Tokyo Ravens (NL)

Volumen 6

Capitulo 4: Rompiendo La Línea Enemiga

Parte 4

Rápidamente,

“Hah!” 

Repelió al shikigami con un grito. Touji bajó hacia la plataforma entre las escaleras, golpeando el shikigami de Doman contra la pared.

La pared tembló. Los dos shikigami estaban incrustados en la pared, rezagados cubriendo sus cuerpos.

“¡Touji!” 

“… estoy bien. ¡Podemos descansar cuando entremos en la barrera!” 

Touji contestó enfadado al grito de Harutora.

Aunque habían escapado del peligro de la cafetería, todavía no podían ser descuidados en este momento. Natsume se embolsó los labios, bajando a toda prisa por las escaleras, pasando por Touji. Harutora también la siguió apresuradamente, y Touji, que estaba sujetando el shikigami, rápidamente volvió al ring.

“Natsume, cambia conmigo. Yo me encargaré de atravesarlo”.

“… Entendido.”

Harutora era más adecuado para el combate de primera línea con el shakujou para un arma.

Por eso quería cambiar con Natsume. Natsume rápidamente retrocedió, y Touji tomó la posición vacía.

Ahora Harutora y Touji se convirtieron en la vanguardia de la formación. Siguieron bajando después de pasar por encima de la plataforma de la escalera.

Volvieron a toparse con varios shikigami negros a mitad de camino. Harutora los revisó con el shakujou, y el transformado Touji liberó libremente su poder demoníaco. Después de que él, que originalmente había sido extremadamente bueno en la lucha, se convirtió en un demonio, su fuerza fue aumentada por órdenes de magnitud, convirtiéndose rápidamente en inigualable en términos de fuerza. Dejando a un lado las batallas mágicas por ahora, las habilidades de Touji podrían ser plenamente utilizadas en la actual batalla de corto alcance.

“¡Touji, no exageres!” 

“Qué tonterías dices. No puedo desperdiciar esta valiosa experiencia de batalla”.

 Touji  se  rió  tras  escuchar  la  advertencia  de  Harutora.  A  juzgar  por  esta  respuesta extremadamente al estilo Touji, él seguía siendo extremadamente tranquilo.

… ¡Pero!

El propio Touji había dicho que el tiempo se limitaba a cinco minutos. No tenían tiempo libre.

Harutora y los demás bajaron las escaleras casi a toda velocidad.

Pero, había todavía otra escalera entre ellos y la octava sala de entrenamiento práctico.

Kon, que voló sobre sus cabezas, abrió los ojos de repente.

Bajó las escaleras delante de ellos. Entonces,

“… ¡Esto es malo, Harutora-sama!” 

Volvió al lado de Harutora mientras lloraba. En el momento en que Harutora le preguntó

“¿Qué pasa?”, cierta ‘actividad’ brotó de la base de las escaleras.

El shikigami negro de Doman. Pero esta vez no fue uno o dos. El número de shikigami cubrió completamente la escalera. No podían ver las paredes, ni el techo. Llenaron el espacio de abajo a lo largo de las escaleras.

“¡Qué!”

 Incluso Harutora y Touji gimieron, deteniendo sus pasos. No sabían que éste era un grupo de shikigami que Doman había liberado en el edificio después de invadir la academia.

“… ¡Oye! Harutora, préstame eso!” 

Touji rápidamente agarró el shakujou de las manos de Harutora. Dejó Harutora, avanzando solo.

“¡Touji!” 

“… ¿Es suficiente?” 

Touji levantó el nivel del shakujou, llenándolo con su energía mágica.

El poder demoníaco se hinchó en el shakujou y se extendió por ambos extremos, chocando de frente con el grupo de shikigami negros que se acercaban.

“¡Ah – ugh!”

 Touji se agarró al shakujou, deteniendo al grupo de shikigami en su camino. El aura demoníaca inauspiciosa fluyó de todo el cuerpo de Touji, y la armadura que lo cubría parpadeó con un intenso rezago.

Pero, “no fue suficiente”. No importaba lo estrecha que fuera la escalera, un solo shakujou no podía defenderla por completo. El shikigami de la espalda subió con el shikigami que Touji bloqueó al pisar piedras. El shikigami negro rompió la defensa de Touji de las paredes y el techo, casi envolviendo a Touji.

