Yari no Yuusha no Yarinaoshi (NL)

Volumen 3

Prólogo: Carreras en la Cima

“Ya que estoy trabajando en la ropa para los filoliales también haré algo para Keel.” Declaré. “Padre, ¿puede decirme luego la talla de Keel?”

“¿Eh?” Padre me miró. “¿Ya que estas? Haces que suene como si Keel fuera una ocurrencia tardía.”

Padre y yo estábamos en medio de nuestros preparativos de venta ambulante con Keel. Yo realmente no sabía nada de tallas, pero sabía que no habría ningún problema si lo dejaba al criterio de Padre.

“Y en cuanto al estilo… ¿qué tal un look de criada gótica para ayudar en la venta ambulante?”

“Me parece bien.” “¿Oink oink?”

“¿No hablamos de esto antes?” Padre preguntó. “Vas a ser nuestro vendedor, vendiendo desde un carrito.”

“¡Oink oink oink!”

Keel movió la cabeza como si no lo aprobara.

“Todo irá bien.” Dijo Padre. “Sé que no eres del tipo tímido. Será un trabajo fácil para ti. Y si tienes algún problema, dímelo y te enseñaré cómo hacerlo, así que no te preocupes.”

“Oink oink.”

Keel asintió despacio y a regañadientes.

“Motoyasu, tendrás que comprar telas en algún sitio, ¿no?”

“¡Pues yo digo que necesito un tipo especial de material para hacer ropa para los filoliales!”

“¿De qué tipo?”

“¡Uso un tejido especial que puede expandirse o encogerse cuando se transforman!”

“Así que aquí hay telas mágicas.” Dijo Padre. “¿Sabes cómo hacer ropa así?”

“Por supuesto.” Declaré. “Se usa para la ropa de los teriántropos para cuando se transforman. Tienes que aplicar su poder mágico a un hilo, y luego, una vez que haces tela con ese hilo, ¡puedes crear ropa especial con ella!”

“Suena caro.”

“Nada que no pueda manejar.”

Podría ocuparme fácilmente de ello si fuera a Siltvelt. Allí conocía el lugar perfecto. Aquella noche planeaba llevarme a los filoliales a aquel lugar y hacerles hilar un hilo especial para mí.

“Keel, ¿quieres el mismo tipo de ropa especial?” Preguntó Padre. “¡Oink oink!”

Keel movía la cabeza de un lado a otro, como si lo desaprobara rotundamente.

Me pregunté si sería porque aún estaba creciendo, temiendo que resultara molesto si cambiaba de tamaño, ya que la ropa sólo podía cambiar cuando el usuario se transformaba, no si crecía en el sentido normal. Ahora que lo pensaba, una vez que los filoliales alcanzan un tamaño fijo, dejan de crecer. Así que nunca se daría la situación de que la ropa vieja les quedara pequeña.

“Es porque Keel aún está creciendo.” Le informé a Padre. “Así que esta vez le haré ropa a Keel con tela normal.”

“Me parece bien. Dejaré que te encargues tú.” Dijo Padre. “¡Pues yo digo que me lo dejes a mí!”

Al fin y al cabo, ya había confeccionado ropa perfecta para Yuki y los demás filoliales en innumerables ocasiones. Con toda mi práctica, hacer el traje de criada gótica para Keel no sería ningún problema.

Así que después de que Padre me dijera la talla de Keel, fui a una modista de Melromarc y compré tela. Luego partimos hacia la ciudad del castillo de Melromarc para buscar alojamiento.

Me subí a la espalda de Yuki. Kou nos esperaba detrás. Padre y Keel iban a lomos de Sakura.

“Bien, hasta luego.” Dijo Padre. “¡Hasta la próxima!” Grité.

Dado que el emisario de Siltvelt había prometido conseguirnos una licencia de venta ambulante en unos días, hasta entonces supuse que me correspondía a mí encargarme de conseguir los carros para que los usáramos. Un carruaje que pudiera tirar un filolial sería justo lo que necesitábamos.

Calculé que necesitábamos usar nuestra venta ambulante para ganar al menos dos meses de tiempo para entrenar.

Los filoliales eran bastante fuertes, así que podría conseguirnos un carruaje resistente que pudiera transportar una carga pesada.

Sin embargo, también creía en la importancia de la comodidad, especialmente en un carruaje. Necesitaba algo que ayudara a Padre y a Keel a acostumbrarse a la vida en un carruaje. Y eso significaba que lo mejor era un carruaje normal.

Un carruaje normal también ocultaría nuestra verdadera fuerza, así que si nos ayudaba a cazar unos cuantos bandidos más por el camino,

¡mejor que mejor!

