Uchi no Musume no Tame naraba, Ore wa Moshikashitara Maou mo Taoseru kamo Shirenai

Volumen 7

Capítulo 4: Un Día Nevado y los Recuerdos de la Pequeña Niña, así Como su Tiempo con la Doncella de Ojos Dorados

Parte 3

Mientras tanto, el número de niños creció significativamente, y Latina comenzó a ver caras más familiares. Allí había muchos niños de su clase, e incluso tenía conocidos de diferentes edades, porque habían jugado juntos en la plaza. Latina había hecho bastantes amigas en el último año y medio.

Ya toda agitada, la niña declaró su objetivo para el día a su amiga. “¡Hoy, Latina definitivamente va a vencer a Rudy!”

“¿Realmente quieres vencer a Rudy tanto?”, Preguntó Marcel mientras producía hábilmente bolas de nieve. El chico de carácter gentil era un buen oyente.

Como Latina no quería perder la tasa de producción de bolas de nieve de Marcel, pronto se vieron completamente rodeadas por las cosas.

“¡Rudy siempre llama a Latina débil, pequeña o lenta! ¡Así que Latina no quiere perder con Rudy! “

A pesar de su pequeña constitución y apariencia adorable, Latina era altamente competitiva. Aun así, el físico y la resistencia de Rudy le dieron la ventaja en juegos simples. Sin embargo, Latina no estaba dispuesta a rendirse.

Las burlas infantiles de Rudy eran tan transparentes que todos sus amigos sabían exactamente a quién le gustaba, pero la niña no tenía ni idea. Latina no solo nació en una nación extranjera con sus propias costumbres y valores, sino que fue extremadamente crítica de sí misma y sensible a la hostilidad de los demás. La idea de expresar cariño a través de las burlas se perdió por completo en ella. Había muchas razones para ello, pero, francamente, la mejor era que era tan natural.

Y así, Latina quería dejar a Rudy llorando algún día. No podía simplemente aceptar que perder era algo inevitable. Esto puso de manifiesto un nivel de determinación desmentido por su personalidad amable.

Marcel, que sabía del afecto de su amigo por ella, solo escuchó con una sonrisa mientras Latina encendía su espíritu competitivo, lista para igualar el puntaje que se acumulaba día tras día.

Aunque tenían algo de administración para manejar las cosas, no había habido tiempo para discutir adecuadamente las reglas, por lo que el juego comenzó con tales asuntos solo muy definidos.

Si fue golpeado por una bola de nieve, estaba fuera, y si tomó la bandera del otro equipo, ganó.

Ya se habían construido varias paredes hechas de nieve aquí y allá alrededor de la plaza. A los niños les habría llevado bastante tiempo configurar todo eso por su cuenta, pero por alguna razón ya se había hecho. Honestamente, normalmente también sería una gran tarea para los adultos. Realmente fue un misterio…

Los equipos eligieron paredes en los extremos opuestos de la plaza y los convirtieron en sus fuertes, plantando sus banderas.

La noticia de que los niños estaban planeando algo se extendió a los adultos, y no pocos se reunieron alrededor de la plaza para mirar. Para los adultos, el gran desastre no parecía un juego apropiado que se pudiera ganar. Sin embargo, a ninguno de los niños pareció importarle, por lo que los adultos no fueron lo suficientemente irreflexivos como para arrojar una manta húmeda sobre su diversión al señalar eso.

Había bastantes niños que cubrían una amplia gama de edades, y todos esperaban impacientes la señal.

“¡Comienza!” Sylvia, líder del grupo que gestionaba el evento, gritó desde el centro de la plaza, alzando lo que parecía ser una bandera roja hecha a mano improvisada. Con esa señal, los responsables de ambos campamentos bajaron sus propias banderas rojas y luego golpearon ollas de metal.

Latina estalló en una carrera en el momento en que escuchó ese sonido.

La distancia entre ellos todavía era lo suficientemente grande como para que las bolas de nieve enemigas no la alcanzaran. No había necesidad de preocuparse, por lo que podía correr a toda velocidad. Con calma evaluó la situación y trazó una ruta segura a medida que avanzaba. Todo el tiempo, el pompón de su sombrero de punto rosa se balanceaba sobre su cabeza.

