Kuro no Shoukanshi (NL)

Volumen 4

Capitulo 1: Pilares Divinos

Parte 1

La mañana siguiente a nuestro regreso a casa, compartí los detalles de mi próxima ceremonia de ascenso con todos los demás durante el desayuno.

—…por eso no tengo más remedio que tener un combate de práctica con un aventurero de rango S dentro de tres días.

—Oh, eso suena como una maravillosa oportunidad para ir a por todas*. Bien por ti, mi rey.

[N.T: ir a por todas: hace referencia a dar todo lo que tiene sin restricciones].

—No, no, ¿qué estás diciendo? Este es un asunto muy grave. Ni siquiera sé a quién me enfrentaré ni lo poderoso que es.

Melfina me miró de forma señalada. —Eso dices, cariño, pero ya estás sonriendo.

— ¿Sonriendo? Soy la viva imagen de la seriedad.

La forma en que había terminado mi pelea con Clive en el Bosque de Crests era bastante irritante, aunque su conclusión prematura se había debido a la interferencia de un tercero. Nunca más volvería a hacer una exhibición tan embarazosa de mí mismo. Para asegurarme de ello, necesitaba dominar por completo la Guadaña de la Muerte Boreas. Era plenamente consciente de que no era el momento de distraerse con un combate de práctica con un aventurero de rango S. Por eso no debían mirarme con ojos tan cómplices.

—Eh, Kel-nii, te das cuenta de que estás puliendo tu bastón con esa sonrisa todavía en la cara, ¿verdad? ¿Cómo se supone que vamos a tomarte en serio?

— ¡¿Qué?! ¿Desde cuándo he estado…?

Al parecer, había cogido un paño y me había puesto a pulir mi arma favorita sin darme cuenta.

—Con la forma en que te comportas, apuesto a que anoche no pegaste ojo porque estabas muy emocionado, ¿verdad? —Sera se rió burlonamente. — ¡Acaso eres un niño, Kelvin!

—Eso no es cierto. Dormí como un bebé— Es más, no quiero oír eso de alguien que el otro día quedó absolutamente destrozada después de una sola copa.

—Anoche se durmió treinta minutos más tarde de lo habitual. Así que esa fue la razón por la que…

— ¡¿EFIL?! —La inesperada traición de mi sirvienta me dejó terriblemente desconcertado.

—Espera, ¿siquiera sabes a qué hora duerme, Efil-nee?

—Dormirse antes que su maestro es impensable para un sirviente. Gestionar el bienestar del amo es parte de mi deber. Esta es una tarea que nunca dejaría a Ellie o a Ruka.

Efil, la forma en que abordas tu trabajo me hace feliz, pero ¿no puedes dejarme ver tu cara dormida al menos de vez en cuando? No, espera, esa no es la cuestión aquí.

— ¡Ves, lo sabía! Piensa en los problemas que estás causando Efil!

—Efil, no podemos tenerte cargando con todo tú solo. ¡Yo te ayudaré en esa tarea!

—Pero Mel-sama, te duermes casi enseguida cuando te metes en la cama…

— ¡No doy vueltas en mi sueño en absoluto! ¿Verdad, Alex?

— ¡Arf!

—Mami, ¿de qué están hablando el Maestro y todos los demás?

—Es demasiado pronto para ti, Ruka. Ignóralos por ahora.

— ¡Ya lo entiendo, ya lo entiendo! Así que, por favor, deja este tema, ¡¿de acuerdo?! ¡Volvamos al tema principal! ¡Tema principal! — ¿En qué demonios estáis pensando, sacando eso a primera hora de la mañana? suspiré antes de continuar.

—Lo que quería decir es que estoy pensando en utilizar los próximos tres días para practicar mi hechizo de Rango S todo lo que pueda. En otras palabras, será un periodo de entrenamiento.

—Hmm, entrenamiento, dices. ¿Qué es exactamente lo que harás, mi rey?

—Lo que más me falta para controlar la Guadaña de la Muerte Boreas es… ¿alguien quiere adivinar? ¿No? ¡Fuerza!

Entre mis estadísticas, la Fuerza era la que tenía la tasa de crecimiento más lenta. Con 189 como número base, incluso con el aumento que había obtenido al tomar Fuerza hercúlea (Rango B), seguía siendo más débil que Efil, la persona más frágil de mi grupo. Aunque mi valor de Fuerza era suficiente para que un aventurero común sirviera de vanguardia fiable, la Guadaña de la Muerte Boreas era de rango S, y necesitaba ser mucho más fuerte para controlar adecuadamente una masa de magia tan condensada. De lo contrario, mi mano acabaría tambaleándose al desplegar el hechizo, que era exactamente lo que había ocurrido durante mi lucha con Clive.

—Espera, ¿no sabías ya que necesitarías más Fuerza desde el principio? —Preguntó Sera.

Gerard asintió. —Podrías haber optado por desarrollar un hechizo más parecido al tornado que usó tu oponente, ¿no? Y sin embargo, incluso te tomaste la molestia de adquirir la habilidad Dominio de la Guadaña para ello.

— ¡Ahora no hay nadie que sea igual al Maestro en el corte de hierba!

Efil, eso no es precisamente algo de lo que presumir.

—Pero… las guadañas son geniales, ¿no? Y según mis estadísticas, una gran parte del aprendizaje de nuevos hechizos es poder visualizarlos correctamente. Me he dejado la piel desarrollando este, ¿de acuerdo?

—Cuando lo pones así, creo que entiendo un poco lo que quieres decir— asintió Rion. — Cuando creo mis propios hechizos, también tengo que visualizarlos primero. Al menos, me ayuda a motivarme.

—Incluso en el mundo de los demonios, la gente no inventa nuevos hechizos a diestra y siniestra como ustedes dos…

—Muy bien, ahora entiendo tu razonamiento, cariño. Entonces, ¿cómo pretendes aumentar tu Fuerza?

— ¡Buena pregunta, Mel! Pero no es sólo la Fuerza lo que tendré que trabajar… por ahora, ¡contaré con esto! —Dejé a mi compañero Slime sobre la mesa del comedor.

— ¿Confiando en… Clotho?

— ¡Eso es! Tomo prestada su habilidad única, Gula.

La gula era una habilidad que permitía al usuario absorber parte de las estadísticas de otro individuo a través de la comida. Clotho la había utilizado hasta ahora tanto en alimentos (monstruos) crudos como cocinados. Según mis observaciones, esta última era mucho más efectiva. Además, los aumentos de estadísticas eran aún mayores cuando se consumían objetivos más fuertes. Dicho de otro modo, Clotho no ganaría mucho al comer monstruos más débiles que él.

—Oh, con devorador de habilidades. Ya veo.

—Así es. Mi Fuerza es relativamente baja, así que seguro que hay muchos monstruos que están por encima de mí, ¿no? —Ugh, admitirlo en voz alta me hace sentir un poco deprimido.

—Efil, ¿qué monstruos hay en el Almacén de Clotho que sean de Rango A o superior?

—Para los de Rango A que se pueden cocinar y comer, tenemos los tres conejos calamidad cazados por Sera-sama en el Bosque de Crests, un prince gel y un oso sangriento. Luego, no estoy seguro de si es comestible o no, pero también está el Señor Gigante de Rango S abatido por Rion-sama.

