Campione (NL)

Volumen 18

Capitulo 9: Una Reunión De Asesinos De Dioses En La Confusa Capital.

Parte 5

Aisha también era un asesino de dioses.

Aproximadamente nueve meses antes, ella había matado a la diosa Perséfone durante sus viajes en Grecia.

Ese fue precisamente el comienzo de su aventura. Después de eso, se había quedado atrapada en una conmoción a lo largo de la marítima ruta de la seda, llegando incluso en una situación donde fue llevada a Hong Kong, donde también se encontró con un Dios Hereje por casualidad.

Un dios guardián benevolente de la población, que llevaba el rostro de un santo budista.

Fue una aventura donde no le había dejado más que otra opción que matarlo. Qué triste recuerdo, sólo se sintió como ayer para Aisha.

Antes de ir en este viaje, Aisha era en realidad muy rica.

Fue la fortuna dejada por su anterior maestro. Sin embargo, debido a que donó la mayor parte de su dinero para ayudar a los refugiados que conoció durante sus viajes, ella había regresado a Londres totalmente empobrecida.

“En verdad tantas cosas tristes sucedieron en aquel entonces.” Mientras mantenía las lágrimas derramándose, pronto se dio cuenta.

Ella tenía que recurrir a su intervención también con el fin de detener a los dos arrasadores Reyes Demonios.

“Cuando el tiempo aún no esté maduro por el bien de resultar, incluso en lo benévolo encontraremos la desgracia; cuando el tiempo esté maduro para el bien de provocar, la fortuna vendrá a pasar, serán bien recompensados con la fortuna y el mal cosechará lo que sembró…”

Era una autoridad de suerte, usurpada a un dios guardián de la población.

Mientras que Aisha se comprometió a hacer el bien y estaba en el proceso de cumplimiento de ello, era un poder que le confería sobre a ella todo tipo de buena suerte, grandes y pequeñas.

Naturalmente, su deseo esta vez fue el siguiente:

“Debo ayudar a la conciliación de mi maestro y mi querida hermana mayor. Por favor concédame a la humilde y pequeña Aisha la ayuda de la buena suerte… ¿Oh?”

En el instante en que ella cantó, algo cayó desde la ráfaga de viento y nieve en el aire.

Plaf. Una varilla de acero cayó sobre la nieve. Sus dos extremos estaban cada uno dividido en tres puntas. Más o menos de un pie (treinta centimetros o así) de longitud.

“Esto parece ser del maestro. Yo se lo debería volver a él más tarde.”

La tormenta probablemente había barrido en el cielo por encima de la mansión. Aisha cogió la barra de acero de tres puntas y la puso en el bolsillo de su delantal.

Entonces, en este momento, el duelo de los dos Reyes Demonios estaba entrando en un clímax.

Increíblemente, el Marqués Voban se había transformado en un gigantesco lobo gris. Pero el Maestro del Culto Luo Hao no se quedó atrás. Al frente de un Guardián Buda semidesnudo que era como una deidad protectora, estaba luchando contra el gigante Marqués lobo.

¿Cómo Aisha detendría a esos dos?

No podía pensar en cualquier buen método. En cualquier caso, ella simplemente seguiría adelante y trataría. Con determinación en su corazón, Aisha siguió corriendo por la llanura de nieve para acercarse a los dos reyes demonios.

Entonces ella gritó en la voz más fuerte que pudo reunir.

“¡Por favor, deje de luchar, maestro! ¡Lo mismo para ti, querida hermana mayor Luo Hao!”

Ninguna respuesta.

Al momento el avatar de Luo Hao, el Guardián de Buda, ejecutó una patada giratoria feroz.

Una patada en el torso, la forma del lobo gigante de su maestro fue enviada a volar. Sin embargo, no hubo mucho daño como resultado. Había saltado deliberadamente de lado para escapar del impacto.

El aterrizaje del lobo gigante en cuatro patas era la ligera prueba de ello.

Por otra parte, el lobo gigante también lanzó un rayo de sus mandíbulas al mismo tiempo. En respuesta, el Guardián Buda elevó su poder mágico en gran medida para resistir la fuerza destructiva del rayo divino, disipándolo en su lugar.

