Nidome no Yuusha (NL)

Volumen 1

Epílogo: El Héroe Emprende su Camino de Venganza en Este Segundo Intento

Parte 5

“Mmm, después de todo, la luz del sol se siente realmente bien, amo”.

Después de abandonar la Habitación del Guardián, nos tomó cinco días el llegar al exterior de la mazmorra. Al romper el núcleo, los monstruos no desaparecieron por arte de magia, así que aun cuando tomamos el camino más corto, el eliminar monstruos nos retrasó bastante.

“Bueno, si no tomamos luz solar, nuestra salud se verá afectada”.

“Siempre se me dijo que la luz del sol tenía un poder recuperativo, al igual que el espíritu de la luz. De hecho, en las zonas donde el sol brilla intensamente, los cultivos crecen mejor que en otros lugares”. 

“Tal vez es por la fotosíntesis… No, en algunas áreas realmente hay bendiciones espirituales. Este es un mundo diferente después de todo”.

Cuando llegue a este mundo por primera vez, pasé la mayor parte del tiempo tenso, deseando regresar a mi mundo original, no me permití pensar o interesarme en algo que me distrajera. No sería una mala idea dedicarme a la agricultura una vez finalice mi venganza. Aunque pensándolo bien, el futuro es incierto, no debería hacerme ilusiones. 

Antes de venir a este mundo, fácilmente me podría haber imaginado en ese sueño, pero he cambiado, y me resulta difícil pensar en ello. No puedo proyectarme tan a futuro, no hasta que complete mi venganza. 

Así que sí, para poder vivir mi vida plenamente, necesito destruirlos a todos.

En medio de nuestra charla trivial, me percaté de que ya estábamos cerca del muro exterior de la capital real.

Como era de esperar, cuanto más cerca estuviéramos del muro exterior de la capital, con más frecuencia nos encontrábamos con monstruos. A medida que avanzábamos, podíamos oír a los monstruos, los ladridos de los Garums y las extrañas voces de los goblins.

“Bueno, creo que nos perdimos el inicio del espectáculo”.

“Amo, apresuremonos. A este ritmo se perderá los mejores momentos”.

“Tienes razón, debemos darnos prisa”.

Usando mi habilidad [Ocultar Presencia], nos escabullimos a través de los monstruos y llegamos a un lugar desde el cual podíamos ver el sitio donde perforamos la muralla.

Después de acercarnos lo suficiente como para que las personas de la ciudad no pudieran notarnos, nos subimos a las gruesas ramas de unos árboles, y desde la distancia, observamos detenidamente el campo de batalla.

“Oh, ya lo están haciendo. Este lugar es perfecto para contemplar el caos.”

“Parece que recién ha comenzado. Hasta donde puedo ver, tal parece que por ahora, solo unas pocas personas han sido cazadas”.

El agujero, que al principio sólo permitía el paso de dos personas, ahora tenía el tamaño de unos tres carruajes grandes. Teniendo en cuenta que durante mi primera vez aquí solo había alcanzado el tamaño de un carruaje, lo único que pasaba por mi mente era lo estúpidos que eran aquellos que decidieron vivir ahí.

Por lo que puedo ver, el grupo estaba próximo a duplicar la cantidad de monstruos que atacaron durante mi primera vez aquí. Y al igual que la primera vez, los Garums dispersaron su veneno a través del agujero en la muralla, llevándose a los residentes que quedaron inmovilizados por su veneno paralizante. 

Los soldados que lograron escuchar la conmoción, acudieron a luchar contra los monstruos. El veneno paralizante de los Garums Venenosos requería de un buen tiempo para volver a ser utilizado, por lo que la batalla entre los soldados y el grupo de monstruos estaba bastante pareja.

Aun así, los residentes fueron forzados a retroceder debido al gran número de monstruos, y aquellos que no podían caminar bien a causa del veneno paralizante terminaron siendo arrastrados hacia el bosque. Uno por uno, ya fuera por los colmillos y garras de los Garums o por los palos de los goblins, fueron brutalmente asesinados.

Incluso los pocos aventureros que llegaron dieron algo de pelea, pero terminaron siendo repelidos tan pronto se unían a la batalla. Pero al final ¿Cuál fue el resultado?

“Jaja, parece que no tienen quien los dirija. Entonces, ¿Cuántos monstruos crees que se necesitarán para que acudan el resto de los aventureros? ¿Quieres apostar?”

“No, amo. El licor, las mujeres y los juegos de azar son la perdición de uno. Incluso sin hacer algo como eso, esta escena por sí sola será suficiente para entretenernos. Por favor, tenga amo”.

