Kimi to Boku no Saigo no Senjo, Aruiha Sekai ga Hajimaru Seisen

Volumen 4

Capítulo 5: Ejecucion por un cazador de brujas

Parte 5

¿Pero cómo sería eso útil? Realmente no podía ver que el poder de Sisbell fuera necesario en este instante, pero…

—¡Illumination, revive el esplendor de este planeta! —cantó.

Una luz fluía del pecho de la bruja. El poder astral respondió a la petición de su maestra, exhibiendo su verdadero valor en ese momento.

—Memoria  del  cosmos.  Para  todos  los  niños  que  alguna  vez  fueron olvidados.

Pasó a través de la eternidad e invocó la condición pasada del planeta y sus sonidos.

Hubo una gigantesca tormenta de arena, un vendaval que se tragó a Objeto. El viento se desató, azotando alrededor de la arena y la grava, e incluso rodeando los doce satélites con arena.

—¡¿Una tormenta de arena?!

—Es una imagen. Es la legendaria tormenta de arena que ocurrió hace ciento cincuenta años.

—…¡¿Esto es una imagen?!

No había viento, pero la arena se veía como si fuera real, volando alrededor y obstruyendo su visión. Incluso los sonidos del viento habían sido recreados.

No parecía una falsa tormenta de arena.

Ni siquiera Iska se había dado cuenta de que no era real hasta que se lo dijeron.

—La verdadera naturaleza de la Illumination es que puede ‘convocar fenómenos naturales’. Puede recrear estos espacios y sonidos, que he estado llamando “video” para abreviar.

…Si no me lo hubiera dicho, no lo habría sabido… Siento que estoy siendo hipnotizado o estoy alucinando.

Haría a los enemigos y a los aliados disolverse en el caos si se usara en el campo de batalla. Objeto no fue una excepción. Como los doce satélites perdieron la visión, sus sensores se obstruyeron completamente.

—Esta es mi única medida de defensa personal. Ni siquiera he mostrado esta gran escala de reproducción a la reina. Por favor, mantenlo en secreto — Sisbell sonrió; luego su boca se tensó.

— ¡Nos quedan cinco segundos! ¡No serás el objetivo de los sensores! ¡Rápido, ahora!

—¡De acuerdo! —Se sumergió en la tormenta de arena. Los granos de arena llenaron su visión, y el rugido hizo que sus tímpanos casi estallaran.

Dentro del gran vendaval de arena, encontraría a Objeto custodiado por los satélites.

Había expulsado toda su armadura. El soldado mecanizado se había vuelto delgado y delicado, como si tuviera el cuerpo de un humano. En el centro, la brillante energía astral parpadeaba cuando Iska le apuntó…

—Voy por ello.

Saltó del suelo.

En ese momento, Objeto se dio vuelta. Incluso en esta terrible tormenta de arena, los doce sensores fueron capaces de detectarlo en su rápida aproximación.

“Forma de Vida Integra”. 

La luz parpadeó.

El láser de alta densidad atravesó la sombra que se acercaba a Objeto. Pero no era la silueta de Iska.

Atravesó la gigantesca imagen de un depredador corriendo a su lado.

“¿¿¿…???” 

—Es un basilisco. Este desierto solía ser su hogar, pero eso no fue incluido como una de tus entradas, Objeto.

La bruja reveló su truco. Sisbell no sólo reprodujo la tormenta de arena. También creó una proyección de la bestia conocida como el rey del desierto.

La tormenta de arena fue hecha para ocultar la forma de Iska.

El basilisco fue creado para ser el señuelo de Iska. Ella había producido ambos.

—El conocimiento es poder. Deberías ir a estudiar la historia de este lugar.

Hubo un destello.

Iska destruyó el centro de Objeto con una puntería perfecta, usando su espada astral.

“-“

 El soldado mecanizado cayó boca arriba. Cuando su espalda golpeó el duro suelo, la luz del gigantesco agujero en su pecho se apagó.

Entonces dejó de moverse.

—L-le ganamos….