Una batalla de ida y vuelta entre iguales. Su maestro y querida hermana mayor sólo tenían ojos el uno para el otro, sin mirar a cualquier otra cosa en absoluto.

“¡Por favor, dejen de peleaaaaaaaaaaaaar~~~~!”

Todavía no hubo respuesta. Ellos no estaban escuchando en absoluto. “Disculpen~~~~. ¡Ambos dejen de luchar ahoraaaaaaaaaaaaaaa~~~~!”

La tercera vez no funcionaba. Aisha se sintió descorazonada. No se podía hacer nada. A pesar de que no se ajustaba a su personalidad, no tenía más remedio que recurrir a la fuerza.

“Oh reina de las serpientes, diosa del cielo, la tierra y la oscuridad. ¡Te suplico que muestres el rostro de una temible bruja!”

Al cantar las palabras de hechizo, invocó su autoridad como la Reina de Invierno.

El poder mágico y el aire frío, un incoloro y amorfo poder enredó a los dos Reyes Demonios luchando, restringiéndolos. Era como una gran serpiente capturando a presas.

“¿¡Hmm!?”

“¿¡Qué diablos es esta autoridad!?”

El cuerpo del lobo gigante se sacudió como un ser humano mientras que Luo Hao también se sorprendió.

Sin embargo, ya era demasiado tarde. Completamente obsesionado con el oponente en frente de sus ojos, los dos Reyes Demonios fueron inmovilizados, atrapados por la “Maldición de la Reina de invierno.”

El lobo gris gigantesco fue capturado actualmente por la Serpiente de hielo igualmente gigantesca.

El cuerpo largo de la serpiente de hielo se había envuelto apretadamente alrededor del cuello, el cuerpo y las extremidades del lobo gigante, restringiendo sus movimientos. Por otra parte, el lobo gigante, es decir, el Marqués Voban, no era el único aprisionado.

EL avatar de Luo Hao, el Guardián Buda también sufría la misma suerte. Otra serpiente de hielo había aparecido de repente a atacarla.

“Nunca me esperaba– ¿¡Así que esto es obra tuya!?”

Luo Hao-oneesama finalmente miró de lleno a la Aisha cercana.

Esta mujer china tenía una extraña costumbre de negarse a mirar directamente a cualquier persona sin importar qué. Incluso Aisha sólo pudo entrar en una esquina de su visión.

Probablemente era extremadamente timida, Aisha concluyó. Sin embargo, después de una serie complicada de acontecimientos, las dos doncellas fueron finalmente capaces de enfrentarse entre sí directamente.

“En realidad, esta es la verdad, aunque yo lo he ocultado hasta ahora.” En este momento, Aisha hinchó el pecho.

“¡Al igual que los dos, yo también soy una persona con poderes divinos!” “¿Qué tontería– estás balbuceando?…”

“Hablando de eso, me he encontrado con el siguiente dicho antes. Tragedias excesivas se convierten en comedias… Existe un punto de vista como tal en el oeste.”

Una voz de desesperación escapó desde las fauces del Marqués lobo. Por otro lado, onee-sama sacudió la cabeza con un comportamiento de dolor.

Ambos estaban dando un aura de incredulidad hacia la realidad en su rostro. Todavía manteniendo su forma de lobo gigante, Voban continuó hablando:

“Sin embargo, muchas cosas incomprensibles, finalmente tienen una explicación si eres un asesino de dioses. Todavía.”

“Nunca esperé que fueras mi par… que imposible de aceptar.” Los dos Reyes Demonios murmuraban con inexplicable desafío.

En la actualidad, los dos estaban siendo fuertemente refrenados por las serpientes de hielo, que no sólo ataron enemigos como una cuerda.

Los cuerpos de las serpientes de hielo también dieron un aire frío a baja temperatura, tratando de congelar a los dos Reyes Demonios.

El lobo gigante, la belleza china y su deidad guardiana– Sus cuerpos enteros estaban empezando a congelarse.