No estoy seguro de querer comer un monstruo de aspecto humanoide. Además, siento que hacerlo podría darme un título extraño. Estoy bien con el conejo calamidad y el oso sangriento, pero para ese último…

—Creo que pasaré del Señor Gigante. ¿El prince gel es ese monstruo flácido y líquido?

—Sí, lo es.

Sí. A pesar de su nombre, no era elástico como Clotho, sino pura flacidez. — ¿Es realmente comestible?

—Encontré una descripción de cómo cocinarlo mientras leía los registros en el Castillo de Toraj.

Al parecer, es un ingrediente de clase alta que es increíblemente difícil de conseguir.

—No puedo ni imaginar qué tipo de plato harías con él.

—Por favor, quédate tranquilo, tengo la receta memorizada.

—Ahaha, buena suerte, Kel-nii.

—Cariño, asegúrate de dejar algo para mí, ¿de acuerdo?

No, no debería dudar. ¡Confío en Efil! Confío en Efil. ¡Estoy seguro de que preparará el mejor plato sin importar los ingredientes!

***

—Pensar que realmente sería un postre y que se prepararía tan rápido…

Tras la conversación del desayuno, Efil se había metido en la cocina. Una vez que terminamos de comer, salió con una fuente con platos (suficientes para todos) que sostenían bloques cuadrados perfectos de lo que parecía gelatina de agar. Era completamente transparente y estaba cubierto de jarabe de azúcar.

El plato que resultó tan decente; no, no sólo decente, porque también tenía un aspecto extremadamente apetitoso, ciertamente me sorprendió. Cuando lo probé, me llevé una sorpresa aún mayor. Estaba realmente delicioso.

Absolutamente delicioso, de hecho. La sensación refrescante de la gelatina de agar pasando por mi garganta y el exquisito dulzor del jarabe de azúcar eran una combinación perfecta. ¿Esto está realmente hecho con el cuerpo de esa horrible cosa? Antes de que pudiera terminar el pensamiento, ya habíamos dejado limpios nuestros platos.

—Gracias, Efil. Después de comer eso, realmente siento que el poder se acumula en mi interior.

Parece que mi plan está funcionando.

Comprobé mi estado. Oops, estoy sonriendo de nuevo, ¿no? Con la forma de aumentar mi Fuerza confirmada, era hora de abordar el siguiente tema.

—Guadaña de la Muerte Boreas.

El Báculo Negro del Desastre, mi nueva arma en lugar del Báculo del Árbol Sabio del Mal, estaba envuelto en magia que formaba la forma de la hoja de una guadaña.

—Hmm… como esperaba, aún está lejos de ser perfecta.

Cuando miré la hoja, pude ver que perdía magia como un grifo defectuoso. En su estado actual, el hechizo se disiparía después de unos pocos golpes.

—Tengo que trabajar primero en el consumo de magia. Luego la formación del hechizo… la reconstrucción…

***

Jadeé con fuerza. —Esto… es mucho más cansador de lo que esperaba.

Había pasado un día entero desde que había comenzado mi entrenamiento. Había pasado la mayor parte de ese tiempo en nuestras instalaciones subterráneas, trabajando en mi hechizo de Rango S. Las únicas veces que volvía a subir eran para comer, cuando tenía algo específico que hacer o cuando iba a dormir unas horas.

Por el momento, me limitaba a activar el hechizo una y otra vez, y a tomar pociones de PM cada vez que se me acababa mi combustible o energía mágica. Aunque hacía todo lo posible por suprimir la potencia de salida, acababa dejando profundas marcas de grietas en las paredes de adamantite incluso cuando la guadaña apenas hacía contacto. Como resultado, la sala de entrenamiento que había arreglado no hace mucho tiempo estaba casi completamente destrozada una vez más. Era la prueba evidente de que aún no controlaba del todo mi propio hechizo.

—Sin embargo, creo que ya lo tengo dominado. Vamos a intentarlo de nuevo.

—Seguro que estás trabajando duro, cariño.

— ¡Guau! Oh, eres tú, Mel.

Ahí estaba mi compañera diosa, sentada encima de unos escombros y mirándome con diversión.

—Vamos, no me sorprendas así. Les pedí a todos que se mantuvieran al margen por ahora, ¿no es así? No se sabe lo que podría pasar si se me resbala la mano.

— ¿A esa velocidad? No te preocupes, puedo esquivar con los ojos cerrados.

—Ah, ay, eso es bastante duro— me reí. Era un poco desalentador que, teniendo en cuenta sus estadísticas, definitivamente no estaba exagerando o bromeando. Aunque se supone que sus estadísticas se derivan de las mías…

—Aun así, parece que estás haciendo buenos progresos, cariño. Tu producción de magia es mucho más estable que antes y has mejorado en su manejo.

—Todavía me queda un largo camino por recorrer. Mi objetivo final es llegar a ser lo suficientemente bueno como para usarla libremente sin tocar las paredes de esta habitación. Ah, claro, ¿pudiste hacer esa cosa que describí antes?

—Jajaja, qué pregunta más tonta. Te das cuenta de que estás hablando con alguien que posee Artesanía de Accesorios de Rango S, ¿verdad? ¡Podría hacer uno para todos tan rápido que el desayuno ni siquiera estaría listo para cuando terminara!

—Dices eso, pero recuerdo que te volviste a quedar dormida esta mañana y bajaste directamente a atiborrarte.

—Oh… bueno, pero los resultados son lo único que importa, ¿de acuerdo?

—Claro, claro.

Le había pedido a Melfina que creara un accesorio para todo el grupo. Clive, el general Tryceniano con el que había luchado recientemente, poseía una habilidad que le permitía lanzar el debuff “Encanto” a quien quisiera. No lo había usado conmigo, pero era muy posible que lo usara con Efil o Sera si podía, lo que hacía que necesitara algo que nos protegiera a todos.

Por suerte, todos los materiales necesarios podían crearse con la habilidad Metalizar de Clotho o la habilidad Alquimia de Melfina. La diosa no había tenido la oportunidad de fabricar nada desde que fue invocada, así que esta parecía una buena oportunidad para que se luciera un poco.

—Tanta falta de aprecio, a pesar de que me pasé toda la noche creando un equipo repleto de funciones porque pensé que sería aburrido sólo proporcionar protección contra el debuff “Encanto”.

Mel fingió llorar, llegando incluso a decir “Boohoohoo” en voz alta. ¿No es eso demasiado? ¿Y qué quieres decir con “pasar toda la noche”? Cuando pasé por tu habitación de camino a la mía, ¡ya estabas profundamente dormida! ¡Te vi quitándote la manta a patadas!

—Ejem. Bromas aparte, hay algo que quiero confirmar contigo, cariño.

—Eh, claro, bien. Que te pongas así de serio de repente me desconcierta, pero… ¿de qué se trata?

Melfina me miró directamente, toda la jovialidad desapareció de su rostro. Inconscientemente me preparé.

Después de dos o tres segundos de silencio que parecieron una eternidad, habló lentamente.

—Sobre Clive, el hombre con el que peleaste el otro día… te preguntaré una vez más, ¿realmente se identificó como transmigrado?

