Kenja no Deshi wo Nanoru Kenja (NL)

Volumen 2

Capitulo 13: Historias de los Nueve Sabios

“Eso fue increíble…”

Asbar murmuró inconscientemente después de ver la batalla de Mira con un Diablo de principio a fin. Emera y Zeff se quedaron sin habla ante cómo estaba en un nivel absolutamente diferente al de ellos. Junto a ellos, Fricca continuó observando el poder mágico del Diablo mientras se contraía hasta que finalmente desaparecía.

A diferencia de aquellos que estaban mudos de asombro, de inmediato Takuto corrió hacia Mira.

El Caballero Santo cumplió fielmente sus órdenes y siguió a Takuto. Al ver eso, los miembros de Carillón Escarlata regresaron en sí mismos y lo persiguieron.

“¡Mira-onee-chan, eres increíble! ¡Muy genial!”

Casi al mismo tiempo que Emera y los otros lo alcanzaron, Takuto dijo con gran ánimo mientras veía a Mira con una chispa de reverencia en sus ojos.

“Mm-hm, de hecho lo soy, sí que lo soy.”

Aceptando honestamente los sentimientos de este inocente niño, Mira se puso muy arrogante y comenzó a jactarse con una amplia sonrisa en su rostro. Sus ojos habían vuelto a su color normal y no había rastro del siniestro Magan en su ojo.

No había rastro de la Mira que lucho contra un Diablo, solo por ser admirada por un niño ya tenía muy buen ánimo.

Al ver la diferencia en la atmósfera que la rodeaba, Emera y los otros se sorprendieron por un instante, luego se relajaron y rompieron en expresiones sonrientes. Sin embargo, todavía tenían curiosidad por la fuerza aberrante de Mira, que le permitió abrumar a un Diablo, una de las criaturas que incluso se dice que son enemigos de la humanidad.

“No sé qué debería decir, pero gracias, Mira-chan. Fuimos salvados por ti.”

“Sí, no sé cómo hubiese ido si ti.”

“Mm, no hay necesidad de darme las gracias. Fui yo quien los involucró en esto.”

Desde la perspectiva de Emera, ella tenía sentimientos de gratitud por salvar su vida, pero desde la perspectiva de Mira, era un lugar al que originalmente se suponía que debía ir sola. Eso significo que estuvieron involucrados en el incidente con ese Diablo por ella, por lo que hablo con una sonrisa irónica pidiendo que no le agradecieran.

“Aun así, Mira-chan, eres muy fuerte, ¿verdad? ¿Eso tiene algo que ver con que te convirtieses en Rango C justo después de convertirte en aventurero?”

De repente, Zeff hizo la pregunta que todos aquí querían hacer. ¿Qué tipo de circunstancias, qué tipo de secretos tenía ella? La fuerza de Mira que han visto fue tan abrumadora que dudaron en tocar el tema.

Sin embargo, debido a que Zeff era un idiota o tal vez porque no entendía eso, hizo la pregunta como si no fuera nada.

“Hm-mm, ya veo. Estás interesado. Bueno, supongo que está bien decirles.”

Recibiendo las palabras de Zeff, ella dio aires de importancia, luego golpeó al Caballero Santo que estaba al lado de Takuto con la palma de su mano para enfatizar la existencia de la invocación.

“Entonces… la razón de tu fuerza, Mira-chan, ¿es…?”

Como era de esperar, o más bien, era natural, la que más se interesó fue Emera, que prestó una atención increíble a las palabras de Mira, esperando que ella continuara.

“¿Conoces al que se llama Danbulf? Soy su discípula. Como no puede moverse por ciertas razones, voy haciendo cosas menores aquí y allá en su nombre.”

Mira explicó la razón de su fuerza y, al mismo tiempo, dio una excusa valida por si le preguntarán por qué vino al templo antiguo. Si ella menciona que uno de los Nueve Sabios está involucrado, ella podrá usar ese título como escudo para mantenerlo en secreto. Ese era su pensamiento.

