C³ – Cube x Cursed x Curious

Volumen 15

Capítulo 1: La criatura que supuestamente es mi padre / “Su cumpleaños (I)”

Parte 4

 

 

Mientras sonreía cordialmente Isuzu ayudó con la construcción del castillo de arena.

“Permíteme decirlo con miedo y temor; este aire está realmente pesado con la primavera de la juventud~.”

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“Eso es muy cierto. Esta presencia es muy agridulce, toca las fibras de tu corazón… Es insoportable~.”

Kuroe estuvo de acuerdo desde el fondo de su corazón y lanzó una mirada de reojo a la dirección de la sombrilla. Casualmente, eso fue justo cuando Kotetsu se precipitaba desde allí, dando un poderoso salto hacia el mar como si se suicidara. Permaneciendo en la escena, Konoha y Haruaki se miraban a los ojos bajo una atmósfera inusual. Entonces, inmediatamente, Fear y Kirika se acercaron a la sombrilla desde diferentes direcciones.

“Hmm~. Otra vez el sabor de la juventud.”

Ahora se estaba poniendo interesante. Pero al mismo tiempo, Kuroe también se sintió preocupada.

El “cambio” era inevitable, pero al final no deseaba que las cosas se convirtieran en un caos. “Desequilibrio” Pensó Kuroe. Por lo tanto, decidió prestar atención en todo momento, para, al menos, evitar que surja ese tipo de situación.

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Por supuesto, ella no tenía intención de interferir con sus, o más bien, sus conclusiones. Si él le preguntara, ella le ofrecería consejos, pero en última instancia, esperaba seguir siendo imparcial y debía seguir siéndolo. Esta era la regla del observador.

Sin embargo, sus sentimientos actuales estaban inclinados a animar a la chica que estaba un poco atrás.

“La situación actual se siente como: ‘Aunque se ha dado cuenta de sus propios sentimientos… todavía no sabe cómo expresarlos~.’ Después de todo, eso está relacionado con el conocimiento y la experiencia.”

Caminando con un flotador a su alrededor, Fear vio a los dos debajo de la sombrilla, luego, después de ver a Kirika, de repente se congeló. Ella procedió a buscar sospechosamente entre sus pertenencias, y se fue rápidamente después de obtener su bolso.

Kuroe entendió que ella había huido.

“Además, ella nunca ha experimentado interacciones íntimas con los demás, por lo que también está completamente perdida en esa área. Incluso si pudiera llegar a una conclusión por sí sola, una vez que agregas a otras personas, queda muy poco claro. Parece que Ficchi enfrenta desafíos en todo tipo de formas.”

“¡Aunque no entiendo bien, creo que las pruebas y tribulaciones son parte de la llamada juventud!”

“… Quizás.”

Mirando hacia atrás a la sonriente doncella del santuario, Kuroe también sonrió.

Para Fear, superar esos obstáculos era muy importante. Por lo tanto, Kuroe no iba a ayudar.

Sin embargo, Kuroe creía que al menos debería decir: “Haz lo mejor que puedas”. Darle un empujón a Fear debería estar bien. Un pequeño empujón, como por ejemplo, cuando dudaba si dar un regalo de cumpleaños, al menos un ligero empujón desde atrás.

“Hmm. De todos modos, no creo que lo haya traído aquí, así que tendrá que esperar hasta que regresemos a casa~…”

Kuroe simplemente murmuró y luego volvió su atención a la dirección de la sombrilla.

Ahora Haruaki volvía a estar solo. Con una mirada distraída, estaba pensando en algo.

Incluso hacia Haruaki, la política de Kuroe seguía siendo la misma. Ella no podía ayudarlo directamente. Por lo tanto…

(Un dilema es natural. Pero tarde o temprano, debes encontrar tu propia respuesta… Haz tu mejor esfuerzo, Haru.)

Como si rezara, Kuroe solo podía susurrar suavemente dentro de su corazón.

