Lord of Mysteries (NW)

Volumen 1

Capitulo 82: Herboristería

Varios colores surgieron como auras y entraron en los ojos de Klein. Estudió casualmente la condición de Sir Deweyville.

Está muy sano; casi no hay problemas ocultos… Su estado emocional es horrible. En medio de la pesadez, hay fragilidad… ¿Su estado mental es frágil? ¿Tiene problemas para dormir bien? Pero el aura púrpura de su cabeza está completamente bien… Klein murmuró en silencio para sí mismo mientras Sir Deweyville se alejaba y salía de la biblioteca.

Retractando su mirada, Klein se pellizcó la frente y suspiró para sus adentros.

Ser un magnate seguro que no es fácil…

No le prestó mucha atención al asunto y volvió su mirada a los ejemplares del diario frente a él.

Klein no encontró muchas pistas después de leer cada una de ellas. Solo pudo confirmar algunas cosas.

En primer lugar, existió un antiguo reino en la cordillera de Hornacis, así como en sus alrededores. La historia del antiguo reino se remonta a por lo menos 1500 años. En segundo lugar, su estilo arquitectónico consistía principalmente en ser imponente con el uso de grandes rocas talladas. Dejaron todo tipo de murales y de esos murales, se puede deducir que creían que La Noche Eterna protegería a los seres queridos de los difuntos. Finalmente, en las ruinas, había símbolos que representaban a La Noche Eterna en todas partes, pero eran claramente diferentes del Emblema Sagrado de la Diosa de la Noche Eterna.

“Si tuviera una oportunidad, no, incluso si me pagaran, ¡nunca iría allí!” Klein murmuró con los dientes apretados. Juró no cortejar a la muerte.

Después de ordenar los artículos de la revista y devolverlos a su lugar original, se puso el sombrero, levantó el bastón y salió de la biblioteca de Deweyville.

***

Club de Adivinación.

Bogda miró a la bella dama a cargo de recibir invitados y dijo: “Me gustaría tener una adivinación”.

Angélica sonrió cortésmente y dijo: “¿Tienes un adivino preferido? ¿O le gustaría hojear nuestra guía y elegir al que sea más adecuado para usted?

Bogda presionó el lado derecho de su abdomen y jadeó en silencio mientras decía: “Deseo que el Sr. Klein Moretti haga una adivinación para mí”.

“Pero el señor Moretti no está hoy”, respondió Angélica con incertidumbre.

Bogda se quedó en silencio por un momento mientras caminaba unos pasos y preguntó: “¿Cuándo estará disponible el Sr. Moretti?”

“Nadie sabe. Él tiene sus propios asuntos que tratar. Por lo que he visto, suele venir aquí los lunes por la tarde”, dijo Angélica mientras reflexionaba sobre el asunto.

“Bien.” El rostro de Bogda se oscureció y se dio la vuelta, planeando irse.

“Señor, también puede elegir a otros adivinos. Por ejemplo, puede elegir al Sr. Hanass Vincent, que es famoso en la ciudad de Tingen”, Angélica hizo todo lo posible para evitar la pérdida de un cliente.

Bogda se detuvo en seco y lo consideró por un momento antes de decir: “No, solo confío en el Sr. Moretti. Bueno, ¿puedo esperar aquí un momento? Tal vez podría venir después de que haya terminado con sus asuntos.”

“No hay problema”, dijo Angélica con una cálida sonrisa.

Bogda fue al sofá y se sentó. A veces acariciaba su bastón; en otras ocasiones miraba por la ventana, claramente luciendo bastante impaciente.

Los segundos se convirtieron en minutos. Justo cuando la mente de Bogda estaba hecha un lío, sin saber si debía continuar esperando o irse, escuchó a la bella dama exclamar con agradable sorpresa: “¡Buenas tardes, Sr. Moretti!”

Klein vio a la familiar Angélica y estuvo a punto de preguntar por qué siempre estaba ella de turno. ¿No necesitaba descansar o tomarse algún día libre?

Sin embargo, inmediatamente tomó en consideración que era un vidente, por lo que no era apropiado que hiciera tales preguntas. En cambio, tuvo que usar el tono de un charlatán y decir algo como: “Qué maravilla que el destino nos obligue a encontrarnos una vez más, señorita Angélica”.

Uh, ¿eso sonaría como si estuviera coqueteando con ella? La mente de Klein dio vueltas cuando finalmente respondió con una sonrisa: “Buenas tardes, señorita Angélica”.

“Un cliente desea contratarlo para una adivinación”. Angélica señaló a Bogda, que se había levantado apresuradamente del sofá.