***

Mientras Kelvin se afanaba en la sala de entrenamiento, Sera, Gerard, Rion y Alex pasaban el rato en la posada “Fairy’s Song”. Gerard estaba allí para disfrutar de una cerveza, ya que había pasado un tiempo. Rion y Alex estaban allí para conocer a Clare. Sera estaba allí porque no tenía nada mejor que hacer.

— ¡Uf, qué aburrida estoy! —Gritó la chica demonio, lanzando ambas manos al aire.

Al otro lado del mostrador, frente a ella, Clare levantó la vista mientras sacaba brillo a sus platos y preguntó: — ¿A qué se debe eso?

Por suerte, no había muchos clientes a esa hora, así que el arrebato de Sera no llamó mucho la atención. Por otra parte, la mayoría de la gente que visitaba la posada “Fairy Song” estaba lo suficientemente familiarizada con el suceso como para decir: “Oh, Sera-san ha vuelto a hacer de las suyas”, antes de volver a sus asuntos.

— ¡Escúchame, Clare! Kelvin ya no me deja estar con él.

Sera-nee, creo que la forma en que has redactado esa frase va a invitar a muchos malentendidos, replicó Rion en su cabeza mientras daba un sorbo a su taza de zumo en su lugar junto a Sera.

— ¡Se ha encerrado desde ayer y no me deja entrar!

—Bueno, eso suena preocupante. ¿Están en una etapa de hastío?

—¿’Hastó’? ¿Qué es eso?

—Mmm, supongo que se podría decir que es cuando la relación entre una pareja casada se vuelve rancia y se cansan el uno del otro.

— ¿Qué estás diciendo, Clare? Kelvin y yo no estamos casados.

Esa no es la cuestión aquí, ¿verdad? Replicó Gerard en su cabeza mientras daba un sorbo a su taza de licor fuerte en su mesa del fondo.

—Y es imposible que me canse de Kelvin. No es eso. Dijo que iba a entrenar, así que me ofrecí a ayudarle, pero me rechazó porque ‘sería demasiado peligroso’. ¡Ni siquiera quiso entrenar conmigo!

—Oh, eso es lo que querías decir— murmuró Clare, pareciendo ligeramente decepcionada.

—Por eso estoy tan aburrida ahora. ¿No hay nada que hacer? —Se lamentó Sera mientras plantaba la cara en el mostrador con desánimo.

—Te encanta pescar, ¿verdad? ¿Por qué no lo haces?

—Ir a pescar cuando Kelvin está trabajando tanto me parece injusto.

¿No es lo mismo matar el tiempo sin rumbo aquí? Replicó Alex en su cabeza mientras roía un hueso desde su lugar bajo de Rion-cha…

— ¡AH, YA LO TENGO! —Sera se levantó de repente de su asiento, gritando tan fuerte que Alex, por reflejo, apretó las orejas con sus patas. — ¡Hay una manera de mantenerme entretenida y ayudar a Kelvin al mismo tiempo! Gerard, Rion, Alex, ¡vamos!

—Espera un… ¿a dónde vamos, Sera-nee?

—Pero quería relajarme con una bebida hoy…

Tanto el Héroe como el caballero se sintieron algo turbados por la repentina petición. Sin embargo, Sera tenía una sonrisa tan brillante que ninguno de los dos pudo encontrar en sí mismo el modo de rechazarla rotundamente.

Como no podía verbalizar su negativa, un plan alternativo surgió inmediatamente en la mente de Gerard. Se levantó, con la botella en la mano, y se acercó a ella. El porcentaje de alcohol de lo que estaba bebiendo era extremadamente alto, lo que hacía que el líquido fuera bastante volátil.

Lamentablemente, su idea fracasó. Instintivamente se llevó una mano a la nariz y dio un paso atrás, Sera dijo: — ¡Gerard, no te acerques a mí con esa botella! Me vas a emborrachar sólo con los vapores.

—En ese caso, deberías explicarnos bien qué es lo que piensas hacer.

—Yo también te lo agradecería, Sera-nee. De momento, no estoy segura de lo que está pasando.

Mientras Rion intentaba suavizar la situación con su característica risa, Sera respondió: —Oh, de acuerdo entonces— y procedió a ofrecerles los detalles.

—Lo que se me ha ocurrido es, en pocas palabras, ¡cosechar ingredientes alimenticios!

— ¿Cosechar ingredientes alimentarios?

— ¿Cosechar ingredientes alimentarios?”

— ¡Eso es! Y no cualquier ingrediente común. ¡Hablo de los de alto rango que harán feliz a Kelvin!

—Entonces… ¿te refieres a algo como un oso sangriento?

—Ah, ya veo a dónde quieres llegar, muchacha. ¿Pero no tenemos ya una reserva de ingredientes de rango A en la casa? Por lo que sé, debería ser suficiente para durar al menos hasta pasado mañana, cuando se celebre la ceremonia.

—No estás pensando con suficiente antelación. A diferencia de Clotho, Kelvin tiene un apetito limitado, lo que significa que lo más importante es la calidad, no la cantidad. E incluso cuando se trata de la cantidad, claro, lo que tenemos en el almacenamiento de Clotho debería ser suficiente… sólo para la porción de Kelvin. ¿Pero has olvidado la presencia del glotón en nuestra casa? Parecía que ayer se contuvo de pedir un segundo o tercer plato, pero ¿crees que podrá soportar ver a otra persona comer platos que Efil cocinó con ingredientes de rango A hasta la ceremonia?

Tanto Rion como Gerard guardaron silencio, incapaces de plantear objeciones válidas. Aunque una pequeña parte de ellos pensó: “Vamos, no puede ser tan malo”, no podían desestimar lo que decía Sera. Conocían demasiado bien la pasión de Melfina por comer.

—Yo… no puedo decir ‘no’ con mucha confianza…

—Ahora que lo mencionas, Mel-nee estaba mirando su comida con mucha envidia después de comer su propia porción anoche.

— ¡Ahora estamos en la misma página!

Clare parecía bastante divertida. — ¿Qué es esto? ¿De verdad que esa chica nueva come tanto? Si es así, tráela aquí algún día, la dejaré comer todo lo que quiera…

— ¡Clare-san, por favor no hagas eso! —Rion interrumpió. —Haría daño a mi conciencia.

—Es… tan malo, ¿verdad? Oh, ahora que lo pienso, ella ya vino aquí una vez. Ciertamente, ella dejó una gran impresión.

— ¿Qué? ¿Lo hizo? Uh… todo lo que puedo decir es que lo siento mucho.

No hace mucho, Melfina se había ganado el vergonzoso título de “Diosa Glotona”. No había manera de que Rion dejara que ella causara problemas a nadie más.

—En parte para aliviar ese miedo, ¡vamos a cazar monstruos raros! Nos aseguraremos de que Kelvin tenga suficiente comida y me ayudaría a quitarme este sentimiento de encima. ¡Dos pájaros de un tiro! —Exclamó Sera, apretando el puño en un alarde de entusiasmo que rápidamente contagió a Gerard y a Rion y les impulsó a ponerse en pie.

—Cuando lo pones así, no puedo negarme, ¿verdad? Hagamos esto. Después de todo, no pude hacer nada en la Aldea de los Elfos.

—Ya que es por el bien de Kel-nii, ¡yo también me apunto! Alex, es hora de irse. Clare- san, aquí está mi pago por la comida.

