Kumo Desu Ga Nani Ka?

Volumen 12

Observaciones de Historiadores del Futuro: Prólogo

La Gran Guerra Humano-Demonio.

Las batallas entre humanos y demonios han estado ocurriendo durante siglos, pero solo un enfrentamiento se conoce como la Gran Guerra Humano-Demonio.

No hay necesidad de ser un estudioso en historia para conocer lo única que fue esta batalla.

Humanos y demonios, cada uno luchando por la supervivencia de sus respectivas razas. No es de extrañar que esto por sí solo ya sea digno como para llamarla Gran Guerra.

Muchos detalles no están claros, ya que quedan pocos registros debido al caos posterior, pero es ampliamente aceptado que cada uno de los bandos movilizó fuerzas numeradas en siete dígitos.

Algunas teorías incluso sugieren que el número total de personas involucradas en el conflicto alcanzó los ocho dígitos.

La batalla más grande en la memoria reciente hasta entonces fue la Tragedia de Zatona, y ni siquiera entonces, los números combinados de la Alianza de Ohts y el Ejército de Sariella totalizó más de seis dígitos. Sariella era una nación poderosa y desplegó un ejército formidable. Para desafiarlos, sus rivales vecinos formaron una coalición y reunieron un ejército masivo.

Teniendo en cuenta sus poblaciones en ese momento, está claro que eso se habría considerado una batalla relativamente a gran escala.

Y sin embargo, la Gran Guerra la eclipsa fácilmente en alcance.

A pesar de todo esto, la Gran Guerra Humano-Demonio duró un tiempo sorprendentemente corto.

Dados los números de los soldados movilizados, habría sido natural esperar que la lucha durara muchos meses, quizás años.

En realidad duró unos escasos días.

Nuevamente, debido a la falta de documentos sobrevivientes, no está claro el número preciso de días; sin embargo, los historiadores están de acuerdo con que la Gran Guerra terminó en diez días como máximo.

Un conflicto de una escala tan enorme acabó prácticamente tan pronto como empezó.

Pero lo que es verdaderamente aterrador de la Gran Guerra Humano-Demonio no es su escala o su brevedad.

Es el porcentaje de bajas.

El número preciso nuevamente es desconocido, debido a la escasez de cifras explícitas, pero la teoría más comúnmente aceptada es que al menos la mitad de los números de cada bando murió.

Y ese es el mínimo.

Extrapolando la población de los demonios superviviente después de que la guerra concluyera, al menos es seguro decir esa cantidad murió en la batalla.

Algunos estudiosos incluso proponen que podría haber sido tan alto como un 70 u 80 por ciento.

En otras palabras, de un número de participantes de siete dígitos, nada menos que la mitad murieron en el lapso de unos pocos días.

Esta es una clara evidencia de la ferocidad que caracteriza a la Gran Guerra Humano-Demonio.

De los pocos documentos que quedan de la época, las palabras registradas en el diario de un soldado se han vuelto bastante famosas. La mayoría habrá escuchado esto en alguna parte antes:

“Toda la esperanza está perdida. Lo que queda es solo desesperación.”

NOVA: Agradezcanle a NyuXperience porque ella fue la que tradujo todas las ilustraciones

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