Jinrou E No Tensei Maou no Fukukan (NL)

Volumen 6: La Rebelión

Capitulo 6: Hombres Lobo

Parte 8

Necesitaba recordar no esperar mucho de los hermanos Garney. Les sonreí y dije, “No subestimen a los soldados nacidos en países fríos. De todos modos, será mejor que se disculpen por los malentendidos.”

“Sí… supongo que deberíamos.”

Los dos asintieron y luego inclinaron la cabeza hacia los antiguos soldados del Castillo Sveniki.

“Lo siento, estábamos equivocados.”

“Lamentamos haber dudado de ustedes. Por favor, perdónennos.”

En el pasado, los dos nunca habrían inclinado la cabeza ante los humanos, pero incluso ellos habían crecido después de pasar tanto tiempo con ellos. Los soldados parecían desconcertados por la facilidad con que los dos hombres se disculparon con ellos.

Me volví hacia los soldados con una sonrisa y dije, “Los soldados meraldianos no están acostumbrados a ver nieve. Así que estamos agradecidos de tener hombres experimentados como ustedes. Hicieron lo correcto al eliminar esta nieve. Me aseguraré de que sean recompensados por su diligencia.”

Las expresiones de los soldados se iluminaron y suspiraron aliviados. Si continuaban acumulando logros, era posible que su sentencia fuera levantada y pudieran regresar a sus viejos puestos. Envié a alguien para asegurarme de que todos los equipos de construcción supieran que no debían usar nieve oscura y luego me volví hacia los soldados.

“Aun así, ¿por qué están trabajando tan duro para el ejército de Eleora? ¿No son ustedes miembros de la facción de Doneiks?”

Además, yo fui responsable de la muerte de su señor. En todo caso, habría tenido más sentido si me odiaran. Sin embargo, para mi sorpresa, los soldados sonrieron y sacudieron la cabeza.

“Es cierto que estábamos en deuda con el conde Ryaag. Pero ahora que está muerto, no tenemos señor al que servir.”

“Incluso si tratamos de huir al ejército de los Doneiks, no es como si en realidad fuéramos sus hombres…”

“Todos tenemos familias en casa. Solo queremos terminar con esta guerra para que podamos volver a ellos.”

Por lo que había escuchado, el conde Ryaag había sido querido por sus hombres. Pero incluso entonces, para ellos, no había sido más que un jefe relativamente amigable. En otras palabras, habían sido empleados de la compañía Ryaag, que estaba bajo el paraguas del conglomerado Doneiks. Pero no tenían interés en la lucha por el poder.

Asintiendo en comprensión, respondí, “Ya veo. En ese caso, haré todo lo posible para asegurarme de que se les levante su castigo y que se les permita regresar al Castillo Sveniki lo antes posible.”

“Muchas gracias.”

Todos los soldados se inclinaron ante mí, algo aterrorizados. ¿Habían notado instintivamente nuestra verdadera naturaleza?

Algunos de los guardias que habían estado en el Castillo Sveniki habían visto a mis hombres lobo durante la redada. El hecho de que los soldados habían estado difundiendo historias sobre hombres lobo había surgido en los consejos de guerra anteriores, pero nadie, ni siquiera los otros soldados de infantería, creía en las historias que contaban las antiguas tropas del Castillo Sveniki.

Los nobles de Eleora y los otros soldados creían que las tropas del Castillo Sveniki estaban inventando excusas de por qué habían perdido su castillo tan fácilmente. Irónicamente, sus vidas habían sido arruinadas por los hombres lobo, pero eran esos mismos hombres lobo los que serían su salvación.

***

—Las Dudas del Príncipe Woroy—

“¿Están quitando toda la nieve?”

El informe de mi explorador fue tan sorprendente que terminé repitiendo sus palabras. Aparentemente, un segmento de los soldados que rodeaban el Castillo Creech había comenzado a recoger grandes cantidades de nieve por alguna razón. Al principio pensé que los hombres de Ashley tenían tan poca disciplina que habían comenzado a jugar, pero parecía que ese no era el caso. Especialmente porque los soldados que emprendían este proyecto de construcción eran los que estaban al norte. En otras palabras, las tropas de Eleora.

