Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e 2-Nensei-hen (NL)

Volumen 3

Capítulo 8: Identidad Revelada

Parte 5

 

 

El sonido del fuerte viento resonaba por todo el bosque mientras me esforzaba por seguir las huellas de dos personas concretas. ¿Cuánto he tenido que trabajar para llegar al área D3 esta mañana…? Sólo debería tardar un poco más… O al menos, eso es lo que me decía a mí misma mientras avanzaba, con las piernas temblando a cada paso que daba. Si descubrieran que los estoy siguiendo, entonces todo lo que he pasado, todos mis esfuerzos hasta ahora, no tendrán sentido. Normalmente, cuando se persigue a alguien, es necesario mantenerlo a la vista en todo momento para no perderlo.

Eso, por supuesto, significaba que la otra persona también podría verte. Había ciertos riesgos inevitables al hacer algo así. Pero, independientemente de quién fuera la otra persona, no había forma de que se diera cuenta de lo que estaba haciendo. Después de todo, ni siquiera yo era capaz de ver a Ayanokouji, mi objetivo, desde donde estaba ahora mismo.

Publicidad G-AR



La clave de esto era un walkie-talkie escondido en el bolsillo de mi camiseta. Gracias a este walkie-talkie, pude mantenerme en contacto con cierta persona que me ayudaba constantemente a localizar la ubicación exacta de Ayanokouji. Desde el sexto día, a todos los estudiantes se les dio permiso para usar sus puntos en la función “Búsqueda GPS” de nuestras tabletas.

Así, era posible que mi cómplice y yo nos hiciéramos una idea aproximada de la ubicación de Ayanokouji. Incluso en el peor de los casos, agotaría con gusto mi provisión de puntos para localizarlo. No importaba el método, había algo que tenía que conseguir imperiosamente:

Pruebas decisivas y concluyentes.

De un modo u otro, tenía que hacerme con suficientes pruebas definitivas para conseguir la expulsión de Ayanokouji. Ya no tenía ninguna otra opción. La expulsión de Horikita no era lo que debería haber priorizado todo este tiempo. Me sentí realmente avergonzada de que, a pesar de haber sido siempre vagamente consciente de su verdadero potencial, hubiera elegido siempre mirar hacia otro lado.

En retrospectiva, debería haber sospechado más cuando Ryuuen dejó de buscar a ‘X’ en la clase D. Ayanokouji estuvo involucrado en todo lo que sucedió en ese entonces. Incluso después de tener mis ojos abiertos a la verdad, todavía había una parte de mí que lo encontró difícil de creer. Al fin y al cabo, siempre había parecido solo un chico de preparatoria normal y corriente.

Publicidad M-M1

Mi walkie-talkie sonó desde mi bolsillo. Llevaba un auricular inalámbrico, así que podía escuchar sin tener que detenerme.

[Por favor, espera un momento, Kushida-senpai. Parece que los dos se han detenido no muy lejos de tu ubicación actual].

—Haa, haa… ¿en serio? ¿Por fin se toman un descanso…?

Siguiendo las instrucciones que recibí, me detuve con gratitud. Con esto, finalmente pude descansar por un momento.

[Sé que debes estar cansada, pero por favor, aguanta un poco más. El momento de la verdad debería llegar pronto, y cuando lo haga, no habrá nada que se interponga en tu camino].

Mi cómplice no debería haber podido escuchar lo que dije, ya que no había mantenido pulsado el botón de transmisión, pero por lo que se oyó, entendía perfectamente mi situación actual.

—Lo entiendo, lo entiendo…

A estas alturas, estaba completamente irritada. Sentía como si una zanahoria colgara delante de mis ojos, ligeramente fuera de mi alcance. Llevaba aquí arriesgando el culo yo sola desde el momento en que salió el sol, y todavía había muchas otras cosas que tenía que hacer después de esto… Mi merecido descanso sólo duró cinco minutos, interrumpido por nuevas instrucciones que llegaban a través del walkie-talkie.