“¡Touji!” 

“¡Orden!” 

Gritó Harutora, y Natsume rápidamente lanzó un amuleto, pero no fue suficiente para detener el avance de los shikigamis. El negro shikigami pasó sobre Touji como una inundación.

… ¡Maldita sea!

La cara de Harutora palideció y agarró todos sus encantos protectores. Justo antes de que Harutora estuviera a punto de lanzarlas:

“¡Date prisa y hazte a un lado!” 

Suzuka, que sintió el peso de la situación, empujó con fuerza a un lado a Kyouko, Natsume y Harutora delante de ella, dejando que su shikigami atacara hacia delante.

Una colisión intensa.

Las escaleras donde Harutora y los demás se estremecieron intensamente. Natsume se agarró a Harutora, mientras que Harutora agarró rápidamente la barandilla de las escaleras.

En el momento en que el shikigami negro y el grupo de papel shikigami chocaron a la fuerza, todos dejaron de moverse con retraso. La inventiva del “Niño Prodigio” había sido eficaz, consiguiendo controlar los shikigami que estaban a punto de desplazarse por Touji.

Pero esto fue sólo un equilibrio momentáneo. El shikigami de Doman volvía a derramarse. Sus números estaban anormalmente claros, y la ‘muralla defensiva’ que Touji y Suzuka crearon con el shikigami estaba siendo empujada hacia atrás ante sus ojos.

“Touji, ¿estás bien?”

“¿Me estás preguntando si estoy bien? ¡Obviamente no!” 

Rugió furiosamente una respuesta a la pregunta de Harutora mientras se agarraba las piernas con todas sus fuerzas.

“¡Me jacté un poco ahora mismo, pero atravesar este grupo es demasiado difícil!”

 En el tiempo que pasó hablando, estaba casi abrumado. Touji se recuperó rápidamente. Sus pies ya se estaban hundiendo en el suelo de la escalera, y el temblor que se había fortalecido con energía mágica también emitía ruidos chirriantes. Ya era una conclusión predecible que no podían atravesar. Kon, volando por encima, se apresuró a unirse al “muro defensivo”, pero fue una gota en el cubo.

Natsume se mordió el labio.

“… Probemos otras rutas. ¡Retirada por ahora!” 

“Espera, Natsume. Si nos retiramos apresuradamente, será aún peor”.

“Lo entiendo. Entonces por ahora, ven.”

Natsume levantó la cabeza para mirar hacia arriba. Justo entonces, una luz dorada descendió de las escaleras que estaban sobre ellos.

Era Hokuto. Después de limpiar a los enemigos en la cafetería, había venido siguiendo a su amo.

“¡Hokuto! Detengan al enemigo: el ataque de los shikigamis negros. Touji-kun, Dairenji-san, deja espacio para el ataque de Hokuto”.

 “¡Vale!”

“……. Tch.”

Touji hizo todo lo que pudo, Suzuka controló su shikigami, y Kon también gritó.

Apartaron al enemigo con todas sus fuerzas. Inmediatamente apareció una brecha en el “muro defensivo”, y Natsume hizo que Hokuto rompiera esa brecha.

El cuerpo de Hokuto irradiaba una temible aura. Ya no planeaba usar pequeñas cosas como sus garras o colmillos, sino usar su aura para alejar al grupo de shikigami. ¡Oh! …. De repente retorció su cuerpo, usando el retroceso para saltar hacia el enemigo, avanzando como si estuviera perforando el suelo y atacando el grupo de shikigami.

Bajo el poderoso asalto de Hokuto, el área alrededor de las escaleras tembló intensamente como si  hubiera un terremoto. Harutora y los demás escaparon apresuradamente para refugiarse en las escaleras de arriba.

Después de ver el ataque del shikigami de Doman lentamente lento, Touji dio el trabajo de ‘muro defensivo’ al shikigami de Suzuka y se retiró.

Le devolvió el shakujou a Harutora. Antes de confirmar que lo había tomado:

“Natsume, ¿qué quieres decir con otras rutas?”

