Lord of Mysteries (NW)

Volumen 1

Capitulo 128: El Pobre Loco

Después de almorzar, Klein solo descansó media hora antes de correr al Club de Tiro para practicar con su revólver. No se atrevió a relajarse, ni un poco.

Después de practicar sus habilidades de tiro día tras día y gastar más de mil balas, finalmente disparaba lo suficientemente bien como para ganarse la aprobación básica de Dunn Smith. Era bastante bueno en el tiro al blanco fijo.

Después de practicar un rato, guardó su revólver y tomó el carruaje público hasta una parada cerca de la casa de su maestro de combate, Gawain. Luego, caminó durante diez minutos antes de llegar a la puerta.

Se cambió a su traje de entrenamiento de caballero que había dejado secando al sol. Después de correr, saltar la cuerda, levantar pesas, hacer sentadillas y otros ejercicios, sin mencionar el juego de pies y el entrenamiento de puñetazos, estaba cubierto de sudor y se sentía exhausto.

“Tómate un descanso de quince minutos”. El pelo rubio y blanco de Gawain y sus profundas líneas faciales le daban un aspecto duro y severo. Sacó su reloj de bolsillo y lo abrió para ver la hora.

Desde que comenzaron a entrenar,solía mantener su silencio. Solo hablaba con Klein cuando era necesario cambiar los métodos de entrenamiento o corregir los errores de Klein cada vez que surgía uno.

Klein jadeó por aire, pero no se atrevió a descansar de inmediato. Caminó de un lado a otro lentamente. La retroalimentación más directa de su entrenamiento de combate fue que estaba mucho más bronceado. Su piel se había bronceado bajo el sol.

Gawain guardó su reloj de bolsillo y se paró junto al tosco campo de entrenamiento detrás de su casa. Se cruzó de brazos mientras observaba a Klein enfriarse. Estaba tan callado como una estatua de mármol.

“Maestro, además de pelear con los puños, ¿me enseñaría a usar una espada recta, una espada ancha, un estoque o una lanza?” Klein preguntó proactivamente. Estaba de buen humor, ya que acababa de digerir la poción de vidente.

Había visto antes armas como la espada recta y el estoque en la sala de colección de Gawain. También había armaduras de pecho y armaduras de cuerpo completo. Sabía que Gawain no solo era bueno luchando cuerpo a cuerpo.

Bañado por la luz del sol, Gawain miró a Klein. Bajó la voz y respondió: “Es inútil que aprendas algo de eso. Todas esas armas se han quedado atrás en el tiempo, y su único lugar es en los museos o en las colecciones privadas de los coleccionistas…”

(Mr Insomne: No tendremos a nuestro querido protagonista con Espada +10? :()

Se quedó en silencio durante unos segundos antes de agregar con una voz que había experimentado las vicisitudes de la vida: “Han sido eliminados… Deberías concentrarte en las armas. Incluso el combate es meramente complementario.”

Klein miró a su maestro apático y se rió entre dientes mientras hablaba.

“No me parece.”

“Todos los ministros, todos los miembros del parlamento, todos los generales, todos ellos lo creen así”, dijo Gawain, apretando los dientes.

Klein se detuvo y actuó como un verdadero guerrero del teclado. Él respondió con facilidad y fluidez: “No, simplemente se han retirado de las líneas del frente de un campo de batalla. Todavía tienen sus usos en otros lugares.

“¿Por qué se tiene que descartar el combate y reemplazarlo por armas de fuego? Podrían usarse juntos. Creo que una persona que es más flexible, más rápida en la acción y más rápida en la respuesta podría usar las armas de una manera más efectiva”.

Cuando vio que los ojos de Gawain se agudizaron repentinamente, Klein se mostró satisfecho y continuó: “Las otras armas tampoco se eliminan. Solo necesitan algunas mejoras para ser más portátiles…”

“… Podríamos formar un escuadrón con alta maniobrabilidad. Un grupo diseñado para rodear las líneas del frente y lanzar un ataque desde atrás del enemigo y luchar hasta el fondo. En un ataque sorpresa a tan pequeña escala, un guerrero que tenga excelentes habilidades cuerpo a cuerpo y familiaridad con varios tipos de armas podría desempeñar un papel importante. Puede imaginar una escena así…”

Klein dio rienda suelta a su capacidad de saber un poco de todo. Mezcló y combinó todas las tácticas de combate que tenían las fuerzas especiales en la Tierra y se las describió a su maestro.