[ No hay señales de movimiento. Parece que se han detenido por completo. Haz todo lo posible por ocultar tu presencia y dirígete lentamente hacia el noroeste. Además, no olvides tomar una grabación con tu tableta].

La forma educada y aburrida de explicar las cosas por parte de mi cómplice me molestó, pero en este punto, sólo quería acabar con todo esto lo más pronto posible. Reprimiendo las ganas de correr, saqué mi tableta de la mochila y comencé a dirigirme hacia el noroeste. No mucho después, vi a dos personas a la distancia delante de mí.

Observé cómo Nanase, congelada en su sitio, miraba de repente por encima de su hombro y le decía algo a Ayanokouji. Dado que ninguno de los dos tenía su mochila, me pregunté si realmente se estaban tomando un descanso.

Inicié la aplicación de la cámara de mi tableta y la puse en modo de grabación. Y entonces, me acerqué lentamente sin dejarme ver, escondiéndome cuidadosamente entre los árboles, pero por más que me concentraba, el viento era tan frustrantemente fuerte que no podía distinguir bien lo que decían.

Una oleada de impaciencia corrió por mis venas. Me hervía la sangre con el deseo imperioso de que empezaran a golpearse ya. Podría haberme hecho una mejor idea de su situación si hubiera podido escuchar lo que decían, pero era demasiado peligroso.

Si intentaba acercarme más que esto, correría el riesgo de ser descubierta por Nanase ahora que tenía la cabeza girada. Por el momento, necesitaba controlar mis emociones. Será un poco arriesgado, pero mi única opción en este momento es calmarme y dar un rodeo en busca de un ángulo mejor y más seguro.

Contuve la respiración mientras empezaba a moverme en silencio. Tras distanciarme un poco de ellos, mi plan era bordear el perímetro y───.

—¡¿¡Q─!?!

Aunque debería estar completamente sola, una mano salió de repente de la nada y me agarró del hombro. Y justo cuando estaba a punto de alzar la voz por la sorpresa, otra mano se acercó inmediatamente para taparme la boca. Ante un giro tan inesperado de los acontecimientos, rápidamente me entró el pánico. Mientras lo hacía, un par de labios brillantes y seductores se acercaron a mi oído.

—Shh~ Entiendo que estés sorprendida, pero tienes que estar tranquila, Kushida-senpai. Sería muy malo que Ayanokouji-senpai y Nanase-chan te descubrieran, ¿no?

De aquellos sensuales labios salió una voz cómplice que parecía poder atravesar mi alma. Era nada menos que Amasawa Ichika, de la clase 1-A, una chica con la que nunca he tenido una conversación formal. De hecho, se podría decir que es la primera vez que nos vemos.

Y, sin embargo, Amasawa evidentemente me conocía, dado que sabía mi nombre. Después de ser arrastrada con éxito lejos de donde estaban Ayanokouji y Nanase, Amasawa finalmente me soltó.

—Uhm… ¿Por qué estás aquí, Amasawa-san?

Conseguí recuperar un poco la compostura mientras me dirigía a ella, deseosa de que se fuera a la mierda. Si la pelea estallaba mientras yo perdía el tiempo con ella, todo se arruinaría. Podía sentir que mi presión sanguínea subía, pero aun así, no podía permitirme perder la calma.

—Sólo pasaba por aquí cuando te vi actuando sigilosamente, Senpai.

—No estaba ‘actuando sigilosamente’. Sólo estaba… bueno, dando un paseo yo sola, eso es todo.

Sabía que esta era una pobre excusa. Después de todo, estaba actuando de forma independiente, separada de mi grupo. Cualquiera con ojos podía ver que se trataba de una situación extraña. Además, la misma Amasawa ya había dicho que sería malo que Ayanokouji y Nanase se enteraran de lo que estaba haciendo.

Por ello, tendría sentido que de alguna manera supiera lo que realmente estaba tramando. Aunque, por lo que me habían dicho, una parte selecta de los de primer año ya sabía de mí.

