Shuumatsu Nani Shitemasu ka？(NL)

Volumen 5

Capítulo 4: En Este Mundo Crepuscular, Incluso Ahora

Parte 1

Las hadas de Collinadiluche

Después de ser tocada y tocada por todo su cuerpo, Aiseia entonces tenía una luz brillante contra sus ojos para comprobar su movimiento, se vio obligada a beber la medicina para los propósitos de la prueba y contestar preguntas sobre su estado de ánimo, y, aunque una pequeña cantidad, tenía su sangre dibujada.

“Uhhh, teniendo mi cuerpo jugando con esto, ya no puedo casarme…” Usando sólo un vestido sobre su piel desnuda, Aiseia se sentó en la cama del paciente. De todos modos, la inspección ha terminado, ¿verdad?

Ninguna respuesta. El médico de Kikuroppe hizo una cara preocupada mientras miraba sus expedientes médicos. Como regla general, leer las expresiones de otras razas con diferentes estructuras faciales no era una tarea fácil, pero, todavía, había momentos en que el mensaje se cruzaba.

“… realmente te empujaste”, dijo el doctor débilmente, como si luchando por hablar.

“Ahaha, bueno, mi obstinación es la única cosa en la que siempre confío.” Aiseia se encogió de hombros con su risa habitual cuando se abrochó el vestido.

“Tu fuerza vital se ha marchitado. Tu cuerpo está olvidando lo que significa vivir. Si recibe una herida, lo más probable es que no se cure. La fuerza agotada al encender Veneno nunca volverá.”

“Mhm, tuve la sensación de que era el caso.” Ella respondió al tono serio del Kikuroppe con la voz más alegre que podía manejar.

“La próxima vez que estés en el campo de batalla, no sé si podrás volver a casa”.

“Supongo que sí. Bueno, finalmente es mi turno, ¿eh? “. Aislada en la cama del paciente, Aiseia balanceó los pies de un lado a otro. “Para ser honesta, viviendo tanto tiempo, mi mente ha sido la que está sufriendo últimamente. Los que quiero vivir siguen muriendo, y mientras tanto sigo viviendo esta vida sin sentido”.

“No hay tal cosa como la vida sin sentido.”

“-Ah… cierto, ni siquiera somos la vida.”

“Eso no es lo que quise decir.”

“-¿No sería mejor decirlo así? No es bueno simpatizar con una herramienta desechable”.

“Es verdad que muchas personas piensan de esa manera, pero son todas las personas que no te conocen directamente, gente que ni siquiera se les dice que las hadas tienen personalidades individuales. No pensamos en ustedes como desechables”

“Si los médicos no nos mandan a nuestras muertes, Regul Aire no puede ser protegido.” Aiseia cortó las palabras del Kikuroppe a medio camino. “Es por eso que no somos reconocidas. Por eso somos tratadas como armas sin derechos. Es necesario, porque todo el mundo necesita ser capaz de usar y disponer de nosotras sin vacilación, ¿verdad?”

“Sí,” dijo el doctor con una voz amarga con un suspiro pesado. “Lo reconoceré mucho. Pero lo que pensamos individualmente es nuestra propia elección”.

“Si hay demasiados adultos que nos estropean, podríamos empezar diciendo ‘No quiero morir así que no voy a pelear’, ¿ya sabes?”

“… supongo.” El único ojo del Kikuroppe se volvió.

“Hm. Estás actuando un poco sospechoso. ¿Estás escondiendo algo?”

“Bueno, no es nada importante, pero… si, sólo hipotéticamente, ustedes tal vez no tuvieran que pelear más, quizás podrían seguir viviendo, ¿qué querrían?”

“Ah, una pregunta muy repentina.” Aiseia pensó por un momento. “Si esto es sólo hipotético, entonces, supongo que casi lo que he estado haciendo todo este tiempo.”

“¿Todo este tiempo?”

“Pasar todos los días en el almacén en el bosque. Los pequeños jugando ruidosamente, nuestra figura infantil de la madre que corría alrededor… mirando todo eso mientras me relajaba con un libro. Es tan libre de estrés, mi vida se mantiene cada vez más tiempo. “

“… ja, ya veo. Sí, ya veo.” El Kikuroppe asintió repetidamente. “Como yo pensaba, debías vivir una larga vida” dijo, venciendo todo el propósito de su conversación

================ Cambio de escena ==================

El ajuste del cuerpo de Lakish terminó. Los buenos números que indicaban su impresionante habilidad natural le valieron elogios de los médicos. Y con cada elogio, el humor de Naigrat se hundía cada vez más profundo. Después de todo, ¿cómo podría una chica ser feliz después de escuchar elogios de su alta funcionalidad como una hoja o una bomba? Si Lakish tuviera talento, entonces sería mejor que la oportunidad de usar ese talento nunca llegara. Naigrat esperaba que no lo hiciera. ¡Mantente alejado!