“La escalera de emergencia.”

“¡Imposible!” Después de escuchar la respuesta de Natsume mostrando una expresión tan seria, Harutora cogió el shakujou, refutándola sorprendida.

“¡Es demasiado estrecho, es increíblemente peligroso! ¡Si caemos, estamos perdidos!”

“Pero no hay otras rutas.”

 La escalera de emergencia se colocó a lo largo del muro exterior de la academia. Ahora mismo, no estaba claro si el enemigo había dejado algún shikigami fuera, y en el espacio abierto, Hokuto podía utilizar más su poder.

Pero era más fácil para el enemigo atacar en ese espacio abierto. También fue difícil usar la doble formación de anillos que estaban manteniendo en la escalera de emergencia. Al menos no podrían tener a Hakuou y Kokfuu vigilando su izquierda y su derecha. Y lo que es más importante, como dijo Harutora, existía el peligro de caídas y existía la posibilidad de que la escalera de emergencia fuera atacada.

“¿No podemos hacer que Hokuto abra rápidamente un camino para que bajemos?” 

“No. Ahora mismo, Hokuto y yo compartimos la visión, pero cuando bajemos, seguro que nos invadirá el shikigami. Incluso si Hokuto puede llevarlos al caos, no puede acabar con todos los enemigos. Y lo más importante… Hokuto tampoco puede seguir aguantando”.

Como dijo Natsume, aunque el impulso enemigo de los shikigamis fue disminuyendo gradualmente, todavía se acercaban por las escaleras. Con la ayuda de Hokuto, el muro defensivo creado por los shikigami de Suzuka logró bloquearlos. Si querían abrirse paso, tendrían que ser resueltos para sufrir heridas.

“Movámonos por ahora. Ni siquiera el shikigami de Suzuka-chan podrá sostenerse solo”. 

Después de que Kyouko se declarara, le murmuró “lo siento” a Suzuka. Pero, justo entonces.

“… ¿Es esa la voz de Kyouko-san?” 

Al oír la repentina voz, Kyouko y los ojos de todos los demás se abrieron de par en par. La tenue voz me era familiar.

“¿Directora?” 

“¡Abuela!” 

Esta era la voz de la directora Kurahashi. Además, venía del otro lado del muro defensivo, desde la dirección de Hokuto y el shikigami de Doman. En el momento en que Harutora murmuró “podría ser”, un gato calico saltó de un hueco en el shikigami de Suzuka.

Cuando antes habían mirado desde la cafetería, había sido este gato calico el shikigami que usaba la directora, frente a Doman en la entrada principal.

“¡Esto es genial! Todos están sanos y salvos. ¡Date prisa y sígueme!”

Justo cuando las palabras salieron de su boca, el gato pasó junto a la sorprendida Harutora y los demás, subiendo las escaleras apresuradamente con el ímpetu de una raya.

“¡Date prisa!” Repentinamente se volvió hacia atrás mientras estaba de pie en las escaleras de arriba, hablando para animarles a continuar, y luego no miró hacia atrás. Harutora y los demás se quedaron quietos, atónitos.

“Eh, hey, ¡Abuela!” 

“¡Directora! Pero, ¡allí arriba está……!” 

Los gritos de pánico de Kyouko y Tenma parecieron no llegar a los oídos de la directora.

“Natsume”.

 Harutora dio el derecho de juicio a Natsume, que era el responsable del mando.

“Vamos”.

Tras un momento de vacilación, Natsume lo decidió. En comparación  con  bajar  las peligrosas escaleras con fuerza, sería más razonable escuchar la opinión de la directora.

“Dairenji-san. Tu shikigami…” 

“… que detengan al enemigo y retrocedan lentamente.”

 “Sí. Contamos contigo. … Sigan al shikigami de la directora. Continuar manteniendo la formación. ¡No podemos ser descuidados!” 

Después de decir eso, comenzó a perseguir el shikigami de la directora, siguiendo su ruta original. Harutora y los demás asintieron, siguiendo a Natsume.

