Kawaikereba Hentai Demo Suki (NL)

Volumen 11

Capítulo 3: ¿Te Gustan Los Traseros Grandes O Los Traseros Pequeños?

Parte 1

Y así, las pequeñas vacaciones de fin de año llegaron a su fin, y con esto llego el primer día del tercer trimestre escolar. Durante la clase de educación física, la cual se daba en el cuarto periodo, Keiki estaba en una esquina de los pasillos del gimnasio, sumido en sus pensamientos mientras veía como Shouma jugaba baloncesto. Obviamente la razón de esta actitud eran las palabras que había escuchado de Sayuki después de haber visitado el santuario.

“¿Le gusto a… Sayuki-senpai?”

Keiki había perdido toda oportunidad para “Despertar” de su sueño fingido, en cambio él había actuado como si nada hubiera pasado. Por lo que después de disculparse por lo sucedido, Sayuki se fue a su casa con la idea de que Keiki no había escuchado su sentimental monologo. Pero eso no cambiaba el hecho de que si la había escuchado, y por eso mismo, él había estado pensando en ello sin parar.

“Oohh… Kiryuu-shi”.

“¿Hm?”

Cuando Keiki levanto su cabeza, vio a Onizuka Megumi, quien vestía la misma camiseta que Keiki tenía, justo allí de pie, ella lo saludo.

“Ah Onizuka-san”.

“Justo ahora estoy de suplente, ¿Qué te parece si hablamos un poco?”

“Claro, no me importa”.

“Bien, me voy a sentar a tu lado entonces”.

Megumi se sentó justo al lado de Keiki, pero siempre conservando un poco de distancia entre ellos. Tanto Keiki como Megumi no se habían hablado desde la cita en el acuario. Ella justo ahora estaba esperando que esperara su partido, y cuando Keiki miro hacia la cancha de voleibol, Mao había hecho un tiro espectacular.

“Nanjou-chan sí que es atlética, estoy realmente celosa de ella”.

“Bueno, ella es la clase de persona que puede hacer cualquier cosa”.

Ella era buena jugando, buena nadando y sus dibujos llegaban a nivel profesional, sin duda una persona que era amada por los dioses.

“Akiyama-shi también es de la clase de persona deportiva”.

“Bueno, si ignoras el hecho de que es un lolicon, si es muy atractivo”.

“Y tu novia parece una Loli”.

“Si, pero en realidad es nuestra senpai, pero al mismo tiempo es bastante adorable”.

Cuando la conoció, Keiki era un poco cauteloso con Koharu debido a que era una acosadora, pero después de haberla conocido mejor, le tenía un gran respeto.

“Ah por cierto Kiryuu-shi, ¿En qué piensas?”.

“¿Eh?”

“Bueno, estabas suspirando en todo momento, por eso te pregunto”.

“Aahh…”

Seguramente por eso se había acercado.

“Te puedo escuchar si así quieres”.

“Está bien…”

El mismo Keiki había llegado a un punto muerto. Sin embargo, la opinión de alguien ajeno podía ser de utilidad.

—Pero es que decir los nombres de ellas es un poco…

No es como si el no confiara en Megumi, más bien es que él no se sentiría bien hablando sobre las confesiones de otras personas.

—Voy a usar el típico cliché de un manga que todos usan.

“Bueno, se trata de un amigo”.

“He leído la cantidad suficiente de manga para saber que hablas de ti mismo ¿sabes?”

“Jaja… no en serio, en realidad es sobre un amigo”.

“Bueno, si tú lo cides. A mí me gusta hablar sobre el amor, así que espero que me digas algo interesante”. Megumi soltó un suspiro y así Keiki inicio su explicación.

“Entonces… esta mi amigo… ehm… llamémoslo K-kun, resulta que K-kun recibió una confesión de su Kouhai en nochebuena”.

“¿Una confesión en nochebuena?, no está nada mal, nada mal…”

“Y entonces K-kun se estaba preguntando como debería responder a esa confesión”.