“Ooohh!”

“Ahh…”.

Tiat y Lakish lanzaron suspiros sincronizados de admiración.

El Mercado de la Cebada, una de las principales atracciones turísticas de Collinadiluche. Originalmente, era, como su nombre indica, un mercado mayorista que sólo se ocupaba de la cebada. Una vez que otro mercado fue construido cerca del districto del puerto, perdió su papel y se convirtió en apenas una plaza popular. Varios artistas que exhibían sus talentos salpican el amplio espacio abierto. Un payaso de Ballman hacía malabarismos con innumerables cuchillos, un mago de Frogger respiraba una fina columna de fuego, y un grupo que llevaba máscaras a juego llenaba el aire de música viva.

“Wow, wow, wow!” La curiosidad de un niño, una vez desencadenado, no conoce límites. Tiat corrió de esta manera y de una multitud a la siguiente. Tiró de Lakish, que dejó escapar los gritos mientras se iban.

“H-Hey, no corras tan rápido! ¡No olviden que ustedes están siendo vigiladas!” Debido a los procedimientos formales para manejar armas en la Guardia Alada, cuando los Leprechaun salieron, requirieron un oficial acompañante por lo menos. El desgraciado cuarto oficial que se quedó con el trabajo persiguió a los dos mientras gritaba después de ellos impotente.

Naigrat observó con sentimientos encontrados. “… habría sido agradable si realmente vinimos aquí sólo para hacer turismo”.”

Sabía que era un deseo desesperado. Las chicas estaban aquí para prepararse para la batalla, una batalla en la que no deberían haber tenido que participar. Pero sólo por eso se permitió un poco de turismo, una petición egoísta que normalmente nunca habría pasado.

Hablando de egoísta, Estaba Nephren, que, como Naigrat la vio antes, no estaba muerta después de todo. Sin embargo, tampoco estaba bien. Después de haber pasado por una transformación en un significado diferente al de Kutori, Nephren nunca más volvería al almacén de hadas. Naigrat se sentía sola, pero no triste. El mundo es un lugar grande, y el cielo es una parte estrecha de él. Ser capaz de creer que Nephren estaba en algún lugar haciendo bien dio suficiente comodidad Naigrat. Para aquellos que ya habían fallecido, sin embargo, ella ni siquiera podía desear eso.

“¡Eh, Naigrat, así por aquí! ¡Están teniendo una competición de la lucha del brazo! ¿Quieres entrar con este tipo!? “

Mirando hacia arriba, Naigrat vio a Tiat agitando su mano con entusiasmo, el cuarto oficial manejando una sonrisa confusa aun enrollando sus mangas, y Lakish inclinándose en disculpa. Tan alegre, sin la menor pista de lo que pasa por mi cabeza… eso es muy bueno.

“… bien, pero…” Naigrat agitó su mano a cambio. “¡Si entro, la competencia terminará de inmediato!”, Dijo, luego corrió hacia donde estaban los niños.

================ Cambio de escena ==================

Para todas las cosas, siempre intenta preguntar. Al preguntarle si podía entrar en la Gran Biblioteca Central con la expectativa de recibir un “no”, Lantolq en su lugar obtuvo una firma “bien” de la hija del alcalde, Firacolulivia … o Firu, como ella prefería ser llamada. Luego, antes de que transcurriera medio día, Lantolq obtuvo permiso para entrar.

Esto le dio a Lantolq, quien le preguntó, una sorpresa. Después de todo, eran hadas sin derechos. Por otra parte, la Gran Biblioteca Central de Collinadiluche fue uno de los principales lugares donde se reunió la sabiduría de todos los Regul Aire. La enorme diferencia en el calibre hizo que Lantolq se sintiera como si algún castigo fuera derribado sobre ella sólo por estar cerca de la biblioteca.

La tarjeta de permiso de entrada, entregada a ella en un sobre, también parecía un arma peligrosa. Debajo de muchos sellos imponentes estaban las misteriosas palabras ‘El titular tiene permiso para ver hasta el archivo secreto B-47’. “¿Qué diablos es B-47? ¿Tiene el tipo de secretos donde si usted sabe que tiene que ser eliminado?”

“… también piensas en cosas imprudentes,” Lan murmuró Aiseia, sosteniendo la misma tarjeta de permiso de entrada.

