Tsuujou Kougeki ga Zentai Kougeki de Ni-kai Kougeki no Okaa-san wa Suki desu ka?

Volumen 2

Capítulo 4: El Equipaje De Mamá Tenía Un Cuaderno De Higiene Alimentaria. No Hay Señales De Una Licencia De Chef

Parte 5

Era de noche. El grupo estaba junto a las puertas de la escuela.

El festival había terminado, y los estudiantes se dirigían a casa.

“Arghhhhhh! …¡No puedo creerlo! ¿¡Qué demonios!? ¡Esto es ridículo!”

Medhimama gritaba como una mujer poseída. Golpeó a su báculo contra el suelo. La gema se rompió, y el báculo se partió en dos.

El equipo sólo para mamás era sorprendentemente frágil. ¿O estaba tan enfadada? De cualquier manera, esto no la calmó exactamente.

“¡Me niego a aceptarlo! ¡Esto no puede estar pasando! ¡Parece que no podemos ganar! ¡No tiene ningún sentido!”

“¡Madre! ¡Por favor, cálmate! Nosotras…”

“¡Cállate!”

“¡Eek!”

Medhi intentó controlar a su madre, pero Medhimama agarró el brazo de su hija y la tiró hacia delante, frunciendo el ceño con furia.

“¿Madre…?”

“Así es…. Eso es, Medhi. La fuente de todos nuestros problemas eres tú, ¿no? ¡No te convertiste en la número uno como se suponía que debías! ¡Esa es la causa! Si hubieras ganado, no habríamos tenido ningún problema. ¿¡Por qué no lo hiciste!?”

“Me disculpo por mis malos resultados en clase, pero…”

“¡No me importan las disculpas de labios para afuera! ¿Qué vas a hacer al respecto? ¿Cómo vas a arreglar esto? ¡Dime, Medhi! ¿¡Cómo vas a hacer las cosas bien!?”

“No sé… No sé qué…”

“Tú nos trajiste este desastre, ¿y ni siquiera sabes cómo arreglarlo? ¡Increíble! ¡Ya es suficiente! ¡No vales nada! ¡Debes ser castigada!”

Medhimama levantó la mano. La palma de la mano lista para golpear la mejilla de Medhi.

Masato no iba a dejar que eso pasara de nuevo.

“¡Espera!”, dijo, extendiendo la mano y agarrándole los brazos a Medhimama. “Te estás deshonrando a ti misma.”

Los ojos inyectados de sangre se fijaron en Masato. Se mantuvo firme. No iba a retroceder aquí.

Francamente, él era el que estaba a punto de perderla, pero luchó contra su ira, forzándose a permanecer calmado y a mirar a los ojos de Medhimama. Con calma.

“Por favor, deja de hacer esto.”

“¡Métete en tus asuntos! ¡Esto es entre mi hija y yo! ¡No tiene nada que ver contigo!”

“¿Cómo es eso? Nos has metido en tus líos a cada momento. Ya basta con eso. Vamos a calmarnos todos. Todo el mundo está mirando.”

“¿Quién está mirando…?”

Estaban rodeados de estudiantes de camino a casa, muchos de los cuales se habían detenido a mirar. Wise, Porta y Mamako estaban todos mirando con ansiedad.

La mirada de Mamako probablemente tuvo el mayor efecto. Es probable que Medhimama no quisiera verse más patética de lo que ya estaba. Se calmó considerablemente, saliéndose de las garras de Masato y dándole la espalda.

La había detenido por ahora. Pero, ¿qué sigue?

Masato miró hacia su grupo. Wise y Porta, claro, pero ni siquiera Mamako sabía qué hacer. Todos estaban mirándolo fijamente.

Entonces…

…¿Mm?

Masato sintió un escalofrío correr por su columna vertebral. Como si algo realmente peligroso se estuviera acercando. Y la fuente de ese escalofrío… estaba justo a su lado.

Miró hacia allí.

“…va a matarla…”

Había algo allí. Algo envuelto en un aura de oscuridad. Algo mirando fijamente a la parte posterior de la cabeza de Medhimama con un brillo enloquecido en sus ojos, levantando un báculo por encima de su cabeza.

Era Medhi. A unos centímetros de Medhimama.

“¡Maldición! ¡Para! ¡Tiempo fuera!”