“Oh, Thank you.” (MrFreeman: Esto lo dice en inglés, por si las dudas xD)

Tras agradecer, recibí las frutas de Rikoko que habíamos recogido en el bosque. Era una fruta con una apariencia un tanto extraña; tenía un aspecto similar a una manzana de color azul y sabía a fresa. 

“¿Zencyu?”

“Significa gracias. Oh, alguien más ha caído”.

Observé el campo de batalla a la vez que mordía la fruta.

No es que los soldados fuesen ineficientes, todo se debía al gran agujero en la muralla, que no les permitía frenar el avance de los monstruos.

“¡Ahhhhh, detente, alguien por f– gahhhhh!”

Viendo a la lejanía, pude apreciar la figura de ese hombre, aquel que me trajo a la ciudad y luego me vendió a la princesa.

“¡Ayuda!, no, alguien por favor ayúdeme! ¡Ayúdenme, aahhhhh!”

“Jajaja, ¿Y quién lo hará? Porque yo no te ayudaré de nuevo, así que muere devorado por esos monstruos”

Escuchaba los desesperados gritos de ese hombre, cuya pierna era despedazada a mordiscos por un Garum, a la vez que un goblin lo golpeaba, rompiéndole el brazo de una forma bastante desagradable. 

“Oh, amo, ¿No recuerdas a esa mujer también? Pude identificarla de entre sus memorias, amo”.

“Ah, ¿No es esa la esposa de ese hombre? Oh, está rodeada por goblins. No la devorarán, será utilizada para procrear. Que lamentable”.

“Mi amo no es bueno mintiendo. Se está riendo”.

“Oh, rayos, he quedado expuesto”.

Intenté fingir preocupación, pero no pude evitar reírme de ese par de payasos que estaban a punto de morir.

Eran demasiado insignificantes como para que yo destinara mi valioso tiempo en matarlos, pero verlos morir de esta forma era bastante agradable.

“Hmm… hey, hey, ¿Qué estás haciendo ahí viejo?”

Mientras hablábamos, el viejo de la tienda de armas apareció en el campo de batalla. ¿Por qué está él aquí, a pesar de que su tienda estaba cerca del agujero, estaba en una zona prácticamente segura.

“¡¿Pero qué?! ¡Hey, hey, no, detente, idiota!”

Ese anciano parecía haberse vuelto loco, estaba tratando de proteger a los residentes, empuñando una espada de forma incorrecta, intentado deshacerse del monstruo que lo atacaba. También, intentaba darle una botella llena de líquido a un residente que quedó atrás debido al veneno paralizante.

Cuando el residente que recibió la botella bebió su contenido, pudo moverse sin problemas. Probablemente le había dado un antídoto.

“¡No tiene valor el intentar protegerlos, y tu tienda no puede permitirse esos gastos! ¡Demonios!”

“Amo, tranquilo, se van a percatar de nuestra presencia”.

“Lo siento”.

Fui regañado por Minaris, por lo que calmé mis agitadas emociones y volví a ocultar mi presencia.

Mientras tanto, el anciano de la tienda de armas fue por ahí haciendo circular los antídotos, y ayudando a otros a huir. 

Los artículos de curación, incluyendo los antídotos, se adquirían por un precio bastante alto. Le recomendé que las comprara, porque una de esas pociones aumentaría su precio en un situación como esta. No lo hice para que las usara en algo como esto.

“…Ten cuidado. Ellos no valen la pena, no es necesario que te arriesgues tanto para salvarlos”.

Ya ha distribuido más de diez pociones, incluidas las que les entregó a los soldados. Las que le entregase a los soldados podían ser pagadas posteriormente, pero no recibiría un pago por las que les entregó a la gente común.

Eran el tipo de personas que olvidarían todo acto de amabilidad, más aún si debían pagar por este.

No sería extraño que la tienda quebrara por este imprudente acto de amabilidad.

Estar aquí era bastante peligroso, pero el viejo parecía llevar la batalla de una mejor manera que los soldados, posiblemente debido a la sangre de enano que corría por sus venas.

Era evidente que el viejo no pertenecía a los disciplinados soldados, ni mucho menos a los experimentados aventureros.

Por este motivo, lo que sucedería era algo inevitable. El viejo estaba tratando de ayudar a una chica que no podía moverse.

Los goblins estaban a punto de atacarlo por detrás.

“¡Ah, mierda!”

“¡¡AMO!!”

Actué casi por reflejo.

Manipulé mi poder mágico para fortalecer mis piernas, y empleando [Pasos Rápidos] en conjunción con [Pasos Celestiales], me abrí paso por el camino más corto.

“¿Gyuugyaa?”

“¡¿Pero qué?!”

Aterricé sobre el goblin con una patada, rompiéndole el cuello y levantando el polvo del suelo.

“…Chico…”

“¿Por qué viniste a un lugar como este? No vale la pena ayudar a estas personas”.