—De alguna manera. Pero fue mucho más fuerte de lo que pensé que sería

Pero no pudieron superarlo. Ahora tenían que usar algún tipo de truco para que pareciera que los magos de la Soberanía habían destruido a Objeto. Había rastros de los ataques de la espada de Iska en el pecho del soldado. Había un gigantesco agujero de los proyectiles que Nene le disparó en la espalda. Necesitaban esconder esas marcas.

—Y tenemos que comprobar lo que hay dentro. Miró al soldado que no se movió ni siquiera un poco.

—Tú también lo viste, ¿verdad? Esa luz de su interior.

—…Parecía energía astral.

—Eso es lo que pensé. No era electricidad.

¿Deberían examinar el motor de combustión? No pasaría mucho tiempo antes de que Nene volviera con Jhin y la capitana Mismis. Con ella, podrían…

“Movimiento imposible. Eyección del núcleo de ■■■■■.” 

Escucharon un sonido automatizado. Iska sintió un escalofrío en su columna cuando pudo detectar algo que venía del interior del soldado incapacitado.

¡¿Cuál es esa sensación extraña?!

 —¿Qué… qué es esa luz…? ¡Es una llama! —Sisbell bramó.

Desde los huecos entre la máquina y sus cables, podían ver llamas de color azul brillante lamiendo como vapor. La energía astral que una vez había desaparecido estaba ardiendo de nuevo.

… Y se eleva aún más fuerte que antes.

…No sé lo que está pasando… ¡No puedo tomarme mi tiempo para tratar de averiguar qué es esta cosa!

Estaban en peligro. Su cuerpo lo alertó, comenzando a sudar frío.

—¡Aléjate!

—¡S-sí!

Empezaron a correr al mismo tiempo.

Pero, después de dar unos pocos pasos, la chica cayó de rodillas. Con su estilo de vida en el palacio, sus piernas habían llegado a su límite después de haber corrido por los caminos escabrosos.

—¡Espera, Iska!

—…¡¿Sisbell?! —Se dio la vuelta cuando la chica gritó.

Para entonces, ya era demasiado tarde. La luz que se filtraba del soldado había alcanzado su límite crítico.

—Ayúdame…

Algo se disparó.

La explosión se expandió como si estuviera engullendo toda el área.

—¿Qué crees que le estás haciendo a mi hermana?

—Freeze.

Eso había dado paso a una pared de hielo. Era una de las barreras más fascinantes del mundo. Se erigía sobre Iska y Sisbell como el muro de un castillo. Contenía las llamas y hacía desaparecer la ola de calor antes de que pudieran parpadear.

—¡¿…Alice?!”

—Te encontré, Sisbell. Era Aliceliese Lou Nebulis IX.

Con su hermana mayor expuesta al viento del desierto, Sisbell abrió mucho los ojos.

—¿Por qué estás aquí?

—Porque tengo algo que necesitaba discutir contigo. Pero podemos dejar eso para más tarde… Iska, ¿qué está pasando aquí?

Sin aliento, Alice se dio vuelta. Se enfrentó al espadachín imperial que tenía su espada en la mano.

La Bruja de la Calamidad Helada Alice sabía que Iska había luchado para capturar a un purasangre como el Sucesor de Black Steel.

En otras palabras, ¿era Iska el soldado imperial que tenía como objetivo a su hermana?

—No fuiste tú.

Alice miró fijamente a Iska y frunció el ceño.

El enemigo de Sisbell no era Iska. La misma Sisbell estaba acurrucada contra su espalda como si se estuviera escondiendo.

—Ponme al tanto. Quiero saber lo que acaba de pasar.

—¿No lo sabes?

Más allá de la llama apagada y el humo había un objeto opaco arrastrándose por el suelo.

Era índigo con una silueta humanoide brillante. Ese era el núcleo de Objeto. Todo el cuerpo del núcleo irradiaba una luz similar a la energía astral.

—¿Esa cosa parece nuestro aliado? —Preguntó Iska.

—…Me alegro de que sea tan obvio. De todos modos, creo que nuestra prioridad es luchar contra ese fantasma.

Alice asintió con calma y se volteó hacia la forma brillante. Un fantasma.