—Hmmm… ¿Es así?

Amasawa se acercó a mí con una mirada algo sospechosa. Ahora que lo pienso, ¿cómo se las arregló la tal Amasawa para llegar hasta aquí sin siquiera una tableta o una mochi───

¡¡¡SMACK!!!

Un sonido seco y fuera de lugar resonó en todo el bosque. Sin duda, fue ahogado por el sonido avasallador del viento. Justo cuando empezaba a preguntarme de dónde había venido el sonido, sentí un dolor agudo y punzante que brotó en mi mejilla derecha y la cubrí con la mano.

—¿¡Qué!?

—Viniste a husmear en las montañas tú sola, así que, ¿qué es lo que realmente intentas conseguir, Senpai?

—¿Qué quieres decir? ¿De qué estás hablando Amasawa-san?

Publicidad G-M2



—¿Oh? Estoy muy emocionada por ver cuánto tiempo puedes seguir escondiéndote detrás de esa máscara tuya~.

Se acercó una vez más mientras yo fingía una sensación de terror y miedo por el hecho de que de repente me había abofeteado en la cara.

—¡Para!

—De ninguna manera voy a parar ahora, tonta~

Diciendo eso, levantó una palma abierta en el aire. Inmediatamente traté de retroceder y protegerme, pero aun así ella se abrió paso a la fuerza.

¡¡¡SMACK!!!

Esta vez, golpeó mi otra mejilla y lo hizo con fuerza. A pesar de mi mejor intento de bloquearlo, simplemente no pude seguir su abrumadora velocidad.

—¿Acaso entiendes lo que estás haciendo? ¡No puedes hacer esto!

—Sé que no lo parece, pero estoy siendo muy amable contigo. No debería doler tanto.

—¿¡Pero por qué!? ¡Nada de esto tiene sentido!

—Así que no lo entiendes, ¿eh~? Bueno, está bien entonces. ¿Me pregunto si empezarás a conectar los puntos si en vez de eso empiezo a golpearte con mi puño~?

—¿Qué?

Publicidad M-M5

Mi cerebro todavía estaba procesando sus palabras cuando mi visión comenzó a deformarse y distorsionarse. Sólo registré el sonido de algo siendo golpeado un poco después, y antes de darme cuenta, ya estaba en el suelo mirando el cielo nublado y encapotado.

¿Me… me golpearon hace un momento…? Tuve una sensación cada vez más cálida en un lado de la cara, como si la sangre se acumulara lentamente bajo la piel. Mi mejilla empezó a arder y a hincharse, doliendo.

—…Qué, ah… ¡Ah!

—Apuesto a que eso dolió un poco, ¿no? Tengo que decir que no sueles experimentar que te golpeen así, ¿verdad?

No podía entenderlo. Esta chica apareció de la nada y empezó a pelearse conmigo, pero ¿por qué? Y el hecho de que estuviera siendo tan excesivamente violenta hacía que todo tuviera menos sentido.

—Entonces, ¿qué tal si ahora voy por tu otra mejilla?

Tras esto, Amasawa empezó a acercarse a mí de nuevo. Ahora mismo, lo único que sabía con certeza era que no se trataba de una broma de mal gusto de su parte. Quería evitar que me golpearan sin sentido más de lo que ya lo habían hecho, costara lo que costara. Hice lo que pude para rechazar la mano extendida de Amasawa, apartando su brazo.

—Ah, eh, siento haberte empujado, pero me golpeaste tan repentinamente…

—¿Sigues actuando como una niña buena? Verás, te conozco muy, muy bien Kushida-senpai. Eres una mujer desagradable y vil, que está totalmente atrapada en esa linda cara tuya. Te alimentas de los secretos más oscuros de los demás, y si alguna vez te metes en problemas, te autodestruirás con gusto para arrastrar a todos los demás contigo. Un verdadero trabajo de principio a fin, ¿no es así?

—Realmente no entiendo de qué estás hablando Amasawa-san… P-pero, la violencia no está… permitida, ¿verdad?