“Por favor, no lo señale. Ya estoy muy consciente, y me está aplastando.”

“¡Bueno, vamos! ¡Puedo no ser muy útil, pero te ayudaré con tu investigación lo mejor de mi capacidad!” Firu, alentándose por sí misma, caminaba con fuertes pasos. “No puedo ser de ninguna ayuda en tu batalla original. Incluso tratar sería un insulto a la determinación de las hadas. Así que por las cosas que puedo hacer, haré lo que pueda!” Una llama roja ardía en sus ojos.

“Cuando se enciende así, se pone muy molesta…” Aiseia comentó.

“¿Ha sucedido esto antes?”

“El técnico metió las cosas un poco…”

“¿Ese tipo otra vez? ¿Por qué todos revelan su lado molesto cuando se trata de él?”

================ Cambio de escena ==================

Hablaban de innumerables libros. Lantolq pensó que su cabeza se herviría. Le gustaba leer libros. Ella también no odiaba pensar. Pero todas las cosas tienen un límite. Después de haber sido llena de información más allá de su capacidad, su cabeza se sentía muy febril.

“¿Deberíamos salir un poco a descansar y organizar nuestras notas?”, Sugirió.

“Hmm, creo que voy a seguir con este libro por un poco más. Puedes ir primero”, respondió Aiseia.

“Voy a ayudar a Aiseia, así que adelante. Ah, hay una buena cafetería de pudín detrás de esta biblioteca, ¿qué tal si esperas allí y luego nos encontraremos?”, Dijo Firu.

Son más duros de lo que parecen. “No, probablemente no deberíamos separarnos. Ya que somos hadas después de todo,” dijo Lantolq, luego miró al hombre de uniforme militar que estaba parado junto a ellos.

“El Primer Oficial me dijo que le permitiera actuar libremente tanto como fuera posible. Pero no vayas demasiado lejos.”

Inesperadamente, les dio permiso. Lantolq tenía dudas sobre si estaba o no bien, pero, si decía que estaba bien, no iba a discutir.

“… Ya veo. Pues bien, yo también podría hacerlo” dijo ella, con el cuaderno en la mano.

================ Cambio de escena ==================

Encontró el café que Firu mencionó con bastante rapidez. Quizás porque estaba ubicado en la calle principal, no había muchos clientes presentes. Sin embargo, al parecer, casi todos aquellos clientes no eran turistas, pero los lugareños, lo que significa que el café era lo suficientemente bueno para atraer clientes habituales.

Después de tomar un asiento en una terraza al aire libre, Lantolq escogió un té de leche y tarta de manzana del menú lleno de deliciosas opciones. A continuación, abrió su cuaderno y volvió a mirar algunas de las cosas que copió de varios libros.

“Hmmm”

¿Qué son incluso Leprechauns en el primer lugar? ¿Por qué existen? ¿De dónde vienen y hacia dónde van? Esas fueron las preguntas que Aiseia levantó un día en el almacén de hadas. La lista dio la impresión de los problemas de un adolescente pubescente. Y, por desgracia, eran precisamente adolescentes pubescentes. Los niños de otras razas probablemente buscarían respuestas a estas preguntas en libros de filosofía o ficción, pero estaban investigando los libros de investigación sobre necromancia y los más avanzados disponibles en Regul Aire.

“Realmente somos cosas sospechosas, ¿no somos…?” murmuró Lantolq, luego recordó que estaba sola.

Desde que habían estado juntos durante tanto tiempo, ella siempre tenía la sensación de que Noft estaba justo a su lado. Noft no pensaba demasiado en las cosas y en general no era exactamente la más brillante, pero era buena en escuchar. Noft podía sacar palabras de Lantolq incluso cuando estaba profundamente en sus pensamientos. Como resultado, Lantolq tomó el hábito de hablar consigo misma. Bueno, esto no es bueno, pensó. Ella tenía el objetivo de ser una mujer independiente con todo junto, pero no parecía ir demasiado bien.

“No parece estar llegando a ninguna parte, no importa lo que haga…”

Lantolq tomó un bocado del pastel de manzana crujiente. Delicioso. Justo entonces, sopló un viento fuerte. Sacó unas pocas páginas de notas de la mano de Lantolq y las llevó al cielo.

“Ah”

Ella se estiró en un pánico, pero no pudo llegar a tiempo. En el momento en que se puso de pie para tratar de estirar aún más, otra ráfaga de viento envió sus notas restantes volando.

“A – Ahh!!”