En el segundo en que se deslizó detrás de la barrera que eligió como su primer refugio, escuchó bolas de nieve chocando contra ella. Ella había entrado en el campo de tiro del enemigo.

Rudy seguramente vendrá al centro, ¡así que aquí es donde Latina lo llevará!

Tenía tanta confianza en ese hecho porque era muy consciente de la personalidad de su amiga. Él era el tipo de persona que usaba el poder proporcionado por su gran físico, en lugar de molestarse con cualquier plan inteligente.

Normalmente esa fuerza suya haría que Latina cayera, pero hoy las cosas eran un poco diferentes. Gracias a la cobertura de amistosas bolas de nieve, pudo asomarse por delante y buscar su objetivo.

¡Ahí está!

Después de confirmar su presencia, Latina rápidamente se movió para ejecutar su plan.

Mientras tanto, Rudy también había descubierto que Latina estaba allí. Aunque eso no fue una sorpresa, ver cómo una pequeña silueta que llevaba un conocido sombrero rosa y una bufanda salió volando del grupo de niños inmediatamente después del comienzo del juego. Incluso los conejitos bebés al menos tienen un poco de camuflaje para protegerlos… Sin embargo, se veía bien en ella. Algo dentro de él lo instó instintivamente a querer agarrar ese gran pompón que se balanceaba arriba y abajo cada vez que ella caminaba. Cada vez que lo hacía, ella se daba vuelta y lo miraba con una mirada seria, pero a él también le parecía lindo.

Ella realmente es lenta, pensando que algo así se esconde…

Su pompón rosado sobresalía un poco sobre la pared de su refugio. Era buena estudiando y supuestamente tenía una buena cabeza sobre sus hombros, pero ocasionalmente cometía errores tontos como este.

Rudy avanzó mientras vigilaba al otro equipo. Se acercó constantemente, abriéndose camino hacia el refugio de Latina.

¡Resolveré esto de un solo disparo!

Miró la distancia, luego dio un gran salto hacia adelante. Terminaría las cosas con las bolas de nieve que tenía en ambas manos, antes de que Latina tuviera la oportunidad de defenderse. Ella se distraería con sus movimientos, y luego la bola de nieve que él lanzó en un arco caería sobre su cabeza desde arriba. No había forma de que alguien tan lento como Latina pudiera reaccionar a eso.

La bola de nieve arqueada golpeó el sombrero rosa de inmediato con un golpe sordo. Rudy se asomó al refugio, imaginando ansiosamente el rostro frustrado de Latina.

Sin embargo, lo que vio adentro fue una columna de hielo que sostenía un sombrero rosa.

“¡¿Eh?!”

Al segundo que Rudy se dio cuenta de que era una trampa, Latina se puso de pie agachada en la parte trasera del refugio. Por el rabillo del ojo, el niño vio una luz brillando intensamente.

“¡Oye…! ¡Usar magia no está…! “

El grito de protesta de Rudy fue interrumpido a mitad de camino por la pequeña avalancha que Latina había creado.
Dentro de la magia Sagrada que empleó Latina, el muro defensivo y las magias de ataque eran en gran medida el mismo tipo de poder, solo que se usaba de diferentes maneras. El maná utilizado como escudo era defensivo, mientras que el maná disparado como una bala era magia de ataque de largo alcance. Y golpear algo o alguien con una masa de maná sirvió como magia de ataque a corta distancia.

Además, las habilidades de Latina en el control de maná fueron lo suficientemente grandes como para poner celosos incluso a la mayoría de los adultos.

Había extendido una pared hecha de maná en un instante debajo de una capa de nieve. Luego, ella le dio la vuelta.

Tal como estaba planeado, Rudy terminó atrapado en la pila de nieve. Latina recogió la gran bola de nieve que había creado dentro del refugio y la sostuvo en alto con ambas manos. Atrapado e incapaz de mover su cuerpo, Rudy solo pudo ver cómo se derrumbaba sobre su cabeza. Ese había sido el golpe final. Después de todo, si no fuera golpeado con una bola de nieve, no contaría como fuera. Ella eligió algunas formas extrañas honestamente sobre las cosas a veces.

