Otome Game no Hametsu Flag shika nai Akuyaku Reijou ni Tensei shite shimatta… (NL)

Volumen 6

Capítulo 2: Al Ministerio Mágico

Parte 1

Decirme que todo había sido un sueño había funcionado tan bien que ahora me preguntaba por qué estaba tan asustada en primer lugar.

Unos días después, llegó el momento de comenzar a trabajar en el Ministerio Mágico. Usar el uniforme con su capa era suficiente para emocionarme. Era como los magos que había visto en el manga y las películas de mi vida anterior.

Después de la ceremonia de entrada, todos los recién llegados tendrían que pasar por la orientación para poder instalarse en el Ministerio.

¡Ahora soy una adulta! ¡Haré lo mejor que pueda! Pensé para mis adentros en mi camino hacia allí.

El Ministerio en sí estaba ubicado cerca de la Academia, así que me era familiar, pero ver a los cincuenta o más recién llegados reunidos en el auditorio para la ceremonia de entrada lo hacía ver tan imponente. Todos los reclutas de otras ramas del Ministerio estaban allí, por lo que podría explicar por qué había tantos de nosotros.

Estaba nerviosa por estar entre todas estas personas, pero luego escuché dos voces familiares. “Buenos días, Lady Katarina.”

“Buenos días, Lady Claes.”

Eran María y Sora. Los dos se habían encontrado por coincidencia al venir aquí, y habían venido a saludarme. A pesar de haber trabajado extraoficialmente en el Ministerio durante un tiempo, ambos iban a asistir a la ceremonia conmigo y con todos los demás recién llegados.

Ver dos caras que conocía me hizo sentir aliviada. Aunque no estaba tan cerca de Sora como lo estaba de María, él también era mi amigo y viajamos juntos cuando Keith fue secuestrado. Como la ceremonia aún no había comenzado, comencé a conversar con ellos.

“¿Cuándo se encontraron ustedes dos?”

“Tuve algunos problemas al venir aquí, y Sora me ayudó. Luego vinimos juntos el resto del camino.”

“Sí, un tipo desagradable la había visto, así que hice que se perdiera.”

Entonces Sora ayudó a María a deshacerse del hombre que la estaba preocupando, y luego vinieron juntos al Ministerio… Eso realmente sonaba como un evento programado en un juego otome. El chico salva a la chica, y luego descubren que trabajan en el mismo lugar.

Sora, de cabello azul y ojos azules, era uno de los chicos con los que la protagonista podía elegir engancharse en el juego de mi sueño, por lo que tendría sentido.

¡No! ¡No tendría sentido! ¡Porque era sólo un sueño! ¡No es la realidad! ¡Sólo un sueño increíblemente realista! Debería dejar de pensar tanto en eso.

Sacudí mi cabeza para sacar todas mis ideas raras sobre FL2.

“Lady Katarina, ¿pasa algo?” Preguntó María, preguntándose por qué hice eso.

“Oh, no es nada… estoy un poco nerviosa.”

“Yo también. A partir de hoy, seré miembro oficial del Ministerio.” Dijo con una expresión ansiosa en su rostro.

Cuando se veía así, realmente desencadenaba el instinto protector de uno… ¡Te protegeré de cualquier peligro! Quería decirle… pero, desafortunadamente, sólo había ciertos peligros de los que mi Elevador de Tierra podría proteger a las personas. Y decir algo así sería aún más extraño después de considerar que yo también estaba bastante ansiosa.

“¡Hagamos lo mejor, juntas!” Le dije, estrechándole la mano. Ella se sonrojó y asintió, diciendo un muy lindo: “¡Sí!”

Sólo la protagonista del juego podría ser tan encantadora mientras hace algo tan trivial. Incluso Sora, de pie junto a nosotros, murmuró: “Mírala, encantando gente a diestra y siniestra.”

¡Tiene mucha razón! María era tan linda que siempre terminaba encantando a todos.

