Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 5

Capitulo 2: Cita Triple

Parte 2

Por lo tanto-

Kamito y sus compañeras, vestidas con sus uniformes, tomaron un paseo en carruaje hasta el puerto.

Al parecer, el sagrado Biblion estaba ubicado no muy lejos de aquí; estructuras simples de madera aparecían de lado a lado en esta zona del puerto, había un ambiente animado como el de una calle comercial celebrando una fiesta.

Además, los distintos países del continente también se habían combinado para recaudar fondos con diversos establecimientos de comida y entretenimiento para acoger a los espectadores del Blade Dance.

Debido a que este era el mundo espiritual original, estaba prohibido que los humanos estén aquí, esta calle de fantasía sólo aparecería por unos días.

Era un espectáculo sólo visible durante el Blade Dance. “Wow- el cielos está despejado hoy día.”

“Mm, porque estamos en las nubes, por supuesto.”

Claire se estiró como un gato mientras caminaba, ella y Kamito conversaban al caminar juntos.

Entonces, una refrescante brisa fresca soplaba, y el cabello de Claire, atado en dos coletas, se mecía en el viento.

Suspendida distante en el cielo, la isla flotante- Ragna Ys- no debería haber tenido oportunidad contra los fuertes vientos, porque esta tierra sagrada tenía la protección adicional del Señor Elemental del Viento, así que no estaban en peligro de ser arrastrados.

Como el evento principal del Blade Dance estaba a punto de comenzar, los nobles de países de todo el continente ya habían comenzado a reunirse aquí.

“Esto realmente es espectacular.”

“Sólo en la isla flotante se puede ver este punto de vista.” Ellis y Rinslet expresaron su asombro.

“… Hubiera sido genial si Fianna hubiera venido con nosotros.”

Mientras murmuraba, Kamito levantó la cabeza al claro y vasto cielo azul.

Por el momento, Fianna parecía estar buscando una manera de destruir la «Marca de la Oscuridad» grabada en Kamito. Ella había estado visitando incansablemente viejas conocidas de su tiempo en el «Instituto del Ritual Divino».

“Más tarde, vamos a comprar algunos regalos para llevarle a Fianna, ¿de acuerdo?” “Mmm, sí.”

La calle estaba llena de una gran variedad de tiendas.

Cuando estaban en los puestos temporales, los materiales que se hicieron no eran particularmente impresionantes. Sin embargo, los artesanos o los cocineros que trabajan en el interior eran los mejores talentos que habían sido reclutados de muchos países. El Blade Dance era una excelente oportunidad para mostrar el prestigio de la nación para que los países tiendan a gastar generosamente enormes sumas de dinero en esto.

El grupo se dirigió hacia el corazón de la calle comercial, y pasaron a un grupo de turistas que acababa de bajar de una nave voladora.

“Yo no quería decir esto, pero este lugar está realmente lleno.”

“Los hombres de todo el mundo… estoy empezando a sentirse mareada.” Ellis y Rinslet miraban a su alrededor con inquietud.

Parece que a las señoritas, que habían crecido en un entorno tan protegido, no gustaban de estos lugares bulliciosos.

Por otra parte, la ciudad aquí era diferente de la ciudad academia: los hombres representaban la mayor proporción de la gente de aquí. A pesar de que estaban entre las mejores elementalistas, aquí enseguida volvieron a ser niñas puros e inocentes. Cada

vez que un hombre, que pasaba rápidamente, rozaba los hombros con los de ellas, dejaban salir pequeños chillidos y se aferraban firmemente contra Kamito.

Claire no era la excepción, desde el inicio, en repetidas ocasiones se había estado pegando cerca de Kamito e inmediatamente se alejaba.

Cada vez que ella se apoyaba en Kamito, ella se ruborizaba; cuando ella chocaba con un extraño transeúnte, ella volteaba hacia Kamito.

(Esta chica tonta, ¿qué está haciendo?)

Cuando Claire se inclinó hacia él de nuevo, Kamito rápidamente tomó su mano. “¡Aaaah! ¡Q-Qué estás haciendo!”

La doncella gato de fuego gritó con enojo, y su cara se puso roja.