“¡Latina lo hizo! ¡Golpeó a Rudy! ”, Dijo la niña, levantando las manos en el aire en celebración sin siquiera pensarlo. En su alegría, había olvidado por completo el hecho de que todavía estaba en medio de la batalla.

“¡Gwah!”

Una bola de nieve golpeó la cabeza de Latina con un golpe.

¡Thw-thw-thw-thwack! Inmediatamente después, una ráfaga de fuego de bola de nieve concentrada descendió sobre ella. En poco tiempo, la chica que gritaba estaba completamente cubierta de nieve.

“¡Aaaaaah!”

“¡Hemos tomado al usuario mágico enemigo! ¡Acérquense!”

La mejor amiga de Latina había sido la que levantó ese grito triunfante.

“¡Rudy había sido un peón de sacrificio desde el principio! ¡Ahora, vamos a movernos! “

Cuando se trataba de cosas como esta, Chloe no tenía piedad alguna.

El resultado: Victoria para el equipo liderado por la General Chloe. Los adultos que observaban no podían evitar sentir admiración por la forma en que daba las órdenes.

“¡Ella lo hizo! ¡Latina ganó!”

A pesar de la forma en que las cosas terminaron, Latina aún informó su victoria al Dancing Ocelot. Ella pudo haber perdido en el evento de equipo, pero había ganado su batalla personal.

“Jugaste mucho, Latina, ¿quieres un poco de refrigerio?”, Preguntó Kenneth.

“¡Sí!”

Lo que él le entregó fue una papa recién asada. La forma en que se calentó lentamente sacó mucha dulzura, haciéndola muy dulce.

La punta de la nariz de Latina estaba roja cuando volvió de jugar en la nieve, pero una vez que se cambió y bebió un vaso de leche caliente con un poco de azúcar, volvió a su estado normal.

“En el camino de regreso, Latina vio a algunas personas que eran muñecos de nieve, pero ¿no se resfrían?”

Ella pronunció ese pensamiento en voz alta, pero no pasó mucho tiempo para que su atención fuera completamente robada por la tarea de informar sobre su victoria.

Se comió la patata asada caliente y luego bebió su leche recién rellenada. Puede que no haya sido la bebida habitual para un brindis de victoria, pero aún sabía aún mejor de lo que solía ser.

“Todo es gracias a tu práctica de ayer”, dijo Dale con una sonrisa, haciendo que la sonrisa de Latina se ensanchara aún más.

Esa sonrisa suya hizo que Dale sintiera cuánto valía la pena enseñarle ese método de palear nieve ayer. El pueblo natal de Dale, Tislow, pudo haber sido una tierra que nevaba mucho, pero también tenía una gran cantidad de usuarios de magia. Las personas favorecidas por la tierra que vivía allí tenían opciones casi infinitas para usar la magia para limpiar la nieve. Gracias a la idea de que si tienen el poder, también pueden usarlo, han desarrollado algunos métodos verdaderamente eficientes.

Dale no había podido ir a ver la pelea de bolas de nieve en persona, pero debido a que varios clientes habituales habían vigilado su valiente lucha, ya había escuchado todo al respecto en detalle.

Dicho esto, sin embargo, naturalmente todavía necesitaba escuchar la heroica historia de la niña misma.

Los alborotadores que habían destrozado el gran muñeco de nieve hecho por una niña del distrito sur fueron arrasados por las brasas por hombres de aspecto feroz, y terminaron obligados a ver cómo se sentía un muñeco de nieve de primera mano. Esa historia también llegó a oídos de Dale, pero, bueno, no tuvo problemas allí. Estaría mintiendo si dijera que no había querido emitir un juicio divino él mismo, pero no tendría sentido si eso significara reducir su tiempo con Latina. Sería una pérdida de tiempo en el sentido más verdadero gastarlo en personas así.

“Entonces, ¿quieres hacer muñecos de nieve juntos de nuevo?”

“Sí.”

“¿Qué dices si tratamos de hacer uno mucho, muuuucho más grande esta vez?”

“¡Sí!”

Si fuera con esta joven sonriente, jugar infantilmente en la nieve no sería tan malo. Ahora, ¿qué deberían jugar a continuación…?

¿Qué hay de convertirlo en una escultura gigante de nieve?

