Zaregoto  (NL)

Volumen 5: Psicológico: Pequeña Canción Amarga

Capitulo 4: Historia De Un Collar

Parte 1

 

 

Zaregoto Volumen 5 Capitulo 4 Parte 1 Novela Ligera

 

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Es fácil engañar a un genio.

Es difícil engañar a un idiota.

Es imposible engañar a un cerdo.

***

 

 

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Cuando quedaba menos de una hora, regresé una vez más a la habitación privada de Neo-san. Neo-san y Kouta-san se dirigieron a una sala separada para discutir lo que iban a hacer a continuación, presumiblemente sería algo que no tenía nada que ver con Kunagisa y yo, así que me quedé solo en esta habitación. Simplemente me senté en un sofá rodeado de varias pinturas, murmurando solo para mí.

El ruido del segundero del reloj era fuerte. Me sentí como si debería haberme preparado para esto y haberme traído un reloj digital. Pero Kunagisa lo había adaptado tanto que se había convertido en un reloj completamente desordenado, y este reloj analógico era un regalo de Hime-chan, así que usarlo se sentía como una obligación, así que después de todo no tuve elección.

“Una opción…  pero puede ser una bendición relativa incluso tener una opción.” Elegir.

La acción de elegir.

Saqué el Jericó de Misachi-san de mi cinturón y lo miré fijamente. Tenía una forma muy grosera. Sin embargo, manejarlo -siempre y cuando no me dejara perder mi calma como lo había hecho Misachi-san antes- no era demasiado difícil. Practicar incluso sin llegar a los niveles de ser llamado entrenamiento sería suficiente para darme buen objetivo.

“Este país es realmente pacífico…..”

Los medios para escapar que Kouta menciono eran bastante sencillos. Primero, tiró de los inconscientes Misachi-san y Shito-kun dentro de la sala, y ató a Misachi-san con un cable de PC. Ella dijo que Misachi-san probablemente no despertaría por medio día, pero era sólo por estar seguros. En cuanto a Shito-kun, Kouta-san lo arrojó a mí (literalmente, lo arrojó), y me hizo llevarlo a mi espalda.

“Yo apoyo el movimiento feminista. Que los hombres y las mujeres sean iguales.”


“Entonces es correcto que lo lleves, querido amigo.” sonrió Kouta-san. “Como los hombres y las mujeres son iguales, está claro quién entre tú y yo tiene autoridad.”

En efecto.

Por eso fue, por supuesto, no es como si Kouta-san me hubiese entregado a Shito-kun por bondad. En resumen, el papel de Oogaki Shito-kun debía ser una llave. Su ojo inconsciente era para el escáner de retina. Luego usamos la tarjeta que llevaba, y yo había oído el número de identificación suficientes veces para haberlo recordado. Yo estaba un poco inseguro de si era ikwe9f2ma444 o ikwe9mada423 pero Kouta-san me apuró y pude recordar. Fue lo mismo para el número memorizado. Yo estaba mucho más preocupado por esto (me sentí que sería muy práctico tener a Kunagisa en estos casos), pero parecía que estaba correcto. Sin embargo, tanto el número como el ID eran sólo bonificaciones para el sistema de seguridad. Las cosas importantes eran la tarjeta, el chequeo de la retina y la voz. En otras palabras, las pruebas reales de la identidad. De éstos, pudimos obtener la tarjeta y el chequeo de la retina, pero no había ninguna posibilidad de forzar al inconsciente Shito-kun a hablar.

“Oogaki Shito. Mi identificación es ikwe9f2ma444.”

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Kouta-san dijo, cambiando su voz.

“Confirmando la voz y la retina. Por favor espera.”

La voz sintética respondió, y la puerta se abrió.

“¿Por qué estás sorprendido? Aikawa Jun no necesita tener el monopolio de la mímica vocal, ¿verdad?” Dijo Kouta-san. “Incluso puedo engañar a una máquina. Son construcciones sencillas.”

“¿Conoces a Aikawa-san?”

Kouta-san hizo una expresión ligeramente disgustada ante mi pregunta, pero ella se recuperó rápidamente y dijo: “He oído hablar de ella a través de la vid.”

