Mushoku Tensei: Isekai Ittara Honki Dasu (NW)

Volumen 13

Capítulo 143.1: Nacimiento De Una Nueva Reina Del Filo

Mientras tanto en la Tierra Sagrada de la Espada…

Tres jóvenes arrodillados, tres Santos del Filo.

Nina Farion.

Jino Britts.

Eris Greyrat.

Frente a ellos se encontraba el Dios del Filo, Gull Farion. Este movió tranquilo la mano a su cinto mientras miraba a cada uno de ellos. De pronto abrió la boca lentamente.

“Vuestra técnica ya ha superado los límites de un Santo del Filo.”

Al escuchar estas palabras, los hombros de Jino empezaron a temblar.

“Creo que ha llegado el momento; elegiré quien compartirá el título de Rey del Filo junto a Ghyslaine.”

Los Ojos de Jino se iluminaron, apretó los puños y todo su cuerpo empezó a temblar. Un sentimiento de alegría empezó a recorrer su cuerpo. Deseaba saltar de alegría, pero se contuvo.

Sin embargo, el Dios del Filo siguió hablando.

“Pero antes de esto, os preguntaré algo.”

“…”

“¿Qué pensáis que diferencia a un Santo del Filo de un Rey o un Emperador del Filo?”

“… ¿Su fuerza?”

Quien murmuró esto fue Nina. Se podía ver en todos sus ojos como se preguntaban si no solo la fuerza era lo que los diferenciaba. Momentos después todos llegaron a la misma conclusión. Sabían que lo que el Dios del Filo quería escuchar iba más allá. Él quería escuchar que hubo antes de esa fuerza y el origen de esta.

Nina no contestó. Fue el Dios del Filo quien contestó con otra pregunta.

“Nina. ¿Qué te dijo tu Shishou antes de enseñarte a usar 『Hoja de Luz』?”

El Shishou de Nina no fue Gull Farion. Ella fue discípula directa del padre de Jino, el Emperador del Filo Timothy Britts. De pronto las palabras de su Shishou resonaron en su cabeza y las pronunció.

“Dijo… Al ser diestra, deberás entrenar con la izquierda . Dijo que hasta que no pudiera utilizar la espada con la mano izquierda no podría usar 『Hoja de Luz』.”

“Exacto. La mano no dominante es necesaria para utilizar 『Hoja de Luz』. ¿Sabes el por qué?”

“Si tu mano dominante está rebosante de energía, hará temblar la punta de la espada de lado a lado.”

“Exacto. De una estocada, acumulando todo tu touki, podrías atravesar al objetivo. Por muy simple que parezca este es el fundamento de la 『Hoja de luz』.”

La disciplina del filo celestial está enfocada en hacer cortes perpendiculares a oponentes en movimiento. Atacando de frente tontamente, este sería simplemente evadido. Atacar inclinado, desde abajo, desde los lados; varias técnicas de ataque fueron creadas para que un espadachín pudiera alcanzar a su oponente.

Sin embargo, la primera generación del Estilo Filo Celestial era diferente. No hacía uso de tales cosas. Bastaba con que tu espada fuera más rápida que la de cualquiera, y cortarlo en dos.

“Este fundamento es el mismo reflejo de la historia del Estilo Filo celestial.”

El Dios del Filo golpeó el pomo de su espada dejando escuchar un sonido.

“La cuestión es que de algún modo Shodai-sama consiguió controlarlo para hacerlo, además cada generación de Dioses del Filo después de este lo pulieron poco a poco, hasta finalmente llegar al Estilo Filo Celestial actual. La Hoja de luz… La mejora de sus puntos clave, el principio tras ello, y la forma de entrenarlo; cuando esto fue seguido hasta el final, que nosotros lo termináramos era algo simple. Se llegó a hacer algo que cualquiera con un poco de talento fuera capaz de usarlo. Este cambio manchó el origen del reconocimiento que tenía el Estilo Filo Celestial como el más fuerte. Nosotros los Dioses del Filo hemos ido puliendo las técnicas de Shodai-sama, y junto a el conseguimos difundir el nombre del Estilo Filo Celestial a lo largo y ancho del mundo.” (NT: SHODAI, literalmente significa primero o fundador. Referencia de Naruto).

