Danmachi: Sword Oratoria (NL)

Volumen 12

Capítulo 8: Héroes Al Unísono

Parte 1

En Knossos, había ocho campos de batalla principales, ignorando los conflictos localizados con los monstruos.

Los seis pasillos donde cada escuadrón luchaba contra un semi-espíritu.

La cámara donde Lefiya y sus refuerzos se enfrentaban a Filvis.

Y otro.

—¡Raaaaaah!

—¡!

Esa era la caverna donde se desarrollaba el combate a muerte de Levis y Aiz.

Chocando entre sí estaban la criatura con una armadura de carne corrupta que cubría su cuerpo y la espadachina cubierta por una tormenta de color negro azabache. La cámara que se había convertido en su campo de batalla había sido destrozada, hecha pedazos. Por un lado, estaba la fuerza humana. Por el otro, ondas de choque encerradas en una corriente de aire negra causada por la espada plateada. Mechones de cabello color sangre se agitaron y algunos largos mechones dorados volaron por el aire, cortados por un corte.

Hubo un boom, las chispas volaron donde sus espadas se cruzaron. Ambos usaron la fuerza opuesta para retroceder. La feroz tormenta de viento le permitió a Aiz estabilizarse y aterrizar fácilmente en el suelo. A los vientos ya no se les podría llamar “brisas”. Mientras tanto, Levis dejó sus huellas grabadas en el suelo mientras detuvo su impulso usando solo su fuerza bruta.

Con una abertura entre ellas, se miraron la una a la otra sin bajar la guardia.

—Malditos aventureros… ¿Tenían tanta fuerza escondida?; Levis murmuró molesta.

Desde hace un tiempo, los fragmentos de piedra del techo se habían derrumbado hasta el suelo por las réplicas de la batalla que ocurría en el piso de arriba. Esos no fueron los temblores de un alboroto de los espíritus. Los gritos atronadores y repetidos de los aventureros indicaban eso. El laberinto tembló con sus valientes rugidos, y esos temblores llegaron incluso a Aiz y Levis en el piso doce.

—En todas las épocas, Orario sigue siendo Orario, ¿eh?; Levis dijo eso cuando de repente miró hacia arriba. Ella estaba mirando hacia el pozo que habían caído. El agujero que Aiz había excavado usando su viento estaba siendo reparado lentamente mientras la carne verde trataba de cubrirlo gradualmente. Levis miró dentro del agujero, midiendo la profundidad a la que habían caído antes de voltearse hacia Aiz.

—Pero… este es el final; Murmuró.

La frente de Aiz se frunció en confusión ante esas palabras. Esa profunda declaración despertó sospechas en su mente.

—Tienes suerte, Aria… de que hayamos caído hasta aquí; Murmuró sin emoción mientras el vapor causado por su regeneración subía de su cuerpo.

***

—Se han reunido, ¿eh…?; Murmuró Loki.

Los rugidos de los aventureros fueron audibles. Los valientes gritos desde su oculus hablaron sobre su aumento de moral. El cristal en sí estaba temblando por sus gritos.

No había conclusiones anticipadas en el campo de batalla, por supuesto, pero era seguro decir que con esta situación, los aventureros habían logrado luchar para sacarles la ventaja en esta batalla. Loki sintió que el plan de Finn estaba teniendo éxito y ellos habían tomado la delantera.

—Suena como si te hubieran volteado la partida, Dionysus; Loki miró hacia arriba y lo miro con
despreció.

Habían incluido a todas las fuerzas de Orario para esta batalla decisiva—todas las facciones
notables de nivel superior e incluso algo de ayuda prestada de Meren. Incluso si hubiera seis
semi-espíritus, siempre que pudieran movilizar sus fuerzas, ellos podrían abrirse paso.

Eso era lo que significaba ser un aventurero. Ese era Orario. Fue la tierra prometida la que dio
a luz a los héroes. Con el destino del mundo en juego, este era la última fortaleza del reino
mortal que había derrotado a la destrucción un número incalculable de veces.

—………; Dionysus miró hacia abajo.

Su risa enloquecida de hace un momento se había quedado en silencio, y aceptó las palabras y
la mirada de Loki en silencio. La luz de las antorchas hizo que su sombra parpadeara en el suelo.

—Dionysus, tu plan…

—Termina aquí, eso es lo que estaba a punto de decir Loki.

—Je-je…Je-je-je…

El impulso que el dios había estado tratando desesperadamente de contener cruzó sus labios.

—¡Je-je-je-je-je-je-je…! ¡Ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja!
Dionysus se rió, riendo y riendo a carcajadas de ella.

