86 [Eighty Six]

Volumen 3

Capítulo 7: Si Vas a Morir, Haz que lo Valga

Parte 1

“──Activando los volantes 1 y 2, no se detectan anomalías en la subestación temporal imaginaria”

“Comenzando el enfriamiento de la unidad refrigerante de transferencia en la Catapulta de rieles, 23% y aumentando.“

”Liberando la cubierta. Comenzando el lanzamiento de la Catapulta de rieles.”

Vroooom, un fuerte y claro ruido hizo eco sobre Shinn, quien dormitaba dentro de la cabina de Undertaker, haciendo que levantara la cabeza.

Las pantallas ópticas de tres lados se sincronizaron con la cámara externa de la unidad madre, y la escotilla de la catapulta oculta bajo tierra fue lentamente expuesta.

El cielo rectangular visto debajo de la pista tenía el azul oscuro único del amanecer. El sol apenas presente brillaba desde el otro extremo del horizonte, desvaneciendo lo que quedaba de noche y formando un cielo de color azul claro único. Las estrellas del otoño con nombres desconocidos emitían un débil resplandor, mientras se desaparecían.

La catapulta se extendió hasta el amanecer de los cielos, como si los desafiara, y con el metal retumbando a través del aire de la noche, se plegó por completo.

“Las esclusas conjuntas han sido cerradas. Los preparativos de lanzamiento del Nachzehrer están listos.”

***

Hace un mes se había decidido la operación de invadir el área de la Legión, y fue una semana después cuando se reveló eso.

“──La gente lo ha llama el portón imposible de abrir”

Estaban tras el portón en lo más profundo del Hangar Experimental 1028° del Cuartel General, y como Grethe había dicho, nunca antes alguien lo había visto abrirse.

Más allá del grueso portón, había una pendiente de más de 100 metros de ancho, y Grethe estaba de pie ante el panel del ascensor, observándolo descender en la oscuridad. El ascensor anormalmente grande seguía siendo enorme incluso con los 15 procesadores, el equipo de mantenimiento, el equipo de control y los miembros de la investigación dentro de él.

“Este hangar se usaba para almacenar aviones experimentales para el Imperio. Después de que comenzó la guerra, los militares se vieron obligados a abandonar toda la base. Se realizaban vuelos de prueba con estos aviones experimentales, y todo lo que se esperaba era su producción en masa”

“Supongo que estas cosas se encuentran en esta instalación subterránea porque están clasificadas, pero ¿por qué los experimentos para naves de prueba están tan cerca de la frontera?”

“A diferencia de las especificaciones de los aviones de combate o de los bombarderos que debían ser clasificados, las demandas militares de ese nene exigían que fuera ‘invisible’. El área de vuelo de prueba debe ser amplia y despejada, y no hay otro lugar que satisfaga esos requerimientos que no fuese aquí en Wolfsland. El hangar se encuentra bajo tierra para prevenir ataques aéreos, y lo hace más propicio para el mantenimiento de las instalaciones relacionadas a la construcción. Gracias a eso, los Tausendfüssler nunca pudieron dar con este lugar.”

Aparte del Ameise, los sensores de la Legión eran extremadamente débiles. Una cosa era que lograran detectar un Reginleif u otra unidad de combate, pero probablemente nunca descubrieron los prototipos ocultos en las profundidades de las particiones.

“¿Instalaciones relacionadas?”

“Básicamente pistas de aterrizaje o catapultas asociadas a ellas… se harán tantas como los militares exijan. Y si un prototipo tendría demasiado peso, se necesitaría una catapulta electromagnética para hacerlo volar.”

El ascensor se detuvo con un ruido sordo.

En el espacio oscuro, Grethe los condujo escaleras abajo de una manera familiar, sus botas hacían mucho eco. Era un espacio enorme en términos de longitud, anchura y altura. Todas las luces se encendieron al unísono, y las luces LED blancas iluminaron de inmediato sus ojos.

Con su espalda frente a esa cosa, Grethe dio la vuelta.

Los procesadores y el equipo de mantenimiento de verlo por primera vez, se quedaron sin aliento al unísono.

Por un momento, nadie podía comprender toda la apariencia de esa cosa. Era gigantesca.