“Ya veo, ya veo…”

“Además, el otro día, K-kun escucho que su senpai de su club decía que le gustaba también”.

“Vaya, que desarrollo tan abrupto ¿no crees?” los ojos de Megumi se iluminaron cuando escucho este desarrollo, el cual era parecido al de un manga. “Ya veo, ya veo, entonces, su Kouhai se le confeso, además descubrió que su senpai también tiene sentimientos por él”.

“Si, a eso se reduce todo”.

“Prácticamente estamos hablando de un triángulo amoroso”.

Irónicamente hablando, esto más bien sería un triángulo pervertido. Era un triángulo entre Keiki, su Kouhai que lo quería volver su esclavo y su senpai que se convertir en su esclava. Gracias a estos inesperados sentimientos románticos de ellas dos, esta anormal relación se había convertido en algo diferente una vez más.

“Y ahora K-kun no sabe qué hacer”.

“Bueno, tiene sentido eso”.

“Y más que nada es porque no sabe si su Senpai lo quiere románticamente o de otro modo”.

Tokihara Sayuki era una pervertida que quiere volverse una mascota y ser humillada, por lo que la palabra ´Me gustas´ que ella dijo, podría ser en un sentido diferente al sentido romántico. Esto solo dejaba una posible solución para confirmarlo, y era enfrentar a la persona misma. Después de haberlo escuchado, Megumi asintió.

“Logro entender la esencia de todo esto, por lo que déjame darte mi análisis”.

“Si por favor dime”.

“Primero empezare con la Kouhai”.

“Si…”

“Si a K-kun le gusta, simplemente puede salir con ella, y si no le gusta, pues que la rechace ¿no crees?”

“¡Esa es una manera de pensar bastante razonable!”

Era tan sencillo que el mismísimo Keiki se sorprendió, al punto que no encontró refutación para esto.

“Pero en todo caso, ¿Por qué K-kun no ha dicho su respuesta?, ¿Es que la chica que se le confeso no le gusta tanto?”

“No ese no es el problema, ella sin duda es linda… no, súper linda e incluso K-kun piensa que ella es un ángel, así de linda es”.

“¿Pero qué Diablos?, ¿acaso es un pedazo de ternura misma?”

“De todas maneras, esa no es la razón por la que aún no le da una respuesta”.

“Entonces es porque simplemente… ¿A K-Kun no le gusta esa chica?”.

“Eso es…”

Cuando Keiki vio por primera vez a Yuika, pensó que era una Kouhai de muy pocos amigos, ya que ni siquiera sonreía, ya que básicamente ignoraba a todo el que se acercaba a hablarle. Ella no mostraba el más mínimo ápice de ser sociable. Pero Keiki no pudo evitar sentirse atraído por la chica que siempre estaba sola en la biblioteca, por eso mismo fue que siguió hablando con ella constantemente, hasta que ella cedió ante él. La primera vez que Keiki la vio sonreír, sin duda estaba realmente feliz.

—Aunque… bueno, jamás espere que me fuera a meter su ropa interior en mi b oca…

Ella había resultado ser bastante pervertida, con lo cual le había logrado infligir un trauma a Keiki que muy seguramente jamás iba a desaparecer. Pero a pesar de eso, no podía evitar pensar que era una chica muy linda. No importaba que clase de bromas diabólicas hiciera, Keiki aun la iba a perdonar. Además gracias a su reciente declaración de que no le importaría ser una chica normal y que dejaría de actuar como una pervertida para siempre. En todo caso, ella se había vuelto mucho más linda después que dejo de ocultar su amor por él.

Keiki se sentía feliz cuando ella sonreía y mucho más cuando se tomaron de la mano. En esos instantes su corazón se aceleraba al punto que realmente sentía que estaba a punto de enamorarse de ella.

“…Creo que a él le gusta, pero no está seguro si es de manera romántica o no”.

“Bueno, eso suena como excusa de un chico que no tiene ninguna experiencia en el amor”.