Después de que todos los recién llegados se reunieron en el auditorio, entraron los superiores, silenciando toda la sala. Reconocí a Larna Smith, la jefa de Raphael, que nos había ayudado durante la desaparición de Keith. A su alrededor había otras personas… probablemente los jefes de los distintos departamentos.

Miré a través de cada uno de ellos para asegurarme de que los hombres que había visto en mi sueño no estaban entre ellos. Por supuesto que era sólo un sueño, pero, ya sabes… sólo para estar segura. Me sentí aliviada al descubrir que, por suerte, no conocía ninguno de sus rostros.

Como finalmente todos estaban allí, comenzó la ceremonia. A excepción de los superiores, no había sillas para las personas en el auditorio (incluidos los recién llegados y los otros empleados), por lo que tendríamos que escuchar los discursos y esas cosas de pie. Como eso es exactamente lo que sucedió en la ceremonia de entrada y graduación en la Academia, ya sospechaba que sería así. Oh bien.

Probablemente todos estaban acostumbrados a ponerse de pie por tanto tiempo debido a los bailes, donde no podías sentarte a comer, por lo que probablemente estábamos a salvo de accidentes como el de mi vida anterior en el que una chica se durmió durante la ceremonia de entrada de la escuela porque el discurso del director fue demasiado largo.

Aun así… agradecería un discurso breve. El de la ceremonia de la Academia había sido realmente breve, así que tal vez este también lo sería.

Realmente no me gusta escuchar a la gente de pie… Ojalá al menos nos dejaran sentarnos en el suelo. Eso probablemente también sería difícil, en este atuendo… Si tan sólo tuviera mi uniforme de educación física. O al menos mi ropa agrícola…

Me mantuve ocupada pensando cosas como esas mientras un discurso sucedía al otro, hasta que, por fin, la persona más importante del país subió al podio.

“De ahora en adelante, todos ustedes se convertirán en parte del Ministerio Mágico, una de, si no la organización más importante en todo el reino.” Dijo el Rey de Sorcié.

Como hija de un duque, me lo había encontrado un par de veces, pero el rey todavía se sentía como alguien con quien tenía poco que ver. En la Academia fueron sus asesores los que dieron los discursos, pero él mismo había acudido al Ministerio Mágico, la entidad que tenía más poder después de él.

Parecía muy joven a pesar de tener hijos de más de 20 años, pero también tenía la presencia real que uno esperaría de un rey. Su cabello plateado y sus ojos azules eran los mismos que los de Alan, pero su rostro se parecía más al de Jeord. Una cosa era segura: era tan guapo como sus hijos.

Pensando que tal oportunidad no era frecuente, lo estaba mirando fijamente… cuando nuestros ojos se encontraron y él me lanzó una mirada reveladora.

Uh, uh, d-disculpe, ¿qué? ¿Qué significa esto?

Estaba un poco asustada, pero luego escuché a otro recién llegado, parado a mi lado, diciendo: “¡Mis ojos se encontraron con los del rey!” a un amigo.

Oh, entonces, es como los conciertos de idols en mi vida anterior. Miran alrededor de la multitud y todos piensan que los están mirando. Vaya, me asusté por un segundo.

Después de que el rey habló, la ceremonia terminó y los jefes se fueron, aliviando la mayor parte de la tensión en la sala.

“Bueno, ya se acabó. Ahora, creo que nuestros colegas con experiencia nos mostrarán los alrededores.” Dijo María, que ahora parecía mucho más relajada.

“¿Vendrán a recibirnos aquí?”

“Sí, algunos de ellos vendrán de cada departamento para presentarse.” Dijo Sora, quien había estado trabajando en el Ministerio por un tiempo.

Colegas con experiencia presentándose… Ninguno de los recién llegados se parecía a los nuevos personajes que vi en mi sueño, pero aun así no había conocido a las personas que ya trabajaban aquí. Esperé a que vinieran, secretamente ansiosa.

