Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 5: Explosión Kouma, LET’S GO!

Capítulo 5: ¡Lanzando una Explosión de Fuego con este Maldito Artefacto!

Parte 3

Todo el clan de la Magia Carmesí se dirigió a la colina del Dios Demonio, aquel lugar famoso entre las parejas de enamorados, para buscar refugio. Cuando llegaron allí vieron cómo el Hogar de la Magia Carmesí estaba siendo arrasado por el fuego.

—La aldea… está ardiendo…

Oí a alguien decir eso en voz baja. Me di la vuelta y me encontré a una chica que llevaba un parche en el ojo con el mismo diseño que el de Megumin, observando el pueblo en llamas y hablando con tristeza. Silvia había adquirido la forma de una lamia y comenzó a escupir fuego, inundando la aldea de la Magia Carmesí en un mar de llamas. La mayoría de los miembros del clan podían usar el conjuro de teletransporte, por lo que las bajas fueron prácticamente de cero a pesar de que todos los hogares se encontraban ardiendo. Noté un dolor en el pecho mientras presenciaba esta escena.

¿Esto, esto es porque abrí el cierre de la puerta? No, me vi obligado por las circunstancias. Además, solo abrí la puerta porque me habían contado que nadie sabía cómo activar y utilizar esa arma…

—Por cierto, ¿cómo rompió el sello Silvia?

Me puse a temblar en cuanto me hicieron esa pregunta.

—¿Utilizó un objeto mágico para atravesar la barrera? Aunque da igual qué clase de objeto de destrucción de barreras pudiera tener, en principio no debería haber funcionado con ese sello…

Al escuchar eso, mi corazón empezó a bombear sangre como loco y miré abajo, a la aldea siendo arrasada…

—Da igual cómo sea, lo único que podemos hacer es abandonar esta aldea. Es frustrante que el ejército del Rey Demonio se haya salido con la suya, pero siempre podremos regresar si conseguimos salvar nuestras vidas.

El jefe de la aldea habló con un tono serio.

…¿Qué debería hacer?

Este ambiente era demasiado opresivo para mí.

Oh no, ¿todo esto es culpa mía? ¿Me rendí demasiado rápido y deshice el sello?

—Escucha, Megumin, ¿de verdad no existe ningún modo de luchar contra ese asesino de magos?

Abrumado por el arrepentimiento pregunté a Megumin, que se encontraba a mi lado.

—Como ya te he explicado antes y como su nombre indica, el Asesino de Magos es un arma especializada en exterminar a los magos. Es inmune a cualquier clase de magia, e incluso escuché que cuando el asesino se activó hace ya mucho tiempo, nuestros ancestros utilizaron un arma distinta para destruirlo, la cual también fue sellada. Una vez superaron esa crisis, repararon el Asesino de Magos como recuerdo de lo que había sucedido y lo aseguraron de nuevo…

—¡¿Y por qué repararon algo tan peligroso por una razón tan absurda?! …No, espera, ¿has dicho que existe un arma que puede luchar contra el Asesino de Magos?

Si usas veneno, asegúrate de tener un antídoto. Para evitar que un arma pueda activarse, tiene que haber otra capaz de enfrentarse a la primera en el mismo lugar de almacenamiento. Esto es una precaución de sentido común. Ahora que lo pienso tiene sentido. A modo de salvavidas, los ancestros del clan de la Magia Carmesí debieron guardar el arma que podía derrotar al Asesino de Magos junto con ella en caso de que fuera necesaria. Entonces, con eso podría…

Megumin probablemente adivinó lo que estaba pensando.

—…Kazuma, por desgracia nadie sabe utilizar el arma que puede destruir al Asesino de Magos. También tenemos el manual de instrucciones, pero ni siquiera el jefe de la aldea puede leerlo…

Megumin dijo eso mientras observábamos la aldea ardiendo. El inteligente clan de la Magia Carmesí ya debía haber considerado este método, pero si la magia era inútil ellos no tenían nada que hacer.

Silvia, que ya de por sí era una mujer bastante alta, se veía pequeña en comparación con el cuerpo de serpiente gigante. A excepción de Darkness, cualquiera que recibiera un ataque de ese monstruo acabaría convertido en papilla.

…¿No hay otro modo?

En ese momento…

—Ummp… yo haré de señuelo y alejaré a Silvia de aquí. Si cuento con el apoyo de todo en clan de la Magia Carmesí creo que no moriré tan fácilmente.

La persona que dijo aquellas ingenuas palabras fue la caballero cabeza hueca de mi equipo.

—¿Pero qué estás diciendo? ¡¿Es que no ves que aquí no hay nada que podamos hacer?! ¿Eres estúpida? Incluso un duende sabe perfectamente que no debe meterse en un enfrentamiento imposible de ganar, ¿acaso eres más tonta que un duende?

—¡Qué, pero cómo…! ¡Vamos a zanjar este asunto antes de que regresemos a Axel! ¡Todavía recuerdo esas horribles palabras que me has dicho hace un rato! ¡Además, no voy a hacer esto sin ningún plan en mente!

…¿Plan?

—Mientras esté amenazando a Silvia, como Aqua y tú tienen visión nocturna pueden colarse sin ser descubiertos en ese almacén subterráneo destruido y recuperar esa arma como se llame.

—…¡Pero nadie sabe cómo utilizarla! ¡¿Es que no escuchas?!

No sabía qué más decirle, y Darkness continuó.

—Por supuesto que lo he oído, y también lo entiendo. Pero viéndolo desde otro ángulo, ¿no crees que el problema estaría resuelto si averiguamos cómo hacerlo funcionar? Tomar alguna acción siempre será mejor que quedarnos aquí mirando cómo destruye la aldea. No te preocupes, yo tampoco sé qué clase de arma puede ser, pero como noble tengo bastante experiencia con los objetos mágicos. Incluso fui capaz de arreglar la cámara mágica de mi padre a base de golpes.

Me sentí mareado después de escuchar lo que dijo la chica aristocrática que era más retrasada de lo que me había imaginado.

—…De acuerdo, vamos a intentarlo.

Pero la que más me sorprendió fue Megumin, ya que era la persona que más solía protestar por cualquier cosa y se puso de acuerdo.

—¡No me importa enfrentarme a las situaciones de vida o muerte que dependen de una única acción!

—¡De hecho a mí me encantan! ¡Ustedes son forasteros, pero lo que hacen es genial!

No solo ella, sino que los miembros del clan también se levantaron para ayudar.

Parece que ese discurso les ha conmovido.

Normalmente me habría negado a participar en una misión tan peligrosa, pero la imagen de la expresión desoladora que puso la chica con un parche en el ojo me dejó una fuerte impresión y no pude quitármela de la cabeza.

¡Maldita sea, creo que solo tengo que colarme en ese almacén para recuperar un arma! ¡Si pudiera redimir mi error haciendo eso…!

—¡Hey! ¡El jefe del ejército del Rey Demonio sigue haciendo estragos en la aldea, ¿por qué tenemos que hacer algo tan peligroso como ir hacia allí?! ¡No quiero! ¡¡Mi especialidad es apoyar a los demás desde una zona segura!!

—¡Deja de hacer el tonto y acompáñame! ¡No puedo pasar por todo eso yo solo!

¡Tiré de la reticente Aqua para que me acompañara y nos dirigimos hacia el almacén subterráneo de la instalación misteriosa…!