“¡Oye que cruel eres!, a pesar de que hasta hace poco pudiste conseguirte un novio Onizuka-san…”

“Exacto~ desde que empezamos a salir, puedo decir que Nao-kun está loco por mi~”

“No necesito oírte presumiendo sobre eso…”

“Oh es verdad, estábamos hablando sobre K-Kun”. Megumi aclaro su garganta. “Bueno, si K-kun no odia a esa persona, ¿Por qué no intenta salir con ella y mira cómo van las cosas?”.

“B-Bueno… si K-kun fuera tan despiadado, no tendría tantos problemas con eso”.

“Si, Kiryuu-shi no es la clase de persona que haría eso”.

“Oye, pero estamos hablando de un amigo ¿recuerdas?”

“Ah es verdad, aún estamos en eso… es algo bastante obvio ¿sabes?” Megumi parecía que no podía ser engañada con esto.

“Es que no quiero intentar salir con ella. No puedo entrar en detalles, pero como ella hizo una confesión tan seria, le quiero dar una respuesta seria y decidida”.

Yuika dijo que no le importaba convertirse en una chica normal, por eso mismo era que Keiki no que quería dar una respuesta simple.

“Si, suena bastante complicado”.

“Así es”.

Si el pudiera tomar una decisión fácilmente, no tendría tantos problemas en pensar que hacer.

“Pero estoy feliz…”

“¿De?”

“Estas actuando como un verdadero hombre y piensas en las personas que te importan. Eso me hizo dar cuenta que eres una muy buena persona Kiryuu-shi”.

“Onizuka-san…”

“Ah, ya es mi turno”.

En el momento que miraron hacia arriba, el partido de la chica ya había finalizado. Por lo que Megumi se levantó y fue hacia la cancha, sin embargo, cuando iba caminando se dio media vuelta.

“En cuanto a la Senpai, lo mejor es que confirmes sus sentimientos primero, puede que sea algún malentendido”.

“Si… oye estamos hablando de un amigo ¿de acuerdo?”

“Ya no es necesario que digas eso”. Megumi mostro una expresión de exasperación ante esto.

“Bueno, esto va a ser muy difícil para Fujimoto-chan”. Estas últimas palabras que dijo la vicepresidenta Onizuka no las escucho nadie.

***

Ese mismo día, una vez las clases había llegado a su fin, Keiki se dirigió al salón del club.

“El consejo de Onizuka-san fue el correcto, pero confirmar los sentimientos de Sayuki-senpai… suena más fácil decirlo que hacerlo…”

Si él le pudiera preguntar así no más, obviamente no tendría tantos problemas, por lo que la única forma de sacar esta información era confesar que él no estaba dormido aquel día que ella dijo eso.

“Tal vez ella dijo todo eso porque pensaba que estaba dormido…”

No había forma alguna de que Keiki fuera así no más y le dijera ´Oye en realidad estaba despierto y…´ Así mismo tampoco podía ir y decirle ´Oye Sayuki-senpai, ¿en verdad yo te gusto?´.

—Si llego a cometer un error, esto se convertirá en un oscuro episodio de mi pasado.

¿Qué haría Keiki si Sayuki respondiera: ´ ¿Eh?, pero yo no me siento así´?, el hecho de confirmar los sentimientos de una mujer, para los hombres es algo muy complicado.

“Hm… ¿Qué puedo hacer al respecto?”.

Sin encontrar respuesta alguna a su dilema, Keiki llego al salón del club, abrió la puerta y entro rápidamente.

“… ¿Hm?”

Sin embargo, en el momento que entro, noto algo diferente.

“¿Pero qué Diablos…?”

La puerta del casillero que había dentro del salón estaba abierta, y con ello todos los objetos y cosas privadas de la presidenta del club afuera, además de eso, había el regordete trasero de una chica, el cual estaba cubierto por una falda azul, asomado desde el interior.

“¡¿Un trasero?!”