“Tenía la sensación de que te referías a la notoria Aikawa Jun cuando mencionaste a un contratista… por supuesto, si fuera ella, engañaría no sólo a las máquinas sino incluso a Dios. Bueno, tenemos que darnos prisa o la puerta se cerrará. Ahh, deja a Shito-kun ahí, ¿quieres? Le hemos atado las manos y los pies para que no pueda hacer nada.”

En otras palabras, esta vez fueron Shito-kun y Misachi-san quienes fueron capturados. Aunque eventualmente seríamos descubiertos, lo mejor era retrasarlo tanto como fuera posible. Incluso si el profesor se diera cuenta finalmente de que los dos estaban desaparecidos y actuara, todavía se nos daría un poco de suspenso hasta el límite de tiempo. Bueno, tal vez eso es demasiado para esperar, pero en todo caso, así fue como Kouta-san y yo logramos escapar de la séptima sala.

“……….”

Así que ahora, una pregunta.

Ishimaru Kouta, quien meticulosamente se infiltró en esta instalación, e incluso logró permanecer dentro fingiendo que ella ya había salido. La maquiavélica, la intrigante, la astuta, la ingeniosa, la veterano Ishimaru Kouta. ¿Realmente piensas que Ishimaru Kouta sería distraída por un disco MO (independientemente de la importancia de los datos en él podría haber sido el caso) y accidentalmente activar la alarma? Si tuviera que ir más lejos, Misachi-san a un lado, ¿qué pasaría si (teniendo en cuenta lo fácil que la derroto) se molestaba en entablar una larga conversación con el desentendido Shito-kun simplemente para aprender su voz?, qué aterrador. Lo que era más aterrador que cualquier otra cosa no era su acción (después de todo, Aikawa-san haría algo así, e incluso Kunagisa habría podido calcular gran parte de una ruta de escape), sino más bien su audacia de hacer todo con tanta indiferencia. No sería alabanza ni crítica decir que su plan no tenía en absoluto una alta probabilidad de éxito. Si Misachi-san hubiese optado por la fuga, entonces eso habría sido el final, y no había ninguna garantía de que sólo un pequeño número de personas vendría. Había un montón de otros problemas escondidos. Por supuesto, lo más importante, que ella estaba confiando en mí (¡en mí!) memoria fue el mayor problema de todos. Si hubiera llegado a este plan habría tenido sin lugar a dudas que descartarlo como una locura. Este tipo de absurdo heroico es en la mayoría de los casos, en retrospectiva, la forma más inteligente de lograr algo a través del único método posible, pero todavía no creo que sea el caso. Arriesgué mi vida… no, abandoné mi vida para saltar de la sexta sala a la séptima sala, pero no me sorprendería si alguien preguntara si esto no estaba a la altura de esa decisión.

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“……….”

Sin embargo, el esquema de Kouta-san tuvo éxito, muy bien, y aquí estamos.

Después de nuestra fuga, Kouta-san se puso en contacto con Neo-san con su inalámbrico, y Neo-san salió fuera como para encontrarse con la visita de (o más exactamente, él la había llamado) Kasugai-san, y nos dejó el camino libre de nuevo.

Al final, Kouta-san estaba segura de que tendríamos éxito, y yo no lo estaba. Incluso antes de determinar si ese riesgo valía la pena o no, no pude llegar a una idea tan audaz.

“Supongo que es la diferencia entre un trabajo terminado y un trabajo perfecto…..”

Y la diferencia entre los que pueden ver las cosas y los que no pueden. Tal vez eso fue todo lo que estaba detrás de este incidente de crucifixión de Utsurigi Gaisuke. Que el sospechoso estaba viendo algo que una persona común como yo no podía, y que el desmembramiento del cadáver y la destrucción del cadáver, y la toma de los brazos, y el elegante mensaje de sangre, todo eso, puede haber sido para algún propósito.

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“….. Una hora veinticinco minutos restantes…..”

O si tuviera que decir al estilo Muerte azul, una hora veinticuatro minutos cuarenta y seis punto setenta y siete segundos. Sin embargo, después de pensar durante dos horas y media y no llegar a ninguna pista, ¿era realista esperar algo que surgiera en la última hora y media? Pensar negativamente tampoco iba a lograr un progreso, pero no pude evitar que mi mente cayera en esa dirección.