Mis palabras golpearon al anciano, dejándolo sorprendido.

“Los antídotos no debieron ser baratos. ¿Por qué te molestaste en desperdiciarlos con estas basuras?” 

Los residentes de la ciudad conocían y entendían bien su entorno. Exactamente por eso, el anciano, quien vivía cerca de esta gente, debería saber que les había dado pociones gratis.

“…Te agradezco tu ayuda, pero creo que te extralimitas cuando dices que no vale la pena ayudarlos”.

“¿Acaso no son el tipo de personas que se retiran sin agradecer, y huyen sin ayudar a quienes les rodean?”

“No todas las personas son así. No puedes saber quiénes son buenos y quiénes son malos”.

“¡Oh, eso lo sé, de hecho estas personas…!”

“¡Y si ese fuera el caso, podrías quedarte viendo como un niño es asesinado por un monstruo! ¡¿AH?!”

Las duras y furiosas palabras del viejo ahogaron mi voz, imposibilitando el hablarle sobre como esta gente me había traicionado.

Después de que dijo eso, por primera vez me fije en la temblorosa chica que estaba protegiendo el anciano.

…Entonces ¿Cuál es el problema?

Los residentes de este lugar me traicionaron.

Me agradecieron por haber sido su benefactor, pero tan pronto como pudieron, me transformaron en un mero saco de dinero y me vendieron a la princesa.

Sí, me traicionaron.

…¿Me traicionaron? ¿Es cierto?

¿La chica frente a mí, que estaba temblando detrás del anciano, realmente me traicionó?

“…No, no conozco a esta chica”.

Y así, mi ahogada voz, subió y escapó de mi interior.

“¡Ah! ¡Dios mío, son los aventureros!”.

Los aventureros que se alojaban en la capital real parecían haberse reunido. A diferencia de los soldados, ellos venían en grupos y equipados con conjuntos de armadura diferentes.

“…Oye, ve esto como una disculpa y un agradecimiento. Será suficiente para compensar lo que gastaste en los antídotos”. 

Dije eso y le lancé una moneda de oro al anciano.

“Pero esta será la última vez que te podré ayudar, viejo. Esto será para redimirme por lo ocurrido en mi primera vida. La próxima vez no te ayudaré”.

“¡¡Oh, hey, Chico!!”

No volví a mirar atrás cuando escuché la voz del viejo, y antes de que más gente se reuniera, regresé al lado de Minaris.

“Amo, ¿Por qué se expuso?”

“…Ese anciano definitivamente no formaba parte de mi venganza. Además, tenía una pequeña deuda con él durante mi primera vez en este mundo”.

“Eso fue peligroso. No creo que mi amo pueda ser asesinado tan fácilmente, pero se podrían presentar obstáculos en nuestra futura venganza”.

La mirada de Minaris era fría.

La venganza es lo único que nos conectaba, por lo que Minaris estaba realmente preocupada de que algo la obstaculizara.

“Usted es mi cómplice de venganza. No quiero que tropiece y caiga en un lugar como este. No se exponga a estos riesgos”.

“…Fue mi error. Pero gracias a ese viejo, me di cuenta de algo importante. Estos métodos no serán útiles durante esta segunda oportunidad”.

Además del anciano de la tienda de armas, y aunque no lo hicieron de forma directa, había otras personas que me brindaron una mano.

Estaba el hombre que dio la información de mi ubicación, sí, pero también estaban aquellos que a pesar de saber quien yo era, decidieron no informar mi ubicación.

Como ese sujeto, a quien le dijeron que obtendría mucho dinero si informaba dónde estaba, pero tampoco quiso involucrarse y decidió rechazarlo.

Había una niña desconocida que no estaba enterada de nada, y que aun así, me dio su preciado caramelo.

En este país hay quienes no se colocaron del lado de mis enemigos. Por lo que no podría recorrer mi camino de venganza de este modo. Esto no es lo que quiero, sin darme cuenta, estoy matando a esas personas.

“A causa de mi venganza, no puedo estar matando a cualquier persona no relacionada. No puedo hacer eso en esta segunda oportunidad. Fue demasiado el mezclar a gente que ni siquiera estuvo involucrada con mis objetivos de venganza. Murieron demasiados inocentes, y ni siquiera me había percatado”.

Para conservar mi cordura, hay una línea que no debo olvidar.

Si de verdad era por algo absolutamente necesario para mi venganza, no dudaría en matar a personas bondadosas. Sin embargo, si no me detuviese a pensarlo por un momento, y asesinara gente solo porque me resultase fácil, entonces perdería esa última pieza de humanidad que me dejó Leticia, y me terminaría convirtiendo en un verdadero monstruo.