“¿Quién te enseñó a caminar de manera insegura? Eso es terriblemente peligroso.” “Bueno… b-bien, voy a dejar que me agarres la mano, pero solo aquí.”

Cuando los dos se tomaron de las manos, Claire volteó la mirada a un lado con timidez. “Eres demasiado astuta…”

Rinslet infló sus mejillas con tristeza, luego agarró la otra mano vacía de Kamito. “¿Rinslet?”

“Y-Yo estoy asustada de que te pierdas, por lo que debes aferrarte a mí.”

Entonces Ellis, también, se unió; viendo que las manos tanto de Kamito estaban llenas, no tenía más remedio que aferrarse a su brazo.

“¡E-Ellis…!”

“¡Hey… Capitana! ¡Estás bloqueando el camino aquí!” “¡E-Eres tú, no yo! ¡Deja ir la mano de Kamito ahora!” “¡Ah… todas ustedes, no puedo caminar así!”

Las chicas, que estaban aferradas a Kamito, comenzaron a pelearse.

Hicieron una escena tal que los transeúntes que pasaban cerca comenzaron a susurrar entre ellos:

“Rápido, ve por allá, tres chicas nobles están sirviendo a ese joven, wow.” “Eso es porque él es el rumoreado hombre elementalista, ya sabes…”

“Eso es demasiado perverso de él, hundir sus colmillos en esas pobres chicas delicadas.” “Pero, echa un vistazo a esas expresiones de las chicas, no parecen odiarlo en absoluto.” “Deben estar bajo algún tipo de extraño hechizo mágico, por supuesto.”

(Bueno… esta situación parece haberse vuelto un poco peor…) Kamito sentía por mucho tiempo la hostilidad de los extraños.

Sin embargo, él no deseaba empañar la reputación de las chicas que se relacionaban con él.

“Yo digo… hay demasiada gente aquí, así que ¿por qué no encontramos un lugar más fresco para descansar?”

“Mm, eso suena bien…”

Claire y las demás asintieron para mostrar su acuerdo. Parece que también estaban pensando lo mismo.

Miraron a su alrededor en busca de una tienda en donde podrían tomar una taza de té. Y luego-

“Kamito-san, mira… hay una tienda «La Parfait»* por allí!”

(*NT: La Parfait= francés que significa La Perfecta)

Rinslet señaló hacia una cafetería elegante mirando a través de la carretera.

“Oye, ¿¡esa es la famosa «La Parfait»!? Siempre he querido probar sus pasteles.”

“Si no recuerdo mal, ese café es muy popular en todo el imperio… Y-Yo estoy interesada también.”

Incluso Claire y Ellis sabían de él. Evidentemente, el negocio que se había establecido en la parada temporal era muy famoso.

“… En ese caso, ¿vamos a ir allí?” “¡Estoy de acuerdo!” “¡Sí!” “¡Mmhm …!”

El trío asintió con la cabeza y arrastró a Kamito hacia ella.

***

El puesto «La Parfait» estaba casi completamente lleno, tanto es así que el grupo tuvo que esperar un poco antes de ser atendido.

Mientras estaba sentado en la entrada esperando a ser atendido, Kamito examinó la decoración del puesto. Las vigas horizontales del techo eran naturalmente ramas dobladas de los árboles, Kamito estaba muy agradecido por la cálida atmósfera de esta madera única.

“Me sorprende que este lugar sea tan relajante. Cuando te oí decir que era una de las tiendas más populares del imperio, yo esperaba que fuera mucho más elegante y lujosa.”

“Esto es sólo un puesto temporal acondicionado para el «Blade Dance», así que por supuesto no va a estar tan bien decorado. Sus tiendas normales son tan buenas que señoritas aristocráticas estarían dispuestas a ocultar su identidad sólo para ser clientes desconocidas de la tienda.”

“Oh, así que eso es todo… Oye, hablando de eso, no he traído dinero en efectivo…” El rostro de Kamito de repente se puso pálido.

Una tienda donde incluso las hijas de nobles serían clientes desconocidas- esto debe ser sin duda una tienda de muy alta clase.

“Si se tratara de una tienda normal, no importa cuánto hubieras traído, aun así no podrías pagarlo.”