Lantolq, profundamente arrepentida de su descuido, miró asombrado al cielo. Enciende veneno con prisa y perseguirlos No, no lo haré a tiempo. ¿Correr y perseguirlos? No, no podré atraparlos, y siento que voy a desordenar algo más. Qué hacer… ¿qué puedo hacer? Mientras dudaba, el tiempo continuaba fluyendo, y sus notas subían más y más y…

“¿Huh?”

¿No es más alto? Como si una instantánea del tiempo estuviera congelada, todos los papeles de repente dejaron de moverse.

“Qué…”

Después de una breve pausa, las notas comenzaron a moverse de nuevo. Sin embargo, esta vez, ignoraron el viento y, como si estuvieran enredados, se reunieron en manos de un hombre parado en la calle, un anciano de rostro imponente que llevaba un manto blanco bastante conspicuo.

“¡A-¡Ah !? ¿¡Tú!?”

“¡Oh, la chica del otro día! ¡Qué casualidad!” No parecía particularmente sorprendido, el anciano de la calle empezó a abrirse camino, el paquete de hojas en la mano. “¿Estudiar duro, incluso en un lugar como este? Muy bien, muy bien. Las cosas que aprende mientras son jóvenes se convertirán en sus armas en el futuro. Por supuesto, también debes aprender a usarlas o, de lo contrario, carece de sentido… ¿Eh?” El viejo miró el paquete de notas y frunció el ceño.

“Gracias. Son notas muy importantes”, respondió Lantolq.

“Hm, ¿necromancia avanzada? Un tema bastante extraño para que un estudiante elija para un proyecto de investigación”.

“Bueno, yo no soy un estudiante, y no estoy haciendo nada tan noble como estudiar. Tampoco estoy tratando de prepararme para el futuro. Sólo quiero saber algo ahora.”

El viejo entregó las notas. “… Ya veo. Su color de pelo. Tú también eres un Leprechaun.”

“Sí.”

Por un momento, varias emociones giraron en la cabeza de Lantolq. Los que conocían a los Leprechauns no necesariamente tenían una muy buena impresión de ellos. Se preparó, temiendo por qué expresión cruzaría la cara del viejo.

“Oh, entonces la otra joven debió de ser tu jefe. Mis disculpas. Una vez decidí no verlos nunca en persona, pero ahora acabé encontrándolos y hasta intercambiando conversación.”

¿Qué podría significar esto? El rostro del anciano se retorció de dolor tan ligeramente, pero seguramente. Ni el odio ni la discriminación, sino más bien la culpa se filtraba de esa expresión.

“Um, ¿estás bien?” Lantolq pensó que era una pregunta tonta. Si el hombre no estaba bien, era muy claramente su propia culpa. No estaba en condiciones de ponerse una cara agradable y actuar preocupada.

“… jaja. ¿Estás preocupada por mí? Eres una chica amable.”

“Uh…”

Por alguna razón, la felicitó. Bueno, desde que se conocieron por primera vez, Lantolq tuvo la sensación de que no estaban realmente en la misma página durante sus conversaciones. Era una especie de sentimiento frustrante, como si algunos engranajes importantes no coincidieran pero seguían girando.

“Supongo que no hay una reunión a alguien que ya has conocido. Las coincidencias son coincidencias. Si usted los toma como buena o mala suerte depende solamente de cómo usted maneja la situación. “

“Uh…”

¿Qué está diciendo este tipo? Frente a un Lantolq desconcertado, el anciano sacó una silla y se sentó frente a ella. Su gran marco parecía un poco extraño en la pequeña cafetería.

“Hay algo que quieres saber sobre necromancia, ¿no? Intenta preguntarme. Contestaré.”

“-Ah, lo que estamos tratando de investigar es un poco difícil…”

“Lo supuse. No me importa, así que pregunta.”

No se dará por vencido. Anteriormente, el anciano echó un vistazo a las notas de Lantolq y entendió que eran sobre necromancia. De eso, ella adivinó que él era bastante conocedor. Sin embargo, lo que querían saber definitivamente no era algo que cualquier viejo sabio sabría.

“… ¿qué son Leprechauns?” Lantolq trató de preguntar de todos modos, dudando que pudiera responder.

“Ya veo. Estás llegando al punto. Muy bien, muy bien.” El viejo asintió felizmente por alguna razón. “Ahora bien, por donde empiezo” pensó por un momento. “Hace mucho tiempo, los Visitadores ordenaron al Poteau crear a los Emnetwyte”.

“¿Eh?” Esto no tiene nada que ver con mi pregunta, pensó Lantolq.