Masato rápidamente inmovilizó los brazos de Medhi Oscura detrás de su espalda. Parte de él definitivamente quería dejarla entrar, pero no así. Esto sólo puede terminar mal.

“¡Eeek! ¿¡Masato!?”

Medhi se dio la vuelta, mirando como siempre lo hacía. El oscuro poder había desaparecido en un instante. Su cara estaba tan cerca de la suya, que instintivamente se inclinó hacia atrás. Estaba tan hermosa como siempre.

“¿Qué está pasando?”

“¿Qué está pasando? ¡Eso es lo que quiero saber! Estuviste aterradora”.

“¿Lo estaba? …no puedo recordar nada de eso…”

La inconfundiblemente bella cara de Medhi se inclinó hacia un lado, desconcertada. ¿Cómo podría no recordar…? Era como si estuviera fingiendo desesperadamente inocencia. ¿Qué iba a hacer con ella? ¿Qué podía hacer?

De cualquier manera, no podía seguir sujetando sus brazos, su cuerpo presionaba contra el de ella. No era bueno para su salud mental. No estaba seguro de si era seguro liberarla, pero poco a poco lo hizo.

Y justo cuando este lado de las cosas se calmaba, la mitad aún más problemática empezó a moverse de nuevo. No le da la oportunidad de respirar.

“¿Qué es todo ese alboroto? ¡Deja de murmurar! Suspiro...”

Medhimama se había calmado mucho, pero aún no había bajado la guardia. Masato tranquilamente puso a Medhi detrás de él, de pie entre los dos, sin dejar que ninguna de las dos fuera tras la otra.

Medhimama miró a Masato y lanzó otro profundo suspiro.

“…no le levantaré la mano.”

“Lo siento, pero no puedo creer en tu palabra. Ninguna de las dos”.

“¿De las dos? …no sé a qué te refieres, pero bien. Llévate a Medhi contigo. A Medhi probablemente le gustaría más eso”.

“No. Voy contigo, madre.”

Medhi salió de detrás de la protección de Masato, poniéndose junto a Medhimama.

Medhimama la miró con genuina sorpresa.

“…¿Estás segura?”

“Sí. Quiero estar contigo, madre. Si me lo permites.”

“No, espera, Medhi, si las dos están solas…”

La vas a golpear. No estaba seguro de si debía decir eso. Quería hacerlo, pero no pudo hacerlo.

Medhi agitó un poco la cabeza. “No te preocupes. Lo prometo”, dijo en voz baja. ¿Fue una promesa de no golpear a su madre? Estaba súper inseguro de cuánto podía confiar en ella ahora mismo.

“Madre. ¿Te importa si me quedo contigo?”

“…Haz lo que quieras. La posada en la que nos alojábamos nos echó por…. alguna tontería sobre otra reserva. Tendremos que encontrar un nuevo lugar para quedarnos. Es mejor que lo solucionemos rápido. Si vienes conmigo, hazlo de una vez”.

“Sí, madre.”

La familia clerical se fue, la hija siguiendo los pasos de la madre.

Hablando en voz baja el uno con el otro.

“…debería disculparme.”

“No es necesario, madre. Entiendo. Siempre estás pensando en lo que es mejor para mí, y eso te hace estricta a veces. Ya lo sé.”

“Sí…. Eres una chica muy buena.”

Medhi sonrió. Medhimama parecía incómoda pero se las arregló para devolverle la sonrisa.

Parecía que habían hecho una especie de paz.

Todo el incidente le seguía preocupando, Masato les vio marcharse.

***

Esa noche, en los baños de la posada…

“Suspiro… No sé…”

…una gota de agua cayó del techo, golpeándolo en la frente. Masato estaba perdido en sus pensamientos.

El agua caliente estaba drenando la fatiga del festival, y él estaba dando a sus extremidades un ligero masaje.

¿En qué estaba pensando? ¿Qué más?

“¡Guau… es un poco caliente, pero bastante bonito! Los baños que toda la familia puede usar son otra cosa”.

El principal problema en su mente: ¿Por qué estaba Mamako sentada a su lado?

Miró en su dirección, y sí, seguía siendo ella la que estaba a su lado. Tesoro en forma de isla de pecho ×2 flotando en la superficie del agua, disfrutando de compartir el baño con su hijo. Su piel se ruborizó de un rosa pálido.