Alrededor de una docena de ellos entraron en la habitación… pero ninguno de sus rostros parecía familiar. Me sentí extremadamente aliviada al descubrir que mi sueño de la otra noche, después de todo, no era más que un sueño.

Los recién llegados se dividieron en grupos de siete u ocho y se mostraron alrededor de los distintos departamentos. Estar en el mismo grupo que María y Sora, que estaban parados a mi lado, me dio coraje. Sora ya conocía bastante bien el Ministerio, pero de todos modos había decidido unirse al tour para reavivar su entusiasmo como recién llegado.

“Bienvenidos a todos. Soy Nix Cornish, y les mostraré los alrededores.” Dijo el empleado del Ministerio que lideraría nuestro grupo.

Sus palabras no eran particularmente raras, pero las había dicho sin mirarnos y mientras acariciaba su cabello, que tenía un estilo realmente extraño, con el flequillo más largo a un lado. Su ropa también era diferente a la de los demás. Era brillante y elegante, y la abertura en el pecho era bastante profunda… ¿Lo preparó él mismo?

Mientras lo miraba, una empleada que estaba cerca dijo: “No te preocupes demasiado por él. Es solo un narcisista y un poco raro.”

Ahora, para ser exactos, no fue la empleada quien dijo eso. Era la marioneta con forma de mapache en su mano.

“Por cierto, mi nombre es Lisa Norman.” Continuó la marioneta, mientras que los verdaderos labios de Lisa Norman apenas se movieron. Ella era una gran ventrílocua. Su expresión no había cambiado ni un poco durante todo el asunto, acaso… ¿Está tratando de romper el hielo con nosotros?

“¿A quién llamas un bicho raro, Lisa? Gente, esta es Lisa Norman, mi colega rara que sólo habla a través de títeres.” Nos dijo Cornish al ver nuestra confusión.

¿Qué quieres decir con que ella sólo habla a través de títeres? Estaba desconcertada.

Parecía que no estaba tratando de romper el hielo con su ventriloquismo, pero que, para ella, era algo cotidiano. Esto ya hace dos bichos raros… ¿Permiten que personas normales entren al Ministerio Mágico?

Traté de mirar a los empleados que mostraban a los otros grupos, pero no había uniformes o títeres personalizados, y el hablar de todos sonaba normal. Probablemente sólo nos tocaron los dos más extraños, pero eso era un alivio. No creo que me mantendría cuerda si todos fueran tan raros.

Pero, como los recién llegados obviamente no estábamos en posición de quejarnos de que los empleados con más experiencia eran raros, acabamos de pasar por el tour del Ministerio guiados por este extraño par.

“Se dice que esta biblioteca, el orgullo de nuestro Ministerio, es la más completa de todo el reino.” Dijo Cornish, nuestro guía narcisista. No decía nada fuera de lo común, pero el hecho de que se pasara la mano por el cabello cada vez que hablaba era realmente molesto.

Todos los grupos que fueron guiados por el Ministerio comenzaron desde diferentes habitaciones, por lo que no estaríamos apiñados en el mismo lugar al mismo tiempo, y el nuestro comenzó en la biblioteca. Aparentemente, generalmente estaba restringida a los empleados del Ministerio. Cuando entramos, lo único en lo que podía pensar era en cuán grande era. No sólo era grande, sino también muy alta. Filas de estanterías corrían hasta el imponente techo, lleno de una cantidad impresionante de libros.

“Aquí encontrarán todos los libros escritos sobre magia.” Dijo el títere mapache… es decir, la Sra. Norman. Realmente nunca hablaba sin su títere, y también era extraordinariamente buena en eso; su boca nunca parecía moverse en absoluto.

“Básicamente, todos los libros son gratuitos para que los lean. Si quieren pedir uno prestado, sólo deben conseguir el permiso del bibliotecario.” Dijo Cornish, señalando a una chica sentada detrás de un mostrador y enviándole un guiño, haciéndola hacer una mueca visible en respuesta.