Capaz de congelar incluso a los dioses de los mitos y asesinos de dioses, esto era una muestra de la grandeza de la Reina de invierno y la dura falta de piedad.

A este ritmo, iban a sufrir hipotermia, causando necrosis en todo su cuerpo. Congelados hasta la muerte sería lo último.

Era de suponer que detectaron de un futuro tan siniestro a través del instinto…

Los dos asesinos de dioses presos intercambiaron miradas curiosas y de repente comenzaron a elevar su poder mágico. Los dos llevaron a cabo esto prácticamente al mismo tiempo.

Tenían la intención de aumentar su poder mágico al máximo con el fin de resistir a los grilletes malditos de la Reina de invierno.

“¡Ohhhhhhhhhhh!” “¡Hahhhhhhhhhhh!”

“U-Um, ¿qué pasa con ustedes dos de repente? Si dejan de luchar y se reconcilian, voy a disipar el hechizo de sujeción, ¿¡está bien!?”

“¡Como si cualquier persona haría eso!”

“¡En serio, voy a liberarme de tus ataduras por mi propio poder, entonces te enviaré a ti y al Rey Voban a la tumba!”

“Tú robaste mi línea. ¡Yo, Voban, derrotaré a esa chica tonta y al Maestro del Culto Luo Hao!”

“¡E-esperen! ¡Por favor, cálmense, los dos~!”

Emitiendo su dignidad como Reyes Demonios al viento, estaban hablando como niños.

En efecto. En última instancia, la ignorancia y la imprudencia en atreverse a desafiar a dioses era la personalidad característica común de la raza conocida como asesinos de dioses.

Precisamente por eso, el comportamiento tonto estaba relacionado a la imprudencia desde esas situaciones.

Ya fuera el Marqués Voban o el Maestro del Culto Luo Hao, serían considerados “viejos” según los estándares de la gente común. Sin embargo, todavía eran muy jóvenes para los Asesinos de dioses.

Por otro lado, Aisha comenzó a entrar en pánico después de ver a los dos reyes demonios resistiéndose.

No estaba acostumbrada a luchar. En una lucha directa contra la ira de dos reyes demonios, probablemente conseguiría ser derrotada sin poder hacer nada.

“¿¡Es-esto es extremadamente maaaaaaaaaaaaaaalo~~~~!?”

En el instante en que ella entró en pánico, oyó un susurro en su oído. (Vamos a decir una cosa buena.)

“!”

Una voz masculina joven. Aisha saltó la sorpresa.

(Si por ejemplo, los enviaras por debajo de la superficie, podría ser capaz de cuidar de ellos.)

“Por debajo de la superficie… ¿¡Quiere decir el subterráneo!?” Aisha asintió inmediatamente.

A pesar de escuchar repentinamente una sugerencia de una voz extraña, no había tiempo para dudar.

Como uno de los que vendrían a ser nombrados Campiones, Aisha también poseía una disposición que podría llamarse tonto e imprudente, por supuesto.

“¡Esto es sin duda una dirección de fortuna!”

Murmurando en completa confianza, al instante cantó palabras de hechizo.

“Oh hija de la diosa con un cabello hermoso—por el presente abre el palacio de la tierra.”

“Un terremoto… ¿¡No!?”

“Es el poder de una madre de tierra… ¡Una diosa en el poder durante el invierno y la muerte!”

Voban gritó mientras Luo Hao-oneesama se sorprendió.

Bajo los pies de los dos Reyes Demonios, una fisura gigante de repente se abrió en el suelo.

Era una fisura lo suficientemente amplia como para tragarse por completo al Marqués Voban, que se había convertido en un lobo gigante, y Luo Hao-oneesama, que dirigía un Guardián de Buda semidesnudo.

Además, era sin fondo. Esta fisura llevaba al inframundo subterráneo. La primera deidad que Aisha había matado era la diosa Perséfone.

Ella era una doncella benévola de la primavera, así como la esposa de Hades, el dios del mundo subterráneo. Cada vez que llegaba el invierno, descendía al inframundo subterráneo para convertirse en la cruel reina de la muerte.