“Shiogi-chan… si estuvieras en mi posición, incluso en la peor entre las peores situaciones, ¿serías capaz de llegar con el esquema inteligente más eficaz que podría existir?”

Bueno, por supuesto que lo haría.

Sin embargo, es imposible para mí.

Parece que soy incapaz de convertirme en un estratega incluso remotamente de la clase de Shiogi-chan.

Por ejemplo, ¿qué tal si yo fuera a forzar algo juntos? Permítanme pensar lo suficiente como para poder ser hombro con hombro con el profesor Kyouichirou. Sí, por ejemplo… ahora mismo, Ishimaru Kouta-san, que me está ayudando con mi pensamiento. ¿Qué pasaría si la supusiéramos como sospechosa?

No se puede decir que sea imposible. Después de todo, el profesor Kyouichirou no sabe de su existencia, y dentro de esta instalación el único que la conoce es el corrupto Neo-san (aunque Shito-kun y Misachi-san también estarían al corriente). Y a diferencia de los investigadores, Kouta-san no estaba restringida a ninguna sala de investigación. Como resultado, hay menos obstáculos para que se sospeche que cualquier otro sospechoso. Y esa velocidad de pensamiento, esa sabiduría y esa toma de decisiones que acababa de mostrarme, harían que el asesinato de Utsurigi y la aparición de un crimen tan insoluble…

“…… Tan horriblemente absurdo.”

Obligué a cerrar la teoría forzada. Sólo fue hasta ahora que pude manejar la falta de lógica. No tenía la intención de respetar al profesor Kyouichirou, pero la teoría forzada del profesor acerca de Kunagisa Tomo como sospechosa era mucho más creíble. Verdaderamente, este mundo no tenía falta del sentido de misterio.

“En ese caso, Neo-san, bajo la misma razón….. Bueno, hay una teoría más extraña…..”

Eso sería simplemente la posibilidad de que yo mismo fuese el sospechoso. ¿No sería un toque de buen gusto si yo, un mero cómplice de la visita de Kunagisa Tomo, fuera el sospechoso detrás del asesinato de Utsurigi Gaisuke? Por supuesto, eso sería simplemente de buen gusto, y sin sentido. Sé que no soy el sospechoso, y mientras mantenía la hostilidad hacia Utsurigi, no tenía ninguna intención de asesinar.

Sin embargo.

En este caso, no importó si una acción tuvo lugar. Todo lo que importaba es que era aceptable. Mientras se pudiera seguir algún nivel de lógica, “Estoy pensando cosas tan necias.”

Murmuré, y luego encontré un teléfono en la habitación. Tengo un teléfono celular, pero lo dejé en el apartamento de madera desde el que llamé a mi casa. Porque, dejando a un lado el teléfono móvil de satélite que Kunagisa usó (que el profesor Kyouichirou confiscó), no había manera de que pudiera obtener una señal tan profunda en las montañas. Sin embargo, las compañías telefónicas están obligadas por la ley, de tal manera que no importa dónde estés en Japón (incluyendo una isla solitaria en el medio del océano o en una región inexplorada de una cordillera) si hay una solicitud, están obligados a conectar la línea telefónica. Como resultado, incluso el centro de investigaciones del profesor Kyouichirou estaba conectado al exterior a través de una red, y por eso la habitación privada de Neo-san tenía un teléfono.

Y entonces me di cuenta. Por lo general, las líneas telefónicas en este tipo de instalaciones están diseñadas para no tener acceso a las redes externas, pero esta instalación fue diseñada para albergar un número ridículamente pequeño de empleados. En otras palabras, ese teléfono probablemente se conectó hacia afuera. Para cuando terminé mi pensamiento, ya me había movido al teléfono, y cogí el receptor.


En cuanto al número que inmediatamente traté de llamar, mis dedos se detuvieron a mitad de camino, y colgué el teléfono. Pensando en ello, no era razonable esperar una conversación adecuada con esa persona. Esa persona no habla cuando no quiere hablar, y esa persona no habla ni siquiera cuando quiere hablar, y aunque eso sería aceptable si estuviera escuchando lo que estaba diciendo, esa persona no escucha ninguna orden de alguien que no sea su amo, y esa persona ni siquiera presta atención a las órdenes de su amo. Sin embargo, después de pensar un poco más, en primer lugar no tenía sentido suponer que el teléfono sería incluso recogido por esa persona. En el peor de los casos, podría incluso ser esa adivina molesta. ¿Qué diría esa clarividente acerca de mi situación actual? Siento que mi sangre hervía sólo imaginando lo que ella podría decir.

