Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 16

Capítulo 3: Final

Parte 8

“Contactaste a Niku y los demás, ¿verdad? ¡De acuerdo, vamos! ¡Les mostraremos cuán fuertes pueden ser las parejas casadas!”. Rokufa-ko dijo.

“(Tenemos que ganar antes de que cambie los diseños, sí)”, respondí.

Rokufa-ko, el ángel, vestía un conjunto completo de Armadura Viviente… armadura. El conjunto de armadura anteriormente masculino le quedaba perfectamente gracias a su {Aptitud de Equipo de Cuerpo Completo}. Los sacerdotes se sorprendieron al verla poniéndoselo, diciendo que era un milagro.

La razón por la que Rokufa-ko podía usarme era simple. Este cuerpo tenía una capa de oricalco, lo que lo hacía tan fuerte ofensiva y defensivamente como podía ser. Luego, usando el vuelo de su ángel, podría ignorar todas las trampas en el suelo. En otras palabras, podríamos forzar nuestro camino hacia la victoria. Deberíamos poder avanzar rápidamente, ya que los ángeles no parecían cansarse mientras volaban.

“¡De acuerdo, vamos!” exclamó Rokufa-ko.

“(Sí… Espera, ¡¿qué?! ¡Oh! ¡¿Puedes volar tan rápido?!)”

Rokufa-ko pateó el suelo y las paredes para acelerar. Ella saltó completamente por el área de entrada, volando por la ruta correcta antes de que los Goblin Zombis pudieran siquiera reaccionar.

“La mazmorra imposiblemente difícil que incluso la Suma Sacerdotisa no pudo conquistar… ¡Así es! Ahaha, adelante, elógiame.”

“(Seguro que estás de buen humor.)”

“Aha, me siento mejor que nunca, obviamente”.

Bueno, sí, nadie se sentiría mal si se felicitara a su mazmorra.

No nos perdimos en la zona del laberinto. Usó las cabezas de Golem como plataformas mientras cargaba.

“Espera, ¿qué? ¿Siempre hubo una pared aquí?” ella preguntó.

“(Modifiqué esta parte en el pasado. Estoy bastante seguro de que este muro estaba aquí cuando llegó Alca)”.

“Ya veo. Ya hemos agregado más a la mazmorra, por lo que es aún más malvado y diabólico”, dijo Rokufa-ko con orgullo, golpeando la pared para atravesarla. Puede que solo haya sido una capa, pero el poder del oricalco aún era de temer. Avanzamos más adentro, tomando un atajo a través del área de la escalera de caracol saltando hasta el fondo.

“¡Así que! Había un lobo negro con el que nos cruzamos hace un segundo.

¡Quizás esté recreando a Rin!” “(Quizás.)”

El área de almacenamiento también se recreó bastante bien. Aunque no tuvimos tiempo de ver lo que había hecho con el pasillo que conducía a la [Caverna de Llamas]. Dicho esto… ¿Esta mazmorra artificial, o mejor dicho, mazmorra de muertos vivientes? Era bastante parecido a lo real, lo que era impresionante; aunque tal vez ese era el poder del Papa.

Por lo tanto, hicimos todo el camino hasta el coliseo sin parar… O, espera, en ese momento todavía era solo la Sala del Jefe. Aquí fue donde el Haniwa Golem con el brazo cargado había luchado contra Alca y el Limo Lobo Negro, Rin. Esto era todo lo que Alca sabía sobre nuestra mazmorra, así que en resumen, habíamos llegado al final.

Era una habitación rocosa de color púrpura, lo suficientemente ancha como para que un Caballo Golem corriera a lo largo de las paredes. En el centro había un caballero sin cabeza que vestía un caballo sin cabeza Dullahan y el papa esquelético. Eran los jefes de la mazmorra de los muertos vivientes, al parecer.

“Ustedes dos… Un ángel con una armadura viviente, qué interesante. La transformación de la armadura para adaptarse a su portador es una solución inteligente. Aun así, pensar que llegaste por aquí sin perderte. ¿Es eso algún poder angelical? No parece justo”, dijo el Papa.

“Algo como eso. Ahora date por vencido y ríndete, Papa”, dijo Rokufa-ko, señalándolo con el dedo.

