Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Volumen 1

Capítulo 3: La Princesa Vampiro Dorada

Parte 1

“Maldita sea, ¿por qué no puedo encontrarla?” Habían pasado tres días desde que Hajime había matado al Oso Garra, y él había pasado cada momento que se despertaba limpiando el laberinto en busca de una escalera que llevaba hacia arriba.

En ese momento había cartografiado más del 80% del suelo. Después de matar al Oso Garra, las estadísticas de Hajime habían dado otro gran salto, por lo que ya no había nada en el suelo que le suponía una pequeña amenaza. Como tal, aunque el suelo era vasto, su búsqueda progresó rápidamente y sin incidentes. A pesar de eso, era incapaz de encontrar escaleras por mucho que mirara.

En realidad, eso no era estrictamente cierto. A pesar de que no había podido encontrar ninguna escalera que lo llevara hacia arriba, ya había descubierto la escalera que bajaba hace dos días. Como el laberinto estaba estrictamente dividido en pisos, era lógico pensar que también tenía que haber una escalera que llevara hacia arriba, pero no importaba cómo buscaba, Hajime no podía encontrarla.

Ya había intentado transmutar su propia escalera hasta el piso de arriba, ignorando las reglas del calabozo. Lo único que había descubierto como resultado era que, pasado un cierto punto, ya fuera que tratara de subir o bajar, los muros que le rodeaban simplemente dejaron de responder a su habilidad [Transmutar]. Podía transmutar todo lo que le gustaba dentro de los confines del suelo, pero las capas que separaban los suelos parecían tener algún tipo de protección mágica. El gran laberinto del Orcus había sido creado durante la Edad de los Dioses. Así que no era tan extraño que aún tuviera algunos misterios.

Por eso, Hajime había pasado su tiempo buscando la escalera, pero pronto se dio cuenta de que tendría que tomar una decisión sobre qué hacer si no la encontraba. Esa elección fue si profundizar o no más en su lugar.

“… Otro callejón sin salida. En este punto he investigado todos los caminos. ¿Qué demonios está pasando aquí?” Hajime suspiró cansado, forzado a aceptar que no iba a encontrar una escalera que lo llevara hacia arriba. Renunció y volvió a la habitación donde había encontrado la escalera que bajaba.

La escalera que había descubierto hace dos días estaba rudamente tallada. Estaba más cerca de una pendiente accidentada que de una escalera real. Además, no había ninguna piedra verde que iluminara el camino, y el descenso estaba empapado en la oscuridad, emitiendo una atmósfera siniestra. La oscuridad y su forma hacían que la entrada se pareciera a las fauces abiertas de alguna bestia humillada. Sentí como si una vez que entrara, nunca podría volver a salir.

“¡Hah! ¡Tráelo! ¡Devoraré cualquier cosa que me lances!” Hajime se ridiculizó por su trepidación, y sonrió sin miedo. Y sin más dudas, pisó la oscuridad.

Una vez que empezó a bajar por la escalera, la oscuridad lo envolvió completamente. Aunque por lo general tenía sentido que un laberinto subterráneo fuera oscuro, cada piso que había pasado hasta entonces estaba iluminado con piedras resplandecientes. Aunque no hubiera sido brillante, nunca había estado tan oscuro que Hajime no hubiera podido ver su mano delante de su cara.

Sin embargo, no había ninguna piedra brillante que cubriera la escalera. Hajime se detuvo un rato, esperando que sus ojos se ajustasen, pero no importaba cuánto tiempo esperase, todo lo que sus ojos miraban era negro.

Dejado sin elección, Hajime cavó alrededor de su improvisada mochila, creada con cuero de oso y alambre transmutado, y sacó una piedra verde para iluminar sus alrededores.

Llevar una fuente de luz en la oscuridad equivalía a suicidarse, pero Hajime pensó que no tenía otra forma de avanzar. Sin embargo, decidió asegurarse de mantener al menos su mano derecha libre, así que ató la piedra brillante al muñón de su brazo izquierdo.

Después de un rato de caminar hacia delante, Hajime vio algo que brillaba en la oscuridad, más profundo en el pasillo. Forzó sus sentidos, repentinamente vigilante.

Pegado a las sombras tanto como le fue posible mientras avanzaba, de repente sintió un sentimiento ominoso acercándose por su lado izquierdo. Rápidamente saltó hacia un lado, y luego señaló su muñón izquierdo hacia la fuente de la sensación. Iluminada en la horrible luz verde había un enorme lagarto gris de dos metros de largo, y sus dorados ojos miraban fijamente a Hajime.