—Gracias por su patrocinio. Cuídense allá afuera.

Después de que todos terminaron de pagar y despedirse, el grupo dejó la posada “Fairy’s Song”. Su destino: el Gremio de Aventureros.

—Primera orden del día, ¡vamos a reunir información!

***

—… ¡y por eso buscamos una mazmorra llena de monstruos de rango A o superior!

—No hay ningún lugar tan peligroso en estos lugares. Tampoco hay misiones de subyugación urgentes en este momento.

Al entrar en la sede del gremio con mucho ánimo, Sera vio inmediatamente a la recepcionista A, Ange, y se acercó a preguntar por una mazmorra en la que se pudieran conseguir ingredientes de alto rango. Ange estaba en su modo de trabajo habitual.

—Verás, cierto grupo aniquiló por completo la mazmorra de rango B, el Bosque Sangriento, no hace mucho tiempo. Para encontrar un lugar aún más desafiante que ese, tendrías que cruzar la frontera hacia uno de nuestros países vecinos.

— ¡¿En serio?!

Sera parecía extremadamente decepcionada. En cambio, Gerard y Rion no parecían sorprendidos en lo más mínimo. Después de todo, en el momento en que un solo monstruo de rango A apareciera en las inmediaciones de Parth, Kelvin recibiría una notificación de búsqueda de emergencia. Últimamente no les había llegado ninguna noticia de este tipo, así que visitar el gremio en persona no iba a suponer ninguna diferencia.

—En ese caso, supongo que tendremos que ir al exterior, entonces. Si no nos detenemos a descansar, podemos llegar a algún lugar de la misma distancia que el Bosque de Crests en medio día, lo que hace que el viaje de ida y vuelta sea de un día completo. Añadiendo tiempo para la exploración…

La antigua princesa demonio ya había cambiado de marcha para pensar en el plan B. Estaba claro que renunciar a su idea no era una opción.

Mientras murmuraba furiosamente para sí misma, Rion se tomó el tiempo de mirar alrededor del gremio. —Hoy está bastante ocupado, ¿no?

Aunque el lugar era normalmente bullicioso, al ser el centro de todos los aventureros de la ciudad, parecía estar más vivo que nunca. En la sala detrás de los mostradores, Rion vio las figuras del personal del gremio con frascos de sales aromáticas a mano abordando montones de papeles.

También había más recepcionistas que de costumbre, atendiendo a un gran número de aventureros que hacían cola para consignar objetos. Ange parecía algo agotada.

—Todo el personal está siendo movilizado para preparar el próximo ascenso de Kelvin-san al rango S. El día de la ceremonia, las calles se llenarán de celebraciones e importantes personalidades de varios países, además de famosos aventureros, acudirán para ver al nuevo miembro de rango S. El maestro del Gremio Rio también se apresura a ir de un lado a otro. Estamos delegando gran parte del trabajo físico y de la recolección de cosas a los aventureros, asignándoles misiones.

— ¿De verdad? Nadie nos lo ha dicho.

—Kelvin-san, y todos ustedes por extensión, son los invitados de honor. ¿Cómo podemos pedirles que ayuden con los preparativos? Además, hemos hecho que los que completen más tareas tengan prioridad para sentarse en el combate de práctica. Teniendo en cuenta lo raro que es ver a dos aventureros de rango S enfrentarse, todos están siendo bastante competitivos a la hora de completar sus tareas. Oh, habrá asientos especiales preparados por separado para ti y tu grupo, Rion-san, así que no te preocupes por eso.

— ¡Sí, gracias! ¿Ha llegado ya el aventurero de rango S con el que luchará Kel-nii?

Ange hojeó algunos documentos en su mesa. —Umm… parece que está previsto que llegue mañana. Su nombre es…

¡BAM!

Las palabras de Ange fueron interrumpidas por la puerta del edificio que se abrió de golpe con una fuerza casi suficiente para arrancarla de sus bisagras. Un grupo de aventureros se abrió paso hacia el interior en medio del pánico. Algunos de ellos se desplomaron en el acto, mientras otros respiraban profundamente y con dificultad, dejando claro que se habían esforzado por llegar rápido.

— ¡Esto es terrible! —Resopló el hombre que probablemente era su líder. Su equipo de mithril lo identificaba como un aventurero de rango C.

—Vaya, ¿a qué viene ese frenesí? Primero recupera el aliento, hombre— dijo alguien cercano.

— ¡Es una mazmorra! Algún monstruo ha hecho un túnel enorme que ha abierto una mazmorra completamente nueva.

— ¡¿En serio?!

La inesperada noticia sumió al gremio en el caos. Que la mazmorra fuera un nuevo descubrimiento significaba que nadie la había explorado aún y que estaba totalmente intacta. La ausencia absoluta de información la convertía en un lugar especialmente peligroso, pero a cambio, también era una oportunidad para hacer una matanza rápida arrasando con los raros objetos y tesoros que había en su interior. Era natural que los aventureros se pusieran muy nerviosos.

— ¡Sin duda es un gran negocio! Eh, hombre, ¿dónde está esa nueva mazmorra?

—Olvídalo, hombre. Ese lugar no es un lugar que ninguno de nosotros pueda manejar…

—Dices eso, pero apuesto a que estás pensando en adelantarte al resto y robar todo para ti, ¿no?

— ¡Eso no es lo que estoy diciendo! Escúchame…

El hombre que había hecho el anuncio se vio inundado por las preguntas de los que le rodeaban. Todos estaban ansiosos por ser los primeros en despejar la nueva zona de peligro.

— ¡Chicos, por favor, cálmense! Escuchemos lo que tiene que decir Heath-san— gritó Ange desde su posición entre el hombre y los demás, después de haber llegado hasta allí sin que nadie se diera cuenta.

Dando un suspiro de alivio, Heath dijo: —Gracias por salvarme, Ange- chan.

—No te preocupes. Y recuerden todos: si van a explorar esta nueva mazmorra ahora mismo, es probable que no lleguen al combate de entrenamiento de pasado mañana.

—Oh, cierto. Lo había olvidado. Lo siento.

Ange se sintió aliviada al ver que la multitud se calmaba. Sin embargo, sus deberes como personal del gremio no habían hecho más que empezar. Tendría que extraer toda la información posible sobre la nueva mazmorra para determinar exactamente su peligrosidad. En vista de la cantidad de trabajo que ya tenía, sintió el impulso de agarrarse la cabeza y gritar. Pero hacerlo no cambiaría el hecho de que este no era un asunto que pudiera posponerse, ya que podría acabar afectando a las próximas festividades.

Desgraciadamente, Rio estaba fuera para hacer los preparativos de la ceremonia, lo que significaba que el personal que estaba presente tenía que ocuparse de ello.

—Heath-san, ¿te importaría decirnos qué sabes de este lugar?

—Se encuentra en el interior de la mazmorra de rango C, al este, los Pasajes Clayworm (de la Lombriz). Estábamos explorando el lugar como de costumbre cuando vimos un topo gigante cavando un agujero. Lo seguimos y lo derrotamos; esa parte estaba bien. Pero el túnel que había cavado justo antes de que lo matáramos se abrió en una enorme caverna donde vimos edificios de aspecto antiguo y un monstruo que nunca habíamos visto. Moi, de mi grupo, posee Ojo Analizador, pero en el momento en que intentó usarlo con esa cosa, se desmayó. Mi Detección de Peligros también se disparó como loco, así que nos retiramos antes de que nos notaran.