Ahora, ¿cómo van a reaccionar? Mira pensó y se puso en guardia, pero sus reacciones fueron inesperadamente tranquilas.

“La discípula de Danbulf-sama… así que por eso eres tan fuerte.”

“El Sabio apodado ‘El Ejército’… su discípula. Ya veo.”

Emera y Asbar respondieron completamente convencidos y fácilmente asimilaron la respuesta.

Vieron el combate de un nivel completamente diferente al suyo delante de sus ojos, así como las cicatrices causadas por el mismo que estaban grabadas en su entorno. Si hubiera alguien que tuviera tanto poder, definitivamente sería una existencia que no encajaba en los límites del sentido común. Era el nivel de poder que los Sabios, los mejores aventureros y los generales de los Reinos de los Tres Dioses dominaban.

La fuerza de Mira, que se asemejaba mucho a la fuerza de tales existencias, sería bastante difícil de explicar si no fuera por esa razón.

Sobre todo, teniendo en cuenta lo que sucedió ante sus ojos no dejaba lugar a dudas, e incluso si lo dudaban, no tenían forma de encontrar la respuesta. Dejando de lado el nombre de Danbulf, pudieron aceptar fácilmente las palabras de Mira.

“Danbulf-sama… la discípula de un Sabio…”

A diferencia de Emera y Asbar, que estaban más tranquilos por lo que Mira había dicho, Fricca continuó repitiendo la respuesta de Mira para sí misma.

Fricca también había visto la fuerza abrumadora de Mira con sus propios ojos, así que no había duda de ello. Incluso antes del combate contra un Demonio, ella sentía múltiples signos de eso. Sin embargo, a diferencia de Emera y Asbar, Fricca era una hechicera y sabía que no había ningún precedente de lo que Mira dijo.

Era un hecho que ninguno de los Nueve Sabios había tomado un discípulo. Los lanzadores de conjuros de las Torres de Plata eran investigadores y, aunque algunos buscaban enseñanzas de los Sabios, eso era todo.

No eran sus discípulos, ni siquiera tenían una relación como la de un maestro y un estudiante. Se dijo que no había ninguna persona en el mundo que recibiera todos sus conocimientos y técnicas de manera individual.

No hubo una sola persona reconocida como discípulo antes de que desapareciera, y el único Sabio que había regresado, Luminaria, no había tomado ningún discípulo.

Fricca vacilaba entre la sensación de que no había otra explicación para tal fuerza, aparte de que Mira fuese la discípula del Sabio, y el hecho de que, según la historia, tal existencia no tenía precedentes.

“¡Asombrosooo! ¡Yo también lo conozco! Ese es un nombre que yo conozco. La discípula de un tipo súper famoso. ¡Eso es increíble, Mira-chan!”

Haciendo un gesto de entendimiento mientras hablaba, Zeff mostró su admiración. Luego, mirando al Caballero Santo que estaba cerca, dijo: “Ahora que lo miro, ¡realmente tiene dignidad en otro nivel!” Hizo un escándalo.

No importaba de quién fuera discípula o qué circunstancias existía, Mira derrotó a un Demonio y los salvó. Para Zeff, eso era todo lo que importaba, en cualquier caso, Mira era fuerte, eso era todo. No pudo sentir el estado de ánimo, pero de una buena manera. O más bien, ni siquiera lo intentó.

En cuanto a Takuto, para él, Danbulf era solo un héroe de libros e historias ilustradas. Por encima de eso, Mira, que había derrotado a un Diablo, era una heroína, y por eso la miró con un brillo en sus ojos tan radiantes que casi cegaban.

Mira pensó que dudarían un poco de ella, pero al ver todo se solucionó sin que sucediera nada, dejó escapar un suspiro de alivio.