“Los puestos son gratuitos para los participantes del Blade Dance.” “Ya veo…”

Ante las palabras de Rinslet, Kamito dejó escapar un suspiro. Después de un tiempo, los cuatro fueron conducidos a sus asientos.

“Quiero un pastel de melocotón, un sorbete de melocotón… y un mousse de melocotón.” Claire abrió el menú e hizo un gesto con su dedo a las opciones de postre.

“Por qué pides tantas opciones de melocotón… ¿no has comido ya algunos en la mañana?

“N-No es asunto tuyo… ¿y qué si me gustan?”

“Esta tarta de crema con sabor a frambuesa también se ve deliciosa.” “S-Sí, eso parece sabroso.”

“Oh… En este plato se pone un poco de crema de hielo en un pastel de manzana caliente fresco para ser comidos juntos…”

“Vamos a pedir uno y dividirlo, cada uno podrá tener un poco. Kamito, ¿qué te gustaría?”

“Oooh… Pues bien, voy a pedir un pastel, supongo …” Kamito respondió superficialmente, pero luego-

“Qué es actitud, pareces tan reacio.”

“Realmente da lástima el postre que has pedido para comer.”

“Si eres un hombre de verdad, debes escoger con determinación… Bueno, yo estoy hablando de la elección del pastel.”

Por alguna razón desconocida, Kamito se encontró siendo severamente regañado por las señoritas.

“L-Lo siento…”

Las tres siempre discutían en el entrenamiento, pero en estas situaciones, siempre se comprendían.

Rinslet llamó a una camarera, y uno por uno ordenó esos pasteles y postres con nombres que accidentalmente podían hacerte morder la lengua.

“-Y por último, me gustaría cuatro tazas de té negro de la zona Laurenfrost.” “Sí”.

“Ah… ¡D-Disculpa, espera un minuto!”

Ellis llamó en voz alta para detener a la camarera, que se disponía a salir. “¿Sí?”

“Por favor, añádale un poco de crema batida y miel a mi té, y si se puede, algunos malvaviscos flotantes también.”

“Uh… lo siento, estimado cliente, pero nuestra tienda no sirve un tipo de bebida como tal.”

“Yo- es que no puede hacer una excepci- ¡oooh!” A mitad de su oración, Ellis fue detenida.

Era Rinslet que estaba pellizcando la parte posterior de su cuello.

“Hey, ¡qué estás haciendo!”

“¡Oh, santo cielo, no tienes vergüenza! ¡No me gusta decir estas cosas, pero la familia Fahrengart realmente no debe tener clase!”

Rinslet era muy estricta acerca de la elaboración del té, y le prohibió a Ellis añadir ingredientes al azar como ella deseaba.

“¡Y qué si eres de la familia Laurenfrost, es sólo una familia noble con más tierra, eso es todo!”

“¡N-No te atrevas…!”

Una intensa mini-tormenta estalló junto a Rinslet.

“¡N-No importa qué, no me importa, si no es dulce, no lo voy a beber!” “Si eso es así, ¿por qué no simplemente pides cocoa* justo ahora?” “¿No crees que la cocoa es demasiado infantil?”

“¡Sólo los niños llamarían a la cocoa infantil!”

(*NT: Para quien nunca la haya tomado aunque no lo creo pero existe la mínima probabilidad, la cocoa es el polvo del fruto del cacao, que ha sido industrializado y acidificado para su uso comercial en alimentos.)

“Bien, bien, deja de discutir, los pasteles están aquí.” Claire empujó suavemente el hombro de Rinslet y dijo.

“Hmph… no importa, la próxima vez le voy a enseñar a nuestra capitana cómo beber té.” “Las cosas dulces son más agradables…”

Ellis dijo de una manera medio-desafiante con los labios fruncidos.

No mucho tiempo después, la deslumbrante variedad de postres fueron entregados a su mesa.

Colocados en recipientes de plata, cada uno de los pasteles y panes parecía una obra de arte exquisita.

A la vista de ellos, la ira de las dos muchachas aristocráticas desapareció y fue reemplazada por expresiones de alegría.

