Tokyo Ravens (NL)

Volumen 6

Capitulo 4: Rompiendo La Línea Enemiga

Parte 3

Pero, justo entonces.

“… Atrás.” 

Ordenó Suzuka.

En algún momento, un libro había aparecido en la mano de Suzuka, una escritura bellamente atada. La Escritura se abrió por sí misma en las manos de Suzuka como si el viento la volteara. Las páginas interiores volaban en el aire una por una, plegándose, pegándose y solapándose para formar rápidamente “Figuras”. 

Los finos shikigami con tamaño real fueron creados imitando las formas de muchas bestias salvajes. Además, caminaban vigorosamente de un lado a otro como si se les hubiera dado la vida. inconscientemente jadeó Harutora. Había sido testigo de esto antes. Estos eran los shikigami originales del ‘Niño Prodigio’ Dairenji Suzuka.

El shikigami de papel que Suzuka convocó chocó frontalmente con el shikigami negro de Doman.

Usa números para combatir a los números del enemigo. El papel shikigami ya había pasado a través del círculo, atacando al shikigami negro a través de los huecos entre los otros cinco, según las órdenes de su amo, y golpeándolos de nuevo.

Reajustaron su formación casi completamente desmoronada. En algunos momentos, los dos bandos ya se habían emparejado. Dejando a un lado a Harutora y Touji, que lo habían presenciado antes, así como a Natsume, que conocía su poder, Kyouko y Tenma, que presenciaron esta escena por primera vez, miraron a Suzuka, asombrados. La magia del “Niño Prodigio” fue tan impactante. Finalmente recobrando el aliento, Harutora gritó en voz alta con una enorme sonrisa.

“¡Asombroso! ¡Increíble! Suzuka!”

 “ha, tan fácil”.

“Como se esperaba de Suzuka. ¡Estás haciendo que mi corazón se acelere!”

“¡Gya! Yo… yo… ¡idiota! ¿Qué estás diciendo de repente, idiota?”

Las réplicas de Suzuka también se desorganizaron a medida que su cara se enrojeció repentinamente hasta el cuello. Afortunadamente, los shikigami de Suzuka probablemente podrían moverse independientemente, y no se vieron afectados por la vergüenza de su amo, manteniéndose indiferentes a sus deberes.

Era joven y había sido investigadora originalmente, pero el poder de un Divino General realmente merecía su fama. Era temerosa como enemiga, pero después de convertirse en compañera, era extremadamente confiable. Harutora no pudo evitar sentirse agradecida.

…. Sí. Nunca pensé que el día vendría a luchar con esta chica.

Su batalla con Suzuka antes del altar de la ‘Colina Imperial’ parecía haberse convertido ya en un recuerdo lejano. Pensando cuidadosamente, ni siquiera había pasado un año. Si él hubiera contado su pasado sobre la situación actual, definitivamente no habría podido creerlo.

No, no fue sólo Suzuka. Tal vez Touji pudo haber pasado, pero hace un año no podía imaginarse enfrentarse a enemigos en batalla junto con Kyouko, Tenma y Natsume. Ahora que lo pienso, ¿con quién estaría un año después y qué estaría haciendo? Estas increíbles emociones salieron del pecho de Harutora mientras luchaba junto a sus compañeros de clase, rodeado por los shikigami liberados por un legendario Onmyouji.

Touji, que no soltó el precinto, metió la cinta en un bolsillo del uniforme.

“… ya veo. Sólo querías demostrar que podías “lidiar con ellos fácilmente a solas”. Pero, Dairenji, ¿tu energía mágica ha sido realmente sellada?”

 “¡Oh, por supuesto! ¡Déjame aclararlo, esto es todo lo que puedo hacer! ¡Tienen que pensar en algo ustedes mismos!”

 Contestó Suzuka, el enrojecimiento aún no había desaparecido de su cara.

Ahora que lo pienso, Suzuka sólo había convocado a una docena de shikigami. De hecho, fue un poco insignificante en comparación con los números torrenciales que había mostrado el verano pasado.

Pero esta docena ya era suficiente para llevar a cabo una batalla pareja contra el shikigami de Doman. Para Harutora, que sólo había pensado en comprar tiempo sin ninguna intención de ahuyentar al enemigo, este poderío era suficiente para alegrarse.

“¡Además, por qué no empiezas a pelear en serio también! De hecho, estas cosas no son todas idiotas, y tienen números espantosos. Pero pase lo que pase, no pueden alcanzar el nivel del Juggernaut Blindado como enemigo, ¿no?”

 Suzuka miró por encima de su hombro desde atrás con una temible mirada. El que miraba con enfado era Natsume, a la cabeza del grupo.

“…….. Ok.” 