Cuando se centró con este increíble panorama, Keiki tuvo que mirar dos veces para asegurarse. Sin embargo, por más que observara, la situación no cambiaba. Allí permanecía de manera sólida y en su campo de visión, el trasero de una chica. Y aunque Keiki no podía ver la ropa interior debido a la falda que la cubría. Ver algo de este modo era bastante erótico, además las piernas desnudas que se veían salir de la falda y las medias era un gran atractivo. Sin embargo a pesar de no poder distinguir la parte superior del cuerpo, gracias al color de la falda y la gran forma del trasero, Keiki conocía muy bien a su dueña.

“Eh… ¿Sayuki-senpai?”.

“¡Esa voz!, ¿Eres tu Keiki-kun?”

“Si, sabía que eras tú Senpai”.

Su cabeza estaba enterrada en el casillero, pero su voz era perfectamente clara y obvia.

“¡Aaaah… no… no puedes Keiki-kun!, ¡No vayas a intentar aprovechar esta oportunidad para violar mi hermoso cuerpo todo lo que quieras!”

“No lo voy a hacer”.

“¡¿Qué?!, ¡¿no lo vas a hacer?!, ¿No me vas a levantar la falda y vas a mirar fijamente mi ropa interior y con ello acariciar mi trasero hasta que quedes satisfecho?… bueno… me gusta cuando me ignoras a propósito, pero, ¿Por qué no hacemos algo más estimulante esta vez?”.

“¿Pero qué clase de situación es esta?”, Keiki se sintió bastante estúpido por haberse preocupado tanto antes de venir. “Y entonces, ¿Qué haces Sayuki-senpai?”

“Estaba intentando limpiar, pero luego de eso ocurrió una avalancha”.

“Y por eso estas atrapada, creí que intentabas probar algún nuevo tipo de rol pervertido o algo así”.

“Um… Keiki-kun… no me puedo mover… ¿Me puedes ayudar?”.

“Si si…” Keiki se sentiría mal de dejarla así, por lo que fue rápidamente a ayudarle.

Y así él se paró junto a la chica, recogió todos los elementos de limpieza, documentos y otros artículos que habían caído sobre ella, y así segundos más tarde, había terminado y la hermosa chica de cabello negro ahora era libre.

“Uf, me sentía como una momia allí”.

“Debes tener más cuidado la próxima vez ¿ok?”.

“Muchas gracias, me salvaste”. Sayuki se puso de pie y le enseño a su Kouhai una hermosa sonrisa.

“Ugh…”

Ese había sido un poderoso ataque sorpresa, lo cual le hizo recordar la vez que fueron de visita al santuario.

“……”

Ella actuaba tan extraña como siempre, pero sin duda se veía hermosa. Tenía un gran estilo y una altura perfecta, su cabello negro y brillante era hermoso y su piel blanca, así como sus rasgos faciales le sumaba muchos puntos en belleza.

— ¿Ella en realidad se siente así conmigo?

¿Acaso una chica tan hermosa como ella podría desarrollar sentimientos amorosos por un Kouhai promedio como Keiki?

“Oye Keiki-kun”.

“¡Si, yo soy Keiki-kun!”

“… ¿Eh?”

Keiki comenzó a entrar en pánico y dijo su nombre como si fuera un NPC de algún videojuego.

“¿Qué sucede?, tú no eres así”.

“¿E-En serio?… pero soy el de shiempre”.

“¿Shiempre?”.

“……” Se había mordido la lengua.

“¿Qué significa eso?, ¿Acaso es un nuevo saludo popular?”.

“No… solo me mordí la lengua…”

“¿En serio?, estas actuando un poco raro hoy Keiki-kun”.

“No quiero oír eso de la persona que se atoro de esa manera”.

Keiki pudo desviar un poco el tema, sin embargo esa sensación lúgubre e incómoda en el pecho de Keiki no se había aclarado del todo.

—Mi corazón empieza a latir como loco, pero Sayuki-senpai está actuando como siempre.