No prestando atención a su aparente confusión, continuó el anciano. “No los crearon de la nada. Prepararon materiales de base y los modificaron. Había aproximadamente dos tipos de estos materiales básicos. Uno consistía en la única vida que existía en el planeta antes de la llegada de los Visitantes, las “Primordiales”. El otro consistía en las almas de los propios visitantes, cansados de vivir una vida de vagabundeo sin fin. En cuanto al método de modificación… “

El anciano señaló el pastel de manzana medio comido en el plato de Lantolq. “Era lo mismo. Envolvió a las “Primordiales” con sus almas, que rompieron en fragmentos. Las almas sobresalieron por la fuerza la carne de las Bestias, lanzando una gran maldición sobre ellas. Lo que antes eran «bestias» transformadas en seres enteramente diferentes con figuras parecidas a las de los visitantes, es decir, a los Emnetwyte ».

“Uh… um, ehh?”

No coincidía con el comúnmente aceptado mito de la creación mundial. La gran escala de todo lo confundió Lantolq. Y, en primer lugar, todavía no respondió a su pregunta. Ni siquiera sabía por dónde empezar. Sin embargo, había una parte que llamó su atención: los visitantes utilizaron las “bestias primordiales” para crear a los Emnetwyte.

“Pero, bueno, después de eso, los Emnetwyte crecieron demasiado. El número de tartas aumentó, pero, por desgracia, la cantidad de corteza no. La corteza, las almas de los Visitantes, nunca aumentaron más allá de la cantidad original presente cuando fueron destrozadas. Así, con cada día que pasaba, la corteza se hacía cada vez más delgada.”

“… ¿podría ser eso lo que se quiere decir con ‘las bestias fueron liberadas desde dentro’…?” Esa fue una hipótesis que Lantolq llegó el otro día a la tierra. Sin embargo, ese pensamiento provenía de un viejo libro que acababa de encontrar. ¿Por qué estaba el anciano, que no tenía la oportunidad de leer el mismo libro, diciendo algo similar?

“Si muy bien. ¿Ya has descubierto eso?” Impresionado, el viejo miró las notas sobre la mesa. “Las “bestias primordiales” eran originalmente seres eternos e indestructibles. Al ser sellado dentro de la Emnetwyte mortal, cambiaron. Lamentar. Esperanza. Estropeado Justicia. Amabilidad. Miedo. Desinterés. Ignorancia. Arrastrados por todas esas cosas que llevan a los seres humanos a la muerte, se convirtieron en seres que representaban diecisiete tipos de muerte.”

“Si esas cosas fueran liberadas, los Emnetwyte se extinguirían. Los humanos, dándose cuenta de eso, pensaron en un plan. Afortunadamente, en ese momento, los Visitantes seguían permaneciendo, aunque sólo dos de ellos.”

Los visitantes. Incluso ahora que la leyenda se transmite, cómo, hace poco más de quinientos años, los Emnetwyte Braves mataron al último Visitante.

“Ellos querían usar esas almas para crear una nueva corteza de pastel. Sin embargo, falló. No podían recrear lo que el Poteau hizo con la tecnología humana. El alma del Visitante no se rompió de manera limpia y terminó en un desorden de incontables trozos dispersos. Sin ninguna manera de cocinar todo el nuevo pastel, el final llegó como se esperaba.”

“… um.” Titubeantemente, Lantolq levantó su mano. “Esa fue una historia muy interesante, pero sólo explicó lo que son los Emnetwyte, ¿verdad? Le pregunté por los Leprechauns.”

“Por supuesto, yo también respondí.”

Argh, realmente no estamos en la misma página. Sin embargo, incluso si no estaban en la misma página, todavía estaban teniendo una conversación adecuada. Todo lo que Lantolq necesitaba hacer era descifrar sus palabras como si estuviera leyendo un viejo libro difícil. Si lo hacía, seguramente lo entendería. Con eso en mente, pensó en su historia.

“… podría ser…” Entonces, Lantolq se dio cuenta. El alma del último visitante no se rompió suavemente. El nuevo pastel seguía sin cocer, y los ingredientes, los fragmentos del alma, permanecían dispersos. “La próxima generación de Emnetwyte fallida que los Emnetwyte no pudo completar. ¿Esa es nuestra verdadera naturaleza?”

“Hm. Su comprensión no está equivocada.” El anciano asintió. “Sin embargo, yo no diría que “falló”. Bueno, la interpretación depende de la persona. Puedes tomarlo de manera optimista o pesimista”.

Antes de eso, había algo más importante. Si lo que dijo gramps realmente era verdad, entonces eso respondió a muchos misterios que habían permanecido sin resolver en Regul Aire durante siglos. Eso no podía estar bien, pero Lantolq de alguna manera se sentía como si fuera.