Los ojos dorados de la lagartija brillaron con luz brillante. Un instante después…

“¿Huh?” Con un extraño crujido, el muñón izquierdo de Hajime comenzó a convertirse en piedra. La fosilización se extendió hasta la piedra resplandeciente, y segundos después la piedra resplandeciente petrificada hizo un ruido de grietas y se desmenuzó. Sin su fuente de luz, Hajime volvió a estar rodeado de oscuridad. La petrificación había continuado, llegando hasta el hombro.

Hajime se chasqueó la lengua, sacó un frasco de Ambrosia del monstruo pelaje y la funda de hilo transmutado atada a su pecho, y se la metió en un trago. Como él había esperado, la petrificación se detuvo y lentamente comenzó a retroceder por su brazo izquierdo.

¡Ahora lo has conseguido! Hajime sacó una granada de destello de la bolsa que tenía en la cintura y la tiró hacia donde había visto por última vez al lagarto. Vio otro destello de luz dorada aparecer de las tinieblas. A pesar de su incapacidad para ver con claridad, Hajime rápidamente utilizó [Paso Supersónico] para huir.

Cuando miró hacia atrás, vio la roca detrás de donde había estado había cambiado de color, pareciendo mucho más desgastado de lo que alguna vez fue. Esa mirada literalmente petrificante iba a ser bastante molesta. El lagarto se parecía mucho al tipo de basilisco que Hajime vio en los juegos de RPG.

Hajime sacó a [Donner] de su funda, y lo sostuvo frente a su cara mientras cerraba firmemente los ojos. Un segundo más tarde, la granada de destello explotó en un motín de luz verde con una explosión silenciosa.

“¿Kraaaaah!?” El Basilisco probablemente nunca antes había experimentado la luz tan brillante, y se retorcía en desconcierto. Cuando abrió los ojos, Hajime apenas podía distinguir su silueta en la oscuridad.

Disparó sin demora. Su bala encontró su marca, rasgándose a través del cráneo del basilisco, pulverizando el contenido que contenía. La bala pasó limpiamente a través de la parte posterior de la cabeza del basilisco y perforó profundamente la pared rocosa detrás de ella con un fuerte silbido. Debido a que sus balas fueron aceleradas eléctricamente, salieron a una temperatura muy alta y quemaron todo lo que pasaron. Sólo gracias a la resistencia al calor de taur fue capaz de disparar rondas tan poderosas.

Cuidadoso de su entorno, Hajime se acercó con cuidado al basilisco. Una vez que confirmó que estaba muerto, rápidamente cortó su carne y se retiró a salvo. Apenas podía comerla allí, donde ni siquiera podía ver lo que había a su alrededor. Hajime decidió priorizar primero la búsqueda de la nueva planta.

Continuó caminando por la oscuridad. Buscó docenas de horas, pero no pudo encontrar una escalera que llevaba hacia abajo. Continuó derrotando a los enemigos y recogiendo las rocas que encontró en el camino, y al poco tiempo se vio cargado de más cosas de las que podía cargar fácilmente. Fue entonces cuando finalmente decidió que ya era hora de hacer una base para sí mismo.

Puso su mano sobre una pared cercana y la transmutó. El muro se abrió fácilmente y entró en el pasillo que había hecho para sí mismo. Hajime continuó transmutando el área que le rodeaba hasta que tuvo un espacio de unas seis esteras de tatami de ancho. Luego, antes de que se olvidara, sacó el cristal azul pálido del tamaño de una pelota de baloncesto de su mochila y lo colocó en una cavidad que había tallado para ella. Por supuesto, había traído la Piedra Divina con él. También había traído contenedores para sujetar la Ambrosía que había puesto debajo de la piedra.

Como Hajime desconocía el verdadero nombre de la piedra, había tomado la forma de llamarla la [roca de la poción] y la Ambrosía que se derramaba de ella [pociones]. Si bien era cierto que las pociones eran los artículos de curación estándar en la mayoría de los juegos, los efectos de Ambrosia superaron con creces los de una poción mísera. El apodo insultantemente básico que había elegido sólo mostraba lo poco que pensó Hajime en ponerle nombre.

“Ahora que me he instalado, es hora de un festín.” Hajime sacó toda la carne que había recogido de un recipiente de piedra que había colocado en su mochila mediante la transmutación. Luego lo asó todo con [Campo Eléctrico]. El menú del día consistió en carne asada de basilisco, búho entero asado con la mitad de sus plumas todavía pegadas, y un gato asado entero de seis patas. No había condimentos.