De nuevo se escuchó ese sonido, el Dios del Filo volvió a golpear el pomo de su espada.

“La 『Hoja de luz』 es la técnica suprema del Estilo Filo Celestial. Lo que otros estilos llaman 『técnica secreta』.A pesar de que hayáis aprendidos los mismos principios, apareció algo así como las diferencias en la fuerza. Santos del Filo, Reyes del Filo, Emperadores del Filo… ¿Es ridículo, huh? ¿A pesar de que todos vosotros hacéis las mismas cosas sangrientas, los chicos fuertes y los débiles, sabéis…?”

Dicho esto, el Dios del Filo miró a Jino.

“¿Qué piensas que lo diferencian, Jino?, prueba a responder.”

Al preguntarle, Jino bajó la cabeza. De la misma ansiedad su rostro se quedó plastificado. Él no sabía la respuesta a esa pregunta. Sin embargo, la impaciencia al no poder contestar en el momento le hizo abrir la boca.

“P-, pensándolo de forma lógica, dejando de lado las técnicas, podría tratarse de la destreza y fuerza de sus movimientos, o podría ser… q-, ¿la capacidad de sus armas?”

“¿¡LAS ARMAS!? ¿¡Cuántos años se supone que llevas entrenando!? ¿¡No sería mejor que empezaras de cero otra vez, huuuh!?”

“¡L-, lo siento sinceramente!”

Al gritarle el Dios del Filo enojado, Jino agachó la cabeza y un tono blancuzco recorrió su cara.

Jino quiso decir 『habilidad』. Sin embargo, él sabía que no era la respuesta que el Dios del Filo quería escuchar. No habría sido una respuesta con la que podrías resolver fácilmente el problema. De todos modos, era una discusión sobre qué era el fundamento y origen de la técnica. Sinceramente si su respuesta hubiera sido ‘habilidad’, lo habría echado de allí.

“Sigues siendo un malcriado, de este modo no lo conseguirás, ¿huh? Bien, como sea. Incluso si no lo consiguen, las personas fuertes siguen siendo fuertes. Está bien, Nina, intenta responder tú.”

“…”

Para responder a esto, Nina pensó cuidadosamente. Lo que preguntaba probablemente sería sobre Dioses del Filo, Emperadores del Filo y Reyes del Filo; la diferencia entre ella y los que están por encima. Algo que tenía Nina y de lo que carecían los demás. Llegado a pensar en él, el Dios del Filo y Emperadores del Filo ya tenían pareja. Algo que ella quería. ¿Un novio? ¿Un marido? Miró a Jino. Él estaba con la cabeza caída. Su expresión realmente mortificante. No ayudó que él, que era más joven, estaba en la mente de Nina. Y en ese momento recordó la palabra que el Dios del Filo usaba frecuente.

“… ¿Es el 『Deseo』?”

“Jah, como esperaba de mi hija, has acabado dándote cuenta de ello, ¿huh?”

El Dios del Filo sonreía como si mirara en las profundidades del corazón de Nina. Nina se sentía perturbada. Este tipo de entrenamiento continúo.

“El 『Deseo』 no es erróneo. Pero sabes…, ¿Cuán lejos pueden perdurar tus deseos?”

“¿Qué perduren…?”

“Por ejemplo, entre casarte con Jino o ser Rey del Filo, si tuvieras que elegir uno, ¿Cual sería tu elección?”

Al escuchar ‘casarte’, las miradas de Nina y Jino se cruzaron. Las mejillas de Nina empezaron a enrojecerse.

“…Escogería ser Rey del Filo.”

Entre casarse con Jino o ser Rey del Filo, ella probablemente escogería la última. En otras palabras, su deseo estaba en ese nivel. Nina se dió cuenta del error de sus palabras.

“Siempre serás una ingenua, huh. Entonces Eris, ¿qué piensas?”

“Es la solución.”

Inmediatamente sin pensar en nada, Eris respondió.

“『Solución』. Es erróneo, huh.”

El Dios del Filo sonrió y lo rechazó. Sin embargo, llamando la atención del Dios del Filo, Eris respondió una vez más.