—Entonces, ¿por qué no vas a llorar a la escuela al respecto? Puede que hasta consigas que me expulsen. Pero que sepas que si lo haces tendré que dejar un regalo de despedida, ¿ok? Sólo por ti, sacaré a la luz t~o~d~o~s los oscuros y sucios secretos de la secundaria que tanto te has esforzado en mantener ocultos y te quitaré tu estatus.

—¿Cómo…?

La repentina aparición de Amasawa sin siquiera una botella de agua en la mano no era una mera coincidencia. No… Algo estaba muy mal aquí.

—¿Cómo sé tu secreto? ¿Por la expresión de tu cara, parece que piensas que lo escuché de Ayanokouji-senpai?

Me miró con unos ojos que parecían ver a través de todo.

—Pero, eso sería in~correcto. Nada en este mundo se me escapa. Después de todo, soy una existencia especial.

—Nada en este mundo…

—¿Qué tal si te doy un ejemplo? Ah, ¿qué hay de aquella vez que intentaste acercarte al presidente del consejo estudiantil Nagumo, pero te rechazaron en la puerta? Bueno, honestamente, aunque aquello acabara funcionando para ti, dudo que esté dispuesto a apoyar tu causa ahora que Horikita-senpai se ha unido al consejo estudiantil.

—¡Cómo… cómo sabes siquiera eso─

—Oh, querida, oh, querida, ¿cómo es posible~?

Amasawa me sonrió como si yo fuera un juguete con el que jugar, y así, sin más, llegué al límite de mi paciencia.

—¿Quién… quién carajo te lo dijo?

—¡Ooo, finalmente has mostrado tu verdadera naturaleza! Dicho esto, tienes que callarte, ¿sí? Entiendo que la isla es realmente enorme, así que puede parecer que no hay nadie en este momento, pero no se sabe cuándo puede aparecer alguien más.

Amasawa se agachó y me dio un golpecito juguetón en la nariz, haciéndome una advertencia amable y condescendiente. Esa actitud podrida, engreída y condescendiente suya me enfadó sobremanera.

—¡Basta, perra de mierda!

En un arrebato de rabia incontrolable, una voz estalló desde el fondo de mi corazón. Si sólo hubiera visto la máscara exterior de la chica llamada ‘Kushida Kikyou’, entonces mis palabras de ahora parecerían sorprendentes. Pero Amasawa no se veía sorprendida en absoluto. Más bien, dejó escapar una risa vertiginosa.

—¡Jajajajaja! Mmm, ¡esto te queda mucho, mucho mejor Kushida-senpai~!

Desde luego, esta chica lo sabía todo sobre mí, sobre las cosas que había hecho. De hecho, parecía saber mucho, mucho más que gente como Ayanokouji y Horikita…

—¿Qué… qué demonios eres tú?

—No estoy segura de cómo responder a una pregunta como esa. Sólo… bueno, sólo estoy aquí para salvar a Ayanokouji-senpai.

—¿Salvar? ¿Eh?

—No intentes ocultarlo, Kushida-senpai. Puedo percibir cada uno de tus movimientos. Estabas planeando encontrar algo de suciedad sobre Ayanokouji-senpai con esa tableta que dejaste caer por allí para intentar expulsarlo, ¿verdad?

—No entiendo lo que quieres decir. ¿Encontrar trapos sucios sobre él con mi tableta? ¿Eh?

Mierda. Esta chica ya había descubierto todo… Una pequeña parte de mí sabía que era inútil intentar resistirse por más tiempo, pero aun así, sentí que no tenía otra opción que seguir haciéndolo, negando la verdad hasta el final.

—Ya llevas más de un año en la clase junto a él, y aun así no entiendes nada, ¿verdad Senpai? Es como que, no hay manera de que Ayanokouji-senpai se sienta amenazado por una muestra de pensamiento tan superficial.

Amasawa giró su mirada hacia donde deberían estar Ayanokouji y Nanase.