“Al menos tengo comida.” Mientras trabajaba durante la comida, comenzó a sentir ese dolor familiar en su cuerpo. El dolor hizo que su cuerpo se fortaleciera una vez más. Lo que significaba que los monstruos aquí presentes eran al menos tan poderosos como lo había sido el Oso Garra, si no más. Eso tenía sentido, ya que la combinación de su magia especial y la oscuridad había hecho a cada uno de ellos muy difíciles de enfrentar. Sin embargo, [Donner] fue capaz de pulverizar cualquier cosa que golpeara, así que Hajime no se había dado cuenta de que eran mucho más fuertes que sus contrapartes en el piso de arriba.

Bebió un poco más de Ambrosia e ignoró el dolor mientras seguía comiendo. Había sufrido tanto desde que perdió el brazo que un nivel tan miserable de dolor ni siquiera lo atormentaba.

“Mmmf, gracias por la comida. Ahora bien, veamos cómo cambiaron mis estadísticas…” Hajime sacó su placa de estado mientras decía eso. Sus estadísticas actuales eran las siguientes…

Nombre: Hajime Nagumo  –  Edad: 17  –  Nivel: 23

Trabajo: Sinergista
Fuerza: 450
Vitalidad: 550
Defensa: 350
Agilidad: 550
Magia: 500
Defensa Mágica: 500

Habilidades:

• Transmutación
  – Apreciación de Materiales
  – Transmutación con Precisión
  – Percepción de Minerales
  – Desíntesis de Mineral
  – Sintesis de Mineral
• Manipulación de mana
• Campo Eléctrico
• Compresión de lenguaje
• Estomago de Hierro
• Danza Aérea
  – Aerodinámica
  – Paso Supersónico
• Garra de Viento
• Visión Nocturna
• Sentir Presencia
• Resistencia a la Petrificación

Como él había esperado, sus estadísticas habían aumentado dramáticamente. Y había aprendido tres nuevas habilidades. Mientras miraba a su alrededor, se dio cuenta de que podía ver un poco mejor en la oscuridad.

Debe haber sido el efecto de [Visión Nocturna]. Podría no haber sido una habilidad muy útil para el resto de los monstruos en este infierno, pero para el suelo que estaba en al menos, era un regalo de Dios. Sus otras nuevas habilidades hicieron lo que sus nombres sugirieron. Aunque Hajime estaba un poco decepcionado porque había conseguido la resistencia a la petrificación, y no la verdadera habilidad de petrificación del basilisco. Se preguntaba por qué.

“Oh bueno, habría sido tan guay tener el ‘ojo de Basilisco’ o algo así…”, lamentó Hajime desanimado.

Una vez que terminó su comida, Hajime empezó a transmutar nuevos suministros para sí mismo.

Construir incluso una sola bala requirió mucha concentración. Sus balas necesitaban ser extremadamente precisas. Para poder hacer uso del rayado de [Donner], tenía que conseguir el tamaño y la forma exactos. Y no pudo cometer ni un solo error al comprimir el [Roca Explosiva] dentro de ellos. Cada bala tardó unos treinta minutos en hacerse, pero Hajime aún estaba orgulloso de su habilidad con la nave. Los humanos realmente son criaturas que muestran una aterradora cantidad de fuerza cuando están desesperados, pensó Hajime, impresionado consigo mismo.

Además, aunque llevó tiempo, sus balas eran lo suficientemente poderosas como para no tener motivos para quejarse, y cada una de ellas entrenaba su capacidad de transmutar a nuevas alturas, por lo que realmente no era un desperdicio.

Gracias a su entrenamiento, ahora era capaz de purificar cualquier mineral o mineral de impurezas, e incluso podía descomponer una aleación en sus partes compuestas. También tenía el poder de fusionar minerales para crear nuevas aleaciones. La habilidad de transmutación actual de Hajime estaba a la par con el mejor herrero del reino.

Silenciosamente continuó su trabajo. Hasta ahora, sólo había descendido un nivel desde su punto de partida, y no tenía forma de saber cuánto más lejos este abismo continuaba. Planeó volver a su búsqueda en el momento en que terminó de transmutar. Si quería volver a casa, no podía permitirse perder el tiempo merodeando.