“Bueno, independientemente. Todos ustedes están en el corredor de la muerte. Todo lo que necesito es Alca, el producto exitoso de mi trama de Héroe artificial. Tendré que tomarme mi tiempo para volver a entrenarla a fondo, pero… supongo que será divertido y efectivo mostrarle los huesos del hombre del que estaba tan enamorada”, se rio el Papa, con los huesos castañeteando.

“(Seguro que te gusta hablar, ¿no es así, papa?)”

“Correcto. Este soy yo del que estamos hablando aquí. Con una sola palabra, puedo convocar a un ejército de muertos vivientes de mil personas. ¿Crees que tú, entre todas las personas, podrías vencerme?”

“¡Esa es nuestra línea! ¡Invoca, llama a Kobold!” Rokuko declaró, abriendo su {Almacenamiento}. Un kobold salió disparado de su {Almacenamiento}, moviendo la cola alegremente con dos cuchillos Golem en la mano. “¡Vamos!”

“¡Ha! ¿Qué puede hacer un simple kobold?”

El kobold se acercó al trote, y de repente dio un paso brusco hacia adelante y se deslizó cerca del papa. Sin embargo, el Dullahan se interpuso sin problemas. Su espada bloqueó los cuchillos Golem.

“Oh, casi bajé la guardia. Ocúpate de él, Dullahan.”

“Nada mal. Ambos comenzaremos con nuestros subordinados, entonces. Encárgate, Niku.”

El caballero sin cabeza y el Kobold… o más bien, el Kobold poseído por Niku, se enfrentaron. El Kobold preparó su cuchillo y cargó. Se deslizó debajo del caballo y cortó a sus pies. En poco tiempo, se derrumbó.

“Arrodíllate ante mí—{Gravedad Diez}.”

El maná negro salió disparado del papa. El Kobold se derrumbó en el suelo y luego explotó. Dullahan también fue aplastado contra el suelo. Pensar que también atacaría a su aliado.

“No esperaba que un Kobold fuera tan destructivo. Supongo que los monstruos de un Núcleo No Muerto no pueden hacer mucho”, dijo el Papa encogiéndose de hombros. Luego miró hacia nosotros.

“… ¿Por qué puedes pararte? La gravedad en esta habitación se ha multiplicado por diez.”

“¿Eh?” “(¿Hm?)”

Rokufa-ko inclinó la cabeza. Pensándolo bien, tenía razón; el Kobold fue aplastado, pero no sentimos el peso en absoluto.

“Ah, ya veo, así es como es. ¿Cómo podría olvidarlo? Los ángeles son como fantasmas y pueden cancelar la gravedad. Es un efecto conceptual.

¿Y uno que se extienda a la armadura?”

Los ángeles no volaron, flotaron. En otras palabras, operaban fuera de la gravedad. La armadura probablemente estaba bien ya que la habilidad del ángel hizo que la armadura cambiara para adaptarse a su flotación.

Extendí una mano hacia el papa y lancé {Ráfaga Elemental} sin ningún cántico… y él lo esquivó.

“{Rayo de Juicio}, ¿eh…? No está mal, ángel; no es fácil lanzar magia de nivel Rey sin un canto.”

Aparentemente confundió {Ráfaga Elemental} con otro tipo de luz. Realmente no podía culparlo, ya que ambos eran rayos de luz. Aunque a diferencia de ese hechizo de Luz, mi hechizo era eficiente en maná. Podría explotar una tonelada como si nada.

“Hrm, aha, entonces puedes lanzarlo en secuencia rápida. Tienes una capacidad de maná increíble, a pesar de que no lo parezca. ¿O se debe a los remanentes del Dios de la Luz? Ahora deseo capturarte e investigar un poco. Tal vez seas útil para matar a los dioses”, dijo el Papa, mientras bailaba ligeramente en su cuerpo esquelético para esquivar las ráfagas, a veces usando teletransportes de corto alcance. Aun así, esquivar significaba que sería malo para él si uno golpeaba. Lancé una ráfaga desde mi rodilla, con la esperanza de lanzar un ataque sorpresa, y…

“Hmm. También puedes disparar desde allí, por lo que veo”, dijo el Papa, apartando mi haz de luz con el bastón del Papa en su mano. El rayo de luz era claramente más grande que su bastón de papa, pero cuando lo golpeó, dobló su ángulo y lo evitó.