La autoridad de Aisha poseía la carta de triunfo llamada [Descenso al Inframundo], que exhibía su naturaleza bilateral.

En la actualidad, los dos reyes demonios que se convirtieron en los sacrificios fueron cayendo en la fisura subterránea. Sin embargo, las cosas no procedieron sin problemas.

“Hum. ¡Truco pequeño!”

“¡Sería una ilusión si crees que me falta una técnica de vuelo!”

Voban lanzó su gigantesca transformación de lobo mientras que caía y convocó una tormenta.

Tenía la intención de volver al cuerpo de un ser humano y utilizar el viento para llevarse a sí mismo hacia la superficie. Mientras tanto, Luo Hao-oneesama estaba usando un método aún más simple.

Ella des-invocó a su defensor, el Guardián de Buda, y se preparó para ascender rápidamente con un hechizo de vuelo.

-Normalmente hablando, simplemente caer en una grieta del [Descenso al Inframundo] ya sería suficiente para hacer que el cuerpo entrara en un estado de animación suspendida.

Sin embargo, los dos habían elevado su poder mágico al máximo antes al resistir las restricciones de serpientes de hielo de Aisha. Por lo tanto, eso fue probablemente la razón por la que podían soportarlo.

“N-necesito algo para empujarlos hacia abajo.” Pensando en eso, Aisha tuvo un golpe de inspiración.

Algo adecuado pasó a estar sentado en el bolsillo de su delantal. La varilla de tres puntas de acero, lo que ella había recogido por casualidad antes.

De hecho, ella había sentido que era una herramienta extremadamente peligrosa cuando la cogió.

Siguiendo su intuición, vertió todo su poder mágico en la barra de acero y la arrojó al suelo con la fisura “¡Hey!” La varilla de tres puntas comenzó a crepitar liberando la electricidad.

Este rayo de poder máximo pasó a atacar a los dos reyes demonios que intentaban volar hasta la superficie del terreno. Con las restricciones de la maldición de las serpientes de hielo, el Descenso al Inframundo, y además este ataque de rayos divino.

“¿¡El triple vajra!?” “¡Aprisa!”

Los dos reyes Demonios fueron capaces de resistir estos ataques múltiples, a duras penas, probablemente debido a que ambos poseían una cantidad bastante aterradora de poder mágico.

Especialmente el Maestro del Culto Luo Hao. Ella sacó rápidamente la varilla de tres puntas para su utilización en las artes taoístas y la tomó en su mano.

Celebrada en la mano de Luo Hao-oneesama, la varilla finalmente dejó de emitir electricidad y se calmó.

Pero en este momento, una fuerza de atracción temible fue generada desde las profundidades de la fisura de Aisha. Era un poder de atracción universal, arrastrando todo a la parte inferior de la tierra.

Incluso la atmósfera por encima del suelo se estaba aspirando, lo que resultó en un poderoso viento que fluía hacia el fondo de la fisura.

“”¿¡!?””

El Marqués Voban y Luo Hao-oneesama fueron en tanto aturdidos.

Sin poder hacer nada presos por la fuerza de atracción, no tenían más remedio que caer en las profundidades de la tierra.

Debido a sufrir múltiples ataques de Aisha, probablemente estaban demasiado preocupados para resistirse a la fuerza de atracción.

Como nota al margen, hablando de la perpetradora-

“¿Oh cielos? ¿Qué clase de dios aparecerá en este momento?”

Aisha se sentia bastante desconcertada por un fenómeno que no se derivó de su propia autoridad.

Además, fue capturada inmediatamente por la fuerza atractiva también. “¡Kyahhhh!”

Tragada por la fisura que había creado por sí misma, ella cayó a la fisura.

Por otra parte, esta fuerza de atracción no llevó a los tres Campiones al inframundo subterráneo. En su lugar, los transportó a otro mundo-

Fue un poco más tarde cuando se dieron cuenta de esto.

***

“Owww…”

Aisha se suponía que caería hacia el fondo de la tierra, pero se encontró acostada en pastizales en el momento en que llegó a sus sentidos.