No podían evitar sentir una sensación de inutilidad mientras retrocedían, pero afortunadamente, no apareció ningún nuevo shikigami por las escaleras. Hokuto probablemente los había matado a todos. En su lugar, los pasamanos fueron destruidos y las grietas se esparcieron a lo largo de las paredes y los escalones. “¡Presten atención por debajo de ustedes!” Touji advirtió a todos.

Después de ver la cola del gato delante de ellos,

“¡Abuela!” 

Gritó Kyouko en voz alta.

“¿Qué está pasando? ¿Qué ha pasado?” 

“…  es  el  ataque  de  Ashiya  Doman.  Supuse  que  no  vendría  aquí,  parece  que  fallé completamente. Mi nombre como adivino está llorando.” 

“¿Qué significa eso? ¡Por favor, explique con más detalle!”

“Por supuesto. Pero después de que escapemos.”

La directora también estaba muy ansiosa. Continuó corriendo hacia adelante mientras observaba a su nieta mientras ella respondía.

Pero

“El sacerdote Doman ya ha invadido el interior de la academia. Las zonas bajas están llenas de su shikigami”.

 “¿Así que estamos escapando hacia arriba? ¿Pero qué hacemos después de escapar a la cima? ¿Tienes un plan?”

 Después de escuchar la pregunta de Natsume, la directora respondió mientras corría.

“Al techo”.

“¿El techo? ¿Podemos subir al techo desde el edificio de la academia?”

 Preguntó Harutora sorprendido.

El ascensor del edificio de la academia sólo podía llegar al último piso. Nunca había oído hablar del techo desde que entró en la academia. Pero la directora volvió a decir “sí”, confirmando las dudas de Harutora.

“Hay escaleras en el último piso. Originalmente, nadie más que yo puede pasar……… Ahora mismo es una situación de emergencia. Usaremos la barrera allí”.

 Ese lugar también tenía una barrera. Kyouko se quejó “Por favor, dilo antes si tenemos ese tipo de opción” con la cara roja. Parecía que era la primera vez que oía hablar del techo.

Mientras hablaban, Harutora y los demás, con el gato a la cabeza, volvieron al último piso donde estaba la cafetería.

Después de bajar a toda prisa por las escaleras y volver a subir, las cuatro personas que no eran Harutora y Touji estaban jadeando para respirar. En su lugar, la directora aceleró sus pasos, pasando por el pasillo en un santiamén.

“… ¡Aquí!” 

Bajo la guía del gato, Harutora y los demás se mantuvieron en su carrera, respirando fuertemente.

El shikigami de Doman apareció de nuevo frente a ellos. Pero el gato no tenía miedo, girando ágilmente su pequeño cuerpo y pasando por debajo de las piernas del enemigo.

Luego, siguió corriendo sin reducir su velocidad.

Esta acción era como si ella no estuviera preocupada por los estudiantes que la seguían. Pero en realidad, por supuesto, este no era el caso. Ella quiso decir que no necesitaban frenar para vencer una obstrucción de este nivel.

¡Esta clase de tutela era demasiado espartana!

Al final, tal como la directora había esperado, el actual Harutora y los demás ya no tenían miedo de enfrentarse a unos pocos shikigami.

Kon usó su fuego de zorro para controlarlos, y el shakujou de Harutora, junto con el ataque de Touji, hizo que los enemigos bloquearan su camino volando. Entonces, Hakuou y Kokfuu a la izquierda y a la derecha no le dieron al shikigami la oportunidad de acercarse, y todos pasaron por el pasillo.

Cuando apareció el peligro, Natsume, Kyouko, Tenma y Suzuka liberaron amuletos para garantizar su seguridad. Así fue como la formación organizada por Natsume fue eficaz, cada miembro se cuidaba mutuamente a medida que avanzaban.

El objetivo de la directora era el final del corredor. Parecía un callejón sin salida.

Pero

“… ¡Abre!” 

En el momento en que el gato gritó, apareció una puerta de metal en la pared. Los ojos de Harutora se abrieron de par en par. “¡Whoa!”

 Parecía estar escondido con magia. De esta manera, nadie se daría cuenta.

“La cerradura ya está abierta. Abre la puerta”. 

La directora finalmente se detuvo, dando marcha atrás. Harutora corrió hacia delante para empujar la puerta en lugar del gato. Así es como era, el propósito de este lugar era para subir escaleras.

