Ore ga Heroine o Tasukegite

Volumen 7

Capitulo 3: Valle De Los No Muertos (20 Y 21 De Julio)

Parte 3

El agujero en el suelo era sorprendentemente grande. Era del tamaño de mi sala de estar. También era más profundo de lo que pensaba. Estaba preocupado por golpearme la cabeza, pero fue suficiente caída que caí y caí de lleno en mi trasero cuando salté.

Una vez que todos los demás estaban adentro, la chica que nos había llamado nos cubrió la entrada y la camufló. .

“…”

Ella sostuvo su oreja contra la entrada sellada por un momento antes de finalmente soltar un suspiro de alivio.

“Está bien. Se han ido ahora”.

El resto de nosotros también respiró aliviado. Parecía que el peligro había pasado.

“Gracias. Realmente nos salvaste”.

“Está bien. Tú también me ayudaste, creo.”

“¿Lo hicimos?”

Ella sonrió cuando vio la confusión en mi rostro.

“Estaba  buscando  comida  cuando  me  encontraron,  pero  parece  que atrajiste su atención lo suficiente como para que pudiera escapar”.

“Ya veo. Así que los dos nos ayudamos, ¿eh?” Tenía más sentido una vez que ella lo explicaba. “Soy Lyun. ¿Quién eres tú?”

“Rekka Namidare”.

“Nami… ¿dare? Ese es un nombre muy largo. Es demasiado largo para recordarlo, así que te llamaré Nammy”.

“Qu-”

¿Por qué tenía que ser un apodo tan femenino? Tsumiki se echó a reír de inmediato, y Lea parecía estar considerando seriamente adoptarlo también. Por favor, no… Intenté lo mejor que pude para objetar sutilmente mi nuevo nombre, pero sonaba como nombres siempre y cuando cuatro sílabas no fueran realmente una cosa en este mundo.

“Entonces, ¿viniste de un lugar llamado ‘Tierra’, Nammy?”

Y así, a pesar de mis mejores esfuerzos, me quedé atrapado siendo llamado “Nammy” de todos modos. Al menos pudo aprender bien los nombres de Tsumiki, Lea, Mio y Corona. Pero cuando Harissa se presentó…

“Um, soy Harissa Hope. Soy un hechicero de Aburaamu… ”

“¿Aburaamu?”

El nombre parecía significar algo para ella. “¿Sabes dónde está eso, Lyun?”

Ella no respondió, sino que simplemente miró a Harissa por un rato antes de darse la vuelta.

“…”

¿Q-Qué fue eso? El estado de ánimo de repente pareció volverse incómodo… Traté de pensar en otra cosa para hablar, pero cuando miré a Lyun, me di cuenta de que había un extraño círculo flotante justo encima de su cabeza.

“Hey, Lyun, ¿qué es esa cosa en tu cabeza?”

“¿Huh? ¿Qué?”

Lyun no parecía saber de lo que estaba hablando.

“Eso es lo que los sylpheeds usan para sentir el viento, joven”, dijo Corona a mi lado.

Espere. Si Lyun fuera un sylpheed…

“¿Eres un sobreviviente del valle?” Corona preguntó antes de que yo pudiera.

“No hagas que parezca que todos están muertos…” dijo Lyun con el ceño fruncido. “Este es el valle de Windsong. Sylpheeds y sylphs viven aquí. Pero hace dos días, la gente comenzó a contraer la enfermedad de Ghostdemon”.

“¿Enfermedad Ghostdemon?”

“Así es.”

¿Ghostdemon? Eso no sonaba como un buen nombre. Justo cuando estaba a punto de pedir más detalles, la barriga de Lyun comenzó a gruñir.

“¡Oh…!”

Ella puso sus manos sobre ella, avergonzada. Sus mejillas estaban un poco rojas. Ahora que lo pienso, ella dijo que había salido a buscar comida o algo así. ¿Tenía hambre?

“Espera un segundo.”

Saqué una comida ligera de mi mochila y se la ofrecí. “¿Qué es esto?”

“Comida. Tómelo si tiene hambre”.

“¿Hmm…?”

Desenvolvió el paquete, tomó un mordisco… luego hizo una mueca y lo escupió.

“¡¿Qué es esto?! ¡No hay maná en absoluto! ”

“¿Mana?”

Esa no era una palabra con la que estaba familiarizado.

“El maná es similar a la energía mágica en el mundo del que vienes”.

Entonces, eran básicamente lo mismo, ¿eh? Aparentemente en el mundo espiritual, el maná se generaba constantemente desde un lugar llamado mana spring. El mana spring llenó toda la tierra con maná.