Las articulaciones de todo el cuerpo le dolían. Sin embargo, eso era todo. Al parecer no había sufrido ninguna lesión pesada tal como fracturas. En comparación con la caída a los infiernos subterráneos, esto no sería más que un rasguño…

“Oh vaya oh vaya, que bien.”

Empujándose al instante a sí misma, Aisha exclamó.

Una vasta extensión de la “primavera” se extendía ante sus ojos. Una vegetación floreciente se exhibió hidratada con hojas brillantes del rocío de la mañana. Flores adorables estaban floreciendo en varios colores por todo el lugar.

Un desierto hasta lo que el ojo podía ver.

No había casas cercanas. Ni siquiera una sola estructura hecha por el hombre. “Qué hermoso lugar… Pero, ¿por qué he venido a este tipo de lugar?”

Aisha se puso de pie e hizo unas cuantas rondas en la zona. Una suave brisa soplaba contra su piel, haciéndole cosquillas.

La luz solar que caía desde el cielo del este también era cálida y agradable. Era un ambiente cómodo donde uno podría tener la esperanza de permanecer aquí para siempre.

Era evidente que debía estar en la metrópolis de Londres, en pleno invierno, ¿así que entonces qué cosa estaba pasando exactamente?

Aunque la mansión del Marqués Voban fue definitivamente rodeada por un paisaje lleno de naturaleza, después de la embestida de una poderosa tormenta de nieve como tal, debía ser bastante lejos de esta escena de la primavera.

Mientras que Aisha estaba desconcertada… “Onee-san, parece que estás bien ahora.” Una voz masculina linda habló con ella.

Había oído la misma voz durante la pelea entre el Marqués Voban y onee-sama.

Aisha cambió su mirada para ver a una persona pequeña caminando hacia ella, sólo diez pulgadas (aproximadamente veinticinco centimetros) de altura.

Aproximadamente diez años si se juzgaba por las apariencias humanas, se veía muy joven.

Estaba vestido en verde con un sombrero puntiagudo.

En lugar de un solo niño de tal descripción, había un total de siete de ellos. “¿Podrían haber sido ustedes chicos?”

Aisha se detuvo y miró a las caras de los chicos.

“¿Me transportaron aquí?” “En lugar de nosotros.”

“En realidad, fue nuestro jefe. La reina de la tierra de las hadas.” “Así como se puede ver, somos hadas.”

“Nosotros fuimos capturados por aquel malvado Rey Demonio viejo.”

Malvado Rey Demonio. Probablemente significaba el Marqués Voban. Al darse cuenta de eso, Aisha sonrió irónicamente.

Mientras tanto, las siete personas diminutas continuaron hablando todos a la vez. “Ese mago trabajando para él dijo algo acerca de “investigación”.

“Usándonos.”

“Hemos estado esperando todo el tiempo para tener la oportunidad de escapar.”

“Entonces vimos que ustedes estaban luchando. No había ninguna más oportunidad que ésta, por lo que le oramos al Señor de las Hadas”.

“Por favor, abra un portal al reino de las hadas.”

“Sin embargo, no podemos invocar el portal a la superficie por nuestro poder, por lo que le dijimos para romper el suelo.”

“Entonces, el portal subterráneo aspiró a todo el mundo.”

Después de escuchar a la esencia de las cosas, Aisha resolvió la situación.

Al igual que la varilla de tres puntas, esto era probablemente el destino interpuesto por la autoridad de suerte. Gracias a eso, había superado esa situación.

“¿Entonces donde esa señora, la que estaba luchando contra el maestro—el malvado Rey Demonio—se fue?”

“¿Dónde eh?”

“Al igual que usted, debería estar en algún lugar en el reino de las hadas.”

La ubicación actual de Aisha era aparentemente un mundo conocido como el “reino de las hadas.” Desde que estaba muy bien, su maestro y onee-sama estaban sin duda ilesos.

Mientras pensaba eso, Aisha pensó en otras ideas.

Dada esta rara oportunidad de visitar el reino de las hadas, también podría ir viajando en este mundo.