Y no fue sólo ella.

“Cielos…. ¿Por qué siempre pasa esto? No está bien…”

“Hace un poco de calor, ¡pero puedo manejarlo! ¡Es divertido bañarse con todos!”

Wise y Porta también estuvieron aquí, más allá del vapor que sale del agua.

Wise estaba en modo defensivo máximo. Ella tenía de todo, desde la nariz hasta debajo del agua y había estado murmurando para sí misma todo el tiempo, lista para cometer un asesinato con la más mínima excusa.

Porta parecía estar disfrutando felizmente del agua. Su preciosa bolsa estaba sobre su cabeza, sin dejar nunca su cuerpo. Tan buena chica.

De repente, una fanfarria sorpresa sonó en la cabeza de Masato.

El título secreto de Masato, Líquido de Baño Mezclado Nivel 1, ¡avanzado a Líquido de Baño Mezclado Nivel 2! ¡Bien hecho!

Así que, bueno, lo primero en la mente de Masato fue definitivamente este estado de cosas.

“…¿Por qué…por qué está pasando esto…?”

“Porque te metiste directamente en el baño de las chicas, monstruo.”

“¡No lo hice! Cuando entré, las cortinas eran definitivamente para el baño de hombres. Y mientras estaba aquí, supongo que se convirtió en el horario de las mujeres. ¡Pero vieron que estaba aquí, y aún así eligieron unirse a mí! ¿Quién es el desvergonzado de aquí?”

“¡Yo no quería! ¡Pero estas dos…!”

“No veo cuál es el problema. ¡Todo el mundo bañándose juntos es algo bueno!”

“¡Sí! ¡Bañarse con su grupo es agradable!”

“¡Y luego empiezan a hablar así! Si me niego, es como si las odiara o algo así. ¡No tuve elección!”

Y así, esta situación contó con el consentimiento explícito de todas las partes. Estaba a salvo… ¿cierto?

Bueno.

“Bueno, ahora que todo el mundo se ha calmado”, comenzó Mamako, “¡es hora de la habitual sesión de estrategia al desnudo! Yay!”

“¿Cuándo se convirtió en costumbre?”

“¡Ya sabes lo que dicen! Desnuda tu cuerpo y tu alma, y nunca escondas lo que estás pensando. ¡Es tan importante! Entonces… ¿Ma-kun? Hay algo que quieres compartir con todos, ¿no? Mami lo sabe con sólo mirarte. ¿Cuál es el problema del día?”

“Bueno, obviamente…. Medhi y su madre.”

“””…Ohhhh…””

Todos colgaron sus cabezas. No hay necesidad de explicarlo. Todos habían sido testigos de las mismas cosas y sabían exactamente lo que estaba pasando. El mismo pensamiento flotaba en las mentes de todos.

Wise dio un suspiro exasperado. “¿Sabes lo que pienso? Creo que deberíamos dejar que lo hagan”.

“Pero no podemos hacer eso. Si no se hace algo, en serio…”

“Sí, tal vez. Pero la vieja bruja trata a su hija y a todos los que la rodean como basura, y no escuchará una sola palabra de protesta de nadie. Y Medhi está siendo Medhi y siguiendo obedientemente a la bruja. No tenemos dónde meternos”.

“Sí, pero… no creo que Medhimama pueda seguir así, y los niveles de estrés de Medhi sólo van a empeorar. Si la oscuridad dentro de ella continúa creciendo…”

“Puedo ver totalmente a una sanadora que corre un edificio oscuro. Los hechizos de tipo drenaje que desvían HP y MP suelen ser oscuros, así que si se centra en hechizos como ése, en realidad sería bastante útil”.

“Ese no es el problema…”

“¿Entonces qué es? Quiero decir, Masato, ¿por qué deberías preocuparte por ellos?”

“Bueno…”

Ahora que lo mencionó, Masato no tenía una razón legítima para estar tan concentrado en los problemas de Medhi y su madre. No era su trabajo. No era necesario.

Como héroe, era su deber estrechar sus lazos con su propia madre, pero incluso esa responsabilidad le fue impuesta durante la creación de la cuenta.