***

 

 

Kirika caminó hacia adelante, su corazón lleno de auto-desprecio. Naturalmente, ir al baño era una mentira. Fue solo porque no estaba segura de sí podía quedarse allí; solo porque se sentía incómoda. Por eso se fue.

Aunque ya había llegado al frente de la villa del superintendente, sería demasiado doloroso entrar solo por establecer una coartada. Decidió pasear casualmente por los alrededores para matar el tiempo. Luego, caminando con la cabeza ligeramente baja, pensó en lo que sucedió en este momento.

(Está usando… una correa de teléfono celular que nunca antes había visto.)

Probablemente era el regalo de cumpleaños de Konoha. Bastante temprano, Kirika había notado los sentimientos de Konoha. No sería una exageración decir que lo había sabido desde que conoció a Konoha.

Ella necesitaba a Konoha como una rival formidable. Para completar su confesión anterior que aún no se consideraba completa, tenía que hacer que Konoha regresara. Pero, de hecho, ella había rescatado a Konoha. No solo eso, sino que Konoha también había hecho una declaración aún más progresiva frente a ellos, ahora que las cosas habían llegado a este punto…

(… No.)

Mientras daba vueltas sin sentido alrededor de la villa, Kirika sacudió la cabeza ligeramente.

¿Y qué? Konoha era Konoha mientras que ella era ella misma. Así es, ¿no es así, Ueno Kirika? Absolutamente ridículo.

Todo lo que tenía que hacer era confiar en sí misma y esforzarse al máximo. Cuando llegara el momento, ella sería capaz de aceptar la conclusión sin importar el resultado. Mientras luchara de manera justa, luchando, luchando hasta el último momento, definitivamente no se encontraba patética y era capaz de avanzar aún más directamente que antes. De hecho, respecto a esto, ella era bastante similar a Konoha. Ambas creían que solo al expresar sus sentimientos hacia él podían continuar avanzando.

“Esfuerzo total, ¿eh…?”

Regalo de cumpleaños. En este frente, estaba en marcado contraste con Konoha, que había tomado medidas como si fuese a pelear una guerra a caballo, priorizando la velocidad y las tácticas sorpresa. Ella no había traído el regalo de cumpleaños a este lugar. Esta visita a la playa estaba destinada a concluir el mismo día, por lo tanto, Kirika tenía la intención de regresar a casa antes de verlo de nuevo esa noche para entregarle el regalo. Hacerlo le proporcionaría una razón legítima para visitar la casa de los Yachi.

“… Qué chica tan calculadora soy, absolutamente ridículo.”

Ella murmuró en auto-desprecio. Sin embargo, era distinto para ella puesto que a diferencia de Konoha y los otros, ella no vivía bajo el mismo techo que él. A menos que ella deliberadamente creara oportunidades para verlo, era imposible oponerse a las otras rivales. Por lo tanto, esta era su forma de luchar…

Caminando mientras contemplaba estos asuntos, Kirika terminó un círculo alrededor de la villa. Como había afirmado ir al baño, le preocupaba que Haruaki pudiera comenzar a imaginar cosas perturbadoras si pasaba demasiado tiempo. Kirika decidió que era hora de regresar a la sombrilla.

La textura de asfalto debajo de sus sandalias dio paso a la sensación de arena suave cuyo pequeño susurro sonaba bastante agradable al oído.

Kirika miró hacia adelante para ver que todavía estaba sentado bajo la sombrilla, reflexivo. Pensando: “Esta vez, realmente es mi turno de vigilar las pertenencias”, Kirika se acercó a él por detrás:

“¡…!”

Luego se detuvo en estado de shock.

Porque ella lo escuchó. En ese momento, Haruaki estaba murmurando para sí mismo. Indudablemente, vino directamente del corazón; palabras muy crueles.

Después de que Fear, Konoha y Kirika se fueran, incluso después de mucho tiempo… Permaneciendo bajo la sombrilla, Haruaki seguía pensando.

Pensó en lo que sucedió justo ahora, las tres chicas que se habían comportado un poco rígidas.