—Aaah, realmente quería sentarme y observar desde un asiento de primera fila. Estoy segura de que derrotará a Nanase-chan sin siquiera herirla. Realmente quería verlo~.

Después de murmurar unas palabras para sí misma, se giró de nuevo para mirarme.

—No sé quién te ha metido en esto, pero realmente te estás dejando utilizar, ¿eh Kushida-senpai? No importa cómo vayan las cosas por allá con Nanase-chan, estoy bastante segura de que Ayanokouji-senpai ya se ha dado cuenta de lo que has estado haciendo. No hay manera de que no lo hiciera, teniendo en cuenta como, lo tonta aficionada que eres.

—¡Pero he puesto mucha distancia entre nosotros…!

—¿Eh? ¿Mucha distancia, ¿eh? ¿Acabo de oírte admitir que lo has estado espiando?

—B-bueno… yo-yo solo pensé que esos dos estando juntos era un poco raro es todo…

—¿Así que los seguiste por curiosidad? ¿Subiste a este difícil sendero montañoso tu sola?

Sentí que debía dejar de poner excusas y responderle con sinceridad, pero mi habitual impulso de intentar escapar ganó al final. No tuve más remedio que reconocer que Amasawa era una enemiga formidable.

—No tiene nada que ver contigo.

—Sí, sí, tenía el presentimiento de que seguirías sin cooperar. Pero, el caso es que en realidad tiene bastante que ver conmigo. Después de todo, Ayanokouji-senpai es una persona muy especial para mí.

—¿Eh? ¿Qué demonios…? ¿Te gusta?

—Preferiría que no llegaras a una conclusión tan vulgar~. No es que me “guste” románticamente ni nada por el estilo, es más bien que lo “amo”… No, supongo que es mucho, mucho más que eso… Un sentimiento que va mucho más allá de los sentimientos amorosos.

—¿Qué?

—Dije lo que dije. De todos modos, me he desviado para decirte muchas cosas, así que qué tal si bajas la montaña y vuelves con tu grupo como una buena chica. El clima se pondrá peor en cualquier momento. Esta será tu última oportunidad de volver.

—…¡No me jodas!

Tomé un terrón de tierra húmeda en la mano y se lo lancé a Amasawa como forma de rechazo.

—¡Voy a conseguir ensuciar a Ayanokouji y hacer que lo echen de aquí, cueste lo que cueste…!

—Aunque consigas que lo expulsen, eso no va a solucionar nada. Lo sabes, ¿verdad?

Había llegado hasta aquí, desesperada por ver cumplidas mis ambiciones. Por todo eso, no había manera de que me echara atrás ante una estudiante menor como ella y me fuera con las manos vacías.

—Lo diré de nuevo. Ayanokouji-senpai es una persona muy especial para mí. Nunca permitiré que sea expulsado por una extraña como tú.

Amasawa alargó la mano y me agarró sin piedad del flequillo, levantando mi cabeza para poner mis ojos a la altura de los suyos.

—¡¡¡Ah!!! ¡Suéltame!

—¿Y por qué haría eso~?

Los coloridos ojos de Amasawa parecían vacíos y huecos; los ojos de una persona que había perdido el contacto con la realidad. Mi cuerpo comenzó a temblar mientras mis instintos me decían que escapara, suplicando que huyera.

—¡Eres un fenómeno! ¡No eres normal…!

—¡Qué curioso~! Pensar que empezarías a temblar de miedo por una chica más joven que tú. Pero, bueno, creo que es mejor que conserves esa maravillosa sensación, Kushida-senpai~. (Texto a color, es lo que dice la ilustración).

Youkoso Jitsuryoku 2do Año Volumen 3 Capítulo 8 Parte 5





 

Amasawa habló muy bien de mí de una forma extraña, casi insultante. Continuó, evidentemente desinteresada en escuchar lo que yo tenía que decir en respuesta a esto.