¿Alguien realmente solicitó por mí? Klein se quitó la mitad del sombrero de copa con agradable sorpresa, tocando su frente dos veces mientras lo hacía.

“Buenas tardes, señor…” Miró hacia arriba cuando su voz de repente se detuvo.

En su Visión Espiritual, vio que el hígado del solicitante era oscuro. Era casi de color negro. Estaba desequilibrando el resto de su cuerpo, ya que su aura era delgada en varios lugares.

Klein deliberó sobre sus palabras y dijo con una expresión seria: “Señor, debería ver a un médico en lugar de buscar una adivinación”.

Bogda se quedó atónito en el lugar cuando inmediatamente dio una agradable mirada de sorpresa mientras murmuraba: “Qué fascinante…”

“Anna no me estaba mintiendo…”

…

Rápidamente miró a Klein con seriedad.

“Señor Moretti, ya he visto a un médico y tendría que someterme a una cirugía. Sin embargo, tengo miedo de la cirugía. Me gustaría adivinar el resultado.

La cirugía de esta era está realmente llena de peligros… Aunque el Emperador Roselle le dió un impulso, esta era aún carece de la mayor parte de la tecnología necesaria…  Klein no rechazó su pedido y asintió levemente.

“Mi tarifa de adivinación es de ocho peniques. ¿Eso está bien?”

“¿Ocho peniques?” Bogda exclamó sorprendido. “¿Solo está cobrando ocho peniques?”

“De acuerdo con la descripción de Anna y la actuación que acaba de mostrarme el Sr. Moretti, ¡estoy dispuesto a pagar al menos una libra!”

¿No ha oído hablar de a pequeños márgenes, gran volumen de ganancias? Klein se sintió avergonzado por un momento. Después de pensar durante unos segundos, sonrió con calma y respondió: “Es suficiente con ser bendecido con la capacidad de recibir revelaciones de lo divino y vislumbrar el destino. Por lo tanto, debo mantener mi humildad y suprimir la codicia. Solo al hacerlo, puedo continuar haciendo uso de mi don”.

(Mr Insomne: Que humildad el Klein :,))

“Es usted un verdadero vidente”. Bogda sostuvo su pecho e hizo una reverencia, su tono lleno de sinceridad.

Al recibir los elogios y la confianza de Bogda, la espiritualidad de Klein pareció moverse, como buscando encajar. En cuanto a la descripción de sus ‘principios’, también le dio una nueva perspectiva.

“Señorita Angélica, ¿está disponible Topacio?” Se volvió hacia la hermosa dama que estaba a su lado.

Angélica dejó escapar un suspiro de alivio por Bogda mientras sonreía dulcemente.

“Sí.”

Después de entrar en la sala de adivinación, Klein le indicó a Bogda que cerrara la puerta. Luego, se sentó detrás de la mesa y se tocó la frente.

“¿Usamos las cartas del tarot para la adivinación?” preguntó con una sonrisa.

La radiestesia espiritual sólo era adecuada para determinar asuntos relacionados con él. En cuanto a dibujar un astrolabio, requería demasiado tiempo.

“Se lo dejo a usted”. Bogda no tuvo objeciones.

Por lo tanto, Klein barajó y cortó el mazo antes de colocarlos en una formación Intis.

Gracias a su singularidad como Vidente, Klein no volteó las otras cartas. En cambio, volteó directamente la carta que indicaba el resultado final.

“Una rueda de la fortuna invertida. Las cosas se desarrollarán mal”. dijo solemnemente mientras lanzaba una mirada.

El color en el rostro de Bogda desapareció instantáneamente y sus labios temblaron.

“¿Es inútil?”

Klein hizo todo lo posible por pensar en una solución y dijo: “Déjeme probar un método de adivinación diferente. Por favor, deje su anillo atrás. A continuación, escriba su fecha de nacimiento en esta hoja de papel. Entonces, espere afuera en silencio”.

Influenciado por su tono suave y reconfortante, Bogda se calmó y siguió las instrucciones escribiendo la información y dejando su anillo.

Mientras observaba a Bogda irse, Klein escribió una oración en el papel.

“Resultado de la cirugía de Bogda Jones”.

Recogió el anillo y la hoja de papel y se recostó en su asiento antes de usar la adivinación de sueños.

Se encontró gradualmente en un mundo borroso y distorsionado, solo para ver al caballero colapsar con una expresión cenicienta. Estaba cubierto con una tela blanca cuando lo empujaron fuera de la sala de operaciones.

Esta vez, Klein no encontró nada extraño. Ya no sentía la sensación de ser observado, por lo que rápidamente se despertó. Frunció el ceño con fuerza mientras consideraba cómo iba a informar a Bogda sobre el resultado.

