Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 7

Extra 6: ¿Atelier Leona? La Alquimista Con Nada Más Que Trampas

“Mhmhmhmhmhmhm, mhmhmhmhmhmmm”. Leona se dirigió a Tsia mientras tarareaba y recogía rocas. Por cierto, se había quitado su atuendo de monja y lo reemplazó con un par de túnicas de mago. O bien, el cinturón con tubos de ensayo en ella la hacía parecer más una alquimista, y el sombrero puntiagudo en su cabeza era inconfundiblemente el de una bruja, pero aun así. Fuera ella se fue.

Después de dejar atrás la [Cueva de la avaricia] y su Succubi, Leona no tenía nada que la atara. Comenzó a preguntarse a dónde podría ir para divertirse, pero al abrir la cartera cerrada en el bolsillo de su pecho, vio que solo tenía unos pocos cobres. En verdad, ella podría sacar una cantidad prácticamente infinita de dinero de su {Wallet}, pero sintió la necesidad de que el juego de roles fuera pobre por un tiempo.

“{Ultra Alchemy}, {Ultra Alchemy}, {Ultra Alchemy}. Ah, y una {Ultra Alchemy} más, solo por diversión.” Cambió las piedras que había recogido en Alchemist Stones. Cualquier persona sabia en los caminos del mundo echaría un vistazo a las piedras rojas como gemas y se daría cuenta de que eran más valiosas que un lingote de oricalco del mismo tamaño. Pero para Leona no tenían más valor que grandes caramelos que podía comer tanto como quería.

“Ahhh, parece que dejé caer mi dinero. ¿Te importa si pago la tarifa de entrada con esta roca?”

“… ¿Una piedra preciosa? No sé si esto será suficiente. ¿Tienes más?” Preguntó el guardia, así que Leona le puso cuatro rocas más en la mano. “Bueno, eso probablemente no sea suficiente, pero está bien. Puedes entrar.” La puerta sur de Tsia estaba menos protegida que las demás, y Leona se abrió paso entregándole al guardia (que no era sabio en los caminos del mundo) Piedras Filosofales. Ni siquiera verificó la identificación, tal vez gracias a que ella le dio cinco.

Por cierto, solo por diversión, Leona puso un límite de tiempo a las Piedras Filosofales que las convirtieron en rocas después de un tiempo suficiente. El guardia probablemente tenía razón cuando dijo que no valían tanto como la tarifa de entrada, pero ya dijo que podía entrar.

Ahora. Ella estaba en Tsia, pero ¿cuál es la mejor manera de ganar dinero? Leona podría ganar dinero de la nada si quisiera. Pero eso no sería divertido. Entonces, ella decidió hacer drogas en su lugar. Con eso en mente, caminó hacia la posada más cercana para conseguir una habitación. Trabajar mientras caminaba era solo un lastre.

“Umm, ¿puedo pagar con gemas?”

“¿Hm? Ah, un aventurero. Claro… pero, ¿qué clase de gemas son estas?” “Mmmm, ¿rocas que recogí?”

“Hmm. Bueno, estos serán buenos por hoy. Haré que el joyero de al lado los vea. Te devolveré el cambio si valen demasiado. Pero no se preocupe, todavía cubrirán su habitación por hoy, incluso si no valen lo suficiente”.

“Oh, no te preocupes por el cambio. Los acabo de encontrar en el suelo, estoy seguro de que no valen demasiado”.

“¿Estás seguro? Muy bien, los guardaré. Como agradecimiento, te daré comida gratis”.

“Está bien, entonces te daré otro gratis”. Además, estas Piedras Filosofales no tenían ningún límite de tiempo como los que ella le dio al soldado. ¿Por qué? No hay razón, por supuesto.

Leona se puso a trabajar fabricando drogas en su habitación de inmediato.

“{Water Cup}, {Ultra Alchemy}, {Ultra Alchemy}”. Llenó una botella de poción vacía con agua, luego se derritió en Philosopher Stones usando Ultra Alchemy. Así completó el [Elixir]. [Los elixires] eran una droga mágica que incluso podía curar el envejecimiento mismo. Uno solo de ellos valía más que el presupuesto de un país pequeño entero. Pero Leona siguió con

{Ultra Alchemy}.

El resultado fue un trastorno de género [Futanaruu (sin diluir)]. Al beber este, se convertiría en un híbrido masculino-femenino conocido como futanari, lo que introduciría más caos en el mundo.

“Esto es demasiado fuerte sin diluir, así que lo mezclaré con algunas pociones aleatorias, y… ¡listo!” Por lo tanto, en cuestión de minutos creó veinte pociones [Futanaruu] que durarían cada año una vez borracho. Ella usó veintidós piedras filosofales en el proceso. Dos por hacer el [Futanaruu], veinte por convertirse en pociones al azar. Aunque al final todos vinieron de lo mismo (rocas que encontró en el suelo).

“¡Ahora solo necesito venderlos a una tienda de artículos y ya he terminado! Ahhh, seguro que amo el dinero fácil.” Por cierto, la comida sabía muy bien. Fue abrumadoramente peor de lo que Keima sirvió en su Posada Muñeca Danzante, pero bueno, no era justo comparar nada con sus cosas.

Al día siguiente, fue a una tienda de artículos para vender las drogas. “Bienvenido.”

“Sí, hola. Quiero vender estas drogas”.

“Ahhh, ¿eres un alquimista? Podemos establecer un precio después de ver lo que estás vendiendo”.

Leona se adelantó y puso las veinte pociones [Futanaruu] sobre el mostrador. En el momento en que los vio, los ojos del dueño de la tienda se abrieron.

“… los compraré. Por favor, déjame comprarlos. Iré a abrir mi caja fuerte, espera un momento”.

“Oh, ¿tienes habilidad para identificar drogas? Eso acelera esto”. Leona usó sigilosamente su habilidad {Ultra Identification} y vio que tenía una habilidad lo suficientemente fuerte como para identificar los efectos de las pociones. En poco tiempo, regresó con una bolsa llena de monedas de oro.

“… lo siento, esto es todo lo que tengo en la caja fuerte en este momento. Tomaré tres”.

“Claro, está bien. Eso está bien para mí”. Por un segundo, Leona se preguntó qué debería hacer con los otros diecisiete, pero como la bolsa de oro era más que suficiente por el momento, decidió tirar el resto al siguiente baño que vio. Eran drogas de las que podía hacer una cantidad infinita, después de todo, gracias a sus habilidades.

Y así, Leona continuó su viaje sin experimentar ningún problema de dinero.

-FIN DEL VOLUMEN 7-