—Siento haberte defraudado, Heath.

—Por favor, si no te hubiera cargado a la espalda y hubiera salido de allí lo antes posible, ambos seríamos carne muerta ahora. Entonces, Moi se despertó en algún momento en nuestro camino de vuelta a Parth. Por lo que me dijo sobre el estado de la criatura, no hay duda de que es de rango A.

— ¡¿Rango A?! —Exclamaron muchos de los presentes.

Hasta entonces, la mazmorra más peligrosa de los alrededores de Parth había sido de Rango B.

La alarma recorrió a los aventureros y al personal por igual.

—Una mazmorra dentro de otra mazmorra… esto es extremadamente peligroso y debe ser anunciado inmediatamente. Puede que haya otros aventureros aún dentro de los Pasajes Clayworm.

—Pero ninguno de nosotros puede manejar un monstruo de rango A. Incluso acercarse a este lugar para sellar el agujero suena extremadamente peligroso.

—En ese caso… no hay opción, hagamos una misión de emergencia a Kelvin-san.

Todo el personal asintió ante la sugerencia de Ange. Ninguno de los aventureros tuvo tampoco ninguna objeción.

—Entonces… ¿en qué parte del este está esta nueva mazmorra?

— ¿No escuchaste lo que dijo Ange-chan? Este es un trabajo que sólo Kelvin-san, el aventurero más fuerte de Parth, puede realiz…— replicó Heath con voz enfadada, dándose la vuelta sólo para detenerse en seco.

Allí estaba una jubilosa Sera, con los brazos cruzados y la barbilla inclinada hacia arriba como si dijera: “Sigue, te escucho”. Detrás de ella se veían un corpulento caballero y una linda chica.

— ¡¿Sera-san?! ¿Y Gerard-dono y Rion-chan también?

—Kelvin está en casa ahora mismo, pero está ocupado. Como miembros de su grupo, iremos en su lugar a explorar esta mazmorra por ti. Después de todo, tenemos garantizados buenos asientos aunque no ayudemos en los preparativos. Vamos, danos toda la información que sepas.

La presencia prepotente de la chica dejó a Heath un poco desconcertado. Se volvió para mirar a Ange.

—Hm, si son esos tres, estoy seguro de que podrán manejarlo sin problemas. Como el jefe del gremio está ausente, haremos la búsqueda de emergencia nosotros mismos. ¿Estás segura de asumir esto, Sera- san?

— ¡Déjalo en nuestras manos! Lo resolveremos hoy mismo.

—Ahaha, eso sí que suena tranquilizador.

Así que Sera-nee se enteró de nuestros asientos, pensó Rion con ironía.

Cuando Heath compartió con ellos todo lo que sabía, el resto de los aventureros se dispersó para volver a lo que cada uno había estado haciendo. La tensión que había sido tan palpable momentos antes se había disipado por completo, el bullicio volvió a la normalidad en poco tiempo.

Al fin y al cabo, todos los presentes pensaban lo mismo: si Sera- san y el resto toman este trabajo, no hay nada de qué preocuparse.

—…y eso es todo lo que tenemos— concluyó finalmente Heath. — ¿Es suficiente?

—Mientras sepamos la ubicación, nos arreglaremos— respondió Sera, aceptando el mapa dibujado a mano y comprobando la hora. —Nuestro objetivo es el monstruo jefe. El otro aventurero de rango S llega mañana, así que démonos prisa. Volveremos a tiempo para cenar y sorprender a Kelvin.

—Sera, muchacha, no olvidemos echar una mano si nos encontramos con otros aventureros dentro.

(Abuelo, ¿soy yo o las cosas se están desarrollando de una manera extrañamente conveniente para Sera-nee?).

(Su estadística de Suerte ya es más alta que la de los Héroes. En cierto modo, supongo que esto era inevitable).

— ¡Vamos, chicos, en marcha! —Sera llamó por encima de su hombro, pareciendo dispuesta a despegar en ese momento.

—Sera-nee, ¡todavía estamos en ropa informal! ¡Tendremos que volver al menos a la casa para cambiarnos primero!

Sera y Rion se dirigieron rápidamente a su casa para ponerse su equipo de aventurero y echar sus armas en el Almacenamiento de Clotho.

Tras confirmar a través de la Red que Kelvin seguía en la sala de entrenamiento, se apresuraron a salir antes de que alguien se diera cuenta.

Por el camino, Sera se aseguró de dejarle unas palabras a Efil, que estaba colgando la ropa fuera.

—Efil, ¡ponte las pilas para la cena de esta noche!

— ¿Perdón? Um, por supuesto…

Sin prestar atención a la desconcertante inclinación de cabeza de la sirvienta, Sera se apresuró a salir a toda velocidad.

—Me pregunto qué habrá pasado.

Encogiéndose de hombros, Efil volvió a la tarea que tenía entre manos, con la mente ya puesta en un menú para la cena de esa noche y con “las pilas puestas” .

***

Tras reunirse de nuevo con Gerard en la ciudad, el grupo se dirigió a los Pasajes Clayworm. La mazmorra estaba un poco alejada de Parth, pero para aquellos tres, apenas les llevó diez minutos a pie.

Pronto se encontraron ante la entrada de cueva de unos tres metros de altura que sí parecía un túnel excavado por un monstruo gigantesco. La luz del sol no penetraba demasiado en la oscuridad, pero había antorchas colocadas a intervalos en el interior. Extrañamente, las antorchas no parecían estar ardiendo.

— ¡Ya estamos aquí! Ha sido un tiempo de viaje aceptable, supongo— dijo Sera, echando un ojo a las antorchas. —Hm, siento un poco de magia proveniente de estas cosas.

—Podrían ser objetos mágicos, entonces— respondió Rion. —Supongo que los aventureros los han llenado de magia a su paso. No parece que vaya a necesitar lanzar Lambent.

Gerard miró a su alrededor. —Nada parece fuera de lugar aquí, al menos.

Sera activó sus diversas habilidades de detección y confirmó que, efectivamente, no había nada reseñable alrededor de la abertura de la cueva. Sin embargo, una presencia muy fuerte se encontraba más adentro.

—Esto… no parece un simple monstruo de rango A. Incluso podría ser de rango S.

— ¡Yay! ¡El premio gordo, Sera-nee!

—Me siento repentinamente llena de motivación al escuchar tales noticias. Preparémonos y hagámoslo.

Con Gerard tomando la delantera, Sera, Alex y Rion le siguieron de cerca. La idea era que Gerard se encargara de avanzar y enfrentarse a todo lo que apareciera por delante, mientras que Sera avisaría a los demás de cualquier ataque sorpresa o trampa.

El pasaje continuó plano y recto durante un tiempo, pero al cabo de un rato empezó a inclinarse hacia abajo. A partir de ahí, empezaron a aparecer numerosos pasajes laterales a ambos lados, convirtiendo el lugar en un verdadero laberinto.

— ¡Por aquí!

Sera estaba eligiendo sus giros basándose en la presencia que percibía. Todavía no se había equivocado en su elección, como lo demuestra el hecho de que se acercaban cada vez más a su objetivo. Era un poco preocupante que la presencia no pareciera moverse en absoluto, casi como si estuviera al acecho de alguien o algo.