La razón por la que pensó que ese podría ser el caso fue porque era un hecho bien conocido que los Nueve Sabios estaban desaparecidos. Por así decirlo, cualquiera podría presentarse fácilmente como un discípulo de alguien cuya ubicación era desconocida. Sin embargo, estas personas lo aceptaron sin mucho pensamiento o confirmación.

“¿Qué les pasa a todos, realmente lo creyeron?”

Sintiendo ganas de ser un poco anti-climática, Mira derramó tales palabras. “Eh, ¿fue una mentira?”

Emera, que se convenció con la razón de que era discípula y se calmó, se asustó y una vez más se dirigió hacia Mira.

“No, no es una mentira. Además, estás demasiado cerca.” Sonrojándose ligeramente, Mira apartó su rostro y retrocedió un paso.

“Más bien. Mi maestro está desaparecido en este momento, ¿verdad? Pensé que estarías preguntando algo con respecto a eso.”

“Ah, eso es lo que quisiste decir.”

Emera asintió con expresión comprensiva y tocando al caballero blanco con la mano, habló como si narrara algún tipo de sueño.

“Ciertamente, hay muchas teorías con respecto a los Sabios que faltan. Como que entraron en el reino de los demonios o que hubo discordia entre ellos y se mataron unos a otros, o que lograron la divinidad y ascendieron al cielo. Sin embargo, eso es todo de lo que algunas personas hablan por crear rumores. La opinión común es que están en el mundo en algún lugar de jubilación. Ya han pasado treinta años, considerando el momento no sería extraño si hubiera aparecido un discípulo.”

Ella no estaba completamente equivocada. Una vez que Emera terminó de hablar, esta vez Asbar observo todo el cuerpo de Mira y…

“También. Tu estilo de lucha, señorita, encaja perfectamente con lo que una vez escuche de mi padre.”

Continuó y sonrió ampliamente. Y lo que dijo, fue el factor decisivo para creer en la historia de Mira.

“¡También escuché sobre eso de mi padre!”

“Yo también. Desde que descubrí que tenía talento para ser un mago, muchas veces leí las historias de los Nueves Sabios.”

“¿Correcto? Bueno, no creo que haya alguien que viva en este país que no lo sepa.”

Siguiendo a Asbar, los otros comenzaron a recordar las escenas dentro de las historias. Y la vista dentro de esas escenas tenía un estilo de lucha que se parecía al de Mira.

“¿Cuentos? ¿Qué historias?”

Mira murmuró y frunció el ceño. Historias de los Nueve Sabios. En otras palabras, una historia sobre ella y sus camaradas. ¿Qué tipo de historia son? Mira pensó, desconcertada.

“¿Qué, no sabes ‘La historia del rey Salomón y los Nueve Sabios’?”

Emera alzo la voz más que en otro momento, y cuando Mira dijo no saber, ella respondió con “no se puede evitar” con una expresión un tanto alegre. Luego, ella comenzó a explicar la historia en detalle, de muy buen humor, agregando sus propios sentimientos a la explicación.

La historia de la que hablaron era muy popular entre hombres y mujeres de todas las edades, y estaba basada en los Nueve Sabios. Entre estas historias se encontraba la historia de Danbulf y su “Ejército” de mil espíritus armados convocados simultáneamente y las historias de su heroísmo.

Sin embargo, hubo una historia aún más popular sobre Danbulf que esa. Se trataba principalmente de cómo usó ambas; Invocación y Taoísmo para luchar en combate cuerpo a cuerpo en espacios reducidos, a diferencia de cualquier otro Invocador.

Danbulf corriendo a través de sus invocaciones en combate. Todos los niños se habían absorbido en esa historia.

Emera habló de manera concisa pero entusiasta de los contenidos de las historias.

Fue gracias a tener tal conocimiento, que inmediatamente aceptaron las palabras de Mira. “Pensar que había algo así por ahí…”

Mira murmuró con una expresión extraña y temblorosa que no podía describirse como avergonzada o sorprendida. A su lado, Takuto con una expresión pura e inocente solo repitió “¡increíble, increíble!” Emocionado.