Después de abrir la puerta, el gato se deslizó inmediatamente y comenzó a subir las escaleras. El shikigami de Doman no había invadido este lugar oculto. Después de que el grupo siguiera detrás, vieron rápidamente un estrecho pasadizo, probablemente la puerta que accedía al techo.

Harutora entró, abriendo la puerta otra vez.

“¡Este lugar es…!” 

Pasó por la puerta y llegó al techo. El aire húmedo, lleno de humedad, encerró inmediatamente el cuerpo de Harutora.

Las tuberías expuestas tiraban el suelo, formando un espacio como un laberinto rodeado por la delgada cerca de alambre, prácticamente como un gigantesco gimnasio en la selva.

El gato corrió por el complejo sendero de nuevo y Harutora y los demás persiguieron al gato, sus pasos sonando en estruendos. No podían ir uno al lado del otro por el estrecho sendero, así que naturalmente se convirtió en Harutora sola al frente del grupo.

Había dos espacios en el techo. El primero era donde Harutora y los otros estaban ahora, un espacio de tuberías como un laberinto. El otro espacio era más alto, un espacio elevado a unos tres metros de altura.

El gato pasó a través de la estrecha ruta, subiendo los sencillos escalones hasta la zona elevada. Harutora también lo persiguió rápidamente hasta la base de las escaleras.

Ahora sólo había el cielo sobre él cuando miró hacia arriba. Harutora reguló su respiración rápida, agarrando el pasamanos y subiendo al tope de las escaleras en un santiamén.

Su campo de visión repentinamente se despejó.

No había nada que delimitara el espacio delante de él, pero era ancho y plano. No había barandales colocados alrededor de los bordes; sólo estaba cubierta con una pared baja.

No había estructuras más altas que la Academia Onmyouji. Por lo tanto, su visión estaba libre de obstáculos y la fuerza del viento era fuerte. Por encima de su cabeza había nubes grises, tan bajas que parecía que podía tocarlas si lanzaba una pelota con todas sus fuerzas. El viento hizo un ruido de llanto y cambió rápidamente.

Al mismo tiempo, el shikigami negro de Doman volaba por los alrededores con el día turbio y nublado como telón de fondo.

No fue sólo arriba. Había también una docena en el tejado, probablemente un grupo de los que habían rodeado la academia al principio que habían quedado fuera. La mayoría de los shikigami deberían haber invadido el interior de la academia, pero, aun así, todavía había bastantes shikigami a los que se les había ordenado quedarse fuera.

Pero, no fue el shikigami negro que se extendió por la zona lo que más atrajo el interés de Harutora en este momento. Más bien, era la parte más profunda de la zona elevada, a través del lugar al que Harutora había subido, al lado de la entrada de la academia.

Había un altar.

Un escenario de piedra con torii en cuatro direcciones. Cuatro torii. El lado norte era negro, el lado este azul, el lado sur rojo y el lado oeste blanco.

Harutora dejó de moverse.

Fue asaltado por un espectáculo inesperado.

… ¡Esto era!

La propiedad de la familia principal Tsuchimikado, el altar con su espalda al ‘Cerro Imperial’.

El altar del Ritual Taizan Fukun.

El verano pasado, Harutora y Natsume habían peleado con Suzuka en ese altar.

“…….. ¡Cómo es posible!”

 Era exactamente lo mismo, ¿verdad? ¿Con ese altar? ¿Por qué estaba aquí?

Los pensamientos de Harutora estaban en caos. El gato que había guiado el camino no prestó atención a la reacción aturdida de Harutora, corriendo vigorosamente hacia el altar.

Kon, que estaba concentrado en combatir a los enemigos, sintió la condición de su amo. “H-Harutora-sama?” Se giró para mirar a Harutora. Pero Harutora no podía apartar la mirada del altar.

“¡Oye! ¿Por qué te estás espaciando?” 

Touji saltó, saltando por delante de Harutora, que se había detenido en las escaleras, pero cuando vio el altar, “… ¡Qué!” su expresión también se congeló. En aquel entonces no había participado en la batalla, pero una vez había visto el altar en la Colina Imperial.