“¿Por qué lo sabes?”

“He vivido una vida algo larga”, respondió el anciano encogiéndose de hombros.

“Si lo que dijiste es verdad, no se sabe en absoluto en este mundo. ¿Por qué le dirías algo así a alguien como yo?”

“Les debo algo a las chicas”. Sonrió con un ligero toque de tristeza. “No puedo disculparme ni aceptar nada. Tampoco estaría capacitado para hacerlo. Pero al menos puedo hacer esto. De todas maneras, no es más que un hombre cobarde y egoísta que se consuela a sí mismo”. El se levantó “Dudo que nos encontremos de nuevo, pero este fue un tiempo valioso.”

“Ah”

Tratando de impedir que el anciano se fuera, Lantolq se levantó a toda prisa, pero en ese momento, una ráfaga de viento sopló. Preocupada porque sus notas volaran otra vez, ella entró en pánico y cerró el cuaderno. Cuando volvió a levantar la vista, el anciano no estaba a la vista.

================ Cambio de escena ==================

“Estoy agotada.” Como una estudiante en el camino a casa de la escuela, Aiseia caminó con los ojos girando de exceso de trabajo. Firu, su condición ilegible debajo de su piel de Lucantrobos, seguía detrás. “¿Qué pasó, Lan? “

“… ¿qué somos? ¿Por qué existimos? ¿De dónde venimos y hacia dónde vamos? “

“-¿Laan?”

“En realidad recibiendo la respuesta, pero se siente… inesperadamente vacío…”

“¿Laan? ¿Hola? Lantolq?” Aiseia agitó sus manos de un lado a otro delante de la cara de Lantolq.

El tenedor sentado en el plato de la mitad comido pastel de manzana tintineo ligeramente.

***

El Brave y El Visitante

De repente, Elq cayó. Mientras estaban limpiando la habitación de un huésped, ella simplemente se desplomó al suelo, como una marioneta que se queda sin cuerda

“¿¡Estás bien!?”

Willem se apresuró a abrazarla. Estaba fría al tacto. Apenas respirando. Ella es como un cadáver, pensó, y luego se dio cuenta de que en realidad era un cadáver, sólo uno que se movía como si viviera.

Una persona viva se habría puesto fiebre o comenzado a respirar con dificultad, y habría podido discernir la gravedad de la enfermedad. Sin embargo, no tenía idea de qué hacer cuando se trataba de cadáveres. También no podía pensar en ningún método de tratamiento. Llamar a un médico parecía bastante inútil. ¿Qué debería hacer? ¿Qué puedo hacer?

Por el momento, la llevó a la cama y la dejó dormir, aunque no sabía si eso ayudaría. Tenía la sensación de que hace mucho tiempo, o tal vez hace poco, algo parecido ocurrió: alguien que no despertaba estaba acostado en una cama, y él estaba sentado a su lado, incapaz de hacer cualquier cosa menos temblar. Finalmente, no pudo soportarlo más y se puso de pie, convencido de que podía hacer algo y luego fue a golpear a alguien.

Ah, maldita sea. Si golpear a alguien esta vez cambiaría la condición de Elq, incluso con sólo una ligera probabilidad, lo haría sin dudarlo. Sin embargo, ahora, de todos los tiempos, no podía pensar en nadie ni en nada para empujar su endurecido puño.

“Una toalla húmeda… espera no, ¿hay algún punto en mantenerla fresca? ¿Debería calentarla en su lugar? … no se pudrirá ni nada, ¿verdad?”

Se ponía de pie cada vez que pensaba en una idea nueva, sólo para sentarse inmediatamente de nuevo. Esto había estado sucediendo por un tiempo. Astaltus le dijo que se olvidara del trabajo por ahora y se quedara con Elq. Sin embargo, el seguir con ella mientras que siendo impotente para hacer cualquier cosa realmente le hizo sentir peor. Supongo que debería volver al trabajo. Pero no quiero dejar su lado. Un debate furioso en su mente atribulada, él miraba intensamente su palma.

“Uu…”

Al oír un débil gemido, la cara de Willem se elevó.

“¿Qué…?”

Se inclinó para echar un vistazo a su cara. El color de su piel no parecía tan enfermizo como antes. Ella también no parecía estar en el dolor. Viendo la falta de problemas aparentes, Willem relajó su expresión.

“Yo”. Antes de revelar su cara descuidada, hizo todo lo posible para sonreír, activando cada músculo en su rostro. “¿Finalmente despierto? Trabajo demasiado princesa.”

“¿Yo…? ¿Qué? ¿Me dormí? ¿Qué hay de la limpieza?”

