Lord of Mysteries (NW)

Volumen 1

Capitulo 191: Motivos Inciertos

Qilangos perdió a sus perseguidores con la ayuda del viento después de cruzar un lago artificial.

Inspeccionó su entorno, con la intención de crear la ilusión de que había entrado en una zanja para escapar al río Tussock antes de girar hacia el centro financiero de Backlund, el Distrito de Hillston.

En ese momento, su campo de visión de repente se volvió borroso. Vio los colores a su alrededor saturados como un óleo en la oscuridad.

Los árboles verdes se volvieron más verdes, sus frutos rojos aún más rojos. La negrura oscura del agua se volvió más oscura. Todo parecía estar salpicado de pintura.

Bajo el cielo donde se cernía la luna carmesí, había muchas figuras transparentes e indescriptibles, así como diferentes esplendores brillantes que contenían un conocimiento misterioso.

Qilangos se encontró deteniéndose mientras flotaba en el aire. Debajo de sus pies, el agua oscura subía continuamente hacia él. Debajo del agua había manos de color blanco pálido, acercándose a él.

¡No es bueno! Qilangos se dio cuenta de que había sido emboscado.

¡Y el emboscador definitivamente no era débil!

Un esqueleto humanoide gigante apareció de repente ante él. El monstruo medía cuatro metros de altura, y en las cuencas de sus ojos ardían llamas negras. Los huesos de su cuerpo eran borrosos e ilusorios.

Qilangos le dio a su enemigo una mirada inexpresiva mientras soltaba una mueca.

Al mismo tiempo, el guante en su mano izquierda emitió una luz radiante, tomando el color y textura del oro puro.

Qilangos se echó hacia atrás y abrió los brazos, como si estuviera tratando de abrazar el sol.

Un rayo de brillo puro y ardiente descendió del cielo, envolviendo el esqueleto gigante. El mundo de color pastel tembló en respuesta, y las manos pálidas bajo el agua oscura se evaporaron una por una.

¡Estos eran los poderes de Beyonder del Sacerdote de la Luz!

¡Era un poder de Beyonder del camino de la Secuencia del Sol!

¡Era la némesis de los muertos vivientes!

El pilar radiante de luz se disipó y las llamas negras del esqueleto gigante se extinguieron instantáneamente. Luego se volvió transparente mientras se desintegraba en el aire.

Antes de que Qilangos tuviera tiempo de usar las habilidades del Sacerdote de la Luz para disipar el mundo pastel, su expresión repentinamente se volvió rígida.

Vio aparecer otro esqueleto gigante a su izquierda. También tenía cuatro metros de altura, sus ojos ardían con llamas negras, idéntico al monstruo de antes.

Inmediatamente después de eso, el mismo monstruo esquelético apareció alrededor de Qilangos, uno tras otro. Uno, dos, tres… ¡Había más de cien!

Más de cien pares de llamas negras ardientes miraron a su objetivo al mismo tiempo.

Debajo de él, la superficie del agua oscura se elevó más, entrando en contacto con las rodillas de Qilangos.

Manos blancas y pálidas se extendieron hacia afuera, agitándose constantemente, aferrándose con fuerza como si desearan estar vivos.

***

“Sepárense y persíganlo. Traten de arrinconarlo”, instruyó el Cardenal—Ace Snake. Conjuró un tifón y se elevó en el aire, volando hacia la dirección donde había huido Qilangos.

el Duque Negan y el resto no se unieron a las filas de los Castigadores Imperativos en consideración a sus estados; en cambio, se pararon en las ventanas o balcones para observar. También fue en ese momento cuando los nobles ordinarios que corrían frenéticamente se calmaron lentamente.

Debido a la oscuridad y los gritos ondulantes, no estaban seguros de qué sucedió exactamente. Todo lo que sabían era que el Duque Negan podría haberse encontrado con un asesino.

Alger Wilson apretó la mandíbula y salió corriendo de la mansión de Duque Negan, siguiendo el camino del jardín hacia el Distrito de Hillston.

¡No estaba dispuesto a perder esta oportunidad, sin importar cuán pequeña fuera la esperanza!

De repente, escuchó una voz transportada por el viento directamente a sus oídos: “No hay necesidad de continuar la persecución”.

¿No hay necesidad de continuar la búsqueda? La voz del Cardenal Snake…  Alger se detuvo después de correr unos pocos pasos hacia adelante. Se giró para mirar al cielo, desconcertado.