***

En ese momento, Finn pasó a un análisis más extenso.

…… ¿Que viene ahora?

Gracias a los refuerzos de la Familia Freya y la propuesta de Lilly, él había ganado un poco de libertad. En lugar de utilizar hasta el último de sus recursos para comandar las fuerzas, finalmente tuvo un poco de tiempo para pensar.

Por supuesto todavía tenía cosas que hacer, pero en comparación con sus responsabilidades anteriores, era como el día y la noche. Podría dejar el mando del primer escuadrón a Shakti y el frente a Allen.

Con los refuerzos de Ottar y similares, básicamente hemos cambiado las cosas. Las criaturas siguen siendo un problema, pero a este ritmo, deberíamos ser capaces de suprimir a los seis semi-espíritus.

Legiones de aventureros se habían reunido en Knossos en este punto. Incluso podría llamarse exagerado. En los tableros donde la resistencia enemiga era particularmente intensa, podía lanzar algunas de las fuerzas excedentes de la Familia Hestia y otros grupos. Las fuerzas de reserva estaban rescatando a los rehenes. Antianeira y los demás refuerzos habían sido enviados al grupo de Bete. El curso de la batalla claramente iba en su dirección.

Finn estaba haciendo todo lo que estaba en su poder para eliminar cualquier fuente de incertidumbre. Estaba cortando hasta el último brote de un posible contraataque del enemigo antes de que pudiera brotar.

Pero esto va demasiado bien.

La premonición pasó por la mente de Finn. Una corazonada de que no terminaría así. Que Enyo no dejaría que terminara de esta manera.

Cuando la moral de los aventureros se elevó y comenzaron a ver una luz al final del túnel, Finn solo no estaba disfrutando de una euforia prematura. La victoria se inclinaba hacia ellos, pero no se permitiría confundir eso con un presagio de una victoria.

Tuve este mismo sentimiento durante el primer asalto. Empujamos a Knossos hasta el límite, pero fue precisamente cuando el tablero volteó en nuestra contra.

Fue entonces cuando una hoja de fuera del tablero lo cortó en dos. Mientras Finn estaba sentado en una silla moviendo piezas por el tablero, Enyo apareció repentinamente de la nada y atravesó el tablero con una espada, tomando el partido que Finn había estado cerca de ganar  y volviéndolo en un sin sentido.

Esto se parecía mucho a cómo iban las cosas ahora.

No cometeré el mismo error dos veces. Por lo que experimentamos la última vez, puedo estar seguro de que Enyo ni siquiera está peleando en el mismo campo que nosotros.

La activación del hechizo de los espíritus y su intento de prevenirlo.

Lo primero significó su pérdida. Estos últimos aseguraron su victoria. ¿Fue su batalla realmente así de simple? Las dudas que se arremolinaban en la cabeza de Finn podrían resumirse en esa única pregunta. Mientras escuchaba las voces de cada escuadrón que luchaba positivamente en todos los campos de batalla, él consideró las situaciones y posibilidades, dado su conocimiento de Enyo de la batalla anterior.

A Enyo no le importa una victoria táctica o incluso estratégica. No es así como juegan los dioses.

No les importa perder la batalla o la guerra… solo se preocupan por los resultados. Mientras logre el objetivo deseado, le importa un comino cómo lo logra. No tiene ningún sentido de los estándares, la caballerosidad o la estética. No tiene ni el más mínimo respeto por sus enemigos.

Enyo definitivamente tiene esa espada en la mano, esperando el momento adecuado para cortar el tablero por la mitad……

¿Era ese el pesimismo de Finn? No lo era. Le dolía el pulgar. La intuición de Finn lo estaba alertando del peligro, una advertencia en forma de dolor como nunca antes. Le estaba gritando que no malinterpretara el flujo de la batalla esta vez, gritando que tenía que derrotar a la deidad.

Enyo es inteligente y astuto. Un dios inhumano y despiadado. Eso es seguro. ¡Pero al mismo tiempo, hay una parte de él que busca diversiones como Loki!

Buscando al culpable. Desafiando a los otros dioses. Malguiando a Demeter. Llevar a cabo su plan fue absoluto, pero estaba claro que quería disfrutar de las luchas de quienes investigaban el incidente y la emoción de la persecución.

Además de eso, ¡le encanta los gritos de los enemigos derrotados! ¡Quiere disfrutar de esa orgía mientras nuestra esperanza se desvanece y caemos en los pozos de la desesperación!