“Ahaha, este es un bastón de adamantita hecho con toda la tecnología que el Reino Santo tiene para ofrecer. Mi maná fluye bien a través de él… ¿Qué te parece? Nuestra tecnología supera a la de los enanos que rodean el imperio por décadas”, continuó, haciendo una pausa. Intenté disparar varias ráfagas más, pero las derribó todas con su bastón con algunas paradas inhumanas.

Rokuko chasqueó la lengua. “Tch, eres un resbaladizo”.

“Qué, haces que suene como si pudieras vencerme si golpean. Muy bien… A ver qué pasa”, dijo el Papa, parándose en su lugar. Definitivamente tenía un contra plan en marcha, pero no morder el anzuelo no era una opción. Lo golpeé con uno especialmente grande… Pero como era de esperar, el Papa ni siquiera se movió, incluso después de recibir un golpe directo con

{Ráfaga Elemental}.

“Hahaha, muy mal. No tiene ningún efecto en mí”, se rio entre dientes. Ese también había sido un golpe directo, y no lo había atravesado por la espalda. Pero ¿por qué no funcionó? {Ráfaga Elemental} fue lo suficientemente fuerte como para funcionar incluso en Leona.

“Como se esperaba. Ese hechizo es otra cosa, pero no es suficiente para superar mi defensa mágica.”

“¡Ngh! ¡¿Qué truco estás haciendo?!”

“Desafortunadamente para ti, a diferencia de los milagros de esos tontos, aquí no hay truco ni engaño. Esta es simplemente la diferencia de nuestra experiencia, nuestra existencia. Soy un Elder Lich que ha vivido más de quinientos años. He conquistado incluso lo que debería ser mi mayor debilidad, la magia de la Luz… En resumen, la magia simplemente no funciona conmigo”.

“¿Has pasado los últimos cinco siglos modificando tu cuerpo o algo así?”

“Hm, algo por el estilo. He aprendido de ustedes los humanos y acumulado experiencia a lo largo del tiempo, tratando el esfuerzo sostenido como la herramienta más valiosa. Afortunadamente, he pasado tiempo más que suficiente en este cuerpo”, dijo el Papa encogiéndose de hombros.

Si la magia no funciona, tendré que usar algo físico, pero… La gravedad diez veces mayor significa que no podemos usar Niku Kobolds, y él es rápido en sus pies. No veo cómo podemos dañarlo en absoluto. ¿Estamos atascados?

“Ahora es mi turno. Ahora veo que los ataques de gravedad no funcionarán, pero ¿cómo debería uno matar a un ángel? Hm… Trataré de aplastarte físicamente. {Prensa de Pared}.”

El Papa aplaudió, y un segundo después, paredes de piedra salieron disparadas de ambos lados, aplastándonos.

Y luego se separaron de nuevo. “¡Ngh, oh no, nos van a aplastar!”

“(Uh, quiero decir. Ya nos aplastaron, ¿no?)” “¿Bwuh? Pero no nos aplastaron”.

Rokufa-ko parpadeó sorprendida. ¿No se dio cuenta de que las paredes no se golpeaban contra nosotros? Hable acerca de ser lento en la captación.

“¿Qué en el…? Las paredes se derrumbaron… Bueno, veo que tus alas y tu halo no tienen forma física al menos”, dijo el Papa. Miré a un lado y vi que efectivamente había impresiones con forma humana en las paredes.

Ah, sí, todo este conjunto de armadura (Narikin) está cubierto con oricalco.

“Impresionante defensa. ¿Adquiriste un traje del Reino Santo de armadura completa de adamantita? Si es así, tiene sentido que un muro de piedra no haga nada… {Trueno}”, dijo el Papa, moviendo su mano izquierda como para aplastar insectos. Un instante después, un rayo cayó sobre nosotros.

“¡Eep, tan brillante!” Rokufa-ko gritó. Sin embargo, atravesó únicamente mi cuerpo metálico de Armadura Viviente, y Rokufa-ko en el interior no se lastimó en absoluto. De hecho, parecía que sus alas y su halo se volvieron un poco más brillantes que antes.

“El rayo tiende a ser efectivo contra el metal, pero ya veo, no funciona contra los ángeles. Tus resistencias son molestas.”

