Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 12

Capítulo 1: En Movimiento

Parte 4

Varios minutos más tarde, Rio se dirigió a patrullar e investigar el área, dejando que las chicas espirituales buscaran monstruos y criaturas peligrosas en el área antes de dirigirse al manantial cercano.

“Phew, eso es tan bueno…” Sara se hundió en el agua del manantial y dejó escapar un suspiro con todo su agotamiento escapando.

“Corrimos mucho”. Orphia sonrió mientras hacía lo mismo.

“Nunca habíamos tenido que correr mientras cargamos a alguien durante tanto tiempo, así que terminó siendo un buen entrenamiento”, agregó Alma con una sonrisa relajada. Actualmente estaba recostada mientras miraba hacia el cielo, con la cabeza fuera del agua.

“Lamento forzarlas a las chicas en una situación que no les afectó…”

Celia apareció en la fuente y llamó a las chicas espirituales. Sara y los demás miraron a Celia y vieron a Christina y Vanessa a su lado.

“No dejes que te moleste. Esto no es ningún problema”, dijo Sara.

“Sip.”

“En efecto.”

Orphia y Alma estuvieron de acuerdo.

“¿Ustedes dos también vinieron a bañarse? ¿Y Vanessa…?” Sara le preguntó a Celia.

“Vanessa está aquí para hacer guardia, por si acaso. Dijo que no ha hecho nada parecido a un caballero hasta ahora, así que al menos le gustaría trabajar mientras ustedes tres descansan. Hemos podido avanzar tan suavemente hasta este punto gracias a ti. No puedo hacer nada para agradecerles ahora, lo que me duele mucho, pero definitivamente expresaré mi gratitud correctamente una vez que lleguemos a Rodania”, respondió Christina, asintiendo suavemente.

“No, no, realmente no necesitas preocuparte por agradecernos. Solo estamos haciendo lo que queremos, así que está bien”, Sara agitó las manos con nerviosismo.

“Pero eso no estaría bien…”

“Hmm… Para nosotras, esto es solo una muestra de nuestra gratitud hacia Haruto, algo así como pagar nuestras deudas, ¿o tal vez como una disculpa por el pasado? Haruto no suele confiar en nosotras, por lo que es una rara oportunidad para que podamos hacer algo por él. ¿Por eso… por eso…? Hmm.” Sara trató de explicar sus sentimientos en voz alta para convencer a Christina, pero luchó por expresarse con palabras.

“Estamos haciendo esto como parte de nuestro reembolso a Haruto, por lo que, en última instancia, no lo estamos haciendo por el bien de nadie más. Es por eso que no necesita agradecernos por ello, ¿ve?” Orphia interrumpió, explicando lo que Sara estaba tratando de decir.

“¡Sí, exactamente eso!” Sara asintió con firmeza, señalando a Orphia.

“¿Es eso… así que…?” Escuchar a Sara y los demás decir algo así con tanta facilidad hizo que Christina parpadeara aturdida.

Era un afecto diferente al amor familiar. Una lealtad diferente a la que se tendría hacia un maestro. Habiendo nacido y criado en una corte real calculadora y codiciosa, Sara y los demás eran el tipo de personas que Christina rara vez veía.

Eran tan puros, virtuosos y tenían una cantidad admirable de determinación…

Parecía que esa era la razón por la que Haruto Amakawa también le servía a Celia todo lo que tenía.

“¿Princesa Christina? ¿Te pasa algo?” Ver a la princesa congelada hizo que Celia ladeara la cabeza confundida.

“No, es nada. Pensé que vi un atisbo de cuánto todos respetan a Sir Amakawa. Debe ser una persona maravillosa para merecer tanto respeto”, dijo Christina con una sonrisa.

“Haruto es realmente una persona maravillosa, de verdad”. La voz de Sara era cálida mientras hablaba. Una expresión de conflicto cruzó por el rostro de Christina. Sin embargo, antes de que alguien pudiera notarlo, puso una mano sobre su pecho e inclinó la cabeza en una seria muestra de respeto hacia Sara y los demás.

“…Entiendo. En ese caso, no debo hacer nada para deshonrar los sentimientos virtuosos de todos. Pero permítanme expresarles mi gratitud a todos, al menos. Espero seguir su ejemplo y ser un poco más virtuosa yo misma”.

“Cuando lo pones de esa manera, es un poco vergonzoso…” Sara se rio con torpeza.

“Aparte de eso, ya estás aquí en el manantial. ¿Qué tal darte un chapuzón con nosotras?” Orphia sugirió alegremente.

Alma asintió con la cabeza. “De hecho, es un poco vergonzoso estar desnuda frente a ustedes dos mientras están completamente vestidas”.

“No me importa, pero… ¿Qué le gustaría hacer, Princesa Christina?” Celia miró a Christina y preguntó.

Christina pensó por un breve momento antes de sonreír tímidamente. “… Le aceptaré la oferta. Después de todo, solo pude limpiar mi cuerpo mientras estaba en el sótano”. Rara vez habría la oportunidad de bañarse adecuadamente mientras estaba afuera, y no había tenido muchas oportunidades de bañarse con chicas de su edad, por lo que se sentía bastante avergonzada.

“Tenemos un jabón que es bueno para la piel y seguro para el medio ambiente. Nos he cavado una pequeña bañera allí, así que por favor lávate primero”.

Alentado por Alma, su atención se centró en el suelo a un lado.

“No hay nada más que pueda pedir”.

Los ojos de Christina se agrandaron antes de sonreír. Así, las cinco terminaron bañándose juntas.

***

En otra parte, poco tiempo después de que Celia y Christina comenzaran a bañarse en el manantial, Kouta y Rei esperaban a cierta distancia sin nada que hacer.

“Oh Dios, hay tantas chicas guapísimas bañándose allí…” Rei miró los árboles en dirección a la primavera y murmuró con nostalgia. Su compañero de primer año, Kouta, respondió con exasperación.

“No me digas que quieres unirte a ellas…”

“No tienes ningún sentido de ambición por un hombre, Kouta.” Rei negó con la cabeza dramáticamente.

“Ambición… No me digas que planeas echarles un vistazo”.

“¡Quiero! Pero valoro mi vida demasiado por eso. Usaré mis habilidades de imaginación, los pensamientos de cualquier hombre se volverían locos con tantas chicas hermosas cambiándose y bañándose cerca”.

“No tienes las habilidades. Y ya basta, en serio. Cuanto más hables, más difícil será enfrentarte a esas chicas más tarde”.

“Eso  solo  significa  que  tú  mismo  tienes  una  imaginación  realmente poderosa, Kouta”.

“¡Yo no!” Kouta negó con la cara roja.

“Qué niño tan ingenuo. Tus pensamientos son un espacio libre, ¿sabes? Es libertad de expresión, pero en tu cabeza. Mientras no lo exprese en voz alta, nadie puede controlar lo que piensa. ¿Estás renunciando a tu derecho a esa libertad, Kouta?”

“No, no creo que sea un problema tan complejo…”

“No, de hecho es un tema complejo sobre los misterios de la vida. Deberías usar tu imaginación en lugar de dejar que se pudra”.

“No tengo tal cosa en primer lugar”.

“… Qué terco. Entonces, ¿y si fuera Akane la que se bañaba allí en su lugar?” Dijo Rei, sacando a relucir el nombre de lo que sonaba como una chica japonesa.

“… Guh.” Kouta se sonrojó de un rojo brillante.

“¿Ves? Tienes imaginación,” dijo Rei con aire de suficiencia.

“Ugh, cállate ya. Akane ya no importa”. Kouta hizo un puchero y se alejó. “Creo que podrías actuar un poco más despreocupado, ¿sabes?”

“…”

“Caramba.” Rei suspiró quedamente.

“Volví.” Rio reapareció silenciosamente de la nada.

“O-Oh, hey”.

“Bienvenido…”

Rei y Kouta se sorprendieron por lo repentinamente que se había acercado a ellos.

“Todas las demás están en el manantial, ya veo. Perfecto. De hecho, había algo que me gustaría preguntarles a ustedes dos”, les dijo Rio a los dos.

“¿Eh? ¿Qué es?” preguntó Rei.

“¿Cómo aprendieron ustedes dos el idioma de este mundo? No deberías poder comunicarte a menos que seas un héroe…”

“¿Sabes sobre eso?” Kouta pareció un poco sorprendido.

“El héroe convocado en el Reino de Galarc es una amiga mía, y sus amigos también fueron arrastrados aquí desde el otro mundo. Estuvieron bajo mi protección durante un tiempo, así que sé cuánto lucharon con el idioma”.

“Por eso sabes que no conocíamos este idioma antes…”

“Si. Les enseñé el idioma de este mundo usando un artefacto de interpretación, pero ese fue un artefacto mágico único que no está disponible para el público en general. Así que me preguntaba cómo lo aprendieron ustedes dos”.