No estaba seguro de cuándo la respiración de Gawain se hizo más pesada. Se quedó allí sin moverse ni un centímetro, aparentemente sin querer interrumpir las escenas que imaginaba.

Klein echó un vistazo a la reacción del hombre. Se jactó de sí mismo en su cabeza mientras decía: “Maestro, ¿qué piensa de mi plan? ¿Hay alguna posibilidad de realizarlo?”

El cuerpo de Gawain se estremeció como si acabara de despertar de un sueño. Miró profundamente a Klein a los ojos y dijo: “Tuviste un descanso muy bueno. Repite todo el conjunto de ejercicios diez veces”.

¿Eh? Klein se sentía perdido.

Muy pronto, comenzó a correr y volvió a la realidad. Rugió en su corazón,  ¿Diez sets? ¡Profesor, no!

¡No quiero celebrar mi digestión completa de la poción de vidente de esta manera!

Hey, ¿no te inspiraron mis palabras? …

Mirando a Klein corriendo hacia el otro lado del campo de entrenamiento, Gawain de repente descruzó los brazos y se cubrió la cara con una mano.

Cerró los ojos con fuerza, las arrugas de su rostro eran profundas y evidentes.

…

Después de casi vomitar de agotamiento, Klein se duchó, se cambió de ropa y se despidió de Gawain en silencio. Tomó el carruaje público y se fue.

No regresó a casa directamente, sino que se dirigió al Bar del Dragón Travieso cerca del puerto. Planeaba preguntar sobre el precio de los ingredientes de Beyonder y comprar artículos para hacer amuletos y encantamientos.

En el camino, Klein mantuvo su mente en el pequeño alijo que llevaba consigo. Se obligó a mantenerse alerta y llegó a su destino con gran dificultad.

“Necesito ahorrar cuatro libras para el saldo restante que le debo a la compañía de detectives. Solo puedo usar tres libras y cinco soli esta noche…” Tocó las notas de papel en su bolsillo antes de agarrar su bastón y apearse del carruaje.

En ese momento, el sol ya había comenzado a deslizarse por el horizonte. Todas las casas se tiñeron gradualmente con un brillo crepuscular. Los combates de boxeo y las peleas de ratas con perros ya estaban calentando el Bar.

Después de pasar por la sala de billar y numerosas salas, Klein finalmente entró en el mercado subterráneo.

Miró a izquierda y derecha, pero no vio al Monstruo Ademisaul que siempre estaba activo por allí.

“¿No dijo el viejo Neil que Ademisaul solo logró sobrevivir porque el jefe de El Dragón Travieso lo alimenta?” Klein se preguntó con curiosidad.

Como Nighthawk, permaneció atento a asuntos como ese. Se acercó al hombre musculoso que custodiaba la puerta y preguntó: “¿Dónde está Ademisaul?”

El hombre musculoso respondió sin una sonrisa: “No tengo idea de dónde está durmiendo. Ha estado así últimamente. Se acuesta con escalofríos y canta ‘Muertos, muertos, todos los cadáveres, todos van a morir'”.

¿Qué escenas vio esta vez? ¿Qué lo provocó? Klein arrugó ligeramente las cejas y pidió más detalles. Quería saber dónde dormía Ademisaul, pero el guardia tampoco lo sabía.

Cuando termine, lo buscaré a través de la adivinación para ver por lo que ha pasado…  Después de tomar nota de esto, Klein caminó hacia una de las dos salas al final del mercado comercial.

Según el viejo Neil, la habitación de la izquierda era para préstamos y pagos, mientras que la habitación de la derecha era para la compra y venta de artículos preciosos, incluidos los ingredientes de Beyonder.

Cuando abrió la puerta para entrar a la habitación de la derecha, Klein se dio cuenta de que había un tabique que la separaba en dos espacios, el interior y el exterior. Había otros tres clientes esperando afuera.

Se bajó el sombrero de copa de seda y se puso en cola detrás de los tres clientes. Inclinó su cuerpo hacia adelante y se apoyó en el bastón mientras esperaba en silencio.

Pronto, la puerta del tabique se abrió y salió un cliente con un uniforme de trabajador portuario gris azulado. Mantuvo la cabeza baja y se fue a toda prisa.

