este fueron el alma de la compañía de entretenimiento general, Amutech. Todo el modus operandi de la empresa consistía en importar anime, manga y juegos de Japón, venderlos y devolver las ganancias al negocio. Si la gente de Eldant aprendiera a hacer sus propias cosas otaku, ¿cómo haría Amutech para ganar dinero? Eso era lo que Petralka estaba preguntando.

“No te preocupes”, le dije. “Está bien. Los métodos no son realmente tan fáciles de imitar. Piense en ello como si fuera nuestro último “festival”. Simplemente disfrute el proceso de creación”.

El “festival” al que me refería era el torneo de fútbol. De hecho, Matoba- san había insistido en que no revelara la fuga de video al lado de Eldant. Si comenzaran a hacer preguntas sobre por qué el gobierno japonés estaba tratando de mantener en secreto la existencia del Imperio Eldant de su propia gente… bueno, habría muchas preguntas muy difíciles de responder.

No estaba especialmente feliz de engañar efectivamente a Petralka y a los demás. Sin embargo, dejando de lado las preocupaciones específicas del gobierno japonés, estaba seguro de que el Imperio Eldant no estaría feliz de escuchar que tenían que estar escondidos, como animales peligrosos o algo así. Entonces, por el momento, cumplí con la solicitud de Matoba-san.

De vuelta a la conversación.

“Muy bien. Tienes nuestra cooperación”, dijo Petralka, sonriendo con evidente placer. “¿Hay algo que necesitará, además de la disposición del personal?”

“Sí, sobre eso. Resulta que hay algo que quiero pedirte específicamente, Petralka. Es por eso que vine aquí hoy”.

“¿Qué es? ¿Necesitarás un nuevo edificio o algo así?”

“Uh, en la película…” Respiré profundamente y luego dejé salir todo de una vez: “Quiero que juegues a la heroína”.

“…………………………………………. …………………… ¿Qué?”

Sabía que sería una petición sorprendente, pero Petralka tardó bastante tiempo en responder. Sus grandes ojos verdes se habían entrecerrado de asombro y confusión, y su boca estaba ligeramente abierta. Finalmente se las arregló, “¿La heroína…?”

“Correcto”. Asentí. “La protagonista femenina”.

“¿Desea que nosotros…?”

“UH Huh.”

“……………….. ¿Por qué?” Probablemente nunca esperó que le pidieran que participara ella misma.

“Shinichi-dono”, dijo el primer ministro Zahar, luciendo preocupado. “Esto es muy poco ortodoxo”

Pero este no era el momento de dar marcha atrás. Esto fue cuando necesitaba empujar.

“Pensé mucho en quién debería interpretar al personaje principal”, dije, adoptando una expresión seria. “Esta es la primera película en la historia del Imperio Eldant, ¿verdad? El protagonista debe ser interpretado por alguien que refleje la importancia de este momento. Creo que la gente necesita ver a Su Majestad la Emperatriz en este papel”.

Esto no fue exactamente una mentira total, pero fue un poco fraudulento asegurarse de que Petralka estuviera de acuerdo con las cosas.

La verdadera razón por la que quería que ella interpretara al personaje principal era completamente personal. La imaginé durmiendo en esa caja de madera, llorando mientras soñaba con sus padres. Apenas podía soportar pensar en eso. Quería desesperadamente hacer algo por ella.

Si eso significaba ayudarla a aclarar su mente convirtiéndose en otra persona por un tiempo, bueno, tal vez eso sería suficiente.

Al menos tal vez podría dejar de huir para llorar sola.

Obviamente, si le dijera algo de eso a su cara, Petralka exigiría: “¿Te estás burlando de nosotros?” O diría: “¡No nos trates como a un niño!”. Estaba seguro de eso.

Entonces me cubrí con una mentira.

Ese tipo de mentira se puede perdonar… ¿verdad? “Hmm…”

Petralka se sumió en un pensamiento silencioso. Por un momento, temí que ya me hubiera descubierto.

“¿No es Myusel?”

¿Por qué Petralka pregunto por ella? “Bien, ¿Shinichi?”

“Er, lo siento, ¿de qué estás hablando?”

“¿Has venido a preguntarnos porque Myusel te rechazó?”

“¿Huh?”

Mis ojos se abrieron y descubrí que no tenía idea de cómo responder. La idea ni siquiera se me había pasado por la cabeza.

De hecho, sí, tenía la intención de pedirle a Myusel que formara parte de la producción, pero para un papel totalmente diferente al que quería interpretar a Petralka. Nunca había llegado más allá de imaginar lo divertido que sería filmar a las dos hermosas chicas riendo y charlando juntas.

“Hrm…”

Petralka parecía a punto de decir algo más, pero cuando vio lo sorprendida que me veía, se detuvo molesta. Ella apartó la vista de mí y puso la barbilla en sus manos. Parecía una niña haciendo pucheros.

En cuanto a mí, respondí, tan gentil pero tan claramente como pude, “No, Petralka. Te pregunto porque quiero que lo hagas”. Y eso no era mentira. “Le pedí a Myusel que apareciera en la película, pero ella tiene una parte completamente diferente a la tuya. No le he pedido a nadie más que a ti que interpretes a la heroína. Incluso hemos trabajado para hacer que el guion sea algo fácil de reproducir”.

Eso también era cierto.

Por supuesto, tuve que tener cuidado de no asustar a Eduardo, así que todo lo que dije fue: “¡Hagamos que la chica principal sea de aspecto joven, pero también fuerte de espíritu!”

“No quiero a nadie más para esta parte. Te necesito, Petralka.”

Se quedó callada por un momento, sin mirarme. Pero finalmente ella dijo: “Es… ¿Es así?”

Por alguna razón, sus pálidas mejillas se habían puesto sonrojadas.