Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 13

Capítulo 2: Presagio

Parte 1

Aquí Satou. No estoy seguro de que me guste la frase: “la forma más rápida de llegar al corazón de un hombre es a través de su estómago”, pero sí creo que usar algún tipo de beneficio como una “zanahoria” colgando delante de alguien es un método probado y verdadero. Es mucho más fácil trabajar duro cuando puedes ver la meta delante de ti.

“Esta es una participación mayor de la que esperaba.”

Unos días después de que forjé un contrato con un Núcleo de Ciudad en el gran desierto, fui a ver cómo iban las cosas en el campo de entrenamiento del gremio, donde ofrecíamos clases para aspirantes a exploradores.

“Sí, así es.”

La persona que me guio allí era una secretaria del gremio que se ocupaba de organizar los conferenciantes, reclutar estudiantes y otras cosas similares para la clase.

Gracias a ella, todo lo que tuve que hacer fue proporcionar los gastos operativos y ayudar a elaborar los planes de las lecciones iniciales.

“Ayuda el hecho de que muchos niños esperen enriquecerse rápidamente al recopilar recetas artesanales en estos días, pero creo que muchos de ellos también buscan la comida que se sirve después de la lección.”

Había algunos adultos entre los estudiantes, pero la gran mayoría eran niños en edad de estar en la escuela media.

Muchos de ellos realmente parecían estar entusiasmados con la comida: cuando el aroma de la sopa comenzó a fluir desde la cocina del gremio, inmediatamente comenzaron a inquietarse.

“Parece que será mejor que terminemos acá.”

Tan pronto como los instructores declararon que la clase había terminado, los niños corrieron en estampida hacia la pared del fondo, formando tres líneas perfectas.

“¿Son esas las líneas para recibir comida?”

“Sí, eso es correcto. Los niños parecen ser muy buenos para formar filas ordenadas en estos días… tal vez gracias a sus comedores de beneficencia, Sir Caballero.”

Supongo que el arduo trabajo de mi grupo para acomodar a los niños cuando comenzamos el comedor de beneficencia dio sus frutos.

“¡Hoy hay carne!”

“Dios, qué festín.”

“Esta vez seguro voy a acertar la pregunta y ganare un extra.”

“¡Yo también! He tomado esta lección dos veces.”

Los niños charlaron con entusiasmo mientras veían a los chefs del gremio sacar ollas de sopa y carne a la parrilla.

En cuanto al “extra” del que estaban hablando…

“¿Qué es lo único que debes hacer cuando usas una bomba de destello?”

“¡Avisarles a tus camaradas que la vas a usar!”

“Eso es correcto. Veo que estabas prestando atención. Toma, come un trozo extra de carne.”

“¡Yaaay!”

… Si los niños pudieron responder correctamente una pregunta sobre la lección del día, obtendrían un poco más de comida.

Muchos de los niños tendían a quedarse dormidos durante la clase, así que Arisa había propuesto esto como una contramedida.

“A los instructores también les encanta, ya que significa que los niños escuchan atentamente durante la clase.”

“¿La mayoría de los instructores son mayores?”

“Sí, tratamos de emplear a exploradores jubilados que sean buenos con los niños.”

“Entonces, ¿es suficiente la cantidad de dinero que presupuestamos para el personal?”

Había estado planeando emplear a exploradores más jóvenes con al menos dos o tres años de experiencia, por lo que la cantidad de dinero que le di al gremio para contratar no fue muy alta.

“Oh, es más que suficiente. Tenemos tantos solicitantes que ha sido difícil delimitar.”

La secretaria del gremio miró a los instructores, que eran todo sonrisas mientras comían, rodeados de sus estudiantes.

Tal vez estaban felices de que su sabiduría se transmitiera a las generaciones más jóvenes.

Satisfecho con lo que había observado de la clase, regresé al salón principal del gremio junto con la secretaria.

“¿Soy solo yo, o hay más vida de lo habitual por aquí?”