Él creó un perfil de Enyo en su mente. Con una sonrisa burlona flotando en la oscuridad frente a él, los pensamientos de

Finn se aceleraron.

¡Todo lo que ha hecho Enyo tiene un significado! ¡Es una especie de pista!

Él reflexionó sobre cada incidente que condujo a esa batalla.

La forma femenina que apareció en el punto seguro del piso quince—eso fue casi con certeza obra del espíritu corrupto.

Las flores devoradoras de hombres en la Monsterphilia—eso era parte del plan del enemigo que había fallado cuando coincidió con el juego de Freya.

El conflicto con las criaturas del piso veintiocho que rodeaban al orbe de cristal en forma de feto—eso era completamente irregular, pensando en los detalles.

La despensa del piso veinticuatro: Ese fue el primer indicio del objetivo del enemigo.

La batalla en el territorio inexplorado en el piso cincuenta y nueve…

—El piso cincuenta y nueve…

En ese momento, esas palabras dispararon chispas en la mente de Finn.

Esa fue la primera vez que confirmamos la existencia de un semi-espíritu, pero ¿por qué estaba allí? ¿Fue una amenaza? ¿Era parte del plan? ¿Fue una recompensa de un dios para aquellos que superaron el desafío?

Pero esa cadena de preguntas condujo a una paradoja.

Ni siquiera habíamos sabido de la existencia de los semi-espíritus. Si no hubiéramos visto esa cosa gigante con nuestros propios ojos, habríamos tardado demasiado en responder y este ritual se habría completado. Orario seguramente habría sido destruido.

Esto lo llevó a sospechar.

De hecho, mi teoría solo cambió a pensar que los espíritus llevarían a cabo la destrucción porque experimentamos la amenaza de ese semi-espíritu…

Y le hizo llegar a cierta conclusión.

……En otras palabras, estaba manipulando mi proceso de pensamiento.

El mundo que lo rodeaba se abrió. Un destello de luz atravesó su mente, tiñendo todo de blanco. Finn levantó la cabeza de un tirón.

El ataque simultáneo a los seis semi-espíritus en seis lugares a los que habían sido forzados. La situación en la que inevitablemente se verían obligados a concentrar todas las fuerzas más fuertes de Orario. Todas las fuerzas notables que protegen a Orario estaban actualmente reunidas en Knossos.

—¡No puede ser!

El verdadero objetivo del enemigo no era la destrucción de la ciudad, sino…

***

—¡Deprisa! ¡Liberen a todos los rehenes mientras el grupo del capitán sigue luchando!; Raúl llamó al grupo de aventureros que lideraba.

Los pasos retumbaron mientras atravesaban los pasillos cubiertos de carne verde. Su ubicación actual seguía siendo el piso once de Knossos.

Ellos estaban buscando rehenes. Habían descubierto varios grupos de miembros de la Familia Demeter. Otros grupos también se habían separado del escuadrón de Raúl, tanto personas para ayudar a llevar a los rehenes como guardias para protegerlos. Por eso, su equipo se redujo a solo diez personas.

¡Tendremos que dirigirnos al Calabozo nosotros mismos cuando encontremos otro grupo de rehenes…! Pensó.

—¿Qué?

Fue entonces cuando escuchó un sonido siniestro.

—R-Raúl …

—Esto es…

—…

A juzgar por las reacciones de los otros miembros de la familia, él inmediatamente se dio cuenta de que no era solo su imaginación. Raúl guardó silencio un momento y miró el mapa que tenía en la mano. Este era la copia de los planos de Knossos que él había consultado
mientras corría antes, con los ojos inyectados en sangre mientras buscaba espacios que pudieran tener habitaciones ocultas.

Esta vez, estaba buscando algo más, pero… él se dio la vuelta. La mapeadora Rakuta también tenía una copia y pareció reconocer el miedo de Raúl. Ella sacudió la cabeza, nerviosa, indicando que no había espacios gigantes escondidos en los alrededores.

Incluso con esa confirmación de ella, un sudor frío le corría por la espalda. Raúl no tenía una intuición trascendental como Finn. Pero cuando se llevo al limite, incluso una persona común como Raúl podía experimentar una vaga aprensión que era difícil de expresar con palabras.

—… Vámonos.

No pudo verbalizarlo, pero por alguna razón, apareció milagrosamente en su mente. Raúl señaló en la dirección del sonido que estaba escuchando. No tuvieron más remedio que ir allí.

Los otros en el grupo ni siquiera recordaron responder mientras seguían su ejemplo.

Un bajo misterioso resonó. Sonaba casi como si el laberinto mismo estuviera haciendo el ruido.