Keiki se empezó a frustrar, ya que Sayuki no tenía idea de que él había escuchado lo que había dicho, sin embargo, él ahora estaba actuando como un niño pequeño.

“Oh… tienes la cara roja ¿no crees?”.

“¿Eh?”

“¿Tienes fiebre?”.

“¡¿Qué?!”

Y este fue el segundo ataque sorpresa del día, Sayuki se paró frente a Keiki y puso una de sus manos en su frente.

“¡¿S-Sayuki-senpai?!”

“Hm… no tienes fiebre”.

“¡¿…?!”

Keiki sabía muy bien que esta acción no tenía un significado más profundo. Simplemente ella estaba preocupada por su Kouhai. Pero el saberlo en su cabeza y aceptarlo con su corazón eran dos cosas diferentes. La sensación de la palma de su mano en su frente le recordó la vez que ella consintió su cabeza y junto a ello las palabras ´Me gustas´, por lo que su cabeza empezó a arder mucho más. Y ahora que había llegado a esto, debía confirmar sus sentimientos.

“¡Lo lamento, recordé que tengo algo urgente, me voy a casa!”.

“¿Eh…?, ¡¿Keiki-kun?!”.

Esta situación había sido demasiado para Keiki, lo cual lo hizo huir. Agarro rápidamente su maletín, y paso corriendo junto a Sayuki mientras salía del salón al mismo tiempo.

“¿Qué le sucedió?, salir corriendo de esa manera…” La estudiante de último año que se había quedado atrás, quedo muy confundida.

***

Después de aquel día, Keiki empezó a evitarla.

“Oh Keiki-kun, buenos di…”

“Lo lamento, aún tengo que hacer una tarea, ¡Disculpameee!”

“¡¿Eh?!, ¡¿Keiki-kun?!”

En la mañana, cuando se encontraron en la entrada, Keiki salió corriendo a toda velocidad.

“Ah Keiki-kun, así que también estas comiendo en esta cafetería….”

“¡Lo lamento, un profesor me llamo!”

“¡Espera!, ¡Solamente le diste un bocado a tu curry!”

Keiki había mentido sobre el asunto del profesor y había salido corriendo de la cafetería.

“¡Ah Keiki-kun!, sobre el tema del club de hoy…”

“¡Perdón, tengo que ver un anime para chicas que están repitiendo justo ahora!”

“¡Oye, tus excusas se ponen cada vez peor!”

Al tercer día después de que terminaron las clases, Keiki se había cansado e invento lo primero que se le vino a la mente. Una vez que alguien toma la decisión de huir de alguien, el hecho de enfrentarlo nuevamente requiere una gran cantidad de valentía. Por lo que desde el día que Keiki había empezado a evitar a Sayuki, el encontrarse con ella le hacía sentir avergonzado, hasta que se convirtió en un espiral sin fin de huidas constantes cuando la veía. Y obviamente, todos los mensajes fueron leídos e ignorados.

• ¿Qué sucede?, ¿Acaso he hecho algo?´
• ¿Por qué me evitas?, ¿Acaso huelo mal?´

´Si no me respondes, me voy a convertir en sacerdotisa ¿okey?´

´Creo que dejar a alguien en visto y no responder es bastante grosero´.

Todos y cada uno de estos mensajes le habían llegado a Keiki, pero él había hecho todo lo posible por ignorarlos. Él estaba asustado y en especial por ese último mensaje, en el que ella parecía estar bastante enojada. Y eso era obvio, al punto de que la gente a su alrededor empezó a darse cuenta.

“Keiki-senpai, ¿Sucedió algo entre bruja-senpai y tú?”.

En el cuarto día que evitaba a Sayuki, exactamente un viernes, Yuika hizo esa pregunta mientras acomodaba de vuelta algunos libros en las estanterías. Obviamente a la persona que le había preguntado no era otro que el delincuente Kiryuu Keiki.

“P-Por supuesto que no…”

“Keiki-senpai, eres muy malo para decir mentiras”.