(… Ya veo, no es solo mi propio problema…)

Konoha había presenciado la escena cuando Kirika le confesó sus sentimientos. Kirika y Fear habían presenciado la escena cuando Konoha expresó sus sentimientos. Eran conscientes de los sentimientos del otro. Y él también lo sabía…

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(¿Qué tengo que hacer?)

Para ser sincero, le resultaba un poco difícil llevarse bien con todas.

¿Por qué fue eso? Él lo sabía muy bien. Porque estaba evitando a Konoha y Kirika. Porque no tenía idea de cómo debía interactuar con ellas.

Dicho esto, ¿qué era una confesión? Haruaki reflexionó. Significaba agradar a alguien. Significaba transmitir este hecho. Naturalmente, él podía entenderlo. Haruaki también era un chico común. En ocasiones tales asuntos cruzarían su mente.

Sin embargo, justo cuando trataba de seguir pensando más, instantáneamente, quedó en blanco.

¿Qué buscaron Kirika y Konoha de él? Él no sabía. Por ejemplo, normalmente hablando, supongamos que comenzará a salir con una de ellas. Él mismo saliendo con Konoha. Él mismo saliendo con Kirika. Al tratar de imaginar esas escenas, no pudo. Demasiado difícil. Todo su cuerpo sentía picazón. Trató de ir más allá e imaginarse haciendo actividades ordinarias de pareja; tampoco podía imaginarlo. Al instante, su cerebro y corazón alcanzaron un estado de saturación.

Suspiro…”

Haruaki sacudió la cabeza, colocó las manos en la espalda baja y enderezó la columna. Ante él apareció una escena pacífica a la vista. Shiraho y Soberanía estaban jugando voleibol de playa con Chihaya y las campanas kagura. A punto de terminar su castillo de arena, Kuroe fue asistida por una de las campanas kagura. Ya que ella estaba hablando, esa sería Isuzu,

¿verdad? Fear estaba tomando un refresco Ramune, caminando mientras buscaba conchas bonitas y otras cosas. Konoha y Kotetsu estaban nadando juntos.

Una escena conmovedora que parecía simbolizar su vida normal.

En efecto. Después del regreso de Konoha, sus días volvieron a la normalidad. Sin embargo, precisamente por eso, había recuerdos que debía perpetuar. Algunas cosas no deben ser olvidadas.

Ya le había prometido a Kirika darle una respuesta después de que Konoha regresara a casa.

En este momento, debido al caos y la atmósfera ambigua que rodeaba el regreso de su padre, era simplemente similar a los múltiples tiempos muertos que se forzaban al final de un partido de básquet muy reñido. Debía encontrar una respuesta. Sin embargo, ¿cómo debería responder?

Pensando, pensando, pensando.

Seguir pensando en un tema determinado sin ninguna respuesta a la vista, hablando de forma sincera, era bastante difícil y doloroso.

Por lo tanto, Haruaki no pudo evitarlo… El decir palabras de resignación.

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Suspiro… Si solo el status quo pudiera mantenerse para siempre…” “¡!”

En ese instante

Escuchó el sonido de arena siendo triturada. Haruaki miró hacia atrás y se sorprendido al ver…

Mirando con los ojos muy abiertos en estado de shock, a Kirika totalmente paralizada.

***

 

 

Esas fueron… Palabras crueles

¿Por qué había hecho algo así?

-Porque ella quería cambiar. Porque ella creía que la fuerza de voluntad misma de aceptar el cambio de frente serviría como fuerza para seguir adelante. Sin embargo. Sin embargo…

“Representante de clase…”

Se levantó frenéticamente. Pero… “¡Aléjate! ¡No hables!”

Kirika  gritó  brevemente  y  luego  se  dio  la  vuelta.  Podía  sentirlo  deteniendo  de  forma repentina su intención inicial de correr.

Sintió  que el mundo giraba,  como si estuviese mareada. Él  estaba  en  lo  correcto.  Por supuesto. Sin embargo…

“… Lo sé. Puedo entender cómo te sientes. Pero, por lo tanto, por favor. En este momento, solo ahora… No digas… nada. Tampoco hagas nada. Por solo un minuto…”

“Representante de clase…”

Sus deseos fueron transmitidos. Se quedó allí detrás de ella, paralizado. Muy probablemente, todavía mirando a su espalda.