Natsume miró hacia delante y contestó con eso. Usando su voz “original” que olvidó esconder:

“Por fin lo entiendo gracias a ti. Si somos derrotados, nuestra estrategia de comprar tiempo perderá su significado. En vez de seguir agotando a todos, es mejor escapar a una barrera lo antes posible”.

 Suzuka jadeó, y Harutora y Touji murmuraron “idiota”, sus mejillas temblando. Kyouko y Tenma, que no entendían de qué hablaba Natsume, parecían dudar de sus propios oídos.

A Natsume no le preocupaban las reacciones circundantes. Concentró toda su concentración:

“Voy a hacer una apertura, ¡Ven, Hokuto!”

Natsume llamó a su shikigami. Delante de ellos a espaldas del negro shikigami que formaba un recinto, aparecía una luz dorada y deslumbrante.

La fuente de luz llevaba un aura majestuosa. El negro shikigami de Doman aulló consternado al tocar el aura.

Por otro lado, la fuente de luz se extendió repentinamente, convirtiéndose en una brillante cinta de luz dorada, y luego se contrajo.

Apareció un dragón.

Su cuerpo medía unos diez metros, completamente cubierto de escamas doradas y con dos cuernos y una melena. Esta era la bestia espiritual de la familia Tsuchimikado que usó Natsume, Hokuto.

Al mismo tiempo que Hokuto tomaba forma, mostraba un aire de sorpresa como si dijera ‘qué pequeño’. Esta cafetería podría llamarse espaciosa, pero al final estaba dentro. En particular, la altura del techo era sólo el nivel de un edificio normal, y los cuernos de Hokuto golpeaban el techo si levantábamos ligeramente la cabeza. Desde el punto de vista de Hokuto, este espacio era sofocante.

Más importante aún, había un gran número de shikigami de Doman en este estrecho lugar. Hokuto estiró su largo cuerpo. La aterradora presencia que desprendió el shikigami pareció también hacer que Hokuto se sintiera infeliz.

Pero en comparación con el shikigami, que de repente perdió su vigor, el actual Natsume estaba ansioso por irse.

“¡Hokuto! ¡Obedece a tu amo! ¡Derriba a estos shikigami negros! ¡Abren un camino delante de nosotros!”

 Una voz impresionante y llena de aura ordenó a Hokuto.

El cuerpo del dragón tembló un poco, y cambió de expresión.

El cambio era tan obvio que incluso Harutora y los demás podían verlo claramente desde atrás.

Hokuto flotó en la cafetería mirando hacia los muchos shikigami de Doman. Ssssss… Respiró hondo, y luego rugió fuerte.

El aire de la habitación temblaba intensamente como si hubiera habido una explosión, el rugido se convertía en una onda expansiva. Harutora, que estaba junto a Natsume en primera línea, parecía sentir que su propio corazón dejaba de latir momentáneamente.

El rugido de Hokuto llevaba una indignante voluntad dracónica y una noble aura. El shikigami de Doman mostró un intenso retraso justo después de ser sumergido en el rugido.

Aprovechando esta oportunidad, Hokuto atacó.

Su nivel de agilidad era completamente inapropiado para su gigantesco cuerpo. Sus escamas doradas destellaban con fuerza mientras corría por la estrecha habitación.

Se movió como un rayo.

… ¡Uwah!

Una presión espantosa hizo que Harutora aguantara la respiración. Hokuto limpiamente arrastró el shikigami antes que Natsume y Harutora.

Además, utilizó todo su cuerpo, usando sus garras, cuerpo y cola para golpear el negro shikigami que rodeaba el anillo. La fuerte presión del aura que fue liberada a una corta distancia, incluso casi voló a Harutora y a los demás. “Uwah!” Tenma cayó al suelo, volviendo a levantarse apresuradamente.

Probablemente porque su ímpetu era tan grande, Hokuto plantó sus garras en el techo y el suelo, esculpiendo largas juntas antes de detenerse. Entonces, hizo lo mismo otra vez. Se dirigió hacia la zona donde los shikigami eran numerosos, derrotando al enemigo con impunidad.

Harutora y los demás quedaron estupefactos.

“esa cosa es tan increíble…”

 Harutora ya había sido testigo de la fuerza del dragón, pero esta vez Hokuto era valiente y cruel. Era extremadamente raro que el caprichoso dragón siguiera inmediatamente las órdenes de su amo, e incluso Suzuka, que había instado a Natsume a usar sus habilidades reales, ensanchó los ojos, incapaz de hablar.

“¡Deprisa! ¡Dejemos la cafetería ahora!” 

Ordenó Natsume, corriendo hacia la entrada primero. Harutora y los demás entraron en razón, siguiendo a Natsume mientras mantenían el círculo.