“No puedo dejar de sentir que… comer algo tan hermoso casi sería un desperdicio.” “Estos bocadillos son hechos por los mejores chefs que representan a nuestro imperio.” Diciendo esto Claire, abrió su boca y tomó un bocado del pastel de melocotón.

“¡Waaah… realmente es delicioso!”

“Esta tarta de crema de frambuesa también sabe extraordinariamente refinada y deliciosa.”

“Mmmm, es probable que haya un poco de vino dulce agregado en este bizcocho… tengo que probarlo la próxima vez.”

Kamito escuchó los comentarios de las chicas, a continuación, puso su propio pastel en la boca.

“Oh, es delicioso.”

Aunque no era un conocedor de la comida, el sabor dulce en su boca hizo que tuviera una sensación rica y noble.

Pero, en comparación con esto-

En cuanto a las expresiones de alegría en los rostros de las chicas hizo que Kamito se sintiera inexplicablemente feliz a sí mismo.

“Kamito, ¿qué pasa?” “¿Huh? Oh…”

Kamito se sacó de su aturdimiento, sólo para encontrar a Claire sospechosamente mirándolo. Rápidamente desvió la mirada y fingió ignorancia.

“Pensar que este puesto será desmantelado inmediatamente después del Blade Dance, es una lástima.”

“Así es. Pero… hay una tienda en el imperio, así que sin duda tendrás la oportunidad de visitarlo otra vez.”

“Mmm, la próxima vez que vayamos, tenemos que estar seguros de traer a Fianna… y a Est.”

Kamito miró el sello espiritual en su mano derecha y murmuró. “Kamito…”

“Kamito-san…”

Ante esto, Ellis y Rinslet levantaron la cabeza. “-Est volverá, lo prometo.”

Claire habló en un tono tranquilo pero con confianza en su voz.

“Así que… sólo confía en ella y espera a que regrese, la única persona que puede ayudarla a salir de esto es su elementalista- tú.”

“… Mmmm, tienes razón.”

Kamito asintió- y luego reflexionó:

(… Junto a compañeros uno se hace más fuerte- probablemente se refiere a este sentimiento que estoy teniendo ahora.)

Hace tres años, la más fuerte blade dancer era de hecho muy rápida y fuerte. Únicamente en términos de habilidad como una elementalista, no tenía rival.

Pero estos poderes físicos eran frágiles y podrían ser fácilmente aplastados por un fuerte golpe; que eran fortalezas desarrolladas a través de la soledad.

El Kamito del pasado no tenía a nadie en quien confiar.

Después de perder a Restia, quedó sólo en una eterna desesperación. (Ahora, sin embargo, tengo compañeros dispuestos a apoyarme.) Así que mi corazón ya no se romperá.

No voy a caer en la desesperanza de nuevo.

(… Hasta ahora, Est me ha salvado muchas veces.) Kamito apretó el puño sobre la mesa.

(- Por lo tanto, ahora es mi turno. Sin lugar a dudas: Te salvaré.)

***

El santuario más importante en toda la isla flotante Ragna Ys- el Gran Salón del Señor Elemental del Viento- se encuentra sobre una zona montañosa. Estaba a cierta distancia del edificio donde los participantes del Blade Dance estaban.

Este edificio blanco fue hecho de una combinación de la tecnología de materiales de la mejor calidad y de vanguardia. La enorme construcción cubría en su totalidad la colina; se podía apreciar su majestuosidad incluso desde fuera de la isla flotante.

No era sólo el lugar donde los espíritus del viento escuchaban los decretos del rey espíritu de la tierra santa, también era donde las doncellas del «Instituto del Ritual Divino» elegidas por las distintas naciones practicaban sus devociones. Por lo tanto, aunque sea de la nobleza del país absolutamente no se le permitirá entrar.

Sin embargo, en ese momento mismo momento, había una dama fuera de la puerta gritando ansiosamente:

“¡Por favor, hazme un favor! ¡Concédeme una audiencia con Reicha-sama-!”

Fianna se separó de forma individual del equipo de cinco personas con el fin de trabajar por separado de Kamito.

Con una mirada seria, ella rogó al guardia de la puerta. “En serio, usted no se da por vencida.”