Kirika exhaló en silencio, tratando de convencerse de calmarse.

Durante este minuto que había obtenido, reflexionó sobre lo que debía hacer a continuación.

¿Qué acción debería tomar ella como el siguiente paso? Había innumerables formas de reaccionar.

¿Debería ella interrogarlo con ira? ¿O reprenderlo con lágrimas? ¿Abrazarlo con hombros temblorosos? ¿Tomarlo en sus brazos y robarle un beso? O disculparse y huir… Sin embargo, cada elección era tan absolutamente ridícula.

Al final, ella eligió recordárselo.

Todavía con la espalda hacia él, ella dijo.

“Lo sigo en serio… no pretendo… esperar para siempre.”

Responde. Responde. Incluso si era una declaración de derrota. Que diese pruebas de que ella había peleado.

“No soy el tipo de… chica desvergonzada que… puede seguir dando vueltas… mientras que tú puedes seguir persiguiéndome ambiguamente…”

A través de su espalda, podía sentir su cuerpo entero estremecerse por la sorpresa.

Sí. No había problema con no poder transmitirle sus sentimientos de amor. Tampoco le importaba que la rechazaran. Tal vez, esa sería la conclusión natural.

Sin embargo, si esa confesión fuera tratada como si nunca hubiera sucedido, ese sería el resultado más trágico para ella. Porque eso significaría que su confesión, su existencia, significaba solo “aquel instante” para él.

Si eso realmente se hiciera realidad…

Entonces, tal como le había dicho justo ahora, no era una chica tan descarada. Pedirle que actuase como si nada hubiera pasado, que continuara compartiendo el mismo espacio que él, para ella eso sería imposible cumplir.

(¡…!)

Kirika se mordió el labio y finalmente lo admitió. En otras palabras, el peor de los casos.

A saber, que su relación con él, terminará aquí.

Haruaki  también  se  dio  cuenta.  Su  leve  temblor  de  espalda  estaba  suplicando  sin incertidumbre.

Palabras pesadas. Sin embargo, también eran perfectamente naturales. Si no me enfrentas correctamente, no podré quedarme aquí más tiempo. Este era definitivamente el significado de sus palabras.

Ella era así de seria. Usando palabras serias para expresar sus pensamientos. Esto era lo que ella le había transmitido ese día.

Haruaki  había  pensado  que  entendía  mentalmente,  pero  fue  ahora  que  realmente  se convirtieron en sentimientos reales, apuñalándolo en el corazón.

Ah, de hecho. Escapar no era una opción. Él debía enfrentarla y pensar con seriedad.

Frente a su seriedad, él también debía responder con seriedad. No se le permitió escapar solo porque era difícil y doloroso.

“Representante de clase… ahora lo entiendo. Lo siento, no puedo garantizar que pueda responderte ahora, pero en el futuro cercano, definitivamente…”

Justo cuando Haruaki estaba en el medio de su oración… “¿¡Nuoh!? ¿Qué es eso? ¿Qué está pasando?”

Los gritos de Fear se escucharon, luego Haruaki notó rápidamente a las personas cercanas clamando. No solo su grupo jugando en los alrededores, sino también los otros bañistas de la playa en el tramo de arena adyacente.

“¿Es algún tipo de evento?”

“Ni idea. De todos modos, ¡es espectacular!”

Mientras miraban en la misma dirección la gente hablaba sin parar. Naturalmente, Konoha y los demás habían dejado de nadar y retozar y ahora estaban mirando hacia ese lado.

Haruaki y Kirika también desviaron sus miradas bajo la misma influencia. Entonces lo que los dos vieron fue…

***

 

 

El segundo piso de la villa tenía un balcón con excelente exposición al viento. Apoyando la parte superior de su cuerpo contra la barandilla, Yachi Honatsu miró a lo lejos. Bajo el clima soleado, vestía traje de baño con una parka en la parte superior. La brisa se sentía muy cómoda.