Mientras yo reflexionaba sobre asuntos tan importantes, Yuki se adelantó rápidamente, ignorando a los monstruos del camino y resistiendo su hambre.

Rápidamente conseguí una habitación en una posada y luego hice ropa para Keel en los establos con Yuki y Kou.

“¿Kweh?” Yuki y Kou hurgaban divertidos con sus picos en los extremos rasgados de la tela sin usar. ¡Qué escena tan magnífica!

“Bueno, casi es hora de irse.” Declaré.

Me volví hacia Yuki y Kou mientras seguían jugando y les hablé. “¡Filoliales, adopten su forma de ángel!”

Yuki y Kou se transformaron en ángeles emitiendo una luz pálida desde sus plumas. Tenían el mismo aspecto que en las anteriores ocasiones. Yuki era plateada y de cabello blanco. Rezumaba refinamiento. Kou tenía el cabello amarillo y una expresión traviesa.

“¿Vamos a jugar a algo, Motoyasu?” Preguntó Yuki. “¡Juguemos! ¡Vamos a jugar!” Gritó Kou.

“Vamos a ver. Bueno, lo primero es lo primero, ¿de momento pueden ponerse este pijama?”

“¡Inmediatamente!” “¡Sí!”

“Cuando se transformen, se hará pedazos, así que tengan cuidado.”

Aún era pleno día, pero sería inteligente fingir que pasábamos la noche en la posada. De esa manera, podría llevar a Yuki y Kou en el portal a Siltvelt conmigo.

“¿A qué juego jugamos?” Les pregunté.

“Hmm… ¡Quiero montar en tus hombros!” Exclamó Kou. “Adelante.”

“Eh, ¿sólo Kou? Eso no es justo.” Dijo Yuki. “Eres la siguiente, Yuki.” Prometí.

Así que pasé el rato con Yuki y Kou hasta que cayó la noche. Para entonces ya habían vuelto a su forma normal, así que pagué una habitación al posadero y me llevé a Yuki y Kou conmigo. Era más caro que usar los establos, pero quería asegurarme de que nadie se enterara de que se habían ido.

“¿Entienden lo que estamos haciendo, verdad?” Les pregunté. “Está más claro que el agua.” Dijo Yuki.

“¡Sí!” Dijo Kou.

Así que Yuki y Kou fingieron dormir, y yo me preparé para activar la habilidad del portal como había hecho antes. Supongo que ya conocían el proceso porque lo habíamos hecho varias veces en el pasado. ¡Pues yo digo que teníamos que hacernos más fuertes sin que la malvada Iglesia de los Tres Héroes supiera lo que estábamos tramando!

Así que todos nos metimos en la cama y fingimos estar profundamente dormidos. Luego, lenta y sigilosamente, salimos de la cama.

Kou roncaba fuerte.

“Kou, vamos. ¡En realidad no se supone que duermas!” Yuki sacudió a Kou con exasperación.

Una vez que fingimos estar dormidos en la cama, activé la habilidad del portal y nos envié volando a Siltvelt.

De repente, el mundo que nos rodeaba cambió a la ciudad castillo de Siltvelt. Siltvelt era un país de demi-humanos, y no pocos de ellos eran nocturnos. Así que había muchas tiendas abiertas hasta altas horas de la noche, a diferencia de Melromarc. Algunas tiendas, por supuesto, sólo abrían de día, pero no ni de lejos tantas como en Melromarc.

Busqué en la ciudad del castillo una buena tienda de ropa y entré en un lugar capaz de convertir la magia en hilo.

“Me gustaría que convirtiera el poder mágico de estos filoliales en hilo para mí.” Declaré al tendero.

“¡Por favor!” Dijo Yuki. “¡Se agradece!” Chirrió Kou.

“Uh, umm…” El tendero parecía extrañado de ver a un humano junto a dos filoliales, pero en cuanto vio lo animados que estaban Yuki y Kou, aceptó. Cuando Yuki y Kou se transformaron con un puf, el tendero se quedó boquiabierto. Bueno, ¡a mí no me pareció que hubiera ningún problema! Y resultó que se podía conseguir hilo mágico a bajo precio en una tienda auténtica como aquella. Así que ahora sólo tenía que convertir el hilo en tela.

Yo no podía hacerlo como Padre, pero se me ocurrió una idea:

¿deberíamos adelantarnos y buscar un comerciante para conseguir provisiones y carruajes?

No, por ahora, la ropa de Yuki y Kou tenía prioridad. Convertiría ese hilo en tela en cuanto pudiera. No es que me fuese a llevar mucho tiempo hacerlo, pero si además de conseguir la tela me dedicaba a hacer la ropa, para cuando terminara ya sería de día. No importaba. Tendría tiempo de sobra para terminar. Tendríamos que idear un plan para más tarde, mientras llevásemos la venta ambulante, y así podría terminar de hacer la ropa entonces.

Así que, una vez preparadas las telas, volvimos a la posada de la ciudad del castillo de Melromarc.

“Bien, ahora pueden dormir todo lo que quieran.” Les dije a Yuki y Kou.

“Motoyasu, ¿no vas a dormir?” Yuki dejó escapar un gran bostezo.

“Oh, ciertamente voy a dormir. Pero antes de eso, ¡pues yo digo que quiero tener el hilván hecho para su ropa!”

“En ese caso, ¿está bien si te vigilamos hasta que te duermas?” Preguntó Yuki.

“¡Por supuesto!”

Cuando empecé a coser la base de las telas, oí cómo Yuki y Kou respiraban profundamente y se quedaban dormidos. Kou empezó a roncar de nuevo.

Como también íbamos a cazar monstruos todos los días, todos estábamos agotados.

Coser no está tan mal si te acostumbras, pero paré un poco antes para descansar un poco.

Pero primero medí las telas con Yuki y Kou dormidos. ¡Sí! Encajan perfectamente.

Yo, Motoyasu Kitamura, puedo saber la talla de ropa de un hijo con un simple vistazo.

Mientras pensaba en asuntos tan importantes, me metí en la cama junto a Yuki y Kou y me dormí.

Esa noche, tuve un sueño increíble sobre mi reencuentro con Filo- tan.

Padre también me sonreía alegremente.

Pues yo digo que caminaría a través del agua, a través del fuego, a través del mismo infierno y volvería por ellos.

Padre y yo no habíamos planeado encontrarnos al día siguiente. Pero me di cuenta de que ahora era el momento en que Sakura adoptara su forma de ángel. ¿Estaría bien que los viera?

Bueno, no es como si Padre se fuera a enfadar conmigo o algo así. “Motoyasu, ¿qué vamos a hacer hoy?” Preguntó Yuki.

Ahora íbamos a cazar de noche. Se estaba volviendo estresante siempre tener que estar a escondidos.

Pero no podíamos permitirnos que nadie viera nuestra verdadera fuerza. Pronto también me aseguraría de acabar con Basura, el Cerdo Carmesí y el Sumo Sacerdote. No era mala idea asesinarlos sigilosamente como había hecho con el Humano Ahumado, pero eso podría causar todo tipo de diferencias extrañas en el bucle temporal. Necesitaba hacer algo para quemar mi estrés. ¿Pero qué?

¡Ajá! Conocía una manera infalible. “Vamos a la cima.” Les dije a Yuki y Kou. “¿Cuál cima?” Preguntó Kou.

“¿Vamos a escalar montañas o algo así?” Dijo Yuki.

Tanto Yuki como Kou ladeaban la cabeza confundidos. Técnicamente, Yuki estaba muy cerca de tener razón. Pero la cima a la que hacía referencia significaba algo totalmente distinto.

“Con ‘cima’ me refiero a cuando los filoliales corren hacia la cima de una montaña.” Expliqué.

“¡No puede ser!” Exclamó Kou. “¿Así que podemos correr tan rápido como queramos?”

“¡Por supuesto!”

Los ojos de Kou brillaban de emoción. Yuki, que valoraba el refinamiento, frunció el ceño y se inquietó como si Kou hubiera dicho algo impropio. Pero a todos los filoliales les encanta correr. ¡Es la forma perfecta de liberar estrés! Pues yo digo que además, es un ejercicio estupendo para tener un cuerpo sano.

Pero para mí, el alivio del estrés más dulce del mundo es simplemente montar a lomos de un filolial mientras corren montaña arriba.

“Si tenemos suerte, puede que también nos encontremos con algunos bandidos.” Dije. “Y si vienen persiguiéndonos para vengarse desde su escondite, podríamos conseguir un carruaje y matar dos pájaros de un tiro.”

“¿Los bandidos son deliciosos?” Preguntó Kou. “No puedes comer humanos, Kou.” Le recordé.

Al fin y al cabo, Padre nos lo había dicho. Yo personalmente no veía ningún problema en ello, ya que sus cadáveres acabarían siendo devorados por otras aves si nos limitábamos a dejarlos allí.

“La cola de Keel parecía tan, tan, taaaan deliciosa.” Dijo Kou. “Meneándose de un lado a otro, sólo quería engullirla.” Kou se bamboleaba de un lado a otro como si estuviera en trance. Hmm… así que Kou era un gran fan de las colas de perro.

