Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 7

Capítulo 7: Otro Ataque

Parte 5

Y así, Rio y las chicas salieron de la posada.

Incluso había menos personas en la plaza que antes, pero aún se podía ver a los residentes que evacuaban aquí y allá. Se apresuraron, acobardados por el rugido del minotauro.

“Nosotros también deberíamos irnos. Por aquí.” Rio miró a los evacuados ante la posada y dio un paso hacia el sur para guiar a Celia y Aishia.

“¡Haruto, monstruo!” Aishia exclamó con un jadeo.

“¡Kshaaa!” El chillido del renacido resonó por la plaza.

“…Lo siento. Tardé en darme cuenta”, se disculpó Aishia culpablemente.

“No, está bien Su detección de ellos es puramente intuitiva. Lleva a la profesora y vuelve a la posada por ahora”, dijo Rio. Afortunadamente, los reventantes que surgieron en la plaza aún no habían notado su presencia. Sin embargo, había personas que habían visto. Justo en frente de ellos había una madre y una hija, huyendo de un revenant de color gris que los había atacado.

“¡Eek…!” Gritaron, padres e hijos encogidos de miedo.

“Rrrgh…” El reverente los miró a los dos con una mirada feroz.

La madre, de unos treinta años, se derrumbó cuando sus rodillas cedieron. “Ah…”

“¡N-No! ¡No te acerques! ¡Vete!” La niña tenía alrededor de diez años y se paró resueltamente ante su madre.

“¡Mireille, huye!” La madre llamó a su hija en pánico. Una posibilidad desagradable cruzó la parte posterior de la cabeza de Río; Definitivamente no quería que Celia viera esto.

Esto es malo. Rio estalló en una carrera por reflejo.

Usando las artes del espíritu del viento para avanzar y acelerar, se movió a una velocidad tremenda para cerrar la distancia entre ellos en un instante.

El revenant fue enviado volando por el golpe de Rio. “¡¿Gufuh?!” Se estrelló contra el suelo con un fuerte ruido y rodó.

“¡¿Kshaaa?!” Los otros revenantes en la plaza notaron la conmoción. Había otros además de la madre y la hija que habían sido blanco de los revenantes, pero todos los revenantes ahora tenían su atención en Río. Hubo un total de cuatro de ellos, incluido el que Rio acababa de enviar volando.

“¡Por aquí!”, Gritó Rio para atraer aún más atención hacia sí mismo, sacando su espada de la vaina en su cintura.

“¡Shaah!” Con eso, todos los revenantes atacaron a Río a la vez. Rio cargó hacia el revenant más cercano que se acercaba y empujó su espada a través de su corazón, terminando de un solo golpe.

” ?! “ Los otros dos se congelaron en estado de shock. Rio aprovechó la oportunidad para acercarse a uno de ellos, una vez más empujando su espada a través de su corazón con precisión. Luego, una vez que sacó su espada, se dio la vuelta y aterrizó una patada en la rodilla en el abdomen del otro que se acercaba por detrás.

“¡Vuh…!” El revenant se levantó fácilmente en el aire. Rio pateó el suelo y persiguió su cuerpo en un instante, rematándolo de un solo golpe similar apuñalándolo en el corazón. Todo lo que quedaba era el que Rio golpeó primero.

“Vurrgh…” Rio se acercó al instante mientras se tambaleaba de nuevo, y una vez más, lo apuñaló en el corazón como los demás para terminarlo.

Él retiró su espada. “… Phew”. Con la fatiga mental abriéndose paso, suspiró en voz baja.

“… ¡M-Muchas gracias!” La madre que había estado viendo la pelea de Rio aturdida volvió a sus sentidos después de una pausa y le agradeció.

“… No, me alegra ver que no estás herida. ¿Puedes pararte? ”, Preguntó Rio, acercándose a la madre y ofreciéndole la mano.
“Sí, me las arreglaré…” La madre agarró la mano de Rio y se levantó vacilante.

“¡M-Muchas gracias, señor! Mamá, ¿estás bien? ”, Preguntó Mireille, corriendo para apoyar a su madre.

“Estoy bien”, respondió la madre, con una sonrisa incómoda para tranquilizar a su hija.

“¿Mamá? ¡¿Mireille?!”

Chloe llegó corriendo con su uniforme de asistente. Se detuvo en seco cuando vio a Río, antes de que su expresión cambiara al ver a la madre y la hija. Parecían ser de la familia.

La madre de Chloe ¿Hm? Eso significa que… ella es la posadera de aquel entonces, ¿eh? Rio se dio cuenta de que la madre había sido la encargada de la posada en la que se había alojado hacía varios años. También recordó que había una hermana pequeña, aunque había olvidado su nombre.

“U-Umm, ¿por qué mi madre y mi hermana…?”, Preguntó Chloe confundida a Rio.