Mientras pensaba en esas cosas, Dale se metió en la boca el trozo de papa que Latina le había dado.

***

Era difícil saber si era porque Chrysos tuvo la suerte del demonio o algún tipo de recompensa kármica por las buenas acciones diarias de Latina, pero el clima no se convirtió en lluvia a mitad de camino. Y así, Kreuz se despertó con una mañana brillante con cielos despejados y mucha nieve en el suelo.

“Ooooh…” exclamó Chrysos con admiración. Ella debe haber sido aficionada al atuendo, ya que hoy estaba vestida como un cordero rosado. Mientras tanto, Latina parecía una oveja lavanda un poco más refinada cuando la pareja de gemelos dejó sus huellas en la nieve fresca frente al Ocelot.

El patio trasero ya era un desastre húmedo y aplastado, de Vint corriendo alrededor de él toda la noche. Latina no se enojó porque eso era exactamente lo que un cachorro hizo instintivamente en tales circunstancias, pero todavía estaba claramente decepcionada por la vista. Ese perro despreocupado y tranquilo parecía haber notado el estado de ánimo de Latina, ya que ahora estaba pacientemente de pie a sus pies y moviendo la cola.

“¡Me voy, Hermana!”, Gritó el travieso hijo mayor del Ocelot mientras corría hacia las hermanas gemelas.

“Diviértete, Theo. Y que la protección de Ahmar esté con ustedes “, dijo Latina con una sonrisa, rezando una pequeña oración por su victoria en la batalla de hoy.

“Platina”.

“¿Hmm?”

“¿Nos vamos también?” Preguntó Chrysos, luciendo como una niña emocionada.

“Los adultos solo pueden ver la pelea de bolas de nieve”, respondió Latina a su hermana con una sonrisa, y luego comenzó a caminar, lenta y constante.

Dale partió siguiéndolas un poco más atrás. Después de todo, estas dos hermanas eran cabezas huecas naturales. Si no hubiera nadie mirándolos, definitivamente podría verlos unirse al juego de los niños y darlo todo. Y probablemente tampoco se abstendrían de usar magia.

“¿Tal vez solo estabas pensando en algo grosero sobre mí?” Chrysos se dio la vuelta y preguntó con una mirada, como si hubiera sentido algo.

“No, no especialmente”, respondió Dale, haciendo a un lado rápidamente la acusación.

“Chrysos, debes mirar hacia adelante cuando caminas o…” comento Latina, solo para que Chrysos se deslizara, tal como había estado preocupada.

“¡Un… gh…!”

La orgullosa Chrysos, sin embargo, no le permitió tomar la caída, por lo que logró ponerse en una posición extraña. Sin embargo, ella no parecía capaz de moverse de ella por su propio poder, por lo que tembló en su lugar.

“¿Estás bien, Chrysos?”

“Latina, probablemente deberías echarle una mano antes de tomarte el tiempo para preguntarle eso”.

Latina hizo lo que Dale le dijo y rápidamente le ofreció una mano a su hermana. Finalmente recuperándose, Chrysos forzó una expresión serena y miró a Dale.

“Sí, sí. Solo asegúrate de ver lo que estás haciendo “, respondió Dale con apatía, recordando la promesa que le hizo a una joven Latina, que había recordado la noche anterior.

Incluso si no pudieran participar en la pelea de bolas de nieve, tal vez podrían intentar hacer un tobogán gigante. Con su naturaleza infantil, las hermanas probablemente lo bajarían al menos una o dos veces. Todo lo que tendrían que hacer es afirmar que lo estaban probando para asegurarse de que era seguro antes de dejar que los niños se subieran.

Con la magia de Latina y Chrysos y una mano (¿er, pata?) De Vint, no debería haber sido tan difícil de lograr.

Dale caminó constantemente, dándose cuenta de que también sentía un poco de emoción infantil al ver la ciudad cubierta de nieve por primera vez en mucho tiempo.

El cielo se había despejado y ahora era de un azul brillante, lo que lo hacía el clima perfecto para jugar.

Dale esperaba la nueva experiencia de ver a las hermanas jugar juntas, sabiendo que esta oportunidad no duraría mucho tiempo. Realmente todavía pensaba como un “guardián” de vez en cuando.