Klein chasqueó ligeramente su muela izquierda dos veces y miró al hombre con Spirit Vision. Luego miró a los otros tres clientes. No había nada malo en ellos aparte de las enfermedades menores habituales que tenía la gente.

Después de otros diez minutos, finalmente fue su turno.

Abrió la puerta y entró en la habitación que estaba iluminada con una lámpara de queroseno.

Cerró la puerta y tomó el asiento que pertenecía al cliente. Miró hacia el anciano que llevaba un sombrero de fieltro negro frente a él.

“Me gustaría saber qué ingredientes de Beyonder tienen y a qué precios se venden”.

Los músculos de las mejillas del anciano estaban caídos y las arrugas en la esquina de sus ojos eran profundas, pero su cuerpo estaba bien construido. No encontró extraña la solicitud de Klein porque muchos clientes no estaban dispuestos a dejar que otra persona supiera lo que querían comprar antes de confirmar que el vendedor lo tenía disponible. En general, deseaban que se les presentaran todas las opciones.

El anciano pasó a las páginas más nuevas del cuaderno, echó un vistazo a Klein y tomó un sorbo de su vino de miel antes de decir: “El tejido cerebral de un fantasma de agua cuesta de tres a quince libras dependiendo de qué tan intacto esté. Cristal de estrella, 150 libras por 50 gramos. 200 libras por una Hierba de abeja reina. 170 libras por una rana adulta de puntos negros… 280 libras por una rosa con rostro humano, pero solo nos queda una…”

Klein controló su respuesta emocional. Después de escuchar la presentación del anciano, se sorprendió de que un lugar de comercio subterráneo como este tuviera menos de treinta ingredientes de Beyonder.

Cuando tocó los billetes por valor de siete libras en su bolsillo y pensó en la actitud de la señorita Justicia hacia las mil libras, suspiró.

“Desafortunadamente, no hay nada que quiera”.

Sin esperar a que el anciano hiciera más preguntas, rápidamente se dio la vuelta para abrir la puerta y salió.

Regresó al mercado subterráneo y miró a su alrededor sin comprender. Se quedó allí por un rato y suspiró con una sonrisa amarga.

Probablemente soy el jefe más pobre entre todas las organizaciones secretas…  Eso solo fortaleció su determinación de obtener ingredientes internamente de los Halcones Nocturnos o a través de intercambios con Justicia y El Colgado.

Después de dar dos vueltas al mercado subterráneo, Klein escogió y compró ingredientes para hacer encantamientos, como una pieza de plata parcialmente terminada, polvos de hierbas necesarios para los rituales y minerales naturales. Gastó una libra y quince soles en total.

A mi reserva privada de dinero sólo le quedan cinco libras con diez soles. Excluyendo el pago final al detective, todavía tengo una libra con diez soles…  Después de que Klein hiciera los cálculos en silencio sobre su situación financiera, se sintió impotente.

Eso sí, sabía muy bien que solo llevaba poco más de un mes trabajando. Si el lapso de tiempo se hubiera extendido a un año, debería haber podido ahorrar más de cien libras.

“En otras dos semanas, tendré que decirles a Benson y Melissa que me han subido tres libras. Podemos contratar a una sirvienta, pero ya no tendré una reserva privada de dinero…”, pensó Klein mientras caminaba hacia la salida del mercado subterráneo.

En ese momento, vio al Viejo Neil con su clásica túnica negra entrando lentamente.

“¿Lo conseguiste todo?” El viejo Neil saludó con una risita.

“Sí”, respondió Klein con franqueza.

El viejo Neil chasqueó la lengua de inmediato. “Llegaste muy temprano”.

“Eso es porque todavía tengo hambre, pero tu ya cenaste”. Klein charló casualmente con el viejo Neil.

Después de un rato, el jefe del Dragón Travieso, Swain, entró con su uniforme de oficial de la marina sobre él. Se acercó a los dos solemnemente y bajó la voz.

“Necesito su ayuda.”

“¿Qué pasó?” El viejo Neil de repente se puso serio, y Klein no pudo evitar sentir un tirón en su corazón.

El cabello castaño de Swain estaba desordenado y había un fuerte olor a alcohol en su aliento. Respondió en voz baja: “Un miembro de los Castigadores Imperativos ha perdido el control cerca. Tenemos que acabar con él antes de que dañe a los civiles”