“Sin embargo, Miiko-san está fuera…..y ella no lleva un teléfono celular.”

Y Miiko-san tiene instintos tan agudos como Onimarukunitsuna, así que no había nada que decir que ella no sentiría que Suzunashi-san había sido encerrada en una jaula. Teniendo en cuenta la personalidad de acción inmediata de Miiko-san, no podía imaginar que condujera a algo bueno. Después de reflexionar, terminé decidiendo marcar el teléfono celular de Hime-chan.

“¿Hola, hola?” respondió Hime-chan un tanto nerviosa, antes de que el teléfono sonara por segunda vez. “¿Quién es?”

“Un hombre que busca la dominación del mundo.”

“Ah, Maestro. Huiste, buen día.” Hime-chan sonaba aliviada. “Me sorprendió el número desconocido, Maestro. ¿Qué pasa? ¿No se suponía que estarías en medio de un viaje a la prefectura de Nagoya?”

“Sí. Bastante.” respondí, e incliné la cabeza hacia un lado, llamando a Nagoya una prefectura. Seguro que está equivocada. Pero por alguna razón sonaba familiar. “En este momento, bueno,….. Estoy llamando desde donde nos estamos quedando.”

“Mhm. Supongo que por eso es desconocido. Ahh, sabes, tiempo perfecto. Hime-chan se olvidó de decir algo al Maestro.”

“¿Y qué seria?”

“Un recuerdo. ¿Puedes traer de vuelta cinco barras de uirō?”

“¿Oh? ¿Hime-chan eso es algo dulce?” Le pregunté mientras trataba de recordar si uirō eran dulces. Ahh, claro. Esta es la prefectura de Aichi. Nagoya es sólo una ciudad de aquí. Después de todo no es la prefectura de Nagoya. “….. Por uirō ¿te refieres a esa cosa suave que parece como yōkan? ¿Te gustan esas cosas, Hime-chan?”

“A mí no, a la amiga de Hime-chan. ¿Te acuerdas? Te he presentado. Usagi-chan o algo así. Hime-chan olvidó que cuando Hime-chan mencionó que el Maestro se dirigía a la prefectura de Nagoya, empezó a hablar sobre uirō. Hime-chan no los necesita, sino cinco barras para mi amiga. Coloridos, si puedes. El Maestro absorbió mucho dinero de Hime-chan, así que tienes suficiente, ¿no?”

“Prefiero que no me hagas sonar como un villano….. Sí, tienes razón, si yo puedo regresar con

seguridad, te compraré quinientas barras.”

“De ninguna manera. No soy Dazai Imogayu.” {Es Dazai Osamu}

“Imogayu era Akutagawa.”

La corregí, como un Maestro. {También se equivoco es Akutagawa Ryunosuke}

“Eso fue así. Pero Maestro, ¿qué quieres decir con eso? Si puedes regresar con seguridad. Haces sonar como si no lo hicieras.”

“Quién sabe. Dicen que hay montañas verdes dondequiera que estés en el mundo, así que no es sorpresa que puedas morir en cualquier parte.” De hecho, no es sorpresa. Especialmente cuando se trata de alguien como yo. “Pero si no voy a volver, puedes hacer lo que quieras con las cosas de mi habitación.”

“¿En serio?” Hime-chan sonaba emocionada. “¿Entonces puedo tomar las camisetas extrañas y los pantalones vaqueros raros y las chaquetas raras y los calcetines extraños?”

“Evita llamar a las pertenencias de las demás personas como cosas extrañas…..” ¿Y de todos modos qué quería hacer con calcetines? “Sí. A cambio, Hime-chan también tendrás que cuidar de pagar el apartamento y tirar la basura y ese tipo de cosas.”

“Ehhh.” repitió Hime-chan disgustada. Qué mezquina. “Pero ya sabes, Maestro, pareces serio. ¿Estás en un lío? ¿Estabas en un edificio cuando un terrorista empezó a atacar o un avión se estrelló o un submarino entró a toda velocidad?”