Vio al cardenal Snake, que vestía una túnica negra adornada con muchos símbolos que representaban la tormenta, flotando sobre el bosque y el lago artificial y mirando hacia abajo.

Alger arrugó las cejas y corrió hacia donde estaba el Cardenal sin considerar la razón.

A medida que se acercaba a su posición, hizo uso de sus habilidades de navegante para obtener una visión más clara.

El Cantante de Hechizos de Dios no mostró expresión, pero su postura hizo evidente que estaba muy serio. Su pelo blanco expuesto que asomaba por debajo de su sombrero negro se balanceaba con el viento, acentuando sus severos ojos plateados.

Alger retractó su mirada y salió corriendo del bosque.

La escena del estanque tranquilo que reflejaba la luz de la luna carmesí apareció de repente en sus ojos. En la superficie del estanque, una figura alta se arrastraba cerca de la orilla.

Esa figura tenía una mandíbula ancha única, su cabello castaño estaba atado en una cola de caballo. Sus ojos verde oscuro eran fríos, pero vacíos.

¡Qilangos!

¡El Contralmirante Qilangos!

Alger se quedó desconcertado al principio, luego sintió tanto sorpresa como alegría. No podía creer lo que veía. e incluso sospechaba que la oscuridad le estaba provocando alucinaciones.

Antes de que pudiera reaccionar, vio que la cara de Qilangos se pudría rápidamente. Rezumaba un líquido amarillo verdoso, su carne se despegaba pieza por pieza.

¡Pat! ¡Pat! ¡Pat!

Todo lo que quedó del rostro de Qilangos fue una calavera, sus dos globos oculares vacíos cayeron de sus órbitas al suelo junto al lago.

Qilangos se vino abajo por completo. Su ropa cubría su carne podrida y sus huesos blancos expuestos que brillaban ligeramente bajo la luna carmesí.

En menos de veinte segundos, uno de los Siete Almirantes Piratas, Qilangos, había muerto misteriosamente frente a los ojos de Alger.

Esta impactante escena quedó grabada profundamente en la mente de Alger. Le hizo sospechar si estaba teniendo una pesadilla.

¿Qué está pasando?

¿No escapó Qilangos con éxito?

¿Por qué murió tan simple, pero tan misteriosamente aquí?

Con qué se encontró, para que perdiera la vida en tan poco tiempo…

¡Era un Bendecido por el Viento de la Secuencia 6, el dueño de Creeping Hunger!

¿Quién lo hizo?

¿Cuál fue el motivo para matar a Qilangos…

Justo cuando innumerables ideas inundaban la mente de Alger, escuchó la voz carismática del Cadenal Ace Snake, “¿Alger, compartió usted la información con alguien más?

“¿Hay alguien más que conozca esta información?”

Alger se calmó rápidamente. Miró los restos de Qilangos y dio una explicación que había preparado con antelación.

“Le informé a usted en el momento en que me enteré”.

No pudo evitar quejarse por dentro. Si no fuera por el hecho de que Snake había ido a dar un paseo por el río Tussock, lo que me obligó a pasar tiempo buscándolo, ¡Quilangos ni siquiera habría escapado de la mansión del Duque Negan!

Por supuesto, no se atrevió a decir eso frente a un Beyonder de alta secuencia. Solo pudo continuar con respeto y humildad: “El personal que recibió la información directamente incluso se sacrificó por ella, y nadie abrió la carta durante su transferencia, puedo dar fe de ello. Pero no puedo confirmar si hubo una filtración en la fuente de esta información. Dado que pudimos enterarnos de ello, otros también podrían haberlo hecho”.

Mientras Alger hablaba, formuló algunas conjeturas sobre quién mató al contraalmirante Huracán Qilangos.

¿Qué persona u organización encargó a Qilangos que asesinara al duque Negan? Dado que Qilangos ya había escapado con éxito y no había amenaza de fugas de información, no hay necesidad de matarlo… Si fuera yo, haría que Qilangos se mantuviera oculto e intentara otro i asesinato cuando todos estuvieran seguros de que se había ido de Backlund…

Además, Qilangos solo confíaba en sí mismo, por lo que no le diría a nadie su plan de asesinato. El Duque Negan ha estado organizando reuniones últimamente en preparación para su propuesta de ley en septiembre, por lo que hay abundantes oportunidades. Aparte del propio Qilangos, no hay nadie que pueda predecir correctamente cuándo atacaría. A-a menos que esa persona fuera un Profeta… Pero eso es poco probable…

¿Otras facciones? Imposible. Justicia oró al Sr. Loco para transmitir la información en el momento en que notó un problema. No había forma de que otra organización pudiera haber recibido la información al mismo tiempo…

El Sr. Loco…  Alger se sorprendió al pensar en una posibilidad.