—Te crees más linda que nadie, más inteligente que nadie, mejor que nadie… En resumen, estás perdidamente enamorada de ti misma, ¿no es así Kushida-senpai? Se te hace la boca agua con la idea de imponer tu dominio, siempre ansiosa por apoderarte de los secretos de los demás. Sin embargo, odias la idea de perder ese control que anhelas, siempre incapaz de perdonar a los que conocen tus secretos. Personalmente, no me molesta esta personalidad estropeada tuya.

Me aguanté las ganas de replicar y en su lugar miré para procesar la situación. Es evidente que esta chica… esta zorra ya sabía todo lo que había que saber sobre mí. Por el momento, tenía que dejar de lado preguntas como “cómo” y “por qué”. Con eso en mente, calmé mi corazón acelerado y me puse de pie.

—Antes… ¿Qué intentabas decir exactamente?


Ordené el resto de mis pensamientos, recuperando por fin la compostura. Cuanto más dejara que mis emociones se apoderaran de mí, más me dejaría llevar por su ritmo.

—¿Sabes? Es realmente sorprendente que hayas llegado hasta aquí sin ayuda. Claro que tienes tu tableta y alguien que te asiste, pero eso no cambia el hecho de que hayas caminado hasta aquí con tus propias piernas. También te debe haber costado mucho mentir a tus compañeros de grupo. Después de todo, separarse de tu grupo conlleva bastante riesgo, ¿no es así? Cada vez tocas más la línea de la expulsión reduciendo los puntos que ganas─”

Publicidad G-M3



Una vez más, Amasawa me dejó sin palabras y continuó mirándome desde lo alto.

—Sin embargo, la linda Kushida-senpai no pasaría por alto algo tan sencillo, ¿verdad? Aunque tus acciones pusieran en peligro la posición de tu grupo y te hundieras en el fondo de la clasificación, supongo que al menos habrás ahorrado los puntos privados necesarios para asegurar tu supervivencia, ¿no?

No hace falta decir que su suposición dio en el blanco.

Sólo actuaba de forma tan imprudente porque había conseguido los dos millones de puntos necesarios para estar fuera de peligro. 1,3 millones, los cuales salieron de mi bolsillo, y el resto me lo proporcionó “ese tipo”.

—Nunca perderé… Pase lo que pase, nunca me rendiré hasta el final…

—Bueno, entonces~, ¿cómo piensas hacer eso~? Me parece que ahora mismo eres masilla en mis manos, Senpai.

Lo que Amasawa decía era cierto, pero…

—¿Y qué? ¿Seguro que has sido capaz de meterte conmigo, pero exactamente cuándo perdí?

Las llamas de la determinación que ardían en mi interior nunca se extinguirían por algo tan trivial. En lugar de sentirme agitada, poco a poco fui recuperando el control de mis emociones.

No había necesidad de entrar en pánico. Esto sólo significaba que tendría que deshacerme de Amasawa también. Me desharía de todos y cada uno de los que se interpusieran en mi camino. Pero, eso no era lo único.

—¿Oh…? Esto es mucho más de lo que imaginaba. Seguro que eres una perra desagradable, Kushida-senpai, pero todavía hay una cosa que admiro de ti. Tu fuerza, la fuerza en un sentido mental, es bastante digna de elogio. Más que miedo, parece que rebosas de odio. Y no está dirigido sólo a mí, sino a cualquiera que descubra la verdad sobre tu pasado.

Sin siquiera quitarme la suciedad y el barro del jersey, volví a ponerme en pie, como lo haría sin importar las veces que hiciera falta. Si tuviera que hacerlo, incluso derribaría a Amasawa aquí y ahora.

—No te molestes. No tendrías ninguna oportunidad contra mí, aunque tuviera las manos atadas. Hasta luego~, Kushida-senpai~.

Habló como si supiera exactamente lo que estaba planeando y me dio la espalda, brindándome una oportunidad perfecta para lanzarme sobre ella. No se me pasó por la cabeza nada más que la tentadora idea de empujarla e inmovilizarla contra el suelo.