“No, nada de eso, esta vez….. Pero algo similar.”

“Mmhmm.” Hime-chan no sonaba apaciguada.

“El Maestro es bastante inteligente, pero es estúpido.” dijo Hime-chan, sin sonar nada parecida a su edad. “Hime-chan es una idiota pero no es estúpida. Así que Hime-chan conoce la preocupación del Maestro en este momento.”

“Uh huh. Bueno, eso es bueno. ¿Eso significa que puedes ayudar?”

“Por supuesto no. Tengo clase pronto.” Qué razón tan pura.

“Ah, ya veo….. Hime-chan está en la escuela.” le dije mientras revisaba el reloj de pulsera que Hime-chan me había dado. “No deberías llevar teléfonos celulares a la escuela.”

“Sí, sí. Lo entiendo, Maestro.” y entonces oí un ruido de muy lejos que se superponía con la voz de Hime-chan. “Oops, bueno, el timbre sonó, así que Hime-chan tiene que irse ahora, Maestro.”

“Sí, adiós.”

Manteniendo con la cortesía de ser el llamador, puse el receptor abajo. Y entonces sentí que un poco de peso había sido levantado de mis hombros y me hundí un poco. Suspiré tan profundamente que parecía que estaba soplando todo el aire de mis pulmones, y luego volví al sofá.

Eso estaba bien.

Eso debería estar bien.

Como alguien que nunca había confiado realmente en el individuo conocido como yo, en verdad no tenía nada como confianza. No era que hubiera falsedad detrás de las palabras que le había dicho a Kouta-san hace unas horas, pero mi vida es una historia de fracaso mezclada con arrepentimiento y remordimiento. Por eso. Por eso, en caso de fracaso, o quizás en caso de culpa, cuando me arrepiento, no debería haber nada que yo haya dejado de hacer.

Había terminado de acortar los cabos sueltos.

Ahora sólo necesito hacer lo que quiero.

“….. Tal vez sería bueno volver a la jaula una vez y hablar con Kunagisa…..”

Si se hablara de una persona de tipo control remoto, Kunagisa Tomo caería en esa categoría. Encerrada en su mansión, incapaz de bajar escaleras sola. Sin embargo, esa misma Kunagisa Tomo también alcanzó y controló la información mundana y el conocimiento científico (aunque no estuviera al nivel de Chii-kun). Si tuviera que ingresar los datos que había reunido en las últimas dos horas y media, tal vez podría llegar a algún tipo de respuesta.

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Dicho esto, volver a la cuarta sala después de Kasugai-san ha regresado sería muy arriesgado. No creo que Kasugai-san use las escaleras, así que debería estar algo bien, pero no pude evitar errar por el lado de la precaución dado que sería un riesgo irreversible.

“No hay punto en preocuparse por ello, aunque…..”

De todos modos Hime-chan está en clase, murmuré para mí. Alguien que oyera no sabría lo que quiero decir en absoluto, y luego traté de salir de la habitación. Pensé en discutirlo con Kouta-san. Sin embargo, antes de que pudiera alcanzar el pomo de la puerta, la puerta se abrió hacia el otro lado. Huh. ¿Era esta puerta automática? Por desgracia nunca había encontrado una antes, pero dicen que el mundo tiene puertas automáticas que no se abren hacia los lados… no, no recuerdo que esta puerta fuera de tal marca. Eso significaría que alguien estaba tratando de entrar en la habitación desde el pasillo. Y como era de esperar, Kouta-san me miró con los ojos muy abiertos.

“Oh. ¿Qué pasa, querido amigo? ¿Por qué estás allí?”

“No, estaba pensando en volver a las jaulas una vez….. Quería pedir las opiniones de Kunagisa y Suzunashi-san. Sin embargo, ese es un acto peligrosamente delicado, así que me preguntaba qué hacer.”

“No, no creo que sea una mala idea.” dijo Kouta-san. “Y eso funciona bastante bien.”

“¿Bastante bien? Hablando de eso, ¿acabaste de hablar con Neo-san?”