A sus espaldas, Hokuto se defendió contra incontables enemigos, mostrando un valiente espíritu de lucha. Ahora que lo pensó, era la primera vez que Hokuto volaba en interiores. Si los shikigami de Doman eran monstruos, Hokuto era una bestia, y ni siquiera soñaban con acercarse. Harutora y los demás ni siquiera sabían si estaban huyendo del shikigami de Doman o evitando a Hokuto.

“¡Hey, está yendo demasiado lejos! El suelo ni siquiera deja de temblar”.

Hokuto era despiadado, girando su cuerpo sin querer. Cada vez que los cuernos del dragón tocaban el techo, una gran cantidad de polvo caía del techo, y cada vez que la cola del dragón golpeaba el suelo, temblaba como una ondulación bajo sus pies, prácticamente como un paseo en un parque de diversiones. Harutora se mordió la lengua tres veces mientras pronunciaba las palabras.

Cada enemigo era muy fuerte, así que quizás Hokuto no podría ser misericordioso. Si esto continuaba, la cafetería misma podría ser destruida antes de que expulsaran al enemigo shikigami.

“¿Qué vamos a hacer con las reparaciones después?”

“¡Bakatora! ¡Basta, apúrate y corre!”

La voz de Touji vino por detrás de su espalda. Harutora apretó los dientes y siguió corriendo. Luego, escaparon de la cafetería.

Llegaron al pasillo. También había shikigami de Doman aquí. Pero, aquí había distancia entre los dos lados. Kon lanzó bolas de fuego y Natsume también lanzó encantos. Después de usar los encantos de elementos de madera para atar el ardiente shikigami, Harutora juntó sus fuerzas y balanceó su shakujou.

El shikigami que había sido aplastado contra la pared cayó al suelo junto a un intenso rezago. Aun así, sus cuerpos materializados no desaparecieron………

“¡No tenemos que forzarnos a destruir a los enemigos! ¡Ahora mismo necesitamos evitar gastar energía extra!”

 Harutora y los demás acataron las instrucciones de Natsume, pasando rápidamente por el pasillo. El shikigami  atado aún quería obstruirlos con sus cuerpos. Kokfuu les apuñaló directamente con su lanza al pasar, mientras que Hakuou era el responsable de comprobar los shikigami que aparecían delante de ellos. Después de que Kyouko usó un amuleto protector para levantar un muro defensivo para detener los movimientos del enemigo, pasaron junto a ellos.

Su meta, la octava sala de entrenamiento práctico, estaba abajo. No podían usar el ascensor ahora mismo.

Sólo podían tomar las escaleras.

Harutora y los demás bajaron a toda prisa por las escaleras encabezados por Natsume. Kon estaba delante, y el shikigami de Suzuka tomó la retaguardia.

Justo después de que terminaron de bajar las escaleras, volvieron a tropezar con el shikigami de Doman. Esta vez fueron tres. Cuando uno de ellos atacó hacia delante, Harutora sacudió el shakujou, y luego Kokfuu lo golpeó volando. Pero los otros dos parecían haber visto a través de los movimientos de Harutora y los otros, dando vueltas alrededor del siguiente juego de escaleras.

“¡Orden!” 

Al mismo tiempo, Natsume tiró dos encantos de elementos acuáticos. El agua mágicamente producida se vierte hacia el shikigami. Mientras estaban acobardados, Kon usó Kachiwari y Harutora atacó con su shakujou, pero el negro shikigami se agarró rápido, no retrocediendo ni un solo paso.

El shikigami que había sido golpeado volando por Kokfuu atacó de nuevo. Kyouko hizo que Kokfuu lo bloqueara, pero debido a que el espacio en la escalera era demasiado estrecho, el shikigami de Hakuou y Suzuka no podía venir al frente para unirse a la batalla.

“¡Bastardos! ¡Cada uno es tan duro!”

Harutora y los demás habían dejado de avanzar. Si esto se prolongaba, probablemente estarían rodeados de nuevo por el enemigo shikigami.

Pero

“¡Primer sello, purga!” 

Touji cantó un conjuro. El primer nivel del sello en su cuerpo fue liberado, y al mismo tiempo, la presencia de los oni suprimidos se fortaleció en un destello.

En su frente, de la que se le había quitado el pañuelo, crecían unos cuernos que parpadeaban con el paso del tiempo. Colmillos afilados extendidos de su boca mostraban una sonrisa intrépida.

El aura demoníaca que brotaba cubrió el cuerpo de Touji, condensando y formando armadura. Blindaje parpadeante, semitransparente y casco. Este era Touji en su estado de espirito viviente.

El transformado Touji avanzó hacia el shikigami que atacó Harutora y Natsume para contrarrestar el ataque, volando entre los dos y extendiendo sus brazos, agarrando las cabezas de los dos shikigami.