—Gerard, un monstruo saltará del suelo cinco pasos adelante.

—Entendido.

Cuando Gerard llegó al lugar que Sera había mencionado, un gusano de arcilla saltó efectivamente para asaltarlo. Inhaló ligeramente y bisecó a la bestia en el instante en que apareció.

Oh, bueno, no tiene sentido darle demasiadas vueltas. Estoy segura de que todo se aclarará una vez que veamos a esta cosa en persona, pensó Sera mientras daba un revés a otro gusano de arcilla que se acercaba desde arriba sin siquiera volverse a mirar.

***

—Bueno, esto es bastante inesperado— murmuró Sera.

En ese momento, ella y los demás miraban por un camino recto. A cierta distancia había un pasaje lateral que probablemente era el túnel excavado por el topo gigante que había descrito Heath. Sin embargo, frente a la entrada había una gran figura que se tambaleaba a la luz de las antorchas parpadeantes.

Sera concentró sus sentidos en ella mientras apretaba la espalda contra la pared en un ángulo justo fuera de la vista. — ¡Sea lo que sea, parece incluso más fuerte que yo! Realmente hemos tenido suerte.

—Interesante. Si mi rey estuviera aquí, estaría encantado.

—Concéntrate, Sera-nee, abuelo. Aunque estoy de acuerdo en que Kel-nii se habría alegrado mucho de esto.

A pesar de lo que decía, el rostro de Rion estaba enrojecido por la emoción y su corazón latía más rápido que de costumbre. Quizás se había contagiado un poco de la naturaleza de su querido hermano como adicto a la batalla.

En ese momento, hubo movimiento. La parte de la figura que parecía ser su cabeza se giró hacia donde se escondía el grupo.

— ¡Se ha fijado en nosotros! —Susurró Sera.

—No hay mucho espacio en el pasaje. ¡Yo iré primero! Apóyenme —Gerard prosiguió, manteniendo su escudo preparado para proteger a las dos que iban detrás de él.

— ¡Aguarda, abuelo! ¡¿Eso no es un humano?!

— ¡¿Qué?!”

Una mirada más atenta a la figura reveló que, efectivamente, era humanoide. Como miembro del grupo que iba en cabeza, Gerard identificó a su oponente como un hombre grande con músculos que parecían a punto de estallar a través del ajustado vestido rosa que llevaba. Su estatura era más o menos la misma que la de Gerard y su cabello rubio estaba recogido en elegantes coletas. El cerebro de Gerard se esforzó por procesar lo que veían sus ojos.

—Es… un hombre, creo.

— ¿Se ha travestido?

El monstruo, si es que realmente era eso, adoptó de repente una posición de salida agachada*. —Chicos…— retumbó una voz ronca y varonil adoptando una forma de hablar muy femenina, —este lugar… ¡es peligroso! [N.T: es la posición de los corredores de 100 m planos].

La masa de músculo se impulsó bruscamente con una forma perfecta y corrió hacia delante a toda velocidad. A cada paso que daba, el suelo se abría bajo sus pies y la mazmorra se estremecía, provocando pequeñas lluvias de polvo. La presión de la carga entrante y la extrañeza de lo que estaba viendo hicieron que un sudor frío brotara en la frente de Gerard.

¡Lo peligroso es su aspecto! pensó el caballero mientras se preparaba para el impacto. El monstruo musculoso estaba casi encima de él en un abrir y cerrar de ojos.

(Es probable que sea un humano, pero ¿qué debo hacer? Puedo cortarlo, ¿verdad?).

(¡Estamos bajo asalto aquí, así que es legítima defensa de cualquier manera! ¡Proporcionaré apoyo!).

(¡Alex, a la sombra!).

Tras la instantánea reunión de estrategia a través de la Red, todos entraron en acción sin perder el ritmo. Sera y Rion empezaron a recitar hechizos mientras Alex se sumergía en la sombra de Gerard, listo para salir en cualquier momento.

En cambio, el hombre grande se dejaba caer cada vez más bajo mientras mantenía su velocidad. Varios pasos antes de estrellarse contra el pesado escudo de Gerard, comenzó a girar.

Está desarmado, lo que significa que lucha con la habilidad Técnica de Combate, ¿no? Interesante. Gerard activó inmediatamente el Ojo de la Mente a la espera de una patada que aprovechara la fuerza añadida del giro. Estaba preparado para ver a través del ataque, sin importar la forma que tomara, y pararlo. Su intención era defenderse.

Sin embargo, lo que Gerard vio a cámara lenta no era un ataque.

¡BRRR!

El paso de las musculosas piernas del hombre estaba dejando profundas huellas en el suelo y levantando una enorme nube de polvo. Sin llegar a atacar de verdad, se detuvo justo antes de llegar a Gerard, enterrado en el suelo hasta las rodillas.

Utilizó sus propias piernas como frenos para detenerse justo a tiempo… pensó Rion, intentando comprender lo que acababa de presenciar.

El hombre se levantó lentamente, con los pies aún enterrados en la tierra. Alex asomó la cabeza de entre las sombras, dispuesto a lanzarse al ataque.

Bajo las miradas perplejas de todos los presentes, los gruesos labios del hombre se separaron lentamente. — ¡Dios mío, les dije que esto es peligroso, ¿no?! ¿Por qué están ahí parados? — Preguntó con un resoplido mientras retorcía su cuerpo de forma femenina.

***

En resumen, el hombre no era un monstruo. Resultó que en realidad era un ser humano normal.

—Querida, siento mucho haberte sorprendido. Supuse que eran aventureros que se habían perdido aquí. Eso fue una falta de respeto para los aventureros de rango A, ¿no?

Rion negó con la cabeza. —No, no, fue culpa nuestra por sacar conclusiones precipitadas, umm…

—Oh, qué tonta soy, me olvidé de presentarme. Me llamo Goldiana Prettiana, aventurera de rango S. También me llaman “Ogro Melocotón”, si has oído hablar de mí. No dudes en llamarme Prettia-chan— respondió Goldiana, adoptando una pose que suelen adoptar las ídols en las revistas.

Es la primera vez que conozco a un hombre gay. Además, también es un aventurero de rango S.

¿Es él con quien va a luchar Kel-nii? se preguntó Rion con cierta calma.

En cambio, Gerard, que no había oído hablar de alguien así en su vida, se sintió bastante aprensivo. Q-qué personaje tan peculiar es…

— ¿El hecho de tener un apellido significa que eres un noble, Prettia-chan? —Preguntó Rion con curiosidad.

—Vaya, ¿no lo sabes? A los aventureros de rango S se les permite tener un apellido. En realidad vengo de una familia plebeya.

—Entonces, ¿qué haces aquí, Goldiana? —Preguntó Sera, completamente imperturbable.

—Seguro que hasta ustedes han oído hablar de que pronto nacerá un nuevo aventurero de rango S en Parth, ¿verdad? He oído por ahí que ese Kelvin-chan es un hombre joven. Nunca pierdo la oportunidad de ver a los maravillosos chicos más jóvenes, ¡uh-uh!

Goldiana soltó un pequeño grito de excitación y levantó con delicadeza un pie detrás de él.