El balcón ofrecía una amplia vista del paisaje. Un sentimiento muy abierto. El mar y el cielo se extendieron hasta los confines. Los dos tonos de azul permanecieron absolutamente distintos, pero se inclinaron juntos a lo largo del horizonte como un par de gemelos inseparables. Una vez que llegase la puesta del sol, esos gemelos iban a vestirse glamorosamente en colores maravillosos, llevando a cabo un desfile de moda con solo ellos dos.

“Hmm~. Qué gran villa. Estoy tan celosa… Por cierto, esta villa debe ser muy cara, ¿verdad? Me he estado preguntando esto desde hace mucho tiempo, ¿te involucraste en algún tipo de villanía para hacer tanto dinero, Gab-chan?”

“¡Jajaja! Ya sea en el pasado o en el presente, nunca he ganado dinero de una manera que produzca una retribución divina.”

Cerrando un ojo como si estuviera guiñando un ojo, Honatsu sonrió con ironía mientras giraba la cabeza para mirar detrás de él.

Caminando hacia él estaba el hombre con una máscara de gas, vestido, como de costumbre, con un traje a pesar del clima soleado. Siguiendo detrás de él estaba su secretaria, Houjyou Zenon, transportando su maleta con ruedas. Como nota al margen, había una persona más a la vista, actualmente descansando, tomando una siesta en el interior, su hermana mayor Houjyou Ganon. Para dar la bienvenida al grupo de Haruaki a esta villa, los había estado esperando desde la madrugada.

“Mis disculpas, el vuelo se retrasó.”

“Esas cosas no se pueden evitar. Aunque no tengo idea de dónde fuiste.”

El dueño que había llegado más tarde de lo esperado, Sekaibashi Gabriel, continuó caminando y se paró junto a Honatsu. Al igual que Honatsu, se apoyó contra la barandilla y miró hacia afuera.

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En medio de las chicas que parecían estar divirtiéndose, solo había una persona que parecía aburrida sin nada que hacer; el hijo. Más exactamente, parecía distraído. Esto también era parte de la juventud. Honatsu sonrió con ironía.

“Escuché que hoy es el cumpleaños de Haruaki-kun. ¿Es por eso que regresaste a Japón después de una ausencia tan larga?”

“Hmm~, supongo, algo así. Después de todo, es el cumpleaños de mi único hijo~.” Honatsu se rio y dijo:

“También he preparado un regalo maravilloso. Pero incluso después de decirle eso, Haruaki hizo una mirada muy cautelosa, qué lástima por los buenos modales~. Sin embargo, como su padre le dije las reglas apropiadas, que no le daría el regalo a menos que se comporte como un niño obediente…”

“Aunque superficialmente, parece que te estoy hablando muy normalmente, lo siento, mi curiosidad y otras preguntas en mi mente me están matando. Honatsu-san… ¿Qué te pasó?”

“Muchas cosas. Entonces, ¿por dónde debería comenzar~?”


El querido y antiguo amigo pareció suspirar antes de sacudir la cabeza con exasperación.

“Dado lo lejos que retrocedemos, no hay necesidad de forzarse a imitar el tono de voz de una mujer para que coincida con su apariencia.”

Honatsu relajó su tenso rostro e inmediatamente…

“… Sekaibashi-kun, no me estoy forzando, ¿sabes? Me parece que sería menos problemático si los desarrollos actuales continúan.”

Aunque todavía era una voz de mujer, estas palabras, para los oídos de Sekaibashi, definitivamente sonaron como el ya ausente Yachi Honatsu. Después de un momento de silencio, se encogió de hombros con ligero alivio y dijo:

“Bien, ya que has tomado tu decisión, esto también está bien. Tampoco es como si me importase.”

“Lo mismo digo. ¿O en su lugar debería usar pronombres femeninos? Siento que de cualquier manera funciona si estoy frente a ti. Bueno, en cualquier caso, simplemente me ajustaré de acuerdo a las circunstancias.”