Ese maná fue lo que hizo crecer los árboles y las flores. Y cuando los espíritus y las hadas comieron la fruta cargada de maná que crecieron esas plantas, también tomaron el maná en sus cuerpos.

“Los espíritus tienen dos cuerpos, uno material y uno astral. El cuerpo material es lo que ustedes humanos llamarían el cuerpo físico, mientras que el cuerpo astral es la mente o el alma. El cuerpo astral requiere mucho maná para mantenerse, por lo que la falta de él es fatal para ellos”.

“Hmm…”

Los hechiceros humanos como Harissa usaban poder mágico para hechizos, pero no lo necesitaban para vivir. Mana era como una batería externa para alimentar la magia.

Quedarse sin eso no la lastimaría más que significar que no podría lanzar hechizos por un tiempo. Pero como los espíritus lo necesitaban para mantener sus cuerpos astrales, sus almas perecerían sin él.

“Cuando el cuerpo material está infectado con la enfermedad de Ghostdemon, el cuerpo astral también se ve afectado por el maná contaminado. A medida que la enfermedad progresa, pierdes la capacidad de pensar por ti mismo y comienzas a atacar a todos a tu alrededor”.

Entonces, la enfermedad más o menos secuestró sus cuerpos astrales, sus almas, y los obligó a atacar a las personas que los rodeaban… Sí, definitivamente era material de una película de zombis.

“Entonces, ¿cómo has logrado mantenerte a salvo, Lyun?”

Lyun vivió aquí también. ¿Cómo era ella la única que quedaba en pie cuando todos los demás se habían convertido en zombis?

“Soy uno de los espíritus más poderosos del valle, por lo que mi cuerpo naturalmente tiene más maná”.

El tratamiento para la enfermedad de Ghostdemon generalmente era muy sencillo: purga el maná infectado de tu cuerpo astral. Era de la misma manera que un cirujano extirpa un tumor o amputa una extremidad gravemente infectada.

Por supuesto, purgar maná del cuerpo astral era mucho más simple que todo eso. Cualquiera podría hacerlo. Ahora que lo pienso, Lea había hecho algo similar antes.

Después  de haber sido mordida por un sylpheed enfermo, había expulsado su núcleo de su cuerpo de energía mágica. Resulta que ella había hecho la llamada correcta.

“En otras palabras, dado que tengo más maná, eso significa que tengo más de sobra”.

Pero eso no significaba que su provisión fuera infinita. Cuando se hubiera reducido al maná que necesitaba para vivir, ya no podría purgarlo más. De lo contrario, ella moriría. Y a pesar de que tenía el escondite perfecto con esta cueva subterránea, todavía tenía que salir y encontrar fruta llena de maná para comer y mantenerse.

“… Pero entonces, ¿cómo terminó esta enfermedad de Ghostdemon invadiendo el valle? ¿Pensé que alguien podía purgar maná infectado de su cuerpo?”

Según lo que había dicho, siempre podían obtener más maná comiendo fruta, y no había falta de maná en este mundo gracias a la primavera de maná. Entonces, ¿cómo podría la enfermedad haber eliminado todo el valle?

“La mana spring en el valle se secó”, dijo Lyun finalmente con una expresión de dolor.

El maná en la atmósfera y en la fruta de los árboles provenía de la fuente de mana. Entonces, si eso se hubiera secado, entonces…

“Lo primero que notamos fue que la fruta de maná había dejado de crecer en el bosque. Pero para entonces ya era demasiado tarde. La capital donde vive el Rey Espíritu está muy lejos, y los sylphs se derrumbaron tratando de buscar ayuda… También hice todo lo posible para ayudar, pero hace dos días, un niño contrajo la enfermedad de Ghostdemon y mordió un sylpheed. A partir de ahí, corrió desenfrenada durante la noche… ”

La enfermedad de Ghostdemon afectó tanto al cuerpo material como al cuerpo astral, causando fiebre y fatiga. Aquellos que lo contrajeron se cansaron demasiado para moverse y estaban indefensos, ya que sus mentes fueron lentamente tomadas. Era una táctica tan cruel e inteligente que era difícil creer que solo hubiera una enfermedad detrás.

Pero Lyun dijo que esto comenzó hace dos días… Ese habría sido el día antes de llegar aquí. Mientras estábamos luchando en la mazmorra, ella había estado aquí corriendo por su vida.

Lyun había estado solo en un valle lleno de zombis. Ni siquiera tuve que preguntar esta vez. Era obvio que ella era una heroína.

Su final feliz probablemente fue salir de aquí con vida. Era bastante simple, pero ciertamente era peligroso. No podríamos escondernos aquí para siempre. No teníamos tanta comida, y ninguna si tenía maná para Lyun. Necesitábamos una forma de salir del valle, y pronto.