Ahora que lo pensaba, Filo-tan también miraba siempre la cola de Aneki. Cuando Padre no estaba, Filo-tan dijo: “He estado pensando esto durante mucho tiempo, pero, Raphtalia, tu cola es tan redonda y sabrosa. ¿Puedo comérmela?” Aneki sonrió y le dijo: “Puedes comerte mi cola, pero sólo si a cambio le das tus plumas a Naofumi para que las use en su cocina.” Filo-tan respondió con un aullido de miedo, y ahí se acabó todo. Observé todo el intercambio con el corazón tan lleno como el de un novio que espera a su princesa prometida.

“Si te comes su cola, Padre no estará contento.” Le dije a Kou. “Aw, vaya.”

“¡Pues yo digo que hoy vamos a soltarnos!” Declaré, y Yuki y Kou vitorearon con alegría.

Oh Filo-tan, todavía no la estábamos buscando con ahínco. Pero ahora que había preparado la ropa, realmente no tenía mucho más que hacer y necesitaba desahogarme un poco. Casi todo lo que quedaba era encontrar más hierbas para Padre que pudiera usar para hacer su medicina.

Al día siguiente, después de que los filoliales disfrutaran de su carrera, partimos en busca de más hierbas para Padre. Conquistamos algunas mazmorras para adquirir las plantas selladas que había dentro y luego fuimos a reunirnos con Padre.

Bueno, aquí estoy en Riyute, pensé. Entonces, ¿dónde podría estar Padre?

Puede que esté ayudando a los aldeanos de alguna manera, al estilo típico de Padre. Así que recorrí el pueblo en su busca y me detuve en una posada que parecía un lugar donde Padre pasaría la noche. Y ahí es donde lo encontré.

“¡Oh, hola, Motoyasu! Qué oportuno. Ven aquí.”

Mientras caminaba hacia la posada, oí su voz por la ventanilla. “¿Qué puede ser?” Le pregunté.

“Hm, bueno, hemos tenido un problema. No quiero decirlo en voz alta, así que entra.” Me dijo Padre.

“¡Inmediatamente!” Declaré y entré corriendo a la habitación de Padre.

“Así que ayer, Keel, Sakura y yo estuvimos recorriendo la zona, ocupándonos de algunos monstruos y recogiendo hierbas. Luego, cuando volvimos aquí, pensé que Sakura se sentiría sola, así que conseguí una habitación para que nos quedáramos juntos.”

Mi corazón se estremeció. ¡Qué maravilloso destello de la amorosa compasión de Padre! Estaba convirtiendo a Sakura en una querida compañera, igual que en el último bucle.

“Pero es lo que pasó después lo que quiero contarte.” Continuó Padre. “La estaba vigilando de cerca porque me contaste que cambiaba de forma, ¿verdad?”

“Me disculpo profundamente por la interrupción, pero ¿es necesario que me expliques todo eso?” Pregunté. Por todo lo que había ocurrido en el pasado, era sólo cuestión de tiempo que Sakura cambiara a su forma de ángel. Entonces, ¿cuál era el problema?

“Sí, y eso es lo que ocurrió al final, pero no exactamente cómo estás pensando.” Dijo Padre.

No tenía ni idea de qué estaba hablando Padre.

“¡Oink oink!” Añadió Keel, pero, por desgracia, no pude entender ni una palabra de lo que dijo.

“Es un poco difícil de explicar.” Continuó Padre. “Quiero que veas la forma humana de Sakura por ti mismo.”

“¡Así que ya puede transformarse en ángel!” Exclamé.

“Espera, ¿es Yuki la que está detrás de ti?” Preguntó. “Quiero decir, me lo explicaste antes, pero… parece una niña pequeña, ¿verdad?”

“¿Una niña pequeña?” Le pregunté.

Eran más o menos del mismo tamaño y altura que Filo-tan. No veía ningún problema en ello. Más de la mitad de los filoliales en forma de ángel que había visto tenían más o menos esa misma altura. Pero por la forma en que hablaba Padre, me preguntaba si Sakura había salido diferente.

“Sakura, ¿puedes venir aquí?” Padre llamó. “¿Eh? ¿Qué pasa?”

Miré en dirección a la voz de Sakura.

Cuando la vi, me di cuenta de que tenía el mismo cabello rosa y le salían alas de la espalda… pero estaba en el cuerpo de un ángel de aspecto tranquilo que parecía tener unos 17 años.

Llevaba la misma ropa que los aldeanos locales.

¿Podría Padre haberle dicho que se volviera así?