De repente te caiste en medio de ella. Estaba preocupado, ¿sabes?

“Preocupado…”

“-Estás muy fría.”

“¿Estoy?”

Mientras inclinaba la cabeza, Elq tocó su palma contra su frente. Su cara seguía confundida.

Bueno, por supuesto, no podía medir su temperatura corporal tocándola con su propio cuerpo.

Willem puso su propia mano encima de la suya.

“Caliente”, dijo.

Como dije, tienes frío. Por lo general, es lo opuesto para el exceso de trabajo y agotamiento. La gente tiene fiebre. Pero no eres normal, así que no tengo idea de cómo tratarte. Realmente entre en pánico. Pensé que tal vez nunca volverías a despertar o algo así.

“Oh, lo siento.”

“Sí, reflexiona sobre tus acciones. Bueno, ¿estás bien ahora?”

“Sí. Yo estaba un poco cansada, así que, después de dormir, me siento bien.”

Willem sintió que todo su cuerpo se relajaba al oír esas palabras. Todavía tenía algunas dudas, como si ese estado realmente podría ser llamado simplemente “dormir”, pero él no tenía la energía para seguir adelante.

“Veo… ¿hay algo que quieras beber o algo? ¿Algo que quieras comer? ¿Una manzana? ¿Debería pelar una?” Preguntó a Elq con voz suave.

“Leche caliente. Algo un poco dulce.”

“De acuerdo, déjame.” Se puso de pie.

“-Hoy eres un poco amable.”

“Siempre soy amable.”

Por alguna razón, al oír su respuesta, Elq rió en voz alta.

“Aquí tienes.” Un olor dulce salió de la olla que Willem trajo. Dentro había leche caliente mezclada con un poco de miel y una pizca de canela. “Lo hice, pero esta un poco cálido, pero no trates de beber todo de una vez, ¿de acuerdo?”

“Habría estado bien caliente,” Elq hizo una mueca mientras tomaba un sorbo. “Esta bueno.”

“¿Verdad? He comprendido muy bien tus preferencias gustativas.”

“Hmph.” Tal vez porque ella interpretó eso como significando las preferencias de un niño, Elq hizo una cara amarga. Sin embargo, ya sea porque se dio cuenta de que realmente tenía los gustos de un niño, o porque tenía evidencia innegable, no se quejó en respuesta. “… um, ¿puedo preguntarte algo?”

“¿Hm?” Willem levantó la vista mientras servía segundos de la olla en su taza vacía. “¿Qué es?”

“Si… esto es sólo una situación hipotética…”

“-No hay necesidad de hacer una gran cosa fuera de ella, sólo dilo.”

“Si tuviera que morir en cinco días, ¿serías un poco mejor conmigo?”

Willem frunció el ceño. Tenía la sensación de haber oído esas palabras antes. Pero lo que es

más importante, eso significa… “¿De qué estás hablando? Cinco días es bastante específico…

¿pasa algo? “

La cara de Elq claramente lee “oops”. “¿Eh? N-No, nada… lo siento, olvídalo.” Tenía fuertemente la palma de su mano contra su pecho, justo alrededor de donde la gran herida quedaba boquiabierta.

“E-Espera, Elq, no me digas…”

No debería haberlo preguntado. Pensé que tal vez podría ser lo mismo que Kutori, pero no debería haberlo intentado.

De repente, el dolor atravesó el área detrás de las sienes de Willem. Los recuerdos comenzaron a intentar volverse a aflorar.

“Lo siento. Déjame dormir un poco más.” Abrazando su manta, Elq se volvió para que su espalda se enfrentara a Willem.

“Bien. Dejaré la leche aquí.” Suprimiendo un leve dolor de cabeza, Willem salió de la habitación de Elq.

================ Cambio de escena ==================

Las habitaciones de Willem y Elq fueron remodeladas anteriormente sin usar habitaciones en la esquina de la segunda planta de la posada. Mientras caminaba hacia el primer piso, el crujido de las escaleras llenó los pasillos. La posada no suele tener muchos invitados a pasar la noche, pero el espacioso salón del primer piso sirve de espacio para que los clientes disfruten de una comida ligera y un poco de alcohol. En medio de aquel salón, Astaltus estaba sentado alrededor de una pequeña mesa circular, bebiendo de un pequeño vaso.

“He oído hablar. ¿Se despertó?”

“-Sí, aparentemente estaba cansada.”

“Eso está bien.” Astaltus asintió varias veces, una sonrisa amable en su rostro.