Sin embargo, ella había predicho que lo haría, ya que esquivó mi golpe sin esfuerzo y justo a tiempo. Ni siquiera un segundo después, mis piernas fueron levantadas y me encontré cayendo de nuevo. Esto había sucedido tantas veces que había perdido la cuenta.

—¡Mierda…! ¡Mierda!

—No nos llevamos muy bien, ¿verdad Senpai? Sé que tratas los secretos de los demás como si fueran armas para conseguir lo que quieres, pero yo no tengo ninguno que puedas usar contra mí. Aunque intentes amenazarme con violencia, soy más fuerte que la mayoría de los chicos. Además, no soy amiga de nadie, así que tomar un rehén tampoco funcionará. Si tuviera que pensar en algo, supongo que Ayanokouji-senpai podría considerarse algo así como una debilidad, pero… para alguien como tú, vencerlo será tan difícil como vencerme a mí. ¿Estamos en la misma página?

Parloteó una y otra vez con el mismo tipo de tono despreocupado y condescendiente que usaría un profesor de mierda.

—Bueno, ¿qué tal si te rindes ahora? Todavía tengo que ir a ver a Ayanokouji-senpai.

—…¿Qué vas a hacer? ¿Decirle que lo he estado espiando?

—No, no, ya te dije que no tiene sentido hacer eso, tonta. Él ya lo sabe. Pero, quién sabe, quizá las cosas se desarrollen exactamente como tú quieres, Kushida-senpai. Tal vez esta pequeña riña con Nanase-chan termine con la expulsión de Ayanokouji-senpai de la escuela. Suena como tu sueño hecho realidad.

—…Después de que Ayanokouji salga de aquí, será tu turno… te aplastaré con seguridad.


—Aww, Kushida-senpai~. Eso es muy lindo, pero el resultado de nuestro combate ya estaba decidido antes de empezar. Entiendo que hacer expulsar a los que conocen tu secreto es tu única forma de protegerte, pero eso realmente sólo funciona con caballeros como Ayanokouji-senpai que no van por ahí contando la verdad a todo el mundo. Si fuera yo, haría todo lo que estuviera en mi mano para que tu secreto saliera a la luz antes de salir de la escuela, lo sabes ¿verdad?

Publicidad M-M2

—¡Ja…! No me hagas reír. Es cierto que una mocosa de mierda como tú seguramente andaría corriendo por ahí hablando, pero no es que alguien te vaya a creer. La mayoría lo pasaría como una tontería de alguien que está a punto de ser expulsado.

—Bueno, ¿segura? Dudo que muchos crean todo lo que digo. Sin embargo, igual conseguiría abrir una grieta en la persona superficialmente impecable de ‘Kushida Kikyou’ que te has creado. ¿No es eso más que suficiente?

Habiendo dicho todo lo que consideró necesario, Amasawa desapareció en el bosque, dirigiéndose hacia donde estaban Ayanokouji y Nanase. No sería imposible que la persiguiera, pero si lo hacía… no había duda de que respondería sin piedad.

Quizá optaría por difundir los secretos que guardo sin la menor duda. Y eso significaría mi completa y total derrota. Me senté en el bosque sola, paralizada, mirando al cielo. Las gotas de lluvia empezaron a caer débilmente a través de los huecos del denso follaje.

Se posaron en mis mejillas y comenzaron a caer por mi nuca.

—Yo… ¿Qué estoy haciendo…?

Publicidad M-AB

Me dije a mí misma estas palabras sin espíritu. Todo se sentía hueco. Tanto que ni siquiera podía encontrar en mí el sentimiento de enfado.

Primero Ayanokouji y ahora Amasawa… la gente que amenazaba con perturbar mi tranquila y pacífica vida seguía apareciendo una tras otra.

No… No eran sólo esos dos.

No eran las únicas razones por las que me había visto obligada a arrastrarme con las rodillas en el barro hoy aquí. Empecé a recordar dónde empezó todo esto… La razón por la que acabó así.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

48 Comentarios
Mas Votados
Mas Recientes Mas Antiguos
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios