Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 3

Extra 2: Keima Se Pone A Trabajar

Niku se desmayó de cansancio, y como su jefe, esa era mi responsabilidad. Lo que a su vez significaba que tenía que hacer algo para llenar el hueco dejado por su ausencia.

…Me puse el delantal y fui a la cafetería.

Un cliente vino tan pronto como empezó a comer. Era un aventurero solitario. “¿Eh? ¿Esa pequeña bestia no trabaja hoy?”

“No, se va a tomar el día libre. ¿Decepcionado de verme en su lugar?” “Claro que sí, maldición. Devuélveme mi dinero”.

El aventurero me habló mal, pero era un cliente habitual. Ambos sabíamos que estaba bromeando.

“De ninguna manera. Pagaste dinero por la comida, no por el servicio, y eso es lo que estás recibiendo. Si no te gusta, vete a otro lado”.

“Hey hombre, sabes que este es el único lugar para conseguir comida por aquí. Bueno, lo que sea. Dame una Rango D”. El cliente habitual sonrió mientras se sentaba. Revisé su ticket de comida y compré la comida de Rango D con DP.

“Muy bien, una Rango D. Hey, Golem, lleva esto a la mesa tres.”

“¡¿Qué tan perezoso puedes ser?!” ¿Qué tiene de malo darle trabajo a los golem de arcilla?

Esa es la clase de posada que es este lugar. Lo digo yo.

“Y estaba deseando que esa monada anduviera por ahí con su ropa esponjosa”. “Perdón por someterte a un tipo con delantal”.

“Al menos usa el mismo atuendo que ella, Keima. Ambos tienen el cabello negro, tal vez accidentalmente me divertiría.”

“¿Estás loca? ¿En serio quieres verme con un traje de criada?”

“Obviamente era una broma, idiota.” Me reí en respuesta y poco después llegaron más clientes, esta vez un grupo de tres hombres aventureros. Aventurarse era un trabajo manual duro, así que no había hombres que ayudaran a controlar la fuerza de trabajo.

“Oh, ¿la chica de siempre no está aquí?”

“¿Queeeeeee? ¿Es sólo Keima? Qué lástima”.

“Tengo la sensación de que va a hacer que nuestra comida sepa mucho peor”. Los tres entregaron sus billetes y se sentaron a pesar de sus quejas.

“Hey, siéntete libre de irte. Incluso te devolveré los tickets.” Cada uno agitó la cabeza.

“De ninguna manera. Quiero un pudín.”

“No puedo hacer nada sin mi pudín diario.”

“Me aguantaré, así que dame mi pudín.”

Todos gritaron pudín, pudín, pudín! mientras golpeaban la mesa con sus puños. Les gustaban los pudines.

“Sí, sí, iré a buscar un poco. Espera un momento”. Convoqué las comidas del Rango D e hice que un golem las llevara de nuevo. Tampoco olvidé los pudines.

El siguiente cliente era otro cliente habitual, esta vez una chica llamada Roppe. Era una bebedora empedernida y tenía un compañero enano, pero ella misma era una hembra humana. Eso era bastante raro por aquí.

“¿Oh? ¿Vas a servir hoy, Keima? Eso explica la falta de amor en el aire”.

“Amor, ¿eh? ¿Qué tal si te inscribes como empleada a tiempo parcial y llenas el aire de amor tú misma? Te prestaré un traje de criada.

“¿Crees que esa cosa encajaría en una chica grosera como yo?”

“Oh, ¿comprar una comida de Rango C hoy? Gracias de nuevo y por favor, disfrútalo”. No sabía qué decir, así que la ignoré. Convoqué una comida de Rango C e hice que un Golem la llevara.

“Haaah. Esto definitivamente sabrá peor desde que Keima lo llevó”.

“¿Eh? Se lo entregué al golem, él se encargó de todo. ¿De qué demonios estás hablando?”

“¡Aaaaah! ¡No te escucho!”

“Tú eres la que se queja, no yo. Oh, parece que hay más clientes aquí.”

Sí, hay mucha más gente aquí de la que pensé que habría. Como se trata de un dungeon para principiantes, hay una gran cantidad de aventureros que se quedan aquí día tras día sin salir nunca. Simplemente cazar goblins y traer de vuelta artículos para vender era suficiente para cubrir su habitación y comida.

Más clientes. ¡Eh! ¡Pongan todos los platos sucios junto a la ventana cuando terminen de comer!

“Uhhhhh, una Rango E para ti, de acuerdo. Lo traeré en un segundo”.

“¡Hey! ¡Traigan a la niña! ¡Vas a hacer que mi comida sepa a mierda!”

“La dejo hoy libre porque se desmayó por el exceso de trabajo. De ninguna manera voy a hacer que siga trabajando después de eso”.

“Dilo antes, viejo. Voy a retroceder…. espera, ¡vamos! Sé que es una esclava, pero no hagas que una niña trabaje tan duro que se desmorone”. Me estaba criticando, pero sabía que sólo estaba preocupado por Niku.

“¡Cállate, ya me estoy arrepintiendo! Aaaaah, sheesh. Ojalá me lo dijera si necesitara un descanso”.

“¡Sólo quiere verse bien delante de ti! ¿En serio eres demasiado denso para darte cuenta de eso?”

“¿Intentas quejarte o quieres que mis empleadas se vean bien?”

“¡Obviamente sólo estoy tratando de ayudarla, idiota! ¡No me hagas decir eso! ¡Es vergonzoso!”

¿Qué diablos está pasando aquí? Esta gente quiere mucho a Niku.

A pesar de la llegada de gente nueva y de algunos problemas aquí y allá, me las arreglé para hacer mi trabajo. Por ejemplo….

“He oído que la comida aquí sabe bien. Toma, cocina esto para mí”.

“…Nah. Nuestro chef no cocina con la comida que traen los clientes”.

“Hey, ¿por qué no? Sólo tienen que cocinarlo un poco y echarle un poco de sal”. Un cliente que había traído comida se quejó de que no se la cocinaríamos, pero….

“Vamos, viejo, la camarera de siempre está enferma en la cama hoy. No te metas demasiado en su camino.”

“Sí. Y bueno, así es como funciona esta posada. Sólo acéptalo”.

Los habituales se encargaron de él por mí. Es un alivio. Gracias, muchachos. Pero supongo que otras posadas te dejan traer comida cruda y cosas así, ¿eh? Realmente necesito traer a un chef de verdad.

Al final, con la ayuda de Rokuko, logré terminar un día de trabajo. Mucho de mí éxito tuvo que ver con lo amada que estaba Niku. Mi mente se habría alterado si tuviera que tratar con clientes regulares todo el día. No estoy hecho para el servicio al cliente. Mi lugar estaba en la parte de atrás, fuera de la vista. ¡Niku, por favor, mejórate pronto…!