Y se estaba volviendo más fuerte, cada vez más fuerte.

A medida que se acercaban a la fuente del sonido, doblando en las esquinas de los pasajes estrechos, la resonancia del sonido aumentaba gradualmente. Ellos comenzaron a escuchar un tono espeluznante.

Pudo haber sido creado por un ser que se había abierto camino desde las profundidades del infierno. A pesar de eso, ahora era claramente audible sin tener que forzar sus oídos. Los miembros del grupo seguían en silencio. Sus labios comenzaron a temblar mientras trataban desesperadamente de mantener la calma.

De pie a la cabeza del grupo, Raúl se puso más pálido gradualmente a medida que avanzaba.

—……….

Y luego lo vio.

—¡Velgas!

El puño venenoso de Bache golpeó el tentáculo del espíritu. El encantamiento se concentró en un solo punto. En un abrir y cerrar de ojos, el veneno mortal pudrió la carne verde, volviéndola de un púrpura negruzco. El semi-espíritu gritó mientras se desprendía el tentáculo.

Sin un momento de demora, Tione y Argana atravesaron la brecha que esto creó y cortó en el cuerpo del espíritu. Los cuchillos gemelos Kukri le cortaron el brazo y las manos desnudas se enroscaron alrededor del cuerpo como una serpiente para romperlo. Y luego Tiona golpeó con Urga en su punto débil.

—¡Sólo un poco más!; Dijo Tiona, lamiendo sus labios.

—¡Es muy difícil llegar a la piedra mágica!; Respondió Tione.

—¡Pero está a las puertas de la muerte! ¡Ja, ja, ja, ja, voy a matarlo!; Argana se jactó audazmente.

El espíritu había agitado desesperadamente sus tentáculos, empujándolos hacia atrás, pero podían sentir el daño que estaban haciendo. Y como había dicho Argana, el semi-espíritu ya estaba profundamente herido.

El número de tentáculos se había reducido drásticamente. El grupo de Bache estaba interceptando y cortando a muchos de ellos. Otros se habían podrido, cayendo presa de su veneno mortal. Y su invencible regeneración se había ralentizado
dramáticamente cuando finalmente alcanzó los límites de su magia. El semi-espíritu se retorció de agonía mientras regeneraba su brazo. Su canto se había detenido hace mucho tiempo.

La situación ha cambiado por completo… ¿Es ese el poder de Telskyura…? No, ¿de las
Amazonas, incluida Tiona?

Amid se preguntó eso.
Incluso a los ojos de la sanadora, el fluir de la batalla se había vuelto claro. Además de más de cincuenta Amazonas en la línea, hubo apoyo de las líneas traseras por parte de los magos de la Familia Loki y la Familia Ganesha. Y más que nada, el asalto y las interrupciones causadas por cuatro niveles 6. Con las órdenes de Finn para colmo, incluso un semi-espíritu estaría al borde del colapso.

A este ritmo…

Amid comenzó a estar segura de su victoria…

—¿Qué?

Tiona, Tione y el resto murmuraron ante la escena que se desarrolló ante sus ojos.

—Hey, Gareth … ¿Qué es eso?; Preguntó Tsubaki, estupefacta.

—¡Como voy a saberlo!; Gareth rugió en respuesta.

Era el tercer escuadrón.

En otro lugar por completo, los aventureros veían lo mismo que el cuarto escuadrón.

—¿Es como la recuperación de antes?

—No, hay algo diferente.

—Su cuerpo se está hinchado.

—Algo… extraño está sucediendo.

Llevando las banderas espirituales que habían tomado por la fuerza de la Familia Hefesto, los ojos de los hermanos hobbit se entrecerraron cuando los Gullivar la miraron desde detrás de sus cascos.

—¡Gh…!

La figura del espíritu se estaba transformando claramente con un burbujeo. Se estaba volviendo más espantoso, más repulsivo.

Mikoto Yamato estaba presa del terror, incapaz de hablar.

—Vamos… en serio me voy a quedar sin mente aquí.

En el segundo escuadrón, los ojos de Welf se entrecerraron cuando la tensión comenzó a afectarlo. Había hecho más de lo que le correspondía, repitiendo usos de su fuego antimágico, y disparando indiscriminadamente su espada mágica.

El semi-espíritu estaba emitiendo vapor—más de lo que había soltado cuando se estaba regenerando todas las veces antes. El vapor se recalentó, lo que provocó que la temperatura de toda la cámara aumentara, como si el semi-espíritu se estuviera convirtiendo en un volcán.

—Esten atentos al elemento mágico y prepárense para su resistencia… Traten de calcular el momento para anularlo. Eso ya no es solo carne… Es un caparazón impregnado de magia.

—…
Hedin murmuró para sí mismo mientras observaba el cambio mientras lanzaba un hechizo de lanzamiento corto a la velocidad del rayo. Hegni sostuvo su espada negra en silencio mientras la miraba.

La fuerza de la Familia Ganesha, dirigida por Ilta, observó conmocionada el cambio.

—¡Maldito monstruo! Haciéndose pasar por un espíritu… Logramos arrinconarlo, ¿y tiene otro truco bajo la manga? ¡No nos jodas!; Riveria expresó accidentalmente sus pensamientos.

Ella había expresado lo que los aventureros estaban sintiendo mientras palidecían ante la transformación que ocurría ante sus ojos.

—¡A-Aki …!

—¡¡…!!

En el quinto escuadrón, Aki apretó los dientes inconscientemente.

Mientras emanaba vapor, el cuerpo transformador del semi-espíritu se volvió negro. Cuando su piel oscura se agrietó, una luz roja brilló desde su interior. Las líneas carmesíes que se extendían por su cuerpo parecían estar infectando al espíritu mismo. Este se hinchó y se volvió negro. Fue consumido por puro poder.

—Esto es…

Incluso Ottar no pudo evitar mirar con asombro.

El espíritu ennegrecido y contaminado lanzó un grito repulsivo cuando nació justo frente a los ojos de los aventureros.

—¿Aaaah…? ¡¿Aaaaaah…?!

Raúl luchó por mantener la cordura cuando vio al ser frente a él.

Una gran cámara en el piso once.

Técnicamente no era una cámara. Era una serie de espacios creados a la fuerza rompiendo paredes, uniendo decenas de habitaciones y pasillos.

Allí estaba guardado un cuerpo gigante. Era tan grande que no se podía contener excepto en una nueva cámara gigante que no existía en el mapa.

—¿Un… un dragón?; Rakuta gritó.

Su cuerpo se inspiró en una especie de dragón. Tenía tres pares de alas; garras torcidas que parecían haber sido talladas en una escarpada montaña, un torso enorme que estaba cubierto de escamas y, por supuesto, la cabeza de un dragón diabólico.

Estaba vinculado al laberinto que se había convertido en altar, al igual que los semi-espíritus.

Emitía una luz roja ominosa. La carne verde circundante parecía latir, como si resonara con el latido del corazón del extraordinario dragón.

Todo su cuerpo estaba completamente negro. Estaba cubierto de siniestras líneas rojas que parecían vasos sanguíneos. Debajo de su cabeza de dragón gigante, un semi-espíritu estaba incrustado en su pecho. La parte superior del cuerpo del espíritu con los brazos extendidos parecía como si hubiera sido crucificado. Había sido asimilado como piedra mágica. Su rostro no era visible. Todo lo que estaba sobre su boca había sido devorado por el cuerpo del dragón, dejándolo sin rostro.

El espíritu ya no era el parásito. Parecía como si se hubiera consumido por completo.

La imponente apariencia del monstruo era tan horrible que Raúl estaba convencido de que el dragón negro que dormía en los confines de la tierra no podía ser más repulsivo que él.

—No puede ser… No. puede ser. ¡¿No puede ser?! ¡Capitán! ¡Los seis anillos no deberían ser nuestro verdadero objetivo!  Su apariencia fue más que imponente. Aquellos que lo vieron se convencieron de inmediato de
que este era el verdadero as bajo la manga de Enyo.

Incluso ellos podían decir claramente que estaba absorbiendo un enorme poder del círculo mágico que se expandía en el techo sobre él.

Raúl gritó, la sangre se le escapó de la cara, mientras perdía por completo la calma.

—El verdadero objetivo del enemigo es este…… ¡una explosión!

La mujer incrustada en el pecho del dragón suspiró. Su cuerpo se retorció en un éxtasis encantado mientras todo el poder reunido a lo largo del laberinto se concentraba en él. El pulso del dragón que latía a su alrededor se estaba acelerando, como si advirtiera que la masa crítica estaba cerca.

El espíritu ni siquiera se molestó en intentar atacar al grupo de Raúl que se mostró ante él. No, ni siquiera les estaba prestando atención, como si solo fueran hormigas arrastrándose debajo de él. No le importaba su presencia mientras esperaba la brutal destrucción que se avecinaba.

—¡¿A este ritmo…?!

Todos los aventureros serían aniquilados.