Tsuujou Kougeki ga Zentai Kougeki de Ni-kai Kougeki no Okaa-san wa Suki desu ka?

Volumen 3

Capítulo 3: Cuando Las Madres Se Reunen, Forman Un Combo. No, No Estoy HablandoDe Un Juego De Puzzles. Algo Realmente Terrible

Parte 3

Mamako hizo descender a la multitud de madres por la colina y se dirigió a la ciudad.

Mientras se dirigían por la carretera principal, todos se detenían a mirar lo que ocurría. Masato se encorvó, manteniendo la cabeza baja, pero de alguna manera sobrevivió al juicio.

Se dirigieron hacia el puente que conduce a la isla. El cual termina casi en la entrada de la torre.

“*Suspiro*… El sólo hecho de llegar hasta aquí ya ha hecho un gran daño a mi salud mental…”

“¡Ma-kun! ¡Ánimo! ¡Acabamos de empezar!”

“Sí, tienes razón. Por fin podemos empezar a limpiar esta torre. Es la aventura que hemos estado esperando… ¡De acuerdo! ¡Es hora de prepararme para la acción!”

¡Estaban a punto de empezar! ¡Las puertas de la entrada estaban justo enfrente de ellos!

Masato estaba a punto de correr hacia adelante y reclamar el primer lugar… cuando Wise se le adelantó.

“¡Heh-heh! ¡Yo soy la primera!”

“¡Argh, Wise! ¡Déjame obtener una cosa! … ¿Qué? Medhi y Porta, también?”

“¡Masato, date prisa!”

“¡Una carrera, Masato!”

“¡De acuerdo! ¡Hagámoslo!”

Masato corrió hacia delante, haciendo parecer que iba a alcanzar a las chicas y pasarlas.

Pero la forma en que Porta corría era tan adorable que sólo quería correr detrás de ella y tomarla en sus brazos, pero…

“*¡Gasp! * ¡Puedo sentir a mamá observándome!” Con ella vigilándolo, lo mejor sería que no lo hiciera. No, no, incluso sin los ojos vigilantes de su madre, nunca tuvo la intención de hacerlo. Sólo era una broma.

Al final, llegaron a las puertas: Masato a la cabeza, Porta justo detrás, Medhi tercera.

“¡Wise, estás en la retaguardia! ¡Perdedora!”

“¡Oye, Masato! ¿Cómo es que mi trasero es un perdedor?”

“¿Eh? No, esa es una expresión para “último”…”

“Tengo que admitir que la parte trasera de Wise definitivamente no está ganando ninguna competencia. ¡Creo que la expresión encaja!”

“¡No hay nada malo con mi trasero!”

Wise se apoyó apresuradamente las dos manos en su trasero, pero estaba indiscutiblemente en el último lugar. Demasiado para la carrera que ella había empezado.

Una vez más, se habían entusiasmado, y por fin estaban listos para empezar a limpiar esta torre.

“Una vez que estemos todos reunidos frente a las puertas, los círculos mágicos aparecerán bajo nuestros pies, contarán cuántos tenemos, y entonces las puertas se abrirán, ¿verdad?”

“Creo que así es como funcionó. Vamos, empecemos con esto.”

“Sí, primero tenemos que reunirnos todos…”

“¿Qué está pasando? ¡Mamá y las mamás aún no han llegado!”

“¿Eh? ¿No lo hicieron?”

Se dieron la vuelta, mirando hacia atrás. Mamako y la turba de madres en marcha aún estaban en el puente. Se detuvieron en su camino y estaban conversando.

“Cielos, ¿qué están haciendo? …iré a ver.”

Masato corrió de vuelta hacia Mamako.

“Oye, mamá, ¿por qué te demoras?”

“Oh, Ma-kun… Bueno, ya ves… Esta mujer de aquí…”

Mamako señaló a una madre. Estaba mirando al suelo, blanca como una sábana.

¿De repente tenía miedo de la tarea que tenía por delante? Sólo era una aldeana. Normalmente nunca vendría a un calabozo. Era natural tener miedo. Tal vez así es como deberían ser las cosas.

Masato tomó un respiro para calmarse y luego preguntó, “…Um, ¿estás bien?”

“S-sí… E-estoy muy preocupada…”

“Ya veo… supongo que cualquiera se preocuparía por su primera vez en una mazmorra…”

“No, no es eso. Es que… dejé todas las ventanas de mi casa abiertas.”

“Bien, dejaste las ventanas… Espera, ¿qué?”

“Era un día tan bonito, que quise airear el lugar… Pero cuando estaba hablando con las otras madres, empecé a preocuparme. Mi vecindario es seguro, pero un área cercana ha tenido varios robos mientras los dueños estaban fuera, y… ¡Oh, estoy tan preocupada! ¡Parece que no puedo evitarlo! Será mejor que vaya a casa y las cierre.”

“Uh… Es-eso tiene sentido…”

Esto ciertamente no era lo que Masato esperaba.

Pero…

“Pero has venido todo este camino… Y hacer que todos nos detengamos y te esperemos es… menos que ideal. ¿No puedes simplemente dejarlo así…?”