“¡Mira-chan, este es solo el prólogo! ¡Las historias de valor de tu maestro, Danbulf-sama, no terminan ahí!”

Cada vez más y más atrapados en el momento, Emera levantó el puño. Inmediatamente después, Fricca usó una parte dura de su bastón para golpear el vientre de Emera.

“Es suficiente. En lugar de eso, deberíamos apresurarnos a regresar. Hay mucho que tenemos que informar.”

“S… Supongo. Hagamos… eso…”

Acurrucada y sosteniendo su barriga, Emera respondió con voz apagada y se levantó inestable con lágrimas en los ojos.

“Fui yo quien preguntó, debería haberla detenido en medio de la explicación.”

Mira habló, preocupada por Emera y pensando que Emera no tendría que sufrir si solo la hubiese detenido antes.

“¡En absoluto, Mira-chaaan! ¡Todo fue culpa de Emera, no tienes que defenderla!”

“¿OOOohh?”

Fricca de repente dejó escapar una voz chillona y, como si la estuviera agarrando, abrazó a Mira. Al mismo tiempo, puso su cara en los pechos de Mira y comenzó a frotarse contra ellos mientras respiraba pesadamente. A pesar de que era una hechicera, sus movimientos eran más agudos y ágiles que los de un león que asaltaba a su presa.

Mira sintió un escalofrío en su espalda, así como una sensación de peligro. Sin embargo, todo eso fue espléndidamente exorcizado por el golpe de Emera.

Fricca cayó al suelo, Emera apoyo su mano en su cadera. Parecía que a menudo las dos que se descontrolaban, y en función a eso tenían una relación en la que se detenían la una a la otra.

“Um, lo siento por eso.”

“Eras normal hace un momento, mm.”

“Debe ser porque la tensión se ha liberado y no podía soportarlo más.”

“Qué problemático.”

Las dos dijeron y miraron a Fricca, quien rodó por el suelo con una sonrisa feliz a pesar de su cara de angustia y “¡¡Fue súper suaveeeeee!!” dijo ella, haciendo que Mira y Emera dejen escapar un gran suspiro.

“Es una verdadera lástima, ¿no es así?”

“Bueno, creo que esto también es parte del encanto de Fricca-chan.”

Asbar murmuró, lamentándose, pero Zeff, que estaba bien con cualquier cosa, siempre y cuando fuera una belleza, habló con una sonrisa refrescante.

“Aun así, Mira-chan, puedes usar tanto Invocación como Taoísmo como lo hizo Danbulf- sama, ¿verdad? Eso fue increíble.”

Mientras Fricca había recuperado gradualmente la calma, Emera hablaba con fuego en sus ojos. Aunque ese era el estilo de lucha de Danbulf, era bastante peculiar para un Invocador.

“Taoísmo, eh… de repente desapareciste y eso, cierto. El taoísmo es asombroso.”

“Eso es normal.”

“De vez en cuando tuve problemas para seguirte con mis ojos. ¿Se mueven todos los taoístas de esa forma?”

“Eso es normal.”

“Y también corriste en el aire, ¿verdad? Tenemos un taoísta en nuestro gremio, pero no creo que él pueda hacer esas cosas.”

“Es [Caminata Celestial], una habilidad inherente a los taoístas. Eso es normal.”

Mira también era un taoísta de clase alta, y esta vez había mostrado una gran variedad de movimientos diferentes, que desde la perspectiva de una tercera persona aparentemente parecían un espectáculo de ilusión. De hecho, la impresionante batalla en la que luchó Mira se había grabado vívidamente en los recuerdos de Emera y los otros.

“¡El taoísmo es increíble!”

Actuando como representante de todos, Emera alzó la voz con entusiasmo. Junto con esto, los miembros de Carillón Escarlata habían mejorado su opinión sobre el taoísmo.