Además, las siete diminutas hadas también parecían estar animándola. “Hey, onee-san. ¿Quieres visitar la ciudad de hadas juntos?”

“Es el lugar donde vive nuestra reina.” “La gente común no puede ir allí.” “Vamos a abrir el camino para usted.”

“Eh, ¿de verdad? Entonces, muchas gracias. ¡Estoy muy feliz!” Aisha aceptó esta sugerencia inesperada.

Este reino de las hadas era lo que los humanos llamaban el plano astral o el Infierno.

Era un lugar gobernado por varios dioses conocidos como los señores de las Hadas. Además, era el misterioso dominio en el que “un ser que solía ser un Dios Hereje” vivía en reclusión.

Por otra parte, las siete personas diminutas que habían invitado a Aisha no eran definitivamente hadas benévolas.

De hecho, pertenecían a una raza maligna de enanos negros. Para matar al aparente asesino de dioses estúpido, que habían descubierto por casualidad, como un sacrificio, tenían la intención de engañarla desde el principio.

En el lugar donde se la llevaron, Aisha se encontró con la reina del reino de las hadas.

Luego, después de una serie complicada de acontecimientos, “la autoridad para abrir portales de hadas” finalmente cayó en manos del Rey Demonio Aisha… Pero eso sería un cuento aparte.

Además, Aisha había recibido varios efectos de la buena suerte de su invocación de la autoridad anterior.

En el momento en que se dio cuenta de que el precio era un encuentro con las hadas malignas, ya había sido atrapada en un vórtice de conmociones.

En última instancia, el poder de traer fortuna repentina también era capaz de convocar una desgracia abrupta y desastres, manteniendo así un equilibrio entre ellos.

Pero en aquel entonces, Aisha todavía era una niña sin experiencia de diecisiete años.

Por lo tanto, era completamente ajena a este hecho.

***

Pasó el tiempo, llegando al año 1860.

La noche de la tormenta de nieve con tres asesinos de dioses reunidos en un mismo lugar había sucedido hace muchos años.

Dejanstahl Voban deseaba desesperadamente olvidar aquella memoria, pero no fue capaz de borrarlo de su mente no importa qué.

Simplemente encontrarse con un par -asesino de dioses- ya era bastante raro. En adición, ambas con las que se había encontrado en ese entonces le habían dejado profundas impresiones.

Especialmente la asesina de dioses india llamada Aisha. Fue un error inaceptable para él haber fallado en discernir su identidad.

Lo más probable es que lo mismo aplicara para el Maestro del Culto Luo Hao del reino marcial chino, además de él mismo.

Sin embargo, probablemente no se podía hacer nada. Y pensar que una chica con problemas mentales aparentes podría ser un asesino de dioses, totalmente imposible de imaginar sin importar que…

Cada vez que se convenció a sí mismo de esta manera, siempre sentia un impulso para hacer chasquear su lengua.

Como nota al margen, después que “se fue” por la autoridad de Aisha en ese entonces, el Marqués Voban y el Maestro del Culto Luo Hao fueron arrastrados en el plano astral.

Voban pasó por varias aventuras después de eso antes de finalmente volver al mundo real.

El Maestro del Culto Luo Hao volvió probablemente de una manera similar. O tal vez usando algún tipo de magia voladora, ella podría haber vuelto al mundo real directamente. Voban había oído rumores sobre ella con frecuencia desde China.

Sin embargo, no había tenido noticias de la chica Aisha. “¿Murió en combate en algún lugar?”

Después de murmurar eso, Voban sacudió la cabeza con pensamientos negativos.

Una chica suave de ese tipo no era adecuada para ser un asesino de dioses. A pesar de que no sabía si estaba en este mundo ni en el plano astral, de cualquier manera, estaba sin duda viviendo una vida sin preocupaciones en alguna parte.

“No importa. Yo no deseo volver a verla. Yo probablemente no me involucraré con ella nunca más.”

Dicho esto, tenía la intención de olvidar este incidente.

Desde entonces, el “Marqués Voban” también cambió la forma en que vivió.