“No es erróneo. Es la 『solución』.”

En ese momento unas imágenes de hace tiempo vinieron a la mente de Eris. La figura de Ludeus al ser atravesado por el pecho a las manos de Orsted. Ella lamentando su impotencia y el habiendo caído.

Ella se había vuelto más fuerte desde entonces. Tratándose de su fuerza y velocidad, en comparación había una gran diferencia con hace unos años. Sin embargo, ella no podía ganar contra Orsted. Estos últimos años de formación habían permitido a Eris ver sus límites. Probablemente el caso fuera que no importaría cuanto entrenara a partir de ahora, Eris nunca alcanzaría a Orsted.

Sin embargo, mientras estuviera junto a Ludeus… Mientras estuviera junto a Ludeus, estaría en su mano alcanzar a Orsted. Él, como mago, y ella, como guerrero, lo harían juntos.

Aunque le apuñalaran a la vez, mientras ella pudiera parar los movimientos de Orsted, Ludeus terminaría el resto. Si Ludeus consiguiera derrotarlo, habrían vencido. Claramente, esto significaría la muerte de Eris, mientras que Ludeus viviera. Si esto pasara, ella nunca tendría un futuro junto a Ludeus. Sin embargo, incluso de este modo habría merecido la pena. Ella se sentía aterrada al pensar en su futuro. Mientras se sintiera aterrada, su espada estaría embotada. Y si su espada estaba embotada, podría significar la muerte de Ludeus. En ese caso, sería mejor acabar muerta.

La decisión de Eris estaba tomada, había dado con la solución.

“En tal caso, ¿Estarías bien si no llegaras a ser una Reina del Filo?”

“Realmente no me importa.”

“¿No te gustaría llegar a ser más fuerte?”

“Si. Pero tener un título realmente no importa, ¿verdad?”

Entonces el Dios del Filo murmuro felizmente,

“De acuerdo, Eris y Nina. Vosotras dos luchareis, ¡el ganador será proclamado como Rey del Filo!”

***

Eris y Nina. Cara a cara, una frente a la otra.

“…”

Ambas empuñaban espadas de madera. Sin embargo, utilizando técnicas de nivel Santo, fácilmente podrían perder la vida.

“No te recuerda esto a cuando llegue aquí, ¿huh?”

“Sí, huh.”

Lo que se le vino a la mente fue algo que ocurrió años atrás; cuando Ghyslane la trajo. Cuando Nina fue humillada por la niña bestia. Frente a los otros Santos del Filo, así como Jino, avergonzada y mojada. Cuando recordó esto, le entraban ganas de cubrirse la cara y ponerse a rodar por el suelo de vergüenza.

Sin embargo, ella no siente odio hacia Eris. Ya que gracias a Eris, se ha hecho más fuerte. Dejó atrás su vanidad, y puso todo su esfuerzo y dedicación en su entrenamiento. Pensando de este modo, podría decir con confianza que la humillación ha sido su combustible para seguir creciendo.

“Hoy ganaré seguro.”

En el momento en el que Nina dijo esto, la sed de sangre emanó de Eris. Sin embargo, Nina no titubeó. Con una expresión clara como la de un monje que había alcanzado la iluminación, contemplaba a Eris.

“…Mph.”

Al momento siguiente, la sed de sangre desapareció rápidamente de la chica pelirroja. Entonces, una expresión en contraste con la de Nina, apareció en la cara de Eris. Estaba sonriendo. Era una sonrisa desagradable, pero estaba sonriendo. Era la sonrisa de una bestia salvaje.

Nina instintivamente habìa sentido miedo con esa sonrisa. Durante su entrenamiento con la Reina del Cauce Celestial Isolte, había luchado con Eris infinidad de veces. Y ella había perdido. Por supuesto, también hubo veces en las que ganó. Sin embargo, los recuerdos de sus fracasos eran los únicos que tenían grabados a fuego en su mente.

“…”

Eris no se movió. Con esa sonrisa de bestia todavía plasmada en su cara, se detuvo. Era algo raro en Eris, que siempre tomaba la iniciativa.