“¡¿Y-Y que te hace pensar eso?!”

“Todo, lo estás haciendo muy obvio en realidad”.

“Ugh…”

“Keiki-senpai, ¿Puedes pasarle ese libro a Yuika?”

“Si…” Keiki tomo el libro uno de los libros que había en el carrito y se lo entrego.

Y así ella lo puso en el lugar que correspondía, luego de eso le miro a Keiki interrogativamente.

“Yuika no puede evitar preocuparse ¿sabes?”

“¿Preocuparte porque?”.

“Bueno, siempre que Keiki-senpai está junto a Bruja-senpai, ella intenta hacer algo indecente”.

“S-Si… es verdad… eso tiene sentido”.

“No hay necesidad que ocultes eso ¿no crees?, Yuika conoce muy bien a bruja-senpai, y cuando aún intentas ocultarlo, ¿No quiere decir eso que sucedió algo entre ustedes dos, algo que ni siquiera le puedes decir a Yuika?”.

“……”

Ella era muy astuta. Sin duda su conclusión había dado en la clavo. Aunque en realidad no habían hecho nada indecente.

—N-No puedo decírselo… ¿verdad?

Keiki aún estaba pensando cómo responderle a su confesión, pero aun así, usar la excusa de que Sayuki también podría tener sentimientos por él, sería algo muy cruel.

“Bueno, es que hace unos días, cuando fui al salón del club, Sayuki-senpai estaba atrapada bajo una montaña de cosas y no se podía mover”.

“Ah es verdad, ella estaba limpiando su casillero”.

“¿Tu sabias eso?”

“Bueno, Yuika la ayudo después”.

“Ya veo”.

Eso hacía que explicar las cosas fuera mucho más fácil.

“Cuando ayude a Sayuki-senpai, accidentalmente vi su ropa interior”.

“¿Eh…?”

“Y ella estaba usando ropa interior erótica… lo cual lo hizo un poco incómodo”.

“¿Hmm?… bueno, tiene mucho sentido que Bruja-senpai use esos que son desagradables”.

“Esa es una fea forma de estar de acuerdo”.

A pesar de todo, Keiki se sintió un poco culpable por inventar una historia así.

“Bueno, podemos dejarlo así, aún tenemos trabajo que hacer, por lo que apurémonos y terminemos con esto”.

Keiki se las había arreglado para evitar una investigación aun mayor, por lo que se centró nuevamente en su trabajo. Como él había estado haciendo esto por casi dos años, ya estaba bastante acostumbrado, por lo que sabía muy bien donde iba cada libro con solo mirarlo. Justo cuando estaba progresando de manera eficiente y guardando los últimos libros…

“Ups…”

En el momento que Keiki se inclinó para recoger un libro que estaba en el fondo del carrito, se le cayó su bolígrafo que tenía en el bolsillo de su pecho.

“Ven…”

Cuando intento agarrarlo el bolígrafo se metió cada vez más entre los estantes.

“Oye ¿A dónde piensas ir?” Keiki camino en dirección al bolígrafo mientras estaba acurrucado. “Y por fin te tengo”.

Y de ese modo, el agarro su amado bolígrafo, por lo que levanto rápidamente su cabeza.

“¡¿Mfugh?!”

“¡¿Hyaaa?!”

Algo suave golpeo de frente su rostro, y Yuika debido a esto dejo escapar un chillido al mismo tiempo.

“¿Q-Que sucedió?”.

Cuando Keiki separo su rostro de algo que no sabía que era, pudo ver una tela bastante familiar.

“¿Ke…Keiki-senpai?”.

“¿Eh?”.

Cuando levanto su mirada, pudo ver un rostro rojo como un tomate. Aquel rostro pertenecía a Yuika. Su cuerpo se había estremecido mientras tiraba de la tela verde, ósea su falda, hacia abajo. Keiki se dio cuenta del enorme error que había cometido, ya que prácticamente había empujado su rostro contra el trasero de Yuika-chan.