“En nuestro caso, tuvimos la ayuda de Rui, el único que podía entendernos. La gente local hablaba, Rui lo traducía, luego averiguamos el vocabulario y la gramática de eso y tratamos desesperadamente de memorizarlo”.

“Ya veo… Eso debe haber sido difícil”.

Tanto para Rei como para Kouta, que tenían que aprender el idioma, y Rui, que tenía que ayudarlos.

“Sí, lo único que hicimos después de venir a este mundo fue estudiar el idioma todos los días. Nos las arreglamos para meterlo en la cabeza de esa manera. Afortunadamente, ambos estamos en el club de idiomas extranjeros en nuestro mundo original, por lo que aprender el idioma en sí no fue tan difícil”.

“Creo que los resultados hablan por sí mismos. Puedes mantener una conversación perfectamente”.

“Priorizamos el habla, por lo que todavía no podemos leer ni escribir”. Kouta se encogió de hombros.

“Aparte de eso, teníamos algo que queríamos preguntarte también, Haruto”, dijo Rei de repente.

“¿Si?” Rio inclinó la cabeza hacia Rei.

“Se trata de dónde eres, supongo. Tu nombre suena algo similar a los nombres del país de dónde venimos, y tus rasgos faciales se ven un poco asiáticos, o tal vez medio asiáticos. También dijiste que protegiste a los amigos del héroe del Reino de Galarc”. Rei parecía sospechar que Rio tenía alguna conexión con Japón, ya que seleccionó sus palabras cuidadosamente en su pregunta. Kouta también miró a Rio con curiosidad.

“Me han preguntado mucho por los convocados aquí, incluido Rui, pero nací y crecí en Strahl. Mis padres fallecidos eran de un lugar llamado la región de Yagumo, y parece que esa área es muy similar al lugar de donde vinieron ustedes”. Rio tenía una respuesta preparada para tal pregunta y la recitó de memoria.

“Oh, sí, he oído hablar de ese lugar mencionado en el castillo antes… También pensé que sonaba similar”.

“Puede haber una pista sobre cómo regresar a nuestro mundo”, agregó Kouta, mostrando interés en la región de Yagumo.

… Si quisieran regresar a la Tierra, ¿no sería mejor quedarse en el castillo? Rui también parecía estar buscando un camino de regreso, se preguntó Rio, pero la forma en que el Reino de Beltrum era ahora no era exactamente un gran lugar para estar. Junto con su experiencia de ser acusado falsamente, no tenía una impresión particularmente buena de los nobles en el poder allí. ¿Quizás sintieron un temor similar por su seguridad?

Sin embargo, Rui se había unido al equipo de búsqueda para recuperar a estos dos, por lo que era difícil imaginar que el Duque Arbor hubiera amenazado a dos amigos de Rui que podría haber usado para controlarlo.

¿Por qué habían abandonado el castillo?

“… ¿Ustedes dos dejaron el castillo porque querían regresar a su mundo?” intentó preguntar.

“No. Si bien queremos regresar… Esa no fue la razón por la que dejamos el castillo. Personalmente, simplemente no quería quedarme más con Rui y los demás”, respondió Kouta de una manera extrañamente inarticulada, burlándose de sí mismo levemente.

“… ¿Qué hay de ti, Rei?”

“Estoy aquí para acompañar a Kouta, supongo. Bueno, también encontré la vida en el castillo sofocante, y lo sería aún más si Kouta se fuera”, dijo Rei encogiéndose de hombros.

“Teniendo en cuenta cómo Rui los persigue para traerlos de vuelta, debería haber sabido que debe haber una razón… Perdóname por preguntar algo tan difícil. No me entrometeré más”, dijo Rio con consideración. Se dio cuenta de que no era algo para preguntar con tanta insistencia a las personas que acababa de conocer.

“Perdón por la espera.” Sara y las demás regresaron al mismo tiempo.

“Se sintió genial. ¿Ustedes van a tener su turno a continuación?” Celia le preguntó a Rio.

“Eso suena bien. ¿Nos vamos, ustedes dos?” Rio les dijo a Kouta y Rei.

“Sí, yo también podría. ¿Rei?” Kouta miró a Rei a su lado.

“El agua del baño que sobró de hermosas chicas bañándose juntas… ¡Por supuesto que iré!” Los ojos de Rei se agrandaron mientras asentía con entusiasmo. Todas las chicas le dirigieron sus miradas apáticas.

“¿Fue una oferta para quedarse aquí y esperar?” Christina preguntó fríamente.

“Oh sí. Por supuesto. Haha…” Rei pegó una sonrisa falsa para pasar por alto el tema.