“No lo llamaría de ese modo.” Kouta-san respondió vagamente. “Tomó un pequeño descanso. Un visitante llegó al centro. Había una llamada de Koutari-san a Neo-san justo ahora, que Koutari-san iba a venir aquí para algún propósito. Pero no es que pueda dejar que Koutari-san me vea. Y así parece que van a usar esta habitación, así que me han dicho que te lleve.”

“Uh huh.”

Koutari-san.

Mi mente recordó que desesperadamente (no sé de nada más desesperado que eso) y trate de juntar teorías sobre Koutari Hinayoshi siendo el sospechoso. Kouta-san había rechazado instantáneamente la idea de usar su cabello como una cuerda, pero eso no significaba que toda sospecha pudiera ser levantada. Todavía existía la posibilidad de que Koutari-san hubiera usado un método diferente para matar a Utsurigi. Por lo menos, parecía que Koutari-san y Utsurigi no estaban en términos amistosos… aunque no creo que ningún ser humano estuviera en términos amistosos con Utsurigi.

“No uno…, pero…sabes.” una pregunta se me subió por la cabeza. “Se siente como si se llevara muy bien con Kokoromi-sensei…..”

“Utsurigi-san puede haberse distanciado deliberadamente de los demás.” dijo Kouta-san. “¿No sería mejor preguntarle a Kunagisa-san sobre eso? Por supuesto, Kunagisa-san no parece demasiado interesado en hablar mucho de Utsurigi-san.”

“No se puede evitar. Es bastante torpe. Tiene los labios flojos, pero puede decirlo todo, o no decir nada, y sólo es uno o el otro. Cosas borrosas como estas puedo decirlas porque soy yo, además esto es incomprensible para ella.”

“Como el cielo. ¿O tal vez debería decir cómo azul?”

“Ambos, por supuesto.”

Salí de la habitación y me mudé al lado del pasillo cerca de Kouta-san. Y luego me vino con una no-que-mala idea. Por supuesto, no podía encontrarme con Koutari-san aquí, pero al mismo tiempo eso significaba que eso era lo único que no podía hacer. Quería escuchar lo que Koutari-san tenía que decir, con el propósito de reunir información. Y si no se me permite, entonces…

“Kouta-san.”

“Aceptado.”

Antes de que pudiera decir algo, Kouta-san sacó una radio de su abrigo. Era más pequeño que un teléfono celular y básicamente tenía forma de tablero. Tenía cuatro botones, y Kouta-san los ajustó. Era lo que ella había utilizado para comunicarse con Neo-san antes, pero como bien podrías esperar incluso el ladrón Kouta-san, tenía su parte de gadgets secretos.

“Sí… correcto, Neo-san. Por favor, sigue así.”

Después de intercambiar dos, tres líneas, Kouta-san recibió el acuerdo… o mejor dicho, la aceptación, de Neo-san.

“Entonces esperemos en la azotea. Otras habitaciones lo harían, pero si Koutari-san abriera las puertas sin ninguna razón, todo terminaría en el acto.”

“Uh huh…..” la azotea otra vez. “Sin embargo, ¿cómo los escucharíamos desde la azotea?”

“Usaremos esta tecnología inalámbrica para eso. Si lo mantenemos en un canal receptor, no escucharán nuestras voces. Bueno, lo único que debería preocuparnos es que alguien en algún lugar pueda estar interceptando las ondas de radio… pero eso aquí no es una preocupación importante.”

Dijo Kouta-san cuando empezó a subir las escaleras hasta la azotea.

“En todo caso, me preocupo más por los dos.”

“¿Shito-kun y Misachi-san?” Le pregunté mientras la seguí subiendo las escaleras. “No se despertarán por medio día, ¿verdad? Después de todo, los derrotaste innecesariamente.”

“Oh. No es consumado deliberadamente hablar de uno como un sádico. No he usado más violencia de la necesaria.”

“Dejando a un lado Misachi-san, creo que fuiste demasiado lejos con Shito-kun. Seguiste golpeando sus órganos internos. Habría bastado golpearle la cabeza una vez. Tendrá un poco de dolor por un tiempo.”

“Sigue hablando como quieras. Ya sabrás pronto cómo soy de amable.” Kouta-san respondió con una réplica inexplicable. Terminamos de subir las escaleras, abrió la puerta, y luego Kouta-san se quitó el abrigo y lo extendió por el suelo antes de sentarse. Hice lo mismo y me senté frente a ella. Kouta-san comenzó a tocar con las perillas de la radio.