“Lea, ¿crees que puedes protegernos y volar al mismo tiempo?”

“Lo dudo. Podría haberlo hecho antes, pero esa emboscada me retrasó bastante. Me costó la mayor parte de la energía que había ahorrado, así que no creo que pueda volar lo suficientemente rápido como para dejar atrás a los sylpheeds”.

Si tan solo hubiera estado prestando más atención cuando salimos de la cabaña… Pero ya era demasiado tarde para arrepentirse.

No pudimos volar. Y había demasiadas hadas zombis para abandonar el valle a pie. Sería extremadamente difícil esquivarlos a todos. Todos callaron y nadie tenía un plan.

“Hay una manera, en realidad…” Pero entonces Corona habló.

“¿Te refieres a una forma de sacarnos de aquí?”

“Lo es. Esa.”

Mientras todos esperaban escuchar cuál era su plan, ella señaló la Espada del Héroe.

“Acabas de escuchar que los cuerpos sylph y sylpheed están hechos de maná, ¿verdad?”

“No me digas…”

“No, me imagino que es exactamente lo que estás pensando, joven. La espada del héroe tiene un poder inigualable contra cualquier tipo de energía mágica. Usarlo hará que salir del valle sea fácil”.

Hice una mueca cuando me di cuenta de que mi mal presentimiento sobre esto estaba justificado. La espada del héroe tenía el poder de atravesar la magia. Y dado que los cuerpos de los sylphs estaban hechos esencialmente de energía mágica, era extremadamente probable que la espada funcionara igual de bien en ellos.

“¡Espera! ¿Vas a matarlos? ¡No puedes hacer eso!” Lyun gritó cuando se dio cuenta de lo que estábamos hablando.

“Sí… tampoco estoy de acuerdo con eso”.

Las personas afectadas por la enfermedad de Ghostdemon podrían curarse mientras recuperaran su maná. Ellos estaban enfermos. No había forma de que pudiéramos matarlos.

Pero no era como si Corona significara algo malo al sugerirlo. Y era cierto que si queríamos escapar vivos del valle, teníamos que hacer algo con los infectados. Sin embargo, la pregunta era cómo.

Si tan solo pudiéramos pasar los obstáculos como lo hicimos en la mazmorra… Espera. Pasar por… ¿obstáculos? Ahora que lo pienso…

“Lyun, hay algo que quiero preguntarte”.

“¿Qué es?”

“¿Qué es lo que hace que los infectados nos ataquen?”

“¿Huh? ¿Qué quieres decir?””

La cara de Lyun dejó en claro que ella no entendía la pregunta.

“No sé cómo responder eso… Atacarán a cualquiera, incluso a amigos y familiares”.

“Pero no nos atacaron a mí ni a Tsumiki”.

Recordé lo que había sucedido justo antes de encontrarnos con Lyun. Tsumiki se había tropezado y yo había ido a ayudarla. Estábamos separados del grupo, pero las hadas zombis nos ignoraron y pasaron de largo. ¿Fue porque éramos de otro mundo? No, Lea también.

Estaba claro que estaban interesados en ella. La habían atacado e incluso trataron de infectarla. Entonces, la diferencia entre Tsumiki y yo, y Lea y Lyun era…

“… Es maná”.

“¿Huh?”

“Tsumiki y yo somos humanos normales, así que no tenemos maná. Pero tú y Lea sí.”

Eso fue todo. La enfermedad Ghostdemon infectó el cuerpo astral, que estaba hecho completamente de maná. Eso significaba que para propagar la infección, tenía que transmitirse a través de criaturas con maná.

Es por eso que las hadas zombis atacaban a personas específicas: podían sentir el maná y nos perseguían con poder mágico.

“Ya veo… Como todas las hadas tienen maná, es natural que la enfermedad se aproveche de eso, ¿eh?”

“Supongo que sí.”

Eso también explicaría por qué Lyun no se había dado cuenta. Todas las hadas y espíritus inherentemente tenían maná, por lo que era imposible saber a qué se dirigía la enfermedad. Mientras pensaba en eso, Mio me miró (todavía se aferraba a mi cintura, por cierto) y me hizo una pregunta importante.

“Pero… ¿cómo ayuda saber eso?”

Sabíamos que los zombis iban detrás de cualquiera con maná. Y teníamos a Harissa, Lea, Corona y Lyun en nuestro grupo. Definitivamente vendrían por nosotros. Aun así, saber cómo se comportaron nos dio una ventaja. Podríamos idear algún tipo de plan a partir de ahí.