Una vez que reanudó su búsqueda, Hajime se detuvo sólo cuando necesitaba volver a la base y reponer sus provisiones. No tenía forma de saber cuánto tiempo le llevaría su búsqueda si se dejaba descansar mientras buscaba. Gracias a su [Visión Nocturna], ya no tuvo ningún problema para ver en la oscuridad, y [Sentir Presencia] le hizo saber cuándo había algún monstruo en un radio de diez metros. Su búsqueda por el suelo progresó rápidamente.

Finalmente, descubrió las escaleras que llevaban al piso siguiente. Se adelantó sin dudarlo.

El suelo del piso de abajo estaba pegajoso, como el alquitrán. De hecho, todo el piso parecía un inmenso pantano. Sus piernas se atascaron fácilmente en el suelo, y Hajime tuvo dificultad para moverse. Frunció el ceño al ver lo difícil que era moverse, luego procedió a trepar por una roca que sobresalía. Desde allí utilizó la [aerodinámica] para avanzar por el cielo.

A medida que continuaba avanzando, usaba constantemente la Percepción de Mineral para buscar nuevos minerales. Entre las que descubrió en esta planta, destaca una de ellas.

[Roca Flamígera] Un mineral negro brillante. Cuando se calienta, se derrite en alquitrán. Se derrite a 50 grados centígrados y se incendia a 100 grados centígrados. Cuando se quema, puede alcanzar temperaturas de hasta 3000 grados centígrados. La longitud de las quemaduras depende de la cantidad de alquitrán.

“¿En serio?” Hajime hizo una mueca y levantó una de sus piernas. Mientras lo hacía, el alquitrán que había pisado en numerosas ocasiones desde que puso un pie en este piso silenció fuertemente mientras goteaba de su zapato.

“N-No fuego, lo tengo …” Dudaba de que se encendiera tan fácilmente ya que no era tan fácil alcanzar los 100 grados, pero por casualidad, provocaría una reacción en cadena que literalmente tendría este piso envuelto en fuegos más calientes que el infierno. Ni siquiera la Ambrosia podría salvarlo de eso.

“Eso significa que no puedo usar mi cañón de riel o [Campo Eléctrico], tampoco …” [Donner] era una de sus armas más poderosas. Incluso sin [Campo Eléctrico], para acelerar sus balas, el poder de combustión de la [Roca Explosiva] por sí solo era formidable.

Sin embargo, eso sólo se refería a los monstruos normales. Por ejemplo, los soldados traumáticos se pulverizarían fácilmente con el poder de la [Roca Explosiva]. Incluso el Behemoth habría recibido una cantidad considerable de daños. Sin embargo, los monstruos que habitaban este profundo abismo eran diferentes. Eran de un calibre completamente diferente a los monstruos de los pisos de arriba. Es por eso que Hajime no estaba seguro de que la [Roca Explosiva] solo fuera suficiente para matarlos. A pesar de este aprieto, Hajime seguía sonriendo con impaciencia.

“¿Y qué si no puedo usar a [Donner]? Lo que necesito hacer no ha cambiado. Sólo tengo que para matar y devorar a mis enemigos”. Siguió adelante, incluso con su [Campo Eléctrico].

Finalmente, Hajime se encontró en una bifurcación de tres carriles. Marcó la pared.

Pero justo cuando se movió hacia adelante… ¡Fwoosh!

“¿Qué?” Un monstruo parecido a un tiburón saltó repentinamente del alquitrán, incontables filas de afilados dientes visibles en su boca. Se movió, apuntando a tomar la cabeza de Hajime en un gran mordisco. Consiguió agacharse a tiempo, pero un escalofrío de miedo aún corría por su espina dorsal mientras esa horripilante boca se cerraba a centímetros de su cabeza.

[Sentir Presencia] no fue capaz de captarlo. Desde que lo adquirió, Hajime había estado usando [Sentir Presencia] constantemente. Y se suponía que la habilidad debía ser capaz de sentir cualquier cosa a 10 metros de él sin falta. A pesar de eso, no había podido sentir ese tiburón hasta justo antes de que atacara.

Habiendo fracasado en sacar a Hajime con su primer bocado, el tiburón volvió al mar de alquitrán con un chapuzón.

¡Mierda, no sé dónde está! Apretó los dientes por falta de información. Sin embargo, se dio cuenta de que si se quedaba quieto lo matarían, así que rápidamente utilizó [Aerodinámica] para mantenerse en movimiento.

Como si hubiera predicho sus acciones, el tiburón saltó alto esta vez, llegando hasta él.