Cansado de la vida instalada en Londres, ahora estaba moviéndose entre las principales ciudades de todos los países. Berlín, París, Barcelona, etc. Había muchos lugares interesantes para vivir como él quería. Acompañado por el desarrollo industrial, las muchas ciudades de las grandes potencias de Europa fueron experimentando cambios trascendentales.

Hablando de cambio, el mundo de la magia también estaba cambiando.

El Marqués Voban le había dado al palacio de Buckingham una visita a su antojo en el pasado.

Debido a este incidente, los magos de Londres, al parecer, habían montado una organización conocida como el Witenagemot. Según se informaba, operaba bajo la bandera de la defensa de la reina del alcance de los malvados Asesinos de Dioses violentos. En su núcleo, aparentemente era un club secreto de magos antiguos conocido como el Club Diógenes.

También, Campione.

Un italiano que había servido a un aseisno de dioses en el pasado publicó un documento.

Según se informó, su documento registró detalles sobre los Reyes Demonios que habían dado muerte a los dioses y usurpado sus autoridades— Contenido revolucionario sobre qué tipo de seres eran.

El titulo real de “Campione” se iba a ofrecer a estos Reyes Demonios, mereciendo temor y reverencia.

Este documento resultó ser inesperadamente influyente. Últimamente, Voban había sido llamado cada vez más un Campione.

“Oh, bueno, de hecho es cierto.”

Sonriendo con deleite, Voban se encogió de hombros. “Es mucho más conciso que el Señor de reyes magos”.

Actualmente estaba disfrutando de unas largas vacaciones. No sólo dejando su ciudad de residencia, sino incluso Europa, así, había llegado a la costa este de África.

En la cubierta del barco de vapor, estaba apoyado en una barandilla, disfrutando de la brisa del mar.

Saliendo desde Ciudad de Cabo, el barco se estaba moviendo sin problemas a lo largo del río Zambezi. Todo esto comenzó con un informe de emergencia del vizconde Gerard, que había oído un cierto rumor.

‘Hay un valle en las profundidades de las montañas aguas arriba del río Zambezi. Un lugar que ofrece muchas cuevas, leyendas hablan de las personas que heredan la magia primordial que incluso han construido un pequeño reino allí. He oído que varios meses antes, un inglés que se había perdido y llegó a ese lugar… se reunió con una diosa existente’.

“Ella tenía la belleza de otro mundo e incluso poseía poderes misteriosos. ‘Con todo el mundo lesionado… Incluso aquellos al borde de la muerte serían

sanados simplemente al ofrecer una oración. Tal vez por eso, toda la gente del reino

la veían como una diosa. Y harían todo lo posible para cumplir con sus peticiones no importa qué. Si fuera por ella, incluso morirían con mucho gusto…’

‘El hombre que informó de esto todavía debería estar en Londres, pero al hablar con una expresión entusiasta, expresó su deseo de la diosa de nuevo, aunque sólo fuera por una vista más’.

‘¡Hey Dejan, tal vez esa Diosa Hereje podría descender una vez más!’

No sería malo entretenimiento confirmar la veracidad de este informe, mientras que estaba en vacaciones de todos modos.

Debido a esta noción en el capricho, Voban se dirigió actualmente en un viaje a la tierra de África.

Si todo iba bien, tal vez él podría ser capaz de luchar contra una diosa en alguna parte. Además, se podría añadir una divagación– Dos semanas más tarde, el Campione Europeo llegaría a aprender una verdad que no tenía deseos de saber.

El lugar aguas arriba del río Zambezi no tenía una diosa. En su lugar, era en realidad su vieja conocida, una chica.

Ella se alegró de su reencuentro con una sonrisa no diferente de hace varios años. Sin embargo, sus autoridades ya habían evolucionado en una dirección más inquietante que hace varios años.

Por otra parte, era consciente de que, en cierto sentido, esta chica era su verdadera némesis.

Mientras disfrutaba de un viaje en barco, el joven Marqués Voban se sumergió en los pensamientos del enemigo que nunca se encontró esperándolo en algún lugar en el mundo-