Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 10: La Mejor Apuesta del Mundo

Bonus: ¿La Mejor de Axel…?

Después de dormir hasta pasado el mediodía, bajé las escaleras con muchísimo sueño mientras movía la cabeza lentamente para despejarme. Fue entonces cuando…

―¡Oh, mira quién se ha despertado, si es el maldito nini depravado! ¡Cómete mi puño carmesí y pasa directamente a la otra vida!

Megumin, que se había tapado su ojo derecho con una mano y hecho una pose muy de chuuni, chasqueó los dedos con la mano libre y me señaló enérgicamente.

―…No sé por qué estás buscando pelea nada más ver que me levanto, pero ya que te empeñas, yo también pienso ir a por ti para darte una lección.

―¡Auauauauauauauau! ¡Por favor, para, te estoy pidiendo perdón, para ya!

Megumin suplicó clemencia mientras le retorcía el dedo con el que me había señalado.

―¿A qué venía eso? Si me has lanzado una maldición sin un motivo justificado, utilizaré el Toque Drenador para absorber tu poder mágico y no podrás hacer tu explosión diaria, ¿me has oído?

―¡P-P-P-Por favor, para! T-tus pensamientos son sin duda terroríficos. ¡Creo que eres incluso más malvado que Vanir, y eso que él es un demonio!

En realidad no comprendía por qué para ella suponía una desgracia tan grande el no poder utilizar su magia durante un día, pero en cualquier caso, mi amenaza tuvo un efecto inmejorable. Cuando le solté el dedo, Megumin dio varios pasos atrás con temor.

―Lo que quería decir es que los miembros del Clan de la Magia Carmesí que viven cerca de Axel se reúnen de vez en cuando para ponerse al día y charlar.

―…Pero no se me ocurre ningún otro miembro de tu clan que haya salido de la aldea aparte de ti y de Yunyun. Un grupo de gente tan problemática como los magos carmesíes debería mantenerse aislado en esas instalaciones a las que llamas “pueblo” tanto tiempo como sea posible.

―¡¿A quién estás llamando gente problemática?! ¡Para que lo sepas, si cualquiera de nosotros fuera a una entrevista para unirse a un grupo de mercenarios o de caballeros, nos aceptarían enseguida! ¡Somos miembros del Clan de la Magia Carmesí, y en cualquier gremio de aventureros al que vayas, verás que siempre hay una gran demanda de nuestros servicios!

Bueno, dicen que la Magia Carmesí es el grupo de magos más poderoso que hay en este mundo, pero viendo a esta chica no puedo evitar dudar de la veracidad de esa afirmación.

―Y, ¿qué tiene que ver ser un miembro de ese famoso Clan de la Magia Carmesí con haberme lanzado una maldición?

―Verás, en nuestra próxima reunión de miembros del Clan que viven cerca de aquí, haremos una competición para decidir quién tiene la frase de presentación más épica.

…¿de verdad son el grupo de magos más poderoso de este mundo? Pues a mí no me lo parece.

Megumin se enfadó al ver mi cara de indiferencia…

―¡¿Qué se supone que significa esa mirada?! Para nosotros, elegir una buena frase de presentación es una tarea muy importante. En cierto sentido es como las últimas palabras de alguien que se está muriendo, o un epitafio. Sí, algo así.

―¿Entonces planeabas incluir eso de “oh, si es el maldito nini depravado” o algo parecido junto a tu frase habitual en el concurso?

―Eso no es cierto. Lo que he dicho antes es tan solo lo que pensé cuando vi tu aspecto depravado y patético nada más levantarte de la cama.

La agarré del brazo con fuerza después de que dijera esas cosas y activé mi Toque Drenador.

―¡¿Q-Q-Q-Qué?! ¡Me disculpo por lo que he dicho, llévatelo todo menos mi maná!

***

Una semana después…

―…Oye ¿por qué tengo que acompañarte?