La cirugía puede muy bien conducir a la muerte… Puedo probar la magia ritual restauradora que aprendí hoy… pero eso expondría el asunto de los Beyonders. Además, primero tengo que solicitar la aprobación del Capitán… Sí, y es posible que no pueda tratar una enfermedad tan grave…  Klein estaba devanándose los sesos cuando de repente pensó en algo.

La enfermedad pulmonar del Sr. Glacis fue tratada por un boticario. Dijo que la medicina era increíblemente milagrosa… ¿Cuál era? Correcto, Lawson Darkwade, el número 18 de la calle Vlad en el Distrito Este. Tienda de Hierbas Populares de Lawson’s “. Mientras se esforzaba por recordar la dirección de entonces, Klein organizó rápidamente los detalles.

Golpeó la esquina de la mesa y tomó una decisión.

Después de usar la radiestesia espiritual para determinar rápidamente si era una buena o mala idea, Klein salió por la puerta. Vio a Bogda nervioso, le devolvió el anillo y dijo cálidamente con una sonrisa: “Encontré esperanza para usted”.

“¿En realidad?” Bogda preguntó, gratamente sorprendido.

Klein no le respondió mientras continuaba hablando.

“Su esperanza está en el distrito Este, en la calle Vlad. Está relacionado con el término Lawson”.

“Si no lo encuentra, vuelva aquí el lunes a las cuatro de la tarde”.

“Bueno. Bueno.” Bogda asintió mientras repetía. Con entusiasmo sacó su billetera y sacó cinco peniques y tres peniques.

Lo había hecho de acuerdo con lo que había dicho Klein, sin usar grandes sumas para corromper a un verdadero vidente.

Las comisuras de los labios de Klein temblaron ligeramente cuando recibió el dinero, pero luego sonrió brillantemente.

“Espero que encuentre esperanza lo antes posible”.

Después de que Bogda se fue, entregó la comisión como la vez anterior y también le dio propina a Angelica, fingiendo que le habían pagado un soli.

…

Distrito Este. Calle Vlad.

Bogda caminó de un extremo a otro de la calle, repitiéndolo tres veces hasta que le empezó a doler el hígado.

Finalmente, determinó que solo había un lugar que tenía algo que ver con Lawson en la calle. Era la Tienda de Hierbas Populares de Lawson, en el número 18 de la calle.

Haciendo acopio de valor, entró y percibió el olor de varias hierbas. Vio que el dueño de la tienda tenía el pelo negro pero muy corto. Su rostro era redondo y parecía tener entre treinta y cuarenta años.

El atuendo formal del dueño se parecía al de un brujo de pueblo. Era una túnica negra profunda bordada con todo tipo de símbolos extraños.

“Hola, ¿tienen algún medicamento que pueda tratar mi enfermedad?” Preguntó Bogda cortésmente.

El jefe levantó la cabeza y recorrió con sus profundos ojos azules a Bogda y sonrió.

“Su enfermedad del hígado es muy grave, pero la premisa de todo es si tiene el dinero. ¿Tiene suficiente para pagar la medicina?

¿Él puede decirlo? Bogda de repente se sintió mucho más seguro mientras asentía frenéticamente.

“¿Cuánto cuesta su medicina?”

“Diez libras. Es un precio muy justo.” El dueño sacó una bolsa de hierbas de debajo del mostrador y dijo: “Agregue suficiente agua y hiérvala junto con la medicina. Después de hervirla, agregue diez gotas de sangre fresca de gallo, luego bébalo inmediatamente. Esta bolsa de hierbas tiene tres dosis. Hágalo una vez al día y estará bien”.

Mientras hablaba, abrió el papel de color marrón amarillento y arrojó todo tipo de hierbas extrañas.

Suena extremadamente sombrío...  Bogda tragó saliva y dijo: “¿Eso es todo?”

El sujeto lo miró fijamente e inmediatamente sonrió.

“¿Todavía desea algo más? ¿Qué opina de esta bolsa? Una vez que se recupere de su enfermedad hepática, puedo garantizarle que su esposa estará muy satisfecha”.

Se rió entre dientes mientras sacaba una bolsa de hierbas de color negro y reprimía la voz.

“Hay polvo de momia adentro… Confíe en mí, muchos aristócratas consumen estas cosas. Lo ponen en su té o lo hierven con la sopa”.

… La confianza de Bogda en el jefe vaciló hasta el punto de sentirse disgustado.

Creo en el Sr. Moretti…  Respiró hondo, buscó en su billetera y sacó los dos billetes más grandes de lo poco que quedaba de sus libras de oro.