De repente la palabra ‘contraataque’ apareció por la cabeza de Nina. El contraataque que tuvo que enfrentar incontables veces en batalla con Isolte. Eris no podía usar las técnicas del estilo Cauce Celestial. Sin embargo, también se contraatacaba en el estilo del Dios del norte. Probablemente fue el objetivo de Eris.

El silencio invadió el lugar.

Allí estaba Eris en una media guardia, y Nina en una guardia alta

Las dos estaban quietas una frente a la otra a la distancia de un solo golpe de sus espadas.

La cara de Nina era inexpresiva, mientras que la de Eris mantenía aquella sonrisa.

Como una extraña obra de arte, ellas dos simplemente estaban allí, mirándose la una a la otra.

Para los del estilo Filo Celestial cuyo lema era La victoria es de quien realiza el primer movimiento , fue una rara quietud.

Las dos permanecían inmóviles, parecían estatuas.

Francamente, el Dios de Filo estaba desesperado.

“¿Cuánto tiempo va a durar vuestra entrevista de matrimonio?”

Esas palabras se transformaron en un detonante.

La primera en ponerse en acción fue Nina.

Ella dio un fuerte paso adelante.

Fue un movimiento del estilo Filo Celestial que ella había practicado decenas de miles de veces.

Dando un paso al lugar absolutamente más óptimo y lógico, envió una energía explosiva hacia su torso.

Esa energía combinada con el touki que emanaba del cuerpo de Nina, fue transmitida por sus brazos hasta llegar a la hoja de su espada.

『Hoja de Luz』.

La espada hizo un movimiento hacia abajo con una velocidad abrumadora desde su guardia alta.

Su ejecución fue perfecta.

Era una 『Hoja de Luz』 tan perfecta que cualquiera podría quedar hipnotizado al verla.

Sin embargo.

“¡GAAH-!”

Nina sufrió un terrible golpe en el abdomen, que la mandó despedida hacia atrás.

Ella chocó con la pared del dojo y se desplomó en el suelo.

Su dougi fue rasgado, y su bien formado abdomen quedo visible.

En su abdomen, una inflamación como una gran lombriz roja comenzó a formarse.

Mientras ella sentía un dolor ardiente, el Dios del Filo hizo una declaración.

“¡Ya basta!”

Nina miraba a Eris con una expresión estupefacción. Eris cuya frente estaba chorreante de sudor. Aunque su dougi estaba un poco rasgada en el hombro, solo eso. Su rostro ya no estaba sonriente. Sin embargo, su figura era la de un vencedor.

“…Kuh.”

Nina comprendió lo que había sucedido.

Eris intervino casi al mismo tiempo que Nina. Entonces, estando frente a Nina que estaba usando su guardia alta, Eris se hizo al suelo y simultáneamente soltó un golpe horizontal de su propia 『Hoja de Luz』.

Sin embargo, ella no podía entenderlo. En ese caso, debería haber sido su ataque el que habría impactado primero. Nina fue quien se movió primero y el movimiento de su espada era justo un poco más rápido que el Eris. Además, un ataque de guardia alta debería haber sido aún más rápido. Ya que ese fue el caso, incluso si Eris hubiera bajado un poco su cabeza, no habría sido extraño que la espada de Nina fuera la primera en impactar. A pesar de ser este el caso, el resultado fue tal que ni siquiera fue un ataque simultáneo. Por alguna razón ella se derrumbó, mientras que Eris permanecía en pie.

“No necesitas más potencia de la necesaria para derribar a alguien.”

Eris hablaba tranquilamente. Mientras que Nina no entendía el significado de esas palabras.

Lo que Eris había utilizado se trataba de una técnica del Estilo Nórdico Celestial. Normalmente, la 『Hoja de Luz』 era algo cuyo poder era excesivo para su uso en cualquier oponente. Eris empleó ese poder para mejorar su velocidad. Limitó la cantidad de energía de su movimiento a lo necesario para derribar la Nina y la movió sin mucho esfuerzo. La habilidad de distribuir su touki era algo que había aprendido en su entrenamiento en el Estilo Nórdico Celestial.