Pero aún así, Masato pensó…

“…no puedo ignorarlas. O al menos, no quiero. No puedo llamarlo un problema ajeno”.

Masato vio sus propios problemas en sus problemas. La posición y los sentimientos de Medhi golpearon dolorosamente cerca de casa.

Una madre cuyo comportamiento restringía el comportamiento de su hijo, poniéndole presión. Sentimientos rebeldes se enconan en el interior. Había superado todo eso. Era muy consciente de lo difícil que podía ser.

Pensó que finalmente había conocido a su heroína ideal, y los destellos de la oscuridad dentro de ella se sintieron como una traición a ese ideal y lo dejaron sin poder ayudar. Aún así…

“Siento que debe haber algo que pueda hacer. Pero necesito tu ayuda para hacerlo. Por favor.”

Masato inclinó la cabeza, pidiendo ayuda a su grupo.

“Mamá está de acuerdo”, dijo Mamako, su cálida voz un gran consuelo. “Si Ma-kun quiere ayudar, entonces nosotros también deberíamos ayudar. Mami hará todo lo que pueda”.

“Mamá…”

La madre perfecta, una que entendió cómo se sentía su hijo, y le dio un suave empujón… excepto… “Me encantaría tu ayuda, sólo asegúrate de que no intentes tomar el control.” “Cierto. Lo entiendo.” La autoconciencia de los padres desempeña un papel fundamental en la reducción del sufrimiento de los niños, por lo que se ve obligado a insistir en este punto.

Mamako aceptó su amonestación y giró hacia Wise. “Dado todo eso, Wise, te agradecería que cooperaras con Ma-kun aquí. ¿Qué dices?”

“Cooperar, ¿eh? No estoy segura de por qué debería cooperar con los impulsos de libido de Masato…” Ella le miró fijamente.

“¡Quítate esa acusación de los ojos! ¡Mi libido no está relacionada! ¡Independientemente de cómo empezó esto, ahora mismo estoy genuinamente preocupado por Medhi!”

“Preocupación genuina…. De acuerdo.”

Wise echó un largo vistazo a Masato, reflexionando sobre ello. Y luego suspiró, como si estuviera muy preocupada.

“Está bien, está bien. Soy una sabia; mi trabajo es que me atropelle el tonto, pervertido e inútil héroe de sangre caliente”.

“Pero el héroe de nuestro grupo es un caballero inteligente, confiable y apuesto.”

“Eso es lo que tú dices. Pero, bueno, esa misma tontería entrometida me ayudó a arreglar las cosas con mi madre, así que… no puedo quedarme fuera, ¿no?”

“Gracias, Wise. ¿Y tú, Porta…? ¡Oh, Dios mío!”

Cuando Mamako se volvió hacia Porta….

“Seguroooooo…. Estaaaaaaaaré… contentaaaaa… de ayudarrrrrrr…”

Porta era de color rojo brillante, sus ojos girando. Todo su cuerpo se balanceaba. Sin embargo, de alguna manera la bolsa se quedó en su cabeza. ¡Buen trabajo! Aunque tal vez su impecable equilibrio no debería haber sido su primera preocupación.

“¡Oye, Porta! ¿Estás bien ahí?”

“¡Dios mío! Porta, cariño, ¡has estado en el baño demasiado tiempo!”

“¡Mierda, eso no es bueno! ¡Será mejor que la saquemos de aquí!”

Mamako y Wise se pusieron de pie y rápidamente se dirigieron hacia Porta.

Dos traseros desnudos se movieron rápidamente por el agua… aunque ahora no es el mejor momento para mirar.

Mamako recogió a Porta, y ella y Wise salieron del baño.

“¡Porta necesita descansar! “¡Las tres saldremos del baño primero!”

“¡Quédate aquí un rato! Tenemos que vestirnos en el vestuario, así que siéntate ahí y cuenta hasta veinte millones antes de que te atrevas a salir. ¡Y deja de mirar hacia aquí!”

“Cierto… Sí, señora…”

Masato apartó la vista, dejando ir a las tres damas.

Eso significaba…

“… ¿yo también escapé del castigo esta vez?”

No era como si lo hubiera estado esperando. Se habían bañado juntos, él las había visto
desnudas, y no le había pasado nada. “Supongo que debería decir… ¿gracias?” Murmuró Masato.