En verdad tenía casi cien metros de ancho, siendo más grande que el C-5 “Fraserburgh”.  (NT: Uno de los aviones militares logísticos más grandes del mundo).  El marco gris oscuro tenía la figura plana de un avión furtivo, que se asemejaba a un gran avión en forma de bumerán el cual recordaba a un dragón volador con sus alas extendidas.

“Este es el prototipo de vehículo aeroterrestre con efecto suelo, el XC-1 Nachzehrer”

El nombre desconocido de la máquina podría haber sido derivado de una antigua leyenda originada en la región sureste de la Federación.

Era el nombre de un vampiro que había resucitado de su tumba, arrastraba su sombra a través del cementerio y golpeaba la campana de la Iglesia.

Para una nave militar que se suponía que debía navegar por los cielos, realmente era un nombre inapropiado.

Grethe continuó explicando los dos puntos de dudas.

“Es un objeto volador de forma extraña que se desplaza al pilotar cerca del suelo. La velocidad de navegación y la capacidad de carga son las mismas que las de un avión, y vuela más bajo que cualquier misil de crucero, por lo cual es indetectable ante los radares y los misiles antiaéreos no son capaces de golpearlo fácilmente… originalmente, fue construido para proporcionar el transporte de grandes cargas por las rutas de vuelo designadas en Wolfsland. Su capacidad es de 250 toneladas, pero si se agotara todo el espacio, de 300 toneladas probablemente. Puede cargar cuatro escuadrones de Vanargands a la vez”

Diciendo eso, Grethe mostró una sonrisa salvaje.

“Es posible cargar todos los 15 Reginleifs… es mejor que un transporte por helicóptero. Es la opción más segura para enviarlos a ustedes a donde está el Morpho.”

Tenía una velocidad de crucero rápida, podía volar a baja altitud por debajo del alcance del radar y era silencioso en comparación con el ruido de un helicóptero. En verdad, el riesgo era extremadamente bajo.

Pero aun así…

Al oír eso, Seo levantó una ceja

“Entonces, ¿dices que esta cosa es buena para volar por encima del suelo? Unos pocos metros por encima del suelo significaría que es lo suficientemente bajo como para impactar con un edificio o una casa, ¿no?”

Había otros riesgos.

“Es el área controlada de Legión, pero esta vez, estamos luchando en el territorio del antiguo Imperio a diferencia del territorio humano, la Legión no construye casas o calles, por lo cual el paisaje probablemente no cambiará mucho a pesar de ser su área ahora.”

Como armas terrestres, no había guerra que pudiera luchar si se inmovilizaban solo por una llovizna.

“Las líneas de frente no tendrán demasiados Weisels o Atomarias cerca de las líneas de frente, y además, el Teniente Nouzen puede localizar sus ubicaciones. Solo necesitamos evadirlos mientras volamos.”

“… Puedo identificarlos, pero no puedo saber qué tipo de unidad es”

“Eso es más que suficiente. En otras palabras, solo necesitamos volar a través de áreas sin unidades de la Legión.”

Volarían a baja altitud y no serían interceptados fácilmente, pero si hubiera alguna unidad de “Legión” en el camino, serían derribados. A varios metros sobre el suelo, incluso un cañón de tanque incapaz de apuntar hacia arriba podría derribarlos fácilmente.

“Sí, y necesitamos una catapulta de regreso. Entonces, ¿qué hay con el viaje de regreso? No puede regresar, ¿verdad?”

“La operación inicial para el Escuadrón Nordlicht fue hacer que las fuerzas principales lo recuperen. En ese caso, tendremos que hacer que esta cosa retroceda luego usando los Reginleifs de respaldo. Es mejor que esperar a los helicópteros.”

Al escuchar eso, el viejo jefe mecánico frunció el ceño.

“Señorita, espero que no sea lo que estoy pensando, pero ¿quién será el piloto?”

Grethe extendió los brazos de forma caprichosa

“Yo”

***

“No creo que usted tenga que venir, Coronel”

Al escuchar el tono plano de Shinn, Grethe a su vez sonaba exaltada cuando se sentó en el asiento del piloto del Nachzehrer.

“¿Quién más que yo lo puede hacer volar? La mayoría de los otros pilotos de la antigua fuerza aérea están muertos, y soy la única con experiencia en la prueba de pilotaje de este Nachzehrer… bueno, mi compañía tenía un simulador de vuelo en algún lugar.”

El siniestro murmullo dejó escapar algunos quejidos, pero Grethe siguió indiferente, y a Shinn no le importó.