El salón del gremio siempre estaba lleno de gente, pero hoy muchos de los exploradores parecían estar de buen humor, especialmente los más jóvenes.

“Es gracias a las pociones de veria.”

Las pociones de veria eran pociones curativas mágicas hechas de una planta suculenta que crecía en grandes cantidades alrededor de la Ciudad Laberinto.

Originalmente fue popularizada por el elfo sabio Trazayuya, pero la receta se había perdido a lo largo de los años y estaba en camino de convertirse en leyenda y una forma común de fraude.

“¿Te refieres a esos fragmentos de recetas que se encontraron en el laberinto?”

“Sí, el gremio de exploradores y el gremio de alquimistas están ofreciendo recompensas por los fragmentos, por lo que hay muchos exploradores que esperan hacerse ricos, incluidos algunos de los aspirantes a estudiantes de nuestras clases.”

Parte de la razón por la que el gremio estaba tan animado era que la gente estaba intercambiando información sobre áreas que ya habían explorado y esas cosas.

Por cierto, fui yo quien distribuyó esos fragmentos de recetas en el laberinto.

Había una necesidad obvia de que estas pociones más baratas estuvieran ampliamente disponibles en la Ciudad Laberinto. Gracias a eso, desarrollé una receta utilizable por humanos

basada en la receta original hecha en pizarras de sellos de elfos, la dividí y escondí las piezas en cofres del tesoro dentro del laberinto.

Simplemente podría haber llevado la receta a los gremios de exploradores o alquimistas como Kuro o yo, pero pensé que sería mejor si los exploradores pudieran llevar la receta a la Ciudad Laberinto con sus propias manos.

La búsqueda del tesoro siempre es divertida, después de todo, y le da a la gente algo por lo que tener esperanza.

“Junto con las recetas, también se han encontrado pociones de vería reales en cofres del tesoro, por lo que muchos exploradores jóvenes las venden para comprar equipo nuevo.”

Gracias a eso, el negocio en los distritos comerciales también estaba mejorando.

Mirando alrededor del gremio, pude ver que había muchos más jóvenes con equipo de aspecto más nuevo que antes.

… ¿Violeta? 

Un destello violeta pasó junto a mis ojos.

Por un segundo, pensé que debía ser Arisa, pero la cara que se asomaba por la capucha parecía ser la de un chico perro.

La figura ya había desaparecido entre la multitud, así que intenté buscar en mi mapa reencarnados o demonios, pero no salió nada. Supongo que tener el cabello o el pelaje morados no siempre significaba que alguien era un reencarnado.

Curioso, intenté usar Clarividencia para buscar en el gremio y el área circundante, pero no pude volver a encontrar a la chica.

“¿Te pasa algo?”

“No, solo pensé que vi a un chico perro con pelaje púrpura, lo que me pareció inusual…”

“¿El color maldito? Sí, eso es bastante raro.”

A juzgar por su tono, la secretaria tampoco había visto nunca antes a esta persona.

Le pedí que preguntara por el nombre del chico si lo veía por ahí. Si supiera su nombre, podría buscar en mi mapa más fácilmente, y luego podría averiguar si era alguien de quien debíamos preocuparnos.

Me separé de la secretaria del primer piso y fui a la oficina de la jefa del gremio. “Hola, Satou. ¿Escuché que le ganaste a un jefe de área?”

“Nada se te pasa.”

Mi grupo ya había derrotado a más de veinte jefes de área, pero solo informé de uno de ellos al gremio.

Si vendía los núcleos de jefe de área al gremio, podría obtener una recompensa bastante considerable, pero en cambio nos aferramos a ellos y declaramos que próximamente derrotaríamos a un Amo de Piso.

“¡Espero que no! Soy la jefa del gremio, ¿recuerdas?”

Eso no es muy convincente cuando estás aquí holgazaneando en el sofá mientras tus lacayos hacen el trabajo.