Por alguna razón me vi arrastrado hasta el lugar donde se iba a celebrar el concurso de frases de presentación del Clan de la Magia Carmesí en Axel.

―¿Y por qué no? De todas formas no tienes nada mejor que hacer. ¿Acaso no desperdiciaste ayer el día entero en quitarle los pinchos al cactus de Aqua uno a uno con unas tenazas? Al menos hoy podrás presenciar mi lado épico. Me aseguraré de que el título de “poseedora de la mejor frase de presentación de Axel” caiga en mis manos.

―Eso que estuve haciendo tenía sus motivos, ¿sabes? No solo conseguí matar un montón de tiempo, sino que incluso pude vengarme de Aqua por haberse bebido la botella de neroide que yo tenía guardada con mucho cariño viéndola llorar.

―Es verdad, después de eso, Aqua no dejó de usar Curación sobre el cactus durante todo el día. Cuando lo vi esta mañana, había multiplicado varias veces su tamaño anterior. Los cactus adultos suelen ser bastante listos, por lo que si te acercas a él a partir de ahora, probablemente te lance pinchos.

¿En serio? Aunque ya de por sí carece de sentido que las plantas sientan y padezcan, al parecer también pueden enfadarse.

―¿Um? ¿Kazuma-san? ¡O-Oye, Megumin, ¿por qué te lo has traído aquí?!

La chica a la que le extrañó mi presencia no era otra que la única miembro del clan que tenía algo de sentido común.

¿De verdad este es el sitio donde piensan reunirse para el concurso?

Yunyun se extrañó al verme y nos llamó desde el parque que había sido invadido por los miembros del Clan que vivían en las cercanías de Axel.

―Buenas, Yunyun. Me dio la impresión que este hombre no ha comprendido del todo la importancia de las frases de presentación para nosotros, el Clan de la Magia Carmesí, así que lo traje conmigo por la fuerza para que sea testigo de este evento tan mítico.

―¡Para, me da vergüenza que digas esas cosas! ¡En realidad yo tampoco entiendo por qué tiene tanta importancia, así que no arrastres a una persona totalmente ajena a un evento como este!

Los otros miembros del Clan se dieron cuenta del jaleo que estaban provocando las chicas y me vieron. Como no me conocían de nada, parecía que todos estaban desesperados por presentarse delante de mí, De algunos ellos pude escuchar murmullos como “¿lo han arrastrado hasta aquí?”, “¿se ha unido en el último minuto?” y ese tipo de cosas.

―Mira, has hecho demasiado ruido, Yunyun. Yo nunca dije que Kazuma también fuera a participar, ¿vale?

―¡Aaah, lo siento! ¡Kazuma-san, lo siento, ha sido culpa mía!

Detrás de Yunyun, que se estaba disculpando conmigo al borde de las lágrimas, los otros miembros empezaron a temblar por la emoción mientras me miraban fijamente. La semilla de querer corresponder a sus expectativas había germinado dentro de mí.

Una frase de presentación… Una frase épica, ¿eh?

***

―…¡Muy bien, se ha decidido por unanimidad que Satou Kazuma, que se apuntó al concurso en el último minuto, tiene la frase más épica de todas!

―¡¿Por qué Kazuma es el mejor de Axel?! ¿No resulta extraño? ¡Oye, lo digo en serio, ¿no te parece raro?! ¡Es imposible que él haya podido soltar una frase de presentación tan genial como esa, ha sido como liberar cien explosiones en un mismo día!

―La enfermedad que tienen todos en su clan no es comprable con la que se encuentra extendida por mi país. No hay forma de que las frases afectadas por el chuunibyou que dejaron atrás mis ancestros pierdan contra las de cualquier otro.

―¡Otra vez! ¡Por favor, di una vez más otras cosas como esa con la que acabas de ganar!

De ese modo me convertí en el poseedor de la mejor frase de presentación de Axel.