“Espera, ¿qué? ¿Esa cosa brillante era un rayo?”

Sentí que Rokuko no se dio cuenta de eso fue algo impresionante. Pero eso solo fue para mostrar cómo no estaba haciendo ningún daño. Los ángeles seguro que eran otra cosa.

“Así que seres como este protegen a los dioses, ¿eh? Esta es una buena oportunidad. Experimentaré con cómo matar ángeles. Solo me beneficiaré sabiendo cómo matar eficientemente a los ángeles soldados”, dijo el Papa, poniendo una mano pensativa en su barbilla. “Muy bien. Primero, ignoraré tus defensas y atacaré tu interior directamente. Aplasta tu corazón—

{Corazón Roto}.”

El Papa extendió su mano derecha, la abrió y luego la cerró en un puño. “¡Oh no, incluso yo moriré si mi corazón es aplastado!”

“(Oye, parece que tus alas y tu halo brillaron por un segundo allí. ¿Te resististe?)”

“¿Hmm? No sé”, dijo Rokufa-ko, presionando una mano sobre su pecho.

Sí, creo que sabrías si tu corazón estuviera aplastado.

“… ¿Resistencia a la maldición también? Verdaderamente molesto. ¿Qué hay de la magia de la oscuridad? {Pared Oscura}, y encima de eso, {Llama Oscura}”.

Su magia de la Oscuridad se activó, envolviendo la habitación en la oscuridad. Las llamas oscuras nos tragaron sin piedad, y…

“¿No pasó nada? Ngh, entonces, ¿qué podría funcionar?”

… No le hizo daño a Rokufa-ko en lo más mínimo. “(Espera, ¿no está oscuro ahora?)”

“¿Mmm? Puedo ver muy bien.”

Aparentemente, Oscuridad no funcionó con los ángeles. Aunque a juzgar por el brillo de sus alas y su halo, el poder del Dios de la Luz probablemente todavía estaba aquí.

“Aha, increíble. Pensar que podrías anular unilateralmente a Oscuridad. En ese caso, ¿Fuego? ¿Agua? Viento, Tierra”, dijo, lanzándonos hechizo tras hechizo. Sin embargo, un ángel con una armadura recubierta de oricalco era demasiado fuerte. El fuego se evaporó y el agua se apartó. El viento la sacudió un poco, pero la tierra ni siquiera pudo arañar su dura armadura.

“Mmm. Ninguno parece funcionar”, dijo el Papa. “Mi armadura es la mejor de su clase”.

“Ningún daño se desliza incluso a través de sus grietas. ¿Qué habilidad es esa?”

Era cierto que aunque había minimizado las grietas y aberturas en esta armadura Narikin, el casco de placas tenía agujeros para los ojos. Y, sin embargo, incluso esos agujeros no dejaban pasar el daño.

Eso probablemente se debió a que su habilidad de adaptación de armadura funcionó incluso para cubrir las grietas. En un juego, los personajes ganaron defensa de la armadura y sufrieron menos daño sin que se restringieran sus movimientos o se bloqueara su visión. Fue más o menos así. Hombre, cubrirse todo el cuerpo con oricalco, qué truco tan ridículo.

De todos modos, el Papa se llevó una mano a la barbilla. Hizo un sonido huesudo, golpeando.

“Es bueno saber todo esto. Y, sin embargo, preocupante. ¿Qué debo hacer para matarte?”

“Prefiero seguir con vida, solo digo. Y realmente, ¿qué tenemos que hacer para matarte? ¿O vas a decir que, dado que eres un no muerto, ya estás técnicamente muerto?”

“No seas ridículo. Aun así, estoy perdido… Puede que tenga que levantar las manos. Parece que está un poco más allá de mí matarlos a todos”, dijo el Papa, levantando la mano derecha. “Oh tú Narikin. Tengo una sugerencia.”

“(¿Una sugerencia?)”

El Papa asintió. “A este ritmo, no podré matarte. Eso podría considerarse mi derrota”, dijo, con los huesos tintineando. “La cláusula especial… Eres un Héroe, ¿no? Te devolveré a tu mundo original. Mi condición, entonces, sería que no te metieras más en este mundo. Con mi poder, incluso podría enviar a una segunda persona también. ¿Qué dices?”