Esos tipos también tienen al Esgrimista Astral con ellos. No tengo idea de lo que pasa por la cabeza de ese tipo, pero sé que siempre está tramando algo. Me acerqué a la torre de vigilancia del castillo y miré por el telescopio hacia el norte.

“¿Qué putas están haciendo?”

Vaya, se me escapó la jerga. Los exploradores y nobles de pie detrás de mí sonrieron con pesar.

“No pude discernir lo que estaban haciendo, así que pensé que sería mejor pedirle que lo viera usted mismo.”

“Yo tampoco tengo ni idea.”

Por supuesto, soy el general de este ejército. Necesito ser capaz de averiguar qué están haciendo o no estaré en condiciones de liderar a estos hombres.

Reflexioné sobre la pregunta en mi mente mientras les pedía a mis asesores sus opiniones. La orilla donde estaba acampado el ejército de Eleora era una llanura abierta. No tenían necesidad de deshacerse de la nieve que los rodeaba. De hecho, era mejor dejarla reposar.

Palear toda la nieve facilitaría que los ejércitos de Iván los alcanzaran cuando sus refuerzos finalmente marcharan. Lo que significa que su objetivo no era deshacerse de la nieve en sí. Estaban llevándolo todo de vuelta a su campamento para hacer algo. De eso estoy seguro.

La pregunta es, ¿qué están planeando hacer exactamente con esa nieve? Dudo que planeen derretirla para convertirla en agua bebible, ya que eso es ineficiente. Además, están justo al lado del río que desemboca en el lago.

Tienen toda el agua que necesitan. Y no hay forma de que solo estén haciendo chozas para jugar. En realidad, un momento… ¿Están planeando usar la nieve como material de construcción? Suena inverosímil, pero no se me ocurre nada más que tenga sentido.

“El enemigo planea construir con esa nieve.”

“¿Construir… qué exactamente, señor?”

“Muros de algún tipo. Si solo quisieran construir algunos edificios, podrían talar árboles en el bosque cercano para obtener madera.”

Suena estúpido incluso cuando yo lo digo. Mis asesores parecían estar pensando lo mismo.

“Pero señor, no importa la cantidad de nieve que acumulen, no tendrán suficiente. Les tomaría mucho tiempo cargar nieve suficiente para construir muros adecuados.”

“Puede parecer mucha, pero una vez que la compriman, terminará prácticamente en nada. Además, una vez que llegue la primavera, cualquier defensa que hayan construido se derretirá.”

No necesito que me digan eso, también tengo ojos. Pero no puedo imaginar ninguna otra razón por la que estén acumulando toda esa nieve. Sonreí torpemente a mis asesores.

“Si no lo hacen como una distracción de algún tipo, entonces no hay otra explicación que tenga sentido. Envíen exploradores para ver qué está pasando. Quiero saber cuánta nieve tienen. Además, la nieve sola no es suficiente para construir muros decentes. Si se están tomando en serio esto, probablemente hayan estado recolectando madera y tierra para crear soportes. Hagan que algunos exploradores también investiguen el bosque cercano.”

“¡Sí, señor!”

Una vez que mis hombres se fueron, miré por el telescopio nuevamente. Estaba demasiado lejos para distinguir rostros individuales, pero no tenía dudas de que el Esgrimista Astral de Meraldia estaba en esa multitud en alguna parte. Uh-oh. Me estoy emocionando.

Realmente estoy ansioso por ver con qué truco va a salir ahora que tiene al ejército de Eleora. Pero, por supuesto, lo que sea que esté planeando es probablemente peligroso para mí y para la familia Doneiks. Necesito detenerlo sin importar qué. Sin embargo, ¿cómo voy a detenerlo cuando no tengo idea de lo que está planeando?