Pero cuando Masato respondió honestamente…

“¿Perdón? ¿Qué acabas de decir?”

…La madre en cuestión abrió los ojos de par en par, mirándolo fijamente.

¿Eh? ¿Qué dijo este niño? Debo estar oyendo cosas. No acabas de decir eso. Estoy seriamente preocupada. ¿Y si pasara algo? Si algo lo hiciera, ¿podrías dar un paso al frente? ¿Tú me compensarías por los daños?

Todo eso fue transmitido con una sola mirada sin palabras. Fue aterrador.

Había vuelto a hacerlo. Esta era una batalla que no podía ganar. Masato rápidamente cambió su enfoque.

“¡Oh, claro! ¡Definitivamente tienes que hacer algo! ¿En qué estaba pensando? ¡Ah-ha-ha!”

No tenía opción. No había discusión con ella. Una madre defendiendo su hogar era un oponente demasiado peligroso.

Así que necesitaban resolver este problema rápidamente… Ajám.

“¡Yo, Wise! ¿Tienes un segundo? ¡Por aquí!”

“¿Mm? ¿Qué?”

Wise se acercó corriendo. Es hora de poner al Sabio a trabajar.

“Wise, a la dama le gustaría ir a casa y cerrar todas sus ventanas. Esperaba que tu magia de teletransporte pudiera ayudar a resolver eso rápidamente. Una vez que haya terminado, puedes traerla de vuelta aquí. ¿Funcionaría eso?”

“Claro, eso es bastante fácil.”

“Vivo cerca de la tienda general. ¿Te importa?”

“Mientras la persona a la que teletransporte sepa adónde vamos, puedo ir a cualquier parte. ¡Hagámoslo!”

Un libro apareció en la mano de Wise y empezó a cantar el hechizo…

…Y la multitud de madres comenzó a reunirse a su alrededor.

“Oh, ¿puedes irte a casa con magia? Entonces, ¿puedo pedirte un favor también?”

“¿Eh?… Bueno, está bien, hay un límite en el número de personas que puedo teletransportar a la vez, pero una persona más no debería ser un problema…”

“Entonces, ¿puedo unirme yo también? Después de escuchar lo que dijo, me preocupé… ¿Te importaría?”

“Um… B-bueno, ir a dos lugares no será…”

“¡Entonces a mí también me gustaría unirme! ¡La oportunidad perfecta!”

“Uh…”

Después de eso: “¡Yo también!” “¿Puedo?” “Si vas a ir allí…” “Si no es mucho problema…” La multitud seguía creciendo.

Al final, las trece madres querían pasar por sus casas.

Wise se quedó atónita. Un sudor frío corría por su frente.

“Así que… ¿cuántos hechizos de teletransporte sería eso? … ¿Tengo suficiente MP? …Ah- ha-haaaa…”

“¡Bien por ti, Wise! ¡Por fin tienes la oportunidad de brillar! ¡Puedes usar todo tu MP!”

“S-si… Eso es técnicamente cierto… Pero no es realmente lo que tenía en mente…”

Sip. Masato estaba totalmente de acuerdo con eso. Aun así.

Puso su mano en su hombro. “Wise”, dijo gentilmente. “Esta es nuestra aventura. Nuestro destino. No podemos luchar contra ello.”

“¡Argh! Tu madre te causa más problemas que nadie, así que esto es extra convincente.”

Este mundo giraba en torno a las madres.

No podían despejar la torre hasta que todas las preocupaciones de las madres fueran aliviadas.

***

Mientras tanto, dentro de la torre, en el primer piso—

“…Aún no hay señales de ellos.”

—Amante estaba de pie con un gatillo de cristal en la mano, lista para detonar los explosivos en cualquier momento.

El grupo de Mamako ya debería haber llegado.

“… ¡Esto está tardando una eternidad!”

Ni un rastro. Ninguno. No importa cuánto tiempo esperara, no apareció nadie.

“Cielos, ¿qué están haciendo? ¡En el momento en que entren voy a detonar todas las bombas en el piso y enterrarlas entre los escombros! … ¿Dónde están? …Tal vez debería ir a revisar afuera…”

Harta de esperar, Amante salió de entre las sombras, dirigiéndose a la entrada.

Se paró ante las puertas firmemente cerradas.

“La forma en que esto funciona, sólo comprueba los números de las personas que entran, pero puedes salir totalmente solo de todos modos,” murmuró a nadie en particular. Entonces ella levantó la mano y empujó la puerta…

…Con la mano que sostenía el cristal del gatillo.

Instantáneamente, hubo un ruido de estallido desde arriba de ella.

“¿Eh? ¿Qué es ese ruido? Suena como a un bebé llorando… No, tiene que ser el comienzo de la cuenta atrás de las bombas… Uh… ¡¿QUEEEEE?! ¡El gatillo! ¡¡Accidentalmente lo presioné!! ¡¡¡Auuuuuuuuughhhhhhhhhhhhh!!!”

Demasiado tarde.

Un momento después, las bombas de cristal que había colocado en cada piso desde el segundo hasta el decimonoveno detonaron todas a la vez. “¡Noooooooooooooo!” Una montaña de escombros se derrumbó contra el suelo.

El mal había sido derrotado.