“… Hay algo con lo que me gustaría que me ayudes, Mio”. Mio me dio una mirada perpleja.

Me arrodillé para poder mirarla a los ojos y luego compartí mi idea con ella y el resto del grupo.

***

Después de eso, llevé a Mio y Tsumiki a la aldea en el fondo del valle nuevamente. No había traído la espada del héroe conmigo. Fue en parte porque podía moverme más rápido sin él, pero también porque Lyun todavía parecía tener miedo de intentar usarlo. Entonces, al final, lo dejé con Corona. Todo lo que quedaba por hacer ahora era rezar para que mi plan funcionara para que no tuviéramos que recurrir al uso de la espada.

“Supongo que esto servirá”.

Llevé a las chicas a la cabaña al lado de la que habíamos volado el techo antes y abrí las ventanas. La forma del embudo del valle hizo que el ruido aquí en el corazón de él se hiciera eco fácilmente en toda el área. Lo había confirmado preguntándole a Lyun si había escuchado la canción de Mio antes mientras corría.

“Mio, ¿volverás a cantar para mí?”

Después de una pausa, Mio asintió a regañadientes y respiró hondo.

“No muy lejos, no detrás de mí, lo que está frente a mí es…”, comenzó a cantar.

“Ese es ‘El día antes del futuro’,” susurró Tsumiki.

Se suponía que Tsumiki y yo inspeccionaríamos los alrededores mientras Mio cantaba. Observamos la línea de árboles desde las ventanas, escuchando cuidadosamente cualquier ruido en la maleza y vigilando los puntos ciegos de cada uno.

Y efectivamente, en poco tiempo, hubo un susurro del bosque y apareció nuestra primera audiencia, una pequeña hada zombi.

Mientras Mio continuaba cantando, aparecían más y más hadas. Fue como la primera vez que fuimos atacados.

No sabía si respondían al sonido además del maná, o si la canción de Mio tenía algún tipo de efecto sobre ellos, pero lo importante en este momento era que todas las hadas zombis del valle estaban siendo atraídas al mismo lugar. Parecía que los sylpheeds de arriba no podían escucharlo, pero tendríamos que lidiar con ellos más tarde.

“¡Mierda!”

Eventualmente, una de las hadas zombis intentó entrar por la ventana, así que rápidamente la aparté.

“¡Oye! ¿No crees que hemos hecho lo suficiente? ”

“¡Si!”

Tsumiki y yo nos mudamos al mismo tiempo para cerrar las ventanas. “Rrrgh…”

“Hrrrgh…”

“Rrragh…”

Había una horda de hadas zombi de buena fe afuera ahora. “Mio, eso es suficiente”.

“Okay…”

Mio dejó de cantar. Ella se acercó para agarrarme de la cintura otra vez, pero cuando vio lo que estaba afuera de la ventana…

“¡Aah!”

“¿Estás bien?”

“Estoy bien… me duele un poco la cabeza”.

“¿Si?”

Me preguntaba por qué eso le causaría dolor de cabeza, pero supuse que sería una gran sorpresa para una chica tan delicada. Aparte de eso, sin embargo, la misión iba bien hasta ahora.

El plan era para aquellos de nosotros sin maná conseguir todas las hadas zombis en un solo lugar, mientras que Lea y las otras chicas con maná salieron del valle. Era una manera simple de asegurarse de que nadie saliera herido. En cuanto a nosotros, ahora que estábamos rodeados de hadas zombis…

“Está bien, es hora de irnos”.

“Si esto no funciona como dijiste que lo haría, te odiaré para siempre. ¿Lo sabes bien?” Tsumiki me lo recordó.

Mio se aferró en silencio a mi cintura. Y luego los tres… Sí, salimos por la puerta principal.

“Aaagh…”

“Hurrrgh…”

Por supuesto, justo al otro lado de la puerta estaba la horda de hadas zombis.

“Rrrgh…”

Pero pudimos atravesarlos sin provocarlos. Todo de acuerdo al plan, Tsumiki, Mio y yo, el equipo sin maná, simplemente nos alejamos.

“Eso fue malo para mi corazón. Parecía que todos esos ojos inyectados en sangre me miraban directamente…”

“Estoy de acuerdo contigo allí”.

Tsumiki y yo nos reímos secamente mientras el sudor frío goteaba por nuestras frentes. El canto de Mio tenía el poder de atraer a las hadas zombis, pero una vez que dejó de cantar, era solo una chica normal.

En otras palabras, no tenía maná ni poder mágico, lo que significa que no había razón para que la atacaran. Y en lo que a mí respecta, la misión fue un éxito.