“¡Estábamos siendo atacadas por monstruos cuando este hombre nos salvó! ¡Es realmente fuerte! ”, Explicó Mireille con orgullo.

“¿E-Enserio? ¡Gracias por salvarlas!”

“No fue nada… ¿Pero por qué estás aquí, Chloe?”, Preguntó Rio. “U-Umm, porque algunos de los monstruos humanoides entraron en la ciudad, por lo que los demás fueron a exterminarlos mientras me enviaban a informar a Lady Liselotte”, respondió Chloe con una mirada preocupada. Parecía tener prisa, y su explicación fue escasa. En ese momento, otros ciudadanos comenzaron a reunirse cerca.

“¡Ooh, pequeña Chloe!”

“¿Estás herida, Rebecca?”

“Muchas gracias, muchacho. Realmente nos salvaste”.

Todo se volvió más ruidoso de una vez.

“Ah, umm… L-Lo siento. Tengo un poco de prisa en este momento. ¿Podrían todos evacuar rápidamente dentro de los muros del norte? Si informa a los soldados en las murallas, estoy seguro de que lo dejarán entrar”. En su apuro, Chloe solo dio instrucciones esenciales.

“Oh, es cierto. ¡Bien, vete de aquí, pequeña Chloe! Vamos a evacuar con este chico aquí “, dijo un hombre de mediana edad de buen carácter, mirando a Río.

“No, umm…” Rio no tenía intención de dirigirse al distrito norte, por lo que no sabía cómo responder.

“Ve a ayudarlos, Haruto”, dijo Celia, apareciendo con Aishia a cuestas. Las dos tenían capas sobre sus ropas con capuchas que ocultaban sus rostros.

“Cecilia…” Rio miró a Celia y frunció el ceño preocupado.

“Está bien, no tienes que preocuparte por mí”, dijo Celia disculpándose con Rio. Las murallas estaban justo delante de ellos de todos modos; incluso si fuera a ir allí, no tomaría mucho tiempo llegar a la entrada.

“…Entiendo. Me pondré en marcha, entonces”.

Rio se preparó para dirigirse hacia la puerta de las murallas del norte.

***

Rio y los demás llegaron a la puerta de la muralla en cuestión de minutos. Había soldados esperando ante la puerta, pero como había dicho Chloe, se les permitió entrar sin incidentes.

“Uf, finalmente podemos tomar un respiro. Gracias de nuevo, señor”. La hermana pequeña de Chloe, Mireille, suspiró aliviada y agradeció a Rio una vez más.

“No fue un gran problema. Todo lo que hice fue caminar contigo.”

Honestamente, todo lo que había hecho era caminar con ellos por la corta distancia entre la plaza y la puerta. Ningún otro revenante apareció en el camino. De aquí en adelante, era deber de los soldados protegerlos, por lo que el trabajo de Río aquí estaba hecho.

“Perdóneme. En primer lugar, gracias por acompañar a los ciudadanos hasta aquí. Si puedo preguntarle, ¿es usted tal vez Sir Haruto? ”, Preguntó uno de los soldados que custodiaban el interior de la muralla a Rio.

“… Sí, lo soy”. Rio asintió con curiosidad, sorprendido de que su nombre y su rostro fueran conocidos por un extraño.

“Entonces fuiste tú después de todo. Nos informaron de la apariencia de su grupo, por lo que fue fácil detectarlo”.

“¿La apariencia de mi grupo?”

“Si.” El soldado llevó a Rio a un lado y le explicó las cosas en voz baja con una mirada tímida a Celia y Aishia. “La verdad es que Lady Liselotte nos ha dado órdenes estrictas de escoltarlos a usted y a sus conocidas a su mansión en busca de refugio con la más alta prioridad”. Celia y Aishia tenían las capuchas bajas para hablar con Mireille.

“Ah, ya veo”. Rio tenía una idea de lo que estaba hablando el soldado; después de todo, Celia y Aishia ciertamente tenían una apariencia que llamaba la atención.

“Voy a liderar el camino de inmediato, así que sígueme. La mansión es el lugar más seguro en este momento, y tanto usted como sus conocidos estarán protegidos”, dijo el soldado con confianza.

Rio miró a Celia. Mientras conversaba con el soldado, otro soldado se llevó a Mireille y a los demás.

“¡Gracias por ayudar también, señoritas!” Mireille agradeció cortésmente a Celia y Aishia antes de irse.

Rio dudó por un momento, pero pronto asintió con la cabeza. “… Entonces aceptaremos tu oferta. Por favor, muéstrenos el camino.”

Se habían desviado en gran medida de su plan original para salir de la puerta sur, pero sería demasiado antinatural regresar ahora. Sin mencionar la posibilidad de encontrar más revenantes si lo hicieran. Tomar refugio en la mansión era un plan alternativo aceptable.

“Entendido. Por favor, sígueme.” El soldado se inclinó respetuosamente antes de tomar la iniciativa.