“También pueden preguntarle si quieren saber acerca de la ubicación de un libro en particular.” Dijo el mapach… dijo la Sra. Norman, ignorando los extravagantes gestos de Cornish.

Al mirar los enormes estantes que cubrían las paredes, pensé que encontrar un libro específico sería realmente una hazaña. Había más libros de los que podía contar.

“Dime, María, ya que tienen todos estos libros…” Le dije en voz baja a María, que estaba parada a mi lado. Sin embargo, la respuesta vino de Sora, que estaba de pie al otro lado.

“No tienen ninguna de las novelas románticas que tanto amas.” Susurró para que sólo yo pudiera escuchar.

“¿Cómo sabías que quería preguntar eso? ¿Puedes leer mentes? “Eres demasiado predecible.” dijo con una sonrisa.

… ¿Lo soy? Bueno, si no tenían novelas románticas, esta montaña de libros realmente no me interesaba. ¡Ojalá hubiera una biblioteca tan grande, pero sólo para novelas románticas!

Nuestros dos guías continuaron explicando qué tipo de libro estaba en qué sección, pero era demasiado complejo para mí tener la oportunidad de recordarlo. ¡Ok! ¡Sólo le preguntaré a la bibliotecaria si alguna vez necesito algo!

Después de eso, nos mostraron los diferentes departamentos, comenzando del más cercano a la biblioteca: el Departamento de Investigación Biomágica.

“Aquí, realizamos investigaciones sobre animales y plantas mágicos.” Explicó Cornish. Luego toco la puerta y llamó en voz alta a los que estaban dentro. “Oigan, estoy guiando a los recién llegados… ¿Puedo entrar ahora mismo?”

Una serie de ruidos extraños vinieron del interior, seguidos por la voz de una mujer.

“N-No en este momento, espera… espera un segundo, ¿quieres?”

Escuchamos otra ronda de ruidos indescifrables, y la mujer abrió la puerta desde adentro.

“¡D-Disculpen por hacerlos esperar! Aquí… por favor… entren.” Dijo, con la cara cubierta de sudor y el cabello revuelto.

¿Qué había sucedido y cuáles eran esos ruidos? Una vez dentro de la habitación, vimos papeles esparcidos por todo el lugar, vajillas rotas y caos general. Un grupo de personas, probablemente los empleados que pertenecían a este departamento, estaban ocupados recogiendo las cosas que estaban en el suelo y barriendo todas las cosas rotas.

¿Hubo una tormenta o algo aquí? Si bien los recién llegados estábamos asombrados por el estado de las cosas, Cornish no parecía en absoluto sorprendido.

“Nunca tienen un descanso, ¿eh?” Dijo él.

“… Realmente no. Ojalá pudiera hacer algo al respecto.” Dijo la mujer de antes, suspirando.

Así que este caos no era nada peculiar… Pero, ¿qué se supone lo causó? La miré con curiosidad a ella y a los otros empleados.

“Realmente lo siento, gente. Estábamos tratando de llevar a cabo un experimento y lo sacamos de su jaula, pero se nos salió de las manos…” Dijo la mujer, y luego un hombre entró por una puerta al otro lado de la habitación.

Al ver al hombre, con el cabello largo recogido en una cola de caballo y grandes gafas redondas, los rostros de todos los demás empleados cambiaron a expresiones amargas.

“Jefe, ¿cuántas veces ha sido sólo este mes? ¿No tienes sentido de la responsabilidad?” La mujer le dijo al hombre, quien aparentemente era el jefe del departamento. Su voz sonaba mucho más aguda que cuando nos había hablado. Obviamente estaba enojada.

Por otra parte, el objetivo de su enojo no estaba preocupado en absoluto.

“Oh, lo siento, lo siento. Me distraje por un segundo y todo salió mal.” Dijo con indiferencia.

Woah. ¿Cómo puede mantenerse tan tranquilo mientras lo regañan así?