La discípula de un sabio que era un invocador pero que también era capaz de usar el taoísmo, fue capaz de luchar hasta tal punto con el taoísmo, y fue el taoísmo lo que abrumó a un demonio. Era difícil no dejarse encantar por eso.

“… Qué…”

Aunque tenía la intención de mostrar el poder de la Invocación, el resultado fue que la evaluación del taoísmo mejoró. Mira vio a lo lejos y, al final de su ingenio, se preguntó dónde había cometido un error.

Mientras tanto, había un niño que miraba con respeto y envidia hacia tal Mira. “¡Quiero convertirme en un hechicero como Mira-onee-chan!”

Los cuentos épicos de los Nueves Sabios atrajeron fuertemente la imaginación del niño. Además de ver a la galante figura de Mira en la batalla, también se sintió influenciado por el eufórico discurso de Emera y, como tal, Takuto termino completamente influenciado por la atmosfera.

“Hooh, ya veo, ya veo. Así que quieres convertirte en un Invocador como yo, ¿verdad? Qué admirable.”

Mira dijo y acarició con fuerza la cabeza de Takuto, y sonrió alegremente.

“Si quieres convertirte en un Lanzador de Conjuros, primero debes investigar tu aptitud. Me pregunto si Takuto-kun tiene aptitud de Lanzador de Conjuros.”

Al ver a Takuto recibiendo todo el afecto de Mira, Fricca finalmente se calmó y habló mientras reprimía los celos dentro de ella.

“¿Aptitud para Lanzador de Conjuros?”

Al escuchar el término por primera vez, Mira detuvo su mano y miró la cara de Fricca. “Oh, ¿no lo sabes?”

“Ahh, mm-hm. Para la capacitación, había estado viviendo en un lugar alejado de las personas junto con mi maestro. Estoy mal informada de tales cosas.”

Suponiendo que esto era un cambio que había ocurrido debido a que este mundo era real, ella pronunció la excusa que había preparado.

“… Ya veo. Entonces no se puede evitar.”

Incluso si ella tuviera el mejor mentor posible, uno de los Nueve Sabios, le requeriría muchos años alcanzar el nivel actual de fortaleza. En cuyo caso, era natural para ella no saber de la Teoría de Aptitud de Lanzadores de Conjuros que se ha establecido en estos últimos diez años, Fricca asintió convencida.

“Para explicarlo de forma simple: aunque hay diferencias entre las personas, el poder mágico de cada individuo tiene sus propias características. Las personas con diferentes características son capaces de usar diferentes hechizos, en otras palabras, es una manera de juzgar si alguien tiene una aptitud o no.”

Para convertirse en un Lanzador de Conjuros, era necesario tener aptitud para ello. En Ark- Ars Online, tanto las clases de Guerrero como la de Lanzadores de Conjuros comenzaron eligiendo libremente lo que querían hacer. Podrían convertirse en lo que quisieran.

Sin embargo, según lo que Fricca dijo acerca de las diferencias en el poder mágico, no se les permitió elegir libremente en qué querían convertirse.

“Una diferencia en el poder mágico, hmm… Entonces, ¿crees que Takuto…? ¿Podrá él convertirse en un Invocador?”

“Primero hay que investigar con respecto a eso. Él puede ser examinado en la Unión de Lanzadores de Conjuros, así que podemos pasar por ahí una vez que regresemos a la ciudad.”

“Ohh, entonces la Unión puede hacer algo como eso. Así que, Takuto, ¿y tú? ¿Tú quieres saber?”

“¡Si quiero saber!”

Cuando ella le preguntó, Takuto asintió animadamente e inmediatamente respondió. “Entonces vamos a pasar por allí una vez que estemos de vuelta.”

Mira dijo y sonrió suavemente. Al ver esa sonrisa, que era una combinación de la sonrisa de un santo y una santa madre, Fricca se vio atrapada en un torbellino de celos y comenzó a retorcerse con locura.