Sin embargo, la velocidad que consiguió de tal cosa fue sólo una pequeña cantidad. En comparación con la cantidad de fuerza mortal que tenía ese movimiento, el aumento de la velocidad seria desproporcionado. Sin embargo, debido a ese leve aumento de velocidad, fue capaz de dar la vuelta a las tablas por apenas una pelo de amplitud, siendo suficiente para decidir la victoria o la derrota.

“Bien hecho, Eris. Te concedo el título de Reina del Filo.”

Nina se levantó lentamente. Ella sentía un dolor sordo en el abdomen, e hizo una mueca.

(Yo estaba completamente acabada.)

Siendo con una espada de madera, había terminado solo siendo golpeada y mandada lejos, pero si se hubiera tratado de una espada real, probablemente hubiera acabado con las entrañas desparramadas. Por supuesto no sería extraño que una Hoja de Luz hubiera acabado con una persona en dos, pero solo el tajo que Nina recibió habría sido necesario para matarla. Por otro lado, Eris había salido airosa con sólo un corte en el hombro. Nina había perdido completamente.

Nina dejó escapar un suspiro y se puso de pie derecha en el sitio. Ella había perdido en todos los sentidos. Había hecho el primer movimiento y luego perdido. Ella perdió.

Perdió.

Algo pesado y doloroso comenzó a surgir del pecho de Nina.

“¿Estas frustrada, Nina?”

“Si.”

Unas grandes de lágrimas empezaron a fluir de los ojos de Nina.

“Todavía tienes espacio para crecer. Concentrarte en tu entrenamiento.”

“Sí, Otou-san.”

Ese día, Nina se dirigió a él como su padre por primera vez en mucho tiempo.

“…”

El Dios del Filo esperó hasta que Nina dejó de llorar. Mientras Eris esperaba con la boca en forma de へ y los brazos cruzados.

***

Después de asegurarse de que Nina dejaba de llorar, el Dios del Filo habló con Eris.

“Eris. Has ganado el título de Reina del Filo, pero en estos momentos no tengo nada que enseñarte. Te daré la maestría.”

La maestría. Al oír estas palabras, Nina y Jino cruzaron miradas. Este era un título que ni los dos Emperadores Filo Celestial, ni a Ghyslaine les había sido dado. La maestría era un increíble título.

“Aunque también estaría bien saltar derecho a Emperatriz del Filo pero… tendrías que luchar contra Ghyslaine aquí mismo. Y si quieres saltar hasta Dios del Filo entonces vas a tener que matarme.”

¿Qué harás?

Como si pidiera esto, el Dios del Filo movió su mano a su espada. Eris sacudió la cabeza.

“No me preocupa ser el Dios del Filo o lo que sea.”

“¿Seguro?… Entonces bien, ¿Que tienes planeado hacer desde ahora?”

“Primero voy a ir a donde está mi familia.”

Mirando fijamente los ojos de Eris, el Dios del Filo sintió su resplandor.

Sentía que ella tenía algo que él había perdido en algún momento.

Porque tenía una actitud seria cada vez más fuerte sin perder de vista su meta…

O podría ser porque era Eris…

Pensó que quizás podría ser capaz de derrotar al imbatible de Orsted.

“Ven, Eris. Como prueba de tu ascenso a Reina del Filo, te doy una de mis siete espadas.”

“…Sí.”

Ese día, señaló el fin del largo entrenamiento de Eris Greyrat.

***

Eris salió con el Dios del Filo, y la ceremonia para otorgar el título de Rey del Filo Celestial acabó. Solo dos personas permanecieron allí.

“…”

“…”

Por un tiempo, los dos permanecieron sentados en silencio. Ambos con un sentimiento de envidia y frustración en sus pechos. Sin embargo, nunca hablaron de estos sentimientos, ni lo mostraron en sus caras.

“…”

Sin necesidad de hacerlo, los dos se pusieron en pie. Caminando de lado a lado, ellos se movieron a una esquina del lugar presente y recogieron las espadas de madera que quedaron allí.

Por un momento, el sonido de unas espadas de madera chocando se podía escuchar por el presente lugar. Esta era la tierra Santa de las Espadas, se trataba de un sonido que podía escucharse en cualquier lugar.

– FIN DEL VOLUMEN 13 –