La venganza es una emoción. No es un instinto, es una pieza del corazón que le ofrece tranquilidad a todas las personas.

Un monstruo que ha perdido todo uso de la razón sería incapaz de lograr dicha tranquilidad. 

Mataré a la princesa, mataré al Rey, mataré a la Reina, al primer ministro, al comandante de los caballeros y a sus hombres, a todos los asesinare sin mostrar ni una pizca de misericordia.

Haré que sufran, que se lamenten, los aplastaré con mi poder irracional, y en lugar de pedirles que se arrepientan, los mataré.

Debo lograr mi venganza sin involucrar a gente de forma innecesaria; obtendré la mayor venganza de todos los tiempos.

Por ende debo preparar todo correctamente. Debo pensar bien en cómo identificar a quienes sufrirán mi venganza, quienes serán asesinados.

No se necesitan impurezas en esta venganza.

Debemos hacer que nuestra venganza sea lo más pura posible.

Ni el anciano de la tienda de armas, ni esa temblorosa chica eran objetivos de mi venganza, pero si no quieren involucrarse no deberían afligirse por las muertes de mis objetivos.

Son una impureza que no tiene nada que ver con los objetivos de mi venganza.

Tampoco es que los haría forzosamente mis objetivos, pero debido a mi venganza sería algo inevitable. Después de todo, los medios y los propósitos siempre están siendo reemplazados. Sin embargo, empleando ese medio tan ineficiente no lograría a cabalidad mi venganza.

Sin detenerme a pensarlo en profundidad y ni siquiera reflexionar al respecto, actué impulsivamente, y motivado por mis emociones, empeoré toda la situación.

Esta vez mis acciones me llevaron definitivamente al fracaso.

Si por error vuelvo a cruzar esa línea, no lograré vivir hasta el final de mi venganza. 

“Vámonos, Minaris. Debemos pensar más en lo que haremos, logremos una venganza perfecta. No somos asesinos, no duraremos mucho con métodos genocidas que involucren a inocentes. Elaboremos nuestra venganza de forma más detallada. Todavía tenemos muchos objetivos de los cuales vengarnos”.

Después de decir eso, giré y le di la espalda a las murallas de la capital real para dar nuestro siguiente paso.

Pero entonces…

“¿En qué está tan inmerso? Mi sermón aún no ha terminado”.

“¡Duee, duee, ¿Minaris?!”

Minaris pellizcaba mis cachetes con sus dedos.

El ambiente de seriedad que tanto me costó crear desapareció en un pestañeo. 

“No tengo ninguna objeción con que fuera a ayudar al anciano de la tienda de armas. La razón por la que estoy enojada, es porque el amo se puso en riesgo. ¿Realmente se fijó a dónde iba? Ahora que no es lo suficientemente fuerte, fue usted el que dijo que tenía que ser cuidadoso, ¿Acaso estoy equivocada?”

“Lo siento, lo siento, tendré más cuidado de ahora en adelante, lo siento, libérame por favor…”

“…¿De verdad? Por favor, tenga más cuidado. No puedo llevar a cabo esta venganza yo sola. ¿Quiere una venganza perfecta? Si es así, entonces no descuide su propia seguridad, por favor”.

No fue hasta que finalmente suspiró que Minaris soltó mis mejillas… Pensé que me las rompería en mil pedazos, pero hablaba bastante seria.

“Entonces, después de esto, ¿qué haremos?”

“Ah, vamos al norte. Nuestro primer destino será la ciudad académica de Elmia”.

Después de decir eso, no pude evitar mirar las murallas de la capital real, que no volvería a ver en mucho tiempo.

Los monstruos ya habían sido asesinados o gravemente heridos por los aventureros, y ahora se estaban retirando.

Una vez solucionada la diferencia de números, los monstruos perdieron la ventaja y toda chance de ganar. No pasaría mucho tiempo para que la paz volviera a este lugar.

Esperen, Rey, Reina, Princesa, caballeros, y ustedes gran montón de basura. Definitivamente los arrastraré a las profundidades del infierno.

Les mostraré cuáles son las consecuencias de sus acciones, con esta segunda oportunidad que se me ha otorgado.

La primera vez que estuve aquí ustedes me pisotearon. Esta vez será mi turno.

Comenzaremos nuestro viaje.

Este camino de venganza comienza a ver la luz.

Caminé mientras me reía de mi pasado, de lo que había hecho.

¿Y qué importaba si no podía decírselo a nadie?

Esta será una vida de la que nadie más podrá estar orgulloso.

Al menos, puedo pensar que esta vida no será una ‘vida desperdiciada’.

…Me reí ansiando saber qué era lo que nos deparaba en un futuro este camino de venganza.

MrFreeman: Revisado y corregido

NOVA: 2da Revisión