***

Aunque hubo problemas ocasionales, la construcción progresó principalmente sin incidentes. Parecía que el príncipe Woroy finalmente había entendido lo que estábamos haciendo. Pero no pudo comprometerse a montar un ataque contra nosotros porque si mostraba una apertura, el ejército del príncipe Ashley marcharía hacia el castillo desde el sur.

Nuestra mayor preocupación en este momento era que no teníamos suficiente nieve.

Quería hacer que nuestros muros fueran mucho más altos de lo que eran. Tan altos que un ejército atacante necesitaría escaleras de asedio para escalarlos. Por supuesto, eso requería mucha más nieve de la que podíamos reunir de manera realista.

Estábamos haciendo hielo usando el agua del lago para ayudar a aumentar la altura, pero incluso eso no era suficiente. Ya habíamos recogido toda la nieve pura en el área y no podíamos usar nada de la nieve fangosa acumulada más cerca del suelo, ya que se derretiría demasiado pronto.

Borsche, que había estado a cargo de supervisar la construcción, se me acercó con el ceño fruncido.

“En este momento, los muros no son lo suficientemente altos como para disuadir a la infantería. Sin embargo, ahora son al menos lo suficientemente altos como para detener una carga de caballería o bloquear flechas.”

“¿Así que vamos a tener que organizar una unidad para transportar la nieve desde otro lado?”

Cuando dije eso, el capitán Lenkov del cuerpo de magos se acercó a nosotros.

“Lord Veight, las antiguas tropas del Castillo Sveniki tienen algo que quieren informarle.”

Supongo que debería ir y escuchar lo que tienen que decir directamente. Pero justo cuando me puse de pie, uno de los sargentos de las tropas del Castillo Sveniki se adelantó.

“Lord Veight, creo que esta noche tendremos fuertes nevadas. Debería decirles a todos que se abriguen y se mantengan calientes. Además, que estén listos para acumular más nieve mañana.”

El viejo veterano señaló con un dedo nudoso a una montaña lejana.

“Los lugareños llaman a esa montaña la Montaña del Lobo de Nieve. Las nubes rara vez aparecen sobre la montaña en invierno, pero cuando lo hacen es una señal de que va a nevar mucho.”

Aparentemente, esta región recibía grandes cantidades de nieve una vez cada varias décadas. El viejo soldado que había dado el informe había experimentado uno de esos años de invierno.

El Castillo Sveniki no estaba terriblemente lejos de aquí, por lo que había algunos miembros de su guarnición que venían de esta región. Estaba relativamente seguro de poder confiar en la intuición de este viejo soldado.

No era como si perdiéramos algo si su predicción estaba equivocada, pero algunos hombres podrían morir de frío si tuviera razón y no les advirtiera a todos que tomaran las precauciones adecuadas antes de irse a dormir.

“Entendido, se lo haré saber a todos. Parece que seremos bendecidos con más nieve.” Miré al viejo guerrero y agregué, “Tu escuadrón nos ha salvado una vez más. Como antes, me aseguraré de que los otros nobles sepan que fueron ustedes quienes merecen el crédito.”

El soldado sonrió radiante. Teniendo en cuenta lo útiles que habían sido, pensé que debería enviarles una botella de vino como recompensa más tarde. Esa noche, hubo fuertes nevadas tal como el viejo había predicho. La nieve caía tan espesa que apenas podías ver tu mano frente a tu cara si salías. El viento también aumentó después de un rato, convirtiendo la tormenta de nieve en una ventisca.

“Ah, Veight. No deberías llevar ropa tan ligera. Te vas a resfriar.”

Lacy se acercó y me puso una bufanda en el cuello. En el transcurso de este viaje, ella comenzó a actuar cada vez más como una vieja abuela. Cuando terminó de envolverme con la bufanda, miró hacia el cielo. Nunca verías nevadas tan fuertes en Meraldia.

“Está cayendo incluso más nieve que en Krauhen.”

“Aparentemente, incluso en Rolmund solo cae tanta nieve cada pocas décadas.”

“¡Es como si hasta los cielos estuvieran de nuestro lado!”

“Se siente demasiado conveniente para ser una coincidencia.”

Tuvimos mucha suerte de tener una noche de fuertes nevadas—como las que veía la región cada luna azul—justo cuando nos estábamos quedando sin nieve. Miré hacia la montaña que el viejo había señalado hoy más temprano. Estaba muy al sur.

“El sur, eh…”

Más allá de esa montaña estaba Meraldia. La cara de cierta gran sabia pasó por mi mente. Después de cruzar el umbral final, había ganado tanto poder que había podido manipular la atmósfera misma. No, no hay forma de que sea ella.

La Maestra probablemente estaba extremadamente ocupada uniendo al ejército demoníaco en este momento. No tenía forma de saber sobre nuestra situación actual e incluso si lo supiera, no podía teletransportarse tan lejos.

Oh, pero Ryunheit tiene a Mitty la astróloga. Es posible que ella leyera las estrellas para descubrir lo que necesitábamos. Pero incluso entonces, parecía demasiado descabellado. Lacy parecía estar pensando lo mismo que yo cuando cruzó los brazos y dijo con una mirada pensativa, “¿Podría… la Maestra Movi ser la responsable de esto?”

“Quién sabe…”

Si salimos vivos de esta guerra, le preguntaré a la Maestra al respecto. Me imaginé a la Maestra volando sobre las montañas de Rolmund, mirándonos con una sonrisa mientras congelaba el aire por el que pasaba. Si ella realmente estuviera aquí, probablemente diría algo como, “Fufu, ¿cuándo aprenderán mis discípulos a arreglárselas sin mí?”

Era gracioso lo fácil que podía imaginar la reacción de la Maestra.

“Dudo que sea ella, pero deberíamos darle las gracias por si acaso.”

Me volví hacia el sur e incliné la cabeza. Lacy hizo lo mismo. Después de unos segundos, levantamos la vista e intercambiamos miradas.

“Hace bastante frío…” murmuré.

“Oh, eso me recuerda. Algunas personas del cuerpo de magos me dieron esta sopa de frijoles dulces que hicieron. Está realmente buena y te calienta hasta la punta de los dedos.”

“Eso suena bien. Tal vez pase por sus tiendas a ver si tienen alguna para mí.”

Mañana sería un día ocupado. Haremos nuestro mejor esfuerzo, Maestra.

***

Gracias a la fuerte nevada, pudimos convertir “La Fortaleza de Nieve de la Emperatriz de las Llamas” en el enorme castillo que había imaginado. El ejército de Eleora ahora estaba protegido por gruesos muros de nieve que… no eran tan resistentes como los muros de piedra, pero con lo gruesos que los habíamos hecho, era más que suficiente. También eran lo suficientemente altos como para no caer ante nada que no sea armas de asedio.

“La mejor parte es que, incluso si las catapultas golpean los muros, podemos volver a poner la nieve al día siguiente.”

Kite contempló el imponente muro plateado con asombro.

“Incluso podemos usar las piedras que se atasquen en el hielo como parte de los muros también.”

“Sí, supongo que sí.”

No tenía idea si sería un asunto tan simple, pero estos muros al menos parecían más fáciles de reparar que un muro de piedra. Como pudimos terminar la construcción antes de lo previsto, teníamos aún más margen de maniobra que antes. Eleora también se dio cuenta de esto y dijo, “Estoy pensando en unirme al ejército de Ashley cuando se dirija al norte. Tomaré tres mil de mis propias tropas.”

“¿Estás segura de que es una buena idea, Eleora? La moral del ejército del príncipe Ashley está destrozada.”

Los nobles bajo el mando del príncipe Ashley no eran exactamente incompetentes, pero eran propensos a eludir el trabajo. Tenía sentido, considerando que solo habían respaldado al príncipe Ashley porque pensaban que era el medio más fácil de avance social. Eleora me dio una sonrisa atribulada.

“Esa es exactamente la razón por la que tengo que ir. Alguien de la familia imperial tiene que mantener a raya a esos tontos de su ejército.”

Eleora tenía un punto. El propio príncipe Ashley estaba atascado en la capital, por lo que ella era el único miembro de la familia real capaz de tomar el mando.

El príncipe Ashley tenía una hermana mayor y Eleora tenía una hermana menor, pero ninguna de ellas era soldado, por lo que no sabían cómo dirigir ejércitos. Eran simplemente princesas normales. Sin embargo, todavía me preocupaba enviar a Eleora a luchar contra el príncipe Iván.

“En ese caso, tomaré el mando. Como soy un hombre lobo, podré regresar aquí yo solo si las cosas se ponen feas.”

Eleora sacudió la cabeza.

“Woroy es el mejor comandante que tienen los Doneiks. Alguien tiene que mantenerlo atrapado aquí o se abrirá camino hasta la capital. Por otro lado, si podemos mantenerlo encerrado en su castillo, podemos desgastarlo en una guerra de desgaste.”

Eleora colocó unas cuantas fichas que representaban fuerzas aliadas en el mapa que se extendía entre nosotros.

“Desde que nos unimos al lado de Ashley en la guerra, sus nobles lentamente comenzaron a enviarle más tropas.”

“Entonces esos oportunistas piensan que tenemos la ventaja, ¿eh?”

Originalmente, los nobles clave que apoyaban al príncipe Ashley habían retenido su apoyo porque creían que estaba acabado, pero ahora estaban dispuestos a cooperar.

“Te las arreglaste para detener el asalto de Woroy y alargar la batalla. Así que, los partidarios de Ashley piensan que ahora es el momento de mostrar su lealtad y evitar ser castigados si gana y se convierte en emperador.”

El príncipe Ashley era un hombre gentil, pero no era tan tonto como para nombrar a personas que lo habían abandonado a puestos importantes. Por eso los nobles que lo apoyaban habían decidido que ahora era un buen momento para demostrar su lealtad a su causa.

“Para mantener su apoyo, necesitamos demostrar que tenemos una ventaja abrumadora. Si una princesa imperial encabeza esta invasión en tierras enemigas, todos pensarán que estamos a días de una victoria total.”

“Entiendo lo que dices, pero…”

Las personas importantes no deberían estar peleando en el frente. Dios, esta princesa marimacho es un verdadero dolor. Antes de que pudiera discutir más, Eleora me interrumpió.

“Tienes que asumir la misión más difícil de todas, derrotar a Woroy. Pero también eres más apto para esa misión que yo. Después de todo, ya demostraste que eres un mejor comandante que yo cuando me venciste.”

Estoy bastante seguro de que solo gané porque apenas tenías un ejército… Si hubiéramos estado en equilibrio, estaba seguro de que habría perdido. Pero Eleora siguió adelante.

“Los refuerzos que está obteniendo el ejército de Ashley son tropas privadas que pertenecen a varios nobles. Su lealtad no es hacia Ashley, por lo que no están dispuestos a pelear con sus vidas en juego. Muchos de ellos no quieren estar en este período de expedición.”

“Qué dolor…”

Estos tipos en serio solo estaban aquí para llenar una cuota numérica, no querían pelear en absoluto. Desafortunadamente, necesitábamos esos números. Eleora señaló el punto en el mapa que designaba la capital.

“Pero incluso unas tropas desmotivadas como esas pueden usarse para fortalecer las defensas de la capital. Si aumentamos el número de tropas de la guarnición, Woroy se lo pensará dos veces antes de atacar.”

Si el príncipe Woroy no pudiera atacar la capital, sus únicas opciones serían continuar defendiendo el Castillo Creech o retirarse más profundamente en el territorio de Rolmund Norte. Como él estaba liderando las mejores tropas de los Doneiks, sería mejor para nosotros si esas tropas se quedaran encerradas en el castillo. Después de pensarlo por unos minutos, asentí.

“Si eso solo impide que el ejército del príncipe Woroy se enfrente contra alguien más, creo que puedo manejarlo. Supongo que estás en lo correcto. Tienes que ser tú quien tome a tus hombres y lidere la lucha contra el príncipe Iván.”

“Gracias.”

Eleora sonrió. Sin embargo, si realmente íbamos a hacer esto, era mejor que ella tuviera más protección.

“Sin embargo, deberías llevar diez mil tropas, no tres mil.”

“¡¿Diez mil?!”

Los ojos de Eleora se ensancharon en estado de shock. Siempre estaba actuando tan estoica que nunca me cansaba de sorprenderla. Cogí una de las fichas al lado del mapa y sonreí.

“En este momento tienes diecisiete mil soldados aquí. Si todo lo que vamos a hacer es escondernos dentro de nuestras fortificaciones, solo necesito siete mil hombres para retener al príncipe Woroy. Especialmente porque la mayoría de tus soldados son magos. No necesito una gran cantidad de caballería o lanceros para ser una amenaza.”

Teóricamente, el cuerpo de magos era más fuerte que cualquier otro tipo de soldado cuando se trataba de defender un castillo. Cada uno valía más de diez lanceros. Dado que el lado atacante necesitaba llegar hasta los muros del castillo, el poder abrumador de los Blast Canes del cuerpo de magos podría usarse con pleno rendimiento.

“Sé que solo planeas llevar contigo a las tropas de la familia Originia, pero también deberías llevarte a los soldados de Kastoniev.”

Con la edad que tenía lord Kastoniev, se había quedado fuera de la campaña de invierno, pero su hijo—en otras palabras, el primo de Eleora—estaba al frente de sus tropas. Era alguien en quien ella podía confiar.

“El ejército del príncipe Ashley está formado por veinte mil hombres. Pero dado que el príncipe Iván logró reunir la misma cantidad, me preocupa que el ejército del príncipe Ashley por sí solo no sea suficiente para asegurar la victoria.”

“Tienes un punto allí, pero…”

“Además, si tienes una fuerza total de treinta mil, también podrás capturar castillos y fortalezas. Queremos terminar esta guerra antes de que llegue la primavera, así que ahora no es el momento de ser mezquino con los soldados.”

Este castillo no sobreviviría a la primavera, después de todo.

“Además, necesitas suficientes hombres para escoltarte de forma segura hasta aquí en caso de que el ejército del príncipe Ashley sea derrotado. Si tienes diez mil, el príncipe Iván no podrá aplastarte tan fácilmente.”

La seguridad de Eleora era tan importante como la del príncipe Ashley. No podía permitir que ninguno de ellos muriera. Pero mientras él estaba a salvo en la capital, Eleora no.

“Pero…”

Eleora estaba empezando a vacilar, así que di el empujón final.

“Se verá mal para los futuros historiadores si el ejército de la futura emperatriz fuera una pequeña mancha. Toma una gran fuerza y alócate. No te preocupes. Defenderé este lugar con todo lo que tengo.”

Eleora se cruzó de brazos y consideró mi propuesta por unos minutos. Luego me miró y dijo, “Será mejor que no mueras, Rey Negro de los Hombres Lobo.”

“¿Con quién crees que estás hablando? Soy el infame Rey Negro de los Hombres Lobo de Ryunheit.”

Sinceramente, no tenía tanta confianza, pero la decisión correcta aquí era dejar que Eleora tomara una tonelada de tropas para dar un golpe decisivo.

Si ella pudiera poner fin a la guerra con su ejército personal, su influencia se expandiría exponencialmente. Sobre todo, porque el príncipe Ashley estaría en deuda con ella. Además de eso, tendría derecho a decidir qué pasaría con las tierras de la familia Doneiks una vez que fueran derrotados. No había duda de que los aliados oportunistas del príncipe Ashley acudirían a ella en su lugar.

Si tuviéramos suerte, podríamos reunir aliados de Rolmund Norte, Este y Oeste a la vez. Je, el trono no está lejos ahora. Aunque supongo que no es mi trono. Al ver mi sonrisa, Eleora también sonrió.

“Realmente disfrutas maquinando, ¿no?”

“Soy un villano después de todo.”

Realmente, sería más extraño si el vicecomandante de la Señora Demonio no fuera un maquinador. Idear planes malvados estaba incluido en la descripción de mi trabajo. Aunque no era tan bueno como pretendía serlo.

“Oh, de los diez mil hombres que llevas, asegúrate de llevar el 209º Cuerpo de Magos. Son como tus guardaespaldas personales, por lo que estarás más segura con ellos.”

Nunca traicionarían a Eleora. Si alguna vez llegara el día en que lo hicieran, significaba que ella estaba tan perdida que no había forma de salvarla. Sin embargo, Eleora también pareció sorprendida por esa sugerencia.

“¿Estás seguro?”

“Me las arreglaré con los cuerpos del 203° al 208°. Los tipos a cargo del ejército del príncipe Ashley también prometieron prestarme los cuerpos 104º y 105º, así que debería tener suficientes hombres. De hecho, uno de mis hombres lobo debería estar trayéndolos ahora mismo.”

Me preocupaba que el ejército del príncipe Woroy pudiera atacarlos mientras se movían, así que envié a uno de mis hombres lobo más perceptivos para guiarlos a salvo aquí.

***

Y así, un ejército formado por 20,000 hombres del príncipe Ashley y 10,000 hombres de Eleora se dirigieron al norte para derrotar al príncipe Iván. Era un poco triste que un ejército conjunto de Rolmund Este-Oeste apenas tuviera el tamaño de uno de los dos ejércitos de Rolmund Norte, pero eso hablaba más de lo impresionante que era el ejército de Rolmund Norte que la incompetencia por parte de Rolmund Este u Oeste. En todo caso, demostró que Rolmund Norte estaba agotando sus recursos porque se había preparado para luchar hasta la muerte.

Pero mientras el príncipe Iván todavía tenía 20,000 tropas, las 30,000 élites del príncipe Woroy estaban atascadas en el Castillo Creech.

Y, naturalmente, los soldados no crecían en los árboles. Ninguno de los miembros de la familia Doneiks podía permitirse reclutar más tropas. Y las pocas que podían reclutar eran reservistas que no eran muy hábiles. El día de la partida conjunta del ejército Ashley-Eleora, Eleora se acercó bajo la atenta mirada de sus tropas.

“Lord Veight, cuento con que cuides mi espalda.”

Desempeñando el papel de su leal subordinado, reverentemente incliné la cabeza.

“Déjamelo a mí, princesa Eleora. Juro por el honor de Meraldia que defenderé esta ruta por ti.”

Eleora asintió con satisfacción y se volvió hacia sus tropas.

“Como acaban de escuchar, un general extranjero del extremo sur ha viajado todo este camino para prestarnos su ayuda. Pero orgullosos hombres y mujeres de Rolmund, no podemos dejar que otros limpien nuestros problemas. Ahora es el momento de mostrarle al mundo el poder de los soldados de Rolmund.”

Como siempre, Eleora era bastante buena para dar discursos. Sus palabras hablaron al orgullo de sus soldados y todos enderezaron sus espaldas. Se encontraron con su mirada resuelta y gritaron, “¡Gloria a Rolmund!”

“¡Traeremos la victoria a Su Alteza!”

“¡¡¡SÍ!!!”

Saludé a las tropas junto con Eleora, pero internamente estaba sudando cubos.

Si Eleora no lograba aplastar al príncipe Iván antes de la primavera, el príncipe Woroy aplastaría a mi pequeño ejército en el momento en que mi castillo se derritiera. E incluso si parecía que Eleora estaba ganando, necesitaba mantener esta posición o el príncipe Woroy podría ir en ayuda del príncipe Iván.

Si atacaba a las fuerzas de Eleora desde atrás, ella estaría acabada. Eleora y yo necesitábamos desempeñarnos perfectamente para que esta campaña tuviera éxito. Y si no lo lográbamos, ambos estaríamos acabados. Estábamos a punto de pasar el punto de no retorno.