“Hablando de eso, ¿solía ser piloto de la fuerza aérea, Teniente Coronel?”

“… Ciertamente suenas como si acabaras de recordarlo, Teniente”

De hecho, Shinn se olvidó de eso porque no estaba interesado en saberlo.

“En ese caso, supongo que te has olvidado de lo que dije. Aún me opongo a enviar a jóvenes como ustedes al campo de batalla… tal vez luchar hasta el final sea una forma de orgullo para ustedes, los 86, una especie de identidad propia, pero no pienso desistir. Si vamos a pelear, pelearé con ustedes, y me aseguraré de que puedan pelear hasta el final. Esa es mi responsabilidad.”

“…”

“Llegaste a este país, y aunque está a cierta distancia de tu tierra ideal, hay una cosa que queremos que recuerdes. En este país, nadie quiere que mueras en la batalla; no queremos que eso pase. Así pienso yo, la jefe de división, y todos en el equipo… incluso este caballero.”

“Ha pasado un tiempo, ¿no es así? ¿Cómo están todos?”

Una voz tranquila y sorprendente dejó a Shinn parpadeando. No era una voz a través del Para-RAID, sino el comunicador fuera del “Nachzehrer.”

“¿Qué estás haciendo aquí, Ernst?”

“Bueno, como saben, soy el Comandante en Jefe de la Federación. Debido a que esta es una crisis que involucra la supervivencia de sus habitantes y sus fronteras, junto con los países vecinos, estoy aquí para supervisar. Además, todos ustedes son el punto crucial de esta operación.”

Ernst suspiró y habló en el tono de un hombre que había liderado el país durante 10 años.

“El futuro de la Federación, los países vecinos y la humanidad en sí dependerán de su desempeño como el Escuadrón Nordlicht. Destruirán al Morpho… Espero ver los resultados.”

“Entendido”

“Y también… una cosa más. Esta misión es de máxima prioridad”

Shinn miró hacia adelante, y Ernst parecía estar asintiendo con la cabeza

“Regresen con vida todos ustedes”

Sonaba extraño

Era una voz que sonaba pretenciosa.

Parecía que lo estaba diciendo de corazón y no por el resto

“… Haremos nuestro mejor esfuerzo”

“No, eso no es suficiente. Asegúrense de que todos ustedes vuelvan con vida”

La incomodidad persistió.

Pero el presidente temporal y padrastro registrado de ellos habló con un tono diferente, extremadamente sincero:

“¿No vas a seguir peleando? En esta Federación, pelear no significa morir en la batalla, sino vivir hasta que la batalla termine. Así que asegúrense de que cada uno de ustedes vuelvan con vida…”

“Sí, asegúrense de que todos vuelvan con vida.”

Ernst colgó el Intercomunicador, y murmuró para sí mismo. Estaba en el cuartel general de la división del ejército occidental, sentado en el asiento del comandante.

En este punto, se había quitado el traje producido en masa que se había convertido en su marca registrada como Presidente temporal, y llevaba el uniforme de color acero perteneciente al del ejército de la Federación.

Fueron en estas líneas del frente occidental donde los encontró por primera vez, aunque un lugar diferente.

Había venido a la primera línea para supervisar los informes, y supo que algunos jóvenes de una tierra extranjera se salvaron de un cazacabezas, el Dinosauria.

Sentía lástima por ellos.

Esperaba poder darles felicidad en lugar del hijo que no podría tener.

Pero lo más importante aún…

De repente, una sonrisa fría y vacía apareció en los ojos de color carbón del presidente de la Federación.

Este era un país incapaz de salvar a los niños destrozados. Este era un país con el que los niños no podían ser felices.

Un mundo que envía a los niños a la muerte por sus propios beneficios no es algo en lo que ella creía. La Humanidad debería tener sus propios ideales.

Ernst dejó escapar un largo suspiro.

Dejó escapar un largo y ardiente suspiro, como un dragón de fuego cansado de todo en este mundo.

Era como si quisiera quemar todo en este mundo

“Si no, destruiré este mundo”

La cuenta regresiva en la pantalla principal de la sala de mando estaba en los últimos cinco minutos antes de que la operación se iniciara.

Ernst miró a un lado hacia el jefe de estado mayor, el cual estaba sentado más abajo que él, y asintió levemente.