Gerard se estaba acercando a sus límites y su rostro se estaba poniendo pálido.

—Iba de camino a Parth para la ceremonia, pero, aunque no lo creas, mi sexto sentido detectó una extraña sensación procedente de esta mazmorra. Así que vine a echar un vistazo, y ¡qué encontré, sino una multitud de monstruos de rango A al otro lado de este agujero! No podía dejarlos salir por si iban a por los otros queridos que aún están aquí abajo, así que me limité a hacer guardia hasta que el gremio entró en acción.

— ¡Eres una buena persona, Goldiana! Aun así, Kelvin está fuera de los límites, ¿de acuerdo?

—Oh, Dios, ¿ustedes conocen personalmente a Kelvin-chan?

—Oh, claro, no nos hemos presentado— dijo Sera antes de hacer rápidamente eso. Los otros dos siguieron su ejemplo, con Alex permaneciendo oculto a la sombra de Gerard del cuello para abajo.

—Dios mío, ¿así que Kelvin-chan es el hermano mayor de Rion-chan? ¡Ahora sí que me estoy haciendo ilusiones! —Exclamó Goldiana mientras echaba una larga mirada al rostro de la joven. Evidentemente, su imagen mental de Kelvin estaba adoptando ahora un rostro lindo y femenino.

—Ahahaha…— Rion rió débilmente, pensando que, por supuesto, no somos parientes de sangre, así que…

—Como he dicho, ¡Kelvin está prohibido!

—Y Sera-chan es tan bonita que hasta yo podría ponerme celoso— la felicitó el hombre musculoso. —Ah, ¿será que Kelvin-chan es tu novio?

— ¡No lo es! Pero aun así, ¡está prohibido!

— ¡Ajá! Ya veo cómo es. Si alguna vez quieres ayuda en ese departamento, ven directamente a mí, ¿de acuerdo, Sera-chan? Te apoyaré, ¡así que hazlo!

Goldiana palmeó ligeramente el hombro de Sera. La demonio ni siquiera se dio cuenta de su acercamiento hasta que sintió su mano, tal vez por lo nerviosa que estaba por el intercambio.

— ¡Como consuelo, creo que voy a reclamar a este buen caballero de aquí!

—Uh… ¿qué?

— ¡Oh, sí, parece usted un hombre duro y fuerte!

Gerard se encontró de repente con los gruesos y fornidos brazos de Goldiana rodeando sus propios hombros.

***

Tras algunas discusiones, se decidió que Goldiana se uniría a Sera y a los demás para explorar la nueva mazmorra. Aunque era un lugar repleto de monstruos de Rango A de los que no tenían ninguna información, la idea era que la incorporación de un aventurero de Rango S les proporcionaría la suficiente fuerza de combate para hacer frente a lo que pudieran encontrar.

Cuando Goldiana había estado de centinela solo, no había tenido más remedio que permanecer en la entrada del túnel, pero las cosas eran diferentes ahora que tenía todo un grupo con él. Alguien más podía hacer de vigía si era necesario, o podían utilizar la magia para bloquear temporalmente el pasadizo.

Antes de decidir qué hacer, el grupo acordó explorar rápidamente el extremo del túnel. No había más antorchas a partir de ese punto, así que Rion tuvo que lanzar Lambent para iluminar el camino.

—Aun así, qué pena tan terrible… pensar que el amable caballero es en realidad un monstruo de tipo armadura. Ni siquiera yo tengo posibilidades cuando no hay cuerpo ni cara que ver.

—Me temo que es así, sí.

Aunque la armadura de Gerard era efectivamente hueca, podía, de hecho, materializar un cuerpo si quería. Pero eligió a propósito no mencionar esa parte. Sus instintos le decían que debía guardarse ese dato para sí mismo.

(Sera, Rion, Alex, ¡nunca, nunca se lo digan!).

(Lo sabemos, lo sabemos).

(Ahaha).

(¡Arf!).

Se aseguró de insistir en el asunto con sus compañeros, así de desesperado se sentía.

—Así que… ¿eres el oponente de Kel-nii para el combate de práctica, Prettia-chan? Se supone que va a luchar contra un aventurero de rango S, ¿no? —Preguntó Rion en un intento de cambiar de tema. Su consideración hizo que Gerard se sintiera un poco más cálido por dentro.

—Me encantaría, querida, pero me temo que no. Su oponente es Sylvia- chan, que ascendió el año pasado y se hace llamar “Princesa de Hielo”. Es tradición luchar contra la última persona en recibir un ascenso. Lo que me recuerda que esa chica se saltó su propia ceremonia de promoción y su combate de práctica, así que también será la primera vez que la vea en acción.

— ¿Fue promovida a pesar de que se saltó todo?

—Mhm, los aventureros amamos nuestra libertad y el gremio está prácticamente dirigido por aventureros retirados. Técnicamente, ni siquiera la ceremonia es obligatoria.

Sera, que caminaba detrás de Gerard, se volvió hacia Goldiana y le preguntó: —Hace tiempo que me lo pregunto, pero ¿qué pasa con ‘Ogro Melocotón’ y ‘Princesa de Hielo’?

— ¿Te refieres a nuestros alias? Cuando un aventurero alcanza el rango S, el gremio le asigna un nombre especial en señal de admiración y respeto. ¿No es maravilloso?

—Eso… suena un poco innecesario.

— ¡Claro que es necesario, querida!

— ¡Claro que es necesario!

Goldiana y Rion habían respondido al mismo tiempo.

— ¡No subestimes los alias, Sera-nee! Son absolutamente esenciales.

—Rion-chan tiene mucha razón. Escucha con atención, Sera-chan. ‘Aventurero de rango S’ es un título que representa a las personas más destacadas del mundo en términos de poder de lucha. Los alias son útiles para difundir con precisión la información relativa a cada miembro de este círculo tan limitado. Es un poco embarazoso decir esto sobre mí, pero estoy seguro de que soy lo suficientemente fuerte como para acabar con todo el ejército de un país pequeño yo solo. Si Kelvin-chan es consciente de su propio potencial, no tengo ni idea. Pero esta es precisamente la razón por la que ningún país se atreve a tocar a los aventureros de Rango S o al propio Gremio de Aventureros. No valdría la pena, después de todo. Así que lo máximo que hacen es solicitarnos.

— ¡Sí, sí! Y es cuando alguien tiene un alias que piensas, ‘¡oh, mejor no me meto con ese tipo! Yo también quiero uno.

—Ya veo. Supongo que tiene sentido.

La explicación de Goldiana se centraba en la idea de que los alias sirven como una dura advertencia para los gobiernos y otras instituciones, pero la insistencia de Rion se basaba simplemente en la opinión de que los alias sonaban bien. Como niña de catorce años (la edad de un estudiante de segundo curso de secundaria), esos apodos tenían un encanto inconmensurable para ella.

— ¡Awww, sí que entiendes rápido a pesar de ser tan joven, Rion-chan! Pero no te preocupes, cuando Kelvin-chan ascienda con éxito al rango S, los miembros de su grupo ‘si son lo suficientemente fuertes, claro’ ¡podrán recibir alias también!

— ¡¿De verdad?! ¡No puedo esperar!

—Si alguna vez te encuentras con problemas relacionados con ser un aventurero, ¡ven a buscarme! Te daré toda la ayuda que necesites.