“¡No me subestimes!” Hajime dio un salto mortal en el aire y mientras colgaba suspendido boca abajo, disparó directamente al tiburón. La bala disparada desde el hocico de [Donner] corrió hacia delante, ansiosa de sangre. Y con una puntería perfecta, golpeó la superficie del tiburón en su espalda. Sin embargo…

“¡Tch! No tiene suficiente poder para penetrar”. La bala creó una pequeña abolladura en la piel del tiburón, y luego, como si hubiera encontrado una pared de goma, rebotó. Parecía que la piel del tiburón era resistente a los ataques físicos.

“¡Guh!” Saltó ágilmente y se sumergió en el mar de alquitrán. Entonces, con esa misma agilidad, el tiburón apuntó al punto de desembarco de Hajime, saltando una vez más hacia él después de que terminara su salto mortal.

Se las arregló para torcer su cuerpo en el último minuto, evitando ser rasgado por la mitad, pero el tiburón todavía se las arregló para arrancar un pequeño trozo de carne de su costado. El impacto causó que el Hajime cayera al mar de alquitrán. Todo su cuerpo estaba cubierto por una sustancia negra, pero rápidamente se puso en pie y saltó al aire. Un segundo más tarde, las mandíbulas del tiburón se abrieron donde Hajime había estado acostado, y luego se cerraron con un chasquido.

El sudor frío corrió por la espalda de Hajime mientras se mantenía en el aire con usos consecutivos de [Aerodinámica]. Pero su sonrisa intrépida nunca se apartó de su cara, a pesar de lo fácilmente que se sentía acorralado.

“¡Tráelo!” Se mantuvo en el aire con [Aerodinámica], siempre moviéndose de un lugar a otro, mientras esperaba que el tiburón atacara una vez más.

Sus poderes de concentración, que había perfeccionado durante semanas de transmutación implacable, le servían bien aquí. A medida que se enfocaba, su entorno lentamente se hizo más claro, e incluso podía distinguir colores.

¿Y qué si no puedo encontrarlo con [Sentir Presencia]? Para empezar, me las arreglé bien, aunque no lo tuviera. Aunque no pueda ver dónde está, tiene que mostrarse cuando ataca. Enfocado, Hajime se movió para saltar al aire una vez más, pero mientras lo hacía, su pie se volvió inestable y perdió el equilibrio al saltar. El tiburón no fue quien dejó pasar esa oportunidad. Saltó desde detrás de Hajime, justo donde estaba su punto ciego.

“¡Bueno, me alegro de que seas tan simplista!” Su supuestamente fallido equilibrio se recuperó repentinamente, y saltó a un lado, evitando el ataque del tiburón. Al mismo tiempo, balanceó su mano derecha, con [Donner] aún agarrado firmemente en ella, contra el tiburón.

Apareció un enorme tajo en el costado del tiburón, y la sangre salpicó por todas partes mientras volvía a caer en el alquitrán. Cayó flotando en el alquitrán, agitando de dolor.

Hajime había pretendido a propósito perder el equilibrio, para atraer al tiburón a atacar desde su punto ciego. Luego había envuelto la magia especial del Oso Garra, la [Garra de Viento], alrededor de [Donner] mientras lo balanceaba.

Hajime se abalanzó sobre el tiburón azotador y balanceó a [Donner] en su cabeza. La [Garra de viento] le partió la cabeza limpiamente en dos. Aunque sólo tenía una garra en vez de tres, su nitidez era inigualable. Era la habilidad perfecta para el combate cuerpo a cuerpo.

“Ahora bien, es hora de averiguar por qué no pude sentir tu presencia.” Hajime se mojó los labios de una manera depredadora mientras decía eso.

Almacenó la carne de tiburón en su bolsa, y luego siguió buscando. Encontró la salida al siguiente piso en poco tiempo, y descendió al nivel inferior.

Nombre: Hajime Nagumo  –  Edad: 17  –  Nivel: 24

Trabajo: Sinergista
Fuerza: 450
Vitalidad: 550
Defensa: 400 
Agilidad: 550
Magia: 500
Defensa Mágica: 500

Habilidades:

• Transmutación
  – Apreciación de Materiales
  – Transmutación con Precisión
  – Percepción de Minerales
  – Desíntesis de Mineral
  – Sintesis de Mineral
• Manipulación de mana
• Campo Eléctrico
• Compresión de lenguaje
• Estomago de Hierro
• Danza Aérea
  – Aerodinámica
  – Paso Supersónico
• Garra de Viento
• Visión Nocturna
• Sentir Presencia
• Resistencia a la Petrificación
• Presencia Oculta