El guardia de mediana edad miraba a Fianna con ojos hostiles. Su rostro expresaba claramente su terquedad.

“Por favor, retírese. Nuestra puerta del «Instituto del Ritual Divino» no se abrirá simplemente para cualquiera, y mucho menos para conseguir una audiencia con Reicha- sama. Nunca escucharan sus peticiones.”

El guardia soltó una declaración que probablemente había repetido muchas veces antes. (… ¡Esto es tan exasperante! ¡Estas personas son tan tercas como siempre!)

Fianna maldijo con impaciencia para sí misma.

Una vez dicho esto, ella, de hecho, se esperaba una reacción así desde el principio, porque la persona que quería ver no era alguien que se reuniría con cualquiera.

(Si pudiera pedir prestada su fuerza, sin duda sería suficiente para romper la maldición en Kamito. Pero…)

El guardia miró a Fianna, sin molestarse en ocultar su expresión de desprecio. Evidentemente, él no tenía la más mínima intención de abrir la puerta.

(… Bueno, yo sé la razón desde hace tiempo.) Negándose a rendirse, Fianna se mordió el labio.

En que ella estaba pensando era en el Espíritu de Aniquilación de la princesa que había traicionado al Señor Elemental del Fuego- Rubia Elstein.

Había habido muchas esperanzas puestas en Fianna en ser su sucesora, pero el incidente con Rubia había dejado horrores imborrables en su corazón, lo que la hizo perder el poder de invocar su espíritu contratado, y con ello, su condición de doncella.

Y así Fianna Ray Ordesia se convirtió en la joven princesa perdida, decepcionando a las personas que habían tenido grandes expectativas de ella y que desacreditaron al

«Instituto del Ritual Divino».

(… Ustedes mente estrecha, sólo saben poner el esfuerzo como algo superficial, realmente me dan asco.)

Incluso sus propios padres- El emperador y la emperatriz de Areishia- y los diversos nobles todos no eran diferentes.

Cuando Fianna seguía siendo la sucesora a princesa, estas personas la habían adulado de todas las formas posibles. Sin embargo, una vez que había perdido los poderes de su espíritu contratado, de inmediato la empezaron a despreciar, cambiando sus actitudes más rápido de lo que uno podría pasar la página de un libro.

Por supuesto, no todos ellos eran así. Era sólo que la organización del «Instituto del Ritual Divino» se había desintegrado por el peso de su larga historia, y así de hecho tenía un lado oscuro.

Al ver la negativa obstinada de Fianna para irse, el guardia negó con la cabeza y dijo: “No quiero seguir perdiendo el tiempo contigo.”

Habiendo dicho esto, se volteó y regresó al templo. “Espera un minuto-”

Fianna se movió rápidamente para alcanzarlo, pero- “¡Aaaah!”

De repente, un fuerte viento se levantó y sopló frente a Fianna.

Fianna y Claire eran diferentes, ya que no había recibido entrenamiento de combate especial para elementalistas. Siendo demasiado tarde para protegerse a sí misma, ella cayó pesadamente al suelo.

“… ¿¡Qué!?”

Ella vio algo parado en la puerta- un espíritu mágico de aire que se parecía a un león alado.

Era un Espíritu Guardián; hacia contratos con no elementalistas, como este edificio. Este mismo edificio, era, de hecho- el verdadero santuario.

“Parece ser imposible pasar a través de la puerta principal…” Fianna miró al guardián mientras se lamía un rasguño en su labio.

***

Una espada cayó en la misteriosa oscuridad.

Esta brillante y hermosa espada, tragada por algo similar a lodo, fue perdiendo poco a poco su luz.

-Qué extraño. ¿Qué diablos me está pasando?

No obstante, esta espada al parecer, todavía conservaba su conciencia de sí misma. Aunque la desaparición de su cuerpo físico la había afectado, dañando su memoria- Su recuerdo de aquel último evento era claro.

Recordó su calidez cuando ella lo abrazó con ambas manos en la espalda. Y, por sólo un breve instante, el contacto de sus labios uno contra el otro. Luego- una voz áspera gritando su nombre.

… ¡K-Kamito!

Su resplandor se perdió, la espada se hundió lentamente en la oscuridad sin fondo-