Honestamente, las hadas zombis parecían aún más espaciadas de lo que esperaba. O tal vez simplemente se sentía así porque sus ojos estaban muy rojos. Era difícil saber dónde estaban mirando. Pero, sin embargo, las cosas habían funcionado.

Tsumiki y yo nos turnamos para llevar a Mio cuando salíamos de Windsong Valley, aunque tuvimos que detenernos varias veces para que cantara y atrajera a las hadas zombis.

Una vez que finalmente logramos salir del valle, caminamos otro kilómetro más o menos y esperamos. Finalmente, el grupo de Lea, que había dejado el valle desde el otro lado, dio la vuelta para encontrarse con nosotros.

“¡Rekka!”

“Bien, ¿están todos a salvo?”

“Esa es mi línea”, dijo Lea, y los dos nos reímos aliviados.

“No está mal, joven”, dijo Corona, jugando con la espada envuelta en tela sobre su hombro.

“Fue toda suerte”.

“No. Pensé lo mismo cuando escapaste del Gobernante… Ya sabes. Pero tienes la capacidad de tejer intuitivamente los hilos que tienes y las agallas para poner un plan en acción”.

Se sintió raro recibir tantos elogios. Podía sentir mi cara enrojecerse mientras trataba de encontrar algún tipo de respuesta, pero luego mi sangre se congeló cuando vi que algo aparecía sobre el hombro de Corona.

“¡Sylpheeds!” grité.

Todos se volvieron y miraron al cielo. Uno, dos… ¿tres de ellos nos habían seguido desde el valle?

“¡Todos, al bosque!”

Llamé a un retiro, pero los veloces sylpheeds se acercarían a nosotros antes de que pudiéramos lograr escapar. Mi corazón dio un vuelco al pensar que iban detrás de Harissa o Lyun con ese tipo de velocidad, pero luego…

“Hmph. Supongo que no tengo otra opción”, se dijo Corona a sí misma mientras levantaba la Espada del Héroe.

“¡No…!” Lyun gritó, pensando que sus amigos estaban a punto de ser asesinados.

“¡Corona, para!”

Yo también pensé lo mismo, pero…

“Sólo déjamelo a mí. Déjame tener mi turno en el centro de atención.”

Luego balanceó la espada mucho antes de que los sylpheeds nos alcanzaran. Parecía que sería una señorita salvaje, pero cuando balanceó la hoja envuelta en tela, juro que algo salió volando. Lo siguiente que supe fue que los sylpheeds cayeron al suelo como si hubieran sido golpeados.

“¡Mis amigos!”

“No te preocupes. No están muertos”, dijo Corona mientras empuñaba la espada de nuevo.

Pero esas palabras por sí solas no fueron suficientes para asegurar a Lyun. Corrió directamente hacia los sylpheeds que yacían en el suelo. Se inclinó y presionó su oreja contra uno de sus pechos… luego suspiró aliviada. Según lo prometido, Corona los había neutralizado sin dañarlos.

“Corona, ¿qué fue eso?”

“Pareces ser un héroe muy inusual, así que quizás no lo sepas, pero esta espada puede hacer más que disipar la magia. Puede robarlo, reflejarlo, sellarlo… todo tipo de cosas”.

Todo lo que pude hacer fue jadear asombrado. Corona fue sin duda el verdadero negocio cuando se trataba de este negocio héroe.

“Pero si pudiste hacer eso, ¿por qué no lo hiciste antes?”

“Esta técnica requiere mucha más resistencia y maná que simplemente matar algo. Hubiera sido bastante difícil hacerlo después de que me acabara de recuperar”, dijo Corona mientras volteaba la espada sin hacer nada sobre su hombro.

“¿Entonces, qué hacemos ahora? ¿Tienes a dónde ir?”

“Hmm… ¿Qué vas a hacer, Lyun?”

Habíamos salido del valle, pero no podíamos dejar a Lyun aquí.

“Me voy a la capital. Tendré que pedirle ayuda al Rey Espíritu para salvar el valle…” Lyun explicó mientras movía los sylphs inconscientes a un lecho de hierba.

“Hmm… La capital, ¿eh?”

“¿Pasa algo, Corona?”

“…No, es nada.”

“¿Estás segura?”

“Si.”

Agitó su mano con desdén como para decirme que no me preocupara. “Está bien, entonces supongo que iremos allí”.

Pensando en ello, todavía no habíamos recibido ningún detalle sobre Aburaamu de Corona, pero pensé que podría esperar hasta que entregáramos a Lyun de manera segura. Aparentemente, la capital del mundo espiritual, hogar del Rey Espíritu, era lo que nos esperaba.