“Que así sea.”

Hombro con hombro, los dos volvieron a mirar desde el balcón.

Como si se mezclara con el silencio, como si esperaran el momento en que el viento soplara esas palabras, Sekaibashi preguntó brevemente. Honatsu también dio una breve respuesta.

“¿Es una maldición?” “No.”

“¿Voluntario?” “En efecto.” “¿Doloroso?”

“Ya estoy acostumbrado.” “Bien…”

Honatsu sonrió con ironía y saludó al hombre con la máscara de gas a su lado.


“Ya le prometí a Haruaki y a los demás que lo se explicaría a todos juntos. Además, como no es una razón particularmente sorprendente, antes de que explique todo esperemos hasta que todos se hayan reunido.”

“A mi modo de ver, el benefactor a quien no he visto en mucho tiempo ha tenido un cambio de sexo. Realmente no puedo imaginar que no haya una razón particularmente sorprendente…”

“Una vez que lo escuches, solo pensarás: ‘¿Qué, eso era todo?’ Por mi parte, ahora estoy empezando a preocuparme por si realmente era necesario llamarte a ti, Haruaki y todos los demás vinieron específicamente para escuchar una explicación solemne. Si termino siendo golpeado, tienes que salvarme. Especialmente porque parecen odiarme con recelo.”

“Si hasta ahora te has negado a explicar, no es que no pueda entenderlos. Entonces, permíteme hacerte una pregunta más como pago anticipado por servir como guardaespaldas… ¿Está relacionado con Haruaki-kun?”

 

“¿Oh? ¿Por qué preguntas?” “Pura intuición.”

“¡Jaja! Entonces te responderé, sí, supongo que es la mitad de las razones.” “¿Qué pasa con la otra mitad?”

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Honatsu alejó ligeramente su cuerpo del balcón y desvió la mirada que originalmente estaba dirigida a la playa. La chica más llamativa. Mirando a la chica con un cabello hermoso, brillante y plateado, dijo:

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“Naturalmente… Es por la chica que encontré. Tengo que asumir la responsabilidad de su futuro.”

Al escuchar a Honatsu decir una palabra tan pretenciosa, “responsabilidad”, probablemente Sekaibashi estaba tratando de contener la risa.

Al ver que no dijo una sola palabra durante bastante tiempo, Honatsu no pudo evitar concluir eso. Su silencio se estaba haciendo lo suficientemente largo como para hacer que uno sintiera que era demasiado largo. Perplejo, Honatsu se volvió para mirar a Sekaibashi. Por alguna razón, estaba mirando inmóvil la superficie del mar, atónito por la sorpresa.

“¡Imposible!”

Entonces, de repente, se movió de una vez, inclinándose violentamente hacia la barandilla, agarrándola lo suficientemente fuerte como para ser audible. Honatsu siguió su mirada hacia el horizonte en la distancia donde el cielo se unía con el mar.

En cierto sentido, lo que allí había aparecido era algo perfectamente común. Algo que era perfectamente natural que existiese en el mar, sin nada inusual.

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Barcos. Sin embargo, no se trataba de cualquier barco. El barco era lo suficientemente grande como para que, incluso desde tierra, se pudiera decir cuán gigantesco era.

Además, había más de un barco. Aunque tenían una forma diferente y hasta cierto punto variaban en tamaño, estas naves similares eran todas gigantescas, aproximadamente diez de ellas. Estas naves se organizaron una al lado de la otra cuidadosamente, en fila, acercándose silenciosamente a esta orilla.

Como si tratara de calmarse, bajo la máscara de gas Sekaibashi respiraba con dificultad.

Luego volvió a mirar hacia la villa, hacia Zenon, que miraba asombrada la misma escena. Con una voz que no podía disimular su temblor, él le dijo:

“Zenon-kun,  ¿podrías  salir  y  reunir  a  Fear-kun  y  todos  los  demás  de  inmediato?  Por supuesto, iremos juntos. Parece que ha llegado un invitado muy importante.”

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