¡La persona que lo asesinó fue el adorador del Sr. Loco!

¡Estaba en Backlund y por lo tanto echó una mano!

Cuanto más pensaba en ello, más Alger sentía que esta suposición estaba cerca de la verdad.

¡Solo los miembros y subordinados del Club del Tarot podrían haber recibido la información a tiempo!

¡Solo la ayuda del adorador de El Loco podría hacerlo parecer tan misterioso y sin motivo!

Justo cuando estaba inmerso en sus pensamientos, el Cardenal Snake se quedó en silencio por un momento. Le dijo al resto de los Castigadores Imperativos que se dirigían hacia allí: “Qilangos está muerto. Un Beyonder de alta secuencia, o alguien que usó un artefacto sellado de un nivel similar, lo mató. Pero lo segundo es muy peligroso y muy poco probable.”

“Después de un análisis preliminar, creo que el Beyonder de Alta secuencia es del camino de la Muerte, quizás un miembro del Episcopado Numinoso, pero no alguien que yo conozca. También existe la posibilidad de que sea miembro de otra organización secreta.

“El motivo no está claro”.

El Episcopado Numinoso se originó en el Continente Sur. Cuenta la leyenda que primero fue formado por un descendiente de la Muerte en un intento de revivir a la Muerte. Casi fueron erradicados después de la colonización del Continente Sur, pero sobrevivieron obstinadamente y se extendieron hacia los países del Continente Norte.

Un Beyonder de alta secuencia… ¡Sí, solo un Beyonder de alta secuencia podría matar a Qilangos en tan poco tiempo! Solo un mero adorador del Sr. Loco ya está en una secuencia tan alta… ¡Un Semidiós! Alger una vez más miró la pila de carne y huesos. Se sentía disociado de todo como si hubiera perdido toda su emoción. Se quedó allí aturdido, observando todo.

Si por casualidad traiciono al Sr. Loco un día…  De repente tuvo ese pensamiento.

Inmediatamente, la aterradora escena de Qilangos pudriéndose rápidamente apareció en su mente.

Alger no pudo evitar temblar y bajar la cabeza.

Al mismo tiempo, se relajó.

Como no podía escapar ni defenderse, solo podía elegir ser leal.

¡Uf… con Qilangos muerto, ya nadie puede amenazarme con ese secreto! Exhaló, sus preocupaciones desapareciendo por completo.

…

En la mansión del Duque Negan, Audrey Hall, que estaba discutiendo el asesinato con su madre y los otros nobles, vio a su padre aparecer en la puerta.

Encontró una excusa y salió de la sala de descanso hacia el balcón del salón principal.

“Padre, ¿pasa algo?” Audrey miró al Conde Hall con sus ojos verdes.

Sus ojos verdes procedían de su madre, no de su padre.

El conde Hall sonrió.

“Se ha resuelto, hija mía. No necesitas preocuparte más. Hmm… ¿Le dijiste a alguien que el Barón Gramir era un impostor?”

“No.” Audrey negó con la cabeza con firmeza.

Solo le conté a una existencia casi divina…  Agregó en su corazón.

Ella pensó por un momento, luego se explicó a sí misma: “Después de que te lo dije, fui al baño, luego a donde estaba mamá. Puedes preguntarle a ella.

“Ya veo.” El Conde Hall asintió y no dijo nada más antes de mencionar: “Qilangos está muerto. Alguien lo mató.”

“¿Quién?” Audrey estaba tan sorprendida como emocionada.

“Ni idea. Ni siquiera podemos entender por qué el asesino mató a Qilangos. Es realmente incomprensible”. El conde Hall hizo una pausa. “Tal vez, es una persona o una organización, una organización secreta y poderosa”.

Motivo poco claro… Una organización secreta y poderosa… ¿Podría ser el adorador del Sr. Loco? ¡Podría ser nuestro Club de Tarot! Audrey tuvo una epifanía.