La extraña pareja intercambió un firme apretón de manos, en el que Goldiana tuvo que encorvarse bastante debido a la diferencia de altura. Basándose en este intercambio, así como en el asunto de Sera de antes, estaba claro que este nuevo conocido suyo era todo un buen samaritano.

—Muy bien, todos, ya es hora de terminar la charla— advirtió Gerard. —Pronto llegaremos al final del túnel.

***

La salida se abrió a una caverna lo suficientemente grande como para albergar un pueblo entero. Gerard, que iba al frente del grupo, echó un vistazo al interior.

Hmm, hay luces delante. Desde donde se escondía en la sombra de la abertura del túnel, el caballero ya podía ver numerosos monstruos humanoides pululando. Compartió la información con los miembros de su grupo añadiendo marcadores en el mapa al que tenían acceso conjunto a través de la Red, y luego le dio verbalmente a Goldiana un breve resumen.

—Despejemos primero la caverna— sugirió Sera. —Podemos repartirnos para aplastar a los monstruos uno a uno y luego reagruparnos aquí.

Gerard asintió y se volvió hacia los demás. — ¿Todos listos?

—Cuando quieran— respondió Goldiana.

Rion y Alex respondieron con un “¡Entendido!” y “¡Arf!” respectivamente, y sin más preámbulos, el grupo se dispersó por la caverna, con Sera atravesando el centro.

El suelo estaba pavimentado con baldosas de piedra y el techo era tan alto que uno podía olvidar fácilmente que estaban bajo tierra. Obviamente, el espacio estaba hecho por el hombre. Sin embargo, la vista más llamativa estaba más allá.

Hay numerosos edificios en ruinas… ¿y un altar en el fondo?

Puede que hubiera uno o dos cofres del tesoro escondidos entre los edificios en ruinas, pero lo que más llamó la atención de Sera fue una estructura parecida a un altar en la distancia. Dentro de la caverna, era lo único que parecía estar perfectamente intacto y sin daños por el tiempo.

Extrañamente, emanaba ondas mágicas imbuidas de elemento sagrado.

Pero aún está bastante lejos. ¡Centrémonos en eliminar primero a los monstruos, como habíamos decidido!

Tres marionetas de acero en movimiento se percataron de que Sera corría velozmente en su dirección e intentaron detenerla. Las cuchillas surgieron de sus brazos mientras se acercaban a ella desde un lado, zigzagueando con pasos imprevisibles.

Esquivando con facilidad el primer golpe de la hoja del brazo, Sera envolvió sus puños con dos hechizos de Armor Corrosion (Corrosión de Armadura), un hechizo que reducía la Resistencia del objetivo, y los plantó directamente en el abdomen de la criatura.

Un ruido de metal desgarrado llenó la caverna cuando la sección media de la marioneta quedó casi pulverizada, pero de algún modo logró mantenerse en pie. De hecho, levantó ambos brazos como si quisiera contraatacar. Pero Sera lanzó su cola invisible en un golpe horizontal que redujo con éxito al autómata a pedazos.

¿Sería Kelvin capaz de comerse estas marionetas? Bueno, estoy seguro de que Efil encontrará la manera. Vamos a recuperarlos por si acaso.

Los dos monstruos restantes también fueron despachados en poco tiempo, y los trozos rotos fueron arrojados rápidamente al Almacén de Clotho.

— ¡Doki Doki Smash! —Goldiana rugió con una voz varonil que se extendió por toda la caverna. Sus puños, envueltos en un aura roja, atravesaron las marionetas con cada golpe y les abrieron agujeros del tamaño de sus bíceps. Lo que quedaba cuando terminó no era apto para ningún tipo de reutilización.

— ¡Es una técnica muy interesante la que utilizas, Goldiana! Y además es increíblemente poderosa.

—Vaya, ¿se nota? He adoptado cierta escuela de artes marciales del continente occidental y le he dado mi propio giro. Y tu estilo de lucha también es bastante interesante, con toda esa magia alrededor de tus puños. Me impresiona mucho. Aunque no estoy muy seguro de lo que hiciste con ese último ataque.

—Es un secreto comercial.

Goldiana soltó una risita. —Las mujeres con muchos secretos tienen un encanto especial.

A partir de la información que llegaba a través de la Red, Sera confirmó que los demás lo estaban haciendo igual de bien. Según sus diversas habilidades de detección, había unos cincuenta monstruos en la zona. A este ritmo, todos terminarían y se reagruparían en diez minutos.

(Sera-nee, ¿qué opinas de ‘Black-Clad Hero’? ¿Es demasiado genérico?).

(Eh… céntrate en la lucha por ahora. Probablemente no necesito decirlo, pero cuida a Rion, ¿de acuerdo, Alex?).

(¡Arf!).

A pesar de que sólo puede ladrar, el significado de Alex de “¡No te preocupes, lo tengo!” fue alto y claro.

—Cielos, Rion sigue siendo un niña a veces— murmuró Sera con la más leve de las sonrisas.

***

— ¡Hmph!

El poderoso golpe de Sera aplastó la cabeza de la última marioneta que quedaba. Apenas habían pasado siete minutos y ya había caído el telón de su batalla con los monstruos que rondaban la caverna.

—Todos parecían iguales, pero cada uno atacaba de forma diferente: algunos usaban cuchillas, otros escupían fuego y otros disparaban una tonelada de bolitas. Era muy extraño. Pero tener una variedad de ingredientes es algo bueno, así que, ¡oh, bueno!

Evidentemente, Sera tenía toda la intención de que Kelvin se comiera los restos de esas extrañas criaturas. Gerard, que por casualidad se cruzó con ella en su camino de vuelta, tenía una expresión irónica.

—Sera, muchacha, estas cosas no se las puede comer nadie más que Clotho.

— ¡Efil se las arreglará de alguna manera! Seguro.

—Es sencillamente imposible.

—Qué…— Sus hombros cayeron con decepción al darse cuenta de que los monstruos de rango A que tanto le había costado recuperar no eran aptos para el consumo humano.

—Es estupendo que tengas fe en ella, pero incluso Efil tiene sus límites. En lugar de comérselos, estas partes servirían mejor para las modificaciones de gólems en las que te gusta trabajar con mi rey.

La demonio se animó de nuevo, con el ánimo totalmente recuperado. — ¡Eso también suena muy bien!

—Vaya, ¿incluso sabes hacer gólems, Sera-chan? —Preguntó Goldiana, que no parecía estar muy afectada.

—No son mis gólems; son de Kelvin. Uno de sus pasatiempos es jugar con ellos.

—Ya veo, así que eso significa que Kelvin-chan usa Magia Verde. ¡Oh, Dios, ahora simplemente no puedo esperar a ver el partido de mañana!

—No importa. Kelvin es tan fuerte que ganará sin duda alguna— respondió Sera, riéndose con orgullo y sacando pecho.

¿Esto cuenta como si estuviera presumiendo del chico que le gusta? se preguntó Goldiana. No parece muy consciente de sí misma.

— ¡Son muy lentos, todos!

— ¡Arf!

Rion y Alex ya estaban esperando en la entrada del túnel donde habían acordado reagruparse.

— ¡Seguro que son rápidos! ¡Buen trabajo! —Dijo Gerard en forma de elogio.