“Espera, ¿no dijiste que no puedes beber? El otro día cuando usted rechazó una oferta de un cliente borracho. ¿Era sólo una excusa?”

“Bueno, no exactamente.” Él se rió en vergüenza. “Mis hábitos de beber no son demasiado buenos. Parece que cuando bebo me voy a un alboroto. Sin embargo, no me acuerdo de ellos.”

“Ah… eso es bastante malo.”

“Mi esposa y mi hija solían enfadarse conmigo, diciendo que es un montón de problemas para calmarme. Así que, por lo general, trato de no beber. Esta será mi única bebida hoy.”

“Eso es lamentable. Supongo que no puedo unirte a ti entonces”, bromeó Willem encogiéndose de hombros. Astaltus se disculpó con una carcajada. “Pero todavía tengo sed. Quizás me tome el té. ¿Quieres algo también?”

“-Sí, me uniré con usted.”

Willem fue a la cocina, sacó un poco de agua de un tarro y lo introdujo en una olla, luego lo puso sobre la estufa de cristal.

“… sobre Nils…” comenzó Astaltus.

“¿Hm?”

“-El día que los trajo aquí, los ojos de Nils se veían muy amables. Después de decir que me dejaría el resto, agregó: “Quiero que viva una vida normal esta vez”.

“… Ya veo.”

Willem se imaginaba. Sólo habló con Nils durante un tiempo muy breve, pero comprendió qué clase de hombre era en un grado sorprendente.

“Ni usted ni Elq tienen cuerpos normales. Además, parece que no nacieron de esa manera… ah, tengo confianza en mi juicio de carne. Soy un troll, después de todo.”

Willem deseaba no jactarse de eso.

“Supongo que ustedes dos vivieron una vida muy dura de exponerse al daño, y eso ya ha terminado. Su cuerpo y mente están agotados. Si ustedes dos pueden vivir una vida diferente, entonces quiero que ustedes… eso es probablemente lo que Nils quería decir. “

“Así que actúa como un maestro cuando nadie está mirando, ¿eh?”

“¿Hm?”

“Nada”. Willem no sabía realmente lo que ese autoproclamado maestro había sido para él en el pasado, pero podía decir lo importante que Nils lo trató a él y a Elq. Así que pensó que la especulación de Astaltus era probablemente correcta… probablemente. “Bueno, me alegro por la preocupación, pero ese tipo de cosas es mejor si lo oyes de…” Una sensación incómoda se aferró a la espalda del cuello de Willem. “¿Hm?”

¿Me cayó un insecto? No eso no es. No reconocía esa sensación de incomodidad que se aferraba a su piel, pero conocía su forma.

“¿Hay invitados que pasen la noche?”

“-¿Qué es esto de repente? Ningún invitado esta noche, como de costumbre.”

“¿Alguna vez has molestado a mucha gente?”

“-Bueno… no recuerdo particularmente hacer nada que me ganara un rencor duradero.”

La respuesta de Astaltus se sentía un poco incierta, pero Willem decidió tomarla literalmente por el momento. “Así que debe ser un robo en grupo o algo por el estilo.”

Sintió unas presencias hostiles alrededor de la posada. Hizo para un buen objetivo. La posada, dirigida principalmente a los huéspedes que viajaban por la autopista, estaba un poco separada de los pueblos cercanos. Su tamaño relativamente grande y apariencia limpia también emitió una impresión ligeramente en el lado rico. Y por supuesto, las tiendas de cerveza y comida debían de parecer muy atractivas para los bandidos hambrientos.

“Oh, ¿ya es esa temporada?” preguntó Astaltus.

“Espera, las estaciones no tienen nada que ver con esto… también, ¿por qué estás tan tranquilo?”

“Cuando se acerca la primavera, ese tipo de gente aumenta”.

Dices que como si fueran insectos…

“Puedes beber té o lo que sea, yo me encargaré de ellos” dijo Astaltus.

“-No, soy el que está siendo contratado, así que yo lo haré. Me encargaré de ellos, así que solo tomas un poco de cerveza… oh espera… Prepararé un poco de té, así que beba eso.”

“No tienes que preocuparte. Estoy acostumbrado a eso.”

“-Esa no es una buena razón… también, no debes acostumbrarte a eso.”

Willem se puso de pie. Su memoria seguía tan sellada como siempre, pero, incluso en esta situación, no sentía miedo ni nerviosismo. Incluso sintió una especie de nostalgia, como si volviera a una vieja casa. Al parecer, él vivía en un mundo bastante peligroso antes.

“De verdad, está bien”, insistió Astaltus.

“-No, no, sólo toma asiento”. Willem se quebró los nudillos.