“….. Me di cuenta al pensar en ello, este lugar tiene sistemas de seguridad pero no hay cámaras

de vigilancia.” Dije por aburrimiento. “Esto se adapta a Kouta-san y a mi muy bien, pero ¿no es un problema de seguridad?”

“Desde un punto de vista administrativo eso es más consumado.” Kouta-san respondió a mi pregunta sin apartar los ojos del dispositivo. “Probablemente haya algunas cosas que preferirían no ser registradas. Por ejemplo, esos discos MO tenían algún valor, pero no eran nada importante. Básicamente, así es.”

“Todo está grabado en sus cerebros individuales…..”

Para empezar, ¿es que la seguridad basada en la máquina realmente suele ser suficiente?

Kouta-san parecía haber terminado de ajustar los canales, mientras colocaba el dispositivo inalámbrico en el medio entre los dos. Podía oír algo que sonaba como si algo se cepillara contra la ropa. Tal vez Neo-san también había puesto una radio en el bolsillo.

“Hmm. Es un poco apagado.”

Kouta-san inclinó la cabeza hacia un lado mientras giraba un pomo un poco. Y entonces, parecía que el dispositivo inalámbrico comenzó a recoger lo que sonaba como la voz de una persona.

“….. Como….. Así que….. utari-san.”

“Ninguna pista.”

“Sin embargo, parece que te tomaste tu tiempo. Qué raro eres, Koutari-san, considerando lo preciso que eres con el tiempo.”

“Por alguna razón el ascensor estaba roto.”

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Las voces de Neo-san y Koutari-san. No sonaba como si estuvieran hablando mientras caminaban, así que parecía que estaban en esa habitación privada adornada con pinturas.

“….. Entonces, ¿qué querías, Koutari-san? De la investigación, por supuesto.”

Y entonces los dos empezaron a conversar sobre temas que encadenaban lo que parecía un lenguaje especializado (algo de habilidad y algo de circuito, y otras cosas de esa jerga). Escuché atentamente durante un rato, pero no hay nada más aburrido que escuchar palabras que no entiendes. Esto puede sonar grosero a Neo-san y Koutari-san, pero nosotros dos poco a poco comenzamos a perder el interés en su conversación.

“….. Parece que esto fue una completa pérdida de esfuerzo.” Kouta-san parecía sentir el camino,

como ella murmuró en un tono muy aburrido. “Aunque realmente no usamos mucho esfuerzo. Sin embargo, es increíble que puedan seguir hablando de un tema tan inútil. ¿Lo encuentran divertido?”

“¿Entiendes algo de esto? Suena como un idioma extranjero para mí.”

“Es porque entiendo partes de ella que me resulta aburrido.” dijo Kouta-san. “Aburrido incluso si entiendes, aburrido si no lo haces, es lo peor.”

“No puedo sacudir la sensación de que esto es una pérdida de tiempo….. Me pregunto si Neo-san no cambiará al tema del incidente.”

“Si él cambiara de tema ahora, sería completamente antinatural. Esa persona tiene sus propios conjuntos de problemas. Por lo menos, no puede permitirse mostrar sus cartas todavía.”

“Lo entiendo, pero… entonces, Kouta-san. ¿Puedo dejar este lugar para ti?” Me levanté. “Volveré a la jaula para revisar a Kunagisa.”


“Dividirnos ahora. No es consumado presionar una tarea tan aburrida para mí, pero en este punto, supongo que no se puede evitar. Después de todo, está el asunto del tiempo restante.”

Miré mi reloj. Quedaba una hora y quince minutos.

“Ah… pero, Kouta-san si sacas a Shito-kun y lo usas como camuflaje,….. Y si el Profesor entra en pánico por él, entonces tal vez este número crecerá un poco.”

“O podría hacer lo contrario.” Kouta-san ajustó su gorra un poco y me miró. “Los dos que fueron a revisar la séptima sala no muestran ningún signo de regreso. Esto es muy sospechoso. Por supuesto, si él confiaba en los dos, hay una gran posibilidad de que el profesor simplemente

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